El Cantar de mio Cid trata el tema del Proceso de recuperación de la honra perdida por el héroe, cuya restauración pondrá en una honra mayor a la del principio.
El poema se inicia con el destierro del Cid, tras haber sido acusado de robo. Este deshonor supone también el ser desposeído de sus tierras y privado de la patria potestad de su familia.
Tras la conquista de Valencia, gracias al su valor, su astucia consiguen el perdón real y con ello nuevas tierras, y una nueva clase social, que se une a su antiguo solar ya restituido. Para ratificar su nuevo estatus de señor de vasallos, se conciertan bodas con linajes del mayor prestigio cuales son los infantes de Carrión.
Pero, con ello se produce la nueva caída de la honra del Cid, debido …ver más…

Por tanto se puede decir que el verdadero tema es el ascenso de la honra del héroe, que al final es señor de vasallos y crea su propia Casa o linaje con solar en Valencia, comparable a los condes y ricos hombres.
Más aún, el enlace de sus hijas con príncipes del reino de Navarra y del reino de Aragón, indica que su dignidad es casi real, pues el señorío de Valencia surge como una novedad en el panorama del siglo XIII y podría equipararse a los reinos cristianos, aunque, eso sí, el Cid del poema nunca deja de reconocerse él mismo como vasallo del monarca castellano, si bien latía el título de Emperador, tanto para los dos Alfonsos implicados como para lo que fue su origen en los reyes leoneses, investidos de la dignidad imperial.
De cualquier modo, el linaje del Cid emparenta con el de los reyes cristianos y, como dice el poema: «hoy los reyes de España sus parientes son, / a todos alcanza honra por el que en buen hora nació». , de modo que no sólo su casa emparentan con reyes, sino que estos se ven más honrados y gozan de mayor prestigio por ser descendientes del mismísimo Cid.

Existe un ejemplar único que actualmente se encuentra en la Biblioteca Nacional en Madrid. Se trata de un tomo de 74 hojas de pergamino grueso, al que le faltan tres, una al inicio y dos entre las hojas 47, 48 y 69, 70. Otras 2 hojas le sirven de guardas
“En el siglo XVI se guardaba en el Archivo del Concejo de Vivar. Después se sabe que