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Radiología Forense: TC de senos paranasales para identificar personas. (página 2)



Partes: 1, 2

Los senos esfenoidales se originan durante el tercer mes
de vida fetal a partir de un par de evaginaciones de la mucosa en
la porción posterosuperior de la cavidad nasal. El
desarrollo de estas evaginaciones es lento, de forma que ni
siquiera en el nacimiento se encuentran en relación con el
cartílago nasal posterior o el esfenoides óseo. La
neumatización del esfenoides tiene lugar en la mitad de la
infancia, y procede rápidamente después de los 7
años hasta adquirir su forma y extensión final, que
suele alcanzarse entre los 12 y los 15 años e incluso
antes (7) (8).

Las celdas etmoidales se originan durante el quinto y
sexto mes de la vida fetal en los meatos superior y supremo para
formar el grupo posterior. El grupo anterior de celdas derivadas
del meato medio se sitúa, en general, por delante de las
celdas que se originan en el meato superior. Estos grupos de
celdas se extienden de forma irregular con grandes variaciones
individuales y de grupo, y se encuentran bastante bien
conformados en el momento del nacimiento. Los recesos epiteliales
redondeados que forman las celdas están separados entre
sí por interespacios y tabiques óseos. El
crecimiento de las celdas es relativamente rápido,
especialmente durante el segundo año de vida. A los 7
años de vida, la mayoría o todo el espacio
disponible se halla neumatizado y entre los 12 y 14 años
las celdas han adquirido su forma definitiva (9).

El seno frontal esta formado en el interior del hueso
hemifrontal; se origina en el receso nasofrontal o
fronto-etmoidal. Un tabique parasagital separa completamente los
dos senos individualizándolos anatomo-funcional y
patológicamente. Septos frontales incompletos pueden ser
encontrados en el interior de cada seno (1).

El seno frontal presenta variedades anatómicas,
volumétricas y dimensionales, pudiendo alcanzar enormes
proporciones con recesos zigomáticos, supra-orbitarios y
parietales. El seno frontal puede estar ausente en el 16% de los
casos (10) (11) (12) (13) (14).

La neumatización del hueso frontal comienza al
final del primer año de vida en una de las tres formas
siguientes:

1) por expansión del receso frontal en la
porción anterosuperior del infundíbulo;

2) mediante el desarrollo de una de las celdas
frontales;

3) por el crecimiento y expansión de una celda
bullosa (10) (11) (12) (13) (14) (15) (16).

La localización del ostium frontal del adulto
variará algo, dependiendo de cuál sea el origen del
seno frontal. El crecimiento del seno frontal (del tamaño
de un guisante) es lento hasta el séptimo año de
vida; el seno no adquiere su forma y extensión adulta
hasta los 15-20 años (13) (14) (15).

  • RADIOANATOMIA Y DESARROLLO

La radioanatomía básica y los datos del
desarrollo de los senos paranasales tienen gran importancia en la
interpretación de los hallazgos
radiográficos.

En comparación con los datos métricos de
hace 40 años, en la actualidad se observa un aumento
moderado en la longitud y superficie media de los senos
paranasales. Estas cifras concuerdan con otros datos que indican
un desarrollo acelerado del cuerpo humano.

La primera visualización de los senos paranasales
sobre placas radiográficas varía con la edad y el
sexo de los jóvenes. Se observó que en grandes
grupos de niños, el desarrollo de los senos hasta los 10
años es más prominente en las chicas. El
tamaño adulto medio se alcanza a la edad de 13-15
años en las niñas y a la de 14-16 en los
niños. Los estudios estadísticos también han
mostrado senos paranasales mayores en los varones adultos que en
las mujeres. Estas diferencias son muy significativas en los
senos frontal y esfenoidal.

Anatómicamente el seno frontal se localiza entre
las tablas externa e interna de la porción vertical del
hueso frontal, pero pueden extenderse hacia atrás al techo
orbitario Se neumatizan con lentitud de abajo hacia arriba,
alcanzando el nivel de las bóvedas orbitarias a la edad de
los siete u ocho años (17). La primera aparición
radiográfica del seno frontal suele coincidir con el
cierre óseo de la sutura metópica. Si embargo, no
existe correlación significativa entre el desarrollo del
seno frontal y la persistencia de la sutura metódica.
Habitualmente, a la edad de los 2 a 4 años se visualizan
radiográficamente los senos frontales, pero ocasionalmente
el desarrollo puede no iniciarse hasta los 6 años de edad.
La frecuencia de la aplasia de los senos frontales, que puede ser
unilateral o bilateral, varía según diferentes
estadísticas. Sin embargo, todas las anomalías del
desarrollo del seno frontal suponen un 10% de los casos
examinados.

El seno frontal bien desarrollado difiere
considerablemente en tamaño y forma y en el número
de recesos, las cuales pueden llegar a ocupar una tercera parte o
más del hueso frontal. La pared intraseptal puede estar en
la línea media o desplazada excéntricamente, lo que
no tiene significado patológico. La configuración
del seno frontal desarrollado es una característica
exclusiva. (17).

En general sólo los senos maxilares son
reconocibles en el recién nacido (17). En esta
época se ven muy pequeños; con el crecimiento, el
antro maxilar adopta gradualmente su forma característica
en pirámide bilateral simétrica.

El esfenoides puede contener cavidades pares o impares
dependiendo de si existe o no el variable tabique medio del
hueso. Como regla, los senos esfenoidales no se empiezan a
neumatizar sino hasta el tercero o cuarto año, y entonces,
por lo general, lo hacen en forma asimétrica. La forma y
tamaño de los senos esfenoidales varía mucho, casi
tanto como la de los senos frontales (2).

Los senos etmoidales se componen de un grupo numeroso de
pequeñas celdillas localizadas entre las órbitas y
la porción superior de la nariz. Aparecen desde el
nacimiento pero son tan pequeñas, que su valoración
por métodos radiológicos no es practicable sino
hasta el quinto o sexto año de la vida (18)
(19).

  • ANTROPOLOGIA FORENSE

Esta ciencia tiene como finalidad el estudio de los
restos óseos esqueléticos, con objeto de llegar a
la identificación personal y averiguar la causa de la
muerte, la data de la muerte, la edad, sexo, raza, estatura,
posibles marcas profesionales, antiguas lesiones óseas,
así como el estudio de la cavidad bucal y todo cuanto sea
posible para proporcionar información a los investigadores
policiales para que puedan llegar a la identificación de
una víctima. 

El Antropólogo ve los huesos que estudia como un
papel de calco en el que han quedado registrados cuantos
acontecimientos han tenido lugar a lo largo de la vida de un
individuo y especialmente los traumatismos que han llevado a la
muerte de la víctima.

A sus laboratorios son enviados constantemente restos
cadavéricos que pueden llegar en muy diversos estados de
descomposición, de momificación adipocira, de
putrefacción o simplemente ya esqueletizados. Es
precisamente en estos casos, en que la autopsia propiamente
forense poco o nada puede deducir de las partes blandas y en los
que la policía no ha encontrado huellas dactilares u
objetos que permitan la identificación, cuando empieza el
trabajo del antropólogo forense (20).

Lo primero que se hace en estos laboratorios es
esqueletizar los restos, así en cuarenta y ocho horas, al
disponer de unos restos esqueléticos limpios, desodorados
y esterilizados, se puede comenzar el estudio minucioso de cada
centímetro de los restos. En ocasiones los restos son
hallados momificados. En estos casos se pueden obtener muchas
veces las huellas dactilares por medio de la
revitalización de los tejidos, de las partes blandas y
bien por impresión directa o por medio de
fotografía con iluminación especial, se
podrán obtener huellas aceptables que permitan la
identificación de la víctima (21).

La ayuda de técnicas como la fotografía y
la radiografía es fundamental para estos estudios,
así como las técnicas histológicas y
microscópicas.

La radiografía, aplicada por ejemplo al estudio
de los senos frontales del cráneo, es muchas veces
definitiva para llegar a una identificación (no hay dos
individuos que tengan iguales los senos frontales). Otras veces,
la radiografía de la cavidad bucal permite llegar a la
resolución de casos que parecían imposibles de
resolver. Por otra parte, como el criminal casi siempre deja su
sello personal, su tarjeta de visita sobre la víctima o
dentro de ella y en las cercanías del lugar donde la
depositó, la inspección ocular es tan importante
para el investigador policial como para el antropólogo
forense, y lo ideal es que se inspeccione el lugar del hallazgo.
Así, el antropólogo forense con experiencia en
arqueología tiene más oportunidades de sacar
partido al caso si estudia in situ el material sobre el que ha de
informar aunque sean después indispensables una serie de
pruebas que sólo se pueden realizar en el laboratorio (21)
(22).

El color de los huesos nos indica a veces si el
cadáver estuvo enterrado o bien se esqueletizó a la
intemperie, que es un dato igualmente importante. Además
de los propios restos óseos, para el antropólogo
tienen gran valor por ejemplo, el número y variedad de
larvas o pupas de los insectos de la fauna cadavérica,
así como los residuos de polvo y micro partículas
contenidas en las ropas del cadáver o las uñas de
éste (21).

El estudio de la fauna cadavérica permite llegar
a averiguar la data de la muerte a veces con bastante
aproximación, la época del año en que tuvo
lugar, los lugares dónde estuvo la víctima o
algunos de sus hábitos, todo lo que es parte de la
solución final (20).

  • RADIOLOGIA FORENSE.

La radiología, en su aplicación
medicolegal, es uno de los sistemas más simples y eficaces
en el campo de la identificación personal, ya que el
perfeccionamiento de la aparatología ofrece una amplia
posibilidad, práctica y rápida, en este campo del
conocimiento científico.

La radiología ha demostrado ser útil en la
identificación de sujetos vivos (niños, dementes),
de cadáveres en proceso de putrefacción o
esqueletizados y, fundamentalmente, de víctimas de hechos
de violencia, así como en personas fallecidas en
catástrofes (incendios y explosiones).

La sistemática para el estudio de restos
óseo incluye la identificación radiológica
general del esqueleto, el análisis de la
trabeculación ósea, la detección de defectos
personales, como deformidades congénitas, alteraciones
patológicas o secuelas de fracturas, presencia de
prótesis y calcificaciones y fundamentalmente, el estudio
de puntos concretos, como los senos craneales y la silla
turca.

Se puede estimar también la edad de un sujeto a
través de los métodos frontosinusal y craneoselar o
tez de Voluter, que se basa en la descripción de la silla
turca, que aumenta de tamaño rápidamente hasta los
5 años y luego lo hace más lentamente, de tal modo
que se establece una relación entre la edad y sus
dimensiones, de acuerdo con la tabla de Voluter (23).

OBJETIVOS.

  • Objetivos Generales.

  • Determinar que la radiología es un
    método auxiliar importante, incluso para la medicina
    forense.

  • Determinar que es posible identificar personas por
    medio de tomografías de senos paranasales.

2.2. Objetivos Específicos.

  • Describir la prevalencia de edad en los pedidos
    tomográficos de los senos paranasales por
    profesionales médicos.

  • Evaluar porcentaje de sexo en relación a los
    pedidos tomográficos.

  • Determinar la individualidad de los senos frontales
    entre las imágenes de los diferentes pacientes
    sometidos a tomografías.

  • Evaluar presencia de patologías en los senos
    frontales exclusivamente.

  • Identificar destrucción de la arquitectura
    ósea de los senos frontales referente a
    patología preexistente o relacionada con la
    edad.

III. MATERIALES Y
METODOS.

3.1. Tipo de Estudio.

Para la presente monografía se realizo un estudio
con muestreo observacional, descriptivo, de corte transversal, no
probabilístico.

3.2. Universo y Muestra.

Se tomaron casos consecutivos de estudios
tomográficos de senos paranasales en los cortes coronales
almacenados en el procesador del quipo de tomografía de
cuatro corte General Electric modelo Brights Speed, de la
Cátedra de Radiología del Hospital de
Clínicas desde el 1º de Junio hasta el 30 de
Septiembre del 2007. Un total de 106 pacientes sometidos a
estudios tomográficos en ese periodo de tiempo.

Se analizaron variables tales como edad, sexo,
tamaño de los senos paranasales de acuerdo a sus celdas,
presencia de patologías y presencia de destrucción
ósea.

3.3. Técnica e Instrumento

Para el efecto se realizó un cuestionario que
contenía las variables del presente estudio.

Los datos se recopilaron en planilla electrónica
Excel 6.0 y se analizaron estadísticas
descriptivas.

  • IV. RESULTADOS.

Entre junio y septiembre del 2007 se realizaron estudios
tomográficos a 106 pacientes con edades comprendidas entre
2 a 80 años. La distribución por franjas etaria fue
la siguiente de 1 a 10 años 7 pacientes (6.6%), de 11 a 20
años 19 pacientes (18%), de 21 a 30 años 29
pacientes (27.3%), de 31 a 40 años 12 pacientes (11.3%),
de 41 a 50 años 9 pacientes (8.5 %), de 51 a 60
años 15 pacientes (14%) y mayores a 60 años 14
pacientes (13.2%) (Grafico 1).

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Con respecto al sexo, 58 (54.7%) fueron masculinos y 48
(45.3 %) femeninos (Grafico 2).

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Se usaron parámetros comparativos simples en
cuanto al tamaño de los senos frontales grandes, medianos,
pequeños y con ausencia total de los mismos; 38 (35.8%)
grandes, 48 (45,2%) medianos, 17 (16%) pequeños y 3 (2.8%)
sin neumatización (grafico 3); teniendo en cuenta estos
datos se subdividió en predominio derecho, izquierdo,
iguales y la presencia de mas de dos celdas. De los que
presentaban senos frontales grandes 19 (50%) eran bilaterales, 11
(28.9%) de predominio izquierdo, 3 (7.9%) derechos y 5 (13.1%)
presentaban tres celdas; de los medianos 29 (60.4%) eran
bilaterales, 11 (22.9%) izquierdos, 1 (2%) derecho, 6 (12.5%)
tres celdas y 1 (2%) central; de los pequeños 13 (76.4%)
bilaterales y 4 (23.5%) derechos; si neumatización 4 del
lado derecho y 2 del izquierdo. (Grafico 3)

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Grafico 3

Encontramos 77 (72.6%) estudios sin patologías y
26 (24.5%) con patologías (grafico 4).

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Grafico 4

De los senos paranasales que presentaban
patologías 16 (61.5%) con sinusitis, 9 (56.2%) bilateral,
5 (31.2%) del lado izquierdo y 2 (12.5%) del derecho, 11 (42.3%)
con engrosamiento mucoso, 8 (72.7%) del lado derecho, 3 (27,2%)
del izquierdo y 1 (3.8%) pólipo del lado derecho (Grafico
5).

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Grafico 5

No comprobamos la presencia de destrucción
ósea en los pacientes que presentaban patología en
los senos frontales.

DISCUSIÓN

Los senos paranasales en general alcanzan su
tamaño y forma propios del adulto entre los 18 a 20
años de edad, siendo más temprano en las
niñas que en los niños. En general sólo los
senos maxilares son reconocibles radiográficamente en el
recién nacido y el ultimo en completar su desarrollo es el
frontal, que confiere en su desarrollo características
exclusivas y particulares. La aplasia de los senos frontales,
puede ser unilateral o bilateral, según diferentes
estadísticas; sin embargo, todas las anomalías del
desarrollo del seno frontal suponen un 10% de los
casos.

La tendencia en cuanto al tratamiento de enfermedades de
los senos paranasales es el tratamiento sintomátologico y
no radiológico, así los profesionales
médicos especialistas utilizan cada vez en menor
proporción las radiografías de los senos
paranasales, cuyas técnicas mas utilizadas son
básicamente la de Waters (Mentonasoplaca) y la de Caldwell
(Frontonasoplaca).

Entre estás la más utilizada en la
clínica es la de Waters, por que permite la
visualización de mayor cantidad de senos en una sola
posición y así disminuir los costos de salud; sin
embargo la de Caldwell es la que más nos interesa para la
identificación de seres humanos, por ser la que ofrece la
mejor visualización de los senos frontales y está
es muchas veces definitiva para llegar a una
identificación porque no hay dos individuos que tengan
senos frontales idénticos (17).

El inconveniente es que los allegados a la supuesta
victima deben aportar una radiografía (pre-mortem), luego
se toma una radiografía al cráneo (post-mortem) y
se establece la comparación entre ambas; sin embargo, la
posición y la distancia de ambas radiografías no
siempre coinciden, lo que dificulta al perito establecer la
comparación por simple inspección visual o
superposición entre ambas; esta situación fue
planteada por el Equipo argentino de Antropología Forense
y la Dirección de Registro de Personas Desaparecidas de la
Provincia de Buenos Aires; cuyo objetivo es entregar los restos a
los familiares de las personas desaparecidas y aportar pruebas a
las causas judiciales correspondientes.

Para solucionar este problema se diseñaron
métodos utilizando técnicas de Procesamiento
Digital de Imágenes como por ejemplos los métodos
Descriptores de Fournier que son los más utilizados
basados en los análisis de las características
externa (contornos).

Actualmente la Tomografía Axial Computarizada ha
abierto una nueva era en la medicina diagnostica y pronostica;
pasando a ser el método de estudio de elección por
los profesionales médicos especialistas en
otorrinolaringología y clínica medica para la
valoración de los senos paranasales, proporcionando
imágenes en los tres planos (axial, coronal y
sagital).

Con los equipos de Tomografía Helicoidal
Multicortes o Multidetectores se obtiene imágenes en tres
dimensiones de cualquier parte de la anatomía humana,
sobre todo imágenes tridimensional del rostro humano a
partir de una simple tomografía de cráneo, con la
cual se podría tener un archivo de las personas que fueron
sometidos a estudios tomográficos de cráneos o
senos paranasales.

El problema que se plantea primero es que estos equipos
tomográficos multicortes o multidectores son escasos
todavía en el país e inclusive la mayoría se
encuentran solo en Asunción, segundo entre éstos
solo algunos son de alta calidad para conseguir una imagen
tridimensional del rostro y tercero no se individualizan bien los
pacientes con sus nombres y apellidos y mucho menos cuentan con
el numero de documento de identidad.

En nuestro país es poco probable encontrar que
los habitantes cuenten con sus radiografías de senos
paranasales, sin embargo con el alto índice de accidente
de transito por motocicleta, gran porcentaje de la
población sufren fracturas que dejan cicatriz, secuelas e
inclusive con el tiempo dejara muchas personas mutiladas y otras
tantas con prótesis que proporcionaran nuevos caracteres
individuales externo que facilitarían a la
identificación.

Analizando todas estos casos y sin tener en cuenta los
pacientes politraumatizados; vemos que con la mayoría de
los equipos con que contamos; con el aumento de los pedidos por
especialistas de estudios tomográficos de los senos
paranasales; la individualidad, resistencias a patologías
y a la destrucción ósea de los senos frontales;
contamos con un elemento interesante para la obtención de
buenas imágenes.

El poder guardar o copiar las imágenes en Discos
Compactos favorece a la mejor conservación y
almacenamiento del estudio por parte de los propios pacientes y o
instituciones.

CONCLUSION.

Por todo lo expuesto anteriormente, queda demostrado que
la radiología se ha convertido en mas que solo un
método auxiliar de diagnostico para los médicos en
general, sino que también es un método muy
útil para la medicina forense y actualmente constituye una
rama de esta especialidad, como es la radiología
forense.

Dados los resultados obtenidos, cabe concluir que no
existen personas con senos frontales idénticos y que la
Tomografía Computada de senos paranasales es un
método mas especifico para señalar los detalles
propios de cada persona, haciendo posible su
identificación.

De los 106 pedidos y estudios realizados de senos
paranasales por Tomografía Computada en la Cátedra
de Radiología del Hospital de Clínicas encontramos
que la mayoría de los pacientes se encontraban en una
franja etaria entre los 10 y los 30 años de edad; que
corresponde a la edad de mayor frecuencia de patologías
infecciosas; y con un aumento en los pedidos de estudios a los
pacientes mayores de 50 años, que presentan índices
mayores de patologías crónicas y tumorales
según la literatura.

No se hallaron mayores diferencias en cuanto a sexo se
refiere, habiéndose observado 58 pacientes masculinos
(54.7%) y 48 pacientes femeninos (45.2%) que no permite tener una
cantidad proporcionada de pedidos en cuanto a sexo.

Encontramos solo tres pacientes que presentaban una
agenesia total de los senos paranasales que representa un
porcentaje dentro de los previstos en otros estudios uno de ellos
superaba los 20 años de edad. Todos los otros paciente
presentaron variaciones importantes en la morfología y
tamaños de sus senos frontales; los que presentaban senos
de tamaño mediano y grandes en su mayoría eran
bilaterales y la otra parte presentaban un desarrollo
asimétrico presentando la mayoría mayor desarrollo
del lado izquierdo.

Solo un 24.5% de los estudios presentaban
patologías simples del Seno Frontal como sinusitis y
engrosamiento mucoso leve, y ningún paciente presentaba
destrucción ósea, ya sea por patología
propia de los senos frontales o por patologías
vecinas.

Comprobamos que los senos frontales
presentan bastante resistencia a la destrucción o
deformación por patologías lo cual nos brinda un
excelente método de importancia medico legal para la
identificación de individuos vivos o muertos, y utilizando
la Tomografía Computada tenemos método de estudio
de imágenes superior a la radiografía convencional
sin presentar tantos problemas en cuanto a la técnica de
realización del estudio y mucho menos al almacenamiento de
la información.

VIII.
BIBLIOGRAFIA

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P.; DE LIMA NAVARRO, M. Anatomía da cavidade nasal e seios
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19- SANCHEZ, A.; PEDROSA. Diagnostico por
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Interamericana.1987.805p.

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21- PATITO, J.A. Tratado de Medicina Legal
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Quórum.2003.1067p.

22- RIOS BRIONES, N.I.; RODRIGUEZ, D.
Imagenología. —2da.ed. —México:
Editorial El Manual Moderno, 2007. 527p.

23- CLYDE, A. HELMS, M.D. Fundamentos de
Radiología del Esqueleto.–Madrid: Marbán.1993.
210p.

 

 

 

Autor:

Dr. Ricardo Cuevas Sarria

Medico Forense

Dr. Carlos Mena Canata

Otorrinolaringólogo

Prof. Dr. Nicolás Lezcano

Director de Post Grado de Medicina Forense
F.C.M.-U.N.A.

Prof. Dr. Edgar Martínez

Jefe del Servicio de Radiología
H.C.-U.N.A.

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