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Juicios de Acción Moral



Partes: 1, 2

  1. Resumen
  2. ¿De
    dónde surge la ética?
  3. La racionalidad
    cómo condición necesaria para la moralidad
    ubica al filósofo cómo el más apropiado
    para llevar una vida moral, dada su actividad y
    participación con el conocimiento
  4. La teoría
    moral no es realizada exclusivamente por el filósofo o
    teórico moralista
  5. Acción,
    causa, decisión, elocución
  6. La
    comprensión de las razones es posible mediante la
    explicación que da el agente
  7. No tiene sentido
    emitir juicios morales sobre acciones que sólo pueden
    realizarse de una forma
  8. Un evento que me
    involucra es una acción mía sólo si yo
    tengo la Intención de que ocurra y si mi
    Intención causa que ocurra
  9. Racionalidad
    practico-moral
  10. El razonamiento
    práctico más que mostrarnos la verdad nos
    muestra lo que más nos conviene
    hacer
  11. ¿Cómo podemos evaluar una
    acción ético-moral partiendo de la
    intencionalidad y del razonamiento
    práctico?
  12. Bibliografía

Resumen

La teorización ético-moral que hicieron
los griegos, la ética implantada por las religiones, el
utilitarismo, el relativismo ético, la ética
deontológica y demás, siempre ha tenido una
característica intrínseca a su naturaleza. A saber,
es que siempre pretende lo más conveniente para la
conducta humana y sus consecuencias en el medio
social.

La acción es un factor determinante para la
valoración moral. Un intento para producir un efecto en el
mundo por medio de una acción se refiere a la
dirección de la voluntad hacia un objeto en el mundo
externo, así, podemos convertir en acciones nuestros
estados mentales.

Palabras clave: Moral, Ética, Acción,
Intencionalidad, Razonamiento práctico

Abstract

The morality established by the old philosophy, the morals
impost by the religions, the ethics deontology and rest of the
theories ethics always had have a nature characteristic. Always
seek to the best for human behavior and its consistency on the
society.

The Action is a factor mostly for the bonds morals. At attempt
to produce at impact on the world by means of action that way to
mostly will trend at object on the world. We can turn in actions
ours welfare state.

Key word: Morals, ethic, Action, Intentionality, practice
argument

"La moral en su sentido muy amplio de
moral es la moral del bien que cada uno prefiere"
Ernst
Tugendhat

"Los juicios morales remiten a normas sociales, normas que
formulan una pretensión de fundamentación"

Ernst Tugendhat

A menudo nos encontramos ante la necesidad de decidir
qué debemos hacer en determinada situación,
cómo resolver un conflicto o cómo se quiere vivir.
Constantemente juzgamos las acciones o decisiones tanto de otras
personas como las nuestras, rechazamos o aprobamos acciones
pronunciando juicios de valor moral acerca de lo que es correcto
o lo incorrecto. De este modo, se están estableciendo
juicios morales cuando, por ejemplo, se dice: "Ese
político es corrupto", "Ese hombre es impresentable", "Su
presencia es loable", etc. La ética tiene como objeto de
estudio la acción humana, analiza y evalúa los
juicios de las acciones humanas que describen la incidencia de
algún comportamiento con los individuos o el mundo. En lo
que sigue plantearemos la posibilidad de evaluar un juicio moral
partiendo de la acción intencional, siendo ésta un
rasgo que define las acciones que pueden ser evaluadas
moralmente.

¿De
dónde surge la ética?

¿Es una convención humana o pertenece a
nuestra naturaleza? además ¿por qué un
sujeto ha de someterse a cumplir una serie de normas que a menudo
se oponen a sus propios intereses? estos interrogantes se
responden dando una mirada al desarrollo que ésta ha
tenido, lo cual nos permitirá ver el factor común
que predomina en todos los tipos de moralidad aún con las
diferencias culturales, sociales e incluso históricas, a
saber, que ésta siempre trata de hallar lo que usualmente
denominamos, el bien.

El hombre desde los estados más primitivos de
civilización ha hecho uso de cierta normatividad
ético-moral y a pesar de la diversidad de ésta, se
conserva ciertas características de principios
éticos universales atados a la idea de bien. Esta
moralidad primitiva data al rededor del año 4000 A.C en la
cultura mesopotámica, siendo una de las normatividades
éticas más conocidas el código hammurabi
de Babilonia, "Asegurando la justicia mediante la
eliminación del mal y de los malvados a fin de que los
fuertes no pudiesen oprimir a los
débiles"[1]
en el antiguo Egipto la
ética era de carácter netamente práctico y
se asociaba al correcto obrar "en el núcleo de la
ética egipcia se encontraba el término ma'at, que
significaba justicia, equilibrio, la norma, orden, verdad, la
acción recta y
correcta"[2].

El origen de la moral se ha explicado muchas veces de la
misma forma como se ha concebido el origen del hombre y del
mundo, por medio de multiplicidad de mitos. Los mitos tiene una
participación en la mayoría de religiones y
éstas a su vez tienen relación con al menos un
mito. Es difícil trazar una línea divisoria entre
ética y religión pues "la ética parece
ser parte esencial de la religión"[3].

Existen las creencias ético-religiosas cómo la
Hebrea, hindú, Budista, Confusionista, Judía,
Islámica y Cristiana.

Así, la ética hebrea surgió por
medio de una revelación divina a un sin número de
profetas, como fueron David, Moisés, Abraham etc. La
obediencia de las leyes divinas reportan beneficios y la
desobediencia de estas normas implican un castigo "Conoce que
Dios guarda misericordia a los que le aman y cumplen sus
mandamientos (…) y le paga al que lo aborrece,
destruyéndolo"[4].
Esta ética se
planteó cómo un medio para llegar al éxito o
al fracaso. La moralidad hebrea era un conjunto de normas para la
conducta provenientes de una revelación divina. Por otra
parte, la ética propuesta por el judaísmo se enfoca
en el perfeccionamiento de la vida práctica "gran
parte de la Halakhah( va mas allá de lo que hoy
denominaríamos ley religiosa o ritual, abarca tanto la ley
civil como la penal y moral"
[5] su forma de
moralidad tiene base en la voluntad de Dios, la idea es imitar su
conducta en la medida de lo posible para ser tan justo y sabio
como él; ello no difiere mucho de lo planteado por el
Cristianismo que afirma "haz lo que es justo y bueno a los
ojos de Dios"[6]
ambas religiones poseen un
fuerte carácter ético. El Cristianismo
Católico ha denominado al estudio de la ética
religiosa, teología moral, la cual consiste en dar a
conocer cómo decidir cuál es la acción recta
y sobre qué motivos se debe guiar esta acción;
entonces, para con las malas acciones se debe aprender a soportar
el castigo o las consecuencias de ésta. Sin embargo, la
ética planteada por la tradición judeo-cristiana
presenta un inconveniente, es que a pesar de dar una lista de
normas para la buena conducta, ésta no da soluciones para
todas las situaciones o conflictos morales que una persona se
enfrenta a lo largo de su vida "no hay razones para pensar
que Dios da órdenes que cubran todas las situaciones
morales"[7]
Seguidamente, el Islam presenta a
un Dios con unas características muy similares a las de la
tradición Hebrea y Judeo-Cristiana

En su etapa inicial el Islam estuvo animado por una
profunda inquietud racional y moral de reforma social, y esta
intencionalidad moral se concebía de manera que alentaba
un profundo compromiso con el razonamiento y el discurso
racional[8]

El islam al igual que las religiones de origen Hebreo
poseen un listado de normas éticas de obligatorio
cumplimiento y la transgresión de éstas implican un
castigo, la diferencia de ésta con las otras religiones
consiste en que en el islamismo la transgresión a la norma
constituye tanto un pecado cómo un delito. "Para los
Juristas musulmanes, tanto la ley como la ética versan en
última instancia sobre obligaciones morales, consideradas
el foco central del mensaje
islámico"[9]
el cumplimiento de estas
obligaciones morales tienen como fin último el logro de la
felicidad.

De esta manera se puede evidenciar, que las religiones
han procurado establecer unas pautas que conlleven a un bienestar
en la convivencia social, basados en una idea de bien de
origen divino evaluando moralmente las acciones basados
en una autoridad externa denominada Dios, que sucintamente no es
muy racional.

La racionalidad
cómo condición necesaria para la moralidad ubica al
filósofo cómo el más apropiado para llevar
una vida moral, dada su actividad y participación con el
conocimiento

La evaluación moral de las acciones depende del
uso autónomo y razonado de las capacidades cognitivas del
agente. La racionalidad aplicada a las formas de comportamiento
ético tuvo lugar en la antigua Grecia con Sócrates
y posteriormente con sus seguidores Platón y
Aristóteles. A pesar de que la concepción de la
moralidad en el mundo heleno difiere mucho de la que se tiene en
la modernidad, la ética antigua es de gran relevancia
histórica para estudios que giren en torno a la moral,
tanto así que es imposible hablar de ética y no
remitirse en algún momento a la concepción griega
de ésta. La ética griega tiene cómo base dos
corrientes orientadoras, la Arete y la
Eudaimonía. La Arete era entendida
cómo el habito o disposición del alma para obrar de
conformidad con la ley moral, ésta es lo que completa y
perfecciona la buena disposición de una cosa, es un bien
propio e intransferible, que se tornó en un
carácter especifico del hombre, "para Platón y
Aristóteles, el uso de la razón es una
condición necesaria, no suficiente, para vivir la vida de
la arete práctica"[10]
por otra parte,
la Eudaimonía se refería a la conducta del
hombre guiada por el deseo de felicidad que no era otra cosa que
el sumo bien. El interrogante del que partían los griegos
era, ¿cómo un hombre puede llevar una vida feliz?
así, el objeto de investigación en los griegos no
era exactamente la conducta del hombre sino su naturaleza.
"(…) la naturaleza de la vida buena para el hombre; y como
puede tenerse diferentes nociones acerca de la naturaleza humana,
también pueden tenerse diferentes concepciones sobre lo
que debe ser vivir una vida humana buena"

[11]los intereses de la ética
filosófica versan sobre este tipo de intereses, sobre todo
la filosofía platónica que posee una tajante
inclinación a la reflexión ética y a la
naturaleza del hombre y su destino. No obstante, puesto que todos
los hombres tienden al bien por naturaleza, éste se lleva
a cabo de diferente manera y por diversos medios, siendo el
más apropiado el de la Arete. Para Platón
el comportamiento moral de un individuo afecta a la comunidad y
es de allí donde entra a considerarse la relación
entre la ética y a la política cómo dos
cosas ligadas recíprocamente.

El legado de los filósofos griegos y el
cristianismo forjo la ética del Medioevo, varios siglos
más adelante en la modernidad la concepción de la
moralidad hace un giro a partir de Descartes y Montaigne, se deja
a un lado a Dios cómo autoridad suprema de donde procede
la norma moral y se da un lugar más importante a la
racionalidad humana, se pasa a concebir la moralidad como una
normatividad impuesta por el hombre para el hombre determinada
por la libertad y la autonomía. La concepción de la
ética en la modernidad cambió, cuando surgieron
dificultades para llevar a la práctica las normas
éticas promulgadas por la religión, pues
ésta está constituida con base en creencias de
carácter individual y en una sociedad donde no todos
poseen las mismas creencias religiosas es conflictivo dar una
orientación práctica a normas éticas de
religiones preestablecidas. Así, se hace un
tránsito de Dios al hombre cómo creador de las
normas que rigen y posibilitan la convivencia en una sociedad. La
autonomía pasó a ser uno de los principios sobre
los que reposa la moralidad, apoyada en la libertad, la
autoconciencia y la responsabilidad de los propios actos del
sujeto.

La teoría
moral no es realizada exclusivamente por el filósofo o
teórico moralista

Actualmente existen muchas teorías en torno a la
moralidad pretendiendo cada una de estas hallar la forma
más adecuada para establecer una convivencia social que
sea el bien supremo para la sociedad. En lo que sigue mostraremos
la forma cómo se construyen algunas de las teorías
ético-morales más importantes y las bases sobre las
que descansan.

¿Por qué se debe aplicar una teoría
moral? ¿Cual es su deber o su obligación? "una
teoría moral es un conjunto de estructuras abstractas que
clasifican a un individuo, a las acciones o a los
sentimientos"
[12] La teoría
ético-moral elabora hipótesis basadas en casos
particulares pero aplicables de manera universal. Cabe aclarar,
que la teoría no es realizada exclusivamente por el
filósofo o teórico moralista, a menudo en la vida
cotidiana cuando se cuestiona la actitud o acción de un
agente se esta haciendo teoría moral "la
teorización moral forma parte de la práctica moral.
Es una manera de intentar asegurarnos de que nuestra
moralización y la de los demás son defendibles. Es
una manera en que' lo mejor de nosotros' o al menos nuestro yo
mas reflexivo, intenta a veces pasar a primer plano"

[13]Este tipo de teorización nos ayuda
más a elegir la decisión correcta que a hallar una
verdad definitiva y puede partir de muy diversos principios o
creencias ético-morales.

Un agente a lo largo de su vida se va a ver enfrentado a
problemas y conflictos morales cada vez más complejos, lo
cual implica una capacidad cognitiva cada vez mayor para la
resolución de conflictos, es decir, la decisión
moral requiere de la racionalidad.( "Como inevitablemente los
conflictos son cada vez más difíciles, es preciso
pasar a una etapa superior, y por lo tanto a una forma más
idónea de razonamiento moral, para resolverlos
adecuadamente"[14]
La evolución del
desarrollo moral es irreversible, dado que el desarrollo
cognitivo de un individuo también lo es. De esta manera se
reafirma lo que los griegos y posteriormente Kant con su
teoría moral expresó, la moralidad requiere de un
componente en orden a la razón. Lo cual nos proporciona
objetividad en el juicio moral, por ejemplo, si dejamos de hacer
una donación para un orfanato donde los niños se
mueren de hambre, podríamos dilucidar el daño que
causaría la falta de la donación, lo cual genera en
el agente un sentimiento de culpa, ya que dejamos de hacer algo
para lo cual sabíamos que había una buena
razón; hay una participación de deseos y creencias
del agente en su juicio moral. "Una acción es
así producto de estas dos fuerzas: un deseo representa la
forma en que ha de ser el mundo y una creencia nos dice como ha
de cambiarse el mundo para volverlo de ese
modo"
[15] los deseos y las creencias como
estados mentales forman la representación que tenemos del
mundo desde el punto de vista moral, pues al realizar una
acción no sólo expresamos nuestra creencia de que
dicha acción va a producir un bienestar, sino que
además manifestamos el deseo de que varias personas
debieran contribuir a ese bienestar. Este tipo de eventos
mentales -creencias, deseos etc.- afectan la decisión de
un agente. ¿Pero cómo tomar la decisión
correcta? ¿Bajo qué principios de debe decidir? El
breve recorrido histórico que hacemos en este apartado nos
muestra la variedad de teorías bajo las cuales se puede
decidir, ya que todas parten de la racionalidad y tienen
cómo fin último el bien.

Uno de los principios de racionalidad
práctico-moral más trascendentales de la modernidad
ha sido la deontología kantiana y el Utilitarismo
planteado por Jeremy Bentham y Stuart Mill. La primera plantea el
deber de obedecer una norma moral, y ubica las normas morales
dentro de un contexto empírico donde prima la
intención de hacer el mayor bien posible, tratar de hallar
el mayor bien, es lo que es bueno en si mismo y sin
restricción, y lo único bueno en sí mismo es
una buena voluntad, ésta no es buena por el efecto que
genere, es simplemente buena en si misma, cómo en el caso
de un sujeto que comete una torpeza a pesar de una buena
intención. El imperativo categórico es la base
sobre la que descansa toda la moral kantiana; la buena voluntad
se da en la medida en que quiere lo que quiere sólo por
respeto a la ley, y este deber es lo que da valor moral a las
acciones. De esta manera, la Ley Moral, se aplica sólo
cuando la decisión de hacer algo, se basa racionalmente en
lo que la ley prescribe de tal forma que tenga una compatibilidad
con la igualdad universal e incondicional.

La razón en lo práctico se ocupa del
sujeto, es decir, de la facultad de desear (…) La regla
práctica es siempre un producto de la razón, por
que prescribe la acción, como medio para el efecto
considerado como intención. Esta regla, empero, para un
ser en el cual la razón no es el único fundamento
de determinación de la voluntad, es un imperativo, es
decir una regla designada para el deber ser que expresa la
compulsión objetiva de la acción y significa que si
la razón determinase la voluntad totalmente, la
acción ocurriría indefectiblemente por esa
regla.[16]

La ley moral prescribe que lo que debe hacerse es el
mayor bien cualquiera que éste sea. Así, una
voluntad que actúa por respeto a la Ley moral es el mayor
bien, por lo cual es un fin en sí mismo y debe ser tratada
así.

Posteriormente el utilitarismo de Jeremi Bentham y
Stuart Mill trata incorpora principios básicos de utilidad
e imparcialidad esto es "una doctrina según la cual
las reformas sociales deben alcanzarse haciendo coincidir las
acciones de las personas y de los gobiernos con el principio
ético de utilidad"[17]
lo útil
es lo que produce felicidad.

El credo que acepta la utilidad o principio de la mayor
felicidad como fundamento de la moral, sostiene que las acciones
son justas en la proporción con que tienden a promover la
felicidad; e injustos en cuanto tienden a producir lo contrario
de la felicidad. Se entiende por felicidad el placer y la
ausencia de dolor, por infelicidad el dolor y la ausencia de
placer[18]

Un agente puede adoptar un principio para decidir o
juzgar moralmente con base en alguna teoría en torno a la
ética o puede teorizar con juicio propio cómo
actuar. Se debe admitir que, no importa qué tipo de
ética adoptemos para conducir nuestra vida, van a existir
situaciones en la que nos vamos a ver enfrentados a dilemas
morales cuya solución puede escapar a nuestro
discernimiento. Para este tipo de casos William David Ross a
desarrollado una fórmula de carácter
deontológico que permite dar una solución a ciertos
tipos de conflictos morales, a saber, son los deberes prima
facie, "El deber prima facie sugiere que se esta hablando solo de
un aspecto que una situación moral presenta a primera
vista"
[19] los deberes prima facie
constituyen la idea característica de lo que significa
tener un deber, pero no son un deber propiamente sino algo
relacionado de cierta manera con el deber; ello no implica que
unos deberes sean más importantes que otros, simplemente
el deber prima facie se convierte en la herramienta para
tomar decisiones en situaciones extremas de carácter moral
"si, tal y como piensan casi todos los moralistas a
excepción de Kant y como creen la mayor parte de los
hombres corriente, en ocasiones es correcto decir una mentira o
romper una promesa, debe mantenerse que hay diferencia entre
deber prima facie y deber real o
absoluto"
[20] Ross afirma que todos los seres
humanos tenemos ciertos deberes prima facie "los deberes de
mantener nuestras promesas, de reparar los daños que hemos
hecho y de devolver el equivalente de los favores que hemos
recibido"[21]
la primacía de un deber
prima facie sobre otro lo determina las circunstancias
bajo las cuales haya que decidir.

De esta manera, se puede ver que la moral ha pasado por
varias etapas, cada una usando métodos diferentes pero
todas con el mismo fin, hallar una idea de bien práctico.
Lo cual exige que cada individuo considere y relacione muchos
factores para decidir lo que se debe hacer en determinada
situación, pero ¿cómo saber cuál es
la decisión correcta? ¿De qué forma se puede
medir su asertividad? la decisión correcta se puede medir
evaluando la justificación moral en torno a la
acción, así la explicación del agente actor
es determinante ya sea para calificarla como aprobada o
desaprobada dado que la justificación expone la
direccionalidad del estado mental y las consecuencias de la
acción. Ante una situación de carácter moral
al agente se le pregunta ¿por qué lo hiciste? la
respuesta a este interrogante son las razones que justifican su
acción, conocer las razones por las que un agente
llevó a cabo una acción muestra la Intencionalidad
de la misma. Entonces, en algunas ocasiones no entendemos por
qué un individuo realizó una acción,
emitimos juicios discriminativos o judicativos, pero en el
momento que dicho agente justifica su acción, es decir,
expresa las razones que lo llevaron a actuar de esa manera,
nuestros juicios se encaminan a comprender las acciones
realizadas. ¿Cómo es posible comprender las
acciones morales a partir de las razones?

Acción,
causa, decisión, elocución

Un juicio moral, en su aspecto primordial, consiste en
prescribir o guiar las acciones[22]

Uno de los primeros en teorizar en torno a la
acción fue Aristóteles, siendo ésta una de
sus 12 categorías. Filosóficamente se tiende a
relacionar acción con acto o actividad, la lógica
de la acción estudia la relación de ésta con
la causa, la decisión, la elocución y la
Intencionalidad. "las acciones humanas son primordialmente
sucesos que ocurren en el mundo, con consecuencias sobre
él"
[23] la acción se compone de
un elemento interno y otro externo, el interno corresponde al
estado mental -intencionalidad, voluntad, deseo etc.- y el
externo es la dimensión física que genera cambios y
acontecimientos en el mundo. "la acción es el elemento
esencial intrínseco a las acciones humanas y se define en
referencia a su objeto, el resultado planteado o
querido"
[24] la acción debe asociarse
a la capacidad o potencialidad de un agente de producir un efecto
en el mundo, por lo cual, una acción siempre va a estar
asociada a un agente, ello implica que siempre va a estar
precedida de un estado mental.

Una acción es un evento producido de manera
Intencional por un agente, así, jugar futbol, conducir un
carro, saltar, estudiar, hablar con un amigo o comerse una
hamburguesa son acciones, puesto que implican una
intención al hacerlo, lo que no sucede por ejemplo con
alguien que tiembla de frío, pues a pesar de ser una
acción no presenta una clara intención de hacerlo,
a estos últimos se les denomina eventos, así, un
evento precedido de una intención es una acción.
"las explicaciones de una acción mediante razones
constituyen una forma de explicación causal siendo las
razones causa de la acción.[25]
La
causa de una acción está determinada por estados
mentales tales cómo las creencias y deseos. Los estados
mentales son los que hacen inteligible la conducta de un agente,
los estados físicos, son los que muestran el hecho
producto de los estados mentales; Entonces se puede establecer
una coherencia entre el estado mental, la acción y su
consecuencia; la acción se racionaliza en la medida que la
explicación de la acción se remita a las
circunstancias de su causa, estas son las razones fundamentales
para justificar la acción pero el estado mental no es un
suceso que genera una acción, sino una disposición
que genera un suceso. Si se dice que: Juan Votó por el
candidato menos popular en las encuestas;
esto es una
acción, en Juan existieron una serie de estados mentales
que lo llevaron a ejecutar el acto de votar, además una
serie de sucesos físico asociados con la intención
de Juan de votar. Juan ha de haber tenido unos deseos y unas
creencias que causaron que se comportara físicamente de
cierto modo, por ejemplo, su mano se movió en forma de
equis cuando marco el tarjetón electoral. Juan ejecuto una
acción porque ciertos estados mentales -creencias y
deseos- lo llevaron a que ejecutara ciertos movimientos
físicos.

La
comprensión de las razones es posible mediante la
explicación que da el agente

Sí una acción realizada por un agente se
explica de manera netamente causal partiendo del cambio
físico generado en el mundo, no se podría saber por
qué lo hizo y para qué "La explicación
de la acción nos remite a las intenciones del agente, son
sus razones las que corresponden al por qué de la
acción."
[26] Las razones explican la
acción porque la justifican, y la acción
sólo se explica mediante sus causas.

Las razones se exponen por medio de un relato que se
halla en el pensamiento del agente que expone la acción,
éste enuncia determinadas razones, pero la persona que
evalúa sus razones puede hallar otras en su relato. Sin
embargo, la comprensión de la acción depende en
gran media del agente mismo, pues obtener razones del
intérprete que las evalúa podría alterar o
deformar las verdaderas razones, por lo tanto, las razones tienen
que ser obtenidas del agente, éste es un elemento
necesario para que el intérprete pueda comprender las
razones. Cabe aclarar que no existen leyes que conecten las
acciones y razones de manera causalista o determinista, pues de
ser así la voluntad y la autonomía humana en el
momento de tomar una decisión serían algo obsoleto,
ya que se podría dilucidar infaliblemente la causa de una
acción y la conducta del agente no podría
calificarse de buena o mala, aprobada o reprobada, etc. el
razonamiento determinista afirma que todo lo que sucede en el
universo, sucede porque hay una serie de condiciones que lo
propicia y éstas poseen una explicación causal
incluso la conducta humana, entonces, lo que hiciéramos o
dejáramos de hacer sería ajeno a una
elección libre, y cómo consecuencia un agente no
sería responsable moralmente de lo que hace. ¿Se
puede exonerar realmente al agente de la responsabilidad moral?
La ciencia puede determinar o predecir fenómenos tales
cómo los climáticos o la rotación de la
tierra alrededor del sol, sin embargo, la conducta humana posee
Intencionalidad, ésta no se determina de la misma forma
cómo se determina la fotosíntesis que hace una
planta, o la conducta de una leona cuando va a atacar a su presa.
Si los razonamientos deterministas fueran verdaderos el ser
humano carecería de la voluntad que es el potencial que
convierte en acciones nuestros estados mentales, como los deseos
o creencias. "Cuando actuamos libremente nuestras acciones
pueden explicarse de manera racional pero no
determinista"[27]

Para que uno sea moralmente responsable es necesario que
sea capaz de hacer algo diferente. Pero si el determinismo es
verdadero parece que nadie puede hacer otra cosa y que nadie
puede ser moralmente responsable de decisión o
acción alguna. Si la responsabilidad moral (no simplemente
la responsabilidad causal) es un requisito previo para la culpa,
la imputación, el castigo y cosas similares, y asimismo
para el mérito, el elogio y la recompensa, en sentido
estricto nadie sería objeto de castigo o recompensa pues
nadie seria digno de censura o
elogio.[28]

Toda acción implica un evento pero no todo evento
es necesariamente una acción, es decir, una acción
es un evento causado por un estado mental proyectado o
direccionado sobre el mundo externo; el cambio de un estado a
otro se denomina evento, por ejemplo, un agente que está
sobrio después de ingerir varias onzas de licor pasa a
estar ebrio; Un estado es la situación en la que se
encuentra una cosa u objeto en el mundo en determinado momento o
bajo ciertas circunstancias, como estar sobrio o estar
ebrio

Ahora bien, para conocer las causas de una acción
se debe partir del estado mental que la generó, pero
éstos al ser mentales no se pueden conocer
fácilmente. Pero, ¿Cómo conocer la mente de
los demás? ¿Conocemos nuestra propia mente del
mismo modo cómo conocemos la mente de los otros?
Normalmente un agente sabe cuáles son sus propios
pensamientos, sabe lo que cree y lo que desea, para lo cual no
necesita de pruebas empíricas o lógicas que se lo
muestren; sin embargo, para saber lo que otro piensa necesitamos
recurrir frecuentemente a analizar sus actos, su conducta, su
forma de expresarse, etc. Se podría partir de la idea de
que el lenguaje por ser de uso y significación
común permite saber lo que otros piensan.
Comúnmente las expresiones sobre lo que deseamos o creemos
manifiestan ciertamente lo que pensamos, pero para que un agente
pueda conocer el pensamiento de otro es necesario que tengan una
relación con respecto a lo comunicado que permita
entenderse mutuamente, ello constituye el carácter social
del lenguaje, pues la significación objetiva de la cosa
comunicada dependen en gran medida de que compartan ambos sujetos
una serie de disposiciones psicológicas, físicas y
sociales que posibiliten la comunicación. No obstante,
existen casos en que dos agentes en igualdad de condiciones
sociales, culturales y físicas usan las mismas palabras
para expresar cosas diferentes "los contenidos de nuestros
pensamientos y los significados de nuestras palabras se hallan
fijados a menudo por factores que ignoramos
(…)"
[29] en consecuencia, interesarnos en
saber lo que causa las creencias en otro sujeto es el principio
fundamental para comprender lo que el otro piensa: "Al
descubrir lo que normalmente causa las creencias en otro sujeto,
se ha dado un paso esencial en la determinación del
contenido de esas creencias"[30].

¿Cómo se puede comprender el relato de
modo que no difiera la interpretación del interlocutor con
la versión del agente? En condiciones normales ambas deben
coincidir, pues hay que tener en cuenta que la explicación
del agente es una sola y la más importante, y la del
interprete es una posición neutral puesto que él
está fuera de la situación, lo cual hace que tenga
una perspectiva central sin entrar a interpretaciones subjetivas;
así que tanto el uno como el otro debe controlar su
subjetividad o la auto-justificación "hay que luchar
contra la impresión de que otros no saben más de
uno que uno mismo en todos los casos y contra las creencias de
que la gente no sabe lo que le interesa, mientras que nosotros
sí sabemos lo que es mejor para ellos, tentación
ésta característica de todo
poder"[31]

¿Cómo identificar la veracidad de las
razones o creencias? La coherencia en un razonamiento implica una
noción de veracidad. Un conjunto de creencias verdaderas
que poseen coherencia se asumen como una creencia cercana a la
verdad. De esta suerte, para comprender las creencias por medio
de un tercero además de una clara comunicación y
una comprensión del habla, de las creencias, de los
deseos, o de las intenciones y otras actitudes del agente, se
necesita hallar una razón para creer que la creencia o el
conjunto de creencias es verdadera, ello es lo que nos lleva a
comprender el pensamiento del agente; si la mayoría de las
creencias de un agente muestran ser verdaderas, hay una
presunción legítima a favor de la veracidad de
cualquiera de las creencias. El contenido de una creencia
está determinado por los eventos y sucesos que poseen
afirmaciones en torno a éstas, tanto el que afirma
cómo el que interpreta deben poseer una creencia
común acerca de lo que hablan, pues para la
comunicación se requiere de un sistema universal de
creencias y de normas de racionalidad en común, que
permitan evidenciar la veracidad o falsedad de las proposiciones.
Las creencias pueden justificase con relación a otras
creencias; en lo esencial, la coherencia que presente un conjunto
de creencias es suficiente justificación para cada
creencia particular. La justificación es una forma de
evaluación del estado de las creencias de un agente.
"nuestros criterios de justificación (…) son los
patrones por los cuales juzgamos la probabilidad de que una
creencia sea verdadera"[32]

No tiene sentido
emitir juicios morales sobre acciones que sólo pueden
realizarse de una forma

No podríamos decir que el fuego es malo cuando
incendia y bueno cuando nos permite cocinar los alimentos o que
la lluvia es buena cuando nos hidrata y mala cuando nos inunda,
es claro, el agua y el fuego nos favorecen o nos perjudican de
acuerdo a cada situación particular. Los seres humanos
tienen la posibilidad de elegir cómo realizar una
acción que puede tener mil formas de acontecer
según lo juzgue el agente, tener la posibilidad de elegir
entre múltiples formas de llevar a cabo una acción
es lo que hace posible asignarles juicios de valor buenos o
malos, aprobados o reprobados aceptables o rechazados etc.
"Un individuo tiene para las diferentes acciones y complejos
de acción de su vida diferentes razones (motivos), y la
sociedad o bien sus congéneres le exigen conducir estas
acciones, sean cuales sean sus motivos, bajo determinadas
condiciones restrictivas"[33]
Dichas
condiciones restrictivas impuestas ya sea por la sociedad, por la
religión o por convicciones de otro tipo, son la base para
juzgar y exigir de una u otra manera la justificación de
la acción o juicio moral. Así, sí el agente
es miembro de una organización, comunidad,
institución política etc. que le impone cierta
restricción en su conducta bajo diversos sistemas de
normas morales, pertenecer a éstas será suficiente
motivo para someterse a la normatividad impuesta incluso en
contra de sus propios intereses, igualmente es motivo para exigir
a los demás miembros de su ideología o
institución que las cumplan. La justificación del
juicio moral se da en la medida en que hay una relación de
dos o más agentes, con diferentes convicciones sociales
culturales o morales sobre un mismo hecho. Es la dimensión
social de la moralidad la que exige la fundamentación del
juicio moral.

aquello que fundamentamos por consiguiente cuando
fundamentamos una norma no es por consiguiente ni esta norma como
tal ni una oración enunciativa en la que predicamos algo
de una norma, (…) El sentido de hablar de una
fundamentación no es por consiguiente en última
instancia una fundamentación de un enunciado sino una
fundamentación para un obrar[34]

La Intencionalidad de una acción es la
representación de lo que se pretende conseguir con la
misma. "podemos, pues, concebir la acción Intencional
humana como una conclusión justificada a partir de
determinadas razones del agente sin vernos obligados a situarla
más allá de la naturaleza física." La
acción es el medio a través del cual la
Intencionalidad – o la direccionalidad- se hace manifiesta en el
mundo externo, por ejemplo

Tengo hambre, voy a ir ahora mismo a robar alimentos de
la cocina de mi vecino para almorzar.

Esta oración describe un estado mental
Intencional. La acción es un acontecimiento causado por un
estado mental, éste posee una direccionalidad denominada
Intencionalidad que desemboca en la acción y ésta
puede ser catalogada como buena, mala, aprobadas o rechazadas
etc.

Un evento que me
involucra es una acción mía sólo si yo tengo
la Intención de que ocurra y si mi Intención causa
que ocurra[35]

Pretendemos básicamente exponer la
Intencionalidad cómo un rasgo que define los eventos que
pueden ser evaluados moralmente. La intención consiste en
hacer un intento para producir un efecto en el mundo por medio de
un acto o acción. Intentar proviene de la raíz
latina attempare, que significa procurar o pretender, mientras
que Intención proviene del verbo intendere que significa
tender hacia. Por una parte, el término Intención??
se refiere a la tendencia o dirección de la voluntad hacia
un objeto específico en el mundo externo, es una facultad
de los estados mentales -deseos, creencia, miedo, voluntad, etc.-
por otra parte, la intención es un estado mental
voluntario que se dirige sobre un objeto o estado del mundo
externo, con un propósito determinado que implica una
premeditación.

La Intencionalidad es una direccionalidad o
proyección que permite convertir en acciones nuestros
estados mentales, "La Intencionalidad es aquella propiedad de
muchos estados y eventos mentales en virtud de la cual
éstos se dirigen a, o son sobre o de, objetos y estados de
cosas del mundo" Es decir, si el estado mental está
dirigido sobre un objeto o estado de cosas en el mundo externo y
además presenta una respuesta satisfactoria a la pregunta
¿por qué? entonces posee Intencionalidad, lo que
difiere significativamente de intención, ya que esta
última es un estado mental tal como las creencias o
deseos. La direccionalidad del estado mental debe tener un
sentido coherente con la realidad, que se denomina ajuste
mente-a-mundo o ajuste mundo-a-mente según sea el caso. Si
tenemos la creencia de que el agua del mar es salada, hay un
ajuste mente-a-mundo, pero si tenemos la creencia de que el agua
del mar es dulce y verificamos que no lo es, debemos cambiar
nuestra creencia; "es responsabilidad de la creencia, por
así decirlo, encajar con el mundo, y donde el encaje falla
rectifico la situación cambiando la creencia" de esta
manera se daría un ajuste mundo-a-mente lo cual implica
una satisfacción del estado mental. Si tengo la creencia
que en la nevera hay una bolsa de leche, mi creencia se
satisfará sí y solo si efectivamente hay una bolsa
de leche en la nevera. Las condiciones de satisfacción del
estado mental dependen de la relación del estado de cosas
del mundo con el estado mental que posee el agente, entonces la
dirección de ajuste es mente-a-mundo, pero, si tengo el
deseo de comprar una bolsa de leche y ponerla en la nevera la
dirección de ajuste es mundo-a-mente, pues las condiciones
de satisfacción en este caso dependen del cambio que mi
deseo genere en el mundo.

Estos son algunos de estados mentales Intencionales:
Creencia, temor, esperanza, deseo, amor, odio, aversión,
gusto, disgusto, duda, preguntarse si, alegría, felicidad,
depresión, ansiedad, orgullo, remordimiento, pesar, culpa,
regocijo, irritación, admiración, desprecio,
respeto, indignación, intención, anhelar, querer,
imaginar, fantasear, vergüenza, codicia, asco, animosidad,
terror, placer, aborrecimiento, aspiración,
diversión y frustración. La característica
de estos estados mentales es que se dirigen sobre estados u
objetos del mundo.

Los estados mentales de una u otra manera se hallan
incompletos y sólo se completan con un contenido de tal
manera que si poseemos una creencia o un deseo, éste debe
ser sobre algo que es de esa forma, algo que sucederá o
que quiero que suceda. Si tengo una creencia, ante la pregunta
¿Qué es lo que crees? Debe haber una respuesta con
un contenido y sentido coherente, por ejemplo creo que mi hijo
llegará del colegio hambriento; y si realizo una
acción, ante la pregunta ¿Por qué lo
hiciste? Debe haber una respuesta coherente con el estado mental
que la causó, por ejemplo, hice el almuerzo por que creo
que mi hijo llegará del colegio hambriento, hay en este
caso una acción Intencional independientemente si el hijo
efectivamente llegó con hambre o no. El contenido
Intencional, es el estado u objeto del mundo sobre el cual esta
dirigido el estado mental, así que, ante la pregunta
¿qué es lo que crees? Debe haber una respuesta que
implique un objeto o estado del mundo. Si creemos que la Luna es
un astro que gira alrededor del planeta tierra, el objeto sobre
el cual esta dirigido el estado mental es la Luna, y la
representación del estado mental hace referencia al
movimiento de este astro alrededor del planeta, de tal forma se
establece una relación entre el contenido proposicional
del estado mental y el objeto sobre el cual está dirigido.
Los estados mentales intencionales al igual que la
Intencionalidad no necesariamente desembocan en una
acción, pues un agente puede tener la intención de
ir a una fiesta, y no ir; o tener la creencia de que beber agua
reducirá su sed, y no beber el agua.

Partes: 1, 2

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