- Un
movimiento juvenil frente a la oligarquía - Los
nuevos Partidos - La
Revolución de Belaunde - Tres
soluciones posibles - La
carretera marginal de la selva - El
vivero de hombres - La
tierra más barata del Perú - Una caja
de ahorros vegetal - Horizonte continental
de un proyecto peruano - El rol
de las fuerzas armadas en la nueva conquista - Fondo
nacional de salud y bienestar social - Obras
hechas en su primer gobierno - Promoción
social, cultural y sanitaria - El
mensaje de Belaunde - Belaunde: modelo a
seguir - Belaunde, mensaje
permanente de peruanidad - Una
presencia reconfortante - Con lo
que llegué a Palacio me fui - Nota
editorial
Las ideas políticas
de Fernando Belaúnde Terry han rondado dispersas en
discursos de
circunstancia múltiple. En este trabajo de
investigación se analiza lo que tuvo su
génesis en la vida inmediata, al borde del camino o en la
plaza de un villorrio; asimismo, en el gabinete de estudio,
expresado en mensajes presidenciales de fiestas patrias y sobre
todo plasmado en sus múltiples obras dejados a lo largo de
2 gobiernos y obras que ellas hablan por si mismas de la
capacidad de estadista del Arquitecto presidente.
Los conceptos son articulados en este trabajo
monográfico a comienzos rectores de su ideario. Los
fragmentos permanecen sueltos. Empero, el ordenamiento
metódico faculta al lector una visión
panorámica del ideario.
Sin embargo, es necesario ser consciente de lo que se
extravía. El político auténtico es
más hombre de
intuiciones
cardinales que de concatenaciones de causas y razones. Citando es
prócer, sus ideas rozan las entrañas, lo mas
profunda de la conciencia de la
nación,
haciéndola vibrar estremecida: El pueblo se pone en marcha
a la voz del adalid. Es lo que importa: el camino correcto. Lo
demás es la secuencia lógica,
el rigor de las fundamentaciones es asunto del profesor
universitario, de los doctores, de los epígonos.
El verbo de Fernando adquiere plenitud de significado en su
circunstancia política . El
discurso lo va
sembrando en su vasta carrera política en villa , ciudad,
caserío aldea tiene en cuenta las preocupaciones
cotidianas del labriego, proyectándose a sus esperanzas y
querencias. Si se esfuma el escenario sobre el que se vierte, el
verbo pierde en fluidez v encanto, su magia prístina. Los
vocablos son los mismos. Mas empalidece su colorido, al
desvanecerse la campiña poblada de rostros humildes,
haciendo un alto a la fatiga, bajo el sol de los
Andes o de la selva, o entre la niebla que recubre los arenales y
la mar.
Una segunda operación, aun más radical, es la
efectuada aquí. Los fragmentos son arrancados de su
contexto, desasidos como siluetas solitarias. Diseños
sobre el espacio abstracto. Lo que era sector de tina fluencia y
detentaba signo concreto,
adquiere inmovilidad pétrea y se alza altivo como
proposición genérica. Así se violenta el
pensamiento
originario. Es necesario destacar esta alteración al
inicio de la travesía.
En tina edad en que las distancias del planeta se abrevian, y
los seres humanos adquieren conciencia de su común destino
¿qué significa el Perú como doctrina? Las
ideas políticas cardinales, lejos de ser patrimonio de
una nación,
transitan por el mundo como normas rectoras:
libertad,
democracia,
derechos
humanos, justicia
social.
En esta circunstancia, el planteamiento de Fernando el
Perú tiene el privilegio de contener en su propio suelo la fuente
de inspiración de una doctrina debe ser divisado en su
magnitud situacional y polémica, como predominio de uno de
los lados de la disyuntiva y , simultáneamente, como
síntesis de componentes antitéticos:
realidad e idea, indigenismo e hispanismo, nacionalismo e
internacionalismo.
Todo quehacer debe ser realista, sujetarse a las posibilidades
inherentes a los hechos. Si un proyecto las
desconoce, fracasa. El puente se viene abajo. El edificio se
derrumba. La máquina se estropea. El plan de gobierno provoca
el caos Sin embargo, de ser las ideas simples copias escuetas de
las cosas, el hombre
viviría aún sumergido en la ciénaga o en los
bosques, al lado de sierpes y simios. La idea de pantano se
reduciría a reflejarlo como un espejo. Las cosas son
así, pero pueden ser de otro modo, cantan las ideas. El
diseño
del inventor rebasa las siluetas conocidas. El alfarero no extrae
del análisis de la arcilla la imagen de sus
figuras innumerables.
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