Monografias.com > Economía
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

La naturaleza de la riqueza



Partes: 1, 2, 3

  1. Una
    sinopsis
  2. Definiciones ineludibles
  3. El
    ciclo económico
  4. Un
    ejemplo ilustrativo
  5. Los
    servicios
  6. Llamémosle indev
  7. El
    artificio místico
  8. Dinero, maldito dinero
  9. Indevaluable, previsible, constante,
    consecuente
  10. Ejemplo para Uruguay
  11. El
    "capital" es la riqueza
  12. El
    trabajo y el salario
  13. La
    competencia y el mercado, la oferta y la
    demanda
  14. Importación y
    exportación
  15. La
    propiedad y otros valores
  16. El
    Estado
  17. Conclusión
  18. Bibliografía

Monografias.com

 

Análisis por: Salazar
Vanessa

Una
sinopsis

Durante toda la historia no ha existido ningún
sistema económico que haya resuelto el problema principal
de la humanidad: la satisfacción de todas, absolutamente
todas, las necesidades materiales del hombre. Y todas las
necesidades materiales, es seguro, se pueden satisfacer. (La
definición de necesidad que utilizamos se deriva de
ése concepto básico: una necesidad económica
es la falta de algo que otros poseen; por lo tanto, ya existe la
forma de satisfacerla.)

¿Es que, acaso, el hombre no ha luchado siempre y
sigue luchando en la búsqueda de la satisfacción
general? ¿Es que, para ello, todo su trabajo acumulado fue
y es insuficiente? ¿Es que acaso todas sus energías
empleadas con ese fin, todos sus esfuerzos han sido y son en
vano? ¿Es que acaso el hombre no tuvo –ni tiene-
suficiente capacidad como para tan siquiera eliminar el hambre,
su necesidad primordial?

La realidad indica que no hay ser vivo con más
capacidad de adaptación a la naturaleza y con más
aptitudes de adaptarla a ella misma, que el hombre. Es
más, es el único que ha podido alcanzar esta
última posibilidad.

Nota: Voluntariamente descartamos de nuestra
consideración como posible herramienta para lograr estos
fines fundamentales al tan manido "avance tecnológico",
aunque nada nos obliga a hacerlo. La gran mayoría de los
países se ven impedidos de emplearlo, por lo que su uso
para abatir la pobreza y el hambre, por ejemplo, es un imposible
práctico. Esto se debe a que sus dueños exigen
colocarlos en el faltante principal del que adolecen los
países pobres: lo ubican como integrantes del
capital.

Lo que abruma a los países pobres (a todos ellos)
es única y exclusivamente una dificultad económica,
que no les permite mantener a los técnicos que crea o
perfeccionar la educación para "producirlos". Esta
dificultad es la que nos proponemos eliminar. Y aseguramos que
mediante éste descubrimiento podemos superarla,
definitivamente.

Sabemos, porque lo vemos cotidianamente, que si toda la
capacidad del hombre (en su carácter social, naturalmente)
se vuelca en pro de cualquier objetivo, por imposible que parezca
(el vencer al hambre por ejemplo), no sólo es capaz de
hacerlo sino que, aseguramos, podrá hacerlo. Ya
podría haberlo hecho, podría hacerlo ahora mismo,
mediante los sistemas que hoy se aplican.

¿Cuál fue el motivo de que el hombre no
haya podido lograr esa meta tan ansiada, tan necesaria, tan
justa? Porque poder hacer debe acompañarse de
querer hacer. La capacidad productiva nunca ha sido tan
potente ni tan redituable. Las comunicaciones nunca han sido tan
variadas y rápidas. Las demás variables a
considerar son todas accesibles, todas alcanzables, todas
posibles. Por ese motivo podemos aseverar que la pregunta no debe
hacerse con el verbo poder; debe hacerse usando el verbo
querer.

El capitalismo nunca, hasta ahora, se lo ha propuesto,
porque el vencer la pobreza, el vencer el hambre, es hoy
totalmente posible, tanto en términos productivos como en
la distribución de esa producción. Pero es un
negocio no tan beneficioso o tan redituable como lo es el
servicio fúnebre, por ejemplo.

En el capitalismo, un poder adquisitivo que sea
suficiente para cumplir con tales exigencias, es una posibilidad
exclusiva de un grupo pequeñísimo, el que
¡vaya coincidencia! no pasa hambre. Para nuestra
teoría, derivada directamente del ciclo económico,
el precio, la oferta, los costos, la producción y la
demanda dependen exclusivamente del poder adquisitivo de la
población en su conjunto, como benefactora de la
economía.

La capacidad de consumo se debe (y es posible) hacerla
corresponder con la capacidad productiva. Antidogma: La "ley" de
la oferta y la demanda es una ilusión. La demanda es
dependiente del poder de compra, de la oferta y de su precio:
ésa es la ley. La demanda en el capitalismo, al
igual que el precio, depende sólo si el poder
adquisitivo de la población es alto- exclusivamente de la
oferta.

Si quieren aumentar sus beneficios, los
aumentarán; si quieren bajarlos, cosa difícil, los
bajarán. Si quieren aumentar o disminuir la oferta o los
salarios lo harán. Les importa un rábano la
opinión o la necesidad de los demandantes, sólo su
propio lucro

Cuando hablemos de un poder de compra justo (algo que a
muchos les parecerá indefinible) estaremos hablando de
justicia en términos económicos.

En el socialismo se ha vencido al hambre. Incluso se
hizo mucho más que vencerlo. Pero le falta "algo": sus
pobladores no cuentan con el suficiente y merecido poder
adquisitivo, con una verdadera capacidad de compra y la
posibilidad de usarla. No sufren de necesidades materiales
vitales, pero adolecen de muchas de las que no lo son, esto es,
sufren de un tipo de pobreza económica que no les permite
saciar necesidades más superfluas o gustos o
caprichos.

Podemos empezar aseverando rotundamente que el principal
error cometido por las distintas teorías ha sido y lo
sigue siendo el uso generalizado y dogmático de errores
conceptuales, no materiales.

Definiciones
ineludibles

Ahora comenzamos con las definiciones imprescindibles
que se necesitan para lograr una cabal comprensión de lo
que se quiere exponer, y porque cualquier ciencia como tal, exige
definiciones precisas. Estas definiciones han de entenderse como
propias de la economía, aunque parezcan que la sobrepasan.
Son abiertas, no exhaustivas, pero inmodificables en su concepto
fundamental, no por capricho del autor, sino porque su propia
naturaleza así lo obliga.

  • Naturaleza -o pachamama, sin rozar lo religioso que
    pueda tener esta palabra tan del sur y tan clara, en un nuevo
    sentido económico, a una zona específica,
    delimitada geográfica, temporal y
    políticamente, que comprende un ambiente
    ecológico, pasado, presente y futuro.

  • Riqueza: a la totalidad de sólidos (la
    tierra, suelo y subsuelo) y fluidos (aire, aguas) de dicha
    pachamama. Son riqueza también todos los compuestos,
    orgánicos (animales, vegetales) e inorgánicos
    (minerales en general), todo tipo de energía (luz,
    calor), toda cosa o ser, todo objeto que se ubica temporal y
    espacialmente en dicha pachamama. Se desprende que no existen
    propietarios individuales de esta riqueza y que ella es el
    "capital" inicialen que la economía se basa y que todo
    lo mueve-

  • Producción humana tiene por función
    esencial el ser consumida, sin importar la
    diferenciación de su origen entre esas dos formas de
    relacionarse con la pachamama. Pero la forma de
    producción social (la actual, la que utiliza lo que
    llaman la división del trabajo) es la única que
    necesaria y forzosamente debe llegar al hombre como
    consumidor, debido tanto al cometido de dicha función
    esencial como por la forma destructiva en que ésta se
    genera.

El valor económico de la riqueza artificial o
racional (la producida por la humanidad), su significado,
razón y sentido, se obtienen desde y en ese estado social,
no individual, que contiene y se conforma del trabajo de
éste. En especial de aquel que la repone, pues es el
único trabajo que contiene valor social; valor que es
concreto, medible, calculable, fácilmente traducible a
números.

  • Riqueza social: Toda la vida del hombre es
    productiva. No podemos definir la actividad del hombre tal
    como se ha hecho hasta hoy, en que se considera al ser humano
    como un eterno empleado de un patrón eterno. Cada
    hombre como productor tiene su propia finalidad social, su
    propia vocación y capacidad particular para cada una
    de las incontables tareas que la humanidad puede
    realizar.

  • Perjuicio: Es a toda actividad humana que destruye
    riqueza y que no cierre el ciclo de ésta -o ciclo
    económico. Se logra mediante: el consumo de lo
    producido (la reposición de lo consumido) y la
    restitución de lo destruido

  • Valor de la riqueza: está determinado por la
    satisfacción cuantitativa del trabajo social necesario
    para producir y reponer y, conjuntamente, por el nivel de
    necesidad de consumo que ésa producción
    satisface.

  • Productor, como término absoluta y
    únicamente aplicado a la economía, a todo ser
    humano en edad productiva, cualquiera sea su actividad, por
    intermedio de la cual produce o crea un bien como objeto,
    tangible o no, que mejora la existencia de su mundo, su
    comunidad y la suya propia. Porque: la esencia del hombre es
    el conjunto de las relaciones sociales.

  • Edad productiva como la edad en la que un productor
    ejerce tal actividad. Un bebé es un productor dentro
    de la actividad que pueden ejercer los bebés. Un
    anciano es un productor dentro de la actividad que pueden
    ejercer los ancianos. Estos ejemplos extremos se muestran
    porque ellos, al crear bienes intangibles o no,
    también son capaces de mejorar la vida.

  • Bien económico: como un objeto que suple una
    necesidad y que ocupa un lugar en el espacio y/o un momento
    en el tiempo. A la calidad de ocupar un lugar en el espacio
    se le llama tamaño; a la calidad del momento que ocupa
    en el tiempo se le llama durabilidad: existen, en
    términos humanos, objetos durables y perecederos,
    permanentes o instantáneos.

  • Ingreso: como todo beneficio representable
    numéricamente, medible matemáticamente,
    verificable económicamente, que únicamente se
    obtiene y se alcanza al completarse definitivamente el ciclo
    económico que le atañe. Por su intermedio se
    satisfacen las necesidades materiales en general, entre las
    que se destaca el aumento del propio ingreso

  • Las necesidades, en un sentido más general,
    son aquellas faltas que son imprescindibles, en primer lugar,
    para mantener viva y sana a una persona. Posteriormente, las
    que se necesitan para mejorar esa vida con todas las
    seguridades y comodidades que pueda y deba producir la propia
    sociedad. Necesidades, específicamente, son aquellas
    cosas, materiales o no, que unos hombres poseen y disfrutan
    en tanto otros sufren su carencia. La necesidad de un bien es
    lo que lo hace útil.

  • La destrucción de la riqueza natural tengan
    razón de ser: es quien le da valor (valor social
    cuantitativo) al bien producido. La economía y sus
    herramientas la contabilidad, la estadística, etc. se
    deben utilizar desde el punto de vista del consumidor y no
    desde otro.

  • Un robo es un perjuicio siempre, porque por su
    intermedio un individuo o grupo se apropian de ganancias sin
    que repongan la riqueza que las generó: es la
    apropiación indebida de la riqueza generada por
    otros.

  • La especulación es otro perjuicio por
    ésa misma razón: apropiación de
    ganancias sin generación o reposición de
    riqueza.

  • La toma de ganancias sin generación o sin
    reposición no es trabajo, es delito. Sólo la
    culminación del ciclo iniciado es lo que garantiza que
    no haya perjuicio. Para el ciclo todo perjuicio
    económico es una falta, una infracción, un
    delito.

La vida no se conforma solamente de trabajo.
También tiene horas de descanso, de diversión, de
aprendizaje, etc. Tiene horas de sueño en ambos sentidos:
el sueño de dormir y el sueño de soñar. Por
lo tanto, la vida tiene dos características principales,
no excluyentes de otras: la vida es actividad, pero hay una vida
socialmente activa y otra que no lo es

  • El trabajo social consiste en crear, transformar y
    reponer riqueza. De allí que el trabajo puede existir
    solamente dentro del ciclo económico al trabajo como
    la actividad que realiza el agricultor o el obrero. Pero el
    estudio del ciclo nos muestra que la actividad deportiva
    también lo es; lo es la música o todo arte; lo
    es la medicina o toda ciencia.

El trabajo es cualquier actividad que crea, transforma y
repone cualquier tipo de riqueza. El trabajo es actividad.
Definitivamente debemos descartar el concepto común, y
equivocado, que se tiene de trabajo:

  • Por definición, las personas que no realizan
    ninguna actividad son las únicas que no trabajan, y es
    necesario conocer el motivo de esa inactividad, para que la
    sociedad pueda solucionar el problema (cuando ella es la
    responsable) o simplemente comprenderlo, captarlo, cuando no
    lo es.

  • Definimos al dinero, a grandes rasgos, como un
    patrón de medida de la riqueza social total (la suma
    de la riqueza natural y de la artificial, generadas mediante
    el trabajo). Él no es la riqueza, tal como el metro no
    es la distancia, ni el termómetro la
    temperatura

El concepto de escasez es clave en la economía de
"libre mercado". Pero el ciclo define a la escasez como falta de
riqueza, como falta de previsión, como perjuicio. Porque
ella misma es, de por sí, la demostración
práctica de la ineficiencia de la economía y de sus
ejecutores. Demuestra la ineptitud de sus responsables y, en
especial, de sus ideólogos. Utilizar la escasez como
explicación de la propia economía es una
incoherencia, un dislate, un absurdo.

  • El concepto de escasez es clave en la
    economía de "libre mercado". Pero el ciclo define a la
    escasez como falta de riqueza, como falta de
    previsión, como perjuicio. Porque ella misma es, de
    por sí, la demostración práctica de la
    ineficiencia de la economía y de sus ejecutores.
    Demuestra la ineptitud de sus responsables y, en especial, de
    sus ideólogos. Utilizar la escasez como
    explicación de la propia economía es una
    incoherencia, un dislate, un absurdo.

El ciclo nos dice que hay que preverla, evitarla y
derrotarla.

Así, queda definida la abundancia como aumento de
riqueza, como existencia de trabajo, como fruto y fin de la
previsión, como inteligencia. Es el cumplimiento efectivo
del ciclo económico; es su razón de ser. Hay que
alcanzarla siempre .A través del cumplimiento del ciclo
económico haremos posibles la libertad y la
liberación, la igualdad y la justicia, la solidaridad y el
enriquecimiento.

El ciclo
económico

La actividad humana es siempre destructiva; aunque puede
y debe no ser irreversible. La riqueza natural (la pesca, la
minería, la ganadería, la agricultura, la
silvicultura, etc.) es la única fuente verdadera de
riqueza; el hombre transforma esa riqueza, y durante ese proceso,
efectúa una destrucción real de ella. Cuando ese
proceso se ejecuta sobre la riqueza mayor de la naturaleza (la
vida) la destruye definitivamente. A veces, y sólo a
veces, ha reparado lo destruido, y sólo cuando su
acción se ha realizado en forma racional y
económicamente productiva (en la agricultura y en la
ganadería, por ejemplo), cosa que voluntariamente no
siempre ha hecho (la pesca es un buen ejemplo). Cuando el proceso
se realiza sobre riqueza natural sin vida (la extracción
de minerales, por ejemplo) también la destruye
definitivamente el hombre es incapaz de reponer lo
extraído; ejecuta un proceso de destrucción
irreversible sobre la naturaleza.

El accionar humano también cumple un ciclo casi
idéntico al de las hormigas; excepto que su actividad
necesita cumplir con una tarea extra para que adquiera un
carácter económico efectivo; el ciclo
económico humano consta así de una etapa
más: el hombre está obligado a completarlo mediante
la reposición de lo que ha extraído. Sólo el
hombre moderno (el que ha vivido durante y posteriormente a la
revolución industrial, especialmente el actual) puede y
debe hacer la reparación, pues la naturaleza es incapaz de
reponer lo extraído a la misma velocidad con que el hombre
lo destruye.

Entonces, el ciclo económico natural que
corresponde a la humanidad se conforma de tres etapas bien
diferenciadas: producción (extracción e
industrialización), comercialización y
reposición o reparación. Así es toda
actividad que realmente transforma, crea y no agota la
única riqueza a la que puede acceder para su propio bien:
la riqueza de origen natural.

En la vida real se suceden recursivamente -sin
solución de continuidad un número incalculable de
ciclos similares para cada diferente tipo de bien producido y un
número inmenso de ciclos idénticos para cada uno de
los mismos tipos de bien.

La producción es la primera etapa del ciclo y es
totalmente artificial en su forma y contenido. Mediante ella se
le agregan diferentes valores a los bienes que se van
produciendo: se agregan costos y beneficios. En una palabra, se
agrega riqueza racional. La ejecuta la actividad humana a
través del trabajo; en ella no interviene en absoluto la
naturaleza más que en su forma de ser humano.

Su magnitud es perfectamente calculable a través
del costo total que se generó cuando hubo que reponer la
misma cantidad de la riqueza natural destruida la anterior
"cancelación" del préstamo, la "siembra" anterior,
más los valores que se le agregan por motivo de los
insumos de la propia actividad del productor y del merecido
beneficio de éste: la retribución de su trabajo.
Todo productor obtiene un beneficio (que no es el único
que recibe) derivado de su actividad productiva.

Si la materia prima producida, por cualquier causa, no
llegara a pasar a las siguientes etapas, el ciclo nos indica que
se produce un perjuicio, un daño, que no podrá ser
revertido sin costos quizá enormes, costos que, en
última instancia, los pagará el productor
extractor, ya que por un lado, la naturaleza no podrá ser
retribuida normalmente, y por otro lado, el benefactor no la
accede, ni puede así pagar su costo de producción
El trabajo del productor extractor y el de la sociedad consiste,
justamente, en esto: reposición de la riqueza y pasar esa
materia prima a las etapas siguientes.

Si así lo requiere el bien final la
mercancía, la etapa productiva continúa cuando la
materia prima se transforma en un producto, mediante la
ejecución de otros diferentes métodos artificiales
(fabricación, elaboración, manufactura, etc.), en
los que también se agrega a su precio otra riqueza
racional (costos y beneficios). Suele dársele el nombre de
industrialización.

Esta etapa también destruye riquezas varias; por
ejemplo, en forma de energía consumida o en forma de
desperdicios no reponibles; todo aquello que integra

Lo que llaman insumos o costos relacionados al proceso
industrial. El trabajo, tanto del productor de esta etapa como el
de la sociedad, consiste en la elaboración del producto y
en la minimización de dichos perjuicios, además de
la cuota parte de la reposición que le corresponda. Esta
etapa aumenta el precio del producto que se originó en la
etapa extractiva: aumenta el costo social de producción.
Es evidente que no todas las materias primas deben pasar por ella
necesariamente.

Si el producto (nombre que le damos al bien que se crea
en esta etapa) no llega a la siguiente, se genera un perjuicio ya
irreparable: la materia prima que se destruyó en el
transcurso de este proceso, no tiene forma de ser repuesta y,
además, no será alcanzada por el benefactor. El
costo de este perjuicio lo sufrirá directamente el propio
productor de esta etapa, e indirectamente el de la etapa
anterior, la naturaleza y con ellos toda la
economía.

La segunda etapa es la comercialización. Es la
etapa en que el bien extraído o el producto según
el caso particular, se transforma en mercancía propiamente
dicha. En ella, al bien en venta se le ha agregado toda la
riqueza artificial (todos los costos y beneficios), cuya suma
conforma lo que se llama precio, que será pagado en su
totalidad por el benefactor. Con esta etapa se cumple el fin
principal y motivo fundamental de todo el ciclo que involucra
cada mercancía: alcanzar al benefactor y ser accesible por
él.

Por dos razones diferentes es fundamental que la
mercancía se alcanzada por benefactor: una, porque repone,
al consumir, una parte (y sólo una parte, aunque
fundamental) de la riqueza necesaria para la conclusión
del ciclo, y otra, porque él entrega parte del fruto de su
vida, de su propia actividad social (en la forma de dinero, de
indev), a cambio de esa mercancía.

Ésta acción que él realiza (la
compra) es lo que explica todo y cualquier proceso
económico; en especial la reposición antedicha,
pero también la obtención de los beneficios de cada
uno de los productores de las diferentes etapas del ciclo. Es el
momento en que el costo de un producto (que es un costo social)
se confunde con el precio (de cancelación individual); es
el momento en que todas su partes se unen y se convierten, para
el benefactor, sólo en costo, en costo puro: por eso el
producto ya es mercancía, y por eso el precio de venta
de cualquier mercancía es su costo social de
producción
, la tercera y última etapa del
ciclo, la reposición de la riqueza extraída,
producida y consumida. En ella sucede la restitución, por
parte del hombre, de la riqueza natural destruida, la
reparación total del daño.

Tiene una doble faz: la que realiza el productor al
volver a sembrar, y la que realiza el benefactor al consumir el
bien producido.

En resumen, el ciclo económico comienza con la
apropiación (en forma de préstamo) que se realiza a
la pachamama la cosecha, por ejemplo y finaliza con la
devolución de tal préstamo, la resiembra y el
consumo

Ésta es la única forma de ver el verdadero
orden en que el ciclo económico ocurre, no de otra manera.
Y si no se cierra un ciclo abierto , esto es, si la quita a la
naturaleza o el bien producido no llegan al benefactor, o el
productor de cualquier etapa abandona el trabajo antes de
completarlo, no se produce la necesaria reposición de
riqueza en cantidad suficiente para equilibrar la
extracción, para "saldar la deuda" adquirida con la
naturaleza.

Para terminar de cerrar el ciclo es imprescindible, como
mínimo, la reposición total de la riqueza
extraída. Pero inicialmente es conveniente el aumentarla.
Esta reposición se conforma de dos partes mutuamente
necesarias, incompleta la una sin la otra. Pueden darse en un
orden cualquiera, no específico, pero ambas deben ser
cumplidas obligatoriamente, para que no exista un perjuicio a la
naturaleza y un daño evidente a la economía. Lo que
implicaría que todo el trabajo realizado haya sido sea en
vano.

Análisis por: Reyes Henirse

Un ejemplo
ilustrativo

Trataremos de mostrar distintas cifras teóricas,
relacionadas con lo antepuesto, para ejemplificar la idea y para
darle un soporte matemático.

Supongamos una pachamama con forma de isla, desierta de
seres humanos, similar a tantas otras, habitable, aunque
podría no serlo. Hace bastante tiempo se enviaron a ella a
un grupo de científicos para que estudiaran las
posibilidades de su explotación.

Monografias.com

La isla fue estudiada con el objeto de analizar su
riqueza, la extensión de su espacio vital, y su capacidad
de explotación. Para ello se midió su superficie,
resultando de 10 km², y se consideró que sobre ese
territorio se apoya una pirámide invertida de aire, una
"columna" atmosférica que se va ensanchando hacia arriba,
hasta un límite impreciso, incluso infinito.

Esta representación piramidal tridimensional del
diagrama da una idea de ese espacio vital, que contiene y
representa una cantidad desconocida de riqueza potencial, que la
representaremos con una Y, cuya magnitud es enorme, tanto que se
puede decir que tiende al infinito. Esa riqueza Y era en aquel
momento, antes de la llegada de los científicos, igual a
una cifra que llamaremos riqueza natural Q.

Q = X + R

Vemos así que si la magnitud de Q puede
considerarse que tiende al infinito; la magnitud de X
también lo será, en tanto que para R (aunque su
magnitud no es la de Q), tanto su explotación concreta
como la potencial, en manos del hombre ambas, pueden llegar a ser
tan grandes como la propia Q.

La riqueza R actualmente accesible para el hombre, se
conforma a su vez de dos integrantes: la riqueza N, (los
"recursos naturales", de donde el hombre toma sus materias
primas) y la riqueza A de origen humano o artificial, conformada
por los bienes que han sido o serán producidos por el
propio hombre a partir de N. Ambos integrantes de R pueden
explotarse, únicamente, mediante la actividad creadora y
transformadora fundamental del hombre (la llamaremos T),
entendida como conjunción de trabajo y conocimiento, la
que está en acción permanente.

Monografias.com

Antes de la llegada de esos hombres a la isla, las
variables A y T tienen una magnitud nula, esto es, valen cero,
porque solamente existen donde está el hombre. Pero el
día en que ellos llegan el estado de riqueza de la isla
cambia en forma evidente. A la riqueza R (la riqueza natural
propia de la isla, de la que el hombre puede hacer uso) se le
agregó una riqueza nueva, la riqueza total H, que es el
resultado de la capacidad T humana de aumentar esa N en una nueva
N (llamémosla Nt) y la de transformar una parte de N en
una riqueza A enteramente nueva (llamémosle At), que
sólo el hombre puede aportar. Ahora A y T son valores
positivos distintos de cero.

Monografias.com

H es la riqueza total que el hombre puede crear y
usar desde la isla

R es la riqueza natural total de la zona que el
hombre habita

N representa lo que comúnmente se llaman
"recursos naturales"

A es riqueza artificial, todo bien o producto
material hecho por el hombre

T es la totalidad del esfuerzo humano,
físico e intelectual: el trabajo social

(No olvidemos que por ahora todas son
incógnitas.)

Los descubrimientos que realizan los científicos
demuestran que esa isla tiene posibilidades varias de
explotación. Su biodiversidad es potencialmente buena, y
posee recursos minerales interesantes. Inclusive se puede
explotar algunos tipos diferentes de cultivo. Puede y merece ser
habitada. Aconsejaron su colonización, debido a que la
variable N, componente de R, representa una cifra
significativa.

El hombre podrá recurrir a ella como un "capital"
inicial muy interesante, casi inagotable. Esta conclusión
nos confirma algo de una importancia fundamental: la riqueza (el
"capital") existe previamente a cualquier actividad. Alcanzado el
presente, nuestra isla hoy posee 100 habitantes.

Durante la ocupación y colonización
humana, la isla necesariamente sufrió destrucción
de parte de su riqueza natural N, conformadora de R. Se
eliminó parte de su paisaje, pero fue suplantado por otro,
artificial, cuyo valor es fácilmente calculable.
Así, parte de N se transformó en A, mediante el
trabajo representado en T, aumentando R su magnitud. Se mantuvo
así una igualdad relativa del su valor de R, porque a
pesar de que se disminuyó el valor de N, se aumentó
el valor de A. Es más, posiblemente creció la
magnitud de la propia N, al seguir desarrollándose la
sociedad isleña.

De la tierra se tomaron piedras, árboles, agua, e
incluso vida silvestre. Se le extrajo riqueza que fue utilizada
en provecho de sus nuevos habitantes.

También se construyó una carretera (algo
netamente artificial), cuyo costo total fue de una cantidad C (en
el que se incluye la extracción de terrenos N). Esa
magnitud C pasó a conformar el valor de A en forma
directa.

Decimos que la riqueza A aumentó una cantidad
igual a C; o que R aumentó una magnitud C (porque a
través de A esa cifra pasa a integrar la riqueza propia R
de la isla). Hemos visto la transformación de un costo
social C en un beneficio social C. Pero esa "metamorfosis" sucede
solamente al concluirse la obra y al empezar a ser utilizada por
quienes la necesitaban, pues ese fue el fin para el que se la
construyó. Es en ése momento en que ya no hay un
"costo" C, sino que existe un aumento de la riqueza
propia
R en una magnitud igual a C, pues ha llegado al
benefactor y éste la transformó, al usarla, en un
bien con valor social. Mirémoslo
matemáticamente:

R = N + A R" = N + A + C

Este es otro concepto fundamental, que a su vez explica
por qué llamamos benefactor al que se conocía como
consumidor: el usufructo o consumo de un bien que sólo
él puede efectivizar hace que su condición de
costo individual sea transformado en beneficio social
. Lo
que siempre es un costo individual para el benefactor,
por intermedio de él, y sólo por él, es
transformado en beneficio social, en aumento de la riqueza
social
, de R a R".

Basándonos en el conocimiento de que con la
riqueza propia R de esa isla se deben satisfacer las necesidades
materiales, de todos sus habitantes, y que éstos pueden
hacer uso de esa riqueza mediante su actividad T (única
forma de generar nuevos valores de A y reponer los valores N
consumidos), la actividad humana cumple con el ciclo
económico; proceso que en sí mismo representa
qué han hecho de bueno los habitantes de la isla. Vemos
entonces que sin T, el trabajo social o actividad social o
energía social, nada de esto es posible. Por eso
tendríamos que definir un valor concreto para esa variable
T.

Como el trabajo T del hombre que implica el uso de su
esfuerzo, su habilidad y su conocimiento en una unidad
inseparable no sólo hace la transformación de N en
una nueva A (en At), sino que puede y debe reponer lo tomado de
la propia N, con lo que el valor cuantitativo de aquella N
inicial será igual (aunque es preferible que sea
aumentado) al final del ciclo económico, en Nt:

At = T*A _ At > A

Nt >= T*N _ Nt >= N

Por lo tanto, el valor inicial de R (aquel N + A) fue
aumentado a un valor R" = Nt + At, en una magnitud positiva de
(Nt – N + At – A), confirmando que mediante su trabajo T se
ha aumentado el ya enorme valor de R, tal que R" >
R.

R" = Nt + At _ R" > R

Lo fundamental a tener en cuenta es que lo antedicho
demuestra que el crecimiento económico de una
población es independiente del "capital" monetario;
sólo depende de la población en sí misma
(uno de los "recursos" naturales), y de su capacidad de crear,
transformar y reponer riqueza. O sea que el crecimiento
económico o desarrollo general sólo depende de la
riqueza natural propiamente dicha, de la cantidad de habitantes y
de la conjunción de su capacidad de trabajo
productor-reponedor y de su actividad consumidora reponedora. En
definitiva, depende del cumplimiento estricto del ciclo
económico.

El dinero recién aparece cuando decidimos
utilizarlo como patrón de medida de la riqueza, cualquiera
sea la naturaleza de ésta (individual o social, natural o
artificial):

I = T/ P ó T = I*P

La magnitud del factor T se halla multiplicando el
ingreso mínimo I (mínimo, individual y
periódico) por la población, P.

Dijimos que ese ingreso I, es un mínimo esencial
que cada ser humano puede y debe poseer, individualmente. Hoy
está semi definido y se le llama costo de vida o canasta
básica, pero no ha tenido una definición
convencional precisa, por lo que lo estableceremos (en forma
arbitraria y para que sea entendible para todos) en una cifra de,
digamos, 1000 dólares estadounidenses mensuales por cada
habitante de la isla (I = 12.000 anuales), que a partir de ahora
le llamaremos ingreso natural, quedando establecido que
es un "piso" por debajo del cual no puede ubicarse el ingreso o
salario de nadie. Todos y cada uno de los salarios están
en o sobre aquel I. Como vimos en las definiciones, todo
habitante integra esa población, sin importar la edad,
"productiva" o no. Esta riqueza mínima, ese ingreso
natural anual de toda la población, lo representamos
entonces como la variable T, para ese período
dado.

T = I*P

T = 12.000 x 100 = 1,2
millones

Como el valor del factor T es el producto de multiplicar
la cantidad de habitantes ( P = 100) por el ingreso natural de
cada uno (I = 12 mil), dicha cifra ha de representar, por
definición y como mínimo, todo el trabajo de la
sociedad isleña, pero también debe representar,
necesariamente, la riqueza mínima anual que ese espacio
vital tendrá que generar y poseer (en su naturaleza y en
la capacidad de su población) para que todos sus
habitantes puedan tener un ingreso natural digno, que les permita
ir satisfaciendo todas sus necesidades. Esto es:

Si H >= R* T _ H >= R*
1:200.000

De aquí se deduce que la riqueza total H,
accesible, transformable y aumentable por el hombre, será
siempre un valor positivo mayor que el propio trabajo de
él y de su ingreso I (por exagerado que éste pueda
parecer); será mayor que el ingreso de la población
P que la genera y disfruta; será mayor que el producto de
ambos (a pesar de que para mantener el rigor matemático
hemos incluido el signo de igual). ¿Por qué
aseguramos que H es siempre mayor? Porque si T (el ingreso total
de la sociedad) es tan alto como para que tienda a igualar el
valor de H, su propia condición de creador de nueva
riqueza, (definida y demostrada anteriormente), hace que R
aumente a R", lo que demuestra que T nunca alcanzará a H.
Ya hemos dicho, además, que en condiciones normales, T y H
poseen un valor que siempre va en aumento. Sólo existe una
condición: si y sólo si se cumple con el ciclo
económico
. Esto es, si se cumple con la
reposición en sus dos formas de la riqueza
extraída.

Monografias.com

Vemos que el crecimiento de la población no
depende de la economía en sí misma, ni tampoco a la
inversa: la economía no depende del crecimiento
vegetativo. Éste depende de que la economía cumpla
o no con el ciclo económico, al igual que ésta
depende de que la población lo cumpla o no.

Podemos decir que incluso si esa isla fuera un simple
peñasco, o un islote de arena (una isla con escasos
recursos naturales), su riqueza propia R puede ser utilizada por
un número P de habitantes íntimamente relacionado a
ella, con las mismas posibilidades que cualquier otra sociedad
que se ubique en un lugar de mayor riqueza: vemos así que
el número de habitantes de un lugar está más
relacionado con la riqueza natural de la zona que eligieron para
vivir que con el consumo que realizan de ella; el número
de pobladores depende del uso que hagan de su riqueza natural y
de la reposición de lo que desde ella
extraigan.

Es obvio que una tierra árida no genera las
mismas posibilidades que una tierra fértil, pues se torna
más dependiente del factor T, más dependiente del
esfuerzo y el conocimiento de sus habitantes. Pero la realidad
nos muestra que un país árido como Kuwait o
tropical como Haití, incluso el planeta Marte o la luna,
tienen cada uno su propio valor R lo suficientemente alto como
para cumplir, mediante un T específico, con el bienestar
general I de un grupo P de habitantes íntimamente
relacionado a esa riqueza; esto es, permiten aplicar cada uno
su propio ciclo económico
.

Finalmente, el ciclo económico es lo único
absolutamente necesario de cumplir y hacer cumplir. Con su
cumplimiento nunca se llega a la disminución
crítica de los "recursos" naturales. Por su intermedio se
puede alcanzar el tan ansiado desarrollo o crecimiento ilimitado.
A través de él se alcanza el crecimiento
sustentable, sostenible, conservable, el que, como su propia
etimología lo indica, sólo puede darse en forma
natural.

Los
servicios

Es el único sector de la economía que no
genera riqueza, tampoco la destruye y le agrega un valor que se
integra totalmente al factor T. Es absolutamente dependiente del
poder adquisitivo de la población, por el simple hecho de
no ser creador de riqueza, sino distribuidor de ella. Pero, por
su propia función, es satisfactor de
necesidades.

Resulta indispensable, también, por su
función de distribuidor de bienes materiales e
inmateriales, y por su participación directa en la
generalización del conocimiento, de la seguridad, de la
salud, de la justicia en general, entre otras muchas
tareas.

Para el ciclo económico, por ejemplo, la
comercialización de cada producto es una parte integrante
de él mismo, por lo que los comercios en general forman
parte del proceso productivo y no integran los servicios
propiamente dichos. Otro ejemplo: el sector de la salud, un neto
servicio, continuamente repone la mayor riqueza: la
vida.

Llamémosle
indev

¿Se puede crear una moneda definida
científicamente, respaldada a través de una
fórmula matemática, cuyo valor resultante
esté definitivamente por fuera de los mezquinos intereses
de los hombres? ¿Puede ideársela de tal forma que a
su vez cumpla con la condición imprescindible de que el
hombre mismo sea su unidad?

Supongamos la existencia de esa moneda extraña,
"ideal". Que sea indevaluable. Que no necesite alimentarse de la
pobreza, como lo hizo hasta hoy, para continuar existiendo. Que
sea realmente útil para evitar todos o la mayoría
de los problemas materiales de la humanidad relacionados con el
dinero; preguntamos, ¿qué no lo
está?

Para ello debe tener una definición precisa,
clara y concluyente, que evite las imprecisiones y las
injusticias que éstas generan; imprecisiones que crean la
deificación absurda que siempre ha poseído el
dinero, en especial el actual. Llamémosle indev, por
indevaluable
, sólo por darle un nombre cualquiera que
la diferencie y la separe del concepto que hoy se tiene de
éste.

Imaginemos esa nueva moneda en acción. Al ser
indevaluable, rígida, los precios en todas sus formas
(salarios, ingresos, dividendos, etc.) serían reconocidos
y recordados como lo es el número de puerta de nuestro
domicilio.

Esta rigidez tendría que ser suficientemente
prolongada como para permitir tal memorización, para que
posibilite además que los contrastes entre los precios se
basen en la diferencia real que pueda existir entre las distintas
calidades o condiciones de cada bien producido, en el trabajo y
conocimientos contenidos en cada mercancía existente, y la
capacidad de satisfacción que obtengan de ella sus
consumidores.

Su indevaluabilidad mantendría el monto y el
poder adquisitivo de los salarios conjuntamente con el nivel de
los beneficios, en la producción y comercialización
de todo bien; haría posible definitivamente la
tranquilidad que nunca se tuvo de saber cuánto,
cómo y qué se cobra o se paga por cualquier bien
durante un período significativamente largo, sin subas ni
bajas artificiales, sin "atrasos" ni "adelantos" cambiarios, sin
devaluaciones ni ajustes.

Imaginemos que su propio valor, el valor que esa moneda
representa y que rige todas las interacciones económicas
de nuestra vida, no pueda ser variado por la voluntad de los
hombres al ser obtenido a través de un método
matemático concreto, no abstracto, real y vivo, que
esté por fuera y por encima de la enormidad de los
contrapuestos intereses que hoy lo influyen. Su valor debe estar
dado a través de un cálculo preciso, una
fórmula, de resultado inobjetable. Así
transformaría a esa moneda en un patrón de medida
tal como cualquiera de los que usamos habitualmente.

Imaginemos que su valor no tenga relación de
dependencia o de determinación al compararlo con el de
otras monedas. Imaginemos una moneda que realmente sea
útil y lógica, esto es, previsible, constante,
consecuente. En fin, que sea como nunca lo fue.

Con seguridad, solucionaría muchos si no todos
los problemas económicos que han existido, derivados desde
de la misma falta de definición del dinero, y de la
utilización incorrecta en verdad injusta que esa
"particularidad" permite. Claro que crearía otros
problemas nuevos. Eso es tan inevitable como imposible de
preverlos en este preciso momento; sólo su
aplicación efectiva podrá mostrarlos.

Esta moneda es la que proponemos: es el indev, el nuevo
dinero. Es el medio de consumo; es la conjunción de medio
de pago y cobro, medio de intercambio, unidad de cuenta de costos
y beneficios, sistema de medida y comparación. ¡Y
nunca jamás una mercancía!

El indev sería entonces la moneda que realiza la
socialización del acceso al hasta hoy único medio
de consumo utilizado. Quita la posibilidad despótica de
modificar su valor a quienes siempre la han tenido. Quita, en
parte, el privilegio de poseerlo a los que siempre lo tuvieron,
les quita su posesión en exclusiva, para repartirlo con y
entre los que nunca lo tuvieron. Los más infelices
serán los más privilegiados. Pero los
igualará hacia arriba, sin necesidad de quitárselo
a los que hoy lo poseen.

Partes: 1, 2, 3

Página siguiente 

Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

Categorias
Newsletter