Monografias.com > Otros
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

Tío Remus: Educación y Cultura




Enviado por Felix Larocca



Partes: 1, 2

  1. Las
    estadísticas hablan…
  2. El
    tío Remus
  3. Un
    entorno adecuado
  4. En
    resumen
  5. La
    confianza: La confianza en uno
    mismo…
  6. Confianza en nosotros mismos
  7. Cuestión de
    honestidad
  8. Las
    relaciones: cuidarlas o descartarlas
  9. La
    Independencia Emocional: El Tercer Paso
  10. Generalizaciones
  11. Antecedentes
  12. ¿Cómo es el dependiente
    emocional?
  13. ¿Cómo es la persona que el
    dependiente emocional busca?
  14. Factores determinantes
  15. La
    independencia espiritual
  16. ¿Por qué conviene ser persona
    culta?
  17. La
    experiencia, madre de la cultura
  18. Bibliografía

"Ten mucho cuidado cuando consigas todo
lo que quieres. Sólo los cerdos a los que se engorda para
la matanza consiguen todo lo que quieren.
" Joel Chandler
Harris

"Así lo hago porque estos
cuentos ilustran en detalle los dilemas existenciales de los
seres adultos, embellecidos en su narrativo, para que podamos
sublimar el impacto negativo que, de manera discreta, pueda
acompañarlos, dejando solamente la intencionada moraleja
como su único rastro.
" FEFL en El Síndrome
de Rapunzel…
Monografias.comPara crecer, para medrar, para mejorarnos en
entornos que requerían que fuésemos más
cultivados — en el pasado usábamos el cuento y
más tarde la fábula con moraleja, para proyectar el
ejemplo de la sofisticación y cultura.

Hoy… tristemente nada empleamos
hacia esos fines. Es como si a algunos, no les importa ser
ignorantes.

Monografias.com

De hecho, el ex presidente norteamericano
GW Bush, ha ganado distinción por adoptar la mediocridad
como estilo y la ignorancia como virtud.

Las
estadísticas hablan…

Los resultados de investigaciones recientes
en el aprendizaje de los niños, en los EEUU son tristes
— y aquí, me arriesgo a opinar, que serían
aún peores.

Por ello ofrecemos esta ponencia

Esta lección, agregado de varias que
hemos publicado anteriormente, la usaremos como una
propedéutica al arte de cultivar nuestras mentes y de
cómo transmitir esa práctica a otros.

El tío
Remus

Creado en el 1881 por Joel Chandler Harris,
constituyó, para el niño norteamericano de su
período, otra de las colecciones de leyendas
compensatorias con que ellos tendieran un puente entre la
Realidad — de la que ya mucho hemos hablado — y la
segregación esclavizadora de su país.

Este tío fue un negro vetusto que
contaba historias con moralejas a los niños quienes a
él visitaran.

No insinuación posible, en este
caso, del abuso al que hoy acostumbramos, cuando ciertos hombres
mayores acogen los jóvenes.

Prosigamos, entonces — ¿Por
qué lo hizo?

Monografias.com

Lo hizo — de acuerdo a su autor — para
mejorar el desarrollo de la autoestima en el niño
joven.

Veamos

Los seres vivos que nacemos altriciales,
dependemos del cuidado de nuestros padres y del soporte de
nuestro entorno para medrar harmoniosamente, porque nuestro
desarrollo siempre progresará, incluso en un ambiente
hostil. Por lo tanto, si queremos potenciar la autoestima de
nuestros descendientes debemos tratar de conocer qué tipo
de interacciones propician, anulan o dañan la
solidificación de su confianza, y qué actuaciones
les favorecen al respecto.

Hemos de partir de la premisa de que la
formación de la autoestima de los niños de ambos
sexos depende en gran medida de la relación que establecen
con adultos importantes en su vida, fundamentalmente sus madres y
padres, así como abuelos y familiares extendidos.
Serán ellos los vigías de su confianza y los
estimuladores de su auto-respeto. Ambas premisas
favorecerán una valoración personal que les
llevará a querer y respetarse a sí mismos y, por
extensión, a quienes les rodean.

El tío Remus, con sus fábulas
nos favorece una conexión entre nuestro pasado
dinámico con nuestra anamnesis personal. (Véanse
mis muchos artículos al respecto).

Si el niño o niña experimenta
valoración y aceptación de sus pensamientos y
sentimientos, percibe la importancia que se le da a su
existencia. Aunque, a veces, no nos guste la envidia de nuestros
hijos, sus celos, su cerrazón, su aislamiento, su rabieta,
su cabezonería, su llorar constante y una frialdad
retraída, trataremos siempre de apreciarlos por lo que son
y por lo que pueden significar. Incluso puede que las
características del niño o la niña no sean
las que deseábamos que fueran por no captar lo que les
estamos enseñando a ser.

Pero, aceptarles sin que cambien, o sin que
le ayudemos a hacer cambios es admitir, por mucho que nos cueste,
que ese hijo o esa hija es otra persona distinta y diferente de
nosotros, y que necesita más que nunca nuestra ayuda y
simpatías.

Si opera dentro de en un contexto de
límites bien definidos, firmes, y percibe lo que nos
importa. Es un buen comienzo para entendernos. Ahora bien, esos
límites habrán de ser justos, razonables y
negociables: no vale la libertad ilimitada, pues en esta
relación la falta de límites significa indiferencia
o rechazo.

Monografias.com

Soy bella, como mami…

Cuando los progenitores escuchan las
necesidades y deseos de sus vástagos y se muestran
dispuestos a negociar con ellos — por medio de la razón
— las reglas familiares; ellos están ejerciendo
autoridad y no autoritarismo. La autoridad escucha, observa y
negocia, pero también sanciona el incumplimiento de las
normas — algo estrictamente necesario para que el niño o
la niña pueda forjar su identidad y establecer su propia
valoración.

Si el hijo se siente respetado por su
dignidad como ser humano, ganará en confianza. Asimismo,
también aprenderá a valorarse — lo que no
será posible que lo consiga si no les enseñamos.
Esto, lo estaremos haciendo si examinamos sus decisiones,
escuchamos sus deseos, atendemos a sus necesidades y negociamos
las reglas establecidas en casa. Porque, respetarles no significa
dejar que hagan lo que quieren. La permisividad — actitud
entronizada por la costumbre en muchos hogares — es nefasta:
destruye el esfuerzo, la disciplina y el autocontrol, y con ello,
la confianza en uno mismo.

Nuestra responsabilidad es enseñar y
la labor de ellos es aprender, pero será él o ella
quien se sitúe en el mundo, salga o no de nuestros
límites. Intentar dirigir sus elecciones, de modo
arbitrario, significaría anular su responsabilidad para
con ellos mismo y para con sus propias vidas. No puede haber
autoestima sin el ejercicio de la responsabilidad — por eso es
necesario que les enseñemos a ser honestos.

Si el nivel de autoestima de los padres es
alto, hay más probabilidades que ocurra lo mismo con el de
sus hijos, aunque no siempre será así. Cuanto
más se valoren a sí mismos los padres — aunque
sin caer en excesos — más fácilmente
podrán trasmitir esa noción a sus hijos; con la
importancia de quererse a sí mismos. Una autoestima bien
asentada ayudará a los progenitores a educar a sus hijos,
pues padres y madres son modelos de aprendizaje, importantes y
necesarios para que el niño inicie su camino partiendo de
algo a imitar y que le indica el derrotero y cómo
recorrerlo.

Monografias.com

Lo que yo peso no es todo en la
vida…

Un entorno
adecuado

La falta de autoestima se manifiesta como
un problema, generalmente pasada la adolescencia, pero
también está demostrado que la autoestima se puede
recuperar, adquirir o potenciar. Por ello, nos interesa conocer
en qué medida se propicia en el proceso educativo y
formativo. Para lograrlo hay que crear un entorno de seguridad
que se sustenta en tres columnas: cariño,
aceptación y respeto. Parece obvio, pero hay que
entenderlo bien.

Las tres
columnas

Amarle por quién es, por su
existencia y por su derecho a ser querida o querido,
independientemente de que nos guste cómo piensa, siente, o
se comporta.

Aceptarle tal cual es, y no en la medida en
que sigue nuestros preceptos y responde a nuestras expectativas.
Aceptar, sin embargo, no es sinónimo a abdicar nuestra
autoridad o a renunciar nuestros deberes.

Respetarle en sus decisiones de por
dónde y cómo quieren llevar su vida. Ayudarles en
todo. Hacerle ver, cuando esas decisiones nos parezcan
equivocadas, por qué no se consideran correctas, pero
nunca impedir que intente llevar a cabo lo que considere
oportuno. Cometer errores es parte esencial de todo
aprendizaje.

El padre y la madre, en
armonía

Monografias.com

Cuando existen dos cónyuges en la
pareja, puede que el padre y la madre discrepen y no tengan igual
opinión sobre alguna cuestión que afecte a la
educación de los niños, pero esto no supone
ningún inconveniente, e incluso esas discrepancias pueden
ser ventajosas. Lo que sí afectará a la seguridad
del niño es que sus progenitores no estén de
acuerdo en las decisiones finales. La importancia no está,
por tanto, en la diferencia de opiniones, sino en la no
unanimidad, libre de conflictos, en las decisiones.

Es que técnicamente, no hay problema
en que los padres y madres cambien de opinión ante un
hecho o una norma, y en que se lo hagan saber a sus hijos
explicándoles el motivo. Esto no supone merma de
credibilidad, pero en cambio, es un ejemplo de flexibilidad y de
acomodo a las circunstancias — La rigidez y la inflexibilidad
no caben en un proceso educativo, donde asumir los riesgos de
cambios es parte de la instrucción.

El compromiso como padres y madres para
posibilitar una alta autoestima en vástagos está
relacionado con las siguientes condiciones:

  • Tener presente que el hijo es otra
    persona, independiente y distinta de los progenitores o
    guardianes.

  • Ofrecerle una seguridad basada en la
    coherencia, es decir, en la coincidencia entre lo que se
    enseña y lo que se hace.

  • Hacerle sentirse observado, guiado y
    comprendido. Transmitirle que es persona única y
    especial.

  • Amarle desde la expresión
    verbal, mostrándole el gozo que tenemos por su
    existencia. El tacto es el gesto esencial para que pueda
    sentirse querido. Tocarle, besarle, acariciarle no
    sólo cuando es bebé, también cuando
    rechaza, por pudor, esa muestra.

  • Aceptarle tal como es, pero, sin
    glorificar sus defectos y sin volvernos promotores de sus
    desatinos. Sólo así aprenderá a
    autoanalizarse para, finalmente, aceptarse con
    madurez.

  • Respetarle como es, aunque su estilo de
    vida contradiga el nuestro, y sin adoptar el suyo.

  • Marcarle límites justos,
    razonables y firmes.

  • Ofrecerle normas y altas expectativas
    por lo que respecta a su comportamiento y rendimiento. No una
    actitud del "todo vale", pero tampoco una de "no
    vales".

  • Brindarle elogios y críticas
    dirigidos a su conducta y comportamiento, nunca a su persona.
    Cuidar por tanto el lenguaje, que puede ser muy
    crítico, aunque parezca superficial y
    transitorio.

  • Motivarle a tomar de decisiones, a
    experimentar, a asumir riesgos, a hacer y a responsabilizarse
    de los mismos. No privarle de cometer errores. No
    sobreprotegerle.

  • Pero, cuando sus deseos son radicales y
    exceden los límites de nuestros principios,
    hacérselos saber sin resquemores.

  • Porque nuestra autoestima
    también cuenta.

Monografias.com

En
resumen

La autoestima constituye un capítulo
muy amplio del desarrollo humano para cubrirlo brevemente. Lo que
aquí pretendemos hacer es impartir normas generales para
personas familiares con la psicoterapia, para que las adapten a
sus conocimientos.

Personas ajenas a la auto-inspección
y al auto-escrutinio no serían beneficiarias de estas
pautas.

Ahora, consideremos otra
lección…

La confianza: La
confianza en uno mismo…

Con paciencia, tiempo, sensatez y
conocimiento de nuestras limitaciones nos convenceremos de la
valía de nuestras aptitudes y actitudes.Monografias.comLa confianza es el
convencimiento que alcanzamos sobre nuestras propias capacidades
y limitaciones. Se asienta en nosotros a medida que constatamos
nuestra aptitud en las tareas que realizamos y al tiempo que
logramos la habilidad para mantener relaciones de calidad con los
demás. Es, por tanto, un sentimiento que se genera en
nuestro interior y de cuyo desarrollo somos responsables. En la
infancia necesitamos que el entorno, y en especial el padre y la
madre, aporten seguridad, atención y nos haga sabernos
queridos. Más tarde y a lo largo de toda la vida, aunque
sigamos necesitando ser escuchados, respetados, valorados, y
queramos saber y sentir que se cree en nosotros y en nuestras
capacidades, debemos tener presente que la confianza hemos de
cultivarla personalmente. Para ello debemos actuar y formalizar
relaciones bajo la premisa de tener paciencia, darnos tiempo,
cuidar las formas y no olvidar evaluar y valorar cada una de
nuestras acciones, no con el propósito de apreciarlas,
sino con el fin de constatar nuestras capacidades y conocer
nuestras limitaciones.

Monografias.com

Confianza en
nosotros mismos

Para poder sentir que los otros creen en
nosotros hemos de ser nosotros los primeros en sabernos
válidos. Es imposible creer que los demás
confían en nosotros si nosotros mismos no lo hacemos, pues
la confianza nunca viene dada de fuera. Si no hay equilibrio
interno pensaremos que el apoyo, el aplauso o la
admiración que se nos ofrece para animarnos, por guardar
las formas o, en la mayoría de las ocasiones, porque no
nos conocen realmente y se quedan en la imagen que les estamos
proyectando, es decir, creemos que les estamos engañando.
Esto sucede porque hacemos las tareas con la vista puesta en los
demás, esperando su aprobación y
beneplácito, sin un convencimiento interior. Al carecer de
una guía personal que nos oriente en la consecución
de nuestra meta o del proyecto de nuestra vida, el esfuerzo que
debemos realizar es mucho mayor, y lejos de potenciar nuestras
habilidades, debilita y destruye la confianza en nosotros mismos,
y con ello la autoestima. ¿Por qué? Para contar con
una buena autoestima debemos estar convencidos de que somos aptos
para la vida que hemos elegido llevar.

Quien no goza de confianza en sí
mismo, posterga las decisiones, da largas a los asuntos
pendientes, va dejando cosas sin hacer por el camino y mantiene
una actitud de parálisis. Con todo esto, no consigue sino
certificar que ciertamente es una persona en quien no se puede
confiar.

Cuestión
de honestidad

Monografias.com

"… es verdad, pero no lo
repitas…"

Al ser tan necesario que sea verdadera, la
confianza no puede ser ciega sino que ha de estar sustentada en
el conocimiento personal. Un conocimiento totalmente honesto
sobre nuestras posibilidades y nuestras barreras, de forma que al
acometer cualquier tarea o iniciar relaciones interpersonales
sabremos manejar las expectativas para conseguir éxitos y
no acumular fracasos, en términos de cantidad y de
calidad. Si no hemos sido honestos y fallamos tendemos a
desvalorizarnos, a sentirnos menos que el resto de la gente y a
pensar que nuestras opiniones no son tan importantes ni
interesantes como las de los demás. En definitiva, que no
somos personas atractivas ni dignas de tenerse en cuenta.
Mantendremos entonces pocas expectativas, muchos silencios y un
lenguaje no asertivo. Ni pediremos ni reclamaremos, con lo que
nos condenamos a una invisibilidad que nos destruye. Pasamos a
ser personas dependientes y otorgamos autoridad sobre nuestras
vidas a todos aquellos a quienes creemos superiores y más
sabedores de lo que necesitamos nosotros que nosotros mismos. Una
alerta para saber que nuestra confianza está vulnerada es
analizar las dudas, permanentes compañeras de viaje de
quien no cree en sí mismo. Aparecen dudas sobre
cómo hacer, qué hacer; sobre los demás y
sobre su honestidad, pues el listón de medir que se aplica
a los demás, es el mismo que se tiene para uno
mismo.

Si se desconfía de uno, se es
escéptico con el otro, lo que conduce a una visión
negativa de todo y de todos. Se es una persona tensa y con
tendencia a controlar las relaciones sociales, que además
desconfía de la amabilidad gratuita de su interlocutor. La
falta de confianza provoca que se asuman imprudentemente o no se
asuman los riesgos y dificultades del acontecer cotidiano, con lo
que se va dejando de aprender, de experimentar y en definitiva,
de vivir el día a día.

Potenciar la confianza en
nosotros viene de la mano de…

Conocernos todo lo posible y de una forma
continuada, ya que vamos experimentando cambios, con la
máxima honestidad.

  • Vivir activos: opinando, eligiendo,
    escogiendo, significándonos.

  • Valorar y congratularnos de nuestras
    capacidades y posibilidades.

  • Constatar nuestras limitaciones, para
    saber ser realistas.

  • Afrontar retos y riesgos con prudencia
    y sensatez.

  • Iniciar y mantener relaciones de
    calidad, donde la comunicación abierta, positiva y
    sincera sea una constante.

  • Dejar de lado la tensión y el
    control continuo.

  • Permitirnos mostrarnos tal cual somos,
    sin disimulos ni máscaras o escudos.

Monografias.com

"Está
garantizado…"

Las relaciones:
cuidarlas o descartarlas

Si bien la confianza nace en nuestro
interior, su crecimiento y desarrollo está muy ligado a
las relaciones que mantenemos y a las respuestas que obtenemos en
ellas. Por ello, es también nuestra responsabilidad
seleccionar, cuidar y abrazar las personas con las que nos
rodeamos y algo muy importante, apartarnos de las que minan
nuestra confianza y, por ende, nuestra autoestima.

Habremos de entender que para que exista
una relación es imprescindible que exista confianza, por
lo tanto, en nosotros está el abrigar una buena confianza
como punto de arranque y garantía de la buena salud de
nuestras relaciones. Esto nos permitirá salir de nosotros,
abandonarnos en los otros y mostrar nuestra vulnerabilidad. Un
ejercicio necesario para que las relaciones, amorosas, familiares
o fraternales sean un verdadero encuentro sereno y cómodo,
que posibiliten un enriquecimiento personal. Nos
permitirán vivir en equilibrio, armonía y
autenticidad.

En consecuencia, confiar en nosotros es
abrir la puerta para hacer el camino de nuestra vida, y es
también la esperanza y la ilusión con la que se
mueve una existencia que sabe de su sentido y proyecto
allí donde vive.

Monografias.com

¡Vivir!

En resumen

La confianza — como Erikson propuso —
es algo que se ingiere desde el seno de la madre — es la misma
fe en que alguien nos dará alimento y amor — algo que
tantos seres humanos nunca podrán adquirir, porque nunca
pudieron.

No confundamos quien posee la capacidad
para la "Fe Básica" de que Erikson nos dice, con quienes
evaden este período y se asientan confortablemente en la
mentira y en la manipulación — nunca creamos en
ellos.

Seamos generosos, más nunca seamos
incautos.

La Independencia
Emocional: El Tercer Paso

Nosotros hemos dado muchos "pasos" en la
UD. "El Tercer Paso" es el que nos libra de la
dependencia pasiva en la aprobación de los demás
— porque nunca fuimos aprobados, por quisiéramos haberlo
(de niños) sido, o porque no sabemos cómo dejar,
todavía, de quererlo ser.

Propósito

Facilitar los elementos y acciones firmes
que requiere la práctica de nuestro Tercer Paso, para
lograr una serenidad permanente y una vida satisfactoria y
útil a través de buscar la independencia
espiritual.

¿Hemos reflexionado alguna vez
acerca de lo siguiente?:

  • ¿al cuidado y protección
    de quién he decidido poner mi vida?,

  • ¿la he colocado en manos de mi
    familia, mis amigos, o mi trabajo?,

  • ¿la tengo depositada al cuidado
    de la voluntad de un Poder Superior?

Preguntas esenciales:

  • ¿En mi infancia, de
    quiénes me interesaba adquirir aprobación y
    afecto?

  • ¿Cómo obtenía
    muestras de cariño, aprobación y
    aceptación de los adultos más importantes en mi
    vida?

  • Veamos nuestra relación de
    pareja (o relación con la persona más
    importante actualmente) y pensemos:

  • 1. ¿Cuál fue mi
    razón para empezarla? :

¿Verdadero amor?

  • ¿Mi temor a la
    soledad?

  • ¿Mi necesidad de ser aprobado
    socialmente?

  • ¿Mi necesidad de obtener
    amor?

2. ¿Esta relación me permite?
:

  • ¿Ser yo mismo?

  • ¿Hacer las cosas que me
    gustan?

  • ¿Sentirme realizado?

  • ¿Estar satisfecho con el
    complemento que me otorga la otra persona?

Monografias.com

Generalizaciones

Continuamente sentimos que estamos
complaciendo los deseos y necesidades de otras personas sin haber
alcanzado los nuestros; consideramos que trabajamos demasiado y
que los demás aprecian poco lo que hacemos; que les
brindamos toda la atención que necesitan ante sus
dolencias, perturbaciones, malestares, y sin embargo cuando somos
nosotros quienes necesitamos de ellos no les importa cómo
estemos o de qué manera nos sintamos.

Lo que es la dependencia
emocional:

  • Si los otros están contentos con
    nosotros entonces estamos felices, si los demás:
    Familia, amigos, vecinos, compañeros de trabajo,
    amistades casuales, nos aprueban, entonces sentimos que
    valemos la pena.

  • Si sufrimos de un profundo temor porque
    lo que digamos o hagamos pueda ofender a alguien, y mejor
    evitamos los desacuerdos para no ser rechazados.

  • Si estamos constantemente anteponiendo
    las necesidades, deseos y demandas de los demás, a las
    nuestras. Decimos sí, cuando realmente
    deseábamos decir no.

  • Si necesitamos estar en manos de otras
    personas para poder percibir lo bueno de nuestra propia
    imagen, obtener felicidad a cambio de sacrificar lo que
    realmente deseamos y necesitamos, por temor a ser
    abandonados, desplazados o rechazados.

  • Si en vez de construir y ganar nuestra
    propia autoestima, estamos buscando la aprobación de
    otros para obtenerla.

Monografias.com

Principio

La dependencia emocional es "un
patrón de necesidades de soporte insatisfechas desde la
niñez, que ahora de mayores, procuramos satisfacer,
mediante la búsqueda de relaciones interpersonales
muy
abrumadoras" dice FEFL. (Para leer más:
http://www.monografias.com/trabajos56/dependencias-adictivas/dependencias-adictivas).

Antecedentes

No sentimos que fuimos adecuadamente
amados, valorados, comprendidos y apreciados, por las personas
que serían más significativas para nosotros
(papá, mamá, mujeres que nos criaron, maestros, los
sirvientes) en nuestras vidas pasadas. Es un proceso
subconsciente de larga duración que se inició a
corta edad.

En la medida que nuestros padres nos
ayudaron, o fallaron, en satisfacer nuestras necesidades de
afecto apenas siendo unos niños, empezamos a trastornarnos
emocionalmente. Esto establece los vínculos determinantes
con las personas que nos rodean en el presente.

Los seres humanos sentimos el afecto o la
falta del mismo, desde que estamos en el vientre de la madre.
Registramos todas las emociones maternas y desde allí
hasta que llegue cerca de los 6 ó 7 años, el trato
que nos brinden podrá determinar nuestro
carácter.

Monografias.com

De niños sentimos la amenaza de
perder el afecto de nuestros padres si no acatábamos lo
que ellos decían, traducido en que, desde muy temprano en
la medida en que dicho sometimiento era más o menos
intenso, aprendimos a amarnos y apreciarnos o a rechazarnos y a
renunciar a nosotros mismos: "hacemos todo lo posible para
cumplir con sus expectativas, muchas veces alimentadas por su
frustración o patrones deteriorados que nos convierten en
víctimas del abuso emocional a temprana
edad" (dice,
asimismo, Larocca).

El modelo de la familia en que nos criamos
continúa empleando como en los viejos tiempos, el chantaje
afectivo como un mecanismo para obtener sumisión y
obediencia, es decir, nos acostumbramos y vemos como natural, el
hecho de que para evitar perder el afecto de nuestros padres,
amigos o parejas, tengamos que renunciar a nuestros intereses
permitiendo que nos gobiernen los de ellos:

  • Para tener contento a papá y
    mamá había que sacar buenas notas, de lo
    contrario nos hacían sentir que éramos los
    culpables de su ira, de su disgusto y de los castigos que nos
    propinaban.

  • Nuestros amigos o amigas eran aquellas
    personas que gozaban la aprobación de nuestros
    progenitores, de lo contrario teníamos que sostener
    amistades clandestinas y relaciones secretas, que era
    peor.

  • Cuando mamá se enojaba por algo
    que no hacíamos y que no era de su agrado, nos
    amenazaba con "ya no te voy a querer", "me voy a
    enojar contigo y ya no te voy a
    hablar", y en casos
    extremos nos amenazaban con "te voy a regalar a ese
    viejito que viene
    allí" o "…que te
    robe ese hombre, yo ya no te
    quiero". Nos llenaban de
    terror ante la amenaza de perder la protección y
    seguridad que sólo de ellos podíamos
    obtener.

Así se doblega nuestra voluntad y
nos convertimos en los adultos sumisos que somos y que estamos
dispuestos a tragar todo el descontento que significa establecer
relaciones destructivas con las personas menos indicadas, pero
que nos harán repetir una y otra vez ese círculo de
temor oculto y baja autoestima en que nos quedamos estancados y
que nos incapacitará para enfrentar los momentos
más críticos de nuestra vida.

Equivocadamente en nuestra vida de adulto,
hemos decidido que otras personas deben cubrir nuestras carencias
tempranas de afecto y aprobación que no hubo en la
infancia.

Monografias.com

Madre del Río Urubamba

¿Cómo es el dependiente
emocional?

  • Continuamente se encuentra padeciendo
    de graves necesidades espirituales, principalmente de falta
    de afecto.

  • No espera ni busca cariño,
    porque nunca lo ha recibido y tampoco, por esa misma
    razón, está capacitado para darlo.

  • Simplemente se apega a alguien que
    idealiza, aunque poco lo merezca.

  • Le interesan amistades arriesgadas
    porque, en su deficiente autoestima, le provoca
    fascinación el encontrar una persona tremendamente
    segura de sí misma, con cierto nivel de éxito o
    capacidades, a veces más supuestas que
    reales.

  • Entiende el amor como adhesión,
    enganche, sumisión, admiración a la otra
    persona y no como un intercambio recíproco de
    afecto.

¿Cómo son sus
relaciones?

  • Su relación con otra persona se
    basa en la necesidad excesiva de aprobación: Vive
    preocupado con caer bien, incluso a personas que ve por
    primera vez o que le son desconocidas.

  • Se empeña en producir una buena
    apariencia, al costo que ésta sea.

  • Expresa de distinta manera sus demandas
    de atención y afecto: haciendo regalos o favores que
    no le piden, preocupándose y estando pendientes de los
    demás, para todas las cosas.

Está lleno de
expectativas irreales por su anhelo exagerado de tener
compañía:

  • Se llena de ilusión y
    fantasía al comienzo de una relación, creyendo
    que ha encontrado a la persona que siempre ha andado
    buscando, al encontrarse con una persona
    interesante.

  • Uno de los pocos momentos felices de su
    vida es al comienzo de una relación o ante la
    posibilidad de que esto ocurra.

Monografias.com

Anhela relaciones
exclusivas pero parasitarias:

  • Siente necesidad continua de disponer
    de pareja, amigos, hijos, y demás.

  • Vive pendientes de ellas, incluso
    llamándolas constantemente a su trabajo,
    controlándolas, vigilándolas, queriendo conocer
    hasta el último detalle de lo que hacen con su vida
    privada.

  • Invade la vida privada de la otra
    persona con sus demandas e intrusiones.

  • Agobia a su pareja con excesivas
    solicitudes de atención y de
    consideración.

El dependiente, ocupa una
posición subordinada en la relación:

  • Por su pobre autoestima.

  • Porque elige parejas narcisistas y/o
    explotadoras.

La relación conduce
a una continua y progresiva degradación:

  • Porque soporta desprecios, maltrato
    físico o emocional y humillaciones.

  • Porque nunca cree que recibe verdadero
    afecto.

  • Porque sus propios gustos e intereses
    son relegados a un segundo plano.

Son relaciones que no
llenan el propio vacío emocional, solo lo atenúan o
lo agravan, ya que el problema no está resuelto y para
hacerlo así, se debe entrar en contacto y conocimiento de
los propios sentimientos más ocultos:

  • No se cree que se recibe afecto,
    deteriorando aún más la autoestima.

  • No se reconoce a uno mismo porque nunca
    se ha tenido a uno mismo, en cuenta.

Las rupturas son
auténticos traumas:

  • El deseo de tener una relación
    es tan grande que se busca una relación después
    de otra.

  • Se tiene un prolongado historial de
    rupturas y nuevos intentos.

  • Se cae en estados
    depresivos.

Se posee una autoestima muy
pobre, y un auto-concepto muy negativo:

  • No se ama a sí mismo porque
    nunca uno ha sido adecuadamente amado, ni valorado por las
    personas significativas, sin dejar por esto de estar
    vinculadas a ellos.

  • Porque el desamparo emocional y su
    vacío se manifiestan más cuando no uno no
    está enredado en una nueva relación.

Los trastornos emocionales
se hacen mayores cuando existe:

  • Depresión (muy grave cuando la
    relación se rompe)

  • Ansiedad (más agudizada cuando
    la relación está en crisis.

  • Abuso de sustancias (especialmente
    cuando la relación peligra).

Monografias.com

¿Cómo es la persona que el
dependiente emocional busca?

Estas son personas que
reúnen condiciones para ser idealizadas:

  • Proyectan tener un alto concepto de
    ellas mismas.

  • Afectan ocupar posiciones
    emocionalmente superiores a la autoestima de la persona
    dependiente.

Tienden a ser narcisistas y
explotadoras:

  • Las personas elegidas son muchas veces
    manipuladoras y egoístas.

  • Carecen de empatía y
    afecto.

  • Creen que poseen privilegios y
    habilidades fuera de lo común.

  • El carácter sumiso y torturado
    de la "víctima", como dependiente emocional, no hace
    más que perpetuar estos rasgos.

Buscan una posición
dominante en la pareja:

  • La persona dependiente asume la
    posición subordinada.

Los dependientes
emocionales se someten como un medio para preservar la
relación:

  • No ensombrece, ni opaca su imagen
    porque no les hace perturba la baja autoestima del
    otro.

  • Les admiran continuamente.

  • Ignoran sus defectos y se ensalzan sus
    virtudes.

  • Aceptan como normales su desprecio, la
    humillación, y la vergüenza provocada en
    público.

Monografias.com

Factores
determinantes

Privación y carencia
temprana de afecto:

  • No sentirse haber sido adecuadamente
    queridos y valorados por las personas más
    significativas en la vida aunque se deseaba con todas las
    fuerzas no se podía renunciar a esa
    relación.

Se aprendió que la
sumisión es una estrategia:

  • Para evitar el abandono, y el
    rechazo.

  • Para obtener seguridad, y
    protección.

  • Se entendió que para ser amados
    era necesario cumplir con las expectativas de los
    demás, nunca importunarlos o alterarlos o provocarlos,
    antes bien, sofocar sus estados de ánimo que
    harían daño.

  • Interpretar el amor como un apego
    obsesivo y admiración hacia la otra persona en lugar
    de un intercambio recíproco de afecto.

  • Sentir el rechazo materno.

  • Revivir la crianza fría,
    frustrante que le dieron.

  • Se sintió la presencia
    física pero no emocional de los padres.

  • Se perpetúa la
    vinculación emocional aún siendo
    insatisfactoria y se sufre la crueldad y el
    maltrato.Monografias.com

Monografias.com

Partes: 1, 2

Página siguiente 

Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

Categorias
Newsletter