Monografias.com > Lengua y Literatura
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

Estudio comparativo entre las novelas emblemáticas: Martin Rivas y Clemencia



  1. Introducción
  2. Breve
    mirada biográfica
  3. Marco
    histórico en el que se escriben ambas
    novelas
  4. Aproximación a las
    novelas
  5. Heroísmos solitarios y prejuicios
    masivos en la novela Martín Rivas y
    clemencia
  6. Conclusiones
  7. Bibliografía

Introducción

El presenta trabajo monográfico centra sus
estudios en dos novelas emblemáticas, Clemencia dentro del
romanticismo y Martín Rivas considerado forzadamente
dentro del romanticismo por los caracteres de sus personajes. A
lo largo del trabajo brevemente analizaremos las variables,
heroísmo y prejuicio arribando a conclusiones parecidas,
pues en este estudio comparativo existen muchas semejanzas y
también diferencias que hacen más interesante el
análisis de los personajes como protagonistas y
razón del presente estudios que está dividido en
títulos y subtítulos acompañado
básicamente de la bibliografía del corpus
tratado.

Breve mirada
biográfica

  • a. ALBERTO BLEST GANA. Nacido entre mayo o
    junio de 1830, en Santiago de Chile y muerto en parís,
    Francia 1920. Hijo de padres irlandés y vasco
    perteneciente a clase alta; realizó sus estudios en
    prestigiosos centros de enseñanza de Chile y Francia,
    donde permaneció por un periodo de cinco años,
    observándose en su emblemática novela,
    Martín Rivas, como el elegante Agustín, luego
    de permanecer en Francia retorna a Santiago con aires
    afrancesados, atreviéndonos a sostener, el alter ego
    del autor. Desde muy joven colabora con sus publicaciones en
    revistas, donde en 1862, publica su célebre novela
    Martín Rivas. Luego el autor ejerce funciones
    gubernamentales, alterando con su producción
    literaria, bajo el corte realista con rasgos
    románticos, falleciendo en París.

  • b. IGNACIO M. ALTAMIRANO. De origen netamente
    indígena, nacido en Tixtla Guerrero, México en
    1834. Empezó leer a los 14 años logrando
    estudiar Derecho y Literatura gracias a las circunstancias de
    aquel entonces. Partidario de las ideas liberales, cultiva la
    literatura bajo la corriente romántica, traducida en
    su novela más leída y conocida,
    Clemencia, que a simple vista podemos ver traducido
    en el personaje, Fernando Valle, el suicida
    romántico[1]como el alter ego del
    Altamirano. Como todo político comprometido con su
    tiempo, ejerció funciones públicas de gobierno
    en su país así como en el extranjero,
    falleciendo en Italia en 1893, dejando un legado para la
    posteridad mexicana y la humanidad.

Marco
histórico en el que se escriben ambas
novelas

Durante el siglo XIX, corrían vientos de libertad
en el continente sudamericano como consecuencia del alejamiento
del dominio español, y las ideas liberales impulsados por
los liberales europeos, que en cierta manera influyeron
indirectamente y también de manera directa de abordar la
realidad, en todos los campos sociales como en la literatura, muy
en boga el romanticismo iniciado en Alemania con Las cuitas
del joven Werther
[2]de Goethe, que
impactó, sobre todo en la juventud de la sociedad europea,
luego en la cultura latinoamericana, incidiendo en las
construcciones discursivas de la época, entre ellas las
novelas que estamos analizando , Clemencia y Martin
Rivas,
que reflejan la liberación de los sentimientos
de angustia y tristeza propios de un padecimiento amoroso (Zo,
Ramiro. 2007). Novelas que exaltan el valor de la libertad
creativa y el yo individual elevándolo a la
categoría de héroes, con espíritu de
rebeldía, y también de una melancolía libre
procedente desde lo bucólico desembocando en las grandes
ciudades, dotado de un sentimiento patriótico, cuya muerte
real o subjetiva es la plena realización del alma,
coincidiendo las novelas, como fondo hechos de guerras que van
marcando a los personajes centrales, y por qué no, los
autores quienes también vivieron tiempos de
guerras

Aproximación a las
novelas

a.MARTÍN RIVAS.La más emblemática
novela de Blest Gana, que fue editada más de 66 veces,
siendo su lectura una obligación en la etapa escolar
chilena, dando pie a una serie de adaptaciones. Publicado en
Santiago de Chile, (1862), cuyo argumento central es el amor,
aparentemente imposible, de una altanera aristócrata y un
provinciano pobre de elevados sentimientos, que cierto día
arriba desde Copiapó a la capital, Santiago a principios
del mes de julio de 1850, llamado Martín Rivas, con el
propósito de estudiar Leyes. Su padre fallecido
recientemente y le dejó una carta que le permitió
ingresar a la aristocrática familia Encina, casado con
Doña Engracia. Su hijo Agustín con un lenguaje
afrancesado, y Leonor, de una indescriptible belleza, de quien
Martín se enamora inevitablemente, pero comprende que debe
guardarse sus sentimientos porque aquél romance era
simplemente imposible. Como toda familia de situación
acomodada, concurrían jóvenes que se disputaban el
amor de Leonor. Tambíenasistían sus parientes.
Martín durante sus estudios conoce a Rafael San Luis,
quién lo ayuda a adaptarse a ese ambiente desconocido.
Luego de vivir unos meses se produce un malentendido y
Martín debe partir de la casa de los Encina. En
Abril,Martín al retornar a Santiago es partícipe de
una revuelta y cae prisionero, admitiendo abiertamente su amor
por Leonor y este amor es correspondido.En la batalla, muere
Rafael San Luis y Martín decide escapar huyendo a casa de
Leonor. Ahí, ambos se confiesan su amor y negocian con
Edelmira, la muchacha que estaba enamorada de Martín a
quien siempre la había ayudado, la libertad de
Martín.Martín viaja a Perú, donde tramitan
su indulto. Mientras tanto, le comunica a todos su matrimonio con
Leonor. Don Dámaso Encina le encomienda a Martín
todos sus negocios para poder continuar en una carrera ascendente
fuera de su país.

b. CLEMENCIA. Novela más estudiada de Altamirano,
publicado en México (1869). Empieza con una
narración comparativa entre dos personajes centrales, El
comandante Enrique Flores, joven de buena familia, muy
simpático, favorito de su jefe, irresistible a las
mujeres. El comandante Fernando Valle, todo lo contrario a
Flores, reservado, frío, y antipático para todo el
mundo, sobre todo para las mujeres. Cuando llegó el
batallón a Guadalajara, Valle fue a visitar a su pariente
en la ciudad, retornó muy emocionado lo que era raro en
él. Enrique, le preguntó la razón de su
felicidad, a lo cual le contestó que había visto a
su prima, llamada Isabel, quien era una bella
señorita.

Días después conocieron a Mariana, la
tía,su prima Isabel y Clemencia, extremadamente hermosas.
En el proceso de las relaciones humanas Clemencia finge amor por
Fernando obsequiándole una flor, pero que en el fondo
está locamente enamorada de Enrique, como también
Isabel. Enrique empezó sus amoríos con Clemencia
produciendo un desafío de duelo por parte de Fernando
contra Enrique quién acusó a Valle con el General,
quien lo reprendió por tal desafío en tiempo de
guerra. Al aproximarse los franceses a Guadalajara, algunas
familias se fueron, hacia Colima que estaba defendida, durante el
retiro Fernando apoyó a la familia consiguiendo carruajes
para su traslado evitando que alguien supiera su generosidad,
incluso compró un caballo para salvar a la familia de
Clemencia, sin embargo tanto Clemencia como sus familiares
atribuyeron este gesto a Enrique enviándoles presente ante
lo cual se sorprende. Sucede que Valle al tratar ayudar a esa
familia, comete errores de abandonar su puesto, siendo arrestado,
sin embargo, Valle al enterarse de la traición de Enrique
lo acusa, a quien apresan enseguida para juzgarlo por
traición a la patria. Al enterarse, la familia de
Clemencia se volvió desesperada y hacía lo
imposible para evitar la ejecución, el señor R…
ofrecía la mitad de su fortuna, por los deseos de su hija,
pues sabía que si no lo hacía ella era capaz de
darse a la muerte. Clemencia no concebía la idea de que
Enrique fuera un traidor, esto tendría que ser una
calumnia, y al enterarse que fue Valle quien lo acusó.
Comprendió que su amor era la causa de la desgracia de
Flores, pues la rivalidad entre ellos había llevado a
esto. Así, pensó lo más malvado y vil de
Fernando, lo llamaba infame y calumniador, lo despreciaba con
toda su alma. Todo el asunto de la próxima muerte de
Enrique, revivió la llama en el corazón de Isabel,
a quien no le importó que no era amada, pero sufría
con tanta pena su desgracia. Enrique velaba en su celda,
asustado, abatido. Pues no era de esos hombres que no le temen a
la muerte, no tenía rasgo de valor. De repente alguien se
acercaba a su celda, era Fernando Valle. Venía a librarle
de su prisión, no sin antes aclararle que no era
él, sino su traición la que lo había llevado
hasta ahí. Quería que viviera para que amara a
Clemencia y fueran felices. Él sabía que
después de ayudarle a escapar, tomaría su lugar en
la ejecución. Enrique les confesó a la familia de
Clemencia la verdad, que había colaborado con los
franceses, que desnudaba su traición. Clemencia, todo el
amor que alguna vez sintió por él se
convirtió en odio y desprecio. Pensó en el pobre
Fernando, a quien había maltratado injustamente a Fernando
ella lo mataba, pues sería fusilado en vez del traidor de
Enrique. Gritó y la muchedumbre le abrió
pasó, pero faltaba una fila de soldados por pasar, se
encontró frente a él, y quiso gritar para llamar la
atención de su última mirada, pero no pudo, pues se
encontraba congelada. Se oyó la descarga y Fernando
cayó muerto. Clemencia se desmayó, su padre la
llevó al carruaje, después se dirigió al
cadáver y le cortó un mechón de cabellos que
guardó. Cuando Clemencia despertó, ya en su casa,
su padre le entregó el mechón y dijo que a Fernando
es a quien debería haber amado y soltó el llanto,
poco después se metió a un convento y se hizo
Hermana de la Caridad.

Heroísmos
solitarios y prejuicios masivos en
la novela Martín Rivas
y clemencia

A lo largo de la lectura de las novelas Clemencia y
Martín Rivas respectivamente, observamos situaciones de
desafíos ante las adversidades que plantea la vida real y
el destino, por ejemplo, Martín apenas hereda una carta de
su padre que había terminado en la pobreza, a partir de
esa carta, " …me siento gravemente enfermo y deseo, antes
que Dios me llame a su divino tribunal, recomendarle a mi hijo
que en breve será el único apoyo de mi desgraciada
familia…según mis cálculos, sólo
podrá recibir veinte pesos al mes…Este muchacho es
mi única esperanza, y si usted le hace la gracia que para
él humildemente solicito, tendrá usted las
bendiciones de su santa madre en la tierra y las mías en
el cielo…" (carta para don Dámaso en Clemencia: 8),
Martín empieza su heroica batalla para sobrevivir en un
Chile dieciochesco, bañando de fuertes prejuicios sociales
y raciales, y además libra la batalla de su vida ante el
amor, aquel amor, quizás predestinado pero que
tenía sus propias características, asimismo a lo
largo de la novelas se libran batallas en nombre de amor puro e
inmarcesible bien sea por los personajes centrales y los
personajes secundarios, y también la misma
sociedad.

También salta a la vista en el personaje Fernando
Valle, de origen aristocrático, "tengo muchos, más
de los que usted cree, y en posición que usted no sospecha
; sólo que yo los detesto a casi todos", (Clemencia: 20),
reafirma la tesis de su origen aristocrático pero, al
mismo tiempo denuncia su desarraigo ante esa realidad
hipócrita de su familia y la sociedad que se mueve entre
la frivolidad y el desdén, entre el prejuicio más
abismal que imaginamos, entonces tenemos a Fernando luchando
contra los suyos en busca del amor siempre fugitivo que a veces
se presenta raudamente, mostrándose ante ese
corazón probablemente endurecido por los avatares de la
vida militar, y su propia personalidad fría y
calculadora.

Asimismo desfilan personajes puestos desde frentes de
batalla diferentes a lo largo de la novela, enfrentándose
en las condiciones difíciles, bien frente a las presiones
sociales como los prejuicios y la discriminaciones sociales y
raciales propios de la vida de aquella época.

  • a. HEROISMOS SOLITARIOS Y PREJUCIOS MASIVOS EN
    MARTIN RIVAS.

  • Martín Rivas, en la novela del mismo nombre,
    es el protagonista principal de la historia que giran a su
    alrededor, incluso Leonor, la desdeñosa mujer de
    apenas veinte años, y el resto de personajes, al vivir
    en Copiapó, se infiere en la novela, parafraseando,
    Martín había vivido con un familiar
    quién le apoyó en sus estudios, que cuando
    muere su padre y a partir de la carta, arriba a Santiago, con
    fines de estudios, es ahí donde su temple forjado en
    su corta vida se pone a prueba, la familia ausente que
    seguramente habría luchado tantas veces entre las
    sábanas si retornar a su pueblo o batallar
    heroicamente ante esa injusta sociedad que la había
    tocado vivir, sobrellevando los prejuicios sociales desde el
    frío recibimiento del criado de los Encina.
    "¿Podría usted decirle que un caballero desea
    hablar con él? A la palabra caballero, se
    dibujó una sonrisa burlona. Aquí el criado
    representa a las masas, al populacho que tiene constituido su
    paradigma que solamente pueden ser caballeros aquello
    personajes elegantes y de poder económico. Rivas, al
    entrevistarse con don Dámaso, desafía su
    porvenir, ¿qué hubiera sucedido si fuese
    rechazado el pedido en la carta?, probablemente hubiera
    tomado otro camino su destino. Más tarde cuando conoce
    a Leonor, se enamora, pero no tienen valor para decirle
    cuánto la amaba por su condición de pobre, y
    compite lentamente con sus rivales, los elegantes
    jóvenes quienes cortejan a esa bella muchacha, pero
    resiste en la soledad como un daga atravesando su triste
    corazón. Cierto día cuando se atreve a adquirir
    un par de botas, al medirse y no comprar ninguna, los
    vendedores, pertenecientes a las clase bajas y despreciadas,
    se mofaron de Rivas por su pobreza y se liaron a golpes
    llegando a parar en las frías paredes del calabozo de
    la comisaría. Aquí observamos, que la clase
    menos desfavorecida, también suelta su desprecio
    contra los de su misma clase social, sin embargo en las altas
    clases sociales se brindaban apoyos, tales en las reuniones
    llevadas a cabo casa de los Encina. Asimismo en la
    Universidad debe lograr sobrevivir y construye amistad con
    Rafael San Luis, muchacho venido a menos por las desgracias
    del destino, muy bien manejado en las novelas
    románticas. Rivas batalla contra su amor propio y
    condena a su corazón al ostracismo más glacial,
    y desafiante se mantiene en pie, a lo largo de la novela,
    cuando conoce a Edelmira, busca su amistad y no se aprovecha
    de esa ingenuidad para robarle un beso, muy por el contrario
    se comporta como un padre y confesor, siempre tratando de
    brindarle su apoyo, incluso en los momentos más
    difíciles, acompaña en su huida a afueras de la
    sociedad, y retornando luego, aunque acusado de por terceros,
    su corazón se mantiene incólume y valiente.
    Rivas en cierta manera, durante sui convivencia con la
    familia Encina, mantiene el perfil bajo como todo inquilino,
    se convierte en cómplice y salvador de Agustín,
    elegante y un aprendiz poco feliz de la vida, que cuando cae
    en las garras del engaño es salvado por Rivas,
    ganándose la confianza y respeto por alguien que al
    principio de conocerlo le miraba siempre de costado, pues,
    durante la negociación, trató con gente de baja
    calaña, saliendo airoso ante la farsa tendido contra
    su ahora amigo y hermano de su amada, y es bueno aclarar que,
    no hacia favores porque amaba a Leonor, sino porque
    nacía de su propio corazón servir a los
    demás y más todavía siempre
    recíproco con la casa que lo había acogido con
    cariño y respeto, que trabajaba en asuntos del
    dueño de la casa sin cobrar algún dinero por
    sus servicios, gesto que lo eleva a la categoría de un
    hombre alejado de los bienes materiales, muy raro en un mundo
    donde todo se valora de acuerdo a los patrones establecidos,
    bienes, posesiones, riquezas y títulos nobiliarios,
    ganándose de esta manera el respeto y cariño de
    la casa, que Rivas siempre supo agradecer, que ante una
    situación embarazosa y mal entendido, Rivas es
    conminado a dejar la casa, y sin pronunciar palabras o
    despotricar contra los dueños de casa y sabiendo que
    con su partida su probable amor gran amor, Leonor, pierda
    para siempre. Aquí observamos la renuncia al amor, la
    renuncia a encarar la verdad y los malos entendidos y asumir
    como si hubiera sido cometido por él. Y parte de la
    casa, no sin antes dejar en regla su trabajo, retorna a su
    pueblo, además es vacaciones, y disfruta probablemente
    de sus vacaciones al lado de sus seres queridos.
    También es interesante reflexionar sobre la conducta
    de Rivas, pues, uno puede pensar que estamos ante un ser
    perfecto carente de defectos, que durante su estadía
    nunca se acuerda de su madre y su hermana, tampoco le escribe
    carta a lo largo de la novela. Al retornar a Santiago se
    enrola en el ejército liberal convirtiéndose en
    un soldado romántico, y al caer derrotado y apresado,
    se muestra valiente y sólido, con un estoicismo
    socrático, siendo salvado por Leonor a quien le
    declara su loco amor, dejando de lado sus prejuicios, y cree
    soñar al ser aceptado, y vive feliz quién luego
    de ser liberado se marcha de Chile a buscar nuevos
    desafíos, bajo otros cielos. Martín Rivas es el
    héroe de Blest Gana, un hombre que a pesar de las
    vicisitudes de la vida se antepone, a la adversidad de la
    vida, desafía su destino, aquel destino muy marcado en
    la novelas románticas y también es cierto, que
    al final logra triunfar su amor, casándose con Leonor,
    su gran amor.

  • Leonor, personaje central de la novela, quien pese a
    su altanería lucha contra sus propios demonios, contra
    la cruel sociedad y su propia familia acostumbrado a las
    comodidades, sin embargo. Como alguien dice que en las leyes
    del corazón, nadie manda, fue enamorándose a lo
    largo de la narración de la novela, de Martín,
    aunque ocultando sus sentimientos, pues, en cada
    conversación sostenida la trataba fríamente,
    hasta la humillaba, que en el fondo trataba ocultar sus
    sentimientos, tratando de descifrar, en respuesta a los
    prejuicios y constructos mentales, pero que muy en el fondo
    de sus entrañas fue valorando y enamorándose
    perdidamente de Rivas, de quien siempre conversaba con
    respecto de este joven con su prima Matilde, quien le ayuda a
    vencer sus temores, dando muestras de amor durante el arresto
    de Rivas, hace lo indecible, removiendo cielo y tierra,
    presiona a su hermano y a sus padres con la finalidad de
    lograr la salvación de su ser querido, lucha lejos de
    todo prejuicio, que al final triunfa el amor,
    convirtiéndose en la heroína del amor, de la
    lealtad y del romanticismo. Leonor, es con toda justicia,
    mujer adelantada de su época, quien desafía el
    falso determinismo, pues probablemente predestinada a casarse
    con alguien de su clase social pero terriblemente infeliz,
    ella se opone y lucha contra el desatino y contra los
    prejuicios de la época, que además de ser guapa
    y casi de perfecta belleza, es tan humana y sublime ante el
    más grande tesoro, el amor, logrando casarse con
    Rivas, lejos de su patria, entonces surge preguntas,
    ¿es posible la felicidad lejos de la patria?, podemos
    forzar el viejo adagio, nadie es profeta en su pueblo, ni en
    su casa, pero que gracias a esos pequeños pasos, la
    sociedad va configurando nuevos escenarios más
    comprometidos, con su realidad, tendiendo puentes de cierta
    igualdad y oportunidades, en consecuencia, podemos afirmar
    que Leonor apertura nuevos tratamientos en la
    novelística, sobre todo el romántico,
    heroína como Margarita Gautier, como Santa, como
    Clemencia que todas ellas no logran cuajar su amor, mientras
    que Leonor es la bella triunfadora del amor y la
    vida.

  • Agustín, al igual que Leonor, pertenece a una
    clase social alta, que al retornar de Francia, habla con
    galicismos, y presenta muestras de desprecio contra el
    populacho, incluso al ver por vez primera. "pobrísimo,
    dijo con gesto de desprecio".(Martín Rivas: 14), quien
    más tarde se relaciona con Adelaida, familia de clase
    baja, por quien siente desprecio, y al mismo tiempo, cuando
    se confiesa ante Rivas, afirma que sólo se divierte, o
    simplemente trata de pasarla bien, pero que, jamás se
    casaría o se mezclaría con gente de esa clase,
    ahí, observamos un prejuicio recalcitrante de parte de
    alguien que pertenece, a una clase alta llena de
    frivolidades, que sin embargo, viéndose ante una
    situación adversa no duda solicitar favores a Rivas,
    alguien pobre que vive refugiado en su casa. Agustín,
    al final de la novela, vence sus prejuicios, y se humaniza,
    ayuda a Rivas, y también arriesga por el bienestar de
    su amigo, y logra la felicidad de su hermano; aquí
    tenemos, otro victorioso del amor, y al final se casa con su
    prima Matilde.

  • Don Dámaso, al igual que otros personajes de
    las altas clases sociales, se mueve entre la conveniencia de
    los liberales y los conservadores, que la riqueza que posee
    se debe gracias a su valentía y habilidad,
    enriqueciéndose y gracias a esa riqueza disfrutan sus
    familiares y también Martín, quién es
    recibido calculadamente por don Dámaso, quien se
    muestra amable con las personas y a veces muestra su
    desprecio por los demás, sin embargo siente un respeto
    por Martín, dándole un trabajo y al final vemos
    que este personaje se humaniza ayudando a Martín, en
    su huida hacia el extranjero y permite el matrimonio con su
    engreída Leonor, alejando del todo sus prejuicios,
    pues al aceptar esa relación, don Dámaso ha
    inmolado su orgullo y sus prejuicios, en pos de la felicidad
    de su hija al lado de un joven bastante
    prometedor.

  • Matilde, otra de los personajes que vive embargada
    por sus prejuicios, que vive locamente enamorado de Rafael,
    que al caer en desgracia su novio, al final deciden casarlo
    con otra persona, debido a los prejuicios sociales de sus
    padres, encerrando su legítimo amor a cambio de la
    presión social, que al final triunfa ese amor por
    momentos, ya que Rafael muere en batalla, mientras que
    Matilde se resigna al amor de su primo Agustín.
    Matilde, lucha y espera que al final logra cuajar su
    amor.

  • Rafael San Luis, es otro de los héroes con
    valores y también con prejuicios que renuncia al amor
    de Matilde, pero también en cierta manera abusa de
    Adelaida, no reconociendo su hijo y negándose casar
    por ser de condición humilde. Rafael, pelea por su
    amor puro hacia Matilde, espera y cuando cree que todo
    está finiquitado aparece la desgracia o
    predestinación, causándole fatalidad a su vida,
    que le empuja a tomar las armas en pro de una
    revolución y también sus ideales, sucumbiendo y
    de esta manera inscribiéndose en la línea de
    héroes que pueblan esta novela
    romántica.

  • Asimismo a lo largo de esta novela, desfilan
    personajes con cualidades y características de
    contrates, quien lucha y disputan, porvenires, hados adversos
    y también el destino que siempre está presente,
    cómo que todo estuviera ya escrito, como que Dios o el
    destino había trazado los senderos que recorren estos
    personajes, que en cierta manera configura una época
    de nuestra historia de la humanidad, basado entre la lucha
    del bien contra el mal, aquí se enfrentan los ricos
    aristócratas y el populacho, que todavía no
    tienen miradas de necesidades, es decir, todavía nos
    aben que se necesitan para poder realizarse como sociedad, y
    el desprecio social que se mantiene entre las mismas clases
    sociales, quizás como en la actualidad.

  • b. HEROISMOS SOLITARIOS Y PREJUICIOS MASIVOS EN
    CLEMENCIA.

  • Fernando Valle, el personaje central de la novela
    trabajado por Altamirano, presenta similitudes y rasgos
    parecidos al de Martín Rivas, como veremos a
    continuación, Valle, es taciturno y antisocial, que
    puede infundir muchas sospechas por esta conducta, desde el
    alejamiento de su propia familia, hasta la llegada a la vida
    militar, no odia a su familia, simplemente trata o intenta
    vivir sólo y enfrentarse sólo a la vida, no
    tiene amigos que es una forma de meditar y encontrarse con
    uno mismo, no pide ayuda a nadie, pero siempre está
    dispuesto dar la ayuda a los demás, Valle, tal vez
    pensaba más en los demás que en su persona,
    tampoco se daba placeres mundanos como el amor de una mujer,
    y combate como un héroe desde el lado liberal, como
    quien pretende romper los paradigmas del conservadurismo. No
    tiene amigos, pero siente aprecio por su rival, el comandante
    Flores, de quien es todo lo opuesto, sin embargo existe
    cierto respeto, pero al final, siendo tan humano se enamora
    de Clemencia, a quién no es capaz de declararle su
    amor, pero a quien ayuda luego de la partida de Guadalajara,
    le brinda su apoyo a toda la familia de Clemencia sin que
    ella se entere, sin embargo, ésta llevado por su
    prejuicio supone que Flores es quine la apoya, finalizando
    con la captura del mismo Flores, pero es quien Valle,
    guardando la postura de un héroe romántico
    decide morir en lugar de su rival y buscando la felicidad de
    su gran amor, como en la novela de Rostan, El Cyrano de
    Begerac,
    Cyrano, quien da su vida y su talento para que
    otros gocen y su amada disfrute de la felicidad negada a
    él por el destino y el mismo prejuicio existente en
    aquella época, de la misma manera, Valle, muere
    fusilado inmortalizando su alma hermosa, y ahora figura en el
    cuadro de los románticos como héroes que
    ofrendaron sus vidas en bienestar de sus amadas, rompiendo
    los prejuicios falsos contra el amor, construido a lo largo
    del tiempo por una sociedad excluyente, cuyo pecado es haber
    nacido pobre o de mal parecer como Valle, para quienes no
    pueden abrigar un corazón bello, tal vez por la
    relación de la perfecta belleza, que hábilmente
    maneja Altamirano, siendo él mismo indígena
    puro, y seguramente nada bien parecido para la época
    pero que vivió embobado por las costumbres y vidas
    románticas, quizás el mismo sintió
    desprecio por su misma raza. Valle, es el héroe
    latinoamericano por antonomasia de la literatura de aquella
    época.

  • Enrique Flores, otro personaje de rasgos europeos, y
    de excelentes y maravillosas cualidades según la
    novela, de una perfección, claro está, es una
    corriente romántica de lo bello, la misma que
    encarnaba todas las bondades y era el encanto de las mujeres,
    erael héroe de ellas, el prototipo o el ideal hombre
    que toda mujer aspiraba en aquella época y
    quizás también en nuestros tiempos,
    poseía dinero, fama, elegante y extremadamente guapo.
    Es un héroe ante sus subalternos y ante sus jefes. Es
    el amor de Clemencia y también de su prima Isabel,
    pero ese heroísmo se quiebra al enterarse que es un
    farsante y traidor y queda reducido a una especie de grotesca
    parodia de su belleza y fingida valentía, pero luego
    de la batalla y el fusilamiento de Valle, se pasea triunfante
    como que el destino siempre le reservó agradables
    situaciones, quedando en las huellas de las mujeres y en las
    personas quienes trataron con él, un hombre a quien
    les hubiera gustado imitar, probablemente por el prejuicio
    masivo en torno que se había construido, como
    consecuencia de mentalidad de la época.

  • Clemencia, mujer de rasgos parecidos a Roxana
    deCyrano de Bergerac,es una heroína de la
    belleza y también del prejuicio, quien juzgaba a las
    personas por sus apariencia, sobre ella recae el peso de una
    personalidad inteligente y al mismo tiempo sensible, dotada
    de una inteligencia, pero muchas veces esa inteligencia no
    guarda relación directa con los sentimientos del
    corazón, que se empeña enamorarse de la belleza
    de Flores, sin llevado por la costumbre de la época y
    prejuicios, que al final de la novela, desnuda su alma y
    muestra todo su amor por el fusilado de Valle, no pudiendo
    reconocer sus culpas o errores, se condena a una vida santa,
    alejado del bullicio de la sociedad, con la finalidad de
    espiar sus pecados, es ahí, donde Clemencia se eleva a
    ese nivel de heroína, aceptando su realidad lejos del
    porvenir, suponiendo que quien no acepta su realidad tampoco
    aceptará su mágico futuro.

  • Isabel, mujer de rasgos europeos de sentimiento
    bello y mágica belleza descrita en esta novela, se
    comporta de acuerdo a sus patrones de vida, apenas una
    niña, pero que ya encaja en las costumbres del
    cortejo, su heroísmo no llega a la altura de Clemencia
    por su puesto, pero que indudablemente mantiene el estatus de
    una mujer romántica, a quien se le puede considerar
    una heroína de la belleza y del buen gusto.

  • El resto de personajes, presentan prejuicios
    raciales y sociales, empezando por el Doctor que al mismo
    tiempo es el narrador, trata mal al personaje central en su
    relación cotidiana con el Valle, ni siquiera muestra
    afecto. Asimismo, los subalternos juzgan con un prejuicios
    racial y social a Valle, igual como los criados y la gente de
    condición baja en Martín Rivas, juzgan llevados
    por aquellos quienes marcan las costumbres sociales, los
    aristócratas.

Conclusiones

Luego de haber realizado el breve análisis
comparativo entre ambas novelas, basado en los personajes
centrales, y los hechos cruciales, a partir de las variables
heroísmos y prejuicios podemos arribar a conclusiones
siguiente.

Los personajes centrales actúan de acuerdo a lo
cánones de la época, y que el heroísmo salta
a la vista como un reto ante la vida, un heroísmo que toma
diferentes derroteros, como Martín Rivas es un
héroe de la lealtad y el amor y el desinterés
mostrado a lo largo de la novela, lealtad al amor, a la amistad
con Edelmira y ese amor constante a pesar de la frialdad y
desprecio de la amada, además Rivas es un héroe
romántico por su apoyo a las causas liberales que
impulsaban mayores oportunidades para aquellas personas, quienes
precisamente siempre le han tratado con indiferencia, un
héroe que al final logra el amor y sale derrotado en su
rebelión de armas, pues nada es completo o algo perfecto y
así a lo largo de la novela, se desarrolla enfrentamientos
entre ese heroísmo y prejuicios más arraigado en
las masas así como en la novel Clemencia, que plantea todo
un abanico de heroísmo, como en la inmolación de
Valle, pasando a la categoría de Héroe, así
como Clemencia se convierte en una Heroína como Leonor,
ambas sacrifican y luchan incansablemente por su amor logrando
una de ellas mientras que Clemencia logra conocerse a sí
misma, y lucha por ese amor condenándose a padecer la
ausencia de sus seres queridos en un convento quizás
arrepentida por el resto de sus vidas, donde el prejuicio social
la desengaño de sus verdaderos sentimientos,
convirtiéndose en una marioneta y capricho del destino, un
destino ya escrito en los genes y las mentes de las personas de
aquella época.

Bibliografía

 

Datos del autor.

W. David Auris Villegas. Perú (l975). Escritor,
pedagogo, investigador, conferenciante itinerante y profesor
universitario de Investigación, Literatura y Ciencias
Pedagógicas; licenciado por la Universidad Nacional Mayor
de San Marcos y magíster por la Universidad de la Habana
de Cuba, con Segunda Especialidad por la Universidad Ricardo
Palma, y especialista en investigación por la Universidad
San Martín de Porres. Ha sido profesor de la Universidad
Ricardo Palma, Universidad Inca Garcilaso de la Vega, Universidad
Alas Peruanas, Universidad San Juan Bautista, entre otras
universidades. Ha publicado el libro de relatos, "Cuentos de
medianoche
", y el poemario, "Mañana cuando me
vaya piensa en mí
", el libro de consulta,
"Razonamiento Verbal: Teoría y Práctica",
y tiene en imprenta (edit.San Marcos) su libro, Estrategias
de estudios y metodologia de investigacion universitaria.

Además, es autor de artículos en los medios de
comunicación masiva y participa activamente en los
congresos y seminarios en calidad de conferenciante o ponente,
comprometido por el desarrollo de la especie humana en la
difícil convivencia equilibrada y el desafío con su
medio en la construcción de un mundo mejor y
solidario.

 

 

Autor:

W. David Auris Villegas

UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN
MARCOS

(Universidad del Perú, DECANA DE
AMERICA)

ESCUELA DE POST GRADO

FACULTAD DE LETRAS Y CIENCIAS
HUMANAS

Unidad de Post Grado

Monografias.com

MAESTRIA EN LITERATURA PERUANA Y
LATINOAMERICANA

Lima- Perú

2011

[1] SANDOVAL, Adriana. En internet, Fernando
Valle: un suicida romántico, en Clemencia de
Altamirano.

[2] Las cuitas del joven Werther, publicado
en 1774 por el alemán Johann Wolgang Von Goethe que fue
el preludio del romanticismo que se mundializó
años más tarde.

Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

Categorias
Newsletter