- Resumen
Características de la clase metodológica.
Conceptualización y complejidad
El problema conceptual metodológico. Algunos tipos de
clases metodológicas que pueden
impartirse
Preparación e impartición de la clase
metodológica
Conclusiones
Bibliografía
Resumen
A partir de la experiencia profesional de
la autora, de la observación atenta de los problemas que
a diario afectan a la institución escolar, del intercambio
sistemático con otros especialistas y de la
revisión de la bibliografía sobre el tema,
el trabajo se
ha propuesto presentar un modelo
teórico-instrumental para la preparación e
impartición de la clase
metodológica, a la luz de las
necesidades actuales del trabajo
metodológico en los niveles medio y superior de la educación cubana.
La novedad radica en que a partir de una concepción
dialéctico materialista del trabajo metodológico,
se elabora un modelo integral para la preparación e
impartición de la clase metodológica, en un nivel
de desarrollo que
supera las aportaciones anteriores y se aviene con las exigencias
actuales de la universalización de la enseñanza en Cuba. Esta
forma de concebir e impartir la clase metodológica ha sido
validada por la autora en diversas actividades de este tipo, lo
que permite contar de antemano con la utilidad
teórico metodológica del modelo
aportado.
Introducción
La experiencia de la autora la observación atenta
de los problemas que a diario afectan a la institución
escolar; el enfrentamiento de ejercicios de cambio de
categoría, exámenes de mínimos de doctorado,
ya sea como aspirante, ya como tribunal; el intercambio
sistemático con otros especialistas de no menos
experiencia; la revisión de la bibliografía sobre
el tema, y la validación en la práctica del trabajo
metodológico, ha permitido constatar reiteradamente al
menos dos cuestiones de primer orden, a saber:
a) La enorme importancia del trabajo
metodológico para alcanzar la idoneidad del claustro y
de los directivos de la educación en todos los niveles
de enseñanza.b) La inseguridad de muchos profesionales y
directivos al tener que enfrentar un ejercicio
metodológico, con todo el rigor que ello implica, ya
sea en un examen o en cualquiera de las formas y niveles de
realización del trabajo metodológico. Esto se
hace más notorio ante la necesidad de impartir una
clase metodológica.[1]
Sobre el primero de los aspectos apuntados, la autora
del presente ensayo
considera que el logro de la idoneidad del claustro y de los
directivos académicos constituye una meta
estratégica en cualquiera de las instituciones
y de los sistemas
educacionales modernos. El contenido del trabajo
metodológico ha de ser el mismo que el de la ciencia
didáctica; por ello, combinado con otras
formas de superación profesional y postgraduada,
constituye una atendible vía para alcanzar la aspirada
idoneidad.
Una concepción dialéctico materialista del
trabajo metodológico no debe dejar de
caracterizarlo de la siguiente manera:
Es una actividad científicamente planificada,
que se concibe a partir de los resultados de los estudiantes,
del control al proceso de enseñanza-aprendizaje, de la
evaluación profesoral, del diagnóstico de las
necesidades de capacitación del personal docente y de
los objetivos estratégicos del centro y/o niveles de
trabajo.Esta actividad presupone la autopreparación
individual de los participantes, la demostración
científica, el debate de las problemáticas
objeto de estudio, el autocontrol y el control de la
actividad.Normalmente se organiza en sistema, abarcando
diferentes niveles de trabajo (Centro, Facultades,
Departamentos, Colectivos de disciplinas y asignaturas,
carreras, etc) y diferentes tipos o formas de
organización (reuniones y clases metodológicas,
clases demostrativas, clases abiertas, preparación de
la asignatura, entre otras).Las diferentes formas de trabajo metodológico
son impartidas por directivos y profesores de mayor
experiencia.
De acuerdo con lo anterior, es posible conceptuar el
trabajo metodológico como el sistema de
acciones de
superación que se diseña y ejecuta a partir del
diagnóstico de las necesidades de capacitación científica
(ideológicas, políticas,
conceptuales) y metodológica (instrumentales,
operacionales) para garantizar las formación
pedagógica de los docentes y
directivos con la finalidad de que éstos perfeccionen su
desempeño cotidiano y eleven la calidad del
proceso de
enseñanza-aprendizaje. Ello
debe contribuir a la consecución de los objetivos
estratégicos del nivel de trabajo o de la
institución docente.
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