Evolución y Neurociencia: Neuropsicología de las Festividades de Fin de Año

"Los animales tienen las siguientes
ventajas sobre el hombre: nunca escuchan las campanadas del
reloj, se mueren sin tener una idea de la muerte, no tienen
teólogos para instruirlos, sus últimos momentos no
se ven perturbados por ceremonias no deseadas y desagradables,
los funerales no les cuestan nada, y ningún abogado hace
demandas por los bienes que dejaron". Voltaire
(1694-1778).

Hemos sobrevivido y superado, de
algún modo, la celebración cuasi pagana del
nacimiento, la breve vida, y la resurrección del dios de
los cristianos.

Festival de las luces

Dios encarnado como el Verbo, y
Mesías prometido, que, naciendo en un pesebre,
viviría una vida escueta, se consolidaría como
hombre delgado, viajaría en un burro, predicó la
tolerancia y el perdón, y moriría crucificado —
en abandono de sus fieles apóstoles pero, rodeado, de
valientes mujeres.

Oremos, y reflexionemos acerca de estos
misterios, como nos exhortaran hacer los curas a cuyas escuelas,
de niño, asistiera.

Reflexionar es arte y fantasía
resultado de la acción de nuestras neuronas vibrantes.
Neuronas que, sin duda, anidan mayormente en las cortezas
prefrontales. Áreas involucradas con las actividades del
juicio, el discernimiento y la abstracción.

De ello se colige que, cavilar es actividad
neurotransmisora, como lo es todo lo que del cerebro procede, ya
que éste, vía sus funciones, regula la totalidad de
nuestros dinamismos vitales.

El cerebro, se deduce, que controla lo que
sentimos, hacemos y pensamos durante nuestras existencias; como
asimismo monitorea y coordina cualesquiera que sean las
oportunidades para regocijo que nos incumben.

Reflexión
incidental

Si es cierto que la luz engorda y los
apagones contribuyen a la obesidad, es asimismo axiomático
que las festividades de fin de año, a muchos dilatan el
perímetro de la circunferencia abdominal.

Las festividades, entonces, no son
actividades banales, ya que acarrean sus consecuencias finales:
gastos innecesarios y el cúmulo de peso.

Jano

De acuerdo a las estadísticas, la
mayoría de los que participan en estas celebraciones —
sean cristianos o no — en nuestro mundo "civilizado", es una
persona gorda, o alguien que va camino a la
obesidad…

Lo que es congruente con la globesidad
epidémica.

Veamos una posible razón
contribuyente al fenómeno aludido. La que, en este caso,
será ofrecida en el mayor de los espíritus
ecuménicos.

En esta época del año
celebramos las pascuas, Hannukah y la epifanía, que, de
algún modo, siempre coinciden entre los meses de diciembre
y enero.

Citas para la
ocasión

Ego edo nimium, hinc, ego adepto
pinguis (como demasiado, por lo tanto engordo).

Cogito, ergo sum (Descartes)
¿o es? Edo, ergo sum (como, luego
soy).

Descartes estaba correcto, aunque Damasio
difiera, en su libro excepcional: Descartes" Error: Emotion,
Reason, and the Human Brain (Para leer más:
http://www.monografias.com/trabajos88/paradigmas-sociobiologia-consiliencia/paradigmas-sociobiologia-consiliencia).

Paulatinamente, y en medio de celebraciones
opíparas, arrastramos nuestras ensanchadas
anatomías, llegando al mes de enero, el mes consagrado en
la mitología romana al Dios Jano.

Jano

Figura imponente, que, sin ser
político, ostenta la doble faz. Una que mira hacia el
pasado en el levante, y otra que apunta hacia el futuro en el
poniente. Para Jano no hay presente; el presente es apenas el
instante fugaz que divide lo que se fue de lo que vendrá,
sin apenas reparar en ninguno de los dos.

En el panteón romano (ya que no
existiera, como deidad, en el de los griegos), Jano era asimismo
conocido como el dios de las puertas, el dios de las entradas, de
los principios; el dios que aseguraba que las cosas
comenzarían bien y que bien terminarían. Por ello,
y como corolario, en todo hogar romano, las primeras preces del
día se ofrendaban a su nombre.

Eva por Giuseppe Arcimboldo
(1527-1593)

Como dios de los orígenes, el mes de
enero, donde el año comienza, se dedicaba a su culto,
festejándose especialmente en el día de Año
Nuevo. También se invocaba su presencia al comienzo de las
guerras, que mientras éstas duraran, determinaban que las
puertas de su templo en el Foro se mantuvieran
desplegadas.

Cuando Roma estaba en paz, las entradas del
templo, permanecían cerradas.

Para enero, el mes, que a Jano recuerda, el
presente es efímero: Ya que una cara mira hacia el
año transcurrido, y la otra cara escudriña lo que
queda por venir. Es ésta la dualidad que parece imprimirse
igualmente en los seres humanos, tomando a veces la forma de una
incertidumbre que impide reconocer claramente el derrotero a
seguir, porque el presente se omite, como hacen tantas personas
ofuscadas en su viaje por la vida.

"Uno de
los principios más aceptados por escolares que
se dedican al entendimiento de la psicopatología del ser
humano, es el de la Incertidumbre. Principio el cual, debido a
sus carencias propias de manifestaciones claras, se reconoce por
el provoque de ansiedad y de síntomas de
angustia.

"Este "Principio de la Incertidumbre"
opera de un modo dinámico, cuyas líneas
de desarrollo han sido bien estudiadas.

"Del modo como procede es el siguiente:
Las falta de signos concretos y
de señales claras en cualquier situación
humana, producen ansiedades que derivan del sentimiento
angustiante de no discernirse con certeza cuáles son los
chances de salir airoso cuando se arrostra la situación
confrontada". (Para leer más:
http://www.monografias.com/trabajos89/angustia-senal-y-comunion-astros/angustia-senal-y-comunion-astros#laincertia

¿El "Nacimiento de un
Dios"?

Para la teoría
psicoanalítica, todo empiece es símbolo de nacer y
vida, y toda interrupción, desenlace, o separación,
simboliza morir. Ambas oportunidades nos dan pausa para sentir
alegría o tristeza.

Pausemos y reflexionemos acerca de lo
antedicho…

Las festividades de diciembre, en el mundo
de la cristiandad, transcurren en medio de una algarabía
más pagana que religiosa, augurando un nacimiento,
proyectando una epifanía y concluyendo en la partida y
resurrección de una figura histórica de importancia
universal.

Simbólicamente, las celebraciones
contienen en sí, el alfa y omega — el principio y el
fin, la vida y la muerte — por eso son tan tristemente alegres
o tan alegremente tristes.

Siguiendo la tradición
judeocristiana, las festividades, por ser de familia, toman en
cuenta la felicidad de los niños, a quienes se les hacen
ofrendas en forma de presentes, mientras que sus mayores (por
nunca dejar de ser niños) se hacen regalos entre
ellos.

Don Quijote, un meme
inolvidable

A pesar de su apuntalamiento religioso, la
ocasión, a menudo adquiere un aire apasionado, porque es,
ambas: oportunidad para sentirnos afortunados y para sumergirnos
en el placer epicúreo, contagioso y mundano que a todos
infecta.

Pero, ¿es tanta y tan enorme la
felicidad que se percibe?

No absolutamente, porque siempre existen
memorias tristes que nos recuerdan, como testigos del pasado, a
quienes ya nunca volveremos a ver o a tocar, y que nos presentan
el enigma futuro de quienes aquí no estarán el
próximo día de Jano.

Para evitar el dolor, algunos seres
humanos, fingen regocijo y placer; mientras que otros, para no
sentirlo, se deleitan en infligir castigo y sufrimiento a quienes
pueden, saldando viejos entuertos.

Es como si dijesen: "ya que no soy feliz,
que nadie tampoco lo sea".

(Un ejemplo patético de lo
último nos lo provee el fenecido dictador coreano, Kim
Jong-Il, quien días antes de sucumbir a un episodio
cardiovascular, amenazó a la Corea del Sur con un ataque
militar por haber erigido un árbol de navidad cerca de la
línea militarizada que separa las dos
naciones.)

Muchos hijos de padres en conflicto son
víctimas de esta dualidad afectiva perversa. Son ellos,
los hijos, quienes son las víctimas "felices" de las
festividades, porque se les ofrecen cosas materiales, mientras
que se les niega amor y seguridad, cariño y estabilidad.
Así aprenden temprano a temer la presencia de Jano en el
portón de sus niñeces.

Una paciente de Rhode Island, me confiaba:
"Las festividades son muy tristes".

Vesti la
giubba…

Las Pascuas y el
Año Nuevo, como épocas comerciales y de
resoluciones quebradas

Como precursor de cosas por venir en un
año recién estrenado, muchas personas hacen
resoluciones de cambiar sus vidas y enmendar sus
propósitos, esperando que si solamente formulen
esa resolución, el éxito será
garantizado y el futuro será más
gratificador.

Nada más remoto de la
realidad.

El homo fraudatoris (traduzca, el
comerciante venal) que siempre nos acecha para desposeernos en
cualquier oportunidad fácil, nos seduce a que compremos
sus especies para garantizar el éxito de lo que
proponemos: perder de peso, dejar de fumar, abandonar relaciones
destructivas, mejorar en nuestros fallos percibidos, pagar las
tarjetas — en otras palabras, saludar la cara de Jano que vela
hacia el oeste, con un propósito firme y positivo —
exactamente lo que todos hicieran a la par con nosotros ese
año que pasó (y en todos los años)
que hemos vivido.

Pero la dualidad de Jano tiene una parte
práctica y otra negativa — una para imitarla, la otra
para desecharla.

Negativa, es lo conflictivo de esta
dualidad, la incertidumbre, el no saber qué hacer ni a
qué fuerzas recurrir.

Lo bueno de la duplicación es la
posibilidad de marchar hacia delante cultivando la experiencia de
la historia recién vivida y, tal vez — si fuimos
afortunados — asimilada.

El dividendo de
aprender de nuestros errores

Nuestra historia personal es un seguro de
vida que nos ampara en el sendero de nuestras existencias. Desde
donde proviene, como corolario, toda relación
verdaderamente terapéutica que hayamos vivido,
como hemos indicado en lecciones previas.

Castillos en el aire

Esta anamnesis, siempre, asimilando lo
mejor de las cosas que nos suceden, à la Jano,
nos ofrece la siguiente enseñanza: La de no cifrar
nuestras esperanzas tan sólo en el presente, pues en
éste nada es perdurable; ya que se afirma en la fragilidad
de un minuto fugaz que pasa y vuela.

Para aspirar al cambio hay que estar dotado
de buen fondo de ideales conque conformar las nuevas
imágenes. Ideas, que el pasado aporta con su amplio
repertorio de experiencias, vivencias instructivas y promesas
abandonadas.

Para lograr nuestros propósitos, es
necesario saber qué es lo que se persigue y hasta
dónde se aspira llegar. Si el derrotero se tiene claro, el
futuro sonríe a quienes ansían encontrarlo con una
finalidad certera.

Y — paradojas de Jano — principios y
fines se advierten muy semejantes en cuanto nace en el ser humano
la necesidad de lo bueno y lo absoluto y el rechazo de lo malo.
Cuando sabemos dispensar el amor hacia el prójimo, como
nos exhortaba durante su vida, el Mesías quien en
diciembre se dice que naciera.

Analicemos la
génesis del culto de Jano

Jano, dos rostros que no son faces de
indiferencia. Dos rostros que no son ignorancia de fines y
principios. Dos rostros que no son ambigüedades. Dos rostros
que son dos posibilidades y no la carencia de alguna.
Dos rostros, dos rastros y dos retos tiene enero, y como enero,
la vida entera: la suma de todo lo hecho, y la responsabilidad de
todo lo que aun resta por lograr.

Dualidades que nos gobiernan

Ya sabemos que estamos dotados de dos
hemisferios cerebrales constituidos por una plétora de
neuronas que se comunican entre ellas por la magia de las
funciones de los neurotransmisores.

Ebenezer Scrooge

Ingénitamente el cerebro ha sido
provisto con sistemas de seguridad redundantes, y a toda prueba,
para prevenir el peligro de un fallo estructural.

Nuestros cerebros — órganos que
son capaces de reflexionar acerca de sí mismos — nos han
conferido la capacidad del uso de la imaginación y de la
fantasía para construir castillos en el aire y para
ensayar soluciones a nuestros problemas, a los cuales, el trabajo
y la perseverancia constante les proporcionarán desenlaces
benignos.

Dotados con esos atributos, podemos
deliberar y analizar las tribulaciones y los regocijos
encontrados en los senderos transitados, durante la jornada
concluida, mientras nos preparamos para dar comienzo a una nueva
trayectoria a emprender.

¿Una nueva vida y nuevas
resoluciones? O, quizás viejas resoluciones
refundidas…

Prosiguiendo en espíritu de
optimismo

En esta lección omitiremos la
esperada y acostumbrada revisión de la lista de nuestras
resoluciones nunca realizadas, y en su lugar prestaremos
atención al origen dinámico de conflictos que nunca
deseamos encarar, por miedo a nosotros mismos como, sucediera al
famoso carácter Ebenezer Scrooge de Dickens.

Dar y
recibir

Dar y recibir con desprendimiento, es un
comportamiento animal de origen evolutivo cuyos fines adaptivos
son el propósito de ganar aceptación por un miembro
del sexo opuesto para fines de la perpetuación de la
especie en cuestión.

La adoración de los Reyes
Magos por Correggio (1494-1534)

Lo que no es enteramente el caso en nuestro
género. Leamos:

"Tibidabo: el significado de dar y de
recibir en las navidades, desde una perspectiva
funcional…

"Decía Séneca que el
mundo se compone de los que dan y los que reciben. Y que
quizá los que reciben coman mejor, pero los que dan
duermen mejor.

"Montjuic, punto más alto que
domina la expansión de la ciudad de Barcelona. En ese
lugar, la leyenda nos cuenta, Satanás dice a Jesucristo:
"… ex dixit illi haec tibi
omnia dabo si cadens adoraveris me" — "Y a Él
le dijo, todas esas cosas te daré, si tú
te postras ante mí y me adoras" (Mateo
4:6).

"Tibidabo, entonces; una
tentación. Hoy un parque de diversiones que
conserva la memoria de esa oferta, olvidada, que
hiciera el demonio.

"La tradición de dar y recibir
no existe de modo exclusivo en el repertorio
de comportamiento de nuestra especie. Muchas otras,
durante el noviazgo, conducen elaborados rituales, vuelos,
piruetas y danzas nupciales. Mientras que otros animales,
como hace el ave de paraíso, construyen enramadas
ornamentadas de modo profuso, las que ofrecen a la hembra que
desean conquistar.

"Entre los simios grandes, a los que
nosotros pertenecemos, las ofrendas de comida y de
favores sexuales, o cepilladas de pelo se intercambian entre
todos para mantener paz y armonía dentro de la tribu."
(Para seguir leyendo:
/trabajos56/tibidabo/tibidabo2).

Haciendo la paz con nuestro
pasado dinámico

"Honraré la Navidad en mi
corazón, y trataré de mantenerla todo el
año. Viviré en el Pasado, el Presente y el Futuro.
Los Espíritus de los tres vivirán dentro de
mí." Cuento de Navidad Charles Dickens
(1812-1870).

Dar y recibir

Dar y recibir son actividades saturadas de
sentimientos y conflictos — los últimos, a veces,
irresueltos — procedentes de un pasado remoto.

Son los utensilios plásticos
con que sirven almuerzo en el avión

Quizás contenido en lo que C G Jung
conceptualizara como el inconsciente colectivo o como lo que
Richard Dawkins concibiera como memes o unidades de
comportamientos estables transmitidos culturalmente.

Estos conflictos son universales y se
evidencian en los libros que son repositorios de nuestras
tradiciones religiosas y culturales.

Los podemos apreciar en muchos diferentes
contextos como lo vemos en la tentación de Eva, la
rivalidad entre hermanos — resultante en la muerte de Abel —
el nacimiento virgen y en este caso, la Adoración de los
Reyes.

Los niños — que en nosotros nunca
mueren — por ser indefensos y polimorfos perversos, son
egoístas y celan con vigilancia redoblada sus pocas
posesiones materiales o emocionales.

Por ello celebran sus cumpleaños con
un regocijo alborozado, deseando que todos a ellos se
aúnen. Sin embargo, titubean, en el momento que se les
pide que compartan sus juguetes o sus golosinas, cuando sus
actitudes posesivas rápidamente emergen con el
rehúso de manera tajante.

"¡No, es mío!" Es el cri
de guerre, que de inmediato resuena.

Esas tendencias egoístas adquieren
proporciones exageradas durante las pascuas, porque para el
niño marcan un tiempo de acopiar más y compartir
menos.

Durante el curso de la madurez, producto
del desarrollo, esto se espera que cambie, pero, para muchos —
especialmente para las personas narcisistas — nunca
cambiará.

El cambista por Quentin
Massys (1466-1529)

El advenimiento
del imperativo sexual

Cuando éste llega, muchos
antropoides hacen ofrendas de comida a las hembras prospectivas,
mientras que algunas aves — como ejemplo paradigmático,
el ave de paraíso — construyen nidos elaborados para
atraer a la hembra prospectiva.

Muchos asimismo hombres lo hacen — pero
lo hacen a medias — no habiendo superado la fase anal retentiva
de sus infancias. (Para leer más:
/trabajos56/solucion-conflictos/solucion-conflictos).

Veamos un ejemplo

Sergio

Era el machismo personificado. Vivía
con sus amigos y para sus amigos.

Coleccionaba aventuras amorosas y se mimaba
a sí mismo al extremo de poseer más de un
automóvil lujoso de modelo reciente.

Cuando se percató de que sus hijos,
ya adolescentes, esperaban sus favores como expresión de
su soporte. Algo extraordinario le sucedió.

Ahora que era su deber compartir con ellos,
se sintió deprimido, por el resentimiento de tener que
satisfacer egos ajenos. Ya que nunca pudo percibir sus
descendientes como prolongaciones de su self o persona,
algo que le fuera difícil de concebir.

Su anamnesis era compatible con
sentimientos de haber sido desfavorecido por una madre distante
que prefería al hijo mayor y a sus hermanas sobre
él.

Se quejaba del tratamiento que recibiera de
su madre de esta manera: "Creo que yo fui el hijo de uno de sus
amantes…"

Permaneció enurético hasta
los once años y encoprético hasta los
seis.

El baño por Mary S
Cassat (1844-1926)

Hizo tres matrimonios, todos fallidos. El
primero de conveniencia, el segundo por obligación, y el
tercero, porque quería dar apariencias de ser elemento de
dignidad y posición social.

De los cinco hijos que procreara dentro de
los inestables matrimonios, el único varón fue el
menor, quien fue diagnosticado como víctima de
Asperger.

Nunca aceptó a este niño,
acusando a la ex esposa de infidelidades, y al hijo de ser
estúpido.

Rehusó la circuncisión para
el vástago, porque él mismo nunca la tuvo, aunque a
su hermano mayor se la hicieron.

Cuando tenía que "desprenderse" de
algo para sus seres cercanos, lo hacía con grandes
titubeos y luego de hacerlo se sentía
melancólico.

Dar a otros era una terrible experiencia.
Aprovecharse de la esplendidez de amigos era un
hábito.

Le encantaba sentarse a la cabecera de
mesas donde se anticipaba que él no pagaría la
cuenta para sentirse importante, ordenando, de manera prepotente,
lo mejor para todos.

Cuando el mozo traía la
adición, Sergio, siempre, se encontraba en el
lavabo.

A los hijos los soportaba a
regañadientes y cuando a ellos les otorgaba algún
presente, compensaba haciéndose uno mayor a sí
mismo. (Para encontrar una serie de artículos acerca de
este carácter:
/trabajos74/antisocial-psicopata-sociopata/antisocial-psicopata-sociopata).

Para un guía neurocientífica
acerca de los regalos:
http://brainblogger.com/2011/12/25/bad-christmas-gifts-a-neuroscientific-gifting-guide/.

Para ellos no existe la paz o la felicidad,
porque sus fondos de prendas éticas están
exhaustos.

Salvador Dalí

Las festividades son muy
tristes…

Una
oración de clausura

Vivamos en paz y proporcionemos dicha y
alegría a quienes nos quedan muy cerca y en cuyas vidas
incidimos. Miremos el pasado, aprendiendo y aceptando las
incertidumbres del futuro. Hagámoslo lanza en ristre, para
luchar por lo justo cuando el destino lo exija.

Aspiremos a ser mejores, y en lugar de
hacer resoluciones efímeras, vivamos la vida
plenamente.

Concluyamos recordando las palabras de las
sagradas escrituras "…os he puesto delante la vida y
la muerte, la bendición y la maldición; escoge,
pues, la vida, para que vivas tú y tu
descendencia…" Deuteronomio 30:19.

Lo antedicho resume el espíritu del
"Jano" de la tradición judeocristiana.

Fin de la lección

Bibliografía

• Larocca, F. E. F: (2007) La
  Importancia de Entretejer la Historia Personal: El Hechizo
  Fascinante de la Coherencia del Ego en Psikis y
  en monografías.com

• Larocca, F. E. F: (2007) La
  Creatividad y la Neurociencia

• Larocca, FEF: La Oscuridad que
  Engorda: El Lado Apagado de la Iluminación en
  monografías.com

• Larocca, FEF: La Oscuridad Como
  Factor Determinante, e Inadvertido, en la Obesidad
  Epidémica en monografías.com

• Larocca, FEF: Los Enigmas de la
  Obesidad: Sus Causas en
  monografías.com

• Larocca, FEF: Los Enigmas de la
  Obesidad: Sus Curas en monografías.com

• Larocca, F. E. F: (2007) Lo que los
  Padres, de Niños, nos Decían en
  monografías.com

• Larocca, FEF: Tibidabo en
  psikis.cl y monografías.com

• Larocca, FEF: Conflictos,
  Solución y Lecciones en
  monografías.com

• Larocca, FEF: La Angustia Ansiedad
  y la Comunión con los Astros en
  monografías.com

• Damasio, A: (1994) Descartes"
  Error: Emotion, Reason, and the Human Brain
  Grosset/Putnam

Apéndice

UNA BENDICIÓN
IRLANDESA Que el camino salga a encontrarte. Que el
viento esté siempre a tus espaldas. Que el sol brille
cálido sobre tu rostro, y la lluvia caiga suave sobre tus
campos. Y hasta que nos encontremos otra vez, que Dios te
sostenga en la palma de Su mano.

IRISH BLESSING May the road
rise to meet you. May the wind be always at your back. May the
sun shine warm upon your face, the rain fall soft upon your
fields. And until we meet again, may God hold you in the palm of
his hand.

No nos dejes caer en
tentación y líbranos del
mal…

Autor:

Dr. Félix E. F.
Larocca