- Introducción
- Pobreza energética y pobreza de
combustibles - Flujo
de energía en las ciudades - Petropolis vs ecopolis
- Acciones globales en
ciudades - Corolario
- Anexo
I: huella ecológica para ciudades
INTRODUCCION
Desde que el hombre está sobre la faz de la
tierra, su condición de gregario lo ha llevado a vivir en
asentamientos o comunidades, y cuya evolución hoy se les
conoce como centros poblados, siendo la máxima
expresión de estos las Metrópolis.
Por otra parte, la calidad de vida de los habitantes de
dichos centros ciudadanos depende de factores sociales y
económicos y también de las condiciones ambientales
y físico-espaciales. El trazado de las ciudades y su
estética, las pautas en el uso de la tierra, la densidad
de la población y de la edificación, la existencia
de los equipamientos básicos y un acceso fácil a
los servicios públicos y al resto de actividades propias
de los sistemas urbanos tienen una importancia capital para la
habitabilidad de los asentamientos urbanos.
La ciudad es, en definitiva, una forma particular del
asentamiento poblacional que una determinada sociedad realiza en
la ocupación de su territorio, respondiendo a objetivos
básicos de explotación de los recursos necesarios
para su propia subsistencia.Este hecho reconocido en la historia
y la geografía urbana, implica una estrategia de
ocupación la cual genera el denominado proceso de
urbanización, término que designa tanto la
transformación del medio natural o de uso rural en un
nuevo producto, el medio construido -que conforma en el tiempo lo
que llamamos ciudad-, como una organización territorial
compuesta por numerosos centros urbanos distribuidos de una
manera particular en el espacio, con una función
específica respecto de la explotación del medio y
un sistema de interconexiones que asegura su funcionamiento de
conjunto.
El paso de una sociedad de producción a una
sociedad de consumo, se ha materializado en el modelo expansivo
de desarrollo urbano denominado "metropolitanización". Las
metrópolis, dada su condición de "islas de calor y
contaminación" contribuyen crecientemente a la crisis
ambiental a nivel planetario, ya que por su carácter a la
vez extensivo y concentrado, a la vez colonizador y congestivo,
tanto en actividades como en población, contribuyen a
fenómenos como el despilfarro energético y el
cambio climático (efecto invernadero, agotamiento de
recursos energéticos, lluvias ácidas,
disminución de la capa de ozono, etc.). Es más, a
la de por sí desmesurada detracción de recursos
naturales (consumo de suelo, energía, agua y materias
primas) se añaden los graves efectos derivados del retorno
no resuelto de éstos a la naturaleza, en forma de desechos
y contaminación.
La grafica a continuación muestra la
evolución de la población mundial en lo atinente a
su urbanismo. Es así que para 1960, el 33.4 % del total de
la población mundial (3035 millones de personas)
vivía en zonas urbanas. Para el 2013, este porcentaje es
de 52.8 % de un total de 7125 millones de personas. Para el
año 2050, se estima que de los 9300 millones de personas
que poblaran la tierra, el 67.7 % vivirán en centros
poblados urbanizados.
Sin embargo, no deja de tener importancia que para el
2050 existirán 3000 millones de personas que
vivirán en zonas rurales, con todas las limitaciones que
esto implica sobre todo lo concerniente al agua potable, el
acceso a la electricidad y servicios energéticos
modernos.
POBREZA
ENERGETICA Y POBREZA DE COMBUSTIBLES
Según la FAO, hoy, la mitad de la
población mundial depende de fuentes de energía de
baja calidad basadas en la biomasa, como madera o los residuos de
cultivos o excretas de ganado, para satisfacer sus necesidades
domésticas, (fundamentalmente cocinar y calentar el
hogar), y se señala que reducir la "pobreza
energética" ha sido reconocido como el Objetivo "faltante"
de Desarrollo del Milenio. Estos desarrollos ponen de manifiesto
que los objetivos de reducción de emisiones de gases de
efecto invernadero necesitan alcanzarse mejorando al mismo tiempo
la cantidad y calidad de servicios de la energía que los
hogares, sobre todo los más pobres, reciben en la
actualidad.
Vale la pena aclarar dos conceptos que muchas veces se
confunden o se usan indistintamente, y estos son:
Pobreza Energética: Es la falta de acceso
a servicios energéticos modernos, y está referida
básicamente a las personas que viven en zonas rurales.
Estos servicios se refieren al acceso de los hogares a las
instalaciones de electricidad y de cocina limpias (por ejemplo,
los combustibles y las cocinas que no causan la
contaminación del aire en las casas), los cuales deben ser
fiables, eficaces, asequibles y respetuosos del ambiente Los
servicios de energía modernos son cruciales para el
bienestar humano y el desarrollo económico de un
país; y sin embargo, a nivel mundial más de 1.3
millardos de personas carecen de acceso a la electricidad y 2.6
millardos de personas carecen de instalaciones de cocina
limpias.
Pobreza de Combustible: Referido
específicamente a personas que viven en zonas urbanas
(ciudades), y es la ausencia adecuada de la accesibilidad de la
energía. Las causas que generan esta precariedad
energética son diversas: bajos ingresos del hogar, calidad
insuficiente de la vivienda, precios elevados de la
energía, precios elevados de la vivienda, etc.
.
La grafica anterior muestra para el 2012, el nivel de
pobreza energética en ciertas regiones del mundo.
Obsérvese que dicha pobreza está presente en
regiones o países en vías de desarrollo.
En consecuencia, la ausencia adecuada de la
accesibilidad de la energía desde el punto de vista
familiar (pobreza de combustible) o la colectiva regional
(pobreza energética) es un indicador clave para la
elaboración de políticas públicas que
conlleven al desarrollo sustentable de la población. De
allí que se haya considerado como "un gazapo" de los
objetivos de desarrollo del milenio[1]
Por otra parte, el cambio cualitativo que supone la
"cultura urbana" en la relación con los recursos naturales
y el entorno, conllevan unos estilos de vida – dirigidos por una
dinámica del mercado que es incapaz de reconocer la
profundidad de los efectos colaterales- habituados a traducirse
en nuevos consumos de suelo urbano y en el incremento constante
de recursos energéticos no renovables hasta unos niveles
que no son tolerables por el ecosistema a largo plazo.
Así, el incremento exponencial de los problemas
ambientales generados por las actividades urbanas, presentan unas
tasas de crecimiento muy superiores a la de las poblaciones que
las generan.
Debido a que cada ciudad tiene su propia
dinámica, ha sido imposible su comparación en
cuanto a la calidad del hábitat integral que proporciona.
Sin embargo, el Banco Mundial ha desarrollado un Fondo Mundial de
Indicadores Citadinos que permiten realizar "Benchmarking" entre
las ciudades. Los resultados globales de este proyecto
serán presentados en el 2015 en Milán, en la EXPO
sobre Desarrollo Sostenible.
(http://www.cityindicators.org/).
Paralelamente, la Organización de
Estándares Mundiales (ISO), ha desarrollado el ISO 37120,
el cual es aplicable a cualquier ciudad, municipio o gobierno
local que desee conocer su desempeño de manera comparable
y verificable, con independencia del tamaño y la
ubicación o nivel de desarrollo. Los tópicos
considerados para el análisis son los mostrados en la
grafica de Índices de Calidad de Servicios y Calidad de
Vida.
FLUJO DE ENERGIA
EN LAS CIUDADES
Ya mencionamos que las metrópolis, dadas su
condición de "islas de calor y contaminación"
contribuyen crecientemente a la crisis ambiental a nivel
planetario. Algo que da que pensar ya que las urbes ocupan
sólo el 0.4 % del territorio del planeta, consumen el 75 %
de la energía mundial y son consideradas esenciales para
reducir las emisiones de CO2. Un aspecto a tener en cuenta en la
lucha contra el cambio climático, ya que las ciudades son
responsables de la mayor parte de las emisiones, mediante la
actividad industrial, el consumo energético desmedido y el
transporte.
La grafica a continuación, muestra las 13
primeras Mega ciudades. El mayor crecimiento neto ocurre en la
ciudad de Delhi con 10.2 millones de personas en 14 años.
A nivel de país, La India tiene 3 mega ciudades (Delhi,
Bombay y Calcuta); China con 2 (Shanghái y Beijing). Por
otra parte, para el 2011 existían 23 ciudades con
población mayor o igual a 10 millones de
habitantes.
El total de habitantes para estas ciudades era de 360
millones. Para el 2025, se estima que las ciudades llegaran a 37,
con una población total en ellas de 630
millones.
El mayor uso de energía por las ciudades es la
electricidad, para lo cual se utilizan las fuentes de
energías primarias (gas, carbón, petróleo,
nuclear, hidroelectricidad y renovables) que van a centros de
generación ya bien sean plantas térmicas o las
llamadas granjas eólicas o solares, las cuales,
generalmente, están alejadas de las ciudades. De
allí que, a nivel mundial, el 50 % de la energía
que se utiliza es para generar electricidad, con tendencia de
incrementar este porcentaje en las próximas
décadas. Una ciudad sin un buen servicio eléctrico
es una "ciudad sin movimiento". Hoy no es posible concebir una
actividad humana, sin que esté presente la
electricidad.
El segundo sector de mayor consumo de energía en
las ciudades es el transporte vehicular (particular, colectivo y
carga). Esta energía está representada por la
gasolina y el diesel. Es tal el uso del vehículo que las
grandes ciudades tienen una característica común
como es el tráfico lento[2]en sus
autopistas y avenidas, casi todo el día.
Para Venezuela, se estima que por este concepto se
consumen ineficientemente 21.2 miles de barriles diarios de
gasolina. Cabe acotar que un kilometro de autopista de primera (3
canales + hombrillo en ambos sentidos) tiene un costo de 4.5
millones de dólares. Ese volumen de gasolina a precio de
oportunidad (140 $/B) permitiría construir anualmente 240
kilómetros de autopistas.
El tercer sector de consumo energético en el
área urbana viene dado por los sectores productivos
(industria) y de servicios (comercios y servicios educativos, de
salud y telecomunicaciones). Los energéticos utilizados
son la electricidad, el diesel, fuel oíl, GLP,
carbón).
El cuarto (y el ultimo) sector de consumo
energético es el residencial. Su mayor consumo es la
electricidad. Otros combustibles como el gas natural, el GLP y el
kerosén son utilizados para cocinar.
Aunque los valores no son por ciudad, la grafica a
continuación muestra el consumo de energía en el
mercado interno venezolano para el año 2012. El consumo
alcanzo los 1322 miles de barriles diarios de petróleo
equivalente (kBDPE). De estos casi el 50 % fueron utilizados para
generar electricidad. El consumo neto fue de 1110 kBDPE, con una
pérdida de 16 % de eficiencia a nivel de conversión
de la energía.
PETROPOLIS Vs
ECOPOLIS
La revolución industrial provocó una
explosión de crecimiento urbano (Petrópolis) que
continúa hasta nuestros días. La tecnología
de las máquinas de vapor permitió la
concentración sin precedentes de las actividades
industriales en los centros urbanos.
Estas Petrópolis cortan el cordón
umbilical entre ellas y sus zonas de influencia local para
convertirse en centros económicos y de transporte de
carácter mundial. Este proceso ha socavado las
economías locales, ya que los nuevos modos de transporte
han hecho cada vez más fácil el suministro de
alimentos, materias primas y productos fabricados en sitios
distantes a las Petrópolis, dando lugar al fenómeno
de la globalización.
Las Petrópolis no son asentamientos urbanos sino
de movilización, aspecto intrínseco que requiere
del uso intensivo del automóvil para el cual se han creado
espacios para su circulación y estacionamiento. Las
funciones claves de estas ciudades – producción,
consumo y transporte – son impulsadas por inyecciones masivas de
petróleo y otros combustibles fósiles. Pero hay
cada vez más creciente evidencias de que su dependencia
resulta ecológica, económica y
geopolíticamente insostenible, sobre todo porque los
suministros de combustibles fósiles son, en definitiva,
finitos.
En tal sentido, se debe afrontar el hecho de que las
ciudades son sistemas dependientes. Esta dependencia de insumos
externos para su sustento es probable que se convierta cada vez
más precaria. El proceso de entropicación –
de combinar los recursos en productos y la producción de
desechos mucho más rápido de lo que pueden volver a
convertirse en recursos útiles – tiene que ser objeto de
medidas deliberadas de políticas públicas y de
gestión. El planeta no puede hacer frente a la
acumulación cada vez mayor de desechos y la
degradación de los recursos naturales en nuestras
ciudades, sin medidas adecuadas para reponer la biosfera global y
para reducir nuestros impactos sobre el ambiente.
Un cambio rápido hacia la alimentación de
nuestras ciudades con las energías renovables es un punto
crucial de partida importante para desistir en la
urbanización tipo Petrópolis, por lo tanto se
requiere que las tecnologías y las políticas
públicas estén en armonía de tal manera de
alcanzar el objetivo de sustitución de los combustibles
fósiles. Esto requiere el diseño de tarifas,
incentivos a los productores y usuarios de energías
renovables, mercados abiertos sobre todo en el área
eléctrica. Este conjunto de medidas y acciones son las que
nos llevaran a las nuevas ciudades:
Ecópolis.
Una de las tareas principales en el siglo 21 es buscar
formas para que las ciudades funcionen de manera diferente de
como lo hacen hoy en día, sin aumentar los costos y
garantizando la continuidad financiera de estas. La nueva tarea
que enfrentan los urbanistas, ingenieros civiles y los
administradores, en estrecha cooperación con el
público en general, es la creación de estructuras
espaciales que satisfagan las necesidades de la gente y de la
ciudad al mismo tiempo, y que se garantice su capacidad de
recuperación ecológica y
económica.
Hay que proporcionar un hábitat seguro que
permita movernos en nuestras ciudades de manera eficiente. Esto
conlleva a ofrecer espacios agradables para el trabajo, la
recreación y la interacción humana. Asimismo, en
necesario que los entornos urbanos estén libres de
contaminación y acumulación de residuos. Pero
también es necesario poder familiarizarse con los impactos
de las ciudades más allá de sus
fronteras.
Este es el concepto de "ECOPOLIS", ciudades que pueden
regenerarse desde el punto de vista ecológico y
económico sin comprometer el hábitat y la calidad
de vida de sus habitantes.
Las políticas públicas para crear ciudades
regenerativas deben consagrar un urbanismo consonó con la
protección del ambiente y un uso eficiente de los recursos
que se utilizan en la conformación de la calidad de vida
de sus habitantes. Algunas ideas y conceptos para alcanzar el
status de este tipo de ciudades se mencionan a
continuación:
Elaborar políticas nacionales que definan el
marco para el desarrollo urbano regenerativoEstablecer a nivel local como principio de
organización urbana el concepto de
"regeneración"Reducir los desechos o residuos, reciclar los
materiales utilizados y reducir costos a todo
nivelFacilitar el desarrollo de nuevos negocios y
trabajos relacionados con la protección del ambiente y
su restauración, si es el casoInvertir en conocimientos técnicos,
empresariales y manos de obra asociados al concepto de
"Ecópolis"Usar como política y principio operativo la
"sociedad de 2000 vatios"Modificar y adecuar códigos y normas de
construcción de tal manera de hacer los inmuebles
mas eficientes energéticamenteEstablecer como política el uso intensivo de
la energía solar en los diferentes inmuebles que
conforman el urbanismo citadinoEstablecer el marco legal que prioritice un sistema
de energías renovables e incentivar en este la
actuación del "prosumer"Soportar el desarrollo de la industria de las
energías renovablesBuscar el balance del uso del agua entre los
ciudadanos, la agroindustria y el sector comercial e
industrial de tal manera que beneficie a todosIncentivar el uso y almacenamiento del agua de
lluviaEstablecer políticas para la
regeneración del agua utilizadaDesarrollar nuevas tecnologías y empresas
para el procesamiento de desechos orgánicosCapturar los nutrientes existentes en las aguas
servidasImplementar la gestión económica de la
actividad de reciclajeUtilizar la política de "Cero Residuos" para
crear nuevas empresas y fuentes de trabajoIncentivar la producción de alimentos en
zonas aledañas a las ciudadesEstablecer los asentamientos que soporten la
producción local de alimentosUtilizar abonos derivados de los residuos
orgánicos de las ciudadesCrear zonas peatonales
Establecer una red vial para bicicletas que
atraviese a la ciudadIncentivar el uso del transporte público, el
cual debe proporcionar flexibilidad y frecuenciaEstimular el desarrollo y uso de vehículos
que no utilicen combustibles fósilesIncentivar el concepto de "compartir el
automóvil"Fomentar la plantación de árboles
alrededor de la ciudad para el control de la biodiversidad y
de la erosión de los suelosEstablecer como norte de la siembra de
árboles, la captura del carbonoDesarrollar iniciativas para ayudar a establecer
programas de reforestaciónIncentivar la creación de "empresas verdes"
para la contratación por parte del gobiernoFomentar el uso eficiente de los recursos en todas
las actividades productivasEstablecer el marco regulatorio ambiental en todos
los nuevos negocios y empleosUtilizar las redes globales y la experiencia local
en el desarrollo de ciudades regenerativasAsegurar en el sistema educativo el concepto de
"Ecópolis"Asegurar e incentivar la participación
ciudadana en el diseño, desarrollo y operación
de las ciudades regenerativas
ACCIONES GLOBALES
EN CIUDADES
Cada día se establecen acciones globales que
ayuden a la regeneración de las ciudades existentes y que
contribuyan a normar la construcción y desarrollo de las
nuevas, de tal manera de optimizar el uso de los recursos que se
disponen (huella ecológica) sin menoscabo de la calidad de
vida de las personas que las habitan.
Algunas soluciones técnicas
propuestas son:
Transporte:
Transporte masivo: Bus rápido
(tipo Metrobus), metro, tranvía.Optimización de rutas
urbanasCoches híbridos.
Vehículos
eléctricos.Vías de alta velocidad. Trenes
rapidosIncentivo uso de bicicletas
Construcción:
Aislamiento térmico por
norma.Materiales mas
ecológicosElectrodomésticos eficientes
certificados.Cambio de lámparas
incandescentes a lámparas LED.Urbanizaciones e Inmuebles
verdesOptimización ubicación
espacial (oficinas, viviendas, colegios, etc.)Vías peatonales
Industria y comercio
Redes Eléctricas
InteligentesLegislación para el
PROSUMERAislantes térmicos.
Distritos de Calor
Calefacción y
refrigeración de alto rendimiento y bajo
consumo.Energía solar-térmica
para calentar agua.
Mobiliario urbano
Conservación del agua (mejorar
las redes de agua potable, campañas de
sensibilización para reducir el consumo).Combinación de energías
en la generación eléctrica.Fomentar la generación de
energía fotovoltaica en la iluminación
pública.Energía eólica (contexto
urbano)La incineración de residuos y
biomasa para la producción de electricidad y
calor.Captación de metano en
vertederos y en las plantas de tratamiento de aguas
residuales, la planta biogás para producir
electricidad y calor.Utilizar estas tecnologías para
proporcionar los servicios urbanos básicos en los
asentamientos más pobres e ilegales.
COROLARIO
Como corolario de lo desarrollado sobre el
tema: Ciudad y Energía podemos indicar lo
siguiente:
La tendencia mundial es que la población se
dirija a los centros urbanos, creando más Mega
ciudadesLa calidad de vida de los habitantes de dichos
centros ciudadanos depende de factores sociales y
económicos y también de las condiciones
ambientales y físico-espaciales.Las metrópolis, dadas su condición de
"islas de calor y contaminación" contribuyen
crecientemente a la crisis ambiental a nivel planetario, de
allí su importancia para mitigar el efecto
invernadero.Para el 2050, el 32 % de la población mundial
vivirá en pobreza energéticaEl ISO 37120 permitirá el "Benchmarking"
entre los centros poblados, independientemente de su
tamaño, ubicación o desarrollo
económico.En promedio, el 38 % de la energía que
consumen las Metrópolis es en forma de electricidad,
con tendencia a aumentarEl reto del siglo XXI es convertir las ciudades
"PETROPOLIS" en "ECOPOLIS"
Anexo I: Huella
Ecológica para Ciudades
Huella Ecológica para Ciudades
¿Por qué rastreamos el consumo de los
recursos y del capital natural?
Los gobiernos locales tienen éxito al ayudar a
que todos sus residentes vivan plenamente, hoy y en el futuro. La
disponibilidad del capital natural, la capacidad de la naturaleza
para renovar y proporcionar recursos y servicios, no es el
único ingrediente en esta visión. Sin embargo, sin
un capital natural – sin alimentos saludables, energía
para movilidad y calefacción, fibra para papel, ropa y
vivienda, aire fresco y agua potable – esta visión es
imposible. Así, el abastecimiento de bienestar humano
actual y futuro depende de proteger el capital natural contra
sobre-abuso sistemático; si no, la naturaleza no
podrá asegurar estos servicios básicos para la
sociedad. *
¿Qué ganan los gobiernos
locales?
Las cuentas de la Huella Ecológica permiten que
los gobiernos vean la demanda sobre el capital natural de una
ciudad o región, y que comparen esta demanda con la
cantidad del capital natural realmente disponible. Las cuentas
también dan a gobiernos la capacidad de contestar a
preguntas más específicas sobre la
distribución de estas demandas dentro de su
economía. Es decir les da la información sobre el
metabolismo del recurso.
Por ejemplo, las cuentas de la huella revelan la demanda
ecológica asociada del consumo residencial, la
producción de productos del valor añadido, y la
generación de productos para exportación.
También ayudan a determinar la capacidad ecológica
incorporada a los productos de importación de las cuales
depende una región. Esto puede mostrar los apremios o las
responsabilidades futuras de la región en
comparación con otras regiones del mundo, e identifica
oportunidades para proteger o mejorar la calidad de vida local.
Las cuentas de la huella ayudan a los gobiernos a ser más
específicos sobre el sustento de varias maneras. Las
cuentas proporcionan un lenguaje común y una
metodología bien definida que puede ser utilizado para
apoyar al entrenamiento del personal y comunicar sobre asuntos de
sustento con otros niveles de gobierno o con el
público.
Las cuentas de la huella agregan valor a los conjuntos
de datos existentes sobre la producción, comercio y
rendimiento ambiental proporcionando una manera comprensiva de
interpretarlos. Por ejemplo, las cuentas pueden ayudar a dirigir
los "sistemas de gestión ambientales" ofreciendo un marco
para coleccionar y organizar datos, proponiendo metas y
rastreando su progreso. Las cuentas pueden también servir
como requisitos para reportar información ambiental, e
informar en la toma de decisiones estratégicas para el
desarrollo económico regional.
El esfuerzo global para el sustento se ganará o
perderá en las ciudades del mundo, en donde el
diseño urbano puede influenciar el 70 por ciento de la
huella ecológica de la gente. Las ciudades de Alta –
Huella pueden reducir esta demanda en la naturaleza grandemente
con tecnología existente. Muchos de estos ahorros
también reducen costos y hacen ciudades más
habitables. Puesto que la infraestructura urbana es duradera e
influye las necesidades sobre los recursos por décadas a
venir, las decisiones de la infraestructura crean o destruyen el
futuro de una ciudad. ¿Qué ciudades están
construyendo futuras trampas para los recursos, cuáles
están construyendo eficientes oportunidades para los
recursos y estilos de vida más competitivos?
Sin la contabilidad de recursos regional, los gobiernos
pueden pasar por alto fácilmente o no darse cuenta la
importancia de estas clases de oportunidades y de las amenazas.
La huella ecológica, un sistema de contable de recursos
comprensivo y basado en la ciencia que compara el uso por la
gente de la naturaleza con la capacidad de la naturaleza de
regenerarse, ayuda a eliminar este punto ciego.
*Text from this page was written by Global Footprint
Network staff and much of it has since been published. Citation:
Wackernagel et al. 2006. The Ecological Footprint of cities and
regions; Comparing resource availability with resource demand.
Environment and Urbanization 18(1):
103–112.
Autor:
Nelson Hernández
Julio 2014
[1] Que por cierto en el 2015 los
países deben presentar los resultados alcanzados en
dichos objetivos: Erradicar la pobreza extrema y el hambre;
Lograr la enseñanza primaria universal; Promover la
igualdad de género y la autonomía de la mujer;
Reducir la mortalidad infantil; Mejorar la salud materna;
Combatir SIDA, paludismo y otras enfermedades; Garantizar la
sostenibilidad ambiental y Fomentar una asociación
mundial para el desarrollo.
[2] La prueba FTP-75, indica que un
vehículo parado con el motor encendido consume en
promedio 2.46 litros por hora, equivalente a 0.041 litros por
minuto.