"La historia de México es la del
hombre que busca su filiación, su origen.
Sucesivamente afrancesado, hispanista, indigenista,
"pocho", cruza la historia como un cometa de jade,
que de vez en cuando relampaguea"
OCTAVIO PAZ, EL LABERINTO DE LA SOLEDAD, El
Pachuco y otros Extremos, paginas 18 y 19)
En las "altas" esferas de nuestra plutócrata
sociedad, reina un "nacionalismo" disfrazado, absurdo y rampante,
cargado de un mimetismo que otrora observo Samuel Ramos en su
libro "El Perfil del Hombre y La Cultura en México", y mas
tarde Octavio paz en su libro "El Laberinto de la
Soledad".
Estos seres famélicos, regordetes, furtivos,
nerviosos, farsantes y auto simulados viven en villas, conjuntos
o haciendas que se caracterizan por sus feas construcciones,
caóticas, ostentosas de mal gusto y dispersas. Pero eso
si: muy caras.
Son los nuevos "Pachucos adulterados" del siglo XXI,
incapaces de asimilar una civilización que los rechaza.
Son unos desclasados "han perdido su herencia: lengua,
religión, costumbres y creencias".
Su carácter se basa en la autohumillación
y en el complejo de inferioridad, viven en la ubicuidad. Para
ellos ser mexicano "es un problema de verdad vital, un problema
de vida o muerte"
Incapaces de percibir la ausencia de la cultura
estadounidense, forjada por un tipo medio de "valores" vulgares,
que todo pro yanqui, considera como suyos y que mediocremente
participa de ellos. Son estos ignaros rampantes, los que conciben
a la Vulgar y desvalorizada vida norteamericana como "cultura
universal".
Estas criaturas que inconscientemente todo lo cotizan en
dólares y que creen que el idioma "ingles", es la lengua
universal son extranjeros en su país y fuera de el,
también. De ahí su inferioridad.
Su vida consiste en irse de "shopping" (compras) a
estados unidos. Aunque su vida "selecta", sea artificial: viven
en un ambiente de vanidad y nostalgia, Pleno de prepotencia y
ambiciones pragmáticas. Llenos de ideología hostil
y sospechosa, son regularmente corruptos, deshonestos,
caóticos, extravagantes y esnobistas.
Su lujosa ignorancia los hace negar su mexicanidad de
diversas e inconscientes formas, por ejemplo:
Son amantes del fútbol americano, copia
degradada del rugby, al que consideran un deporte de
conjunto, y creen que mezcla complejas estrategias. Lo que
más les enorgullece es que, desde su óptica, lo
consideran un juego de contacto físico muy
intenso.
Desconocedores de Pierre de Frédy, más
conocido como el barón Pierre de Coubertin, pedagogo quien
postulo la búsqueda de "la perfección espiritual
por medio del deporte y la higiene" y que soñó con
"unir en una extraordinaria competición a los deportistas
de todo el mundo, bajo el signo de la unión y la
hermandad, sin ánimo de lucro". Fue un historiador
y pedagogo francés que creó los Juegos
Olímpicos de la era moderna y restauro los Juegos
Olímpicos que se celebraban en la antigua Grecia, "para
fomentar el deporte a escala mundial con fines educativos" y
promover el espíritu de superación personal, por
medio del juego limpio y la sana competencia.
No observan que el principio fundamental del futbol
americano es el exceso económico, el despilfarro que
seduce, la brutalidad y el espectáculo, de ahí su
rampante "modernismo". No es el deporte, sino provocar el mayor
daño físico al otro, subliminalmente al mundo en
general, como se ha visto históricamente. Aunque en la
actualidad se han creado nuevos reglamentos para regular la
barbarie implícita del "juego", su fiereza, crueldad y
falta de cultura sigue en pie.
Todo contacto contamina, (diría Paz). Eso gusta a
la barbarie y a la plebe, lo que mas sorprende a los aficionados
es el espectáculo y el morbo, quienes, hasta los mas
desarrapados, casi matarían por un boleto del no
se, todavía, porque llamado el "Super bowl".
Su fusilería y fanfarronería los lleva a
festejar, en sus casas o en Estados Unidos el Día de
Acción de Gracias, al que dan mayor importancia que el
año nuevo y que es una celebración tradicional de
Estados Unidos y Canadá. En los Estados Unidos se celebra
el cuarto jueves del mes de noviembre, aunque originalmente se
hacía el último jueves. Generalmente en esta
festividad se reúnen en torno a una mesa familiares y
amigos a compartir una cena. Solemnidad religiosa en origen, pero
de carácter secular.
El día de Acción de Gracias en
América del Norte es una mezcla de tradiciones europeas y
aborígenes, no autentica de los gringos. En Europa, se
festejaba la buena cosecha, después del duro trabajo junto
con el resto de la comunidad. Los europeos llevaron a
América esta tradición. La mayoría de los
estadounidenses celebran esta festividad con reuniones familiares
en sus casas, con una cena, generalmente con pavo y ofrecen una
oración de gracias. Situación que a nuestros
extraviados "mexicanos", les angustia y satisface por sentirse
rechazados. Pero finalmente esta carga ambivalente les da el
"privilegio" de pretenderse Norte Americanos, pues así
disipan su soledad y extranjerismo dentro y fuera de su
país.
Otro apego mimético que los caracteriza es la
celebración del Halloween (que se presenta en
vísperas de Todos los Santos), conocido como Noche de
Brujas o Noche de Difuntos. Fiesta de origen celta que
se celebra, básicamente en los Estados Unidos,
Canadá, Irlanda, el Reino Unido y en otros países
con menos arraigo. Se lleva a cabo el 31 de octubre. Los
irlandeses la llevaron a América del Norte.
El "evento" se aparea con los colores naranja, negro y
morado, es claro su desconocimiento de las teorías del
color, y está fehacientemente ligado a símbolos
como una calabaza tallada a mano, que proviene del
fenómeno natural conocido como fuego fatuo.
Tradicionalmente "se toma una calabaza, se le quita la parte
superior, a modo de tapa, y luego se extrae la pulpa de su
interior; sobre la superficie exterior se talla una imagen,
generalmente un rostro monstruoso. Durante la noche se coloca una
vela encendida en su interior para crear un efecto luminoso". Las
actividades típicas de Halloween son los trucos, los
disfraces, los dulces, las hogueras, la visita a, supuestas, casa
encantadas, las bromas y la lectura de historia de
"terror".
En ese día y posiblemente unos días antes
y después, veremos a nuestros esforzados "mexicanos", por
se gringos, regalar dulces y adornar sus cazas con calabazas de
plástico, la industria, esqueletos y trapos blancos,
negros y morado, llenos de ostentosas luces y simuladores de
telarañas, con arácnidos de juguete, cuervos y todo
lo que consideren espeluznante, entre mas burdo y vulgar, mas
honorable para ellos y sus esposas, "the ladies of the
bourgeoisie", que con un orgullo provinciano se sentirán
todas unas madame Bovary o Anna Karénina, sin saber
siquiera quienes fueron.
Restándole con su ignorancia y arrogancia
extranjerizante, importancia a El Día de Muertos
que es una verdadera celebración mexicana de origen
prehispánico que honra a los difuntos el 2 de noviembre,
que da comienzo desde el 1 de noviembre, y que la iglesia la ha
hecho coincidir con las celebraciones católicas de
Día de los Fieles Difuntos y Todos los Santos. Como un
acto de yuxtaposición a nuestras autenticas tradiciones
culturales, entre otras.
El Día de Muertos se conmemoraba "el noveno mes
del calendario solar mexica, cerca del inicio de agosto, y se
celebraba durante un mes completo. "Las festividades eran
presididas por la diosa Mictecacíhuatl, conocida como la
"Dama de la Muerte" (actualmente relacionada con "la Catrina",
personaje de José Guadalupe Posada) y esposa de
Mictlantecuhtli, Señor de la tierra de los muertos. Las
festividades eran dedicadas a la celebración de los
niños y las vidas de parientes fallecidos.
Esta tradición, verdadera y auténticamente
mexicana, hoy impactada por el mercado Norteamericano y por
nuestros acomplejados "mexicanos" de postula Pro-yanqui, sigue en
pie y no podrá desaparecer jamás. Muestra y
testimonio de ello se lo debemos a mexicanos de la talla de
Xavier Villaurrutia, José Gorostiza, Alfonso Reyes, el ya
mencionado y grabadista José Guadalupe Posada, Octavio Paz
y un sin numero de escritores mexicanos, preocupados y amantes de
nuestras tradiciones y cultura, que retoman, reiterativa y
orgullosamente el tema. Así como a los auténticos
mexicanos, siempre alegres y festivos, "hay que morir como se
vive. La muerte es intransferible como la vida" nos dice,
nuevamente Paz y agrega, al respecto de la Muerte: "El
mexicano…, la frecuenta, la burla, la acaricia, duerme con
ella, la festeja, es uno de su juguetes favoritos y su amor mas
permanente" "Calaveras de azúcar o de papel de china,
esqueletos coloridos de fuegos de artificio… Adornamos
nuestras casa con cráneos, comemos el día de los
Difuntos panes que fingen huesos y nos divierten canciones y
chascarrillos en los que ríe la muerte pelona", hacemos
ofrendas, comemos con nuestros muertos, en el panteón y en
la casa misma, la embriagues cultural se colma de espíritu
dionisíaco, ese es el mexicano que conserva su cultura, su
lengua, su origen y sus tradiciones culturales.
Por eso: cuando un insignificante pro yanqui,
ocasionalmente llegan a leer la novena, décima de Muerte
de Xavier Villaurrutia que dice:
(Si te llevo en mí prendida- y te acaricio y
escondo;- si te alimento en el fondo- de mi más secreta
herida;- si mi muerte te da vida- y goce mi frenesí,-
¿Qué será Muerte, de ti- cuando al salir yo
del mundo,- desecho el nudo profundo,- tengas que salir de
mí?)
Exclama: no le entendí y no se para que sirva, lo
que me satisface y prefiero es ver mi chequera repleta de
dólares.
Otro rasgo característicos de estos seres, es el
valor y la forma que dan y festejan la navidad, para ellos la
Christmas, celebración de Natividad (o el
nacimiento) de Jesús de Nazaret. Que nada
tiene que ver, en cuanto a significado, con el mexicano ni
con sus orígenes Prehispánicos.
Los mexicas celebraban durante el invierno, la
llegada de Huitzilopochtli, dios del sol y de la guerra,
aproximadamente durante el período del 7 al 26 de
diciembre de nuestro calendario.
Los incas celebraban el renacimiento de
Inti o el dios Sol, la fiesta era llamada Cápac
Raymi o Fiesta del sol poderoso, en el solsticio de
verano, que era la contraparte del Inti Raymi al que se le
rendía tributo en el solsticio de invierno
austral.
Lo que es cierto y conocido por todo experto en el
tema es: que la fecha del nacimiento de Jesús no se
encuentra registrada en la Biblia, ni en los Evangelios y que
los orígenes de esta celebración, del 25 de
diciembre, se encuentra las costumbres de los pueblos de la
antigüedad. (Durante el solsticio de invierno, alguna fiesta
relacionada al dios o los dioses del sol.
La Navidad (del latín: nativitas, 'nacimiento'),
constituye una de las festividades más importantes del
cristianismo, junto con la Pascua de resurrección y
Pentecostés. Aquí se conmemora el nacimiento de
Jesucristo en Belén, y se celebra, coincidentemente, el 25
de diciembre. Fecha que oportunistamente los primeros
evangelizadores, promovieron para cambiar los iconos de piedra,
por los de barro y porcelana, así como para lograr la
sustitución de sus personajes "divinos", por nuestra
verdaderas Deidades. Destruyendo con ello nuestras autenticas
tradiciones prehispánicas y dándoles un tinte
cristiano como el que ahora se conserva. Esto data del año
211, donde se populariza el 25 de diciembre y para la
época del Concilio de Nicea I en 325, la Iglesia
Alejandrina fijo la "fecha de nacimiento y la epifanía"
(Díes nativitatis et
epifaníae).
Táctica que hemos visto, observado y analizado en
la mayoría de muestras importantes ciudades
prehispánicas, como el caso de Mitla o la Gran Ciudad de
México, por citar solo dos, donde el mismo espacio que
empleaban nuestros antepasados para sus festividades y
tradiciones, fueron construidas, por encima de nuestros templos y
tradiciones, las iglesias y centros de gobierno de nuestros
conquistadores. Hechos de los que muchos mexicanos están
concientes, aunque extrañamente, han "preferido" adoptar
como alienados, los rituales y mitos, la eucaristía, del
catolicismo proveniente del Vaticano como centro de
poder.
¿Pero que es para el pro gringo y el aspirante a
yanqui "mexicano" la navidad?: ¿Constituye la llegada de
Papá Noel, Santa Claus, San
Nicolás, el Viejito (o Viejo)
Pascuero o Colacho? (que son algunos nombres con
los cuales se conoce universalmente al personaje de la navidad.
¿Es acaso la cultura de origen griega del llamado
Nicolás (que vivió en el siglo
IV)?
En la actualidad, los Estado Unidos y la Coca Cola, han
popularizado que Santa Claus vive en el Polo Norte junto a la
Señora Claus y una gran cantidad de duendes, que le
ayudan, a este, a la fabricación de los juguetes y otros
regalos que le piden los niños a través de cartas.
Que Papá Noel, guarda regalos y juguetes en un saco
mágico y los reparte a las 00:00h del día 25 de
diciembre, en un trineo, también mágico volador,
tirado por renos.
Los magnates del cristianismo y otros grupos de poder,
en desesperada reivindicación de su estatus mercantilista,
consideran que la figura actual de Santa Claus está
saturada de distintas acusaciones. Se le acusa de ser un producto
comercial al servicio del consumo y de ser una figura
estadounidense intrusa y destructora de las tradiciones locales,
aunque creo que aquí se muerden la lengua. Debido a que a
partir del siglo XX, la empresa Coca-Cola contrato al
pintor Habdon Sundblom, para que remodelara, de manera
tendenciosa y subliminal, la figura de Santa Claus/Papá
Noel, con el pretexto de hacerlo más humano.
Versión que data del año 1931. Fecha en que se
popularizan para su venta, los colores rojo y blanco de Santa
Claus y que tienen su origen en los anuncios que la marca
Coca-Cola. Por lo que "se considera que la campaña
masiva de Coca-Cola fue una de las principales razones por las
cuales Santa Claus terminó vestido de color rojo y
blanco".
Por lo anterior: el origen cristiano, impuesto a la
Navidad, como el nacimiento de Jesús, ha sido colocado en
el segundo plano. Y ahora "cada vez más: es una festividad
reducida al simple comercio y a la compra de regalos", efecto del
globalizado economicismo norteamericano. De donde se deduce que
el actual espíritu de la navidad es el de la
promoción de la sociedad de consumo y el mercado de la
Coca Cola, donde reinan los excesos, el esnobismo, la moda y el
dólar.
Últimamente: "El Buen Fin", en Mexico.
La amistad; para ellos la amistad tiene un alto
valor ($), se cotiza en dólar, sus relaciones
sentimentales, las del amor y de la amistad son frías y
monetarias. Para ellos la amistad debe ser pragmática, si
no, no tiene sentido, ni valor. Un amigo puede representar un
diezmo en la nomina, que decir un diezmo, el ochenta por ciento
de utilidad, si no; no se puede ser un yanqui mexicano. Un
"amigo" puede ser el vehiculo para recuperar sumas millonarias,
pero es imposible concederles un préstamo o ayudarlo, para
eso si no hay recursos, además sus tarjetas están
siempre saturadas, se ha pagado la servidumbre, el colegio de los
vástagos, los caprichos de la "mujer" y ya lleva metidos
mas de una veintena de millones de pesos en la edificación
de su casa. Paga al chofer y a la "Nana", que es la única
fuente de cultura y tradiciones que conservan sus hijos, ya que
en la Hall School, la imposición del ingles y la
teología son predominantes,
Sus dólares no alcanzan, ni alcanzaran para
"comprar" una amistad como la del Lord Jim y Marlow de Joseph
Conrad, ni para adquirir un espíritu Quijotesco,
según Cervantes. Pero no solo eso: también ignora
que tampoco esta en venta una relación de amistad
trascendente como la de Gilgamesh y Enkidu, del poema
épico fantástico mas antiguo. Para esta clase de
"seres" el tesoro de Alfanhuí de Sánchez Ferlosio ,
no pasara de ser un simple marfil, en paridad con el
dólar, porque un tesoro como la amistad, no se puede
vender ni comprar, como lo refiere Sánchez Ferlosio: "La
gente cree que es tesoro lo que vale mucho, pero el verdadero
tesoro es lo que no se puede vender. Tesoro es lo que vale tanto
que no vale nada…. El verdadero tesoro vale más que
la vida, porque se muere sin venderlo. No sirve para salvar la
vida". Y como la amistad no genera intereses, ni da ganancias, ni
mucho menos, sirve para algo pragmático, para ellos no
existe esta fuera de su vocabulario, así como el amor que
Monos y Una, se profesan en el relato de Edgar Allan Poe. En
ellos el "amor", debe ser de utilidad, de interés
mercantil, de "alcurnia", no importa que sea provinciano, ese es
su cosmopolitismo, si no, no sirve.
Por eso sus amigos le deben adular y decir que vale
mucho porque tiene mucho, eso le hace creer que sus amigos, son
inferiores a el. Los otros, los que lo ignoran y lo ven en
realidad como "es", no existen para el, o son sus enemigos.
Además el solo se somete a los mandatos y a la falocracia
de su mujer. El puede "negociar" y/o acordar con funcionarios,
gobernadores, empresarios y lideres sindicales, pero con su mujer
nunca, hasta ahí llega su capacidad intelectual; es ella
quien le escoge las "amistades" y le dice como debe llevar su
vida, pues ella, para el: "siempre tiene la razón". Esta
hembra elegida a imagen y semejanza, con regularidad
desconfía de todos (hombres y mujeres), y aunque,
seguramente, sea una ignara rampante, como su consorte, para ella
todo el mundo son una bola de "nacos" (en la antigüedad,
según Samuel Ramos: unos "pelados"), así cree
defender su vulgar negligencia parvularia, en la que solo cree su
distinguido y pro yanqui esposo.
Aprenden historia del cine hollywoodense, pues siempre,
contrario a la realidad, aparece un gringo que salva al mundo,
siendo que es el país que más daño ha
causado a la humanidad y al globo terráqueo. Posiblemente
por su enorme poderío y arbitrariedad. Siendo que hoy en
día hasta los negros discriminas a los latinos, pasaron de
esclavos a "amos del mundo". Esto solo sucede en el cine y en la
realidad norteamericana.
Si queremos ver como se trastoca y desvirtúa el
contenido de una obra literaria, basta con ver el cine americano.
El artista americano siempre será y se sentirá el
personaje fundamental de la historia de la humanidad, hasta el
homosexual actúa como hombre de verdad. En el cine
americano, algunos se salvan, por lo general, lo importante es la
taquilla, la venta el economicismo, no el arte. Y el pro yanqui
lo sabe bien, el arte bueno es el arte caro. De ahí su
obstinada voracidad por la riqueza monetaria.
Su excelsitud en el arte culinario lo refiere a la
hamburguesa, poner dos rebanadas de pan a un "filete" de carne
picada, aderezada con cebolla, hojas de lechuga, encurtidos,
mostaza, jitomate y salsa de tomate. Genial. Así como al
hot dog, más conocido como "perro caliente",
(originalmente perrito caliente), epíteto gourmet
de nombre exquisito y apetitoso. El hot dog, es originario de
Europa y corresponde a la comida callejera. En estados unidos es
muy popular, el día 4 de julio se hace un concurso y esta
estandarizada su venta en los estadios de baseball y en carritos
ambulantes en plena calle, se ve que son unos verdaderos
degustadores. A los que de manera feroz, trata de imitar nuestro
triste y necio pro yanqui. Aunque regularmente y, a escondidas,
sobre todo de sus esposas, comen fritangas, tacos, tortas, sopes
y quesadillas, pero; en las reuniones o comidas de negocios o con
políticos de su ralea, prefieren la "comida
internacional". De ahí, su cosmopolita y universal
obesidad.
Todavía existe mucho por añadir al
comportamiento y prototipo del mexicano que se siente "gringo",
pero creo que estos minúsculos ejemplos nos pueden
orientar a reconocer a cada uno de estos acomplejados y
desvalorizados "seres" que viven mimetizados y orientados al tan
devaluado y desacreditado "sueño Americano"
Autor:
Juan Sastre Rodriguez
15 / MAYO /2013.