1.
Definición
Las enfermedades de transmisión
sexual (venéreas) son las que se transmiten a menudo, si
no en todos los casos, de persona a persona a través
del contacto sexual.
Como la actividad sexual brinda oportunidad para que los
microorganismos encuentren nuevos huéspedes, una gran
variedad de microorganismos infecciosos pueden transmitirse de
este modo. Éstos abarcan desde virus microscópicos (por
ejemplo, el virus de la inmunodeficiencia humana) a insectos
visibles (por ejemplo, la ladilla o el piojo
púbico).
El contagio de algunas enfermedades venéreas no
requiere penetración genital. A pesar de que dichas enfermedades suelen ser el resultado de las
relaciones sexuales vaginales,
orales o anales con una persona infectada, ocasionalmente pueden
ser transmitidas al besar o mantener un contacto corporal
estrecho. Ciertos agentes de enfermedades de transmisión
sexual pueden ser contagiados a través de los alimentos y el agua o bien de las
transfusiones de sangre, los instrumentos
médicos contaminados o las agujas utilizadas por los adictos
a las drogas.
2. Distintos tipos de enfermedades de
transmisión sexual (ETS).
- Amibiasis:
La amebiasis o amibiasis es una enfermedad parasitaria
del intestino muy extendida en regiones tropicales, producida por
la infección que origina la ameba Entamoeba histolytica,
protozoo rhizópodo muy extendido en climas cálidos y
tropicales. El parásito se adquiere por lo general en su
forma quística a través de la ingestión de
alimentos o líquidos contaminados. Cuando invade el
intestino, puede producir disentería, aunque también
puede extenderse a otros órganos. Entamoeba
histolytica sólo desarrolla la enfermedad en caso de una
baja resistencia inmunitaria de la
persona infectada. La enfermedad aparece en brotes
epidémicos, cuando las aguas residuales contaminan los
suministros de agua o cuando el suelo se fertiliza con desechos
humanos sin tratar.
Los síntomas pueden variar desde unas pequeñas
diarreas hasta casos más
graves. La enfermedad desarrolla dos fases:
Fase aguda: es la más grave, y puede durar de
semanas a meses. El enfermo presenta fuertes dolores abdominales
y heces sanguinolentas.
Fase crónica: puede durar años, y si no se
trata puede tener un desenlace fatídico. En este caso, se
alternan diarreas leves con estreñimiento.
Si la enfermedad se agrava, se pueden producir
complicaciones, tales como perforaciones del intestino o
amebiasis cutánea(úlceras alrededor del ano
cuando la disentería amebiana es muy intensa) o puede
conducir a la formación de abscesos en el hígado, los
pulmones, y con menos frecuencia en el corazón; en casos raros
puede incluso alcanzar y lesionar el cerebro.
Como medidas preventivas, destacan:
- Tratamiento de aguas con cloro y sistemas de
filtrado. - Higiene personal y alimenticia (lavarse
las manos antes de comer, cocinar, etcétera) - Campilobacteriosis
La campilobacteriosis es una enfermedad infecciosa
producida por bacterias del tipo
Campylobacter y transmitida al hombre generalmente por
aves infectadas (zoonosis). Al producirse la
infección por medio del contacto con las heces y la falta de
higiene, también se ha
considerado dentro de las enfermedades de transmisión
sexual, siempre que no se utilicen medios para evitar un contacto
sexual directo con el infectado
En la mayoría de los infectados, los síntomas
son tan escasos que no saben si la padecen, pero sufren fiebre alta con efectos
colaterales del tipo de confusión, delirios,… por lo que
suele confundirse con un cuadro de fiebre tifoidea o
paratífica.
En la mayor parte de los casos la fiebre va seguida de
náuseas (aunque raramente vómitos), dolor abdominal
intenso, calambres y diarrea, por este orden. La
diarrea puede ser tanto acuosa, como mucosa o incluso
sanguinolenta. La diarrea se autolimita a los dos o tres dias y
el resto de síntomas remiten espontáneamente en
torno a siete o diez
dias.
En las personas que tienen un sistema inmunológico
débil, la bacteria se propaga a veces a la corriente
sanguínea (septicemia) y puede ocasionar una grave
infección poniendo en peligro la vida.
- Candidiasis
La candidiasis es una enfermedad causada por un hongo
oportunista que puede tener expresión cutánea del
género Candida, de los
cuales Candida albicans es el más frecuente. Se puede
transmitir por ropas, objetos y también por contacto sexual.
Estos hongos están siempre
presentes en la piel y en el tracto digestivo
de la mayoría de las personas, pero se encuentran
controlados por otros microorganismos no patógenos. Cuando
se produce un desequilibrio, el aumento desmedido de la población de hongos
produce esta u otras micosis.
Los síntomas se caracterizan por lesiones
cutáneas (enrojecimiento o inflamación de la piel)
acompañadas de prurito y sarpullido. En las infecciones vaginales, puede
presentarse flujo blanquecino, con un característico olor a
levadura. Su periodo de incubación es de 8 a 15
días.
Los casos ligeros de candidiasis pueden no requerir
intervención médica; remedios de uso doméstico
incluyen el consumo o aplicación
tópica de yogur, en que los lactobacilos presentes en el
medio combaten el hongo, y otros fungicidas, como la alicina
obtenida de los dientes de ajo.
Los antimicóticos de laboratorio para el
tratamiento de la candidiasis incluyen por lo general nistatina,
fluconazol, ketoconazol o amfotericina.
El cuidado con la higiene ayuda a mantener a raya las
infecciones de Candida. Se debe mantener limpia, seca y expuesta
al aire la parte afectada. En el
caso de infecciones vaginales, se debe seguir los consejos de un
ginecólogo.
Página siguiente |