Estudio exploratorio sobre los ejercicios con pesos en el adulto mayor

Introducción

El Adulto Mayor, la tercera edad o la vejez comprenden
aproximadamente la etapa de transición que media entre los
60 y 80 años, por encima de los 80 años se habla en
la actualidad de una cuarta edad, indicando una
prolongación y acentuación del promedio de vida,
así se fijó en 1980 en la Asamblea Mundial sobre el
Envejecimiento de las Naciones Unidas. En los últimos
años la humanidad vive un fenómeno sin precedentes:
el envejecimiento de esta población, que puede definirse
como un acrecentamiento de la proporción de personas de
edad avanzada, con relación al resto de la
población, pues hay una disminución de la
proporción de niños y adolescentes menores de 15
años. Estudios científicos han demostrado el
aumento creciente de la ancianidad, la cual ha ido creciendo con
respecto a la tasa de natalidad, propiciando que en Cuba se forme
el club de los 120 años, por tener esta población,
una atención especializada y prioritaria.

Tanto la salud como la actividad física son de
vital importancia para lograr la calidad de vida del adulto
mayor. La salud y bienestar del hombre están enfocados a
la mejoría de estilos de vida, donde el ejercicio
físico es una opción esencial para la calidad de
vida de las personas mayores. El hombre en su primera
época de formación y desarrollo se conforma su
estructura muscular y ósea, las cuales estarán en
subordinación de la preparación física
durante este período. La planificación y
dosificación de los ejercicios físicos es un
aspecto a tener en cuenta a la hora de practicar un deporte. Un
joven sin entrenar puede tener la misma capacidad física
que una persona adulta con un programa de preparación.
Precisamente, la mayoría de los deportes permite conservar
la elasticidad vascular, factor que contribuye a retrasar el
envejecimiento.

En el decursar de la vida el ser humano se ha enfrascado
no por luchar contra el deterioro natural que causa el tiempo en
cada individuo, sino por buscar la manera mas idónea de
vivir la vida y para ello siempre ha tenido como una buena
herramienta a su alcance, la practica constante de ejercicios
físicos acompañados de una buena y correcta cultura
alimentaria.

Según Díaz Villazón (2008)
"Desde edades tempranas la realización
sistemática de ejercicios físicos, proporciona al
organismo más capacidad física y se
mejorarán equivalentemente las capacidades de funciones
cardíacas, mentales, motivacionales, que permitirán
una mayor calidad de vida en la población del adulto
mayor, beneficiando una mayor longevidad funcional".
(Díaz Villazón, 2008)

En las recomendaciones para la practica de ejercicios
físicos para los ancianos es preciso tener en cuenta en
primera instancia aquellos que han sido practicantes y que siguen
realizando ejercicio físico, donde sus conocimientos sobre
sus condiciones físicas son enormes, y aquellos que tras
un sedentarismo prolongado se convencen de que la práctica
de actividad física puede mejorar su estado de salud. En
el segundo caso las recomendaciones serán muy precisas y
deben de estar en función del estado físico en que
se encuentran ellos. Se debe de tener muy presente el rol que
ejerce la degeneración del organismo sobre las funciones
vitales del individuo y sobre su capacidad de trabajo
muscular.

Al recomendar la actividad física en longevos
según Bencomo Pérez, L y varios autores (2004),
"hay que tener en cuenta determinados déficit que en
momentos pueden omitirse y son de gran importancia, tales como la
perdida de agudeza visual o auditiva, modificaciones del
equilibrio, sin olvidarse de la arteriosclerosis, insuficiencias
venosas, isquemias, etc. Por tanto, estas personas que son
incluidas en programas generales de actividad física,
deberían de recibir entrenamientos personalizados. Dado
que muchos ancianos padecen determinadas
patologías.  También hay que diferenciar
entre quienes practican deporte de forma cotidiana y quienes
realizan ejercicio físico de vez en cuando".
(CITAR)

La propensión a la hipotrofia muscular y a la
osteoporosis debe ser peleada en el anciano mediante la
práctica de una acción motora sistemática.
Existen determinadas modalidades deportivas que son más
apropiadas por encima de los 60 años, y en especial para
aquellos que comienzan la práctica deportiva: Marcha,
carrera de medias distancias, deportes acuáticos,
ciclismo, golf, caminatas entre otras.  Por sus
características biológicas, el Adulto Mayor esta
más capacitado para la actividad deportiva
aeróbica, con un comienzo gradual, dinámico y
siempre bajo un particular control de los
médicos.

La actividad física influye en el funcionamiento
óptimo de los diferentes órganos y sistemas de
órganos en el organismo incrementando la esperanza de
vida, la autonomía funcional y la salud sobre todo en los
Adultos Mayores, fortificándolos contra diferentes y
posibles enfermedades, calmándoles e incluso
curándoles padecimientos que presentan en la salud mental
estimulando su motivación por la vida.