Validación del indicador en salud oral GOHAI en población adulta mayor
RESUMEN
Objetivos. El principal objetivo de la
investigación es determinar si el indicador en salud oral
geriátrico GOHAI refleja problemas en salud oral
detectados por medio del examen clínico oral. Para ello,
se realiza la investigación en los adultos mayores de los
hogares de ancianos Corazón de Jesús en Puriscal y
Ofelia Carvajal en Desamparados.
Participantes. De 67 adultos mayores 37
corresponden al Hogar de Ancianos Corazón de Jesús
y 30 al Hogar de Ancianos Ofelia
Carvajal.
Metodología. La
investigación es de corte transversal y es de naturaleza
descriptiva y cuantitativa. La información se recopila por
medio de una encuesta y examen clínico oral. Para la
descripción estadística de los datos se utiliza la
medida central de la mediana, media y la dispersión se
mide por el rango intercuartílico. La validación
del índice GOHAI se lleva a cabo por medio de la
evaluación de su fiabilidad y validez en el contexto
costarricense. Para la presentación gráfica de los
datos se utiliza la Caja de Tukey, gráficos de barra y
pastel.
Resultados. Los adultos mayores presentan edades
entre los 57 a 98 años, con una media de 78,12
años. De ellos, 79% alcanzaron la primaria incompleta, lo
que muestra un bajo nivel de escolaridad. Las principales
enfermedades sistémicas son la presión alta y
gastritis. El examen clínico oral muestra un CPOD de
30,16, resaltando los dientes perdidos con una media de 27,31
piezas, lo que refleja un alto nivel de edentulismo. 57%
Presentan desajustes en las restauraciones y 79% tiene necesidad
de prótesis o reparación. El indicador de calidad
de vida muestra un nivel bajo con una media de 38,9. La
consistencia interna del GOHAI se presentó con un
coeficiente de alpha de Cronbach de 0.80 para los 12
ítems. En análisis factorial se comprobó que
había cuatro factores capaces de explicar el 65% de la
varianza total. Los factores que se pusieron de manifiesto con el
análisis factorial del GOHAI, se presentaron en el
siguiente orden: a) incomodidad (31,82%), b)
insatisfacción con la apariencia (12,92%), c)
limitación funcional (11,32%), d) dolor (8.96%). La medida
de adecuación muestral de Kaiser-Meyer-Olkin fue de 0.62 y
la prueba de esfericidad de Bartlett de 258,44 con 66 grados de
libertad (p<0.001). Se logra demostrar que el índice
GOHAI está fuertemente correlacionado con la necesidad de
prótesis en los adultos mayores sujetos a
estudio, pues R2 = -0,940.
Conclusiones. El estudio refleja un alto
nivel de desdentados en el adulto mayor de la muestra, así
como una alta necesidad de prótesis total o parcial y de
reparación de prótesis que se encuentra en boca. Se
determinó que el nivel de conocimiento en salud oral por
parte del personal de los hogares de ancianos es bajo y se
requiere de una estrategia de promoción en salud oral para
el adulto mayor. El GOHAI tiene propiedades psicométricas
aceptables, discrimina entre la autopercepción de la salud
bucodental y la auto percepción de salud general, La alta
correlación observada entre el índice GOHAI con la
necesidad de prótesis es reflejo fiel del alto nivel de
desdentados por parte de este segmento poblacional, así
como del escaso conocimiento en salud oral por parte de la
administración de los hogares de ancianos de la
muestra.
Palabras clave: indicador en salud oral GOHAI, adulto
mayor, examen clínico oral, necesidad de prótesis,
desdentados, correlación.
CAPÍTULO I
INTRODUCCIÓN
A nivel mundial, la mayoría de los países
se enfrentan a un envejecimiento de su población y Costa
Rica no es ajena a esta transición demográfica en
la cual el número de personas mayores de 65 años
será cada vez mayor, debido al aumento de la esperanza de
vida y disminución de fecundidad (Rosero Bixby,
Muñoz, Martínez y Cruz, 2004).
Por estas razones unos de los desafíos más
importantes en nuestro país es logran dar a los adultos
mayores oportunidad de mejorar su salud bucodental ya que este
fenómeno de envejecimiento unido a patologías no
tratadas, conllevan al deterioro de salud bucal y por
consecuencia a la salud general. En Costa Rica existe poco
interés de muchos profesionales en Odontología por
la salud buco dental, de aquellos mayores que se encuentran de
forma permanente en una institución, los cuales tienen
derecho a mantener una condición bucodental sana y una
autoimagen satisfactoria.
Estos hechos han motivado la idea de acrecentar planes y
proyectos sobre la atención de la salud bucodental para
esta población, quienes se encuentran con grandes
limitaciones y desventajas en comparación con aquellos que
sí tienen mayor respaldo de sus familiares o que poseen
más independencia y auto gobernación (Chávez
y Madrigal, 2009).
Ante estas necesidades deben utilizarse técnicas
que permitan a las personas encargadas de los adultos mayores
institucionalizados estar alertas, vigilantes de la salud bucal
para brindarles una mejor calidad de vida utilizando
un enfoque moderno de la salud que incluya entre sus metas la
capacidad funcional y bienestar de los pacientes, como es el caso
de los instrumentos psicométricos.
Uno de los primeros instrumentos desarrollados para
evaluar la salud oral desde un punto de vista funcional fue el
Índice de Salud Oral Geriátrico (GOHAI).
Misrachi y Espinoza (2005) mencionan: "Como fundamento
para el desarrollo del GOHAI la salud oral fue definida como la
ausencia de dolor e infección, compatible con una
dentición funcional y cómoda que permita al
individuo continuar con su rol social" (p.32).
El presente estudio pretende detectar trastornos
bucodentales en población geriátrica
institucionalizada en los hogares de ancianos Corazón de
Jesús en Puriscal y Ofelia Carvajal en Desamparados para
cotejarlas con el diagnóstico clínico. Para ello se
utilizará el indicador de salud oral GOHAI (Índice
de Valoración de salud Oral en Geriatría)
diseñado para medir los problemas de salud bucal de los
adultos mayores.
Las propiedades psicométricas de este tipo de
instrumento, son dependientes del contexto
lingüístico y cultural de la población en la
que se evalúe, lo que hace necesario evaluar estas
propiedades en el contexto donde se use. Para determinar la
consistencia interna del GOHAI se calculó el coeficiente
alpha de Cronbach y se exploraron las dimensiones subyacentes y
fundamentales mediante un análisis factorial, con
extracción de factores por el método de componentes
principales y una rotación posterior por el
método ortogonal varimax. Se evaluó la
adecuación del análisis factorial mediante la
prueba de Kaiser-Meyer-Olkin y la prueba de
esfericidad de Bartlett.
Por medio de este método se pretende la
validación del Índice GOHAI en adultos mayores
institucionalizados.
1.1
ANTECEDENTES
De acuerdo a los resultados del Censo Nacional de
Población 2011, se confirma la disminución de la
natalidad y permite ver más claramente que la
población de Costa Rica continúa el proceso de
envejecimiento demográfico, donde los menores de 15
años representan 24,8% y la población de personas
adultas de 65 años y más alcanza el 7,3% del total
del país. Esos porcentajes eran de 31,9% y 5,6% en el 2000
respectivamente.
Costa Rica viene mostrando un proceso de envejecimiento
demográfico de la pirámide poblacional, debido a la
reducción de la población de menor edad y al
aumento de la población en edades intermedias y mayores.
Esto significa que Costa Rica se aleja de una población de
estructura joven, para convertirse en un país de
estructura más madura y en progresivo envejecimiento,
debido a una fecundidad en rápido descenso (1,8 hijos) y
una alta esperanza de vida (79 años). En 1950
las personas menores de 15 años representaban
el 42,9% de la población y los mayores de 65
años un 2,9%; en el 2000 las personas menores de 15
años representaban el 32% de la población y los
mayores de 65 años un 5,6%; hoy los menores
de 15 años son el 24,8%, y los adultos mayores alcanzan el
7,3%.
Los cantones donde se ubican los hogares para adultos
mayores sujetos a estudio, no han estado ajenos a este proceso de
envejecimiento demográfico. En Desamparados, el porcentaje
de adultos mayores de 65 años era de 2,7% en 1950; 5,1% en
el 2000 y de 6,9% en el 2011. En Puriscal, respectivamente los
porcentajes son de 2,2%, 7,4% y 9,4%.
Otro aspecto demográfico que se observa en la
población de adultos mayores, es el aumento en el
porcentaje de mujeres. En 1950, el porcentaje de mujeres mayores
de 65 años era de 49,4%; en el 2000 el porcentaje fue de
52,8% y en el 2011 de 53,5%. En la zona de Desamparados los
porcentajes respectivos fueron de 47,4%; 56,7% y 57,5%. En
Puriscal, los porcentajes fueron de 43,6%; 49,4% y 50%
respectivamente. Cabe destacar que en las zonas rurales el
porcentaje de mujeres es menor al de las zonas urbanas, incluso
en algunos distritos el porcentaje de mujeres es menor al de los
hombres.
Rosero et al. (2004) refiriéndose a los adultos
mayores que residen en hogares colectivos mencionan que son pocos
los adultos mayores que residen en estas instituciones y que de
acuerdo al censo del 2000, éstos representan el 1,2% del
total de esta población.
De acuerdo a este estudio, el porcentaje de adultos
mayores que viven en estas instituciones aumenta conforme aumenta
su edad y por tanto su dependencia funcional. Un aspecto
relevante, es que este comportamiento es similar para ambos
sexos, sin embargo en la mayoría de grupos de edad es
mayor el porcentaje de hombres en estos hogares colectivos. Este
fenómeno se explica, quizás porque el
vínculo filial es más débil con los padres
que con las madres, lo cual puede deberse a que los hombres hayan
abandonado en el pasado sus obligaciones paternas, y consideran
importante profundizar en el análisis que explique esta
situación.
Murillo y Castillo (2005) estudiantes de la Facultad de
Odontología, Universidad de Costa Rica, llevan a cabo un
estudio de corte transversal titulado Generalidades y
Condición bucodental de las personas mayores de sesenta
años de los cantones de Goicoechea y Moravia. Se
realizó un estudio epidemiológico con 384 personas
mayores de 60 años cuyo objetivo fue conocer
el nivel de edentulismo e índice de caries radicular de
Katz, y otras características. Se usó cuestionario
y examen bucodental, codificación, tabulación de
datos, uso del Epi-Info 6.4, y programa S.P.S.S. con validez y
confiabilidad de 95% con error permisible de 6%.
De los 384 adultos mayores, el 65% son mujeres y en lo
referente al nivel educativo, el promedio de años de
estudio fue de 6.8 años. El 77% reporta padecer
algún tipo de enfermedad; las más comunes son;
hipertensión, enfermedades del sistema endocrino,
enfermedades gastrointestinales, diabetes, colesterol,
triglicéridos, problemas hepáticos y
gastrointestinales; por lo que, el 75% toma algún
medicamento para tratar los padecimientos reportados.
Los resultados mostraron un elevado porcentaje de
desdentados (45%), mayor en mujeres, diferencia que
resultó ser estadísticamente significativa
(p<0,05). La caries radicular (42%) y gran necesidad de
rehabilitación protésica (56%). Se concluye que,
actualmente, la condición bucodental de las personas
mayores está muy deteriorada, por lo que la
atención primaria a este grupo en acelerado crecimiento
debería abarcar la rehabilitación protésica,
con el fin de mejorar la calidad de vida.
Esquivel y Jiménez (2009) realizaron un estudio
de corte transversal para determinar la percepción que
tiene un grupo de adultos mayores sobre la funcionalidad de la
cavidad bucal para masticar, saborear y deglutir los alimentos.
Se realizó un estudio transversal, prospectivo y
asociativo con 335 adultos mayores voluntarios, de ambos sexos, y
edad promedio de 69.9 años. Se aplicó una
entrevista y una evaluación clínica de la cavidad
bucal. Se encontró que la percepción de los sabores
de los alimentos está asociada con la necesidad de comer
menos o cambiar de alimento. La percepción de sabores
está relacionada con la sensación de tener boca
seca. Los que tenían los niveles más altos de
educación percibieron menos problemas en la función
de alimentación y en sus diferentes
áreas. No hubo diferencias significativas en el
índice CPOD entre hombres y mujeres. Se
relacionó el puntaje del instrumento, las
áreas de masticación y deglución, el estado
de los dientes con el índice CPOD. Se concluyó que
el estado de la salud de esta población adulta mayor se
caracterizó por un alto porcentaje de dientes perdidos y
en general, malas condiciones de salud bucal que afectan la
percepción de la función de
alimentación.
Chávez y Madrigal (2009) estudiantes de la
Facultad de Odontología, Universidad de Costa Rica,
publicaron un artículo de un estudio llamado "La salud
bucodental de las personas adultas mayores institucionalizadas en
Costa Rica: diagnóstico de una población olvidada",
cuyo objetivo principal fue determinar la condición de la
salud bucodental de las personas adultas mayores que residen en
hogares de ancianos en Costa Rica. Durante dos años, se
visitaron instituciones de este tipo como parte de un proyecto de
investigación titulado "Condición Bucodental de la
Persona Adulta mayor Institucionalizada".
En el año 2006 se trabajó en hogares de la
provincia de San José y en el 2007 en el resto del
país. La muestra total del trabajo fue de 404 personas,
las cuales participaron mediante una entrevista y un examen
clínico, con un instrumento previamente sometido a una
prueba piloto. Los resultados encontrados revelaron un
edentulismo de 64.05%, índice de biofilme dental,
según Loe y Silness, de 2.24, y un índice CPOD
promedio de 26.18; además, presencia de enfermedades
sistémicas (predominantemente hipertensión arterial
y diabetes), condiciones crónicas, polifarmacia (un
promedio de 4.18 medicamentos diarios por persona). Fuera de San
José, se encontró una falta de acceso a los
servicios de atención odontológica, ya
que solo 15.1% de las personas había sido atendido en este
ámbito durante su estancia en el hogar. Condiciones que
influyen definitivamente en la salud general y bucodental. Se
concluye que, las personas adultas mayores institucionalizadas
presentan condiciones deterioradas de salud general y bucodental,
predomina en ellas el edentulismo total.
Salas Badilla, Lobo Camaño y Altamirano
Díaz (2001) Llevaron a cabo un estudio cuyo objetivo fue
establecer los mecanismos de evaluación de la calidad de
vida de las personas adultas mayores institucionalizadas. El
marco muestral lo constituyen 67 instituciones que cubren todo el
territorio nacional y para la selección de la muestra, se
tomó el 25% de su población, o sea, 17 hogares de
ancianos. Para realizar la investigación, la
selección se realizó por conveniencia. Para el
diseño y selección de la muestra se utilizó
un método probabilístico como lo es el muestreo
estratificado lo que dio como resultado 54 adultos
mayores.
De los 54 adultos mayores entrevistados, el 52%
corresponden al género masculino, en tanto que el 48% a
género femenino. Del 90,74% de los Adultos Mayores que
indicaron que si tenían familia que representan a 48
personas, un 85,71% indicó que los mismos sí
llegaban a visitarlos al hogar donde residen y un 14,29% que
corresponden a 7 personas indicó que no llegaban a
visitarlos. Un 72%, que corresponde a 39 adultos mayores
sí padece de alguna enfermedad. Entre las
enfermedades que con más frecuencia se presenta
en estos Adultos Mayores, es la diabetes con un 15,38%,
seguido por la Osteoporosis y la Presión
Alta, que representan al 12.82%.
En el estudio se concluye que Son varios los aspectos
que se deben tomar en cuenta a la hora de atender Adultos
Mayores, como por ejemplo la alimentación y la salud. En
cuanto al primer rubro la mayoría de los centros si
ofrecen una buena alimentación a los beneficiarios. Pero
en el aspecto salud el estudio indica que se necesita una mayor
capacitación por parte del personal que labora en los
mismos, ya que se están realizando muchas labores de
manera muy empírica y esto no colabora con el fin de
brindar un buen servicio y calidad de vida a los adultos mayores
que se encuentran institucionalizados.
También es importante que el adulto mayor se
sienta útil y permanezca ocupado la mayor parte del tiempo
para prevenir depresiones y en este sentido la mayoría de
los centros realizan su mejor esfuerzo y además reciben
ayuda de voluntarios que colaboran con la parte recreativa y
ocupacional de las personas.
Para los especialistas en Geriatría, Trabajo
Social y Psicología la definición del concepto
calidad de vida, implica:
a. Estado de bienestar integral (social,
económico, de salud, psicológico,
emocional).
b. La forma en que la persona mayor vive y
se relaciona con su entorno permitiéndole desarrollarse
integralmente.
c. Estado de equilibrio que le permite a
una persona mayor vivir dignamente.
d. La satisfacción de las
necesidades que presenta un ser humano a nivel biopsicosocial,
para la obtención de los resultados
satisfactorios.
e. Mantener su rol dentro de la sociedad
sin sentirse discriminado.
Misrachi y Espinoza (2005) se basaron en la necesidad de
que los profesionales de la salud manejen el concepto calidad de
vida, estado de salud específico de una enfermedad e
instrumentos para medir la calidad de vida en relación con
la salud, citaron que en las últimas tres décadas
se han desarrollado numerosos instrumentos para medir la calidad
de vida relacionada con salud oral. Se menciona que en la
conferencia sobre medidas de salud oral y calidad de vida
realizada en Chapell Hill en 1996 se revisaron 11 instrumentos,
que pueden ser auto administrados o aplicados por un
entrevistador dentro de los que incluyeron el GOHAI, el cual se
constituye en uno de los primeros instrumentos desarrollados para
evaluar la salud oral desde el punto de vista funcional. Se
expone que el GOHAI ha sido validado y ampliamente utilizado en
los Estados Unidos, demostrando que presentaba confiabilidad.
Además citan que este instrumento para el uso de la
población francesa previamente había sido
traducida y validada según la versión china. Sus
conclusiones son que es indudable que si la atención de
salud tiene por objetivo aumentar la capacidad funcional y el
bienestar de las personas y no solo limitar la
fisiopatología, debe integrar los datos sobre mediciones
de la calidad de vida relacionada con la salud en las historias
clínicas, junto con el diagnóstico, el tratamiento
y la atención de salud continúa.
Esquivel y Jiménez (2009) realizaron un estudio
transversal prospectivo en Granada España, su muestra fue
de 96 adultos y se detectó la necesidad de atención
odontológica mediante la aplicación de GOHAI. Para
estos efectos, se utilizaron dos instrumentos:
Índice GOHAI de 12 ítemes
y Encuesta de salud bucodental de la OMS
Tomaron en cuenta como variables la situación
bucodental de las personas adultas mayores, efectos en la calidad
de vida, necesidad de acceso a servicios de salud dental, reporte
del Índice CPOD y CPITN. Con respecto al Índice
GOHAI se determinó su consistencia interna y
confiabilidad, llevaron a cabo la comparación entre el
índice GOHAI y OHIP. Posteriormente, analizaron las
características del grupo, predominio de mujeres , bajo
alfabetismo, frecuencia de anomalías de ATM, estado de
dentición, índice CPOD, estado de salud periodontal
por el Índice CPTIN, asociación entre Índice
CPOD Y GOHAI. En sus resultados se obtuvo la edad media,
desviación estándar, nivel de alfabetismo,
dependencia económica, visitas al odontólogo.
Destaca la siguiente información generada:
Componentes del CPOD por género y
total
Condiciones bucodentales y necesidad de
atención
Asociación entre puntuaciones de
GOHAI y variables sociales
Asociación entre puntuaciones de
GOHAI y necesidad de tratamiento detectadas
clínicamente
Sánchez, Heredia, Juárez, Gallegos, De la
Fuente y García (2004) realizaron un estudio cuyo objetivo
fue evaluar las propiedades psicométricas de la
Geriatric/General Oral Health Assessment Index, Versión en
español (GOHAI-Sp) y su relación con el estado de
la dentición de una población de adultos mayores
mexicanos como una validación discriminatorio.
La investigación fue de corte transversal
realizado entre personas mayores de 60 años de edad. Se
utilizó una versión en español del GOHAI-Sp
validado en España en los pacientes geriátricos
institucionalizados. La evaluación clínica se
realizó con el fin de determinar la experiencia de caries
coronal y radicular.
Para efectos de validación del índice
GOHAI, se realizó una medición de la coherencia
interna del GOHAI, la cual dio un coeficiente alfa de Cronbach de
0.61 para los 12 ítems. Al eliminar del análisis
los ítem 3 y 7, se presentó un coeficiente de alpha
de Cronbach de 0.77 para los diez ítems. En
el análisis factorial, un factor por sí solo fue
capaz de explicar el 30,6% de la varianza total. El
factor que fue más evidente en el análisis
factorial de los
GOHAI fue la insatisfacción con la apariencia. La
medida de Kaiser-Meyer-Olkin de adecuación simple fue de
0,81 y la prueba de esfericidad de Bartlett fue 1748,55 con 66
grados de libertad (p <0,001). Hubo una diferencia
estadísticamente significativa en las puntuaciones GOHAI
entre las respuestas a la autopercepción de la salud
bucodental y general (p <0,001). Además, hubo una
correlación estadísticamente significativa baja con
el coeficiente entre los componentes perdidos y obturados del
índice CPO-D, y el número de dientes sanos y
funcionales (p <0,05).
En conclusión a pesar de las diferencias
culturales existentes entre México y España los
resultados señalan que la versión española
del GOHAI presenta propiedades psicométricas aceptables,
lo cual permite su utilización en población anciana
mexicana. Cabe señalar que existe una correlación
del puntaje de GOHAI con la experiencia pasada de caries
(perdidos y obturados) y con el índice CPO-D.
1.2 PLANTEAMIENTO
DEL PROBLEMA
La valoración del estado de salud oral del adulto
mayor, tradicionalmente, debería realizarse mediante un
examen clínico y radiográfico pero, por causa de la
falta de recursos de los hogares de ancianos, se elude la
atención en salud oral. (Pinzón , Zunzunegui,
1999).
Estas situaciones han llevado a investigadores, en otros
países, a tomar en cuenta la posibilidad de valorar el
estado de salud oral, basándose en la percepción
del paciente, por medio de instrumentos de evaluación que
toman en cuenta aspectos funcionales y
psicosociales. Estos instrumentos hacen una relación
entre las dimensiones por medio de varias preguntas que son
administradas a través de entrevistas o en forma de
cuestionarios.
Uno de estos instrumentos, el cual considera que, aun
cuando los individuos no sean capaces de explicar la magnitud de
sus problemas orales, por medio de su sensación, de la
apariencia de su boca, su capacidad de masticar y de su salud
oral, se puede valorar la necesidad de tratamiento y relacionarse
con evaluaciones clínicas. Este es el índice
(GOHAI) desarrollado para evaluar la salud oral (Pinzón y
Zunzunegui, 1999).
La medición de la calidad de vida oral es un
procedimiento complejo ya que es una entidad de naturaleza
abstracta, que aunque todos intuitivamente sepan a que se
refiere, es de definición imprecisa puesto que depende
directamente de una serie de dimensiones subjetivas no siempre
bien demarcadas que además son sensibles a la influencia
que ejerce el contexto social, cultural, político y
geográfico de la población sobre la que se
evalúan.
Para legitimar científicamente el uso de un
instrumento como el indicador GOHAI destinado a medir
percepciones, es necesario testar las propiedades
psicométricas del mismo y esto se realiza evaluando tanto
su consistencia interna; que implica que las diferentes
dimensiones del instrumento están midiendo diferentes
aspectos de un mismo atributo, así como la validez de
constructo a fin de evaluar la fortaleza de las presunciones
lógicas de la hipótesis en función de los
hallazgos obtenidos en los resultados y su coherencia con la base
teórica. Todos los cuestionarios presentan una base
teórica sobre la cual basan su sistema de
medición. La validez de constructo trata de explorar si
los pilares sobre los que se asienta el instrumento son
sólidos.
De lo expresado en los párrafos
precedentes se formula el siguiente problema.
¿Es el indicador GOHAI un
instrumento fiable y válido para determinar la
condición de salud oral en los adultos mayores sujetos a
este estudio?
Para dar respuesta a esta interrogante se
plantea:
1. Establecer las condiciones
sociodemográficas de la muestra en estudio.
2. Identificar la necesidad de tratamiento
odontológico por medio de examen
clínico.
3. Identificar las condiciones de riesgo de
enfermedad oral en adultos mayores institucionalizados mediante
la aplicación de GOHAI.
1.3
JUSTIFICACIÓN
El presente trabajo surge de la necesidad del el
personal a cargo de los adultos mayores institucionalizados de
contar con un medio de diagnóstico práctico para la
identificación de problemas bucales, ya que la salud bucal
es un elemento importante de la salud general y la calidad de
vida de los individuos.
EL PRESENTE TEXTO ES SOLO UNA SELECCION DEL TRABAJO
ORIGINAL.
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