CONCEPTO, MOTIVACIONES Y DETERMINANTES TEÓRICOS DEL AHORRO
La teoría económica sobre el ahorro comenzó
desde los antiguos pueblos ya que se había descubierto los
grandes beneficios que aportaba una pequeña cantidad de
semilla a sus habitantes, ya que estas se transformaban en la
cosecha del año siguiente, y traería como ventaja
el incremento de beneficios económicos para el
futuro.
Ahora mostramos a continuación, el fundamento del ahorro
en la literatura económica: Resguardo. Reserva para hacer
frente a la disminución de la capacidad productiva
Siguiendo con el ejemplo de la cosecha, es necesario siempre
reservar cierta cantidad del producto para asegurar la
producción en un futuro. También era importante
pensar que se podía reservar otra parte de la misma para
intercambiar por producción de las comunidades
cercanas.
A medida que estos pueblos adoptaron la vida sedentaria, la idea
del trueque se trasladó a los individuos. El ser humano
siempre ha tenido la necesidad de cambiar aquellos objetos que
poseía pero no necesitaba, por aquellos que realmente
deseaba. Por ejemplo, en los pequeños mercados era donde
se originaron los primeros trueques en cuanto a, una gran
variedad de artículos, por ejemplo: lanzas, zapatos,
collares y productos agrícolas. Hoy en día, en
algunos mercados se siguen usando este tipo de
transacciones.
Las principales funciones del dinero: Unidad de cuenta: Los
precios del resto de los bienes de la economía se expresan
en unidades del bien llamado dinero. El dinero, como unidad de
cuenta, es un bien de precio fijo. Medio de pago: El dinero se
acepta universalmente para realizar transacciones y cancelar
deudas entre los agentes económicos participantes. Reserva
de valor: El bien llamado dinero debe servir para conservar el
poder adquisitivo a lo largo del tiempo. La inflación
afecta negativamente a esta función del dinero, que se
diluye cuando los aumentos del nivel de precios son
elevados.
DETERMINANTES TEÓRICOS DEL AHORRO LA
MEDICIÓN DE LA VARIABLE La determinación del ahorro
como variable agregada suele presentar complicaciones formales.
Por lo que se han establecidos tres métodos: Método
directo: Mediante la obtención de datos para cada
componente del ahorro agregado: Ahorro agregado de las familias,
las empresas y los gobiernos. Método indirecto: Se despeja
el ahorro a partir de la identidad ahorro –
inversión. El ahorro interno es igual a la
inversión bruta interna más el saldo de la balanza
comercial.
Método residual: El ahorro nacional se obtiene como
residuo entre el ingreso y el consumo agregados. El ahorro
privado es la diferencia entre el ingreso disponible y el consumo
privado.
HIPÓTESIS KEYNESIANA DEL INGRESO ABSOLUTO S = sY
Para Keynes, el ahorro se determina fundamentalmente por
el nivel absoluto del ingreso corriente, como una función
lineal del mismo. Donde: S = Ahorro s = Propensión media a
ahorrar Y = Ingreso corriente
HIPÓTESIS NO KEYNESIANAS Kuznets (1946) y Goldsmith
(1955), aportaron el comportamiento de la relación ahorro
– ingreso disponible, llegando a la conclusión que
las propensiones media y marginal al consumo, eran constantes
menores que 1 e iguales entre sí, vistos desde una
perspectiva a largo plazo.
Básicamente, son tres hipótesis keynesianas, la del
ingreso relativo, la del ingreso permanente y la del ciclo de
vida. Hipótesis del ingreso relativo Duesenberry y
Modigliani, postulan que las conductas de las personas respecto
al consumo y el ahorro se basan en: primeramente, en la tendencia
a no variar los hábitos de consumo ante cambios
decrecientes en el ingreso y por último a la tendencia a
imitar los hábitos de los sectores de ingresos más
altos. Hipótesis del ingreso permanente Friedman en 1957,
se basa en la idea de que el consumo y el ahorro no son
función del ingreso corriente, sino de dos tipos de
ingresos: El ingreso permanente: ingreso futuro esperado El
ingreso transitorio o no esperado, de naturaleza
estocástica.
Hipótesis del ciclo vital Vinculada a trabajos de
Ando y Modigliani, supone que las personas administran su ingreso
de modo tal de mantener un flujo estable de consumo en el tiempo,
en especial durante la vejez.
RIQUEZA, TASA DE INTERÉS, INFLACIÓN,
DISTRIBUCIÓN DE LA RENTA, TÉRMINOS DE INTERCAMBIO,
TASA DE CRECIMIENTO. La Riqueza tiene un papel importante en la
determinación del ahorro, y así lo sugieren las
hipótesis del ciclo de vida y de la renta permanente. En
principio, podría pensarse que las personas más
ricas deberían tener una tendencia a ahorrar
proporcionalmente menor, dado que la diferencia entre la riqueza
deseada y la riqueza real u observada sería menor que en
las personas de menores ingresos
En América Latina, y como tal, en nuestro país, es
difícil encontrar estudios empíricos que hayan
demostrado categóricamente cual de los dos efectos se
impone. El comportamiento del ahorro agregado estará
determinado por el efecto predominante. Por otra parte, cuando
existe un predominio de tasas de interés reales negativas
durante periodos largos, como en el caso de la mayoría de
los países latinoamericanos, y en especial de la
Argentina, el comportamiento de los agentes económicos
respecto del ahorro puede tornarse impredecible.
PMeS =S /Y Keynes invoca una ley psicológica fundamental,
según la cual, variaciones positivas de la renta, se
corresponden con incrementos también positivos, pero
proporcionalmente menores del consumo. En otras palabras, ante
cada unidad monetaria de aumento del ingreso, sólo una
proporción decreciente del mismo se destina a gastos de
consumo, mientras que se ahorra el resto. A estas proporciones
destinadas a consumo y ahorro, las denomina propensiones, y se
expresan: PMgS = ?S /?Y Donde: PMeS = Propensión
media al ahorro PMgS = Propensión marginal al ahorro S:
Ahorro Y: Renta ?: Coeficiente de variación 0 < PMeS
< PMgS < 1
Respecto de los términos de intercambio, el efecto
Harberger – Laursen – Metzler, indica que shocks
positivos en los términos de intercambio aumentan el
ingreso y, por lo tanto, el ahorro. Según la teoría
del ingreso permanente son percibidos como ingreso transitorio y
destinados al ahorro.
PROBLEMAS DE ESTIMACIÓN DEL AHORRO EN ECONOMÍAS
LATINOAMERICANAS En el caso del ahorro agregado, se mencionan
algunos de los inconvenientes que suelen presentarse.
Discrepancias y poca confiabilidad de las series
estadísticas Comportamientos erráticos, debido a la
presencia de factores provocadores de “ruidos” como
la presencia persistente de tasas de interés reales
negativas o los constantes cambios de direccionamiento de las
políticas económicas. Mercados de capitales
pequeños, imperfectos y poco desarrollados. Sistemas
financieros ineficientes y poco confiables. Ausencia de seguridad
jurídica en la práctica, pese a la
proliferación de leyes y mecanismos de regulación
Inestabilidad del tipo de cambio y existencia de incentivos para
la salida de capitales.
Criterios para la determinación de los periodos bajo
estudio
Marco internacional Marco político interno
Evolución macroeconómica Política monetaria
y fiscal Relación ahorro – inversión En este
capítulo se analiza la relación de algunos periodos
en función del ahorro y las características de los
hechos políticos y macroeconómicos más
destacados en la República argentina.
Introducción a la periodización bajo
análisis: La salida del modelo agroexportador
La crisis mundial en 1929 ocasionó en la economía
argentina no tuviera cambios en el comercio exterior
reduciéndose las exportaciones en un 50% y una
caída mundial de los precios de los productos primarios
excepto el petróleo y metales no ferrosos, trayendo como
consecuencia un deterioro de los términos de intercambios
que habían favorecido al país en años
anteriores En el siguiente gráfico podemos notar el precio
de uno de los productos más importante para la
economía argentina desde 1925 hasta 1939 que fue el
trigo:
1930 retirada de la inversión extranjera debido a la
deflación 1931 se implantó el control de cambios,
mediante un esquema muy simple de tipos de cambio diferenciados y
se incrementaron los aranceles aduaneros. 1933 se conformaron
juntas reguladoras para cada uno de los principales sectores
productivos. Como consecuencia del control de cambios. 1936 tomo
más importante la Teoría General de Keynes que
consistía que el bienestar general se basaba en mayor
medida en la inversión que en el ahorro y el nivel de la
inversión dependía principalmente de la demanda
efectiva y de las expectativas empresariales, más que de
la tasa de interés o del nivel de los salarios.
PRIMERA ETAPA: EL AVANCE DEL ESTADO EN LA GENERACIÓN DE LA
ACTIVIDAD ECONÓMICA. 1935 – 1952 La Argentina y el
comercio mundial En 1937 se produce una importante sequía
en el hemisferio norte, lo que provoca una recuperación de
la participación de las materias primas en la estructura
del comercio mundial. Los productos agropecuarios de clima
templado retoman temporalmente los precios de la década
del 20. La política económica peronista La
política monetaria y la creación del Banco
Central – Detentar la exclusividad de la emisión
monetaria. – Mantener reservas de oro o divisas como respaldo de
esa emisión. – Regular el crédito y los medios de
pago. – Inspeccionar y controlar a los bancos y demás
entidades financieras. – Otorgar redescuentos. – Controlar el
mercado de divisas. – Intervenir en forma activa en los mercados
de dinero y cambios.
Política fiscal Reforma del sistema impositivo, con
tributos a los beneficios empresarios y a la riqueza personal.
Nuevo sistema previsional: Su generalización
incrementó la recaudación vía el ingreso
masivo de aportantes, mientras los beneficiarios del sistema se
iban incorporando en forma paulatina. Control absoluto del Estado
del producido del comercio exterior y de la liquidación de
las divisas provenientes del mismo. La
inversión A partir de 1933, cobra impulso el sector
manufacturero, favorecido ahora por el control de cambios y la
suba de aranceles y se convierte en principal destinatario de la
inversión.
INESTABILIDAD POLÍTICA Y “STOP & GO”. 1953
– 1975 Tras la finalización de la Segunda guerra, la
economía mundial continuaba su fase de crecimiento, hasta
1971, donde ocurre el derrumbe del sistema monetario de paridades
fijas surgido de los acuerdos de Bretton Woods. Un hecho
destacado de este periodo fue la puesta en marcha de los procesos
de integración económica de Europa occidental. Esta
cambio radicalmente el escenario económico continental
Nace en 1957 la CEE (Comunidad Económica Europea) Causo
Grandes impactos sobre las relaciones económicas argentino
– europeas 1. Gran Bretaña perdía importancia
relativa en el contexto Europeo. 2. La política
agropecuaria no iba a ser favorable a los intereses argentinos.
Características del Periodo
La política exterior argentina y la inserción en
los mercados mundiales La Argentina había rechazado el
multilateralismo propuesto por los Estados Unidos y no
consolidó en principio a los órganos de Bretton
Woods. Durante la primera presidencia de Perón, las
relaciones con los Estados Unidos se basaban en mutuo recelo. A
partir de 1952 se inició una política de
acercamiento económico a los Estados Unidos. El primer
indicio fue la ley de inversiones extranjeras de 1953 El objetivo
más ambicioso de los últimos años del
gobierno peronista había sido el autoabastecimiento de
petróleo
Marco político interno. Veinte años de
inestabilidad 1952 marca un punto de quiebre de la
política peronista, causados por la crisis del sector
externo de la economía y el brote inflacionario. Lo que
siguió fue un espiral de violencia que obligó a la
caída y exilio de Perón, en septiembre de 1955. Se
instalo un gobierno provisional, encabezado por el General
Leonardi como presidente, que luego fue reemplazado por el
General Aramburu. En 1958 se llamo a elecciones donde se impuso
el Dr. Frondizi, como candidato de un sector escindido del
radicalismo, luego derrocado en 1962. Nuevas elecciones en 1963,
una vez más con el peronismo proscrito. Obtuvo la
presidencia el Dr. Arturo Illia. Fue derrocado por militares en
1966. El nuevo gobierno militar designado presidente al Gral.
Onganía, el cual luego de una fuerte demostración
de oposición al régimen (Cordobaza), diezmaron el
poder. Fue reemplazado por el Gral. Levingston en junio de 1970.
Luego 9 meses después Gral. Lanusse asumió la
Presidencia.
En marzo de 1973, la fórmula del justicialismo, encabezada
por el Dr. Cámpora se impuso en las elecciones
presidenciales. Tras dieciocho años, el peronismo
volvía al poder. En julio de 1974 muere Perón.
Causa enfrentamiento entre los distintos sectores del peronismo y
en 1975 se le suma el malestar economico. El 24 de marzo de 1976,
una junta de comandantes se adueñó del poder en la
Argentina. Las políticas económicas entre 1953 y
1975 El año 1952 marca un cambio de rumbo en la
política económica peronista. La meta primordial
era el control de la inflación, mediante restricciones al
consumo y fomento del ahorro. Se redujo considerablemente el
gasto público. También hubo ajustes en el
régimen tarifario. Se condicionaron los aumentos nominales
de salarios al incremento de la productividad. En 1953 se obtuvo
una excelente cosecha, que trajo cierto alivio a las cuentas
externas. En 1955 reaparece el desequilibrio de la balanza
comercial.
Luego de destituido Pero, el Gobierno provisional encargó
a Raúl Prebisch un diagnóstico de la
situación económica. Para enfrentar el problema
externo se recomendaba un fuerte ajuste del tipo de cambio y el
estímulo a la inversión extranjera. En tanto, la
inflación debía combatirse mediante:
Reducción de la tasa de expansión monetaria
Corrección del desequilibrio fiscal Contracción del
gasto y Reducción del empleo público La realidad,
una vez más, no mostró los resultados esperados.
Frondizi basó su política económica en los
postulados teóricos del desarrollismo. Para ello era
necesario multiplicar la producción interna de
petróleo y gas. A partir de 1960 la economía
mostró signos de recuperación
La economía reaccionó positivamente, con altos
índices de crecimiento en el bienio 1964 –1965. A
este continuo devenir cíclico de la economía
argentina durante estos veinte años, se lo ha
caracterizado como “stop & go”. Un aspecto
destacado de la política económica de Illia fue el
tratamiento del tipo de cambio. Ni se mantuvo artificialmente la
cotización del peso, ni se recurrió a mega
devaluaciones. Se aplicó un por entonces novedoso
mecanismo de mini ajustes, que acompañaban a la
inflación. En el periodo de Onganía, se presento un
“Plan de estabilización y desarrollo. Se fijó
una nueva paridad, muy alta, del tipo de cambio, con el
compromiso de no volver a devaluar. Con Levingston en el
gobierno, se buscó compensar la creciente
extranjerización de la economía mediante normas
como la ley del compre nacional. Lanusse, demasiado ocupado en su
disputa política con Perón, intentó paliar
la inflación y el desempleo con medidas
cortoplacistas.
Políticas monetarias y fiscales entre 1952 y 1975 El tramo
peronista 1952 – 1955 abandonó la expansión
fiscal como herramienta de crecimiento de la demanda agregada. El
gobierno provisional instalado en 1955 llevó a cabo una
profunda reestructuración del sistema financiero. El plan
de desarrollo de Frondizi obligó al principio a llevar a
cabo una política monetaria y fiscal expansiva. Durante la
presidencia de Illia, la prioridad era la salida de la
recesión, y a ello se dirigió la política
económica. La expansión fiscal se manifestó
a través del gasto corriente, con una activa
política de compras del Estado. La política
monetaria fue igualmente expansiva y se orientaba al
estímulo del crédito.
El ahorro privado entre 1953 y 1975 Consumo privado entre 1953
– 1975. En puntos porcentuales del PBI. La propia
dinámica del proceso stop & go dificulta el
tratamiento de las variables que determinan el ahorro de los
particulares. El consumo privado muestra una tendencia claramente
decreciente respecto del periodo anterior. La propensión
media a consumir para todo el periodo es del 72% respecto del
producto total. A partir de 1960 la economía comienza a
recuperarse de la recesión de 1959 pero los niveles de
consumo se estancan en torno al 70 / 72 % del producto,
LA DÉCADA DE LA CONVERTIBILIDAD. 1991 – 2000
SubAntecedentes Al final de los 80 se encuentra la sociedad
argentina observando las cadenas internacionales de noticias, las
cuales se encuentran disponibles en la mayoría de los
hogares. En aquellos tiempos la sociedad argentina era consumida
por la hiperinflación, con la estupefacción de
propios y extraños El gobierno de Menem inquieto por la
situación que atravesaban, intento en una primera etapa
estabilizar los precios internos, mediante la reducción
del desequilibrio externo y fiscal
LA DÉCADA DE LA CONVERTIBILIDAD. 1991 – 2000
SubCARACTERIZACIÓN DEL PERIODO Marco Internacional En los
90 se aumentó el proceso de globalización,
especialmente en materia de finanzas y comercio. En los
países de la periferia se notaba un proceso de apertura,
el cual se evidencio cuando en 1996 recibieron en su conjunto
200.000 millones de dólares en inversiones externas Marco
político Interno Así como 1983 el mandato de
Alfonsín era eminentemente institucional, mientras que el
de Menem fue otorgado seis años después era
eminentemente económico el cual básicamente
tenía como finalidad sacar al país de la
hiperinflación en la cual se encontraba sumergido. Sus
primeros pasos en el periodo dejaban sensación de
vacío como que no existió un plan para enfrentar la
crisis económica.
LA DÉCADA DE LA CONVERTIBILIDAD. 1991 – 2000 SubPlan de
Convertibilidad Se caracteriza muchas veces como “Plan
Liberal” observando desde un punto de vista teórico
manifiesta que la convertibilidad argentina no fue la gran cosa.
Las políticas monetarias restrictivas no fueron el factor
fundamental en la estabilidad de precios, esta vino
principalmente dada por la fijación del tipo de cambio en
una paridad La convertibilidad se reforzó con la reforma a
la carta orgánica BCRA que lo convirtió en un
organismo independiente y limito su discrecionalidad y para
actuar como prestamista de última instancia del sistema
financiero. inmutable.
9. QUINTA ETAPA: LA DÉCADA DE LA CONVERTIBILIDAD. 1991 –
2000 SubAhorro- Inversión La IED se hizo notar en los
últimos 60 años, principalmente correspondiendo a
la compra de empresas ya establecidas de capital nacional, tanto
públicos como privadas. Por lo que en este aspecto no
influyo gran parte el aumento de la renta. Desde 1992 y durante
toda la década el ahorro interno no alcanza a financiar la
inversión, cubriendo esto con el ahorro exterior. Esto se
evidencia en el año 1995 cuando ocurre el efecto
tequila
LA DÉCADA DE LA CONVERTIBILIDAD. 1991 – 2000 SubEl ahorro
privado entre 1991 y 2000 La época de la convertibilidad
se encuentra marcada por la importante recuperación del
consumo, especialmente de bienes durables Unos de los sucesos
importantes empleados para el ahorro en este periodo es la
implementación del sistema integrado de jubilaciones y
pensiones, en particular lo del régimen de
capitalización. Este sistema mantiene la individualidad de
los aportes, los cuales a su vez producen una renta, la cual a lo
largo de los años determinara el monto a percibir por la
persona tras su jubilación.
Capítulo 10. Conclusiones finales. A lo largo de casi
siete décadas de historia económica argentina se ha
examinado el desempeño del ahorro privado y sus
principales determinantes. Puede destacarse que el comportamiento
de los agentes económicos privados argentinos respecto de
este agregado muestra algunos elementos dignos de ser destacados.
Fundamentalmente se sugieren importantes contradicciones con lo
afirmado por la teoría económica respecto del
comportamiento de esta variable y sus determinantes La demanda de
financiamiento por parte del proceso ISI condiciona el
desempeño del ahorro en la etapa 1935 – 1952. La
teoría prescribe que la presencia de tasas de
interés reales negativas y de mecanismos regulados y
dirigidos de asignación del crédito puede
convertirse en un importante desincentivo para ahorrar.
A partir de 1952, la propensión media al ahorro privado
rara vez es inferior al 15%; ya que suele estabilizarse en torno
al 20% del ingreso. Aunque todavía se mantienen los
desincentivos teóricos presentes en la etapa anterior, el
funcionamiento del mercado financiero y las políticas
crediticias se tornan algo más transparentes. En general,
a lo largo de los casi setenta años puestos a
consideración, la economía argentina presenta un
coeficiente de ahorro aceptable, ligeramente superior al de
Estados Unidos, comparable al de Francia, algo menor que el de
Alemania, y sensiblemente más bajo que el de Japón