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Deuda externa




Enviado por nperez



    Indice
    1.
    Introducción

    2. La Política
    Económica

    3. Los Avales
    Tramposos

    4. Agravantes

    1.
    Introducción

    Los argentinos debemos hoy a los bancos
    extranjeros, al FMI, al Banco Mundial
    y a otros organismos internacionales
    Unos: 200.000 millones de dólares.
    150.000mll son de la deuda publica,
    que debe pagar el estado en
    forma directa.
    Los otros 50.000mll los deben pagar las empresas
    privadas.
    Para eso necesitan dólares, que el estado
    está obligado por ley a
    proveérselos a razón de un peso un dólar(ley
    de convertibilidad.
    La cuenta es sencilla:
    Somos 37 millones de habitantes.
    Cada uno de nosotros debe 5.405 dólares a los bancos
    extranjeros, al FMI y al banco mundial,
    aun al nacer.
    4.054 dólares por la deuda publica.
    1.351 dólares por la deuda de empresas privadas.
    Cada jefe de familia tipo,
    debe pagar 21.620 dólares.
    A los cuales se le agregan los intereses anuales, que son:
    9.500mlls por la deuda publica y 3.000mlls por la deuda privada,
    sumando un total de 12.500mlls.
    Esto significa, que a cada uno de nosotros le corresponden pagar
    28 dólares mensuales de por vida.
    De esa forma, uno esta pagando ya 112 dólares por mes de
    intereses.
    El aumento de impuestos y la
    rebaja de sueldos estatales, fueron medidas tomadas para pagar
    los 9.500mlls de intereses de la deuda.
    El déficit fiscal del
    estado es de unos 5.500mlls anuales, que, si no tuviéramos
    que pagar los 9.500mlls de intereses,
    Nos sobrarían 4.000mlls, o sea tendríamos
    superávit.
    Con este dinero
    podríamos construir escuelas, hospitales,
    Aumentar las jubilaciones y haber creado 2.200.000 planes
    trabajar.
    Para terminar de pagar los intereses va a haber mas impuestazos y
    salariazos.
    Los salarios han
    disminuido en un 25% en los últimos 10 o 12 años,
    por lo que un trabajador que hoy gana $400 mensuales,
    debería estar ganando $530 por mes para estar igual que en
    1.988, hoy gana $130 menos, y los intereses de la deuda son unos
    $112. En conclusión, de los $130 que pierde mensualmente
    cada trabajador, $112 se destinan para pagar los intereses de la
    deuda, y los otros $18 representan la parte de riqueza
    concentrada y que no han fugado aun.
    No es una coincidencia casual.
    Los gobernantes, con la deuda y la política
    económica, provocaron la disminución de los
    salarios y lograron concentrar la riqueza del país en muy
    pocas manos:
    Unos 10 grupos
    económicos locales,
    Los bancos acreedores extranjeros
    Y las grandes corporaciones multinacionales que se quedaron con
    las empresas publicas y privadas argentinas.
    Estos grupos acaparaban nuestras riquezas y exigían al
    banco central dólares, para girar la mayor parte de sus
    ganancias al exterior.
    Gran parte de la deuda se debió a esa fuga de capitales al
    exterior, la otra parte por la llamada "bicicleta
    financiera".

    ¿Debemos pagar la deuda?
    Para contestar esta pregunta debemos considerar cuatro puntos a
    tratar.
    a)La deuda, ¿fue contraída
    legítimamente?
    En 1.982 se presento una denuncia para que se investigara el
    origen de la deuda que era de unos 37.000mlls. En 1.973
    Onganía y Lanuse dejaron una deuda externa de
    8.300mlls
    Que el gobierno
    constitucional la redujo a 7.100mlls al momento del golpe militar
    del 24 de marzo de 1.976.
    Se investigaron detalladamente 457 créditos aprobados por el banco central,
    mas 20 avales mal otorgados por el banco nación
    y por el ex banco nacional de desarrollo-BANADE.
    Los principales bancos extranjeros involucrados en esos
    créditos fueron: el bank of América, republic bank of Dallas, citibank,
    banco de Boston, chase manhatann bank, lloys bank, wells fargo
    bank,citicorp, marine midland bank, banco mundial, unión
    de bancos árabes y franceses, banco de la sociedad
    financiera europea, d.g.bank, banco europeo de crédito, unión de bancos suizos,
    banco di roma y banco de
    la nación Argentina. El
    asunto involucraba a los poderosos y reales dueños de
    nuestro país: grandes bancos extranjeros, FMI, banco
    mundial, empresas multinacionales, unos 10 grupos
    económicos argentinos enormes y funcionarios del proceso
    militar.
    Por este motivo ningún juez se animaba a dictar sentencia
    sin estar muy seguro de lo que
    iba a hacer, estos pidieron a las más prestigiosas
    instituciones
    nacionales de ciencias
    económicas que sugirieran nombres de profesionales de
    primer nivel como peritos especiales, de este modo intervinieron
    un total de 30 peritos de alta capacidad y solvencia moral.
    Los doctores Valle, Trocca, Deheza, Argentato, y García
    Vázquez investigaron la política
    económica que se aplico entre 1.976 y 1.983, el resto de
    los peritos investigo el procedimiento
    técnico y bancario usado para contraer la
    deuda.

    2. La Política
    Económica

    El gobierno militar nombro como ministro de Economía a
    José Alfredo Martínez de Hoz, que formo su equipo
    con
    Economistas surgidos de la Universidad
    anglo-norteamericana de Chicago.
    Martínez de Hoz era y es asesor internacional del Chase
    Manhatann Bank.
    Al asumir, proclamo dos objetivos
    centrales:

    • Eliminar la inflación.
    • Y modernizar (deconstruir) la industria
      nacional.

    Deconstruir la industria significaba:
    Destruir el aparato industrial que ya existía, por ser
    ineficiente, para construir luego uno moderno y eficiente que
    pudiera competir internacionalmente.
    Para vencer la inflación y modernizar la industria se
    dispuso:

    • Reducir la emisión de dinero desde el Banco
      Central.
    • No autorizar aumentos de tarifas de los servicios
      públicos.
    • Abrir la economía bajando los impuestos a las
      importaciones.
    • Decretar la libertad de
      movimientos para los capitales financieros
      internacionales.

    No hace falta ser economista para darse cuenta
    que:

    • Al reducir la emisión de dinero, cada vez que
      el estado tenia déficit fiscal, debía pedir un
      préstamo al exterior, pues los argentinos no
      disponían de ahorros para prestárselos al
      estado.
    • Al no permitir aumentos en los servicios
      públicos para cubrir los mayores costos
      producidos por la inflación, las empresas tenían
      la obligación de pedir prestamos en el extranjero para
      llenar el bache.
    • Al bajar los impuestos aduaneros, los productos
      importados arrasaban con los nuestros y hacían tambalear
      las empresas nacionales, forzándolas a pedir prestamos
      para salvarse de la quiebra.
    • Al decretar la libre entrada y salida de capitales
      financieros, venían sobre todo los especuladores de
      corto plazo.

    En conclusión se adopto intencionalmente una
    política económica que impulso al país a
    endeudarse en el extranjero, con o sin necesidad.
    Para bajar la inflación, Martínez de Hoz adopto la
    llamada "tablita cambiaria", por la cual uno podía saber
    con anticipación el precio al que
    debían venderle la moneda extranjera cada semana, de esta
    manera los intereses de los bancos argentinos eran mas altos que
    los de los países desarrollados, pues la inflación
    y la debilidad económica
    Asustaban a los inversores los cuales exigían mayores
    intereses para prestamos en dólares.
    La situación se agravo para las empresas del estado pues
    fueron obligadas a contraer prestamos en el exterior aunque no
    los necesitaran, también se vieron afectadas por esto las
    empresas nacionales. Cuando llegaron los prestamos el Banco
    Central, el Ministerio de Economía le dio la orden
    de:

    • No entregarlos a la empresa que
      los había pedido, sino darle la suma correspondiente en
      pesos y al "cambio
      oficial" (que era menor que el "cambio libre".
    • El banco podía, retener los dólares en
      sus arcas (o depositarlos en bancos extranjeros), que pasaban a
      engrosar las reservas internacionales.
    • También podían venderlos "en el
      mercado"(a
      particulares y empresas privadas que los utilizaban en la
      "bicicleta financiera") así lograban mantener sin
      modificaciones la "tablita cambiaria".

    Las empresas afectadas por este juego
    fueron:
    YPF, YCF, SEGBA, OSN, Aerolíneas Argentinas, etc.
    Las empresas publicas se endeudaron sin necesidad, y nunca vieron
    los dólares.
    Cuando dichas empresas tuvieron que pagar los créditos,
    pidieron dinero al Banco Central ( dólares) pero este se
    negó a vendérselos al precio oficial, por esto
    debieron comprarlos a precios
    altísimos en el mercado.
    Un ejemplo claro es el de YPF, que contrajo una deuda de
    6.000mlls de dólares. Entre febrero de 1.979 y marzo de
    1.980 YPF fue obligada a contraer 153 prestamos con plazos
    menores a 6 meses.
    En cambio las empresas privadas compraban sus dólares al
    precio oficial pues Cavallo en 1.981 les habia otorgado "un
    seguro de cambio" garantizado por el estado.
    Entonces los dolares de los prestamos eran volcados "al mercado"
    por el Banco Central, eran aprovechados por las grandes empresas
    nacionales y extranjeras, y por grandes especuladores para
    beneficiarce con la "bicicleta financiera", que era fomentada por
    la politica económica del país.
    La prohibición de aumentar las tarifas de los servicios, a
    pesar de la inflación, junto con esta maniobra fueron los
    principales responsables del déficit de las empresas
    publicas. La deuda de las empresas del estado influyo para que,
    cuando Menem y Cavallo
    las privatizaran, su precio fuera muy inferior al valor real de
    estas.

    La "bicicleta financiera" consistía en:
    Un "inversor" compraba esos dolares baratos, los cambiaba por
    pesos, y colocaba estos en un plazo fijo a un interés
    del 9% y hasta del 25%, cuando en el exterior solo le
    habrían pagado entre el 3% y el 7%. Al cabo de 6 meses a
    un año retiraban el plazo fijo, lo transformaban en
    dolares, reintegraban el crédito pedido en el extranjero y
    se quedaban con una suculenta ganancia que fugaban al exterior,
    esto era facilitado por la tablita, que aseguraba un dólar
    barato, y por la libertad de movimientos.
    También existieron pequeños inversores que hicieron
    su "bicicleta" por miles de dolares. Los miles de millones de
    dolares perdidos fueron producto de
    las gigantescas bicicletas de grupos ligados con los más
    altos funcionarios del gobierno.
    El Dr. Enrique García Vázquez aporto datos de suma
    importancia para la causa:

    • Entre 1.978 y 1.981, los giros de dolares al exterior
      injustificados sumaron un total de 38.528mlls de
      dolares.
    • Al finalizar 1.981, nuestra deuda externa era de
      31.794mlls.
    • Eso significa que, si las grandes empresas y los
      especuladores no hubieran fugado sus ganancias, en diciembre de
      1.981, ya no hubiésemos tenido deuda, sino un sobrante
      de 6.734mlls de dolares.

    El Dr. José Alberto Dehesa concluyo
    que:

    • Entre 1.976 y 1.981, la deuda creció en
      27.586mlls.
    • Pero nuestro déficit de cuenta corriente, que
      es el único que crea la necesidad real de pedir
      prestamos extranjeros, fue de solo 5.586mlls.
    • Es decir que sobran 22.000mlls de deuda que solo se
      explica por la fuga de capitales que fomento el
      gobierno.

    La politica económica produjo el endeudamiento
    hasta 1.983, y que aun continua, por eso nos seguimos endeudando
    a pasos agigantados.
    Según Eduardo Basualdo:

    • Entre 1.991 y 1.996, los empresarios recibieron
      70.400mlls mas de ganancias que el promedio recibido entre
      1.970 y 1.975, debido a la concentración de la riqueza a
      que hemos aludido.

    En el mismo periodo fugaron del país una cifra
    muy cercana: 63.400mlls. La similitud por demás
    sugestiva.
    Entre 1.992 y 1.997, las empresas extranjeras fugaron
    disimuladamente unos 12.000mlls a través de las siguientes
    maniobras:

    • Cada vez que invierten una suma de dolares
      acá, la hacen figurar como "Prestamos de la casa
      matriz" a su
      sucursal Argentina, con los intereses del caso. D ese modo
      fugan una buena suma disfrazada de "pago de interés". De
      paso, ese interés figuraba como "gastos" en sus
      balances, ahorrándose el correspondiente impuesto a las
      ganancias.
    • Cuando la sucursal Argentina le compra algún
      insumo a su casa matriz, esta se los factura con
      un sobreprecio inmenso; con ello logran igual resultado
      anterior.
    • La sucursal Argentina figura pagándole
      patentes a su propia casa matriz por las marcas y la
      tecnología que usa.

    La conclusión es clara, los dolares vinieron y se
    fugaron por distintos lados, para beneficios exclusivos de unos
    pocos. Así creció nuestra deuda, sin dejarnos
    nada.

    Los procedimientos
    bancarios que nos endeudaron.
    En la sentencia, se mencionan numerosas irregularidades cometidas
    por los responsables del Banco Central y del Ministerio de
    Economía para contraer la deuda fuera de toda norma de
    control y a
    espaldas de la gente. En el tema de los avales, también
    son responsables las autoridades del Banco de la Nación y
    del ex Banco de desarrollo –BANADE-
    Las irregularidades son las siguientes:
    1) Muchos prestamos se realizaron en forma secreta y no han
    entregado las actas al juez.
    2) El Banco Central no tiene registros de la
    deuda externa,
    Llevan un control estadístico y sol anotaban en una
    libreta cada préstamo pedido.
    3) El Ministerio de Economía no llevaba registro alguno
    de la deuda, ni siquiera estadístico.
    4) De los prestamos que no habia registro estadístico,
    solo los tenían anotados en una "libreta negra"
    5) Los responsables de dichos actos suprimieron información a los peritos hasta la
    actualidad.
    6) El presidente del Banco Central autorizaba créditos sin
    el consentimiento de l Directorio y sin rendirle cuentas
    luego.
    7) Lo mismo hizo el vicepresidente, pero sin rendirle cuentas
    siquiera al presidente.
    8) Domingo Cavallo, cuando fue presidente del Banco Central,
    estatizo la deuda delas empresas privadas y les otorgo un seguro
    de cambio, esto aumento la deuda externa publica en 13.000mlls de
    dolares.
    9) Ni el Directorio del Banco Central, ni el Ministerio de
    Economía, realizaron un estudio de las condiciones
    económicas y financieras internacionales que aconsejaban
    no endeudarse.
    10) Las autoridades de dichos organismos oficiales desoyeron los
    informes y las
    criticas que le elevaban sus propios cuerpos técnicos, y
    actuaron con total negligencia, impericia e indiferencia ante el
    peligroso crecimiento de la deuda.
    11) El acrecentamiento de la deuda en dicho periodo fue
    "excesivo, perjudicial y carente de justificación
    económica, financiera y administrativa.
    12) La deuda se contrajo durante un gobierno militar, sin el
    control del parlamento que exige la Constitución Nacional.
    13) Las negociaciones con el FMI, que condicionaban el
    endeudamiento, no fueron dadas a publicidad por el
    gobierno militar.
    14) A enero de 1985, las empresas privadas habían obtenido
    créditos, aprobados por el Banco Central, por 23.000mlls
    de dolares; de las 70 deudoras 25 eran bancos y financieras,
    empresas que pidieron dinero para luego prestarlo.
    15) Agentes privados gestionaron créditos en nombre del
    banco central, sin que pueda conocerse los motivos de dichas
    irregularidades.
    16) El banco central pago gastos, comisiones y honorarios mayores
    a los usuales en cada caso sin dar explicaciones.
    17) Se redactaron en ingles contratos de
    prestamos externos pactados y firmados en buenos aires.
    18) La unión de Bancos Suizos, al otorgar algunos
    créditos, influyo para que el Estado comprara a la
    "Compañía Italo Argentina de electricidad",
    que era del Ministro, Martínez de Hoz, en sociedad con
    dicho Banco. Con la de que se pago por esa empresa siete
    veces su valor.
    19) El Banco Central exceptuó al BANADE y al Banco de la
    Nación de exigir los requisitos legales para otorgar
    avales a grandes empresas que luego no pagaron sus
    créditos teniendo que hacerse cargo de la deuda el
    estado.

    3. Los Avales
    Tramposos

    Cualquier persona o empresa
    que desee obtener un aval bancario, para usarlo como
    garantía en la obtención de un crédito en
    otro banco, debe cumplir normas muy
    estrictas: demostrar que tiene solvencia, patrimonio,
    superávit, utilidades suficientes para pagar el
    crédito y que lo invertirá en un proyecto
    rentable. Además, debe ofrecer una contra garantía
    al banco que le otorga el aval.
    Sin embargo, el Banco de la Nación, el Banco de la Ciudad
    y el BANADE, con expresa aprobación del Ministerio de
    Economía y del Banco Central, otorgaron 240 avales sin
    ninguna de esas exigencias. Muchos fueron incumplidos por los
    avalados, y el estado debió cargar con el pago de los
    créditos. Además, el Ministerio de Economía
    no persiguió a los deudores para recuperar lo ya pagado ni
    hizo uso del llamado "derecho de excusión", por el cual un
    avalista puede pedir al juez que 1° le rematen los bienes al
    deudor, y si con estos no llega a cubrir la deuda, recién
    se ejecuta al avalista.
    La situación se agravaba al considerar las empresas
    tramposas, que son todas de gran envergadura: Acindar S.A.,
    Autopistas Urbanas S.A.-AUSA, Covimet S.A., Parques Interama
    S.A., Papel Prensa CHA,
    Inductor S.A., etc.
    Se otorgaron avales por 6.500mlls, de los cuales los incumplidos
    sumaron 1.405mlls, y unos 1.500mlls se otorgaron a un solo
    grupo:
    Celulosa Alto Paraná, Celulosa Puerto Piray y Papel del
    Tucumán.

    Los Mayores Responsables
    El juez menciona a ocho responsables por esta verdadera estafa
    cometida contra la Argentina.
    En primerísimo lugar, al Dr. Martínez de Hoz y a
    los otros tres Ministros de Economía del proceso militar,
    Dres. Adolfo Sigaun,
    Roberto Aleman y Jorge Wehbe.
    Los cuatro presidentes del Banco Central, Dres. Adolfo Diz,
    Edigio Lannella, Domingo Cavallo y Julio del Solar.
    La conducta del Dr.
    José Machinea, Gerente de
    Finanzas
    Publicas del Banco Central durante el gobierno militar lo inculpa
    de "incumplimiento de sus obligaciones
    de funcionario publico".
    Otros responsables importantes son: Cristian Zimmermann, Enrique
    Folcini y Francisco Soldati, y Guillermo Klein..
    En forma genérica, el fallo hace responsables
    también a todos los funcionarios jerárquicos del
    Ministerio de Economía y del Banco Central.

    4.
    Agravantes

    En el fallo se señalan circunstancias de suma
    gravedad que comprometen aun más a loa autores de este
    desastre.
    Primer Agravante:
    El gobierno solicitaba créditos que no
    necesitábamos. Cuando llegaban los dolares los depositaban
    en bancos extranjeros que le pagaban un interés
    sensiblemente menor al que nosotros debíamos pagar por los
    mismos dolares.
    Entre julio y noviembre de 1.976, el Banco Central obtuvo
    créditos por 22mlls de dolares con un interés del
    8,75%, los deposito en el Chase Manhatan Bank de New York,
    cobrando un interés del 5,60%.
    Esos dolares puestos a un interés tan bajo eran
    aprovechados por el gobierno de EE.UU. para financiar en forma
    muy barata su propio déficit fiscal. El gobierno
    anglo-norteamericano, el FMI y el Banco Mundial, nos
    "aconsejaron"a endeudarnos entre 1976 y 1983, cuando no lo
    necesitábamos.
    Se dio el caso de recibir un crédito de un banco, para
    recolocarlo en el mismo banco, ganaba la diferencia de
    intereses.
    Todo ese manejo de créditos y depósitos adquiere
    niveles tenebrosos cuando se recuerda que el Dr. Martínez
    de Hoz era Ministro de Economía y miembro del Consejo
    Asesor del Chase Manhatan Bank de New York.

    Segundo Agravante
    En todos los países, cuando se firma un contrato entre el
    Estado y una empresa
    privada extranjera, y se lo firma en el territorio de ese Estado,
    son los jueces de dicho país quienes deben intervenir si
    hay alguna diferencia. Así estaba establecido en nuestras
    leyes.
    El Dr. Martínez de Hoz, reformo esa norma y
    permitió al gobierno contratar con grupos privados
    extranjeros, dejando en manos de estos la elección del
    juez que luego intervendría en caso de pleitos. Eso se
    llama "prorroga de jurisdicción".
    Para el estado, la facultad de que lo juzguen sus propios jueces
    es irrenunciable, porque forma parte de la soberanía nacional.
    Cada uno de los bancos acreedores eligió a los tribunales
    de su propio país. De ese modo cualquier reclamo que
    deseemos hacer por nuestra deuda debemos elevarlo a los jueces de
    New York, Londres, Francfort o Tokio.
    Es, uno de los mas graves daños, no solo por la perdida de
    la soberanía que eso significa, sino por las consecuencias
    económicas.

    Tercer Agravante
    El Ministerio de Economía obligaba a las empresas publicas
    a endeudarse en dolares. Muchas de ellas no poseen bienes en el
    extranjero, otras sí.
    A los bancos les convenía que todas las empresas estatales
    se hicieran avalistas entre sí, por los créditos
    que tomara cada una de ellas. Y así lo acepto el ministro
    de Economía.
    Todas las empresas publicas avalaron en conjunto las deudas de
    cada una de ellas. De ese modo, Aerolíneas Argentinas
    cuyos aviones vuelan o volaban, a otros países, avalo las
    deudas de Obras Sanitarias, de SEGBA cuyos bienes estaban solo
    aca. Si el deudor no pagaba, el banco podía embargar los
    aviones de Aerolíneas en cualquier aeropuerto del
    mundo.

    Cuarto Agravante
    El Doctor Calcagno y su hijo examinaron los expedientes de cada
    crédito extranjero tomado entre 1976 y 1983 han
    descubierto anormalidades en los dictámenes
    jurídicos que hicieron los abogados del Banco Central y de
    la Procuración General del Tesoro en cada uno de los
    expedientes. Dichos abogados nunca objetaron una sola
    cláusula de esos créditos, a pesar de las
    irregularidades que hemos señalado.
    En cambio, los abogados de los propios bancos acreedores
    advertían que los contratos de créditos al estado
    argentino tenían cláusulas objetables por las que
    podían ser declarados nulos:

    • Se habían pactado intereses tan altos que los
      considerarían usurarios.
    • Una ley de EE.UU. establece que es nula la prorroga
      de jurisdicción que haga un Estado extranjero en favor
      de un Banco anglo-norteamericano cuando se trata de derecho
      publico.
    • Si el estado argentino dejaba de pagar una cuota de
      un crédito o de sus intereses, vencían todos los
      créditos otorgados y podían pedir la totalidad de
      la suma.
    • Los abogados extranjeros creen que las condiciones de
      los créditos son tan ruinosas para la Argentina, que los
      tribunales podrían considerar que es un caso de
      "lesión gravísima".

    La calificación moral, jurídica y politica
    que merecen los Ministros de Economía, y los presidentes
    del Banco Central, y todos sus colaboradores, se agrava cuando se
    tiene en cuenta que nunca solicitaron a los tribunales
    extranjeros la anulación de las cláusulas
    leoninas.
    La triste realidad es que nos defendían mejor los abogados
    extranjeros que los oficiales.
    b)¿Podemos pagar la deuda externa sin provocar un
    daño enorme a nuestra economía y a nuestro
    pueblo?
    Tanto los principios
    morales, como el derecho universalmente aceptado, impiden a un
    acreedor exigir el pago de sus créditos cuando ello
    provocaría un daño muy grande al deudor. La
    sensibilidad humana a dictado esa regla respetada en todo el
    mundo.
    Hoy podemos decir que los bancos acreedores se están
    cobrando la deuda con una libra de carne de nuestra gente. Es
    sabido que mueren 55 niños
    argentinos por día, los sufrimientos que soportan nuestros
    abuelos jubilados, los desocupados, los subempleados, los que
    salen a hacer changa para no dejar morir de hambre a su familia,
    etc. Hemos dicho ya que esas lacras sociales son productos
    directos e ineludibles de los 12.500mlls de dolares que debemos
    pagar de intereses anuales por la deuda externa.
    Esa tremenda factura de intereses se lleva casi todo el dinero que
    deberíamos destinar a inversiones
    productivas para desarrollar la economía y crear nuevos
    puestos de trabajo. Por otro lado, en derecho se estudia que,
    cuando un deudor es más débil que su acreedor, y
    este le exige sacrificios muy grandes para cumplir con lo
    pactado, dicho deudor esta liberado de cumplir con lo que
    prometió. A ese caso se lo denomina "lesión
    gravísima".
    Nosotros estamos sufriendo auténticamente esa
    situación.
    Moral y jurídicamente estamos eximidos de pagar.
    Hoy, a la luz de lo que
    descubrieron los doctores Calcagno sobre los dictámenes de
    los propios abogados de los bancos extranjeros, se podría
    estudiar alguna presentación ante los tribunales de New
    York y otras ciudades.

    C) Realmente, ¿debemos algo todavía?
    La deuda comenzó a crecer abrupta y aceleradamente a
    partir del 24 de marzo de 1976. En ese tiempo se
    respetaba una regla no escrita, sobre el monto de los intereses:
    debían ser uno o dos puntos mas que la inflación
    que sufría la moneda en la que se daba el préstamo.
    Un economista argentino, el Dr. Raúl Prebisch ( director
    general de la CEPAL)dijo que " el país que acepte pagar
    intereses del 3% sobre la inflación, se
    fundirá".
    En 1979 y cuando ya nos habíamos endeudado en varios miles
    de millones de dolares, EE.UU. aumento sustancialmente las
    tasas de
    interés del dólar, para frenar la
    inflación. Pagábamos entre el 6 y el 8% de
    interés. Debido a esa decisión llegamos a pagar
    hasta el 22% de interés anual. Una deuda con esa
    elevadísima tasa de
    interés se duplica por sí sola en menos de 4
    años.
    Los Dres. Calcagno han calculado que, si hubiéramos
    siempre un interés de uno o dos puntos sobre la
    inflación de EE.UU. habríamos salido de nuestra
    deuda en 1988.
    Alan García (ex presidente peruano)calcula que debido a
    esa suba de los intereses estadounidenses:

    • Latinoamérica debía, en 1979,
      191.000mlls.
    • Desde ese año han pagado intereses por
      1.165.000mlls de dolares.
    • A pesar de lo cual en 1999 debía aun
      750000mlls. Esas cifras hablan por sí solas.

    Los argentinos hemos pagado nuestra deuda entre dos y
    tres veces, y todavía debemos 200.000mlls

    D)Los acreedores, ¿son inocentes o también
    ellos tienen su culpa en este drama nuestro?

    • Llama la atención a permisividad de los organismos
      financieros, y la actitud
      concordante de la misma banca
      extranjera que hoy reclama a la republica Argentina el pago de
      sus créditos.
    • El FMI es el principal organismo controlador del
      sistema
      financiero internacional.
    • Se debe determinar la correspondiente y eventual
      culpa de los organismos financieros internacionales y de la
      banca acreedora porque durante el periodo examinado
      concurrieron a nuestro país muchas misiones del FMI para
      analizar la economía
      Argentina.
    • Concurrieron también misiones del Banco
      Mundial con el mismo propósito y para el financiamiento de los proyectos.
    • Los bancos gran interés en colocar sus fondos
      en los países en desarrollo, sin interesarle ni el
      destino que se les daría ni la capacidad de pago del
      deudor.
    • Los bancos acreedores también actuaron con
      imprudencia, y dieron créditos movidos por el
      afán desmedido de colocar los fondos provenientes del
      auge de la explotación petrolera.

    Tal como dice en el fallo los bancos extranjeros
    deseaban a toda costa colocar de alguna manera los fondos que
    depositaban los países petroleros. En esas circunstancias,
    convencieron a Martínez de Hoz y su equipo que era un gran
    negocio pedir un préstamo al 8,75% de interés, y
    colocar esos mismos dolares en el banco prestador al 5,60%…
    Cuando en 1979 EE.UU. necesito subir la tasa de interés
    por problemas
    internos, el pato de la boda fuimos nosotros.
    Ahora habrá que actuar en decisión y con habilidad
    a la vez. El tema no es sencillo, pero tampoco insoluble.
    Lo primero que debemos entender es que la solución es de
    tipo político y sin él suficiente poder
    nacional, es inútil pretender una salida
    airosa.

     

     

     

    Autor:

    E. Nahuel Pérez

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