Presupuesto por proyecto – Monografias.com
Presupuesto por
proyecto
En el mundo moderno, donde los cambios y las
transformaciones, son el día a día dentro del
ámbito empresarial, una gerencia efectiva, se convierte en
un requisito fundamental para la existencia, firmeza y desarrollo
constante de las empresas modernas colocándose a la par de
las condiciones altamente desafiantes y móviles del
mercado actual. En tal sentido, el concepto de gerencia,
dirección, competitividad, permite transformaciones a
todos los niveles y cambios de paradigmas, inclusive en el
ámbito educativo, en donde es fundamental tener en cuenta
el gerenciamiento eficaz cuando se habla de procesos
administrativos.
En la actualidad, y partiendo de la acotación
anterior, cualquier institución tanto pública como
privada, necesita la obtención de recursos financieros,
tecnológicos y humanos para lograr optimizar el
funcionamiento de sus actividades y así alcanzar de esta
manera las metas trazadas. Sin embargo, el éxito
organizacional, no depende de la obtención de dichos
recursos, sino en la manera en que los mismos son utilizados y
aprovechados, para con ello garantizar la continuidad de las
operaciones planificados.
Por esta razón, hoy en día las
instituciones públicas entre las cuales cabe mencionar los
centros educativos, específicamente las universidades,
atraviesan una gran dificultad en cuanto a los recursos
financieros, debido a que en su mayoría, estas
instituciones necesitan grandes sumas de dinero para alcanzar sus
metas u objetivos y satisfacer las necesidades de la
organización, tanto a nivel económico, social y
cultural. Sin embargo, cada vez es más dificultoso para
los decanos (as), directores (as), administradores (as) o
coordinadores (as) de estas casas de estudios, implementar
controles administrativos que faciliten el uso apropiado de los
recursos y realicen una gestión financiera
óptima.
A tal efecto, el tema de la nueva gestión
pública en Venezuela, cobra gran interés desde hace
poco años, al respecto Moreno (2008), señala que
para las universidades nacionales, la nueva estructura
presupuestaria por Proyectos y Acciones Centralizadas exigida a
la administración pública venezolana por el
Gobierno Nacional, condujo a una reforma de la manera como se
venía planificando, asignando recursos y realizando
controles y evaluaciones.
En tal sentido, el Presupuesto por Proyectos de acuerdo
a la ONAPRE es un instrumento para asignar y distribuir los
recursos públicos a través de proyectos, a los
entes u organismos nacionales, estadales y municipales en
función de las políticas y objetivos
estratégicos de la Nación, expresados en los
respectivos Planes Anuales; además coordinar, controlar y
evaluar su ejecución.
Igualmente, el presupuesto por proyecto se
acompaña de acciones centralizadas las cuales comprenden
todo uso de recursos reales y financieros que no es posible
definir en términos de proyectos, por no poder asociarse
directamente a un único proyecto, pero que son necesarios
para garantizar el funcionamiento de las instituciones
públicas, así como el cumplimiento de otros
compromisos del estado. (Onapre, 2012)
Así, lo que anteriormente era un Presupuesto por
Programas pasa a ser un Presupuesto por Proyectos y Acciones
Centralizadas, como lo establece la LOAFSP (2003) en su
artículo 14: "Los presupuestos públicos de gastos
contendrán los corrientes y de capital, y
utilizarán las técnicas más adecuadas para
formular, ejecutar, seguir y evaluar las políticas, los
planes de acción y la producción de bienes y
servicios de los entes y órganos del sector
público, así como la incidencia económica y
financiera de la ejecución de los gastos y la
vinculación de éstos con sus fuentes de
financiamiento". Para cada crédito presupuestario se
establecerá el objetivo específico a que
esté dirigido, así como los resultados concretos
que se espera obtener, en términos cuantitativos, mediante
indicadores de desempeño, siempre que ello sea
técnicamente posible. El reglamento de esta Ley
establecerá las técnicas de programación
presupuestaria y los clasificadores de gastos e ingresos que
serán utilizados. (Reglamento Nº 1 de la LOAFSP Art.
2-3-4-6).
Lo anterior, significó una adecuación de
los sistemas administrativos e informáticos de soporte a
los procesos de gestión institucional (aún en
proceso) y lo que es más importante, una adecuación
a la manera de planificar de la academia formulando en lo
sucesivo "proyectos".
Esta nueva visión administrativa dentro de las
universidades, implica una revolución, o mejor
replanteársela en toda su estructura académica,
específicamente en lo que respecta a una de sus funciones
iniciales, como lo es la formación de profesionales, ya
que son simplemente muy pocas las universidades que
concebían a sus carreras de pregrado y a sus programas de
postgrado como proyectos en el sentido estricto de lo que se
conoce como tal, con lapsos claramente definidos y tiempo
específico de duración.
Señala Moreno (2008), que con la nueva estructura
social que se pretende
consolidar en el país, el gobierno le exige a las
universidades una mayor interacción con las comunidades y
un mayor impacto con sus productos/servicios institucionales.
Asimismo, indica, que las universidades desempeñan algunas
funciones que dan apoyo a sus procesos fundamentales tales como
las relativas a desarrollo estudiantil, biblioteca, laboratorios,
administración y gestión de planta física,
entre otros, que son totalmente necesarias para el progreso de
una instalación física, tecnológica,
humanística y científica que sirva de base para una
educación universitaria de calidad, por lo cual,
plantearse de nuevo la universidad en estos términos
significa, indudablemente, pasar por profundos momentos de
reflexión y análisis necesarios, así como
evaluar los resultados que se han obtenido al aplicar la
estructura presupuestaria por proyectos durante el 2006 y el
2007.
En este mismo orden de ideas, Moreno destaca, que en la
actualidad y a la luz del proceso de transformación y
cambios vividos en el país, todas las universidades han
coincidido en la necesidad de mejorar la estructura vigente,
básicamente porque algunos de los proyectos son de
difícil concepción, esencialmente en lo que
respecta a la definición del objetivo del proyecto y la
meta que necesariamente, debería tener.
Esto implica la definición de una nueva
estructura presupuestaria para las universidades, quienes
venían trabajando con la técnica de presupuesto por
programas y ahora tienen que cambiar a la nueva técnica de
presupuesto por proyecto e igualmente establecer la
metodología para obtener información que permita
realizar los procesos de seguimiento, evaluación y control
del plan-presupuesto, en el entendido que este instrumento
administrativo no comprende solamente el proceso de
formulación de proyectos, sino que conlleva
implícito la fase de seguimiento que permite la
evaluación.
Al respecto el Artículo 2 Reglamento
Nº 1 de la LOAFSP señala: "Los órganos y entes
sujetos a la Ley Orgánica de la Administración
Financiera del Sector Público, formularán y
aplicarán la técnica de elaboración del
presupuesto por Proyectos y Acciones Centralizadas, entendidas
éstas como las categorías presupuestarias de mayor
nivel y por acciones específicas como categorías de
menor nivel. Esta técnica se aplicará en las
restantes etapas o fases del proceso presupuestario, de
conformidad con las instrucciones que al efecto dicte la Oficina
Nacional de Presupuesto, la cual podrá crear de oficio o
autorizar a solicitud de los órganos o entes,
categorías presupuestarias equivalentes a las
señaladas en este artículo."
De allí la importancia de
diseñar un Sistema Integrado de Gestión
Universitaria y Evaluación por Resultados (SIGUER) que
permita a cada universidad en base a las orientaciones del Plan
de Desarrollo de la Nación, plantearse proyectos que
expresen resultados por lograr, de manera que el Ministerio del
Poder Popular para la Educación Universitaria, la Oficina
de Planificación del Sector Universitario (OPSU) y la
Oficina Nacional de Presupuesto (ONAPRE) puedan hacer
seguimiento, evaluación y control de dichos
resultados.
Por ello, la nueva técnica de
presupuesto por proyecto y acción centralizada, ha
generado un cambio institucional en el contexto de las
universidades. Ha sido un proceso de ajustes incrementales al
conjunto de normas y reglas sociales referentes a la
formulación del plan operativo anual y el presupuesto, lo
que influye positivamente para la implementación de SIGUER
como parte de un proceso de cambio mucho más amplio que el
registrado en los actuales momentos en la administración
pública venezolana.
Méndez (S/F), expresa que el presupuesto por
proyectos responde a la necesidad de mejorar la efectividad y
transparencia de la gestión pública, en
función de los objetivos y estrategias del desarrollo de
la nación. Además, considera que los aspectos
más relevantes de ésta técnica
son:
a) Proporciona una mejor y mayor
vinculación del plan con el presupuesto.b) Facilita la gestión pública en
función de las políticas y objetivos
estratégicos.c) Establece al proyecto como el producto a
lograr a fin de satisfacer las necesidades de la
colectividad.d) Facilita a los organismos incluir proyectos
en su proceso presupuestario, independientemente al objeto de
su constitución.e) Permite un mejor control y evaluación
del presupuesto.
En resumen la maestrante considera que el presupuesto
por proyectos es una técnica destinada a la
asignación y distribución de los recursos
públicos a través de proyectos, a las entidades
nacionales, órganos, entes centralizados y
descentralizados sin fines de lucro como es el caso de la UBV que
es un ente descentralizado sin fines de lucro, en correspondencia
con las políticas y objetivos estratégicos de la
nación, formulados en los respectivos planes anuales;
además, provee reorganiza, controla y evalúa su
ejecución.
Cabe destacar, que el presupuesto por proyecto y
acción centralizada, responde a una estructura
organizativa previamente establecida a nivel nacional, tal como
se indica en la figura 1.
Figura 1. Estructura
Presupuestaria. Fuente: Fernández, S.
(2012)
Es importante indicar que la Desagregación de los
Proyectos y Acciones Centralizadas se estructuran en
categorías presupuestarias de menor nivel denominadas
Acciones Específicas, definidas de la siguiente
forma:
En el Proyecto, son aquellas operaciones concretas,
suficientes, medibles y cuantificables anualmente, necesarias
para lograr el resultado esperado.
En la Acción Centralizada, detallan las
actividades que realiza la Institución en pro de su
funcionamiento, así como el cumplimiento de otros
compromisos del Estado. Los créditos presupuestarios de
las acciones específicas, suman a la categoría
presupuestaria de mayor nivel a la cual están asociadas.
En las Metas de las Acciones Específicas, es la
determinación cualitativa y cuantitativa del bien,
servicio o indicador que se espera obtener.
El cambio en la elaboración del presupuesto no
representa solo un cambio de técnica como se ha indicado
anteriormente, también lleva inmersa un cambio en
función del marco jurídico de las entidades
federales y municipales y la promoción de profundas
transformaciones en la administración de los recursos
públicos. Así, la nueva forma o técnica de
planificación presupuestaria financiera, comporta un reto
y una gran responsabilidad técnica y profesional; ya que
modifica los hábitos, costumbres y la experiencia laboral
presupuestaria de varias décadas e implanta una nueva
forma de hacer las cosas a nivel presupuestario.
Básicamente, se reemplaza una técnica por
otra, como señala Cortez (2008) la cual "no aportó
los resultados esperados para el progreso social; lo cual ha
traído como consecuencia que los presupuestos
públicos se diseñaran sin considerar las
necesidades de funcionamiento de las instituciones
públicas y de la comunidad". En su opinión, no se
consideró el incremento de la burocracia, lo cual que ha
causado graves dificultades para planificar, coordinar y
controlar la gestión de los Órganos del Poder
Público. Además, los instructivos y normas
señalados por los órganos rectores del presupuesto
a nivel nacional, no se llevaron ni respetaron para el registro y
control de la actividad financiera del Estado; lo que trajo como
consecuencia la improvisación y el empirismo en la toma de
decisiones.
Indudablemente la técnica del presupuesto por
programas, como técnica no fue aplicada totalmente, ya que
las instituciones públicas se conservaron bajo los viejos
esquemas o paradigmas del presupuesto tradicional, proporcionando
el violación de los principios gerenciales y contribuyendo
con la falta de políticas de adiestramiento del personal;
todo ello obstaculizó la transformación de la
organización pública y permitió la no
producción de estadísticas sobre las cosas que el
gobierno hace y debe hacer en el cumplimiento de sus funciones,
ocasionando serias limitaciones en la medición de la
producción pública.
Por otra parte, considerando nuevamente el planteamiento
de Cortez (2008), "la no utilización de indicadores de
gestión presupuestaria ha obstaculizado la
cuantificación de la relación entre objetivos y
metas y la conformación de un sistema de
información que garantice a los gerentes la
información real y oportuna de las políticas
públicas". Todo ello ha redundado en una deficiente
captación de los recursos para una eficiente
planificación y aplicación de los
mismos.
El control de la gestión no suministra los
ajustes demandados para atender y resolver las situaciones
circunstanciales. Así mismo, las funciones de los entes de
la administración pública se desvían;
creándose en diversos casos, doblez de acción con
otras instancias de gobierno. Lo que lleva al bloqueo
burocrático y a la dilapidación de los recursos
humanos, económicos y financieros del país. Se suma
a esto, el incumplimiento de la rendición de cuentas a los
Órganos Contralores de la Gestión Pública en
el tiempo exigido por las leyes de la materia. Estas
circunstancias han frenado la modernización
administrativa, financiera y gerencial del Estado; y, al mismo
tiempo, el impulso del modelo social planteado por el Presidente
de la República.
Señala Cortes, que al considerar al Presupuesto
como un instrumento de desarrollo, la política
económica pública se expresa en Proyectos de
Inversión Social y se facilita la obtención de los
recursos financieros y humanos, equipos y servicios para
aplicarlos a la realidad que se quiere transformar. De igual
modo, el Estado al determinar la orientación
estratégica del país lleva a cabo su actividad
financiera a través del presupuesto como un instrumento
fiscal que complementa la política económica. A
través del presupuesto el gobierno proporciona saberes,
bienes y servicios para atender las necesidades de la comunidad;
cancela servicios que permiten su funcionamiento, paga a
proveedores y contratistas, resuelve problemas de pasivos
laborales y contractuales con sus trabajadores. Al ejecutar el
presupuesto, el Estado simultáneamente lleva a la
práctica el plan de desarrollo; con lo cual ejerce el
control de la gestión presupuestaria y el seguimiento de
la gestión gubernamental. Con esto científicamente
cuantificado se determina el grado de avance del crecimiento
económico y cuánto aporta éste al desarrollo
social. Por esta razón el Presupuesto por Proyectos como
nueva técnica de presupuestaria se rige como una valiosa
herramienta para construir el futuro de la sociedad. El
socialismo se construye con todos.
Todo lo antes descrito pone en evidencia clara y
precisamente la importancia y utilidad práctica de este
tipo de proyectos, que permite mediante su puesta en
práctica la realización de procesos de
planificación adecuados, en conjunción con la
correcta articulación de las acciones específicas y
centralizadas en cada una de las etapas del proceso de
elaboración y ejecución de cada proyecto en
concreto. Aunado ello, constituye una herramienta efectiva de
medición para la gestión de todas y cada una de las
dependencias del Estado que opten por desarrollar este
instrumento como mecanismo para solventar los inconvenientes que
en sus comunidades se presenten y a su vez sirve de enlace entre
la participación activa de la población y su
obligación de control con la relación de los gastos
que se susciten durante todas las fases del proyecto.
En cuanto a las exigencias que implica la
elaboración de este tipo de proyectos, es importante
destacar el cumplimiento de ciertos pasos a seguir, como la
difusión de los parámetros establecidos por la
ONAPRE, así como la elaboración y remisión
oportuna de los proyectos por parte de los órganos del
Estado, con la finalidad de ser evaluado y presentado ante las
autoridades competentes para la elaboración del Proyecto
de Ley de Presupuesto.
En base a lo expuesto con anterioridad se puede
evidenciar que éste tipo de presupuesto puede ser
considerado una herramienta dentro de la administración
pública eficaz y real para solventar las
problemáticas existentes, debido a que constituye un
instrumento para la asignación y distribución de
los recursos, a través de la formulación de
proyectos, a cualquiera de las instituciones del Estado siempre y
cuando actúen en base a las políticas de la
Nación, dando paso al cumplimiento de logros importantes
que permiten la participación activa de la
ciudadanía como fundamento para la determinación de
la problemática a solventar, en virtud, de que la
información relativa a las fallas existentes deviene de
los directamente afectados, permitiendo a éstos el
conocimiento claro de todas y cada una de las situaciones que les
atañen como comunidad y con la cual tienen un compromiso y
a su vez generando mayor eficacia en el ejercicio de la
autonomía económica que en cierto grado debe
caracterizar a cada nivel de gobierno, por lo cual lo
señalado conllevaría a una planificación
adecuada para la elaboración del instrumento, vale decir,
proyecto, que obtendrá la solución deseada, previa
incorporación del mismo al presupuesto.
Autor:
Licda. Shiu Karelis Fernández
Guillen
Año 2012