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El aborto y sus diversos enfoques




Enviado por universoignoto



     

     

    Uno de los problemas que
    son trascendentes y misteriosos desde los tiempos más
    vetustos en nuestra historia son el Origen y la
    Terminación de la Vida, es decir el nacimiento y la muerte de
    una persona, que no
    siempre puede ser natural, sino que la muerte
    también puede ser accidental, provocada o inducida, por
    ello en la Legislación Penal de todos los Países se
    sanciona la privación de la vida con penas que van desde
    la prisión, hasta la Muerte Capital, es
    decir pagar la vida de otro con su propia vida.
    Dentro del Código
    Penal Mexicano, tanto a nivel Federal como Estatal se encuentran
    varios delitos contra la
    vida que se engloban dentro del apartado de los Delitos contra la
    vida y la integridad corporal, entre ellos encontramos el
    Homicidio, el
    Suicidio, las
    Lesiones, el Infanticidio, Aborto y el Abandono de Personas.
    Todos ellos atentan directamente contra el Bien jurídico
    Tutelado que es la Vida.
    En el presente caso nos referiremos al Delito de Aborto,
    que se comete en contra del producto de la
    concepción en cualquier momento de la preñez, es
    decir, al estar aún dentro del Vientre materno, sin haber
    conocido el mundo externo, dentro del cual se desarrollan y
    desenvuelven las personas ya nacidas. He aquí que surge el
    dilema de saber a partir de cuando se tiene vida, no solo
    legalmente, sino para con los demás y en los diversos
    ámbitos de desarrollo en
    la vida.
    Para hablar del Aborto, delito tan controvertido en el
    ámbito Religioso, Legal, Moral, Social
    y Médico, es necesario saber cual es la forma en que esta
    constituido el ser humano y por ende sabremos cual es el comienzo
    de la vida en sentido Biológico.
    Dentro de las ciencias
    naturales, que se encargan de estudiar todas las causas que
    concurren para que se produzca todo cuanto hay y existe a nuestro
    alrededor se engloba la Biología, a
    través de ella se ha llegado a la conclusión de que
    la unidad anatómica y fisiológica de cualquier ser
    vivo, es decir la cantidad más pequeña de materia dotada
    de vida propia, es la célula.
    Las células
    miden entre 5 y 50 micra.

    Esta pequeña unidad que es la célula,
    esta compuesta por:
    La membrana celular o plasmática, el citoplasma, los
    condrisomas, el centrosoma, el núcleo; dentro del
    núcleo se encuentra la membrana nuclear; los cromosomas, que
    son visibles solamente en fase de división y llevan el
    código hereditario; los nucleolos; y el núcleo
    plasma, que es el jugo nuclear constructor del ADN y ARN .
    Ya que hemos visto la constitución de las células, ahora
    vemos que las células reproductoras o gametos son los
    portadores de los caracteres transmisibles. Estos pueden ser de
    diversas maneras, ya sea específicos, es decir, propios de
    una especie biológica o conjunto de individuos procedentes
    de un origen común capaces de reproducirse entre sí
    de modo indefinido.
    La Genética
    Mendeliana, contribuyó a tener un mejor conocimiento
    de la determinación sexual basándose en que, si los
    cromosomas del óvulo y del espermatozoide transmiten a la
    descendencia caracteres biológicos, deben poseer genes
    portadores del sexo.
    Las células masculinas y femeninas pueden unirse al
    momento de realizarse un acto fisiológico, como lo es el
    acto carnal o coito, lo cual puede producir una fecundación y por ende se manifiesta la
    reproducción humana. Así pues a
    continuación hacemos mención de cada uno de estos
    procesos que
    hemos mencionado.
    La fecundación, es la unión de los gametos
    masculino y femenino, que produce el cigoto o la célula
    huevo, es la reproducción sexual propiamente dicha o
    singamia.
    Desde el momento de la penetración del óvulo por el
    espermatozoide, los dos núcleos se fusionan y los
    cromosomas se
    reúnen para formar los del nuevo individuo cuyos
    caracteres quedan determinados, desde su sexo, hasta el color
    sus ojos y de sus cabellos.
    Puede definirse la reproducción como el proceso
    biológico que tiene como finalidad la aparición de
    una nueva generación de individuos de una misma especie,
    animal o vegetal, idénticos a sus progenitores, pero
    separados por completo de los mismos y con posibilidad de
    desarrollar una vida total y plenamente independiente.
    Se da la reproducción sexual cuando el individuo hijo
    procede del cigoto, o huevo fecundado, es decir la célula
    formada por el óvulo y el espermatozoide. El huevo es una
    nueva célula. Se divide en dos células iguales,
    después en cuatro, y así sucesivamente. No aumenta
    de volumen ni de
    diámetro 130 milésimas de milímetro.
    La sangre de la
    madre no se mezcla con la del niño: el huevo esta
    protegido por la barrera placentaria a través de la cual
    se efectúan los intercambios de oxígeno, gas
    carbónico y sustancias nutritivas.
    Tras la fecundación viene el desarrollo del huevo o
    cigoto, que ya es una célula. Si tomamos en
    consideración este principio tenemos que el huevo ya tiene
    vida propia. A partir de ese momento, el huevo recibe el nombre
    de embrión y ha de atravesar distintas fases.
    A las cinco semanas el embrión mide 8.5 milímetros.
    A las ocho semanas 3.5 centímetros y adquiere la forma
    definitiva. Durante el segundo mes el embrión se ha
    modificado, se diferencian las tres capas de tejido aisladas al
    principio:
    1.- Tejido nervioso y piel
    2.- Esqueleto, riñones y corazón
    3.- Aparato digestivo
    y respiratorio

    Así pues el embrión, creado por el cigoto
    o huevo fecundado cuando se divide en dos células, al
    tercer mes el embrión toma en nombre de FETO. Todos sus
    órganos están definitivamente constituidos, pero no
    puede vivir de una manera autónoma y la madre no siente
    todavía que se mueva su hijo. Puede venir el rechazo del
    embrión y de sus membranas; este proceso se conoce con el
    nombre de Aborto o malparto.
    Se puede afirmar que, si un ser presenta determinadas características organizativas, ejecuta
    funciones
    determinadas, como la nutrición,
    relación y reproducción, y responde a los
    estímulos del medio
    ambiente, nos hallamos en presencia de un ser vivo y, en el
    caso contrario, de un ser inerte.
    La aparición de la vida para los antiguos pensadores se
    debía según ellos a la intervención de
    poderes naturales. Posteriormente, diversas teorías
    religiosas interpretaron de diferentes maneras las creencias
    anteriores, y al correr de los siglos, apareció una
    elaborada Doctrina Filosófico-espiritualista, denominada
    Vitalismo, que explica los fenómenos de la vida mediante
    un principio vital, capaz de actuar sobre la materia inerte
    dándole propiedades de ser vivo.
    La Teoría
    Naturalista pretende explicar el origen de la vida
    admitiendo que la temperatura y
    humedad de la tierra
    fueron en un remoto pasado muy favorables para la existencia de
    seres vivos. Los elementos químicos, en estas
    circunstancias, llegaron a combinarse en complejas sustancias,
    aún no vivientes, a partir de las cuales se produjo la
    aparición de las moléculas proteicas, capaces de
    reproducirse por sí mismas. El ser vivo se originó
    de este modo de otro que no lo era, y; a partir de entonces, el
    proceso siguiente se rigió por uno de los postulados
    fundamentales de la Biología, según el cual: Todo
    ser vivo procede, por generación, de otro ser vivo
    semejante a él. ("OMNIS CELLULA EXCELLULA).
    En la interrupción del embarazo, es
    decir el aborto, esta
    en juego una
    nueva vida. Así pues, de ahí el debate que se
    presenta por saber si verdaderamente es una vida o simplemente es
    solo un huevo sin derechos aquello que
    sé esta expulsando y no se permite su desarrollo dentro
    den vientre materno, por ello se presenta las dudas desde un
    orden no tanto científico, sino moral y atañe a las
    convicciones filosóficas y religiosas de cada persona.
    Si tomamos en consideración este principio de que la
    célula es la unidad más pequeña dotada de
    vida, entonces al producirse la fecundación, en la cual se
    forma una célula, ya estamos en la presencia de una vida
    nueva, de una vida independiente y por lo tanto debe tener
    existencia legal y a la vez la protección de la misma
    ley, por lo
    tanto el aborto que consiste en la muerte del producto de la
    concepción en cualquier momento de la preñez,
    según lo enunciado en el artículo 329 del
    Código Penal Federal, es un delito contra la vida y no
    como lo enuncian algunos autores Argentinos como delito contra el
    embrión o el Feto.
    Es cierto que todos tratamos de dar opiniones sobre el tema, pero
    no sabemos muy a fondo el contenido del problema, desde el
    ámbito legal el legislador presenta diversos aspectos por
    los cuales se considera que existe el Delito de Aborto,
    así en diversos numerales del Código Penal Federal
    señala:
    Art. 330.- Al que hiciere abortar a una mujer se le
    aplicará de uno a tres años de prisión, sea
    cual fuere el medio que empleare, siempre que lo haga con
    consentimiento de ella. Cuando faltare el consentimiento, la
    prisión será de tres a seis años, y si
    mediare violencia
    física o
    moral, se impondrá al delincuente de seis a ocho
    años de prisión.
    En este numeral estamos ante el caso de un aborto provocado, pero
    también existe penalizado el aborto voluntario o
    consentido. El mismo código señala que no son
    punibles el Aborto causado sólo por imprudencia de la
    madre embarazada, o cuando el embarazo sea resultado de una
    violación. Así mismo, no se aplicará
    sanción cuando corra peligro de muerte la mujer
    embarazada, pero condiciona que debe ser a juicio del
    médico que la asista, oyendo éste dictamen de otro
    médico, siempre que esto fuere posible y no sea peligrosa
    la demora.
    Por su parte Paul Aymon (1981), señala que el aborto es la
    interrupción del embarazo por la expulsión del feto
    antes de la época en que es viable, es decir antes del
    sexto mes. Y este puede ser espontáneo o provocado.
    Espontáneo.- Cuando el útero esta malformado o
    deformado por fibromas, cantidad sanguínea insuficiente
    para nutrir al embrión, insuficiencias de secreciones
    hormonales del ovario o muerte del embrión por
    anomalías cromosómicas.
    Provocado.- Por razones terapéuticas cuando la vida de la
    madre corre peligro o bien deliberadamente por la madre que no
    desea el embarazo.
    Por su Parte la Curia del Arzobispado de México
    señala que el hombre es
    "hecho a imagen y
    semejanza de Dios". La célula humana consta de 46
    cromosomas que forman 23 cromosomas masculinos, el
    espermatozoide, y 23 femeninos, el óvulo; por lo tanto
    desde el mismo instante de la fertilización del
    óvulo, lo que llamamos concepción, esta
    célula es un ser humano. Tiene bajo cualquier norma, una
    vida propia y de ninguna manera es parte de la madre o del padre;
    a este óvulo fecundado nada le es añadido desde el
    momento de su fecundación y el de su muerte, todo esta
    ahí en su totalidad, simplemente no se ha
    desarrollado.
    Así podemos decir que este es un nuevo ser vivo, ya que
    posee las características de la vida humana, puesto que
    puede reponer sus propias células y desarrollarlas dentro
    de un plan
    específico de funcionamiento y maduración.
    Pero el aborto no solo puede ser derivado de consecuencias del no
    deseo del nacimiento del hijo, a veces también es
    producido por causas económicas, como cuando una mujer
    aborta por que tiene una familia numerosa
    y escasos recursos ara su
    manutención, como es el caso del Código Penal de
    Yucatán.
    El hecho de la realización del coito engendra una responsabilidad, tanto moral como social y
    económica para las personas que lo realizan, se requiere
    de una madurez plena y de la capacidad para comprometerse para
    con el resultado de ese coito.
    Para que exista un nuevo ser es necesaria la existencia e
    interrelación de dos células: una masculina y otra
    femenina, que a su vez deriven en la formación o mejor
    dicho en la concepción de ese nuevo ser.
    Nos preguntamos hasta que grado llega la responsabilidad de quien
    aporta esa célula masculina y de quien aporta la
    célula femenina. Es cierto que la mujer es quien se
    encarga de incubar dentro de su ser a ese huevo o ese feto, pero
    también es cierto que la responsabilidad del mismo es del
    hombre y de la
    mujer, la misma Constitución Política de los
    Estados Unidos
    Mexicanos, menciona que es responsabilidad tanto del hombre como
    de la mujer decidir libremente cuantos hijos quieren tener, pero
    considero también que dentro de este precepto se engloban
    las circunstancias de la responsabilidad paternal y maternal que
    se debe tener aún cuando no haya nacido el
    bebé.
    Estoy de acuerdo con la biología en e sentido que
    señala que una célula tiene vida propia, que no
    requiere de algo más para vivir. Incluso el enfoque
    religioso que se tiene de la vida es semejante a este, pues
    señala que el ser humano esta formado por una
    célula masculina y una femenina y como producto al
    reunirse se da la concepción, creo que si dejamos de lado
    que la vida es universal y se ha mantenido a través del
    tiempo de
    generación en generación como principio formador de
    todo cuanto existe, entonces estaríamos negándonos
    a nosotros mismos.
    El ser que se forma dentro del útero es un ser vivo,
    puesto que siente lo que del se piensa, sabe si es o no querido,
    siento el rechazo o el cariño de los padres, posee todas
    las características de la vida humana, ya que puede por si
    mismo reponer sus propias células y desarrollarlas.
    Según el aspecto religioso señala que desde el
    momento de la concepción ya existe un ser con alma
    inmortal, puesto que no depende de lo material sino de lo
    espiritual.
    Es cierto que el feto es una forma de vida, ya lo hemos
    comprobado, es la creación de una nueva vida, se forma de
    células vivas que se reproducen y siguen crecimiento,
    siguen constituyendo a un nuevo ser que se desarrollará a
    lo largo de nueve meses de gestación, si le es permitido,
    y si no se ve interrumpido su desarrollo por la inconsciencia de
    sus padres o de su madre, si así se le puede llamar a
    quien realmente no encuentra dentro de ese nuevo ser que se forma
    dentro de sí misma la
    motivación para luchar por su vida. Este nuevo ser si
    no se ve privado de su desarrollo va a tener la capacidad de
    madurarse, reproducirse y preservarse en su
    genealogía.
    Considero que el aborto realmente consiste en matar a un nuevo
    ser humano indefenso e incapaz de desarrollarse por si solo
    dentro del ambiento en que nosotros nos desarrollamos y
    desenvolvemos, él requiere del cuidado y protección
    y de la nutrición que recibe a través de la
    placenta y del cordón umbilical que lo liga con su madre,
    que es quien le transmite parte de la vida, pero que a la vez no
    tiene derecho a negarle esa oportunidad de vivir.
    Muchas personas tienen la duda sé si el feto
    todavía no es un ser humano si se considera una
    pequeña semilla de ser humano. , Pero la realidad es como
    lo hemos enunciado desde el principio de este trabajo ese feto es
    un ser humano, esta vivo, quizá no este desarrollado al
    igual que nosotros, pero todos pasamos por ese proceso para
    poder nacer,
    todos tenemos el mismo tiempo de gestación dentro de
    nuestra madre, es cierto que toda la materia viva se compone de
    células, pero sé feto que aún cuando este en
    proceso de desarrollo también esta formado de
    células, es un ser ciertamente, y es un ser vivo, es un
    ser humano, puesto que la especie de la que se desprende es la
    especie humana.
    Sería falso decir que no tiene vida propia. , Pues por si
    solo continua reproduciéndose dentro de su madre, solo
    requiere ese espacio y cuidados, pero quien no lo requiere, a
    pesar de que seamos personas necesitamos un cuidado especial para
    nuestro pleno desarrollo, tanto emotivo, sentimental, social,
    económico y religioso.
    Los seres humanos, somos seres incapaces de respetar la vida
    ajena, existe el instinto de destrucción, unos contra
    otros, él más fuerte contra el más
    débil, el más grande contra el más
    pequeño, pero cuando se trata de un producto engendrado
    por nosotros mismos, no nos detenemos a pensar que estamos
    matando parte de nosotros mismos, que estamos inhibiendo la
    continuidad de la especie, sea por cuestiones sociales, morales,
    religiosas.
    Es cierto dentro de nuestra sociedad juzgamos
    a los demás, la sociedad es la destructora de la misma
    sociedad, matamos seres vivos sin pensar que nosotros
    también somos seres vivos y que quizá pudimos no
    existir, pero que hubo quien tuvo el valor de
    concebirnos y de traernos a este mundo tan lleno de ilusiones y
    tan falto de conciencia.
    La vida de la mujer no peligra por tener un embarazo no deseado,
    es cierto quizás se le obliga o se le desobliga a
    continuar un embarazo no deseado, pero a fin de cuentas ada quien
    tiene su libre albedrío para decidir que es lo mejor para
    uno y que no lo es, pero cuando esta de por medio otra vida, no
    es tan fácil que nos hagamos de oídos sordos ante
    esa falta de apoyo que requiere la mujer para decidir si tener o
    no tener a ese ser.
    Incluso en el caso de violación, lo que se acaba es la
    vida de un ser inocente, de un ser indefenso, de un ser que
    grita
    ¡Déjenme vivir!, Sin ser jamás escuchado, de
    un ser que está en peligro. Puede existir un aborto
    clandestino, pero la mujer sabrá siempre que acabo con una
    vida y le quedará la carga moral siempre, que incluso la
    lleve a preguntarse quien es ella que pudo matar a un ser parte
    de ella misma.
    La mujer que tiene un hijo que no quiere tiene la posibilidad de
    darlo en adopción o
    de encaminarlo a buen camino, pero acabar con una vida cuando se
    tienen otras salidas será dejar su vida debilitada y
    degradada, perderá orgullo y respeto por
    sí misma porque la sociedad le ha dicho que no vale nada,
    puesto que la tacharan de asesina, por acabar con una vida.
    El aborto es una falsa salida mediante la cual se tratan de
    resolver los problemas que la misma sociedad no resolverá,
    es un falso camino que se le deja a la mujer, un camino para
    evitar ser juzgada y ante todo señalada, pero me pregunto
    quien vale menos quien tiene un embarazo no deseado, o quien le
    quita la vida a un ser indefenso, a un ser incapaz de gritar que
    lo único que quiere es vivir y evitar la forma tan cruel
    de juzgar de nuestra sociedad.

    Mediante la humana. La sociedad
    es represiva para consigo

     

     

    Autor:

    Blanca Estela Parra Barbosa

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