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documentales
Introducción
El tema de los judíos es un tema apasionante,
sobre todo en lo que se refiere a la supervivencia de una
religión que ha tenido que enfrentarse a lo largo de unos
cuantos milenios a muchos procesos de asimilación, de
exilio y de destrucción.
Los judíos en España salvo el periodo de
dominación musulmana, donde vivieron en una relativa
tranquilidad, han tenido que defenderse de persecuciones sin
fin.
A partir del siglo XV el vocabulario para hablar de los
judíos españoles se complica. Hay que distinguir
entre los que seguían profesando el judaísmo
– los judíos- y los conversos, así como sus
descendientes, a los que se llamaba cristianos nuevos.
En este segundo grupo, en España, hay que diferenciar a
los conversos, que aceptaron la nueva situación y
decidieron vivir como cristianos – los conversos
propiamente dichos- y a los que decidieron mantener la
religión de sus ancestros, a pesar de haber sido
bautizados y ser nominalmente cristianos. Estos españoles
llevaban una doble vida, ya que fingían ser cristianos en
público aunque mantenían los ritos de su antigua
religión en privado. A éstos se les llamó
judaizantes o marranos.
Los conversos eran aquellos judíos que, a
raíz de los sucesos de 1391 (el asalto a la judería
de Sevilla, en el que se ofreció a los judíos una
elección entre la conversión o la muerte),
habían aceptado el bautismo cristiano. En un
fenómeno lento pero imparable, fue surgiendo una gran
animadversión hacia estos cristianos nuevos o
marranos por parte de los cristianos viejos, que
podían demostrar "limpieza de sangre" en todo su
árbol genealógico. Se acusaba a los conversos de
judaizantes, es decir, que seguían practicando su antigua
religión a escondidas.
La violencia contra los cristianos nuevos estalló
en 1449 en Toledo. El hecho de que el recaudador de un impuesto
muy poco popular fuera un converso enfureció a las masas,
que además, veían con malos ojos que los conversos
pudieran ocupar cargos públicos en la ciudad.
La influencia de los judíos era casi nula, sobre
todo en la vida política y económica. Las
posiciones abandonadas por los judíos fueron ocupadas por
los conversos. Esta promoción social de los conversos no
pasó inadvertida y provocó reacciones en el pueblo.
A diferencia de las minorías dirigentes – la realeza
y la aristocracia-, que propiciaban la asimilación de los
conversos, las masas permanecieron hostiles, y el viejo
antisemitismo metió en el mismo saco a los judíos,
a los cristianos nuevos y a los judaizantes, con las consabidas
acusaciones de explotar al pueblo, practicar la usura y acaparar
riquezas.
A partir de la bibliografía consultada he podido
acotar los archivos donde se pueden encontrar informaciones sobre
judíos y judeoconversos. He partido de la página de
Pares y he seguido con otras páginas web con los
condicionantes que supone el hecho de que muchos archivos
privados (nobiliarios, eclesiásticos) no están
todavía digitalizados. Básicamente he buscado por
"judíos", "sinagoga", "conversos", "hebreos" y
"aljama".
Archivos
2.1 ARCHIVOS GENERALES
2.1.1 Archivo Histórico
Nacional
– AHN
1. Inquisición Se encuentra sobre todo
documentación procesal: posibilidad de estudio de las
prácticas judaicas más habituales en falsos
conversos, prácticas y devociones cristianas de los
conversos sinceros, vida cotidiana de los reos y
vínculos establecidos con otros conversos,
judíos y cristianos viejos.
9 registros sobre procesos y pleitos de limpieza de
sangre.
Fechas límite entre 1579 y 1760
2. Monasterio de Ntra. Sra. de Rueda de
Escatrón (Zaragoza)
6 registros sobre bulas que confirman privilegios y
permiten la recepción de conversos
Fechas límite entre 1172 y 1234.
3. Colección códices y
cartularios
1 registro. Libro de Ester. S.XIV-XV
1 registro de "Fragmentos hebreos y uno
árabe" (23 fragmentos). 1487.
4. Convento de Nuestra Señora de
Jerusalén de Zaragoza. Franciscanas Menores
Observantes.
1 registro sobre un Albarán de luición
de treudos. Año 1492.
5. Monasterio de S. Victorián
(Huesca)
1 registro sobre una ápoca para el pago de
deudas. Año 1282.
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