Santa Fé Acaxóchitl –
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Santa Fé
Acaxóchitl
Tianguis
Mirna y Laura al igual que otras personas, se deslizaban
entre tanto visitante con la esperanza de encontrar sillas
desocupadas, en los puestos de comida de cada semana en el
tianguis de Santa Lucía; algunos paso atrás de
ellas, Manuel y Fred no cesaban el la búsqueda de
encontrar el lugar apropiado y compartir tranquilamente el
merecido descanso de la hora de la comida
Allá … ¡apurense! – dijo Mirna mientras
se acercaba a un puesto que estaba a unos pasos de la entrada
principal de la iglesia
Los cuatro se acomodaron en la mesa que albergaba un
total de catorce comensales, a la vez, otras personas ocuparon
los lugares vacios. Algunas alisaban sus sacos y vestidos
mientras esperaban la orden pedida, otros, aflojaban su corbata,
uno que otro, aún llevaban el gafete de la empresa
corporativa donde trabajaban; para estos era notortio el esfuerzo
que realizan para sonreir, los demás, con
despreocupación esperaban ansiosos el alimento con el
sazón que les recuerda la comida casera
¿Aquí es? – preguntó Manuel con
cierta timidez
Es la calle de Guadalupe Victoria – contestó
Mirna – esta es la iglesia principal de Santa Lucía
Xantepec … allá es Comonfort
¿Es la primera vez que viene a un tianguis? –
preguntó la encargada del puesto con una
sonrisa
No – aclaró Manuel – ya antes fuimos al mercado
de Santa Fé … pero aqui en Santa Lucía es la
primera vez
En Santa Fé – agregó la vendedora –
¿a cuál de los dos? el que está establecido
o el que está en el cambio
¿Donde? – increpó Laura
exrañada
En la zona – interrumpió con confianza un quinto
comensal con lentes oscuros que estaba sentado al otro extremo de
la mesa, a un lado de un niño que inquieto, no dejaba de
moverse
La jovencita que estaba junto a la vendedora miró
de reojo hacia los comensales, sin descuidar la labor de preparar
el consomé y los guisos al tiempo que levantaba la voz
para aclarar
El mercado establecido – dijo agregando especias –
está frente a la iglesia principal … el otro se pone en
la calle de pólvora, el cambio o la zona … es el
mismo
¡Si! – exclamó Manuel – pero
¿porqué le llaman así?
Por que ahi – agregó Mirna – en esa parte esta la
real fábrica de pólvora, por mediados del siglo XX,
se extendió como zona militar, por lo de la Escuela de
Materiales de Guerra en 1946, el proceso de la pólvora se
tecnificó como una profesión propiamente … lo
digo por que mi primo ahí laboraba y tuvo que pensionarse
o seguir como soldado
A mi cuñado le pasó lo mismo –
enfatizó un hombre de extrema delgadez
Si – intervino Laura – poco antes se creó el
Instituto del Politécnico Nacional en 1936, el país
buscaba la tecnificación de la producción en todas
las áreas y los militares siempre han sido vanguardia en
esos aspectos; además con las consecuencias de la Segunda
Guerra Mundial y la reconstrucción de Europa, en que
México participó con el escuadron 201,
además de lograr un gran desempeño en los
suministros, de ahí el auge en la importación de
materias primas, entre los que se hallan los explosivos como TNT,
nitroglicerina y dinamita, entre muchos más productos de
toda índole
En esa época – recordó fred –
también los aparatos electrónicos sustituyen a los
de bulbo, la licuadora, el refrigerador y los aparatos
electrodomesticos fueron accesibles a cualquier familia y casa,
por lo que las industrias requieren más mano de obra para
"sacar" la producción
Aqui tiene – dijo la jovencita al servir los
platíllos
Bueno ¿y por qué le llaman el cambio? –
cuestionó otro comensal de traje negro
Porque hasta mediados del siglo XX – contestó la
vendedora – ahí se realizaba un cambio de vías …
después lo quitaron y se le quedó el nombre …
unos dicen que fue por un accidente del tranvía que
venía de Tacubaya en 1953 … otros dicen que ya no era
indispensable porque la carretera federal a Toluca era mejor y
más segura
¿Y usted que cree? – interrogó
Manuel
No se – contestó la mujer
Yo creo que fue por el crecimiento de la ciudad –
interrumpió el hombre delgado – para 1946 la imágen
de Tacubaya fue desfigurada por algunas avenidas, en los
años cincuenta también surgió Polanco y
lomas de Chapultepec como colonias pudientes … mi tío es
de esos años en que el gobierno promovía poblar al
pais, las familias eran numerosas y muchos se trasladaban a vivir
irregularmente a los límites de la ciudad … por ejemplo
algunos en las cañadas de Santa Fé, aqui en las
barrancas de Santa Lucía, en los alrededores de
Cuajimalpa, en Mixcoac …
Si – confirmó una señora de pelo canoso –
en ese tiempo tanto querían poblar a México que
erigieron el monumento a la madre en 1949, allá por
Insurgentes y Cuahutemoc … ¡imagínense! un hombre
de rasgos indígenas como nuestros antepasados, a un lado
una mujer de iguales rasgos con una mazorca de maíz en
símbolo de fertilidad, de estos, una tercera figura
más grande es propiamente la de una mujer de rebozo con un
niño en brazos, con su vestido largo en señal de
seriedad y recato, muy propio al ideal de mujer de esos
tiempos
Pues si – dijo Laura – "tener hijos como conejos" y
luego no saben donde meter tanto chamaco … y luego la basura
que dejan … pañales, plásticos, papel, botellas y
demás
Pues eso – agregó la vendedora – a mayor
población más basura, de hecho, en esos años
se crearon algunos basureros, por ejemplo, el basurero de Santa
Fé en 1950, que ahora son los corporativos en donde
ustedes trabajan … ¡no quedó nada del antiguo
basurero!
Parece que también – comentó la de pelo
canoso – el Distrito Federal en la década de los
cincuenta, se rodeó de los llamados "cinturones de
miseria" como la villa, iztacalco, pedregal de carrasco, barrio
de san isidro …
Bueno – interrumpió Fred – pero también se
promovieron las mejoras en la industria, los servicios
públicos y el drenaje … tal vez fue otra razón de
que quitaran el tranvía en Santa Fé
Tal vez – contestó Mirna – lo cierto es que en
ese periódo de 1930 a 1960 el Distrito Federal
creció y junto con Guadalajara y Monterrey se iniciaron
como los tres centros industriales más importantes de
México
Entonces – puntualizo Laura – Santa Fé, Santa
Lucía, Cuajimalpa, San Mateo y Santa Rosa nunca estuvieron
ausentes del desarrollo de México y menos del Distrito
Federal … lo digo porque algunos aseguran que los corporativos
del zedec inagurados en 1993 han rescatado del abandono y la
ignorancia a estos pueblos aledaños
No, como crees – contesto Mirna con una sonrisa – aqui
cada lugar tiene sus propias historias y han sobrevivido por
centenares de años … con modificaciones en sus
costumbres y formas de vida, pero aqui siguen en una misma
historia que comparten … por ejemplo, en la fabrica de polvora
y las minas de arena mucha gente encontró trabajo en Santa
Fé en ese tiempo … algunos de Santa Rosa, Cuajimalpa,
San Mateo y de aqui, la hacían como obreros,
choféres, como obreros independientes y de varias faenas
ligadas a los servicios de transportes
Ya he escuchado – aclaró Manuel – que los
corporativos se erigieron en minas de arena … ¿era mucho
lo que sacaban de ahí?
Pues imaginate – dijo Mirna – en ese periódo de
1930 a 1960 la urbanización estaba en crecimiento hacia el
poniente y el sur de la ciudad, de las minas abastecían a
las cementeras y constructoras de los alrededores con arena azul,
grava, piedra de confitillo, y otras cosas más … echale
imaginación para calcular cuanta producción fue, al
edificar muchas de las nuevas colonias de ese entonces y hasta
décadas después
Algunos ya estaban terminando de comer, más la
afluencia de personas que iban y venían de un lado para
otro recorriendo el mercado sobre ruedas no cesaba. Fred
vió el reloj con disimulo y aún quedaba tiempo para
permanecer sentados antes de regresar a laborar en los
corporativos de city Santa Fé
Oiga … ¿y usted por que decidió
dedicarse a la venta? – interrogó Laura que terminó
de comer
Por que la comida siempre deja – aseguró la
vendedora – y pues ya sabe, la necesidad
La necesidad y la tradición – increptó
Manuel
A lo mejor – contestó dudosa – no lo
sé
Pues si – dijo la jovencita que comenzaba a levantar los
platillos – los vendedores en tianguis o tianquiztli de origen
náhuatl son de herencia ancestral … y estos pueblos son
tan antiguos que aún conservan esas tradiciones, por
supuesto, con cambios de acuerdo a las diferentes épocas,
pero siempre se ubican en las calles más representativas
de una colonia … o pueblo … son tan coloridos y diversos …
en San Mateo se ponen en la calle de Hidalgo, donde
también está la iglesia principal … en Cuajimalpa
también …
Son tan coloridos – interrumpió el de extrema
delgadez – como la manta azul y roja que nos cubre del
sol
Si – comentó Mirna – los techos improvisados es
parte del colorido, algunos acostumbraban mantas con diversas
figuras que llamaban la atención … aunado al
espectáculo de todo tipo de comidas, frutas y verduras de
varios tamaños, colores, sabores y olores
Pues si – dijo Fred al tiempo de extender el brazo hacia
lo largo del mercado sobre ruedas – aquí encontramos de
todo, desde curiosidades hasta productos piratas
Oiga – interrogó Laura – y en tradición
son mejores ustedes que los mercados establecidos
Pues – contestó la vendedora – en realidad somos
iguales, en ambos se distribuyen los productos … en una parte
toda la comida, en otra las frutas y verduras, en otra la ropa y
así …
Lo cierto – añadió la señora canosa
– es que ellos al tener un local fijo es más cómodo
y mejor … y ellas, tienen que andar de un lado para otro y no
siempre se puede …
¡Ya te dije que te estés en paz! –
alzó la voz el hombre de gafas oscuras mientras tomaba a
su pequeño hijo por un hombro mientras retenía un
paquete en una mano – ¡me obedeces y haces lo que
te digo o Dios te va a castigar!
Este ni siquiera conoce a Dios – pensó la
jovencita cocinera
No le hables así – le increptó su hermano
sentado a su lado – Dios no castiga y tampoco impone, así
nada más lo atemorizas … mejor enseñale del
verdadero amor que Dios tiene por sus hijos … para que
él se acerque con gusto …
Yo siempre he respetado sus leyes y las conozco muy bien
… pero este no quiere entender – dijo tajante sin soltarlo del
hombro que se amorataba
Entonces evangelizate – le contestó retirandole
la mano de su sobrino que no rebasaba los ocho años de
edad – sino ¿como lo habrás de guiar?
¡Él tiene que obedecer! … ¡ya lo
sabe! siémpre se lo tengo que repetir – dijo el hombre
desencajado
Pero no quiero, no me gusta estar así –
susurró el niño
¡Pues aunque no quieras! – se impuso el
papá mientras levantaba la mano para golpearlo
¡Oye! Eso no es verdad – intervinó el
hermano – las cosas se hacen por voluntad propia y no por la
fuerza
No lo sabía- dijo el hombre furioso – pero hasta
le gusta … ¡total si no quiere, ya habra otro que si
quiera llevar el paquete!
No es cierto, si lo sabe – dijo el niño – siempre
le demuestro mi desacuerdo
Ahi está – dijo el tío del niño –
basta con que demuestre su desacuerdo, para que seas tú el
agresor y el agredido sea Dios mismo en la existencia del
niño
¿Como está eso? – intervino la
vendedora
Todos nosotros – aclaro mientras acercaba al niño
cerca de sí – hemos sido hechos a Imagen y
semejanza de Dios mismo, Él nos creó …
cuando una persona agrede a otra, sea con golpes físicos,
sea control o manipulación mental, o bien, trasgresiones e
imposiciones espirituales, es una agresión a Dios mismo,
por ello, quien agrede a sabiendas del daño que provoca
debe quedar en manos de la balanza de la Justicia …
¡cuanto más si la víctima demuestra su
desacuerdo!
Pero tú siempre hablas de Dios como perdón
– dijo el hombre sin quitarle la vista del niño
Si – aclaró sin soltar a su sobrino – todos
merecemos y podemos perdonar, pero el perdón no implica
que no se haga Justicia … Dios es justo y conoce la historia y
los esfuerzos de cada persona mucho mejor que uno mismo … la
Justicia es una acto destinado a reparar todo el daño
causado, sea de índole mental, espiritual o físico
… no es más ni es menos de lo que se ha dañado,
sino acorde al grado del daño y del perdón … en
cuestiones de naturaleza humana se le conoce como justo
equilibrio
Autor:
Pedro Rubén Sánchez
Acosta
2011