Comunicación y digitalización. Nuevos paradigmas sociales frente a ciertas prácticas de la interactividad en los medios online
- 1. Influencia de Internet en
los aspectos comunicativos del siglo
XXI
2. La prensa digital e
interactividad
3. ¿Interactividad es
participación?
4.
Bibliografía
5.
Notas
Abstract
Las tecnologías digitales han colocado el
concepto de "interactividad"
en el punto de mira de todos los debates sobre medios. Las esquemas de
comunicación tradicionales
se han visto afectados por nuevos paradigmas donde los canales
retorno dan opciones a la entrada del receptor. Si
tecnológicamente las posibilidades son muchas en la
práctica se detectan pocas iniciativas que se traduzcan en
una participación real del
ciudadano.
1. Influencia de Internet en los aspectos comunicativos del
siglo
XXI
Estamos ante la tercera revolución de la humanidad,
la materia prima esta vez no es
el carbón, ni tan siquiera el petróleo, es la información y la tecnología la digital. Los cambios se
perciben a nivel social, político, económico y humano.
El mundo es ya la aldea global donde millones de
individuos se interrelacionan con independencia del espacio e
incluso del tiempo:
El desarrollo de las
tecnologías multimedia y el despliegue de las
nuevas redes de información nos
sitúan en la frontera de una nueva
revolución en la sociedad de la
información de alcance comparable, si no mayor, al que en su
momento supuso la aparición de la imprenta, la televisión y la
informática
(1).
Utopías futuristas que hablan de un planeta
donde el diálogo, el intercambio y la
democratización de las relaciones son las
características básicas se oponen a teorías que inciden en
los aspectos negativos de esta evolución. El aumento de
las diferentas sociales por un nuevo tipo de analfabetismo, el
tecnológico, la falta de control de los medios digitales
con la multiplicación de emisores que saturan el panorama
informativo en un caos donde es difícil encontrar las
referencias, el no aumento de las libertades sino el cambio de poderes, etc.
¿Cuáles serán las características del siglo
XXI?. La utopía tecnológica exige la utopía
social. Redes y ondas, cables y satélites, son los
escenarios de la nueva era donde transcurren las interrelaciones
sociales y personales. Muchos critican la falta de cercanía
de los nuevos medios, la sustitución del "cara a cara" por
lo "ciber" con sus consecuencias a medio plazo. Pero más
allá de estas críticas Internet ha demostrado
sobradamente ser un potente vehículo de comunicación
personal. Desde su
extensión las trabas que implicaban las distancias o las
limitaciones físicas han desaparecido, se puede conversar a
miles de kilómetros, a coste muy bajo, de forma fluida,
aunque en un contexto de características diferentes a las
personales. Tertulias en directo como los chats o en
diferido, newsgroups, el correo electrónico, las
páginas web personales,
demuestran que los flujos de comunicación se han ampliado en
general, aunque en menor medida en los medios de
comunicación presentes en la Red, que tardan en incorporar algunas de las
opciones de participación ya disponibles. Se están
desarrollando nuevas formas de comunicación donde los
aspectos físicos no están presentes. Una
comunicación más escrita que hablada debido a las
limitaciones de la red en la actualidad, que sustituye el lenguaje no verbal por
signos gráficos y
emoticones. En muchos casos las críticas provienen de
la incapacidad de adaptación, se requiere el desarrollo de
nuevas habilidades para sustituir las percepciones ausentes,
acostumbrarse a hablar en otros lenguajes. Pero más
allá de todo ello Internet está eliminando los
prejuicios que subyacen a toda comunicación interpersonal.
"Quizás la característica más notable de la comunicación en la Net
sea la ausencia de ideas preconcebidas respecto a las personas
con las que nos comunicamos, no sabemos si nuestro interlocutor
es un catedrático de universidad o un alumno de
enseñanza secundaria, a
menos que nos estemos dirigiendo a alguien que conocemos" (2).
Por otra parte en los espacios virtuales los flujos de mensajes
entre los emisores y receptores se basan en un intercambio
aparentemente equilibrado donde se rompe la estructura vertical que
caracteriza las prácticas de los medios de comunicación de
masas.
Página siguiente |