El control de los roedores: revisión de los rodenticidas registrados en el ámbito de la sanidad ambiental en España
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RESUMEN: Actualmente se
precisa del empleo de los
llamados rodenticidas, definidos como productos
biocidas empleados para el control de
roedores. En la reciente transposición de la Directiva de
Biocidas a través del Real Decreto 1054/2002, los
rodenticidas se incluyen en el Grupo
Principal 3, Tipo de Producto 14.
Se analiza la situación actual de los rodenticidas en el
Registro
Oficial de Plaguicidas. El estudio se ha realizado a partir de
los datos que figuran
en la base de datos
del Registro Oficial de Plaguicidas de Uso en Salud
Pública de España
para los rodenticidas (ingredientes activos
técnicos) y formulados). De los 11 ingredientes activos
técnicos rodenticidas registrados, 9 son anticoagulantes,
1 tiene acción
sedativa y 1 produce hipercalcemia. De los 416 formulados, 412
presentan algún anticoagulante: un 87,4% son derivados
cumarínicos, mientras que el 12,6% son derivados
indandiónicos. El 94,2% de los productos se formulan como
sólidos y se clasifican como nocivos. No se precisan
aspectos como la eficacia sobre
las distintas especies susceptibles o el tipo de acción.
Del análisis realizado destaca el elevado
número de formulados registrados en España en
comparación con otros países. De las consecuencias
que cabe esperar de la transposición de la Directiva
98/8/EC, destacaremos la reducción en el número y
tipo de rodenticidas que se registren y una mayor
precisión en relación con la eficacia, el tipo de
acción, la composición (atrayentes) y el tipo de
formulación.
Palabras clave: Biocida. Rodenticida. Control de
roedores. Exposición
a riesgos
ambientales.
ABSTRACT: Rodent Control: Review of the
Rodenticides Currently Registered in the Environmental Health
Field in Spain.
The use of what are known as «rodenticides»,
defined as biocides used for rodent control, is currently
required. In the recent transposition of the Biocide Directive by
way of Royal Decree 1054/2002, rodenticides are included under
Main Group 3, Product Type 14. The current status of rodenticides
in the Official Pesticide Registry is analyzed. This study has
been conducted based on the data in the database of the Spain's
Official Registry of Pesticides for Use in Public Health for
rodentcides (technical and formulated active ingredients). Nine
(9) of the technical active ingredients registered are
anticoagulants, one (1) has a sedative effect and one (1) causes
hypercalcemia. A total of 412 of the 416 formulated rodentcides
include some anticoagulant (87.4% are coumarin derivatives, while
12.6% are indandione derivatives). A total 94.2% of these
products are formulated as solids and are classified as slightly
or moderately hazardous. Aspects such as effectiveness on the
different species or the type of effect are not required. Based
on the analysis conducted, the one outstanding aspect revealed is
large number of formulated rodenticides registered in Spain in
comparison to other countries. One of the major consequences
which may be anticipated from the transposition of EC Directive
98/9/EC, is the reduction in the number and type of rodenticides
which are registered and a greater degree of accuracy as to their
effectiveness, the type of effect, the composition (baiting) and
the type of formulation.
Key words: Biocide. Rodenticide. Rodent control.
Environmental exposure.
INTRODUCCIÓN
De las aproximadamente 2.000 especies de roedores que
existen, tres son consideradas plagas importantes a nivel
mundial: la rata parda o rata de alcantarilla [Rattus
norvegicus (Berkenhout, 1769) (Rodentia, Muridae)], la rata
negra [Rattus rattus (Linnaeus, 1758) (Rodentia, Muridae)]
y el ratón domestico [Mus musculus Rutty, 1772
(Rodentia, Muridae)]. Estas tres especies son comensales del
hombre y se
han adaptado extraordinariamente bien a los ambientes urbanos
donde la actividad de las personas les proporciona alimento y
refugio por lo que su presencia en los distintos tipos de
instalaciones en los que el ser humano desarrolla su actividad es
muy frecuente. En estos ambientes ocasionan múltiples
problemas.
Económicamente hay que considerar no sólo la
destrucción de alimentos por
consumo
directo, sino también los daños comerciales por
mordisqueo y/o contaminación. Además, no es menos
gravosa la destrucción de objetos y equipos producida por
la característica acción de roer, a la que se
atribuye por ejemplo el 25% de los incendios de
origen indeterminado en Estados Unidos.
No debemos olvidar tampoco que los roedores son transmisores de
diversos agentes patógenos para el hombre como
virus (rabia),
bacterias
(salmonelosis, peste), ricketsias (tifus), protozoos,
helmintos, trematodos, cestodos y hongos, si bien
en nuestra zona no es afortunadamente ésta la causa mayor
de que se tengan que adoptar medidas de control.
Actuar contra estas plagas resulta especialmente
difícil. Por un lado, por su relativa semejanza funcional
con el hombre y, por otro, por su condición de
generalistas casi perfectos, flexibles, agresivos, inteligentes,
omnívoros y con una tasa reproductiva muy alta. Son
capaces de medrar en cualquier ambiente
trepando, nadando, excavando, etc., desplazando de él a
otras especies eventualmente competidoras y explotar cualquier
fuente alimenticia que se encuentre a su alcance. Son animales
rápidos que tienen gran habilidad de movimientos y
sentidos desarrollados. Por ejemplo, trepan y caminan con
facilidad por cables, hilos, plantas,
paredes…, saltan sin impulso a un metro de altura y a metro y
medio de longitud, nadan y bucean (incluso contra corriente en
las cañerías), excavan y son capaces de hacer pasar
su cuerpo por agujeros de muy pequeño diámetro.
Además, son animales inteligentes que desconfían de
lo nuevo pero que se acostumbran a lo habitual (ruidos, polvos,
alimento…), siendo capaces de aprender de la experiencia ajena
(«aversión al cebo»). Esta capacidad
generalista les ha permitido asentarse con éxito
en cualquier ambiente, siendo la causa fundamental de su
expansión corológica la introducción involuntaria por el hombre en
cualquier área geográfica en la que él mismo
habite o haya habitado.
Si bien el saneamiento o la adopción
de medidas estructurales de exclusión pueden contribuir a
reducir de forma significativa los problemas ocasionados por los
roedores, actualmente su control precisa en la gran
mayoría de los casos de la adopción de medidas
químicas y más concretamente del empleo de los
llamados Rodenticidas. Baumann y colaboradores1 los
definen como productos biocidas empleados para el control de
roedores como ratas, ratones, topos y otros pequeños
roedores. Existen distintos tipos de rodenticidas en cuanto a su
modo de acción, pero sin ninguna duda los más
ampliamente utilizados son los denominados anticoagulantes, que
provocan la muerte de
los roedores al inhibir la biosíntesis de los factores de
coagulación dependientes de la acción de la
vitamina K, alterando el proceso normal
de coagulación, lo que se traduce en la muerte como
consecuencia de las hemorragias internas que sufre el animal. Se
trata de plaguicidas de uso profesional y/o no-profesional,
según los casos, y dependiendo del ámbito de
aplicación se consideran dos grandes grupos,
rodenticidas de uso fitosanitario y rodenticidas de uso en
sanidad ambiental. Según lo establecido en la Directiva de
Biocidas únicamente los segundos merecen la
consideración de Biocidas2. Esta Directiva, por
la que se regula el proceso de autorización de productos
biocidas a nivel comunitario, ha sido recientemente transpuesta a
la legislación española a través del Real
Decreto 1054/2002, de 11 de octubre de 20023. Este
Real Decreto regula el proceso de evaluación
para el registro, autorización y comercialización de biocidas entre los que
se incluyen los productos destinados al control de roedores
(fundamentalmente ratas y ratones). Entre los distintos grupos
contemplados en dicho Real Decreto, los rodenticidas constituyen
un tipo de producto (Tipo de Producto 14: Rodenticidas: Productos
empleados para el control de ratones, ratas y otros roedores)
claramente definido e individualizado del resto de Plaguicidas
(Grupo Principal 3) por el grupo de animales contra los que su
acción se dirige.
La Dirección General de Salud Pública
(Subdirección General de Sanidad Ambiental) del Ministerio
de Sanidad y Consumo es la unidad competente en España
para la aplicación de la legislación europea sobre
sustancias y preparados químicos peligrosos.
Además, la Dirección General de Salud
Pública es responsable del Registro de Plaguicidas de Uso
en Salud Pública (Biocidas)4. Mientras algunos
Estados miembros no han tenido ningún tipo de control
sobre estos productos, otros países sí; es el caso
de España, donde desde 1983 se mantiene un registro para
la autorización de los plaguicidas no
agrícolas4,5, entre los que se incluyen los
rodenticidas autorizados en sanidad ambiental. La
legislación básica previa existente en
España está constituida por el Real Decreto
3349/19836, el Real Decreto 162/ 19917, el
Real Decreto 443/19948 y diversas órdenes
relativas a la inscripción y funcionamiento del Registro
de Establecimientos y Servicios
Plaguicidas, a la normativa reguladora del Libro Oficial
de Movimiento de
plaguicidas peligrosos y a la homologación de los cursos
de capacitación para realizar tratamientos con
plaguicidas4,5.
En función de
esta legislación, en España, desde 1983, se han
venido registrando varios tipos de productos considerados ahora
rodenticidas en la Directiva 98/8/CE y que se pueden incluir en
tres grandes grupos según el uso al que van destinados:
plaguicidas de uso doméstico (no profesional), plaguicidas
de uso ambiental (profesional) y plaguicidas de uso en la
industria
alimentaria (profesional). Para la inscripción de estos
productos es necesario evaluar sus aspectos de peligrosidad para
la salud humana, pero como señalan Moreno y
colaboradores9 hay otros muchos aspectos actualmente
contemplados por la Directiva de Biocidas y por el Real Decreto
1054/2002 que deberían incluirse en los requisitos para la
inscripción de los biocidas y entre los que destacaremos
las evaluaciones de eficacia y
ecotoxicológicas.
En este sentido, el objetivo del
estudio que se presenta es el establecimiento de la
situación de partida en relación con los
rodenticidas previa a la completa aplicación de la
Directiva de Biocidas, para lo que resulta de gran interés
efectuar un estudio de la situación actual a partir de los
datos existentes en la base de datos del Registro Oficial de
Plaguicidas de Uso en Salud Pública en España, a
partir del cual se puedan valorar adecuadamente las consecuencias
de la implantación de la nueva Directiva en España.
Este análisis permitirá también definir
algunos de los aspectos básicos que se deben analizar a
fin de establecer un nuevo Registro de Biocidas acorde con lo
establecido en el Real Decreto 1054/2002.
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