Monografias.com > Sin categoría
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

Parciales con / sin respuestas de Semiología (página 2)




Enviado por REGINA QUINTEROS



Partes: 1, 2

Primer parcial 2009
(SEGUNDO EJEMPLO)

1) Exponga las propiedades, de
arbitrariedad y linealidad del signo lingüístico
según Saussure. Relaciónelas con los dos tipos de
relaciones que contraen los signos Tenga en cuenta la
noción de valor lingüístico.2) Desarrolle la
oposición de Benveniste entre nociones léxicas y
signos lingüísticos.3) ¿Cuáles son los
tres componentes constitutivos del enunciado según Bajtin?
Caracterice cada uno de los términos involucrados en su
respuesta ¿cómo pueden relacionarse estos
componentes con la noción de genero
discursivo? Respuestas sugeridas:1) La arbitrariedad es la
propiedad que define al signo como entidad consensual, existe un
consenso que trasciende la voluntad de los hablantes y que le da
su forma. Esta relacionada directamente con la teoría del
valor ya que expresa justamente que el valor del signo se
encuentra en su forma y no en su sustancialidad y por que la
arbitrariedad del signo esta relacionada con la contingencia en
la que se basa la teoría del valor ya que un signo es de
tal manera y no debe confundirse con otro. De esta forma
relaciono la arbitrariedad con la relación asociativa ya
que esta habla de una asociación virtualmente mental entre
el signo y otros significantes o significados o bien diferencias
o similitudes y esto se puede lograr gracias a la existencia de
arbitrariedad en un signo y la posibilidad de reconocerlo por no
ser otro. La linealidad es la propiedad que esta relacionada
directamente con el significante ya que por otro lado
arbitrariedad estaba relacionado con el significado del signo.
Expresa que cada significante se agrupa en un encadenamiento que
no puede ser simultaneo sino uno por uno relacionándose
así directamente con la relación
sintagmática, que esta refiere al encadenamiento en el
cual se relacionan los significantes anteriores y posteriores en
la cadena.2) Benveniste contrapone las nociones léxicas
con los signos deícticos por múltiples razones.
Primero los diferencia diciendo que la noción
léxica en conceptual y el signo deíctico esta
vacío de concepto. Luego, explica como la noción
léxica permite a una palabra o concepto tener
características de universalidad, y el signo
deíctico individualiza de forma más íntima
con el hablante. Por último Benveniste observa que la
noción léxica está relacionada con su
contenido porque "la silla" por ejemplo es un concepto cerrado,
en cambio el signo deíctico se relaciona en cuanto a la
forma porque por ejemplo "allá" puede interpretarse de
diferentes maneras, se oponen en siguiente lugar la
característica del signo deíctico que según
Benveniste nació de una vez y que remite a lo
efímero que resulta el significado de este signo y a su
relación directa con el enunciado porque esta
absolutamente afectado por su contexto.. En el caso de la
noción léxica se opone a estas
características porque su misma definición de
concepto hace que no las comparta. Por ultimo aborda la
comparación y oposición definiendo a uno como
lingüístico y al otro como
metalingüístico ya que refiere al signo
lingüístico como un signo que refiere siempre a la
protección del signo3) Bajtín dice que los tres
componentes constitutivos del enunciado son: 1) están a la
espera de una respuesta 2) intencionalidad 3) expresividad1)La
espera de una respuesta tiene que ver con la alternancia de los
hablantes, con la igualdad entre el destinatario y el enunciante,
con su relación en la totalidad. esta
característica es principal en el enunciado2)la
intencionalidad esta relacionada con la conclusividad del
enunciado , con el agotamiento de un tema. Se sucede lo que se
llama dixis conclusivo cuando se produce una pausa en la
comunicación que permite luego continuar a
destinatario3)en cuanto a la expresividad, esta se relaciona con
los sentimientos y los juicios de valor. Estos se van a
desarrollar en la totalidad del enunciado ya que solo así
pueden verse en una oración o palabra no puede encontrarse
la expresividadPodemos relacionar el enunciado con el genero
discursivo desde el punto en que el genero discursivo se compone
de enunciados y se diferencia sustancialmente como remarca
Bajtín de una palabra u oración que son el material
del que a su vez se compone el enunciado.Las
características del enunciado a su vez se encuentran
inversas en las del genero discursivo , el estilo se compone de
expresividad y la composición tiene un poco de los tres
(componentes del enunciado) . a su vez un genero discursivo
concluye, siempre se llega ala conclusividad de la que habla la
intencionalidad

Primer parcial 2009
(primer EJEMPLO sin respuestas)

1) a . explique según Saussure la
noción de símbolo lingüístico invocando
los principios pertinentes. Ejemplifique (los ejemplos no
debían ser del cuadernillo ni de clase).b. Explique cual
es la relación entre la actitud de Saussure ante la
concepción de la lengua como nomenclatura. y la siguiente
afirmación "en la lengua solo hay diferencias ,sin
términos positivos " 2)A partir de un ejemplo propio
explique el modelo de Hymes por sus diferencias con el de Chomsky
3) Explique la siguiente frase de Benveniste :hay pues que
admitir que la lengua comprende dos dominios distintos, cada uno
de los cuales requiere su propio aparato conceptual.

Primer parcial 2009
(segundo EJEMPLO sin respuestas)

1- Saussure: noción de valor2-
Hymes: Unidad lingüística-comunicativa del unidad del
análisis3- Bourdieu: mercado lingüístico,
definición, caracterización y mecanismos de
fuerza4- Significado: teoría referencialista5- Barthes:
Significante y Significado según Hjelmslev.

Primer parcial 2009 (tercer EJEMPLO sin
respuestas)

1) Explique qué es el valor
lingüístico según F. Saussure.2) Explique
cuál es el objetivo de estudio y la unidad de
análisis de la etnografía del habla. De cuenta de
los componentes que la forman.3) Explique la noción de
competencia lingüística según Noam
Chomsky.

Primer parcial 2009 (cuarto EJEMPLO sin
respuestas)

1) Compare las nociones de lenguaje que
proponen Saussure y Noam Chomsky.2) Defina comunidad de habla
según los etnógrafos del habla.3) Defina mercado
lingüístico según Pierre Bourdieu.

Resumen de temas para
el primer parcial

SAUSSURE Saussure fue quien le dio a
la lingüística la forma de las ciencias positivistas
de la época, que requerían un objeto de estudio y
un método. Los estudios previos relacionados con el
lenguaje fueron: 1)la gramática de la antigüedad
griega que se ocupaba sólo de las formas correctas y las
incorrectas 2)la filología grecorromana que se ocupaba de
la crítica literaria y observaba sólo la lengua
escrita y no la viviente 3)la gramática comparada, escuela
a la que Saussure pertenecía y que se ocupaba de comparar
las lenguas entre sí para determinar similitudes y
parentescos.

Objeto de estudio: El lenguaje es
heterogéneo, comprende procesos físicos,
fisiológicos y mentales, por lo cual no puede
sistematizarse. Saussure divide el lenguaje en lengua y
habla.

La lengua es social (en cuanto a que
está en todas las mentes de los habitantes de una
sociedad), es homogénea, puramente mental, sistematizable,
se la recibe pasivamente; el habla es individual,
heterogénea y no sistematizable, dado que cada acto de
habla es único e irrepetible. La lengua está
compuesta sólo por elementos psíquicos: los signos,
y su modo de existencia es la tradición.

El signo lingüístico:
Los signos tienen un carácter mental, social y bifacial
(con dos términos). El signo no une una palabra y una cosa
sino una imagen acústica y un concepto. El concepto o
significado es una porción de pensamiento. Para todo
sujeto hablante cada signo de la lengua significa una cosa
distinta del resto. La imagen acústica o significante no
es el sonido mismo sino una forma general de él. Los
signos son las totalidades formadas por un significado, un
significante y la relación de significación entre
ellos.

Características del signo:
-Arbitrariedad: "el lazo que une significado y significante es
arbitrario", no hay ningún vínculo natural y
están unidos por mera convención (se demuestra por
la diferencia de significantes entre idiomas para un mismo
significado). La arbitrariedad no es la elección libre del
hablando, los signos siempre son impuestos. -Linealidad: al ser
el significante de naturaleza auditiva, sólo se
desenvuelve en el tiempo. Los sonidos que lo componen se suceden
uno después del otro. -Inmutabilidad: el signo
lingüístico se resiste a todo intento de cambio. La
lengua de una comunidad es estable y no puede ni necesita ser
modificada. Razones: -El carácter arbitrario del signo: no
hay motivos razonables para cambiar la relación entre
significado y significante –La multitud de signos de la
lengua: cambiar un elemento implicaría cambiar muchos a la
vez –La complejidad del sistema: los signos guardan
relaciones complejas entre sí. La modificación de
un signo repercute en el resto del sistema –La resistencia
que la inercia colectiva ofrece hacia todo cambio
lingüístico: la masa se resiste a cambiar lo que
forme parte de su cotidianeidad -Mutabilidad: el tiempo todo lo
transforma y la lengua, indudablemente cambia a lo largo de la
historia. Los signos incorporados nunca sustituyen a un signo
existente sino que siempre son desplazamientos en las relaciones
entre significados y significantes. Los cambios de la lengua
sólo pueden percibirse luego de producidos. Todo cambio es
azaroso y específico de cada lengua.

Teoría del valor: Nada
permite diferenciar dónde comienza o dónde termina
una unidad en una cadena de sonidos sin reconocer significados ni
una unidad de pensamiento sin asociarla a un significante. La
lengua establece las relaciones entre significados y
significantes mediante una serie de cortes en ambos planos: los
signos. Los signos son valores y su forma de existencia se basa
en las relaciones que establecen con los otros componentes del
sistema. Su modo de existencia es meramente diferencial. La
lengua se diferencia de otros sistemas de signos en que es un
sistema de valores puros, donde lo único que cuenta son
las diferencias y similitudes entre unidades. Es la misma lengua
la única capaz de determinar los significantes y
significados que constituyen a los signos. Los significados y los
significantes sólo se definen negativamente, por
diferencia y oposición. Si se pierde o agrega un elemento,
todos los integrantes del conjunto resultan alterados. La
única relación positiva y comprobable es la de
significación.

Sincronía y diacronía:
Lingüística sincrónica o estática:
describe el sistema de la lengua en un momento determinado: las
relaciones entre sí, etc, sin considerar su historia.
Lingüística diacrónica o evolutiva: establece
las leyes de los cambios a través del tiempo. Estudia los
acontecimientos capaces de transformar las lenguas. Los estudios
sincrónicos tienen prioridad sobre los
diacrónicos.

Relaciones:

Sintagmáticas: los signos se
encadenan uno detrás del otro dado el carácter
lineal del significante. Son las relaciones entre un signo y los
otros que lo preceden o lo siguen. Sintagma es la
combinación de dos o más signos en un acto de
habla. Se establecen en presencia, están determinadas por
la linealidad del significante y siempre se establecen entre un
número limitado de elementos.

Asociativas o Paradigmáticas:
Se establecen en la mente. Vinculan un signo con otros en
términos de similitudes o diferencias. Se establecen en
ausencia, virtualmente en la mente, son indeterminadas (un signo
puede relacionarse tanto por similitud como por diferencia, por
el significado o el significante) y son innumerables.

CHOMSKY Chomsky se desarrolla en el
estructuralismo norteamericano, influenciado por el conductismo y
lo critica así como también critica su
carácter meramente descriptivo de la lengua. El uso normal
del lenguaje contradice al conductismo ya que todo sujeto puede
producir e interpretar oraciones que nunca antes había
escuchado. Ante cualquier situación cualquier sujeto
hablante puede generar una respuesta verbal novedosa. Esta
característica es el uso creativo del lenguaje. Los
sujetos hablantes tienen intuiciones sobre la estructura de las
oraciones y Chomsky busca una explicación para
esto.

Objeto de estudio Chomsky parte del
falsacionismo popperiano que implica formular una
hipótesis respecto a un problema e intentar falsarla. El
objeto de estudio de la lingüística ya no es externo
al individuo sino la capacidad potencial que tiene todo sujeto
hablante de una lengua de interpretar y producir el conjunto
potencialmente infinito de oraciones pertenecientes a esa lengua.
Se distingue entre la capacidad potencial (competencia
lingüística) y los actos concretos de su
desempeño (actuación) y descarta la última
para centrarse en los actos mentales. Chomsky idealiza los
sujetos, la competencia se define en términos de las
capacidades de un hablante-oyente ideal en una comunidad
lingüística homogénea y esto le permite dejar
de lado la actuación y definir a la lengua como el
conjunto potencialmente infinito de oraciones que un
hablante-oyente ideal estaría en condiciones de producir o
interpretar. Chomsky dice que el lenguaje es un conjunto de
expresiones generadas por un sistema que define los elementos y
las reglas de combinación. Una expresión forma
parte de un lenguaje determinado sólo si puede ser
producido e interpretado por ese sistema.

La unidad de análisis ya no
es el signo sino la oración, que fundamentalmente
combina elementos. Chomsky plantea la autonomía de la
sintaxis diciendo que es independiente del contenido
semántico. La gramática es el componente central de
la facultad del lenguaje porque es el que determina la
pertenencia o no de las oraciones al conjunto de la lengua. La
noción de signo saussuriano no se plantea, ese signo
aparece distribuido en componentes distintos de la competencia
lingüística.

Las lenguas naturales tienen propiedades
recursivas: una oración puede ser incluida como elemento
de otra oración y ese proceso se puede repetir
indefinidamente.
Si los sujetos pueden generar infinitas
oraciones nuevas es porque en sus mentes hay un sistema capaz de
generar todos los miembros de ese conjunto, y no porque tengan
acumulados, registrados uno por uno a todos los miembros. Por eso
la corriente se llama Gramática Generativa. La
hipótesis de Chomsky es que en la mente de los hablantes
se encuentra un mecanismo generativo y que si bien aún
conocemos muy poco sobre cómo funciona el cerebro, la
gramática que el lingüista construye sería un
modelo posible para explicar cómo funciona la mente
humana.

Adquisición del lenguaje
Todos los seres humanos nacen con la capacidad potencial de
adquirir una lengua. Todo niño puede adquirir una lengua
con rapidez, facilidad y calidad sin enseñanza
metódica y con estímulos pobres y confusos y sin
embargo la adquisición (particularmente de la
gramática) es relativamente uniforme para todos los
niños expuestos a la misma lengua. Resulta
verosímil plantear que todos los seres humanos vienen al
mundo biológicamente preparados para adquirir el lenguaje.
De ser cierto, esto implica que el cerebro humano posee un
mecanismo específico, determinado genéticamente
para adquirir la lengua de su entorno. Ese mecanismo mental
innato debe poder analizar los datos lingüísticos
provenientes del entorno y establecer la gramática que se
utiliza. Esto implica que todas las lenguas humanas deben tener
propiedades comunes que las hacen accesibles a este dispositivo
innato, la enorme diversidad de lenguas existentes debe responder
a principios generales, universales que permitan que el cerebro
de un bebé las identifique como lenguas humanas.
Ésta es la hipótesis de Chomsky sobre la
Gramática Universal, principios gramaticales universales a
los que toda lengua se ajusta y forma parte del bagaje
biológico humano.

HYMES La etnografía del habla
es una aproximación interdisciplinaria al estudio del
lenguaje en su contexto sociocultural. Este enfoque resignifica
la actuación de Chomsky y le da un dominio privilegiado.
Se ocupa de la competencia y la actuación, la
gramática más los usos y pautas comunicativas de
una comunidad determinada, otorgándole primordial
importancia a los significados sociales de los hechos de habla y
haciendo prevalecer el habla sobre el código, el contexto
sobre el mensaje.

El objeto de estudio es el habla
entendida como los usos de la lengua en el desarrollo de la
vida social
. Estos usos forman un sistema, por lo cual pueden
ser estudiables. La unidad mínima es el acto de habla y
sus componentes son: -Escenario: Tiempo y lugar -Participantes:
Hablante y oyente. Roles y relaciones entre sí. -Fines:
Metas y resultados, propósitos y necesidades. -Contenido y
forma: Adecuación de la forma (cómo se dice) al
contenido (qué se dice). -Clave o tono: Manera en que se
ejecuta: formal, informal, familiar, etc. -Formas de habla:
Lenguas, dialectos, códigos, variedades, registros. Los
actos de habla se articulan en eventos (conversación,
narración, conferencia) de habla que corresponden a una
determinada situación de habla o comunicativa. Las
situaciones de habla no existen aisladamente, están
insertas en una determinada comunidad de habla, que constituye la
unidad social de análisis. Sólo es posible acceder
al conocimiento de las lenguas de un determinado grupo a
través del análisis del habla en la
interacción social. La comunidad de habla no
necesariamente coincide con la comunidad lingüística.
Para que haya comunidad de habla es necesario que haya una lengua
común y además que las reglas que gobiernen las
estrategias comunicativas básicas sean compartidas.
Comparten el conocimiento de las opciones y las restricciones
comunicativas de una serie de situaciones sociales, es decir,
poseen una competencia lingüística y una competencia
comunicativa. La competencia comunicativa es el conocimiento de
las convenciones lingüísticas y las convenciones
comunicativas vinculadas a éstas, compartidas por aquellos
individuos que integran la misma comunidad de habla y que les
permite utilizar la lengua de una manera social y culturalmente
adecuada.

BOURDIEU La lengua no puede
concebirse al margen de sus condiciones sociales de
producción, reproducción y utilización. El
poner a la lengua entre paréntesis de lo social implica
borrar el lugar que tienen los intercambios
lingüísticos, que no son únicamente relaciones
de comunicación en las que entra en juego el conocimiento
y el reconocimiento sino también las interacciones
simbólicas que dan cuenta de las relaciones de poder
simbólico donde se actualizan las relaciones de fuerza
entre los locutores y sus respectivos grupos. El lenguaje es una
praxis que se desenvuelve en un mercado dentro del cual se
construyen los valores que se asignan a los discursos. Todo acto
de palabra es una coyuntura, un encuentro de series causales. Por
un lado las disposiciones, socialmente modeladas, del habitus
lingüístico, que implican cierta propensión a
hablar y a decir determinadas cosas (interés expresivo)
sumadas a la capacidad de hablar (la posibilidad
lingüística de infinita creación de discursos
gramaticalmente semejantes) y a la capacidad social. Por otro,
las estructuras del mercado lingüístico que se
imponen como un sistema de sanciones y censuras
específicas. Lo que circula en el mercado
lingüístico no es la lengua sino discursos
estilísticamente caracterizados, que se colocan a la vez
del lado de la producción y del lado de la
recepción.

El capital simbólico El
reconocimiento de la legitimidad de la lengua oficial no tienen
nada que ver con un acto de aceptación ligado a la
voluntad, es independiente de todo cálculo y de la
imposición reconocida como tal, surge de algún tipo
de beneficio material y/o simbólico que las leyes
formadoras de precios en un mercado en particular otorgan a los
que poseen cierto capital lingüístico. Una
competencia suficiente para producir enunciados susceptibles de
ser entendidos puede ser insuficiente para producir enunciados
susceptibles de ser escuchados y atendidos. La aceptabilidad no
se reduce a la gramaticalidad. La lengua ya no se piensa como un
instrumento de comunicación sino de poder.

El capital lingüístico o
simbólico es esta capacidad de dominar la lengua y las
relaciones de comunicación
. Esta competencia implica
el poder de imponer la recepción. Los discursos se
destinan a la valoración y son signos de autoridad que
buscan ser creídos y obedecidos.

El valor de un discurso depende de la
relación de fuerzas que se establece entre las
competencias de los locutores
. De acuerdo con las lenguas que
se hablan, con los locutores que las utilizan, los grupos
definidos por cierta posesión de la competencia, en cada
interacción está presente la estructura social. Hay
tantas aceptaciones como mercados, dadas las variaciones de
precio de un mismo discurso en mercados diferentes. La palabra
acreditada, digna de ser creída, la que implica la
competencia legítima es eficaz en cuanto a sus efectos
performativos. A esto habrá que sumarle la
disposición de los destinatarios que también deben
ser los legítimos. La relación de fuerza
simbólica constitutiva del mercado puede ser objeto de
negociación y el mercado puede ser manipulado cuanto
más grande sea el capital lingüístico que se
tiene. La palabra se produce por y para el mercado, al que debe
su existencia y sus propiedades específicas. El mercado
ejerce coerción a través de una censura anticipada,
la autocensura, que determina la manera de hablar, la lengua
elegida, el nivel del lenguaje y lo que puede o no
decirse.

La competencia se adquiere con la
práctica
, e implica de modo inseparable el dominio
práctico del uso de la lengua y el de aquellas situaciones
en las que el uso de la lengua es socialmente aceptable. La
palabra de los diccionarios no tiene ninguna existencia social.
Capital lingüístico o simbólico es entonces
dominar la lengua y las relaciones de comunicación, y su
posesión, que supone la aceptación del discurso,
legitima al enunciador. Es derecho a la palabra, es poder en las
relaciones de fuerza simbólica y permite ser respetado,
obedecido, creído: permite imponer la
recepción.

Denotación y
connotación
La connotación es el significado
adicional, sentido secundario proveniente de asociaciones
emocionales y valoraciones que acompañan superpuestas el
significado básico. Es decir, es un sentido segundo cuyo
significado está constituido por un signo o sistema de
significación primero, que es la denotación. El
significado denotativo es el inmediatamente referencial, el de
las palabras de los diccionarios.

BARTHES Barthes considera que el
signo semiológico tiene también dos caras
(significante y significado) como el saussureano pero se
distingue de él en el plano de la sustancia de la
expresión. Explica la connotación diciendo que todo
mensaje comprende, al menos, un plano de la expresión
(significantes) y otro del contenido (significados), los cuales
juntos constituyen un signo o conjunto de signos. Cada uno de
estos planos, según Hjelmslev, tiene dos partes: la forma
y la sustancia. La forma es lo que puede ser descrito exhaustiva
y simplemente y con coherencia por la lingüística. La
sustancia es el conjunto de los aspectos de los fenómenos
menos lingüísticos que sólo pueden ser
descritos a partir de premisas extralingüísticas.
-Sustancia de la expresión: sustancia fónica de la
que se ocupa la fonética -Forma de la expresión:
constituida por las reglas paradigmáticas y
sintácticas -Sustancia del contenido: los aspectos
emocionales, ideológicos o conceptuales del significado
-Forma del contenido: la organización formal de los
significados entre sí por ausencia o presencia de una
marca semántica. Muchos signos semiológicos tienen
una sustancia de la expresión cuya naturaleza no
está destinada a significar; son frecuentemente objetos de
uso conducidos por la sociedad hacia finalidades de
significación. Estos signos semiológicos de origen
utilitario son funciones-signos; es la función de los
objetos la que se carga de sentido. "Desde el momento en que hay
sociedad, todo uso es convertido en signo de ese uso". Una vez
constituido el signo, la sociedad recurre a una
funcionalización, se habla de él como de un objeto
de uso. Esta funcionalización tiene la necesidad de un
segundo lenguaje para existir, no es de ninguna manera la misma
que la primera funcionalización (puramente ideal): la
función que es representada corresponde a una segunda
institución semántica, que es del orden de la
connotación. En este sentido los signos no son puramente
arbitrarios sino que están cargados de connotaciones.
Barthes dice que todo sintagma de significación incluye un
plano E y uno C y la significación coincide con la
relación R de los dos planos: ERC. Tal sistema ERC se
convierte a su vez en elemento simple de un segundo sistema. A
partir de esto se consideran dos sistemas de
significación. 1º caso: el primer sistema ERC se
convierte en el plano de expresión o significante del
segundo sistema o en (ERC) RC. El primer sistema constituye
entonces el plano de la denotación y el segundo (extensivo
al primero) el de la connotación. Un sistema connotado es
un sistema cuyo plano de la expresión está
constituido por un sistema de significación. (ej,
literatura) 2º caso: es el de los metalenguajes, donde el
primer sistema (ERC) se convierte en el plano del contenido del
segundo sistema ER (ERC). Sistemas cuyo plano del contenido
está constituido por un sistema de significación.
Para Barthes la connotación abarca significados y
significantes y la relación de significación entre
ellos. Llama a los significantes de connotación
connotadores e indica que están constituidos por signos
del sistema denotado. Las unidades del sistema connotado no
tienen necesariamente las mismas dimensiones que el sistema
denotado: extensos fragmentos de un discurso denotado pueden
constituir una sola unidad del sistema connotado (ej., tono de un
texto) El significado de la connotación tiene un
carácter a la vez general, global y difuso: es un
fragmento de ideología. Barthes dice que mediante ellos el
mundo penetra en el sistema. Barthes define a la
semiología como un metalenguaje "puesto que se hace cargo,
a título de segundo sistema, de un lenguaje primero que es
el sistema estudiado". La connotación de un mensaje
depende de (es reducida por) la situación y el
contexto.

KERBRAT-ORECCHIONI

Denomina denotativo al sentido que
interviene en el mecanismo referencial, es decir, al conjunto
de las informaciones que transmite una unidad
lingüística
y que le permiten entrar en
relación con un objeto extra-lingüístico.
Considera todas las informaciones subsidiarias como connotativas,
aunque un mismo elemento pueda expresarse denotativa y
connotativamente. Las unidades lingüísticas se dejan
descomponer en unidades mínimas que son los componentes o
rasgos semánticos.

a)rasgos denotativos: se definen por
su pertenencia desde el punto de vista de la denominación
e identificación del referente. Dos unidades que tienen el
mismo contenido denotativo tienen necesariamente la misma
extensión y a la inversa.

b)rasgos connotativos: poseen un
estatuto peculiar y participan plenamente en la
significación del término. Su uso depende de la
situación de comunicación, de la naturaleza
particular del locutor y es interdependiente de las propiedades
objetivas del referente. En la denotación, el sentido es
formulado explícitamente, de manera irrefutable; su
decodificación es general. En la connotación, el
sentido es sugerido y su decodificación es más
aleatoria. La relación entre los planos denotativo y
connotativo es de selección: el segundo presupone el
primero. No puede concebirse ningún lenguaje connotativo
que no se prenda de la materialidad del lenguaje de
denotación para desviar a éste y semantizarlo en
lugares inesperados. Los significantes de la connotación
pueden coincidir o no con los de denotación, tener una
existencia autónoma o incluso ser más
diversificados.

Significantes de la
connotación
Son los soportes de los hechos de
connotación. a)Material fónico o gráfico:
los fonoestilemas son realizaciones particulares de determinados
fonemas que indican datos del locutor. (Ej., LL/Y) Comprende
diversos recursos: -El armonismo: La asonancia (recurrencia del
mismo elemento vocálico) y la aliteración connotan
"lenguaje con función estética, lúdica o
hedonista" -La rima y la paranomasia: refuerzan el vínculo
semántico que une las unidades léxicas. -El
anagrama y el retruécano -El paragrama b)Los hechos
prosódicos: entonación, acento, pausas, ritmo y
elocución. c)La construcción sintáctica: La
connotación interviene en tanto significante de
connotación en el caso de la inversión del
adjetivo, que antepuesto al sustantivo aparece como un connotador
del discurso poético (ej. verdes ojos) d)El significante
léxico: palabras que acumulan información
denotativa y connotativa. Ej. "guita" connota lengua familiar y
no tiene nada que ver con el significado "dinero". También
morfemas como –ito, -ita. e)Lo denotado
extralingüístico: Un objeto puede convertirse en
significante de otros objetos en virtud de su función
económica o su valor social extralingüístico.
Ej. "auto" connota riqueza, etc. f)Los connotadores complejos: El
soporte puede ser tanto una unidad lingüística de una
dimensión superior a la palabra (sintagma, porción
de frase, enunciado) como inferior. g)La ausencia de significante
de denotación como significante de connotación: por
tabúes o autocensura se eliminan ciertos términos
del stock léxico de la lengua. Ej. dequeísmo,
queísmo.

Significados de connotación
1)Connotaciones estilísticas: informan acerca de la
pertenencia del mensaje a una determinada lengua o sub-lengua.
2)Connotaciones enunciativas: informan no sólo sobre el
referente sino sobre el enunciador también. Tipos:
-Connotaciones socio-geográficas: índices de la
pertenencia dialectal o sociolectal del locutor. -Connotaciones
emocionales o afectivas: Pueden ser de naturaleza entonativa,
léxica (exclamaciones, adjetivos afectivos, etc) o
sintáctica (anteposición del adjetivo, etc)
-Connotaciones axiológicas: Reflejan un juicio de
apreciación o desvalorización acerca de un objeto
denotado por parte del sujeto de la enunciación. (ej.
ironía) -Connotaciones ideológicas: constituyen un
subconjunto dentro de los fenómenos de connotación
pero también es perfectamente posible que una
ideología se exprese por medio del lenguaje denotativo.
3)Connotaciones Asociativas: Conjunto de los valores
semánticos adicionales que nacen a favor de mecanismos
asociativos diversos en presencia o en ausencia. Tipos de
asociación: -La que se genera en una analogía con
el significante: homonimia, polisemia, paronimia. -La basada en
una afinidad entre el significante y el significado: un
término evoca el otro por pertenecer a una misma familia
morfológica (madre / padre, fruta / fruto) -La basada en
una afinidad semántica por similitud u oposición
(sinonimia, analogía, etc) -La basada en afinidades
combinatorias: se da cuando existe la probabilidad de que se
asocien términos por su uso frecuente (sordo, tapia "sordo
como una tapia") -La basada en el empleo de la unidad
lingüística en determinados contextos culturales: Ej.
"chica Almodóvar", "quijotesco", etc. Son connotaciones
basadas en otro intertexto u otro sistema semiótico.
4)Simplificaciones implícitas como valores connotados: el
significante de la connotación puede ser tanto un hecho
sintáctico como una unidad léxica. Su
identificación dependerá de la
decodificación de lo implícito, basada en la
competencia lingüística o en informaciones previas
sobre el referente del enunciado o el enunciador.

Pretexto El esquema de
comunicación de Jakobson se constituía de 6
elementos presentes en todo acto de comunicación: emisor,
receptor, mensaje, código, canal y contexto. La
jerarquización de alguno de los componentes del sistema
determina la función del lenguaje que predomina.
Referente: función referencial (textos informativos)
Receptor: función apelativa (discursos persuasivos)
Emisor: función emotiva (textos en los que se manifiesta
la actitud del sujeto) Código: función
metalingüística (crítica literaria) Mensaje:
función poética Canal: función fática
(sin sentido o fórmulas ritualizadas, solamente para
mantener el contacto o el canal abierto –Hola, ¿me
escucha?- y del otro lado del teléfono –Ajá)
Kerbrat-Orecchioni reformula el esquema de la
comunicación. Multiplica por dos el código, uno del
lado del emisor y otro del receptor (codificación y
decodificación). Las competencias de cada sujeto
darán como resultado dos modelos: de producción y
de interpretación. Las competencias
lingüísticas y paralingüísticas no se
separan porque la comunicación oral es multi-canal. Se
incorporan las competencias culturales e ideológicas, las
determinaciones psi (psicológicas) y las restricciones del
universo del discurso. Los niveles de enunciación pueden
superponerse en la instancia emisora. Puede haber emisores
complejos (por ej. en publicidad enunciador y agencia) o
relevados por otros que lo interpretan (teatro). Los receptores
son más complejos, ya no se trata de un receptor
único. El receptor puede ser destinatario directo o
indirecto, presentes o ausentes físicamente, previstos o
no por el emisor. Los receptores pueden ser reales, virtuales o
ficcionales: – presente + locuente (intercambio oral cotidiano –
presente + no locuente (conferencia magistral) – ausente +
locuente (comunicación telefónica) – ausente + no
locuente (comunicaciones escritas) El referente es exterior al
mensaje y rodea a la comunicación pero a la vez se inserta
en ella. Una parte está concretamente presente y es
perceptible en la comunicación y la otra parte se
convierte en contenido del mensaje y por último el
referente se refleja en la competencia ideológica y
cultural de los sujetos.

Deixis Enunciación, subjetividad
y deictización
La enunciación es la puesta en
funcionamiento de la lengua por un acto individual de
utilización. Es el acto mismo de producir el enunciado, el
acto por el cual el hablante moviliza la lengua por su cuenta,
toma la lengua por instrumento y la convierte en discurso. El
locutor es el primero que se introduce, pero en cuanto se declara
locutor y asume a lengua, implanta un otro delante de él,
un alocutario. La presencia del locutor en su enunciación
hace que cada instancia de discurso se convierta en un centro de
referencia interna. El locutor se pone como sujeto cuando se
identifica como persona única que pronuncia yo y lo hace
por medio de un signo único pero móvil que le da la
opción a cada locutor de asumirlo con la condición
de que cada vez que sea usado remita a su propia instancia de
discurso. Cada locutor asume por su cuenta el lenguaje entero y
lo hace mediante formas específicas cuya función es
poner al locutor en relación constante y necesaria con su
enunciación. A este juego de formas se las denomina
deícticos, palabras que señalan, exponen, ponen a
la vista, etc. Los deícticos son términos abiertos
cuya referencia se establece crucialmente cada vez que cambian el
hablante, el oyente o las coordenadas espacio-temporales de los
actos de enunciación. Para considerar una unidad como
deíctica deben combinarse las propiedades de
referencialidad y egocentricidad. Referir deícticamente
muchas veces consiste en mostrar o indicar y para ello el
término correspondiente es acompañado por una
mirada o un ademán.

Deixis personal La subjetividad es
definida como la unidad psíquica que trasciende la
totalidad de las experiencias vividas que reúne y que
asegura la permanencia de la conciencia. Es ego quien dice ego y
lo hace dirigiéndose a alguien que en su alocución
será tú. Esta condición de diálogo es
la constitutiva de la persona. 1) Persona El enunciado que
contiene yo pertenece a ese tipo o nivel del lenguaje que
denominamos pragmático, lo mismo sucede con el tú.
La realidad a la que se refieren yo o tú es tan
sólo una realidad del discurso. La forma yo no tiene
existencia lingüística más que en el acto de
palabra que la profiere. Por lo tanto en ese proceso hay una
doble instancia conjugada: -Instancia del yo como referente
–Instancia de discurso que contiene yo como referido. Yo es
el individuo que enuncia la presente instancia de discurso que
contiene la instancia lingüística yo. Tú es el
individuo al que se dirige la alocución en la presente
instancia de discurso que contiene la instancia
lingüística tú. Características de las
dos primeras personas: *Unicidad específica: yo y
tú cada vez que se utilizan son únicos,
irrepetibles. *Inversibilidad: yo puede volverse tú y
tú se invierte en yo. -Uso de la segunda persona en
Argentina (usted) Se coloca el pronombre en posición
posverbal, acompañando al imperativo cuando se quiere
lograr un efecto contrastivo. También se lo coloca en
posición posnominal. Puede ser colocado detrás del
verbo en indicativo y no tiene valor contrastivo. -Sujeto
arbitrario en segunda persona: La segunda persona del singular
puede usarse fuera de la alocución y hacerla entrar en una
variedad impersonal. Esto hace que se defina al tú como el
no yo. Remite a todo un grupo de individuos y se interpreta como
cualquiera o todo el mundo. (Ej., Si te dicen una cosa
así, te hunden) 2) No persona La tercera persona trae una
indicación de enunciado sobre alguien o algo pero no
referido a una persona específica. La tercera persona
tiene la función de expresar la no persona, puede adoptar
cualquier sujeto o no tener ninguno y este sujeto nunca
será planteado como persona. -Usos deícticos Su uso
deíctico incluye la llamada deixis ad oculos, la presencia
de un gesto que acompaña lo dicho. *Aquí, elemento
adverbial (aquí, el señor Muñiz) *Sintagma
nominal acompañado de un ademán con el que se
señala a sí mismo (A este cura!) 3) Plural El
tránsito del singular al plural no es una simple
pluralización. La unicidad y la subjetividad del yo
contradicen la posibilidad de una pluralización. Nosotros
no es una multiplicación de objetos idénticos sino
una yunción entre un yo y un no-yo. El resultado es una
totalidad nueva y de un tipo particularísimo ya que sus
componentes no son equivalentes sino que hay un yo que somete al
elemento no-yo en virtud de su cualidad trascendente. Yo +
vosotros = forma inclusiva. Tú es el que sobresale. Yo +
Ellos = forma exclusiva. Yo es el subrayado. -Plurales ficticios
en primera del plural Se los denomina así porque el
locutor procura demostrar que ha participado junto con otros, que
son su alocutario y/o la no persona, del hecho al que se refiere
el enunciado -Plural de modestia o de autor Generalmente es
utilizado por escritores y conferenciantes que consideran
altanero o demasiado familiar el uso del yo en público.
-Plural mayestático Se usa nos con sentido de singular en
ocasiones solemnes. -Plural sociativo Se utiliza familiarmente
con significado de segunda persona del singular.
-Inclusión del locutor, por afinidad con el agente real,
en una acción de la que no ha participado (qué
partidazo, cómo ganamos!)

JAKOBSON vs. ORECCHIONI

LA SITUACIÓN COMUNICATIVA:

La comunicación.

Si bien pensamos que el análisis de las
modalidades enunciativas de los textos sobre moda y belleza de
las revistas femeninas de alta gama nos va a proporcionar la
clave de cómo son las relaciones establecidas entre los
participantes en el proceso comunicativo, creemos que el sentido
del enunciado no se capta en su totalidad si no se tiene en
cuenta la situación comunicativa.

Una lingüística que se aleje de lo inmanente
debe prestar atención a todo lo que afecta al proceso de
comunicación, o, como se suele decir, al
contexto. Como afirman Lozano, Peña Marín
y Abril (1997:43), todo lo que se refiere a este concepto
entraña una gran dificultad, por la vaguedad de su
definición y las distintas posturas teóricas, a
veces irreconciliables, sobre este tema.

En los años treinta, Bühler,
inspirándose en el Cratilo, el diálogo
platónico sobre el origen del lenguaje, concibe este como
la herramienta que utilizan los hablantes para comunicarse entre
sí. En el esquema de la comunicación que este autor
propone, los elementos fundamentales son emisor, receptor y
situación externa
(objetos y relaciones). Si
predomina el primer componente, la función del enunciado
será expresiva; si tiene más fuerza el
segundo, encontraremos la función apelativa, y si
la atención se centra en el último factor, la
función lingüística será la
representativa.

En este esquema, y también en el modelo de
Shannon, creador de la teoría matemática de la
información, se basó Jakobson para plantear el
suyo, que relacionó, al igual que Bühler, con las
funciones comunicativas:

El destinador envía un mensaje al
destinatario. Para que sea operativo, el mensaje requiere
primeramente un contexto al que remite (esto es lo que, con
terminología un tanto ambigua, se llama referente),
contexto comprensible para el destinatario y que es, ya sea
verbal, ya susceptible de ser verbalizado; luego, el mensaje
requiere un código, común en todo o al menos en
parte a destinador y a destinatario (o, en otros términos,
al codificador y al descodificador del mensaje); finalmente, el
mensaje requiere un contacto, un canal físico y una
conexión psicológica entre el destinador y el
destinatario, contacto que les permite establecer y mantener la
comunicación (Jakobson 1960: 213-214)

El esquema queda así:

CONTEXTO

DESTINADOR………

MENSAJE

……..DESTINATARIO

CONTACTO

CÓDIGO

Pese al éxito que posteriormente ha obtenido su
formulación, no ha estado exenta de críticas.
Greimas y Courtés plantean algunas objeciones al modelo de
Jakobson:

Este esquema no puede ser considerado como una
axiomática desde la que se pueda elaborar, por vía
de la deducción, toda una teoría del lenguaje; no
es tampoco una taxonomía de enunciados; a lo más se
podría ver en él posibilidades de connotaciones a
los mensajes "denotativos", postulaciones de significados
connotativos cuyas marcas se trataría de reconocer en el
nivel del discurso. (1982: 187-188).

Critican además el carácter demasiado
general de las funciones del lenguaje. Su propuesta consiste en
introducir un nuevo elemento: el observador, que no forma parte
ni del contexto ni del referente, pues se trata de una instancia
extradiscursiva.

Kerbrat- Orecchioni (1986: 20 y ss.) incide en algunos
de los aspectos menos afortunados del modelo de Jakobson. No es
cierto, en primer lugar, que el código manejado por emisor
y receptor sea siempre homogéneo. En la
comunicación entre ambos se dan al menos dos idiolectos,
y, por otra parte, esta intercomunicación puede ser solo
parcial; es posible que no llegue a ser del todo
satisfactoria.

En segundo lugar, otra crítica planteada por
Kerbrat-Orecchioni al modelo de Jakobson es el problema de la
exterioridad del código. Aunque la autora no se atreve a
asegurar que este resida en la conciencia, sí cree seguro
que solo funciona como "competencia implícita" de un
sujeto. Considera, además, que cada uno de los dos
idiolectos anteriormente mencionados incluye dos facetas:
competencia referida a la producción y competencia desde
el punto de vista de la interpretación. La "competencia de
un sujeto" es la suma de todas sus posibilidades
lingüísticas, que puede estar limitada si se
encuentra en posición de codificador o si sufre la
acción de diversos filtros, como dificultades para
expresarse en una lengua extranjera.

Otros filtros que reducen las posibilidades de
elección y que determinan la actividad de
decodificación son las condiciones concretas de la
comunicación (naturaleza del locutor y los alocutarios,
espacio, etc.) y los caracteres temáticos y
retóricos del discurso. Al conjunto formado por la
situación comunicativa más las limitaciones
estilístico-temáticas, Kerbrat-Orecchioni lo
denomina "universo del discurso".

Por otra parte, el esquema planteado por Jakobson no
explica de forma satisfactoria el dinamismo del proceso
comunicativo y cómo intercambian sus papeles emisor y
receptor. Todos estos motivos llevan a Kerbrat-Orecchioni a
completar el modelo de este autor, de manera que a las
competencias estrictamente lingüísticas de emisor y
receptor añade sus determinaciones psicológicas y
psicoanalíticas, además de sus competencias
culturales o enciclopédicas e ideológicas.
El esquema resultante es el siguiente:

Monografias.com

Pese a que este modelo enriquece la propuesta de
Jakobson, sigue siendo, en opinión de la propia
Kerbrat-Orecchioni, demasiado simplificador. Su
autocrítica finaliza con dos conclusiones:

  •  1) No se explicitan ciertas
    características de la comunicación verbal, como
    la reflexividad, (el emisor del mensaje es al mismo
    tiempo su primer receptor), la simetría (el
    mensaje verbal exige por lo general una respuesta, que puede
    ser diferida en la comunicación epistolar) y la
    transitividad (si un emisor x transmite a
    un receptor y una información i,
    y puede transmitir a su vez i a z
    sin haber experimentado él mismo la validez de
    i). Esta propiedad permite la transmisión del
    saber.

  •  2) No se refleja la complejidad de las
    instancias emisora y receptora. En este esquema
    únicamente se refleja el caso más simple y por
    otra parte más raro de la comunicación, el que
    se da cara a cara, pero muy a menudo no se da esta
    situación.

En la fase de emisión pueden solaparse muchos
niveles de enunciación, como sucede con el discurso
referido. En cuanto a la categoría del receptor,
Kerbrat-Orecchioni distingue entre:

  •  - Destinatario propiamente dicho o
    alocutario. Es explícitamente considerado por
    el emisor L.

  •  - Destinatarios indirectos, que
    actúan como testigos del intercambio comunicativo y
    pueden influir en él (chistes, discursos
    polémicos, defensas de tesis, etc.)

  •  - Destinatarios adicionales y
    aleatorios, cuya naturaleza el emisor no puede prever, ni
    tampoco la interpretación que darán al mensaje
    (como sucede con una carta que lee una persona a la que no
    iba dirigida).

Los destinatarios pueden ser de diferentes clases, pero
también son distintas las condiciones en las que se
produce el intercambio. Los destinatarios directos e indirectos
pueden estar físicamente presentes o no, y pueden tener o
no la posibilidad de responder. Encontramos por lo tanto cuatro
clases de receptores:

  •  - Presente más "locuente" (intercambio
    oral cotidiano)

  •  - Presente más no locuente (conferencia
    magistral)

  •  - Ausente más locuente
    (comunicación telefónica)

  •  - Ausente más no locuente (en la
    mayoría de situaciones escritas)

Por otra parte, para caracterizar al receptor es preciso
valorar la relación social y afectiva que mantiene con el
locutor, teniendo en cuenta criterios como el grado de intimidad,
la relación jerárquica, el contrato social que los
una, etc.

  •  3) La carencia fundamental que Kerbrat
    Orecchioni detecta en su propio esquema es que no describe
    las interacciones que existen entre estos diversos
    componentes.

Para esta autora, no está clara cuál es la
realidad a la que se refieren las anteriores etiquetas
descriptivas, ya que el único factor estudiado en
profundidad es la competencia lingüística. Por otra
parte, es muy difícil delimitar los límites de
todos los elementos que integran el modelo. Hay que tener en
cuenta que emisor y receptor pueden intercambiar sus papeles, ya
que la comunicación es un proceso
dinámico.

OTRAS DEFINICIONES DE DENOTACIÓN
Y CONNOTACIÓN:

Los conceptos de denotación
(significado estable y compartido, e.g. el "rojo"
denotando un color) y connotación (significado
instable, indexado a varias experiencias socioculturales,
e.g. el "rojo"connotando el peligro, la fuerza o el
comunismo) enfrentan problemas parecidos. Recordemos una
definición usual:

"Llamaremos "denotativo" el sentido que
interviene en el proceso referencial, es decir el conjunto
de

informaciones que acarrea una unidad
lingüística y que le permite relacionarse con un
objeto extra-lingüístico […] Todas la
informaciones subsidiarias serán dichas
"connotativas"7.

7 C. Kerbrat-Orecchioni, La
Connotation
, Lyon, Presses universitaires de Lyon, 1977, p.
15.

En la semiología y
lingüística estos términos son profundamente
estudiados. Un extracto de la lingüista Elvira Arnoux nos
remite a la explicación de los subsiguientes, iniciando un
interrogante "¿Cuales son los ejes pertinentes que
subyacen en la oposición denotación
connotación?: " Denotativo" se lo llama al sentido que
interviene en el mecanismo referencial, informaciones que
transmite una unidad lingüística y que le permiten
entran en relación con un objeto
extra-lingüístico durante los procesos de
denominación e identificación del referente. Un
mismo elemento de contenido puede expresarse denotativa y
connotativamente. Entonces en la connotación aparece un
valor semántica que no es vehiculado por un significante
que pertenezca a lo léxico y las construcciones
gramaticales. En la denotación el sentido es
explícito y en la connotación, el sentido es
sugerido y su decodificación aleatoria. En todas las
definiciones de connotación aparece la idea de valores en
exceso o adicionales o más bien "significaciones
segundas". El exceso, según el extracto de Arnoux, puede
tratar que las informaciones connotativas no tienen ninguna
pertinencia referencial, digamos, remiten a algo que no tiene
nada que ver con lo denotado en la secuencia. Hay otra
relación en los dos términos estudiados: Se puede
decir que en la relación entre los planos denotativo y
connotativo es de selección: el segundo presupone al
primero. Si bien a los significantes de connotación los
admitimos como "extras" o "segundos" no son secundarios respecto
a los valores denotativos. La importancia es relativa y
varía según el tipo de discurso. Ahora vamos a dar
un ejemplo que se relaciona con el mundo de la publicidad y que
fue analizado por Roland Barthes en "Retórica de la
imagen" " Fideos panzani" En la palabra Panzani se fusionan dos
signos: – Uno denotativo: La empresa que produce este producto,
fideos, y estos fideos como significado y su secuencia
fónica o gráfica como significante. – Connotativo:
El significante (la "i" final; con la "n" y la "z") aporta un
significado de connotación, donde Barthes explicita como
"italianidad": "Panzani" sugiere que los fideos son de Italia o
provienen de esa región. Un agregado de la
lingüística: Los contenidos semánticos son
valores flotantes, tímidos, que sólo se imponen si
son redundantes o si, por lo menos, no se contradicen con el
contenido denotativo. Ahora vamos a analizar la denotación
– connotación en referencia al mundo de las artes.
Béla Balázs trabaja sobre la función
expresiva del género cine A partir de la técnica
cinematográfica, encuentra la connotación expresada
mediante recursos filmográficos. Argumenta lo siguiente:
Primer plano: "la más pequeña arruga del rostro se
transforma y adquiere un carácter lírico (…)
" Montaje: Se encarga del ritmo de la obra, permite
asociación de ideas partiendo de una gama inexorablemente
metafórica. Encuadre: La síntesis de la realidad
objetiva y subjetividad del artista. Sonido: Es la posibilidad de
revelación poética y recurso para lograr una
significación simbólica; el sonido no
debería repetir lo que la imagen muestra. Rudolph Arnheim,
filósofo alemán, dice que toda obra de arte debe
ser obra de expresión, el contenido de la obra debe ir
más allá de los objetos individuales que la
constituyen. Entonces le da a las artes un carácter
decididamente connotativo. Las artes no como duplicado de la
realidad sino como construcción significativa donde los
rasgos múltiples superan a la representación de los
objetos utilizados. Vamos a seguir con Barthes: Sugiere la
connotación como signo que se deriva del significante de
un signo denotativo, de forma que la denotación nos lleva
a una cadena de connotaciones. En la publicidad, Barthes observa
que no encuentra nunca una imagen literal en estado puro.
Aún cuando es posible que una imagen abarque como elemento
completo, esta se une rapazmente a un signo de ingenuidad y
aparece el tercer mensaje: simbólico. Utópicamente,
si la imagen se despoja de su connotación,
adquiriría un carácter radicalmente objetiva o
inocente. Vamos a citar más ejemplos en artes donde la
denotación y connotación aparecen
explícitamente: En Boquitas pintadas de Manuel Puig, la
novela incorpora textos enteros enunciados por locutores de
radio. En Los intocables, hay una escena donde un cochecito con
un bebe cae por una escalera, en claro homenaje a El acorazado
Potemkin. "Bussi, el gran dictador" tapa de una edición de
Página 12, su connotación remite una
intertextualidad con la película de Chaplin.

Bibliografía

"Elementos básicos para el
análisis del discurso" Compilador Daniel Romero. Modulo de
Semiología: Estudios sobre la lengua. Ediciones de la Masa
amorfa. Extracto de "Retórica de la imagen" de Roland
Barthes. Sitio de artes:
http://www.altillo.com/articulos/pintura.asp Diccionario de la
Real academia española Online:
http://buscon.rae.es/diccionario/drae.htm Sitio de artes:
http://www.realidadliteral.net/1paginaI-3.htm

 

 

Autor:

Regina Quinteros

Partes: 1, 2
 Página anterior Volver al principio del trabajoPágina siguiente 

Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

Categorias
Newsletter