Teletrabajo en Argentina. Su sentido ideológico frente a la experiencia laboral precarizante
- 1.
Abstract - 2. Una forma de
aproximación al "poder" del
teletrabajo - 3.
La crisis como el emergente estratégico del
teletrabajo - 5.
Confianza y promoción - 6.
Atenuación del desempleo y
autoempleo - 7.
Subjetividad - 8.
Regulación - 9.
Capacitación - 10.
Conclusiones preliminares del ámbito de la
representación - 11.
Casos concretos de experiencias de
teletrabajo - 12.
Del control al autocontrol - 13.
Una nueva forma de empleabilidad - 14.
La dimensión subjetiva - 15.
Desregulación y trabajo precario - 16.
El autoaprendizaje permanente - 17.
Conclusiones - 18.
Bibliografía
1. Abstract
La siguiente ponencia tiene como objeto de estudio al
teletrabajo.
Este se presenta como una nueva modalidad de trabajo, un
nuevo modo de organización de la producción. Desde un primer acercamiento
podemos definir al teletrabajo constituido por dos componentes:
1. la deslocalización del puesto de trabajo de las
oficinas centrales o la fábrica 2. el uso de las nuevas
tecnologías de la información y la
comunicación (principalmente correo
electrónico e Internet). Para analizar las
características que adopta esta modalidad de trabajo en
Argentina tomamos un congreso virtual de teletrabajadores llevado
a cabo en los meses de julio y agosto de 2002. Se analizaron los
ciento cincuenta mails pertenecientes al primer mes de este
congreso para delimitar las representaciones de los
teletrabajadores en torno a esta
modalidad de trabajo. Estas representaciones se agrupan en cinco
categorías: o Regulación: se refiere a la falta de
un marco legal para esta modalidad de trabajo; o Subjetividad:
tiene que ver con cuestiones relacionadas con la subjetividad del
teletrabajador (sensación de aislamiento por la falta de
contacto personal diario,
delimitación del espacio doméstico y el espacio
laboral dentro
del hogar, gestión
y organización de las tareas diarias); o Capacitación: son debates acerca del tipo
de capacitación requerida para esta modalidad de trabajo
(los teletrabajadores hablan de "aprendizaje
colaborativo" o "aprender haciendo-hacer aprendiendo"); o
Confianza y promoción: se reflexiona sobre la necesidad
de "confianza" entre empleador y empleado como requisito para
implementar esta modalidad de trabajo. Se tratan aquí
también todas las cuestiones referentes a las relaciones
laborales (tipo de contratación, forma de establecer
la remuneración, control del
proceso de
producción, acuerdos entre el empleador y el
teletrabajador sobre los tiempos de realización de tareas,
etc.); o Atenuación del desempleo y
autoempleo:
dentro de un marco más general, se debaten las
posibilidades del teletrabajo para atenuar la situación de
desempleo y las contradicciones que implica promover trabajo
autónomo teniendo en cuenta el rol del Estado en la
generación de empleo. Como
segundo paso, se aplican estas representaciones a ocho
experiencias concretas de teletrabajo recogidas a través
de entrevistas en
profundidad realizadas en los años 2002 y 2004, para dar
cuenta de la distancia entre el sentido ideológico del
teletrabajo y la práctica concreta. Las ocho entrevistas
fueron realizadas a teletrabajadores argentinos de distintas
profesiones y ocupaciones (artista plástico,
diseñador, secretaria virtual, docente) y se han
seleccionado esas porque consideramos que son representativas de
nuestro universo de
estudio.
Palabras
claves: · argentina,
deslocalización, estudios ciencia–tecnología–sociedad,
teletrabajo,tics.
2. Una forma de aproximación
al "poder" del
teletrabajo
Los vínculos sociales se encuentran entrecruzados
por relaciones asimétricas de poder que se cristalizan en
determinadas prácticas y los sentidos a
ellas asociados. En este caso, se observan ciertos
comportamientos producidos en los espacios de trabajo, en tanto
escenario de lucha, dominación y resistencia. Para
lo cual nos detendremos en los instrumentos de ejercicio del
poder desplegados en el marco de una innovación organizacional reciente: el
teletrabajo.
Durante las ultimas dos décadas se ha tendido a
presentar esta novedad como la solución predilecta de los
muchos problemas en
el seno de la producción. Esta afirmación
promovía un cambio de
naturaleza
profunda de la forma de concebir el trabajo y a
los trabajadores a partir de la aplicación de este
modelo.
Nuestra mirada sobre el tema se propone cuestionar este tipo de
prenociones ideológicas, cualquiera sea su fuente,
profundidad o alcance. Para hacerlo intentaremos hacer visibles
los entramados laborales en donde se emplea
teletrabajadores.
Para reconocer la especificidad que adquiere esta
innovación laboral se puede partir de una de las
definiciones mas ampliamente aceptadas por el mundo
académico, según la cual:
"El teletrabajo puede definirse como el trabajo
efectuado en un lugar donde, apartado de las oficinas centrales
o de los talleres de producción, el trabajador no
mantiene contacto personal alguno con sus colegas, pero
está en condiciones de comunicar[se] con ellos por medio
de las nuevas tecnologías" (Di Martino, Wirth, 1990:
471)
A lo largo de estos años las definiciones sobre
el teletrabajo han variado sobremanera, tal es así que
para su denominación se emplean distintos vocablos:
telecommuting (teledesplazamiento), networking
(trabajo en red), remote working
(trabajo a distancia), flexible working (trabajo flexible)
y home working (trabajo en casa). También existen
definiciones ya tradicionales que han desarrollado una influencia
más allá del mundo académico, pero que no
adoptamos por dos razones: fundamentalmente porque es una
versión mas apegada a los discursos
empresariales y además porque pondera de un modo
exagerado, según suponemos, la dimensión "locativa"
del puesto y no del colectivo de trabajo, en tanto ámbito
de socialización fundamental del
trabajador:
"El teletrabajo es una forma flexible de
organización del trabajo que consiste en el desempeño de la actividad profesional sin
la presencia física del
trabajador en la empresa
durante parte importante de su horario laboral. Engloba una
amplia gama de actividades y puede realizarse a tiempo
completo o parcial. La actividad profesional en el teletrabajo
implica el uso frecuente de métodos
de procesamiento electrónico de información, y el
uso permanente de algún medio de telecomunicación
para el contacto entre el teletrabajo y la empresa" (Gray,
Hodson, Gordon, 1995:63)
Si bien la anterior no es la definición que
corrientemente adoptamos, debemos decir que es la más
influyente porque básicamente emplea los dos criterios
definitorios de manera explicita: el criterio locativo (la
deslocalización) y el criterio instrumental u operativo
(la coordinación electrónica del trabajo). En esos
términos, aceptamos estos dos elementos estructurales de
la reestructuración sin dejar de considerar el plano
político que soporta. Nuestra mirada de esta
innovación organizacional se centra en todos aquellos
dispositivos disciplinarios de control que se emplean para
obstruir las formas de acción
colectiva, contestataria del proceso hegemónico de
definición del sentido, los imperativos y valores que
reconstruyen esta modalidad. Por tal razón, en el trabajo
se detallan ciertas formas de vulnerabilidad objetivas y
subjetivas que expresan la desigual distribución del poder en el mundo del
trabajo.
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