El día que las aves dejaron de cantar – Monografias.com
Ese día en que las aves no cantaron más, no te voy a mentir, me sentí tan, pero tan alegre, una felicidad invadió mi cuerpo cuándo por primera vez en mi vida me despertaba sin el molesto trinar de las aves anunciando en las proximidades el astro rey, porque las aves antes de volar dan las gracias por el hermoso cielo despejado que van a surcar durante el día.
Cómo nunca antes, me duché temprano y salí al campo a festejar, las buscaba por todos lados y las veía sobre las ramas en montoncitos acicalándose una con otra, me dije <>, << ¿conozco animales mudos…?>> creo que la jirafa es muda, o de pronto el perezoso, tal vez los peces del mar, bueno el caso es que estoy muy feliz de no escuchar las aves>>
luego que festejé por un rato, decidí descansar y colgar una hamaca debajo de un árbol y disfrutar del silencio especial para mí, <<>pero antes tendría que ir hasta la ciudad por mas provisiones, monté mi caballo, mi fiel compañero y rumbo a la ciudad me dirigí, a paso lento, a trote largo , ya en el camino no pude evitar ver cerca de la orilla del rio un espectáculo maravilloso, algo hacia que las aguas en las orillas reflejaran los rayos del sol, de una manera tan maravillosa que solo podria ser una obra de Dios, <<¿será que voy a ver que es ese resplandor plateado sobre las orillas, o lo hago cuando de la ciudad con provisiones por este camino regrese? , ya son dos las cosas que tengo que investigar, el cantar de las. Aves y el color de rio, mejor cuando regrese, bajo hasta la orilla e investigo que puede ser.
Sigo galopando pensando en las cosas que había pasado y por qué.
y a unos cuantos cientos de metros antes de llegar a la ciudad sobre una de sus montañas protectoras vi algo impactante , ¡cómo estamos tan adelantados que lo que nos tomaba días en hacer, una sola maquina lo logra en minutos! , me refiero a la tarea de ser leñador, las verdes montañas que ayer tenían sus ropas puestas hoy dejaban al descubierto un cuerpo pedregoso y enmarañado, me dije otra vez<< bendito sea el progreso, así como vamos, vamos en camino hacia un mundo mejor>> y cuan pero cuan equivocado estaba, pero tenía cosas por hacer, comprar comida, ver que le da esa tonalidad al rio, y por que las aves dejaron de cantar.
entré a la ciudad y el afán que todos parecen tener , gente viene, gente va, que tanta cantidad de autos y motos todas desenfrenadas en busca de ganarle al reloj unos cuantos segundos, basuras regadas por todos lados y aún en las alcantarillas se pueden observar los restos de los empaques de la comida rápida de moda en el momento.
tengo que apresurarme, si quiero estar de nuevo en la tranquilidad del campo, <> le salude al señor de la tienda como era de costumbre, por lo general el solo se limitaba a levantar brevemente las cejas y eso le bastaba a uno para saber que don miguel había pasado bien, <> que contraste, lo que empezó para mí como el mejor día de mi vida, para este pobre hombre sin duda era uno de los peores , no quería preguntar que lo tenía tan triste pues quería regresar rápido y aprovechar la tranquilidad del campo, pero pudo más la curiosidad de saber que perturbaba a don miguel así que le pregunte <> el viejo haciendo un gesto con sus labios como en señal de lamento dijo<> yo pensé que lo de las aves solo lo había notado yo, pero no quise echarle más carbón al fuego, quería regresar porque siempre que entro en la ciudad hay algo en el ambiente que me hace sentir pesado ,por lo que me despedí de el y en mi caballo puse las provisiones, quería salir de aquel abrumador ambiente citadino, como me gusta ser muy observador note que el cielo de la ciudad no tenía el mismo tono de azul que el campo tenía cierta coloración amarilla con algo de grisáceo, en fin no, no era el mismo azul, cada vez era un poco más gris, hacia un rato no se veía como si fuera a llover, pero ahora la lluvia era inminente, dentro de poco se podía precipitar un diluvios aguacero, salí a toda prisa cuando empezaron a caer las primeras gotas, pasé por las montañas desforestadas y se veía como se empezaban a mojar la piedras descubiertas, yo me dirigí al rio quería ver que le daba el color plateado antes de que el agua lluvia llenara el rio y este se llevara todo lo que tenía a otro lugar lejos.
dejé mi caballo en un costado del camino y bajé por un pequeño sendero al rio todavía se veía el color plateado en sus orillas ,no notaba aún de que se podía tratar, hasta que iba por mitad de camino un olor putrefacto que emanaba de la gran mancha plateada en las orillas del rio ,me dieron serios motivos para pensar de que se trataba, aunque ya lo había descubierto quería verlo con mis propios ojos.
en efecto una gran cantidad de peces muertos a cada orilla, como era muy intenso el olor solo miré por un rato y me devolví por mi caballo y de pronto se precipita el agua en un torrentoso aguacero que me obligó a buscar refugio entre las raíces de un enorme caracolí frondoso que estaba cerca de las montañas ahí pase casi dos horas cuando mi vista se fija en las enormes montañas taladas , vi como una masa gris iba bajando buscando abrir camino desde lo más alto de la montaña, parecía lodo, lo más impactante fue ver como pequeñas piedras fueron movidas desde su puesto y rodando y rodando fueron amontonándose sobre una gran roca que no tenía la mejor ubicación que digamos, en cuestión de minutos y debido a la constante lluvia, un fuerte crujir repentino llegó a mis oídos , no era un trueno, era la fuerza desenfrenada de la naturaleza haciendo escuchar su voz , toneladas y toneladas de rocas y lodo ahora cubrían todo el camino , las que hasta ayer vestían sus más hermosas galas hoy una ruina las cubría de palmo a palmo, todo esto ha pasado el día en que la aves dejaron de cantar, ¿tendrá alguna relación lo que había pasado hoy?, me preguntaba observando la enorme cantidad de piedra y lodo en el camino.
Pronto cesó la lluvia tomé mi caballo y me dirigí a mi casa, era tiempo de pensar seriamente en lo que había pasado hoy, pero sería mucho mejor después de una taza de café.
después de una taza de café tomé una silla y en la terraza de mi casa me puse a pensar que había hecho que las aves dejaran de cantar, ¿sería por la gran nube amarilla que de la ciudad amenazaba con teñir el azul brillante de cielo del campo? o ¿sería que estaban en contra con lo que le ocurrió a los miles de peces que flotaban en las contaminadas aguas del rio que traía su cauce atravesando la ciudad recogiendo toda clase de desechos? o ¿tal vez fue el gran daño hecho a su habitad en la montaña?, viendo las cosas en otra perspectiva en un día como hoy , yo de ser una de las aves tampoco hubiera abierto mi pico para entonar canción alguna, después de pensar detenidamente unos minutos más tarde llegué a esta conclusión: el sonido del cantar de las aves ha estado adornando el ambiente con hermosas melodías desde tiempos inmemoriales y en ese sonido hay diferentes mensajes para el hombre, de amor, de melancolía , y desde hace unas cuantas décadas con su llamado tratan de advertirnos de los peligros de descuidar el medio. ambiente, pero el hombre en su afán nunca les había prestado atención, por el contrario cada día tiene una nueva forma de hacer daño al medio ambiente y el último recurso de la naturaleza fue quitarle el privilegio al hombre de ser advertido de los peligros de descuidar el medio ambiente con hermosas melodías, el hombre con acciones como: la tala indiscriminada, la contaminación de los ríos, o la contaminación del aire con emanaciones de gases contaminantes ha hecho que la tierra utilice su más fuerte grito, el silencio de las aves.
FIN
Autor:
Eduardo