Consideraciones generales acerca del espacio-tiempo y de la naturaleza de la realidad

En la física newtoniana se acepta un espacio
tridimensional euclidiano, que es el que intuye nuestra mente y
puede apreciar nuestro sentido de la vista. Así tenemos,
pues, un: alto-ancho-profundidad.

Por otra parte, el tiempo, es una categoría
independiente y se utiliza para medir el movimiento de un
móvil. También aquí, intuimos un fluir desde
el pasado-presente-futuro. Ambas son nociones independientes y
absolutas que el observador corrobora por medio de los sentidos y
experimenta en la práctica cotidiana. Esta física
daba respuesta a todos los interrogantes acerca de las leyes que
gobernaban el Universo, el cual era, ciertamente, pequeño
y casi plano.

Todo este determinismo en la naturaleza empezó a
cuestionarse a finales del siglo X1X; se creía que la
velocidad de la luz era relativa pues dependía de la
medida que hiciera de ella un experimentador, debido a que este
no tenía en cuenta, en los cálculos, la velocidad
con que se desplazaba la tierra alrededor del sol; se ignoraba
que ésta es una gigantesca nave que recorre su
órbita alrededor del sol a la increíble velocidad
de 30 Km. por segundo; así fuera su desplazamiento por la
galaxia apenas una diezmilésima la velocidad de la luz,
éste fenómeno alteraba en buena parte los
cálculos; tan evidentes absurdos en las medidas, los
concilió la Teoría Especial de la Relatividad en
1905, al proponer que lo relativo era el espacio y el tiempo, no
la velocidad de la luz, debido a que esta era una constante en el
Universo, teniendo en cuenta los experimentos de
Michelson-Morley. Propuso además, que al espacio
tridimensional euclidiano le era inseparable la variable tiempo
conformando así un continuo cuatridimensional.

De ahí para adelante, en física
relativista se habla de un continuo espacio-tiempo en los
fenómenos físicos de la naturaleza. En 1916,
Einstein publicó la Teoría General de la
Relatividad donde considera a la aceleración como una
fuerza equivalente a la gravedad y a estas como a la una
geometría del espacio-tiempo generada por la masa, y no
como una simple fuerza de atracción entre los cuerpos,
según lo había enseñado Newton algunos
siglos atrás. El postulado más revolucionario de la
Relatividad General, es la concepción de que el espacio en
el que vivimos es curvo y la gravitación es la
manifestación.

Pero esta no es solamente una bella y refinada
teoría científica, tenemos que, en los
fenómenos naturales, el continuo espacio-tiempo, se
manifiesta como una propiedad de la naturaleza, veamos como
ocurre esto: Los rayos cósmicos, tales como: fotones y
todas las demás entidades constituyentes del espectro
electromagnético, interactúan con las
partículas de la atmósfera terrestre, y como
resultante de ese colisionar permanente surgen muchas
subpartículas que existen apenas algunas
millonésimas de segundo. Entre éstas se destacan
los muones como subpartículas radioactivas con una
duración temporal de apenas 2 millonésimas de
segundo, sin embargo, los científicos, detectan su
presencia en la superficie terrestre por medio de contadores
Geiger. Sabemos que entre la capa atmosférica donde se dan
éstos fenómenos, y la superficie terrestre hay como
mínimo 20 Km. de distancia. Con una velocidad
lumínica de 300.000 Km. por segundo, los muones en su
corta existencia no lograrían impactar nada en la tierra,
y sin embargo lo hacen, pero ¿cómo?

La teoría de la Relatividad de Einstein postula
que cuando una partícula viaja a la velocidad de la luz,
su tiempo se dilata, es decir, es susceptible de
elongación, y su espacio a recorrer se contrae, quedando
así ligado físicamente en un mismo fenómeno
el espacio y el tiempo. Es decir, el tiempo sentido y el espacio
recorrido por un móvil a la velocidad de la luz es
relativo, y no absoluto e independiente como lo postula Newton.
Entonces, para el muon su tiempo no sería ya de 2
millonésimas de segundo, sino que se dilatará, es
decir, sería más longevo, y el espacio de 20 Km.
que lo separa de la capa atmosférica al contador Geiger
situado en el superficie terrestre, se acortará
considerablemente.

Esta evidencia científica contradice el sentido
común, y nos derrumba las nociones intuitivas y
experimentales que tenemos del espacio y del tiempo en el que
hacer cotidiano, donde opera sin problemas, la mecánica de
Newton. Pero por estar confinados nuestra estructura
física, y los demás objetos materiales con los que
interactuamos, en un sistema de referencia donde la velocidad de
la luz es muy baja, nuestra mente desconoce el continuo
espacio-tiempo y la relatividad del mismo.

Por eso también, nos parece muy extraño el
mundo en donde rigen las leyes de la Mecánica
Cuántica porque allí, dos subpartículas
pueden estar en dos lugares a la vez, o también,
correlacionarse instáneamente a pesar de estar separadas
por millones de kilómetros. Fenómenos denominados
de no localidad.