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Trastornos del Sueño (página 2)



Partes: 1, 2

Un desajuste entre el ritmo circadiano
endógeno (dentro de) de sueño-vigilia y el
patrón exógeno (fuera de) de sueño-vigilia
de una zona geográfica determinada, derivado de un
desplazamiento de gran distancia que conlleva el cruce de varios
meridianos terrestres.

Causa una variedad de síntomas tales
como la desorientación, insomnio, somnolencia, astenia,
bajo rendimiento intelectual, irritabilidad, alteración de
la memoria, etc. Que duran aproximadamente unos 6 días los
cuales son necesarios para adaptarse al nuevo horario del
país en el cual el sujeto se encuentra.

Un aporte muy interesante es el del Pareja
(2011) el cual dice que el reajuste ocurre a una velocidad de 88
minutos por día si el viaje es hacia el oeste y 55 minutos
se el viaje es hacia el este.

2.2.8) Cambio de turno de
trabajo

Aparece una gran cantidad de insomnio
durante las horas que el individuo debería dormir o una
somnolencia excesiva en las horas que debería estar
despierto, debido a un turno de trabajo nocturno o a un cambio
repetido en el horario del trabajo (Barlow y Durant,
2008).

2.2.9) Fase de sueño
demorada

Se da cuando el sueño se retrasa
más de la hora normal de acostarse, se da en
noctámbulos nocturnos, ya que de manera frecuente alteran
su horario de dormir. (Barlow y Durant, 2008)

2.2.10) Fase de sueño
retrasada

Este tipo de fase de sueño se da
cuando las personas se acuestan muy pronto (antes de lo habitual)
y se levantan temprano, de esa manera el sueño se atrasa o
se da antes de la hora regular de dormir (Barlow y Durant,
2008).

2.3) DEFINICIÓN DE
PARASOMNIAS

2.3.1) Según el DSM IV
TR

Las parasomnias son trastornos
caracterizados por comportamientos o fenómenos
fisiológicos anormales que tienen lugar coincidiendo con
el sueño, con algunas de sus fases específicas o
con las transiciones sueño-vigilia. A diferencia de los
trastornos del sueño, las parasomnias no implican una
anormalidad de los mecanismos que rigen el ritmo circadiano ni de
los horarios de sueño y despertar. En realidad, las
parasomnias representan la activación de sistemas
fisiológicos en momentos inapropiados del ciclo
sueño-vigilia. En concreto, estos trastornos conllevan la
activación del sistema nervioso vegetativo, del sistema
motor o de los procesos cognoscitivos durante el sueño o
las transiciones sueño-vigilia. Cada parasomnia afecta una
fase característica del sueño, de forma que a
menudo cada tipo específico de parasomnia incide en una
fase de sueño concreta. Las personas con parasomnias
suelen acudir a la consulta debido a comportamientos
extraños durante el sueño más que por quejas
de insomnio o somnolencia diurna excesiva.

2.3.2) Según el CIE
10

Trastornos episódicos durante el
sueño, los cuales durante la infancia están
relacionados por lo general con las fases del desarrollo del
niño, mientras que en la madurez son fundamentalmente
psicógenos.

2.3.3) Según el ICSD
(International Classification of Sleep Disorders)

Las parasomnias consisten en trastornos
clínicos que no son anomalías de los procesos
responsables de estados de sueño y vigilia per se, sino
más bien, no son deseables los fenómenos
físicos que se producen sobre todo durante el
sueño. Las parasomnias son trastornos de la
excitación, la excitación parcial, y la
transición del sueño-etapa. Muchas de las
parasomnias son manifestaciones de la activación del
sistema nervioso central. Cambios en el sistema nervioso y la
actividad del músculo esquelético son las
características predominantes de este grupo de
trastornos.

2.4) LAS PARASOMNIAS

2.4.1) Pesadillas (antes trastornos por
sueños angustiosos)

Son sueños en los cuales se
desarrolla una historia de contenido aterrador que altera la
tranquilidad del sueño y lleva al individuo a un nivel de
intranquilidad que muchas veces lo lleva a despertarse de esa
manera se fragmenta su sueño. Aparece en la segunda mitad
de la noche, exactamente en la 3ra y 4ta fase del sueño
NMOR, y en pocas cantidades en el sueño MOR.

En los adultos puede ser yatrogénico
(sin abstinencia farmacológica) o toxicas (alcohol),
aunque también es frecuente su aparición en
individuos con trastornos de personalidad (Centro medico
Mediplaza, 2002).

En el DSM IV-TR (2002) se hace notar que el
10 a 50 % de los infantes de 3 a 5 años tienen pesadillas,
cuando estas son de mucha intensidad inquietan a los padres, los
cuales permanecen en las camas de sus hijos o dejan que ellos
vallan a dormir a las suyas, mientras que en el caso de los
adultos un 50 % refiere haber tenido pesadillas en alguna
momento, pero tiene una prevalencia mayor en los infantes y
niños.

2.4.2) Terrores nocturnos

Es una reacción de angustia hacia un
hecho que no se recuerda, el sujeto se despierta desesperadamente
con una sudoración excesiva, piloerección y
taquicardia. Se pueden producir gestos no coordinados y
rápidos, y una fijación de la mirada en
algún punto frontal (Belloch, Sandín y Ramos,
2008).

Alfageme y Hernández (2006) nos
explica que los terrores nocturnos pueden ser creados por
factores precipitantes tales como la fiebre, cansancio excesivo,
privación del sueño, uso de
medicamentos.

Esos terrores son producidos durante el
primer tercio de la noche en la fase 3 y 4 del sueño.
Además Buela-Casal y Sierra (1994) dice que el hecho de
que la mayoría de los niños deje de presentar
terrores nocturnos con la edad podría sugerir que este
trastorno está asociado a un retraso maduratorio del
sistema nervioso central.

2.4.3) Sonambulismo

El sonambulismo se desarrolla mediante
acciones propias del estado de vigilia tales como pararse,
sentarse, caminar, en algunos casos extremos se sale de la casa,
trota, pero sin saber lo que está sucediendo.

Es un síntoma muy próximo al
terror nocturno, pero en el que esta inhibida la expresión
de angustia, encontrándose mucho menos bloqueada la
vía efectora motriz. En cambio el estado de conciencia
oscurecida y la consecuente amnesia posteriormente son similares
(Maffei, 2004).

Mientras que Esquerra (2006) dice que se
trata de una alteración del sueño, donde los
mecanismos encargados de la relajación y la inmovilidad
que normalmente se produce durante el sueño, son inmaduros
y no actúan.

2.4.4) Somniloquia

La somniloquia es el habla o emisión
de sonidos con un significado casi indescriptible aunque en
algunos casos es muy claro lo que se dice pero no se puede
entablar una conversación con el sujeto ya que no
está consiente que está hablando, dichas palabras
no tienen una concepción crítica subjetiva del
episodio.

La somniloquia que ejecutan
inconscientemente los niños está asociada a menudo
a un episodio de sonambulismo y cuando se produce de forma
aislada normalmente se relaciona con la fase de sueño NMOR
y, por tanto no implicara a los sueños.

2.4.5) Bruxismo

Es caracterizado por movimientos bruscos
estereotipados de la boca que hace rechinar o apretar los dientes
durante el sueño, en algunos casos se relaciona con el
estrés y la tensión emocional. (Amaro, s/a) Pero no
hay estudios que confirmen de manera fehaciente este hecho
así que el aporte de Amaro esta aun en duda.

Tiene prevalencia con la edad, 10 % entre
las edades de 3 y 10 años, 13 % entre las edades de 18 y
20 años y un 3 % a los 60 años. Es más
frecuentemente descrito en gemelos monocigotes que en dicigotes y
si en la infancia sucede este trastorno persiste en el 90 % de
los casos de los adultos (Arboledas, Alarcón, Lluch y
Morell, s/a). Esta información con base en estudios
genéticos es más verídica y ayuda a
diagnosticar casos de bruxismo familiar.

Otro aporte importante desde el punto de
vista psicológico-biológico es el de Segarra (1994)
que dice que es más frecuente en los niños con
malformaciones maxilo-faciales y con mala oclusión
dentaria especialmente en el Síndrome de Down.

2.4.6) Enuresis

Se refiere al acto de orinarse al momento
de dormir o de manera general, sin oportunidad de controlar sus
esfínteres. Puede contribuir a que el momento de
acostarse, en lugar de ser una situación agradable y
relajada, se convierta en un estímulo desencadenante de
respuestas de estrés, ansiedad e irritabilidad (Maffei,
1981), este trastorno solamente es considerado como tal siempre y
cuando se diagnostique a personas mayores de los 4 o 5
años de edad.

Según Herrán y Navarro (2007)
cerca de 5 a 7 millones de niños se orinan en la cama, y
es más común en los niños que las
niñas.

2.4.7) Síndrome de piernas
inquietas

Consiste en la percepción de
incomodidad en las piernas con una irresistible necesidad de
moverlas para aliviarse. Según Pareja (2011) tiene una
prevalencia del 1,9 % desde los 8 a los 11 años de edad,
de un 2.0 % entre las edades de 12 y 17 y entre un 5 y 10 % para
los adultos con un 50 % de prevalencia en familiares.

2.4.8) Despertar
confusional

También llamada borrachera del
sueño, es una forma peculiar de hipersomnia caracterizada
por la incapacidad de lograr un estado total de alerta
después del despertar (Obiols, 2010), en algunos casos
también se puede manifestar una leve parálisis que
afecta al individuo por unos segundos que puede crear una gran
desesperación.

2.4.9) Síndrome de
Kleine-Levin

Se caracteriza por una somnolencia excesiva
superior a la hipersomnia (aunque en algunos casos los autores
colocan este síndrome como una extensión de la
hipersomnia), esta somnolencia es diurna y puede durar varias
semanas desapareciendo espontáneamente. Durante estos
episodios el paciente puede llegar a dormir más de 20
horas.

Billard (1990) véase en Belloch,
Sandín y Ramos (2008) manifiesta que los síntomas
al momento de despertar son excesiva sed, hambre, irritabilidad,
irritación que conduce a la hostilidad, dificultad del
pensamiento claro, trastornos de la memoria, frases incoherentes,
alucinaciones, entre otras. Aparece en la adolescencia
aproximadamente a los 15 años en hombres y 20 años
en las mujeres.

2.4.10) Mioclónias del
sueño

Son contracciones breves, estereotipadas,
bilaterales (en ambos lados del cuerpo) o unilaterales (en una
parte del cuerpo) de la musculatura de las extremidades o el
tronco (en algunos casos en todo el cuerpo). Cuando se da este
espasmo es nombrado de manera vulgar "estado de caída" o
sea cuando uno siente que se está cayendo y se sobresalta.
Esto se puede repetir durante cortos tiempo o largos hasta 2
horas (Vallejo, 2006).

2.4.11) Jactatio Capitis

Consiste en el balanceo rítmico de
la cabeza (delante-atrás y hacia los lados), son
irregulares e intermitentes y aunque la mayoría de los
casos son leves, puede resultar violentos (golpear la cabeza
contra la cama o las paredes) hasta el punto de provocar heridas,
este trastorno es característico de los lactantes de 8 a
24 meses y en los adultos es muy improbable que suceda (Venegas,
2010).

2.5) OTRAS PARASOMNIAS

Estos trastornos de sueño no son
incluidos en las clasificaciones de muchos autores como tampoco
en clasificaciones internacionales pero el aporte que brinda
Segarra (1994) me parece digno de ser remarcado por eso se
presentan las siguientes parasomnias:

2.5.1) Calambres
nocturnos

Es una sensación dolorosa o una
tensión muscular que se observa habitualmente en la parte
inferior de las piernas o en el pie y que aparece durante el
sueño, ocasionando algunos despertares nocturnos. Suelen
describirla los niños mayores o preadolescentes.
Ocasionalmente se han relacionado con una falta de
potasio.

2.5.2) Parálisis del
sueño

Consiste en períodos de incapacidad
para mover de forma voluntaria un grupo de músculos al
inicio del despertar, aunque a veces también se pueden ver
en el momento de dormirnos. Si se producen en el inicio del
sueño se denominan hipnagógicas y si se observan al
despertar se denominan hipnapómpicas. Son muy angustiosas
para el niño ya que tiene la sensación de que se ha
quedado inválido. Sabe que está despierto pero no
puede hablar ni gritar. Trata desesperadamente de moverse y no
consigue mover ni un solo músculo. Ceden
espontáneamente después de unos minutos. Se
producen por un trastorno del control motor de origen
desconocido. El fenómeno es benigno pero no existe
tratamiento específico. Es de gran ayuda explicar al
niño que cuando se produzca este fenómeno no trate
de moverse y piense que debe intentar quedarse nuevamente dormido
o que la situación ya cederá espontáneamente
sin hacer nada.

2.5.3) Deglución anormal
nocturna

Es un trastorno en el cual existe una
deglución inadecuada de saliva, que puede dar lugar a una
aspiración, con tos y sensación de ahogo, seguido
de breves despertares que interrumpen el sueño. La
impresión que tienen los padres cuando observan al
niño es que esta "comiendo" ya que existen unos
movimientos de masticación acompañados de sonidos
ostentosos que finalizan con una deglución. El niño
permanece dormido durante los episodios que pueden ser de varios
minutos de duración aunque lo mas frecuente es que sean
aislados. Son de distinta intensidad y pueden despertar al
niño cuando la deglución de saliva se produce por
la vía respiratoria. No existe tratamiento
específico.

2.5.3) Reflujo gastroesofágico
nocturno

Se caracteriza por regurgitaciones de los
contenidos gástricos hacia el esófago durante el
sueño. Es poco frecuente pero puede observarse en
recién nacidos y lactantes. Puede ser causa de apneas.
Normalmente benigno.

2.5.4) Hiperhidrosis del
sueño

Se caracteriza por una sudoración
profusa que tiene lugar durante las primeras horas del
sueño, normalmente independiente de la temperatura
exterior. Frecuente en lactantes. Puede afectar solo a algunas
partes del cuerpo (cuello y cabeza) y mas raramente a todo el
cuerpo. En algunos niños la intensidad de la
sudoración les despierta y obliga a cambiarles el pijama.
No se conoce tratamiento específico.

CAPITULO 3

Trastornos del
sueño relacionados con un trastorno mental o
médico

Tanto las enfermedades mentales como
medicas inducen o son inducidas por trastornos del sueño,
pero la mayoría de las veces las personas no le toman
importancia a los trastornos del sueño y piensan que es
algo que se arreglara por si solo y simplemente las dejan
pasar.

Hay una clasificación mas que el DSM
IV-TR brinda que es "trastorno del sueño inducido por
sustancias", la cual decide no incluir ya que esta
monografía tiene un punto de vista mas biológico y
como es sabido las sustancias no son algo biológico sino
material.

Muchos de los trastornos del sueño
se aprecian dentro de una enfermedad médica o
psiquiátrica, o en algunos casos en su versión
inversa. Aproximadamente el 40 % de las personas que se quejan de
insomnio y el 46.5 % de quienes lo hacen por excesiva somnolencia
diurna presentan alguna enfermedad psiquiátrica (Medina,
Sánchez, Conejo, Fraguas y Arango, 2007).

Me parece pertinente solo seleccionar las
enfermedades relacionadas con los trastornos del sueño mas
importantes ya que de las demás hay muy poca
información y no ha habido muchos estudios sobre ellas
solamente simples observaciones y conjeturas.

3.1) LA DEPRESIÓN

La depresión es una "tristeza
exagerada unida al pesimismo". El pesimismo constituye la
manifestación esencial que distingue a la depresión
de los sentimientos ordinarios de tristeza o desanimo que cada
cual experimenta de vez en cuando (Friedman, 2004).

Los trastornos del sueño casi
siempre vienen acompañados con la depresión ya que
el estado de "tristeza" en el cual se encuentra una persona
altera la eficacia del sueño nocturno. El trastorno de
sueño más común en la depresión
atípica es la hipersomnia diurna, mientras que en los
cuadros depresivos endógenos según Vallejo (2006)
se encontró fundamentalmente con que:

  • 1. Trastornos del sueño de
    la continuidad del sueño (aumento de la latencia del
    sueño, incremento del número de vigilias,
    despertar precoz).

  • 2. Disminución del
    sueño lento (fases III y IV) con cambio en la
    distribución de la actividad Monografias.com(delta), que disminuye en el primer
    periodo NMOR y se incrementa en el segundo.

  • 3. Primer periodo NMOR abreviado,
    es decir, disminución de latencia en MOR.

  • 4. Alteración den la
    distribución temporal del sueño MOR, con
    aumento del tiempo y de la actividad en la primera mitad de
    la noche.

En las depresiones con hipersomnia
(llamadas a veces "depresiones morfeicas") el tiempo total del
sueño, unas 18 a 20 horas, se ajusta a un ritmo
circadiano: se duerme al medio día y se levanta por la
mañana (Vázquez, 1990). Por otro lado, se sabe que
las depresiones endógenas tienen cierta relación
con una disminución de la actividad catecominergica; esto
podría explicar la disminución observada en el
tiempo del sueño MOR (Oswald, 1963).

En la depresión, el insomnio se
caracteriza por la dificultades para conciliar el sueño lo
que es inversamente proporcional a la edad y el rasgo mas
importante del insomnio se ve en la mayoría de las
depresiones es el desertar repetido, dando lugar a un
sueño fragmentado.

3.2) LA PSICOSIS

Es una enfermedad en la cual el individuo
pierde relación con la realidad y antes de apreciar un
brote psicótico se da un aumento en la intensidad y el
número de pesadillas nocturnas (Vázquez, 1990),
pero de manera extraña el sujeto tiene una resaltable
presencia más pasiva en las escenas de sueño
(Fernández y Vela, 1977).

Otro de los trastornos del sueño
relacionados con la psicosis es el insomnio o somnolencia
excesiva como también una parcial o total
conversión del ciclo vigilia – sueño o una
reversión del sueño polifásico, estas
personas tienden a estar despiertas durante la noche y ven a la
noche como su "mañana".

3.3) LA ANSIEDAD

La ansiedad es un estado desagradable de
temor que se manifiesta externamente a través de diversos
síntomas y signos, y que puede ser una respuesta normal o
exagerada a ciertas situaciones estresantes del mundo en que
vivimos. Por medio de las investigaciones de Reich, Weiss, Coble,
Macpartland y Kupfer (1975) se halló que cualquier proceso
que haya elementos ansiogenos (fobias, obsesiones, enfermedades
médicas, reacciones de estrés, etc.) conllevaran
algún tipo de insomnio. No obstante, Hartman (1968)
señala que las situaciones de estrés conllevan un
aumento del tiempo de sueños y del sueño de ondas
lentas, lo que permite una mejor recuperación del desgaste
producido pero es estrés. Se cree que debe existir
algún tipo de relación curvilínea, pues
grados más o menos intensos de estrés ocasionan sin
duda episodios de insomnio.

Las personas sufren de ansiedad intensa
durante a causa de la falta de sueño en cada noche y estos
pacientes que muestran una ansiedad crónica presentan las
siguientes características según el ICSD
(2001)

  • a. Temblores

  • b. Tensión
    muscular

  • c. Inquietud

  • d. Fatiga

  • e. Falta de aliento

  • f. Palpitaciones

  • g. Sudoración

  • h. Sequedad de la boca

  • i. Mareos

  • j. Respuestas exageradas de
    sobresalto

  • k. Dificultad para
    concentrarse

3.4) LA ESQUIZOFRENIA

La esquizofrenia es un trastorno
caracterizado según el DSM IV TR por:

  • a. ideas delirantes

  • b. alucinaciones

  • c. lenguaje
    desorganizado

  • d. comportamiento gravemente
    desorganizado o catatónico

  • e. síntomas
    negativos.

Es casi comprobado que el paciente
esquizofrénico no presenta aumento de la fase MOR, sino
que, por el contrario, algunos pacientes presentan una
disminución de la latencia MOR, y ausencia o
disminución del rebote MOR compensatorio tras deprivacion
de dicha fase, fenómeno del que no se conoce con exactitud
su significado fisiopatológico (Vallejo, 2006).

3.5) EL PARKINSON

Esta enfermedad también es conocida
como "parálisis agitante" y popularmente se reconoce por
expresarse en el movimiento tembloroso de los brazos y manos.
Pero la enfermedad de Parkinson no es una enfermedad de los
miembros o las articulaciones directamente, sino que es un
trastorno neurodegenerativo crónico que conduce a una
incapacidad progresiva de la persona. Aparte del insomnio que es
la queja mas común en pacientes con Parkinson, hay otros
trastornos de sueño resaltantes y aquejamientos tales como
incapacidad para levantarse de la cama, calambres dolorosos en
las piernas, sueños vividos y pesadillas. Algunas
características del sueño incluyen la
fragmentación del sueño, a menudo asociados con
episodios de somnolencia durante el día, total de
sueño – vigilia.

Según el ICSD (2001) existen 6
factores que contribuyen a la alteración del sueño
en personas con Parkinson:

  • 1. la regulación del
    sueño – vigilia parece ser afectada, posiblemente por
    la neuroquímica en los cambios de la
    enfermedad

  • 2. la rigidez se puede aumentar
    los despertares nocturnos, produciendo molestias y aumento de
    frecuencia de despertares.

  • 3. Movimiento periódico de
    las piernas, temblor inducido por fármacos y los
    espasmos mioclónicos.

  • 4. Se producen trastornos del
    sueño por la alteración de la vía
    superior y caja torácica.

  • 5. Los ritmos circadianos y el
    horario de sueño – vigilia se ve bastante influido por
    el curso de la enfermedad y creara mas adelante insomnio
    durante la noche y fatiga durante el día.

  • 6. Los medicamentos comunes para
    tratar el Parkinson tales como los dopamiérgicos y los
    anticolinérgicos pueden producir alteraciones del
    sueño y una gran disminución del sueño
    MOR.

CAPITULO 4

Tratamiento de
los trastornos del sueño

Como cualquier otra enfermedad o trastorno mental, estos
trastornos también tienen un tratamiento y en este
capítulo se describirán los de tipo conductual, ya
que los de tipo farmacológico no les competen a los
psicólogos y mas importante aún es que muchos de
estos trastornos tienen una cura casi por voluntad ya que depende
del nivel de conciencia que las personas tengan de su
afección.

4.1) PREVENCIÓN

4.1.1) Higiene de
sueño

En esta parte se nombraran algunas de las
medidas higiénicas potencialmente favorecedoras de un
sueño normal, hay muchos autores que realizan aportes
sobre este tema pero el aporte mas completo es el que nos brinda
Chamorro (2004)

  • 1. Regulación y refuerzo
    del ritmo circadiano del sueño – vigilia:

  • a. Mantener de forma regular un
    horario fijo para acostarse y levantarse, incluso los fines
    de semana.

  • b. Dormir solo el tiempo
    indispensable para estar despejado y descansado al día
    siguiente.

  • c. Evitar, o al menos minimizar,
    el tiempo de siesta o los periodos de sueño durante el
    día.

  • 2. Adecuado ambiente externo e
    interno:

  • a. Realizar todos los días
    ejercicio moderado durante el día y nunca antes de
    acostarse.

  • b. Evitar estimulación
    mental antes de ir a dormir. Si se puede, realizar ejercicios
    de relajación o actividades tranquilas. No usar la
    cama para trabajar, leer o ver la
    televisión.

  • c. Puede ser útil antes de
    acostarse tomar un baño caliente y y/o una
    infusión templada de leche, tibia o
    valeriana.

  • d. Evitar cenas copiosas antes de
    ir a dormir (cenar al menos 2 horas antes).

  • e. Evitar el exceso de bebida a
    última hora. Orinar antes de acostarse.

  • f. Dormitorio confortable:
    ventilación, temperatura fresca, atenuar o apagar las
    luces y minimizar el ruido.

  • g. Uso de ropa cómoda para
    dormir, retirando posibles accesorios molestos (reloj,
    pendientes).

  • h. Si no se concilia el
    sueño o se desvela, levantarse y realizar alguna
    actividad tranquila o que le entretenga hasta sentir
    sueño de nuevo.

  • 3. Evitar factores estimulantes
    antes de ir a dormir (café, colas, te, nicotina,
    alcohol, etc.).

4.1.2) Medidas prudentes para cualquier
persona

Estos hechos al igual que los de higiene de
sueño deben ser realizados o aunque sea tomados en cuenta
por todos ya que van a ayudar a tener un sueño más
placentero y conciliador, además influirán para
tener un ritmo de vida mas saludable. Las siguientes normas son
descritas por Herrán y Navarro (2007)

  • a. Favorecer mejores
    hábitos de sueño

  • b. Aumentar la conciencia y el
    conocimiento del impacto de los hábitos de salud y los
    factores del entorno en el sueño

  • c. Protegerse contra factores
    potencialmente perjudiciales para el sueño: estilo de
    vida y el entorno, incluyendo la alimentación, el
    ejercicio físico, el uso de alcohol, de sustancias
    alucinógenas; además del ruido, la luz y la
    temperatura.

  • d. Romper con la creencia "yo soy
    inmune a estos factores"

4.2) ANTES DEL
TRATAMIENTO

Cuando una persona desea tener un
sueño mas placentero y a causa de algunos trastornos del
mismo no lo logra es prudente realizar algún tipo de
tratamiento pero antes de eso es necesario realizar una serie de
actividades que acompañan al tratamiento de los trastornos
del sueño y que ayudan a identificar como también
contrarrestar estos.

5.2.1) Historia clínica y
revisión física

Chamorro (2004) divide la
preparación del tratamiento en las fases que se hacen
notorias en el título y nos dice que la historia
clínica es el conocimiento global de todos los datos
clínicos del paciente para poder determinar mas adelante
un grave trastorno del sueño o un simple problema de
sueño. En especial se toma en cuenta a las afecciones del
aparato locomotor, problemas respiratorios, insuficiencia
cardiaca con intolerancia al decúbito, trastornos
miccionales, digestivos o endocrinos, cefaleas migrañosas,
etc., para así tomar en cuenta los que causarían un
trastornos del sueño.

En la historia clínica se
contemplaran los siguientes aspectos:

  • a. Características
    específicas de su sueño: El paciente nos
    explicara desde cuando duerme mal, las rutinas que sigue
    cuando se prepara para ir a dormir y cómo
    dormiría durante la infancia y adolescencia, si se
    trata de un adulto.

  • b. Tiempo de inicio: Se refiere al
    tiempo que tarda el paciente desde que va a dormir hasta que
    se duerme hay personas se demoran entre 2 y 3 horas y que, a
    medida que pasa el tiempo, se van poniendo cada vez
    más nerviosas.

  • c. Duración: Averiguar las
    horas aproximadas que duerme al día. No todas las
    personas necesitan dormir las mismas horas.

  • d. Frecuencia: Se refiere a
    cuantas veces sufre el problema: diariamente, ocasionalmente,
    a intermitentemente o semanalmente.

  • e. Factores que agravian o mejoran
    la sintomatología: preguntaremos sobre las situaciones
    que le provocan un mal descanso, ya sea por temas laborales,
    sociales o familiares. También las medidas y
    tratamientos que toma o ha tomado para mejorar su
    situación, si toma hipnóticos u otros
    fármacos.

  • f. Síntomas durante el
    día: hay que averiguar si el paciente se siente
    cansado, si esta mas irritable, si ha disminuido la capacidad
    de concentración, hay un malestar general o se
    presentan otros síntomas como dolores de cabeza u
    otras molestias. En este apartado hay que preguntar todo
    aquello que pueda ser consecuencia de un mal
    dormir.

  • g. Medidas adoptadas frente al
    problema: Qué es lo que hace o ha hecho para poder
    dormir. Si practica ejercicio o hace alguna actividad
    relajante antes de acostarse, como se vive la
    situación.

  • h. Tratamientos utilizados: Desde
    la utilización de remedios caseros hasta la toma de
    psicofármacos.

  • i. Hábitos y rutinas
    relacionadas con su sueño: Por este motivo siempre
    preguntaremos las rutinas y horarios realizados cada
    día, la hora de cenar, la hora de ir a la cama,
    qué hace antes de apagar la luz, si ve la TV, lee,
    etc.

  • j. Consumo de fármacos u
    otras sustancias: hay algunos medicamentos que pueden
    ocasionar insomnio. Por este motivo es importante conocer si
    la persona está sometida a algún tipo de
    tratamiento farmacológico. Hay también que
    registrar el consumo de otras sustancias. La cafeína y
    las gaseosas tienen un efecto estimulante. La ingesta de
    alcohol, pese a su efecto de depresor del sistema nervioso
    central, puede provocar un sueño superficial y de mala
    calidad. Lo mismo ocurre con el tabaco.

  • k. Antecedentes personales
    médicos y psiquiátricos: Es importante conocer
    todas las enfermedades que ha tenido y saber si ha padecido
    algún trastorno psiquiátrico.

  • l. Antecedentes familiares:
    Averiguaremos si alguna persona de la familia ha tenido
    dificultades para dormir.

En la revisión física se
recogerán aquellos signos de enfermedades que interfieran
en el caso. Los datos mas importantes son la frecuencia cardiaca,
frecuencia respiratoria, pero, talla, exploración
cardiopulmonar, ventilación nasal, macroglosia,
exploración de la úvula, paladar blando,
etc.

4.2.2) Determinación de la
trayectoria clínica

El paciente deberá responder los
siguientes puntos con total honestidad ya que ellos
definirán de manera mas concreta el curso de su trastorno
(Chamorro, 2004).

  • 1. Edad de inicio del problema y
    posibles factores desencadenantes (médicos, laborales,
    familiares, etc.).

  • 2. Frecuencia del problema:
    diario, intermitentemente. Hay que analizar el patrón
    de sueño de fines de semana.

  • 3. Repercusiones diurnas:
    somnolencia, fatiga, irritabilidad, torpeza mental,
    dificultades de concentración, fallos de memoria,
    cefaleas, problemas en el desempeño de tareas
    habituales, etc.

  • 4. Características del
    dormitorio (ruido, temperatura, luz).

  • 5. Hábitos de sueño
    (diurnos y nocturnos).

  • 6. Adaptación al
    problema.

  • 7. Tratamientos anteriores y
    respuesta a estos.

  • 8. Enfermedades medicas
    asociadas.

4.2.3) Evaluación de los patrones
del sueño – vigilia

La evaluación se puede realizar
gracias a un diario de sueño que el mismo paciente puede
realizar (no recomendado para pacientes con trastornos obsesivos
ya que reforzaran su excesiva atención hacia su problema),
no obstante son necesarias las pautas que un psicólogo
pueda dar para que el resultado sea el deseado, este diario debe
tener un periodo de 2 semanas y debe incluir los patrones de
sueño de las 24 horas (el dormir nocturno y las siestas de
la tarde o mañana), los puntos a tomar en cuenta son los
siguientes:

  • 1. Momento del día en que
    intento dormirse.

  • 2. Momento en que se
    levantó de la cama, dando por finalizado el periodo de
    sueño.

  • 3. Como se despertó
    (espontáneamente, despertador, urgencia
    miccional).

  • 4. Periodos de sueño
    durante las 24 h. del día (tanto periodos nocturnos
    como diurnos).

  • 5. Tiempo total del sueño y
    calidad del mismo. Grado de fatiga diurna.

  • 6. Sustancias estimulantes
    consumidas al día (cafeína, colas, te),
    cantidad y hora del ultimo consumo.

  • 7. Hábitos de
    alimentación durante el día y al cena
    (abundante, escasa, a la misma hora), ejercicio físico
    (tipo, frecuencia, horario).

  • 8. Uso de cualquier medida para
    inducir el sueño (fármacos, alcohol, productos
    de herbolario).

4.3) TRATAMIENTOS

En este subtitulo se darán a conocer
algunos de los tratamientos para contrarrestar, sobrellevar o
eliminar los trastornos del sueño. No están
incluido los tratamientos con fármacos ya que pretendo dar
una visión mas biológica y de voluntad para acabar
con los trastornos del sueño. En muchos casos es necesario
el uso de fármacos, casi imprescindibles pero opte por no
nombrarlos.

Algunos de los trastornos del sueño
no tienen que ver con factores meramente clínicos sino son
parte de la conducta de la persona, esto quiere decir que puede
ser moldeable, como también tiene que ver con el ambiente
en el cual la persona duerme (eso también puede ser
cambiado), estos factores como ya dije anteriormente no ameritan
el uso de fármacos ya que por medio del paciente se pueden
ir mejorando poco a poco dependiendo de la conciencia y las ganas
que tenga para curarse, en algunos casos las personas prefieren
los fármacos por qué no desea cambiar sus
hábitos de vida, sin embargo, esto es mucho mas
fácil y además menos costosos.

Los tratamientos para los trastornos del
sueño están divididos según Buela-Casal y
Sierra (2004) en 4 grupos que facilitan la separación y
especificación de cada distinto trastorno del sueño
a continuación se explicara cada uno:

4.3.1) Tratamiento de las alteraciones
del sueño relacionadas con el ritmo circadiano
(¿Cuánto duerme?)

En la mayoría de personas y como
debería de ser de manera normal el tiempo para estar en
estado de vigilia es el de día mientras que el estado de
dormir debe ser realizado en la noche, el sueño
debería ser limitado a solo dormir en la noche pero
existen algunos casos de pacientes que sufren de narcolepsia,
apnea u otro trastorno de sueño que cause somnolencia
(menos el insomnio) que necesariamente se debe dormir una siesta
ya que permite tener un mayor nivel de activación durante
el resto del día.

Existen casos de personas que sufren de
apnea (que es relacionada con la obesidad) en los cuales la
salida mas "fácil" es la extirpación de las
amígdalas o en otros casos un poco mas extremo es el uso
de cirugías, pero este trastorno puede ser tratado con un
simple habito de dormir de manera lateral y de esas manera se
disminuirán los ataques de apnea en comparación con
la postura supina. Existen también otros aparatos pero al
momento de ser colocados y mantenidos en posición pueden
ser muy incomodos.

Las dificultades para quedarse dormido
pueden reducirse con 3 simples técnicas
conductuales:

  • a. Relajación:

Este ejercicio consiste en aprender a
tensar y relajar todas las partes del cuerpo para lograr una
relajación general. Primero se debe iniciar con las partes
mas fáciles de relajar como son las manos, los brazos, las
piernas, y proseguir luego con las partes mas complicadas que
podrían tardar un poco en ser aprendidas tales como la
frente o las rodillas. La relajación debe ser parte de una
rutina diaria la cual debe ser practicada durante una semana como
mínimo para que mas adelante no sea tan dificultosa. Un
ejemplo de relajación seria el siguiente:

"Acomodarse de la manera mas cómoda
posible en la cama, cerrar los ojos y hacer un puño con la
mano, apretar los dedos fuertemente durante unos 10 segundos y
luego soltarse (darse cuenta del cambio de tensión hacia
relajación) de esa manera ir relajando todas las partes
del cuerpo"

Otro procedimiento usado es la llamada
respiración abdominal que consiste en respirar con el
abdomen mas no con el torso y a la vez sentir como el aire
caliente sale de la boca lográndolo dirigir hacia los
labios o la nariz, luego aspirar con la poca casi cerrada y
sentir como el aire frio ingresa por la boca.

  • b. Intervenciones cognitivas
    dirigidas a evitar el efecto negativo de los pensamientos que
    pueden interferir en el sueño:

El paciente debe saber identificar los
pensamientos que obstruyen al sueño y desarrollar otros
pensamientos alternativos menos irracionales con el fin de
favorecer el sueño.

Otro procedimiento favorable es aprender a
desarrollar imágenes agradables y relajantes que faciliten
el sueño, dejándose llevar por la
imaginación o simplemente una semejanza con la realidad
que sea agradable por el paciente, él no debe limitarse a
observar la escena, sino que debe tratar de vivirla, o sea tratar
de sentir todos los estímulos creados durante la escena
creada.

Además un procedimiento muy eficaz
es la intención paradójica que consiste en que un
psicólogo pregunte al paciente cuales son las expectativas
que tiene sobre este tratamiento y conversar con él. Luego
se debe pedir al paciente que trate de estar despierto todo el
tiempo posible y el paciente al intentar estar despierto
eliminara sus preocupaciones intrusivas, facilitando la
aparición del sueño.

  • c. Arreglo de estilo de
    vida:

Este tratamiento mas que todo se basa en la
utilización y aplicación de la hábitos de
higiene de sueño ya mencionados anteriormente. La
cronoterapia es también un tratamiento favorable y
consiste en sincronizar el deseo o ganas de dormir con las horas
programadas para ir a acostarse. Se opta por retrasar la hora de
dormir poco a poco. Al inicio se retrasa esta hora ya fijada en
tres horas, luego al día siguiente una hora menos hasta
que el paciente se valla acomodando a la hora fijada sin tanto
problema y de esa manera estar ajustado al horario
estándar del ambiente en el que se vive.

4.3.2) Tratamiento de las alteraciones
del sueño relacionadas con la estructura del ciclo
sueño – vigilia (¿Cómo
duerme?)

Más importante que un tratamiento
propiamente dicho es la cantidad de información que puede
tener el paciente sobre su trastorno y como tratarlo ya que los
tratamientos conductuales no son efectivos si antes el paciente
no ha tomado conciencia sobre su estado, también es
importante darle a conocer que las horas de sueño
fluctúan de sujeto a sujeto y no necesariamente deben ser
siete u ocho.

El paciente para poder conciliar un
sueño de manera correcta deberá antes haber tenido
un gasto de energía, y en algunos casos no se da de manera
correcta ya que es paciente es algo así como un sedentario
y se limita a realizar sus acciones diarias con un poco
movimiento, por ende un gasto de energía muy pobre. Esto
no afecta a las acciones pero al momento de tratar de conciliar
el sueño el paciente no podrá lograrlo ya que el
cuerpo aún no se siente lo suficientemente
cansado.

Los terrores nocturnos tan comunes en los
niños e infantes suelen desaparecer cuando se regulan los
horarios de dormir y de levantarse, y de esta manera poder
asegurar que el niño descanse lo suficiente y necesario.
En este trastorno como también las pesadillas pueden ser
controladas normalizando los problemas escolares, problemas con
los padres o con los hermanos, ya que estos problemas crean una
preocupación para el niño y llena su cabeza de
"malos pensamientos". En otros casos se le enseña al
niño a lidiar con sus pesadillas y de esta manera lograr
hacer perder el carácter atemorizante de la pesadilla y
convertirla en un sueño común y corriente que no
causará estragos en el tiempo de sueño ni su
fragmentación.

En los sonámbulos mas que todo se
deben crear las precauciones pertinentes que disminuirán
los riesgos de daño en el paciente, se le debe hacer
dormir en una cama normal (no camarote), si es posible en el
primer piso, que no hayan objetos peligrosos a la mano, cerrar
con llave las puertas, etc.

En el caso de un paciente con somniloquia
y/o bruxismo se recomienda reproducir un sonido aversivo en el
momento que el trastorno se ejecute y poco a poco ira
desapareciendo hasta que ya no se realice.

En estos casos de desinformación es
indispensable decirle al paciente o familiares que algunos de
estos males son benignos y que otros desaparecerán
conforme vallan pasando el tiempo y no ameritan una gran
preocupación mas si es importante tomar conciencia de lo
que se padece y de esa manera se reducirá la ansiedad que
crean estos trastornos, como dije anteriormente la
información es muy importante y de manera sola puede
considerarse un tipo de medida terapéutica.

4.3.3) Tratamiento de las alteraciones
del sueño relacionadas con el ambiente
(¿Dónde duerme?)

Los factores ambientales influyen en gran
cantidad en el sueño ya que deben ser los propicios tales
como dormir en un colchón confortable, la oscuridad o
iluminación tenue en la habitación, evitar que
entre la luz solar al amanecer ya que puede causar un
pequeño disgusto y hasta un dolor de cabeza matutino,
tener una temperatura mayor a 13 °C y menor que 35 °C,
etc.

Existe una técnica para controlar el
estímulo de sueño propuesta por Caballo y
Buela-Casal (1990) que consiste en lo siguiente:

  • 1. Acostarse solo cuando se tiene
    sueño.

  • 2. No utilizar la cama para
    actividades distintas al dormir. No comer, leer o ver la
    televisión en el dormitorio, a no ser que estas dos
    últimas conductas favorezcan el sueño. Al ir a
    la cama apagar las luces con la intención de dormirse
    en seguida.

  • 3. Establecer una serie de
    hábitos que indiquen la proximidad de la hora de
    dormir: ver la televisión, lavarse los dientes, etc.;
    hacer actividades cada noche, siempre en el mismo
    orden.

  • 4. Si el niño es incapaz de
    dormir (normalmente en diez minutos), deben levantarse e irse
    a otra habitación, quedándose allí tanto
    tiempo como (haciendo si quiere alguna actividad tranquila
    hasta que empiece a dormirse); a continuación
    volverá al dormitorio para disponerse a
    dormir.

  • 5. Si el niño sigue sin
    poder dormirse, se debe repetir el paso anterior tantas veces
    como sea necesario a lo largo de la noche.

  • 6. No dormir la siesta y
    levantarse a la misma hora cada mañana,
    independientemente del tiempo que se haya dormido.

El último paso es el mas crucial y
en algunos casos el único necesario ya que regularizando
la hora de sueño y saberla con exactitud es
suficiente.

4.3.4) Tratamiento de las alteraciones
del sueño relacionadas con conductas facilitadoras o
inhibidoras del sueño (¿Qué hace para
dormir?)

Casi todas las actividades que un sujeto
realiza durante el estado de vigilia influyen en el sueño
(algunas en poca cantidad otras en mayor cantidad), se deben
eliminar las conductas que causen estragos en el tiempo de
sueño o su conciliación y de esa manera potenciar
el sueño.

Otra manera de causar una dificultad al
momento de dormir es la ansiedad ante la actuación (se
refiere a cuando se debe realizar un acto importante), cuando se
intenta quedar dormido con mucho énfasis la persona puede
sentirse frustrada e incrementar aún más su
insomnio llevándolo a un círculo vicioso. La manera
de contrarrestar esta conducta inhibidora del sueño es
usando la técnica de la intención paradójica
ya explicada anteriormente.

Conclusiones

  • 1. El estudio del sueño a
    lo largo de los años ha reincidido en dos aspectos
    "¿Por qué se da?" y "¿para que se da?",
    pero el sueño es un espacio de tiempo en el cual una
    persona recupera todas sus energías que ha gastado
    durante el día y lo único que decrece esa
    recuperación de energía son los trastornos del
    sueño, estos pueden ser obviados o minimizados si la
    persona desde antes que aparezcan llevan unos hábitos
    de sueño correctos.

  • 2. Existe una línea muy
    delgada entre problemas del sueño y trastornos del
    sueño que muchas veces es cruzada, la primera hace
    referencia a una insatisfacción en el momento de
    dormir y no necesariamente es un trastorno del sueño,
    mientras que la segunda hacer referencia a una
    alteración real de las funciones del sueño, que
    lo niega o lo incrementa de manera exagerada. Solo la segunda
    debe ser tratada pero lamentablemente ambas lo son ya que no
    s una diferencia muy notoria.

  • 3. El insomnio es el trastorno del
    sueño mas conocido y por ende el mas tratado, el cual
    en algún momento ha padecido la mayoría de
    personas y la manera de sobrellevarlo es utilizando
    fármacos, pero esta salida en algunos casos es
    innecesaria ya que no solo el insomnio sino otras parasomnias
    y/o disomnias pueden ser tratadas por medio de procesos
    conductuales que se ejecutan en base a la voluntad de la
    persona que los sufre.

  • 4. Algunas parasomnias tales como
    los terrores del sueño o las pesadillas son
    característicos de los infantes y los niños, se
    dan por la misma edad y conllevan mas que un problema para
    los padres que para los que los sufren que son los
    niños ya que la preocupación que causa es casi
    desesperante para los padres y tratan de buscar un medio de
    solución a una edad muy temprana, es preferible
    enfrentar las pesadillas y si estos trastornos
    continúan por una cantidad de tiempo considerable
    recién es asequible buscar ayuda de un
    profesional.

  • 5. Los trastornos del sueño
    están inducidos e inducen a otras enfermedades
    mentales y en la mayoría de los casos las personas le
    toman mayor importancia a las enfermedades mentales ya que
    según ellos son las que crean mas problemas, pero el
    tratamiento debería ser igual para ambos
    casos.

  • 6. La depresión es el
    trastorno del estado de ánimo mas propenso a crear un
    trastorno del sueño ya que los paciente que sufren de
    depresión se sienten atormentados por una tristeza
    enorme que altera su ciclo de sueño, el trastorno mas
    común es la hipersomia ya que la persona "prefiere"
    dormir antes que estar despierto y seguir en el estado que
    sigue, pero este intento por obligarse a conciliar el
    sueño puede crear una ansiedad por dormir y al no
    poder lograrlo se caerá en el insomnio, así que
    en general no se debe intentar dormir sino dejarse llevar y
    solo intentar dormir cuando es necesario.

Recomendaciones

  • 1. Es necesaria la
    investigación de los trastornos del sueño en el
    Perú ya que la información que hay sobre este
    tema es casi completamente internacional, y la poca
    investigación que proviene del Perú es de blogs
    que no tiene una alta confiabilidad. Mediante las
    próximas investigaciones la población
    tendrá un conocimiento mas alto sobre los trastornos
    del sueño para que no dejen de lado esta enfermedad o
    en su defecto usar la clásica diazepam.

  • 2. Una buena población para
    realizar estos estudios serían los jóvenes
    universitarios ya que ellos quizá sufran de trastornos
    del sueño influidos por la necesidad de estar
    despiertos para realizar un trabajo, prepararse para una
    exposición, estudiar para un examen, etc.; mediante la
    realización de tablas y figuras se tendrán
    cifras que nos servirán de guía y quizá
    si estas cifras son altas las personas reflexiones sobres sus
    hábitos de sueño.

  • 3. Las investigaciones que inician
    con esta monografía deberían avocarse a
    investigar los tipos de trastornos y en qué casos se
    desarrollan con más frecuencia, para de esa manera
    poder crear otro tipo de clasificación y no seguir
    abundando en temas como información sobre la historia
    del sueño, definición, fases del sueño,
    etc.

  • 4. Se debería poner
    énfasis también en el estudio de las personas
    que sufren de algunas parasomnias tales como la enuresis, los
    terrores nocturnos, las pesadillas. Pero que sean adultos ya
    que las parasomnias previamente dichas casi siempre afectan a
    los niños y no hay mucha información sobre
    qué es lo que pasa o se hace cuando los afectados son
    adultos.

  • 5. Debería haber una
    organización peruana especializada en los trastornos
    de sueño, puede ser una clínica o un hospital,
    pero que este accesible a todas las personas y que brinden un
    servicio mas que de fármacos de tratamientos
    conductuales y si no surgen efecto o no son lo suficiente
    efectivos recién se deben recetar estos
    fármacos.

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Autor:

Alexis Giovanny Cisneros
Olea

Lima, Perú

2011

Partes: 1, 2
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