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¿Y Dios?… ¿Existe?… Razonar filosófico de un poeta (página 2)




Enviado por Francisco Tovar



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Actualmente se sabe, que Aquiles si alcanza a la tortuga, que la piedra si llega al árbol, que el atleta si recorre el estadio y llega a la meta y que la flecha si se mueve; porque, aunque el número de puntos recorridos de que habla Zenón es infinito; la suma de ellos es finita. Leucipo, discípulo de Zenón, formuló las primeras doctrinas atomistas, y por ende, es el fundador de la escuela atomista o corpuscular y del materialismo mecanicista. que afirma que la materia está constituida por átomos indivisibles (Estas dos palabras: átomo e indivisible significan lo mismo) Las ideas centrales de Leucipo son dos: lo lleno y lo vacío. Afirmaba que existe tanto el ser como el no-ser: el primero está representado por los átomos y el segundo por el vacío, del cual decía: existe no menos que el ser. Identificaba el vacío con el no-ser, pero no en el sentido que fuera sinónimo de la nada sino en el de que el vacío  no-era el ser, es decir, los átomos. El vació no es identificable con la nada ya que juega una función ( por lo tanto es algo ) que sería la de permitir que los átomos se muevan desde toda la eternidad y estén separados unos de otros. Profesó Leucipo, la multiplicidad infinita, rechazando la unidad absoluta y decía que el universo se formó porque las monadas o átomos  individuales se combinaron entre sí, siendo sólo algo puramente material. Su discípulo, Demócrito, no sólo asimiló y defendió todas las enseñanzas de su maestro, sino que las difundió ampliamente. Para estos dos filósofos, el alma inmortal humana, era una agrupación de átomos esféricos al extremo, mucho más esféricos que las otras cosas, y que de las irradiaciones de los cuerpos surgían los efectos de los sentidos, que atravesando los órganos de éstos, alcanzaban  a la supuesta alma inmortal ya dicha, a la que le admitían una fuerza activa que llamaban  razón, que discernía y dictaminaba entre los efectos de los sentidos y lo que era verdad; por lo que tomaban las sensaciones como algo que simplemente no actúa; definiendo a las impresiones como el cierre del moldeo y a la supuesta alma como la arcilla moldeada. Tenía al universo como un conjunto de monadas o átomos individuales, puramente material. A Demócrito se le tiene como fatalista y como ateo.

Fatalista: porque para él, siendo los átomos eternos, la totalidad de las cosas las aclara, por el imprescindible movimiento de ellos (destino), y ateo: al decir que los dioses es lo que resultó, de la conversión que hicieron los hombres, a las representaciones que emiten los cuerpos al percibir sensaciones. El reconocido decir: "la verdad se encuentra escondida en un profundo y oscuro pozo", se le imputa a Demócrito, del cual se dice que se reía de todo sin tomar nada con seriedad; esto como introducción al escepticismo, que tanto arruinaría luego a la filosofía griega, porque si alguien piensa así de la verdad, llega a defender que no hay forma de sacarla a la claridad para conocerla. Heráclito, por su carácter algo pusilánime e irascible, a diferencia que Demócrito, lloraba por todo. Profesaba Heráclito, dentro de su materialismo; que el origen de todas las cosas es el fuego, pero por el resto de sus pensamientos filosóficos, en los que se dejan ver las incongruencias; podemos notar de cierto, que tenía a dicho elemento como emblema envolvente de su pensar metafísico, y como referencia de un dios como origen de todo conocimiento. Ya que exponía, que la inteligencia del ser humano se debía a su unión con la divina; fundamentando la virtud, en el sometimiento de las pasiones a la razón, siendo muy cuidadoso al diferenciar entre ésta y el sentir, y tenía a la predicha razón, como afín a todo hombre y absoluta y autónoma de las circunstancias. Decía que los sentidos eran unos testigos poco confiables, hasta que la razón certificaba lo que percibían, ya que tenía a ésta, como único juez de la verdad. Heráclito, aunque en sus orígenes, llegó a decir que nada sabía, terminó por decir "humildemente" que nada ignoraba… Basándose en la composición de los cuatro elementos: agua, aire, tierra y fuego; profesó Empédocles, el origen del mundo, asignándole al último de éstos, la superioridad. Éste fue un estudioso incansable de la naturaleza. Predicaba que a la supuesta alma inmortal, la componen los cuatro elementos, por lo que su conexión con el mundo es fuego a fuego, aire a aire, agua a agua, tierra a tierra, y aunque siendo materialista esta concepción, no eliminaba completamente su espiritualidad, ya que hacia extensiva a la predicha alma, la diferenciación de comprensible a perceptible; dándole a la espiritualidad  el razonamiento y  a la materia lo sensual; afirmando que Dios no tiene aspecto de ser humano, siendo imprescindible, incorpóreo, sublime e inexplicable. Nos dice Empédocles, que el mal lo origina el odio, y que el bien es originado por el amor, que las malas pasiones del ser humano destruyeron  el equilibrio primigenio, pero que éste se recuperará al ganar el amor, el cual juntará a todo el universo en una total armonía…

   El amor a la sabiduría, la búsqueda de la verdad, la práctica de discutir inteligentemente, el enfrentamiento altruista, la investigación seria, el arte de la dialéctica, la creencia en la Divinidad Creadora. Todas estas cosas, sembradas y difundidas por las escuelas jónica e itálica, se fueron transformando en puro envanecimiento fútil y en blanco de distintas conjeturas ¡Más que todo!, por culpa de escepticismo, que venía creciendo y haciendo estragos dentro de la filosofía griega, y dio nacimiento al sofismo, dentro del cual, siendo la improvisación su fuerte; se hablaba y se disputaba acerca de todas la materias sin preparación alguna, haciendo defensas en contra y a favor de todos los asuntos como distracción del intelecto, lo que vino a desprestigiar a la filosofía y  a engrandecer al escepticismo y a convertir a éste en escuela ¡Inmerecidamente!. Y esta defensa de lo que se opone y de lo que favorece todas las cosas ¡Así sea por entretenimiento!, tiene como consecuencia: que se llega a dudar de todo; así como el que va acostumbrándose a sentarse mal, terminará por sentarse siempre incorrectamente. Un personaje sobresaliente, de las mal llamadas escuelas escéptica y sofista ¡Y digo mal llamadas!, porque en realidad no merecen ese título de escuela, unos conciliábulos de farsantes que se hicieron mercaderes de la verdad y la razón, cosas éstas tan serias y dignas; uno de sus  principales exponentes fue: Protágoras de Abdera, que profesaba que la verdad absoluta no existe, la relatividad de las cosas y al conocimiento como artificial. A su escepticismo se unía su creencia en el sensualismo, ya que sólo aceptaba sensualidad en el hombre, y siendo que los sentidos cambian y son circunstanciales, él se  basaba en esto para extraer de allí sus explicaciones para atacar la verdad absoluta. Por ello, el sensualismo, que actualmente algunos pensadores modernos, lo quieren hacer ver como una protección contra los desliz de la razón; desde siempre no ha sido otra cosa, que una fuente de escepticismo.

Dentro del escepticismo y el sofismo se desarrolla la teoría de la verdad relativa, la cual no conduce a otra cosa que a la falsedad total, siendo corto el trayecto entre una verdad en apariencia y la no existencia de la verdad. Ya que no es la verdad, una verdad aparente, y esto nos aclara el porqué respondió Gorgias Leontino, otro sofista; que el total de las cosas es igualmente falso, ante lo dicho por Protágoras de Abdera, que el total de las cosas es igualmente verdadero. Gorgias Leontino, sostenía que no existe nada, y que, todavía imaginando que hubiera alguna cosa, no podemos saber de ella, al no estar en el mismo sujeto, el objeto. ¡Y es evidente por supuesto!, que el ateísmo, como consecuencia de este tipo doctrinas, iba en crecimiento. Este razonamiento de Gorgias a andado en lo siglos, y  sobre estos mismo basamentos, llegó el filosofo alemán Friedrich Schelling a fundar su idealismo panteísta. Fueron varios, los personajes que sobresalieron en esta mal llamada escuela sofista, y podemos mencionar a Hipias, Prodico, Calicles, Trasímaco, Diágoras, Critias, Eutidemo… Como hemos dicho, la filosofía se iba deformando lastimosamente, por culpa de lo que produjeron las pasiones  y el pensamiento sofista, como lo son: el escepticismo y el ateísmo; y al amparo de las dañinas enseñanzas, las bases de la sociedad eran socavadas, por la perversión de la moral y las tradiciones ¡Pero afortunadamente!, apareció en escena un ser de excepcionales virtudes, que se enfrentó a tal arruinamiento, que frenó y corrigió tales estragos, subsanando los daños sufridos; alcanzando su objetivo, por la grandeza de sus pensamientos y la naturaleza de su talante; ese gran hombre fue Sócrates, discípulo de Arquelao a quien llamaron el Físico, a causa de ser el primero en traer a Atenas la filosofía natural. Decía Arquelao, que eran dos las causas de la generación de las cosas: el calor y el frío. Fundamentaba su pensamiento, en el siguiente raciocinio: "El agua, cuya liquidez dimana del calor, mientras dura condensada produce la tierra, y cuando se liquida produce el aire. Por consiguiente, aquélla es conservada por el aire, y éste por el movimiento del fuego. Que los animales se engendran del calor de la tierra, la cual destila un limo semejante a la leche, que les sirve de nutrimento. Así fueron procreados los hombres". "Que el mar se contiene en las entrañas de la tierra, por cuyas venas va como colado". "Que el sol es el mayor de los astros".

Y que "el Universo no tiene límites". Fue el primero que dijo que "la voz es la percusión del aire". Sembró la moral, siendo filósofo de las leyes del bien y de lo justo; esto se lo transmitió y fue oído y asimilado por su discípulo: Sócrates, quien lo cultivó, lo incrementó y lo difundió ampliamente. Sócrates, quien implantó a la virtud como un bien supremo, a la que se debe postergar todas las cosas, y que siempre resaltó la moral por sobre todo lo demás; es ejemplo de sensata virtuosidad en sus investigaciones y de suma integridad en su comportamiento; influyó enormemente en la trayectoria de la filosofía griega, elevándola a cimas ignoradas. Su fama a trascendido en el tiempo junto a sus glorias, las cuales sólo se alcanzan, poseyendo excelsas cualidades ¡Lamentablemente! Al igual que Pitágoras, aprendió, admitía y profesaba, lo de la supuesta alma inmortal, tumor maligno, que anduvo  en el tiempo, al igual que sus demás enseñanzas. La arrogancia de los sofistas, que decían saber de todo, la acalló con su humilde frase célebre: "Hoc unum scio me nihil scire" "Una cosa sé, y es que nada sé". En la doctrina de Sócrates, se frenaron y se disolvieron todas las mofas y sarcasmos, que en contra de Dios y la moral se venían haciendo, ya que él puso en el entendimiento y en la devoción a la Divinidad, en el acuerdo del comportamiento y en prever para obtener en diferente vida el galardón por los buenos actos; toda la excelencia de la filosofía humana; Sócrates meditaba concentradamente acerca de la vida, las verdades morales y la Divinidad. Su método de enseñanza era el del diálogo y el intercambio de ideas en discusiones filosóficas con razonamiento y  sentido común, mezclándolo con su ideología y favoreciendo lo de las ideas innatas, al expresar que "pensar es recordar". El sistema socrático produjo ínclitos hombres, entre ellos, al filósofo más ilustre y reputado de la historia, a su discípulo más aventajado: a Platón, quien incrementó profusamente sus ideas y las afianzó de una manera mucho más determinante, en el pensamiento de la gente, al expandirse, más allá de la moral predicada por su maestro; hacia los demás estados del conocimiento humano.

Aparte del intelecto sobre normal que poseía; su talento poético y oratorio y su poder de convencimiento, colaboraron en mucho, a engrandecer su fama.  Platón, siguiendo la tónica de Sócrates, predicaba los mismos pensamientos morales y su método de enseñanza era igual, y seguía la máxima de su maestro: "Sólo sé que no sé nada". Profesaba la eternidad de la materia y enseñaba la creación del universo como el trabajo de una inteligencia Divina, una persona infinita, en la cual se encuentra el argumento, el modelo y la fuente de todo ser finito; nada existiría, nada sería comprensible y nada se probaría; si no existiera Dios. Para él, las ideas eran entidades que llamaba las universales, y que éstas eran origen del conocimiento y de la realidad y de lo que existe en el mundo, predicaba, que la idea es tipo y causa de todo lo que existe en el universo. En las cosas percibidas, hablaba de una diferencia entre el mundo de las ideas y el mundo de los fenómenos. Su ideología era espiritualista, rechazando el sensualismo y buscando siempre de enaltecer la ciencia y el conocimiento. Decía, que la virtud consiste: en imitar a Dios ¡Y nos lamentamos de nuevo!, el mismo tumor maligno de la supuesta alma inmortal; seguía allí, siendo defendido por Platón, con mucha más pasión y devoción que otros profesantes de la misma idea, y la extendió, no sólo a que sobrevivía al cuerpo, sino a que ya existía antes que éste. Incluso, llegó a hablar en algunas oportunidades, de la metempsicosis o transmigración de las almas, que aprendió en las escuelas de oriente y de Italia. Era tal su vehemencia, defendiendo lo de la supuesta alma inmortal que sobrevive al cuerpo mortal, que nos cuenta Marco Tulio Cicerón, que, Cleombrato de Ambracia, luego de leer el texto de Platón que se refiere a dicho tema, quedó tan convencido, que  le nació un deseo vehemente de pasar a la otra vida, y se lanzó al mar desde un alto muro. Profesó también Platón, lo de la trinidad de dioses, sacada ésta; de trinidades de dioses de creencias paganas más antiguas ¡Y lastimosamente!, esta falsa creencia, también se extendió por todo territorio, como cáncer malévolo en metástasis; llegando dicha pérfida mentira hasta nuestros días, y es defendida por muchas personas como una verdad. Junto a Platón, tenemos a su discípulo preferido: el celebre filósofo Aristóteles, quien también se ganó un sitio destacado al lado de su maestro, quien lo nombraba como mente y alma de su escuela por su maravilloso talento. Este filósofo, creó la escuela llamada peripatética, por aprender y enseñar mientras caminaban, en el patio de un sitio llamado Liceo.

Concertaba Aristóteles, el reflexionar metafísico con la observación, su intelecto iba más hacia lo práctico y positivo y menos hacia  lo poético. Lo mismo iba al estado de las ideas, donde meditó y pensó sus celebres categorías; que venía a la tierra y escribía sobre la naturaleza. Aristóteles, es de los filósofos, tanto de ayer como de hoy; quien más ha desempeñado repercusión  en el pensamiento del hombre, ya que desde sus inicios y en el andar del tiempo, transformó en gran modo, el rumbo de las ideas. Difiere de su maestro, en lo de las ideas innatas, y atribuye todos los conocimientos a lo que perciben los sentidos, en los que describe una soberanía emocional, pero afirma que el principio de la verdad se halla en el razonamiento y no en éstos, por lo que no llega a confundir los fenómenos  sensuales con las normas del intelecto, diferenciando las ideas, de lo percibido sensualmente; en concordancia con Platón. Llevó al arte de la dialéctica,  a la más elevada cima, por su perspicacia y fuerza y penetración de pensamiento, analizando con profundidad las ideas y leyes del razonamiento. Profesó que la lógica, es la herramienta indispensable, para todas las otras ciencias, y decía: que la idea viene al espíritu, por una secuencia lógica de otra idea ya presente. Las categorías, que para Aristóteles conciben la acción del intelecto, son diez: sustancia, cantidad, relación, cualidad, acción, pasión, lugar, tiempo, posición y hábito. Para él, el mundo, tanto en la forma como en la materia, es eterno y subordinado a Dios en su actividad, comprobando la existencia de Éste, por el requisito obligatorio, de un impulsor inicial para la formación de las cosas y visualizándolo como una persona necesaria, inteligente, diferente al universo y originadora de la actividad ¡Y con satisfacción!, podemos arriesgarnos a  decir: que Aristóteles, no comulgaba con lo de la supuesta alma inmortal que sobrevive al cuerpo mortal, aunque profesaba la dicotomía cuerpo y alma, teniendo a ésta como un ser completo culminación del cuerpo, pero que se sostenían la una al otro, por lo que iniciaban y finalizaban igualmente, y que a su término, ella pasaba a ser parte del universo al igual que el cuerpo al descomponerse.

Al alma la llamó entelequia, que según Cicerón significa: moción continua. Su idea de Dios, como Regidor y Organizador del universo, era diáfana y segura, como lo podemos comprobar en un pasaje de sus palabras, que conservó Cicerón para nosotros: "Si debajo de la tierra hubieran personas, que hubiesen vivido en confortables y magníficos aposentos, adornados con estatuas y pinturas y provistas de todo cuanto suelen disfrutar los que son tenidos por felices; y que, sin haber salido nunca al exterior, y  habiendo oído hablar de Dios, llegaran a salir del sitio en que se encuentran, a esta superficie en que nosotros moramos; al percibir la tierra, el mar, el cielo, la magnitud de las nubes, la fuerza de los vientos, el tamaño y la hermosura del sol y su fuerza activa, la difusión de la luz por el firmamento; y de noche la bóveda celeste tachonada de astros, las fases de la luna: ora creciente, ora menguante; y todos estos movimientos periódicos, ordenados, permanentes, inmutables; y a la impresionante hermosura de la naturaleza en pleno ¡Por cierto!, que al contemplar semejante espectáculo, exclamarían ¡Existe Dios! , y que el universo es obra de Él"…

   La actividad intelectual causada por Sócrates,  generó varias escuelas, aparte de las de Platón y Aristóteles, y el pulular de distintas sectas ¡Y no era para menos!, conociendo la inquietud de conocer y aprender de los griegos y su  disposición a polemizar. De varias de estas escuelas y sectas, no se puede decir que hayan salido de la socrática ¡Sobre todo por sus claras discordancias!, pero de cierta forma, todas son  producto del estímulo transmitido al pensar de lo griegos, por el intelecto de tan grande hombre. Unos sobresalieron por exagerar el pensamiento de Sócrates, como los cínicos, concebidos éstos por Antístenes. Cínicos significa perro, y como su fundador inició sus enseñanzas en un sitio llamado Cynocerges o templo del Perro Blanco. Éstos, por su actuar insolente y su lengua sarcástica, le hicieron honor a su nombre. Antístenes, exageró al extremo y alteró lo que profesaba su maestro; predicando que el hombre, debe depreciar todas las cosas,  hasta el mismo respeto de las normas de convivencia, cuidando única y exclusivamente de la virtud. Éste se abandonó a la pobreza extrema, descuidando su aseo personal y teniendo por techo el cielo y las manos como vaso para beber. Su discípulo Diógenes, vivía en un barril. En verdad no debemos vacilar en perderlo todo antes que la virtud: riquezas, honores, placeres viles al amor. Pero colegir, como lo harían los cínicos; que vivamos desnudos en un cajón, y beber agua en las manos, desatendiendo las normas de convivencia, siendo supuestamente virtuosos: ¡No!, no es así, se puede cuidar la virtud, sin atravesar linderos que marcan la sensatez y la honestidad.

Una virtud deshonesta e insensata  no es virtud. Los cínicos, en su ponderación, despreciándolo todo, dejaban entrever orgullo y peligrosa vanidad. Toda metódica ponderación, suele llevar a desequilibrio mental…   La escuela de Cirene o cirenaica, concebida por Aristipo, padre del hedonismo; inmerecidamente, discípulo de Sócrates,  y ascendiente de Epicuro; profesaba como exclusiva regla de la verdad  a las impresiones internas, como fuente del entendimiento lo percibido por los sentidos, que la meta que persigue el hombre es la felicidad y que ella estriba en el gozo placentero, y no acepta distinción entre el mal y el bien. Toda enseñanza que profesa el gozo como la verdad, le es idóneo la no existencia de Dios, y terminan por desecharlo, de allí que los alumnos de la escuela cirenaica, acabaron siendo ateos. Hegesias, de la escuela cirenaica, no estuvo muy de acuerdo con sus enseñanzas hedónicas, y profesó claramente, las ventajas de la muerte sobre la vida y sus males; por lo que algunos llegaron a quitarse la vida a causa de lo que él predicaba. Felón, discípulo de Sócrates, cuyo pensamiento ayudó a propagar; fundó la escuela elíaca, la cual tenía especial atención por las cuestiones éticas. Fedón creía que el tipo de personalidad del hombre tenía relación con los rasgos faciales. Esto lo planteó en sus teorías fisiognómicas. Menedemo, seguidor de Felón; formó a los eretríacos, una secta, que en el conocimiento de la verdad, ponían todo el bien, apoyando a Herilo de Calcedonia, que profesó: "La verdad, es el resultado, del conocimiento del bien. Dijo Menedemo:  "Mucho mayor bien es no desear más de lo conveniente".

Euclides de Megara, no el Euclides de Alejandría el geómetra; fue discípulo de Sócrates a riesgo de su vida; pues estaba decretado matar a todo poblador de Megara que entrara en Atenas, sin embargo, él, vistiéndose de mujer; se reunía con su maestro todas las noches y estuvo con él, cuando se envenenó con la cicuta. Euclides, hablaba de la realidad empírica o de la experiencia. Creó la Escuela de Megara, cuya filosofía, era un resumen de las ideas de la  eleática: "el Uno" y, la socrática: "Forma de Dios", y que llamaba "Razón", "Dios", "Mente" y "Sabiduría" entre otras. Esta idea era según él, la verdadera esencia del ser, y tenía la propiedad de ser eterna e inalterable. Profesó "Lo Bueno es Uno, pero podemos llamarlo con muchos nombres, en ocasiones Sabiduría, en otras Dios, en otras Razón." y declaró "lo opuesto de lo Bueno no existe". Esto, pareciera estar en contra, no siendo así; de la realidad empírica de Euclides, en vista de que el no-ser no puede existir sin ser una especie de ser (siendo así, deja de ser no-ser), lo opuesto de lo bueno no puede existir; dado que la esencia del Ser es lo bueno. Pirrón  de Elea, a pesar de hallarse en su pensamiento, dos de los principales de Sócrates, como lo supremo de virtud y sólo sé que no sé nada, se afianzó al extremo en éste último, valiéndose de la dialectica; y no se percató de que, al debilitar la verdad, debilitaba la virtud siendo ésta una verdad. Profesó, que si no había verdad absoluta, no existía moral. Con los pirrónicos, el escepticismo se encumbró, y Timón, discípulo y amigo de Pirrón; llegó al extremo de profesar diez supuestos razonamientos para atacar la verdad, o lo que es lo mismo: diez causas para duda:

1-Contradicciones que se observan entre las sensaciones de los distintos animales. 2-Contradicciones entre los juicios que diversas personas forman sobre un mismo objeto. 3-Contradicciones de la misma persona sobre una misma cosa. 4-Contradicciones en lo mismo teniendo el mismo sentido. 5-Contradicciones en las alteraciones perpetuas que sufren las cosas materiales. 6-Contradicciones en lo variable de las leyes y de los usos. 7-Contradicciones de las mudanzas que nos parece ofrecen las cosas según su posición. 8-Contradicciones de las cosas según la mezcla de sus elementos. 9-Contradicciones de las cosas según las relaciones que tienen entre sí. 10-Contradicciones de las cosas según su novedad, su rareza y su frecuencia. También nombraban  estos argumentos, tropo, mutación, cambio; porque mayormente se basaban en los cambios de los hombres y las cosas… Epicuro, fue el máximo exponente del hedonismo de Aristipo, y su más efectivo difusor. Su lógica era una serie de cánones, guiados a colocar la verdad en los sentidos, sin reconocer la organización intelectual. Profesaba, que únicamente existía la materia y el movimiento y que lo demás era nada. De haber una Divinidad, decía: "Un ser eterno y feliz, ni tiene pena ni la da; ni se indigna, ni ama". De su pensamiento podemos deducir, que a la nada va, una vida futura, y que el fin de todas las cosas es la muerte. La décima de los epicúreos es: "Goza con moderación, para que puedas gozar más tiempo y mejor" "No hay más regla que el placer, calcula a tu manera el valor de su cantidad y calidad"  "Vida corta pero buena". Metrodoro, el alumno favorito de Epicuro; escribió una carta a su ínclito hermano: Timócrates, y ésta quedó como oprobio y prueba de lo denigrante del pensar epicúreo, y podemos ver  parte de ella que dice: "¡Oh que gozo, que gloria para mí haber aprendido de Epicuro el modo de contentar mi estómago! Porque en verdad ¡Oh, Timócrates!, el bien soberano del hombre está en el vientre". La escuela de los epicúreos y sus enseñanzas, fue factor principal en la decadencia de Roma…

Zenón de Citio,  concibió la escuela estoica, este nombre, porque él impartía sus clases desde un zaguán o porche, que en griego es stoa; enseñaba en la Stoa de Pecile de Atenas. Los estoicos profesaban, que aparte de la virtud, nada hay bueno; aparte del vicio, nada hay malo; que la felicidad es la virtud; que la desdicha es el vicio. Para los estoicos, es igual virtuoso que sabio, y éste es feliz pase lo  que pase;  el sabio es imperturbable, nada de lo que pase lo altera ni le quita la serenidad. Su dios era el fuego, el alma un rayo encendido, que siendo libre podía escoger entre sobrevivir al cuerpo o morir con él. La actividad del fuego era la explicación del mundo: la materia en quietud y el fuego que le da actividad, todo acorde con su pensamiento materialista, no hay otra inteligencia que los sentidos al existir únicamente cuerpos; toda la acción va a ellos y de ahí no avanza, ya que no existe otra cosa fuera de esto. Los estoicos, herederos de Euclides de Megara, inauguraron la escuela de lógica más importante de la antigüedad, después de la peripatética de Aristóteles. Zenón de Citio declara, que a partir de los sentidos, es que viene todo el conocimiento; no existiendo las ideas innatas, pero el hombre llega a percibir los conceptos comunes, o sea, los conceptos morales universales; es cuando adquiere sus conocimientos. Según los estoicos, no son innatos los conocimientos lógicos, sino comunes a todo hombre simplemente. Los conocimientos universales, es a través de los sentidos, que el hombre los capta; por medio de un hecho característico, una intuición nos hace verlos…

   La Academia de Platón, que se nombra como vieja; tuvo muchos seguidores, defensores y profesantes en el tiempo, y en ciertos períodos, resaltaron personas, como Arsecilao, promotor de la Academia nueva; y quien profesó: que no existía forma de saber algo ¡Ni siquiera lo de Sócrates!: el "sé que nada sé"; y el fundador de la Academia novísima: Carneades, quien como Arsecilao, profesaba que nada sabemos, ni aún sabemos que no sabemos. La ignorancia de todo, igualmente encerraba, la ignorancia de la ignorancia… Si ahora nos vamos a Roma, nos damos cuenta que, para los romanos, la filosofía era algo desdeñable, por su talante adusto e indócil y su afán de conquista, la veían como algo estorboso, al grado que Marco Porcio Catón, el viejo; llegó a aconsejar que los filósofos fueran echados de Roma; razones por las cuales llegaron bastante retardados a la actividad filosófica. Marco Tulio Cicerón, fue su mayor exponente y divulgador. Él siempre sostuvo, que la belleza, pureza y excelencia de la filosofía, estriba en hablar de los asuntos de importancia con finura y opulencia. Cicerón poseía una gran espiritualidad y sentimientos sublimes, lo que lo guiaba a las cosas grandes, las cosas buenas ¡Y a la verdad!. Cree y defiende la existencia de Dios, exalta la moral, engrandece la virtud ¡Lástima!, que su pensamiento también fue afectado, por el enquistado tumor maligno de la supuesta alma inmortal, y lo defendió como verdad.

Sin profesar el escepticismo, había momentos en que caía en él, en su apasionada búsqueda de la verdad. Lo elocuente, lo elegante al expresarse, lo bien que hablaba, distinguieron siempre al excelso orador… De la misma época de Cicerón, tenemos a Enesidemo, seguidor de Heráclito y su materialismo, explotó el escepticismo y rescató la decena de causas para dudar universalmente de Pirrón. Su filosofía, fue tomada por Sexto Empírico, quien dedicó su mayor tiempo a diferenciar lo fantástico de lo relevante, o sea, entre el aspecto y lo existente, fue un escéptico materialista, de ideología sensualista… Se estaba notando, que la filosofía se estaba disolviendo, y apareció el eclecticismo de Alejandría, que tomaba, de las distintas filosofías; todo lo creíble y todo aquello que podía ser cierto y todo lo que podía conducir a la verdad. Clemente de Alejandría dijo: "Por filosofía no entiendo la estoica, la platónica, la epicúrea o la aristotélica; lo que estas escuelas hayan enseñado de acuerdo a la verdad, a la justicia, a la piedad; a todo esto llamo yo selecta filosofía"… Nace la escuela neoplatónica, encabezada por el ecléctico Ammonio Sacas; con la intención de innovar sobre las enseñanzas de Platón. Declaraba esta doctrina que: "el verdadero entendimiento es aquel, en que el objeto conocido es idéntico con el sujeto que lo conoce". Destacó también, en esta escuela, Porfirio, que la difundió con pasión. Se hizo famoso este filósofo, por su tabla de las cinco predicables: género, especie, diferencia, propio y accidente… La filosofía entre los católicos, ha estado presente desde sus inicios, Agustín por ejemplo, uno de sus filósofos; fue un gran difusor de sus doctrinas, al igual que: Casiodoro, Juan Damasceno, Leandro, Isidro, Idelfonso, Gerberto, Bernardo, Anselmo ¡Y muchos otros!… Éstas doctrinas, difundidas por los llamados padres de la iglesia, y otras sectas apóstatas del cristianismo verdadero, puro y original; se basaron mayormente en el pensamiento de Platón y sus creencias, profesando con dogmatismo y fanatismo vehemente; su dicotomía del alma inmortal aparte del cuerpo físico y lo de la trinidad de dioses; tomaron además, partes del pensamiento de Aristóteles en lo del escolasticismo; y también el eclecticismo, vino a jugar un papel importante dentro de ellas…

Los árabes, como Alkendi, Avicena, Averroes y, los judíos, como Abenezra, Jonás Ben, Maimónide; dedicándose prolijamente a la filosofía; asumieron en su mayoría, los pensamientos de Aristóteles, y los difundieron extensamente en todos los territorios… Los nominalistas, encabezados por Roscelín; profesaban que en los universales no hay ninguna realidad; siendo simples palabras  y sonidos, las universales son ilusorias… Los  realistas por el contrario, le daban realidad a los universales… Las ideas universales, simbolizan un argumento de los objetos, en el que existe una verdad basada en la verdad infinita del razonamiento Divino… El católico Anselmo de Canterbury, tuvo la certeza de la existencia de Dios, fundamentándose en la única idea, de un Ser, infinitamente perfecto, y creó el argumento: "Dios es lo más perfecto que se puede pensar: lo mejor que se puede pensar no está en el solo entendimiento, pues en tal caso se podría pensar una cosa más perfecta, esto es, la que existiese en la realidad. Así resultaría pensada una cosa que no tiene mejor, y que al mismo tiempo lo tiene; esto es imposible. Luego lo más perfecto que se puede pensar existe en el entendimiento y en la realidad". Anselmo profesó, el conciliar la razón con la fe… Uno de los más ingeniosos dialécticos de su tiempo fue Pedro Abelardo, adquirió conocimientos del realista Guillermo de Champeaux y del nominalista Roscelín. Pedro Abelardo, siendo más nominalista; vanidosamente creía saberlo todo a excepción del "no sé". A doctrinas contradictorias buscó de armonizarlas, al concebir el conceptualismo; profesando que las nociones son  aspectos de nuestro entendimiento…

Amaury de Chartres, apoyado por su discípulo David de Dinand, profesaba y defendía el panteísmo o la divinidad del universo… Nos encontramos ahora, para ampliar sobre ella; con la filosofía escolástica: que viene del griego skolhl = escuela ¡O sea!= filosofía escolar. Ésta viene a ser una mezcla de filosofías bizantinas, judaicas y arábigas; cuyas doctrinas y enseñanzas se basaban en su  gran mayoría, en el pensamiento de Aristóteles, como ya mencionamos; y en algunas partes en el de Platón ¡Sobre todo!, en lo del cáncer maligno  y carcomiente, enquistado en su pensamiento: "La supuesta alma inmortal que sobrevive al cuerpo y lo de la trinidad de dioses". Teniendo su apogeo en la época medieval, por lo que se le conoce también por éste nombre: "Filosofía medieval". Difundido en gran proporción; por medio de los escritos de los padres de la iglesia o literatura Patrística, como se le conoce también; este pensamiento centraba su razonamiento filosófico, en que la razón esta supeditada a la fe. Dice que las bases de la verdad se encuentra en Dios, que  la verdad de todas las verdades está en Dios, que la verdad es eterna porque estriba en el conocimiento Divino, también que todas las ideas posibles están en  Dios, o que en Él se haya una idea infinita que vale por todas las existentes o posibles. Reconocían el intelecto, el aprendizaje por medio de los sentidos, pero ponían lo espiritual por encima, estando en contra y descartando la filosofía corpuscular. Como Aristóteles, defendían la materia prima y la forma y la distinción entre ellas. Profesaba la necesidad de la creación por Dios, y que, aunque saben de Dios, era necesario demostrar que existe por medio de la palabra, por lo que no estaban de acuerdo con Anselmo, quien lo demostró por ser perfecto.

Sus inicios fueron entre los siglos nueve y diez de la era común, con la polémica de las universales entre los nominalistas, los realistas y los conceptualistas; luego Anselmo de Canterbury y Pedro Abelardo, después Averroes, Alberto Magno, Buenaventura; pero fue Tomás de Aquino, el que ordenó como doctrina, a la filosofía escolástica, y es de allí para acá, cuando se puede tomar como un método armónico dentro de la religión que él profesó. "La suma Teológica", una de sus obras; es considerada una oda a la espiritualidad del medioevo, que comprende una metafísica de altura, y un pleno manual de moral y de política. Tomás de Aquino, formuló unas demostraciones para probar la existencia de Dios, las mismas son conocidas como "Las cinco vías", siendo que, para lo teológico se suman cinco y para los gentiles se suman cuatro. Tomemos las de lo teológico, que son las siguientes: La primera vía – Sale de la movilidad de los entes. Pero como todo lo que se mueve es movido por otro, el movimiento de un ente nos remite a otro como causa de ese movimiento. Y si este motor es a su vez movido por otro, nos remite a su vez a otro motor, causa de su movimiento. Más como en esta serie no podemos elevarnos al infinito, es necesario afirmar que hay un Primer Motor que no es movido por nada y que es, por tanto, un Motor Inmóvil_ La segunda vía – Sale de la subordinación de las causas eficientes y llega a Dios como Causa Incausada_ La tercera vía – Sale de la circunstancia de los seres y se eleva hasta Dios como Primer Necesario_ La cuarta vía – Sale de los diferentes grados de perfección de los entes y llega a Dios como el Ser Máximo e Infinito_ Y la quinta vía – Sale cuando observa la ordenación a un fin que se percibe en el obrar de los entes para terminar afirmando la existencia de Dios como Supremo Director del Universo. Tomas de Aquino, habló de que la libertad depende de los decretos de la razón; habló del determinismo filosófico, en que los actos humanos los determina Dios y que obedecen a influencias irresistibles…

René Descartes, espiritualista reconocido, creador de la noción del sujeto con su: "Cogito ergo sum" "Pienso luego existo"; puso a la consciencia como primera razón de la filosofía, y que primero hay que ser, para poder pensar. No aceptó lo de la sarta de entidades de los escolásticos, entiéndase trinidad, y al ser lo idealizó con dos esencias básicas: cuerpo y espíritu: siendo el espíritu el pensamiento y el cuerpo la prolongación. Afirmó que poseemos talento natural para saber de Dios. Dijo, que el -sé-, por un proceso matemático; prueba que existe Dios y admite la existencia de un universo creado por Él y regido por las leyes del movimiento… Gasendo, defensor de la filosofía atomista, tuvo muy duros enfrentamientos con Descartes, aunque éste decía, que en la constitución esencial del cuerpo, los átomos eran pequeñas porciones de su extensión. La atomística de sucesivos científicos, se la deben a estos dos personajes… De manera obscena, Hobbes, predicó el sensualismo; y decía, que internamente, el mal y el bien no se diferenciaban en nada y que el dolor y el placer originan tales ideas, que todo hombre es enemigo de otro naturalmente, y que con sus facultades tiene derecho a todo lo que éstas le den… Espinosa, profesaba la existencia de una sola sustancia, negando toda probabilidad de que existiese otra, y que a dicha sustancia la conformaban: pensamiento y extensión. Diciendo como Jenófanes, que "Dios es todo y todo es Dios", lo que es igual a que: existiendo sólo un todo que es un único ser, no hubo creación al ser eterno y uno solo, no hay circunstancias y la libertad no existe; resumiéndolo todo en idealismo – igualdad – dualidad Dios y naturaleza… Melebranche, distinguido alumno de Descartes, defendió los preceptos de su maestro. Sobresalió con su exagerado ocasionalismo. Profesó, que: "Las causas naturales, no son verdaderas causas, únicamente la voluntad de Dios es la verdadera causa". Negó que fuera verdad la causalidad y su alternabilidad entre cuerpo y alma ¡Y no sólo a esto!, sino a todo ente, espíritu o físico…

El líder de los sensualistas de los últimos tiempos es Locke, defendiendo el principio: "nada hay en el entendimiento, que primero no haya estado en el sentido". Dijo: "Pues que nuestro espíritu, no tiene otro objeto de sus pensamientos y raciocinios que sus propias ideas, las cuales son la única cosa que él contempla o que puede contemplar, es evidente que nuestro conocimiento se funda todo entero sobre nuestras ideas". Según él, todas las ideas emanan de la experiencia, y que éstas se originan sólo de la  sensación y la reflexión… El idealista Jorge Berkeley, enfrentó el sensualismo de Locke; y profesó, la no existencia de la materia, diciendo que ésta sólo era un fenómeno de alucinación; decía que lo corpóreo que percibíamos era únicamente ilusiones, existiendo solamente espíritus que lo representaba. Su prueba fundamental, venía a ser la misma de todo filósofo generalmente: ¿Cuál es la vía que lleva, de lo subjetivo a lo objetivo?… Por su obra "Scienza nuova" "La ciencia nueva", merece su puesto en la filosofía Giambattista Vico. Él se propuso relacionar el mundo ideal con el real, poniendo en línea la filosofía -que se ocupa de la verdad- con la filología -que se ocupa de la certeza como método histórico y documental-, en lo que respecta a la investigación del origen ideal del mundo civil… El alemán Gottfried  von Leibnitz, profesó a Dios, como un ser infinito, eterno, inmutable, que sacó al universo de la nada, que es la unidad perfecta. Afirma que las almas racionales son una sucesión de mónadas o unidades equipadas de intelecto, que el universo está vivo o mejor dicho un grupo de entes con vida. Que las monadas o individualidades son centros de fuerzas espirituales con Dios mismo en sus centros. Concibió el sistema  del optimismo, donde para él, el mundo es el más perfecto de los posibles. Su prueba fundamental, es que nada se lleva a cabo sin la suficiente razón. Siendo de las cosas más sobresaliente de su filosofía, lo de la sustancia; Leibnitz, no acepta la unidad de sustancias, sus mónadas son distintas entre ellas.

El universo viene de Dios y en Él se encuentra la causa total de todo, y le Ha dado el entendimiento que poseen, a las mónadas creadas… El escoses David Hume, prosiguió con el idealismo, pero de una forma más dañina que la de Jorge Berkeley. Él, a diferencia de éste, lo disminuyó todo a sencillos portentos subjetivos, desconociendo lo correspondiente a la realidad, no habiendo posibilidad de ciencia alguna, destruyendo el origen de causalidad… Étienne Condillace, a quien no satisfacía el sensualismo de Locke y sus dos principios de las ideas, conceptualizó en un solo principio la vía de las ideas: la sensación. De allí que formuló su teoría de las sensaciones, afirmando que la reflexión es origen de la sensación misma y que por medio de ésta, captada por los sentidos; se adquieren juicios, los deseos, pasiones. Para él, la idea del número abarca únicamente sensaciones… Inmanuel Kant, filósofo alemán, acepta la existencia de Dios, el mundo físico, el orden moral; y los ajusta al sentido común. Pero proclama, que a la razón, le es imposible llegar a ellas; su obra: "La crítica de la razón pura", es en sí, el fallecimiento de la razón. Profesa, que el principio de todo entendimiento está en los sentidos;  que aparte de la capacidad sensitiva, está la conceptiva o entendimiento; que las intuiciones no conciben entendimiento por ellas mismas; que las intuiciones sensibles son componentes de conocimiento si son supeditados al intelecto; que el entendimiento del hombre es discursivo y no intuitivo. Que el conocimiento a priori o a posteriori es una verdad abstracta.

No acepta Kant, la espiritualidad del alma, ni que ésta sea sustancia, y  tampoco acepta, ningún concepto que pruebe la existencia de Dios, ni que Éste sea realidad. Reduce a la ciencia a simples portentos sensibles… Johann Fichte, apoyador y difusor del pensamiento de Kant; profesó, que todo lo que existe y vaya a existir, proviene del yo, o mejor dicho, que nada es realidad únicamente el yo, y que todo diferente a él es simple ilusión, y que el mismo no yo, es el yo, siendo éste infinito e ilimitado, él distribuye en medio del yo y el no yo, el total de lo absoluto: en su "Doctrina de la ciencia". Su argumento es el mismo de Descartes: "yo pienso luego soy"… Friedrich Schelling, profesó, que las leyes de lo ideal, son iguales a las de lo real, que se confirman las unas con las otras, existiendo sólo la unidad total, por lo que la variación es aparente ya sea intelecto o espíritu. El crecimiento de los seres humanos, la consciencia. Todo, todo  es producto de lo total. Dice que filosóficamente, hay dos vías a seguir: salir del objeto, y de éste, extraer el yo. O salir del yo, y de éste, extraer el objeto… Georg Friedrich Hegel, también profesó la unidad total, pero  no como Fichte y Schelling; sino basada en la idea, siendo que la religión, la historia, el espíritu, la naturaleza; es el resultado de la idea,  por su espectacular progreso, al andar del espacio y del tiempo. Declara Hegel, que la idea es una especie de sima sin fin, el ser total metido en él mismo. Hegel, enjuicio a todas las filosofías, a las religiones, al mundo ¡Y hasta a Dios!, creyendo poseer la última palabra y llegó a creerse  juez supremo entre Sócrates y Jesús el Cristo; y pensó: que si Dios hizo todo, él comprendió la creación… Friedrich Jacobi, buscó la manera, de poner freno al atropello de la razón por los filósofos que la profesaban, queriendo destruirla; e interpuso el concepto del sentimiento como único método, siendo éste el sólo camino hacia la verdad, y que con la ayuda de él, lograremos alcanzar verdades trascendentales, como que Dios existe, la Sabiduría Suprema, el libre albedrío, la inmortalidad del alma.

Y el exagerar esto al extremo, queriendo alejarse del  escepticismo, lo que hizo fue caer en él, ya que la razón, como la claridad que nos dio el Creador, no es destruible… Robert de Lamennais, al igual que Jacobi, y por las mismas razones; quiso suprimir la razón, con la diferencia, que colocó a la revelación en su lugar y no el sentimiento; negándole todo mérito a la razón y a sus profesadores; buscando principio a la verdad en la aprobación colectiva. Para él, lo de exactas a las ciencias, no es más que un fútil título, con los que las personas adornan su debilidad. Afirma Lamennais, que hemos acordado entre nosotros aceptar ciertos dictámenes, y todo aquél, que osa salirse del acuerdo, yendo en contra de algunos de esos dictámenes, lo culpan de ir o enfrentarse al sentido común, siendo éste la autoridad del gran número. Las cosas las creen todos, porque las cree cada uno, lo que hace equivocado el razonamiento de Lamennais; éste método de la aprobación colectiva, y su exageración; igualmente lo condujo al escepticismo. El querer exaltar la revelación, acabando la razón no es positivo, ni da buenos resultados ¡Bien lo dijo Leibnitz!, con mucha verdad e intelecto: "Desechar a la razón, para afirmar a la revelación, es arrancarse los ojos para ver mejor los satélites de Júpiter por un telescopio"… M. Cousin, concibió y difundió el eclecticismo en Francia. Profesaba a Dios, pero aclaraba, que su Dios, no era el mismo dios muerto de los escolásticos. Profesa la creación, pero necesaria sin la libertad de Dios y que la expresión de Éste es la verdad. Que únicamente existe una sustancia que es a la misma vez causa  y que: "Dios, no siendo dado sino como causa absoluta, no puede, según él, dejar de producir, por manera que la creación cesa de ser ininteligible, y así como no hay Dios sin mundo, no hay mundo sin Dios". La doctrina de M. Cousin, sin profesarlo en verdad; era ambivalentemente panteísta, ya que caía y entraba en él, según hilaba algunos de sus razonamientos: "El panteísmo destruye la noción recibida de Dios". "El Ser absoluto es triple: Dios, naturaleza, humanidad". "Yo no confundo a Dios con el Universo". "El ser absoluto, conteniendo en su seno el yo y el no yo finito, forma así el fondo idéntico de todas las cosas, uno y muchos a un tiempo: uno por la sustancia y muchos por los fenómenos, se aparece a sí mismo en la consciencia humana"…

Tenemos ahora, al también alemán: Karl Friedrich Krause,  quien para esquivar los señalamientos que le hacían en la Universidad de Gotinga, tildándolo de panteísta, concibió para su doctrina, el nombre de panenteísmo, el cual estriba en un sistema metafísico, que quiere conciliar la inmanencia y la trascendencia de Dios respecto al mundo. Queriendo hacer ver con este pensamiento, que ahora de cierto, sí se había encontrado la verdad y sus respuestas a las cosas, corrigiendo errores y desechando falsos razonamientos de anteriores sistemas y perfeccionándolos a la vez. Pero esta escuela, panteísta de hecho; al igual que todas sus antecesoras alemanas y otras, sólo son, un montón de conjeturas sin argumentos en la realidad. Krause establece, en la idea del ser, a la metafísica, no solamente en lo de existir sino también en lo que entiende, profesando que: "Todos los seres en su conjunto son un ser, o que al ser, lo conforman la totalidad de los seres", con dos manifestaciones: naturaleza: donde está todo lo físico y, espíritu: donde está lo intelectual; siendo las dos infinitas, pero distintas e independientes una de otra y con libertad para realizar su destino y, teniendo su fuente común, que es en donde dicha escuela, halla al Ser Supremo absoluto que lo es todo… El español Jaime Luciano Balmes, autor del texto: "Historia de la filosofía", el cual hemos utilizado, como referencia y fuente bibliográfica; como escolástico que fue; profesó y defendió la existencia de Dios, siendo Éste, espíritu infinito, criador, ordenador y cuidador de todo.

Y como buen católico profesó y defendió, lo de la trinidad de dioses y lo de la dicotomía: alma inmortal, que sobrevive al cuerpo mortal. Él resume su razonamiento filosófico en lo finito y lo infinito, en la esencia y la sustancia. Balmes, como ya referimos; fundamenta su filosofía en la escolástica, sosteniendo que hay cosas que los sentidos perciben, autónomas y libres, sin que intervenga para nada la voluntad en ellas; y que dichas sensaciones nacen de motivos sujetos a una ley imprescindible. Este filósofo profesó la metafísica tradicional y la existencia del alma como sustancia sencilla, al igual que la existencia de Dios, ya que Su inexistencia, es una clara contradicción; pues, al no existir Dios, tampoco existiría la organización del universo, y sólo el mal imperaría; concluyendo que, para la moralidad, es absolutamente necesario que Dios exista, viendo que, la bondad Divina y la bondad moral son recíprocas. Balmes, en todos éstos, sus razonamientos, censuró a los filósofos últimos ¡Sobre todo!, a Inmanuel Kant, por entrarse y profesar el sensualismo nuevamente, y desmintiendo claramente, que éstos hayan aportado o cambiado algo en la escolástica…    En mi entender particular: el que la esencia se identifique con la existencia como un acto puro; le compete a "Jehová" única y exclusivamente y a Su filosofía Divina…

   La filosofía humana, definida por Marco Tulio Cicerón, como "La ciencia de las cosas divinas y humanas y de sus causas", ha traído muchos beneficios materiales a la humanidad, debido a sus cavilaciones en el terreno científico; que han resultado en grandes adelantos tecnológicos. En el terreno social: sus aportes han sido muy pocos, ya que su fin, en esta área es la observación y el estudio, sin intervenir; tal y como lo dijo Pitágoras, al  comparar al mundo con un evento social o deportivo en una plaza, en un mercado, un coliseo o un estadio. Cuando Leonte, le preguntó a Pitágoras:  "¿Qué que eran los filósofos?", y  que  "¿Cuál era la diferencia entre éstos y los otros hombres?". Él le respondió: "A la vida humana, yo la veo, como a una de esas grandes asambleas en que se congregan con gran ostentación y parafernalia las personas; en razón de los juegos públicos de la Grecia; a donde unos van para ganar el trofeo por su coraje, resistencia y habilidad. Otros van, para hacer sus negocios y buscar beneficios, vendiendo y comprando. Otros van, a entretenerse y divertirse, adquiriendo placeres y emociones. Y otros van, que por cierto son los más nobles, no a buscar coronas, ni premios, ni ganancias, ni beneficios, ni diversión, ni placeres, ni emociones; éstos van, a ver y a observar todo lo que se hace y de qué forma se lleva a cabo, asisten a adquirir conocimientos. Así nosotros miramos a los hombres, como venidos de otra vida y naturaleza a reunirse en la asamblea de este mundo: unos andan en busca de la gloria, otros en busca del dinero, otros en busca de placeres; y son pocos los que se dedican al estudio de la naturaleza de las cosas rechazando lo demás. A estos pocos los llamamos filósofos, y así como en la asamblea de los juegos públicos, representa un papel más noble el que nada adquiere y sólo observa; creemos también que se aventaja mucho a las demás ocupaciones la contemplación y el conocimiento de las cosas"… ¡Y esto es así!, porque las veces que la filosofía o los filósofos han intervenido en la parte social, los enfrentamientos y sus resultados han sido catastróficos, comprobando que puede ver pero no tocar, puede tomar la tensión, pero no abrir las venas, y los aprendizajes que han quedado por intervenir, en pensamiento de Jaime Balmes: "Son del mismo género que el de las quemaduras, que nos enseñan desde niños a no tocar el fuego"…

En el terreno moral, espiritual y de verdad religiosa, el aporte de la filosofía es insignificante, o se puede decir que no existe, puesto que, las enseñanzas del  mensaje bíblico  respecto a dichos aspectos, superan por mucho, a los del filosofar de los hombres ¡Y podemos tomar por ejemplo!, lo de que: "Debes amar, respetar y obedecer a  "Jehová" tu Creador por  encima de todo lo demás", o lo de que: "Debes amar a tu prójimo como te amas a ti mismo", o lo de que: "Todas las cosas que quieren que los hombres les hagan, también ustedes de igual manera, tienen que hacérselas a ellos"… ¡El sermón de la montaña! Ese sublime y hermoso sermón, dado por Miguel Arcángel Jesús el Cristo, en el monte de los olivos, supera por demasía, a cualquier razonamiento, mensaje o escrito filosófico del hombre, al igual que el resto de sus pensamientos, consejos, preceptos y cavilaciones… Y si buscamos aportes de la filosofía, respecto a "Jehová", nuestro Dios Padre Creador Todopoderoso, y a todo lo que Él representa; sólo encontraremos descalabros y más descalabros, oscuridad y más oscuridad, ignorancia y más ignorancia…  Dentro de todo este filosofar humano, nos dimos cuenta claramente; que los hombres, al exagerar los métodos, lo que hacían, irremediablemente; era hundirse más en errores garrafales. Hemos visto, que en el andar de los siglos, todos han tratado de explicar al hombre explicándose ellos mismos, desde sus múltiples y diferentes razonamientos filosóficos, al grado de llegar a expresar el absurdo razonar de que no existe la razón, ni la materia, o de que la verdad tampoco existe y que todo es falso. Debemos reconocer sin embargo; que algunos de los personajes citados en nuestro recorrido por la filosofía humana, pudieron estar cerca de los razonamientos que en mi poco entender; yo profeso y expongo, y casi llegaron a encontrar el punto de partida verdadero de lo razonado: Pitágoras, Sócrates, Platón, Aristóteles, Descartes, Leibnitz… Pero el mismo temor y la inseguridad a declarar abiertamente el axioma, que la creación universal fue hecha por "Jehová" nuestro Dios  Padre Todopoderoso, y a reconocerle públicamente a nuestro Creador, el pleno derecho de Autor que tiene sobre su obra, como lo es el universo y todo lo que contiene. Dicho temor e inseguridad, los llevó a divagar y a dar vueltas y vueltas en un círculo vicioso, sin poder dar una respuesta clara, firme y verdadera. ¡Y no sólo era el temor!, muchas veces fue: el no querer quedar ¡Supuestamente!, como unos cómicos, productores de burlas. A no quedar avergonzados por las opiniones de los demás, al hacerlo ver ridículos, por emitir ideas, supuestamente, tan absurdas e increíbles.

Yo personalmente, concuerdo en algunos puntos, con estos filósofos nombrados. Concuerdo completamente en algunos puntos y en otros concuerdo parcialmente. Como por ejemplo con Leibnitz: concuerdo completamente, en lo que respecta, a que el universo ha procedido de "Jehová" por creación; y concuerdo parcialmente: en que todo el universo en un conjunto, pero no un conjunto viviente como él dijo, sino un conjunto simbiótico universal, en que cada uno de sus integrantes, tiene un papel importante que jugar, con respecto a los demás conformantes de dicho conjunto, desde el microorganismo más mínimo, desde la partícula más pequeña como el átomo, hasta lo más inconmensurable, que es "Jehová", nuestro Padre Creador Todopoderoso. Otro aspecto sobresaliente de éstos, lo más grandes filósofos de la historia; es que reconocieron con humildad que no sabían nada, reconocieron su ignorancia ante lo inconmensurable e infinito del universo y Su Creador, a Quien, de una forma u otra, reconocieron como tal  y como el Único Sabio poseedor de todo el conocimiento y todas las ideas.   Al  llegar al final de éste recorrido; al final de este vano razonamiento del hombre; de lo que nos hemos dado cuenta, quedando certificado: es de lo ignorante que somos ¡A pesar del conocimiento científico adquirido por supuesto!, nos damos cuenta que hemos recorrido todo este camino, sólo para convencernos, para comprobar científicamente y que nos quede claro; la ignorancia en que vivimos y lo necia que es la sabiduría humana. Fehacientemente hemos comprobado que es verdad, lo que dice el Creador en Su Palabra Inspirada respecto a la sabiduría del hombre; en la primera a los Corintios uno: diecinueve y veinte, y tres: dieciocho al veinte, y en Proverbios veintiuno: treinta: "Porque está escrito: "Haré perecer la sabiduría de los sabios, y echaré a un lado la inteligencia de los intelectuales". ¿Dónde está el sabio? ¿Dónde el escriba? ¿Dónde el disputador de este sistema de cosas? ¿No hizo Dios necedad la sabiduría del mundo?". "Que nadie esté seduciéndose a sí mismo: Si alguno entre ustedes piensa que es sabio en este sistema de cosas, hágase necio, para que se haga sabio. Porque la sabiduría de este mundo es necedad para con Dios; porque está escrito: "Prende a los sabios en su propia astucia". "Y otra vez: "Jehová sabe que los razonamientos de los sabios son vanos".

"No hay sabiduría, ni ningún discernimiento, ni ningún consejo en oposición a Jehová"… Pero además de esto; también hemos comprobado y nos hemos convencidos plena y claramente; que es el mismo filosofar, investigar, el preguntarse de los seres humanos, la prueba palpable de la existencia de un Dios Todopoderoso; ese eterno preguntarse sin encontrar respuestas firmes lo avala, por no querer el hombre, por su libre albedrío; aceptarlo… Libre albedrío que conlleva a la causalidad… Todos estos pensadores y filosofías que hemos citado, concuerdan en la existencia de una energía, una fuerza, un poder, un algo generador, organizador y conservador de todo. Nos hemos dado cuenta, que durante el andar de todos estos siglos pasados, hasta el día de hoy; los filósofos han sacado a la luz todas las cosas pertinentes ¡O casi todas!, pero el producto que obtuvieron con su filosofar, en consecución de la verdad verdadera, ha sido escaso ¡Y para complemento!, lo poco que consiguieron, está plagado de mentiras y medias verdades. ¡Y puedo asegurar!, que la gran mayoría de estos filósofos ¡Sobre todo los de más renombre!, a pesar de sus muchos estudios, investigaciones y reflexiones, por no darle importancia; no leyeron la Biblia, no estudiaron las Sagradas Escrituras del Creador ¡Y mucho menos investigarla en profundidad!, para aprender tantas cosas de ella ¡Y es lamentable!, porque de haberlo hecho, hubiésemos tenido a un Pitágoras, un Sócrates, a un Platón, a un Aristóteles… Mucho más sabios y defensores cien por ciento de "Jehová" el Creador y de la verdadera verdad contenida en Su Santa Palabra Inspirada; la Biblia ¡Particularmente y muy importante!, se hubieran enterado de que, en el mensaje escrito dejado por el Padre Todopoderoso, no hay nada plasmado, que nos indique lo de una dicotomía o lo de una división del ser humano en dos partes: un cuerpo físico o carnal y una alma inmortal contenida por éste, la cual sobrevive a dicho cuerpo; y tampoco nada que indique lo de una trinidad de dioses que conforman uno, o de un dios conformado por tres personas o esencias; pues en el contenido de las Escrituras Hebrea-Arameas, al igual que en las Griegas-Cristianas; sólo se lee y se ve claramente, que somos un alma viviente, un solo cuerpo, que conformamos una unidad sin división; y es evidente la distinción entre el Padre Creador "Jehová" y Su hijo Miguel Arcángel Jesús el Cristo, como dos personas diferentes y muy bien definidas la Una de la otra; y se habla de algo que pertenece al Todopoderoso, por donde encausa Su gran poder infinito Su fuerza activa y generadora nombrada como espíritu santo, y que Él da parte de ésta, a quien le complazca darla…

¡Ahora bien!, al hablar de la filosofía humana, es casi imposible no hablar de su producto principal: las religiones, creencias y tipos de adoración que han implementado para sus dioses… El filosofar humano, por consecuencias lógicas; es factor desencadenante de las múltiples religiones, tipos de adoración y creencias de los seres humanos. Ambas: religión y filosofía humana; dicen buscar la sabiduría y la verdad, pero en la actualidad sus ideas introductorias son diferentes, puesto que la filosofía humana "cree que". Decir creencia filosófica es decir: "creer que" ¡Y supuestamente ésta!, desvela, descubre y demuestra las cosas a través de la idea, el pensamiento y el concepto. "Creer que" significa considerar real algo cuya existencia no ha sido aún demostrada. Se comprende así que "creer que" es situarse en el interior, acceder al corazón, allí donde la confianza encuentra su alimento… Mientras que la religión humana "cree en". Decir creencia religiosa, es decir: "creer en" ¡Y supuestamente ésta!, revela las cosas, utilizando el lenguaje de la representación a través de mitos, ritos y símbolos. "Creer en" significa "poner la confianza en". Se refiere en general a una persona, una cualidad humana, una divinidad, una entidad genérica. "Tú crees en la ciencia, tú crees en ¿?, él cree en Dios". Se comprende así que "creer en (la existencia de) algo" es quedarse en el exterior de la cosa… No es la noción de Dios, ni de sabiduría, ni de conocimiento, ni de lo verdadero; lo que permite distinguir a la Filosofía de la Religión; el origen de la diferencia está en relación con el criterio de fe y de creencia. En efecto, el filósofo "cree que…", es decir, supone, opina y busca pruebas de su fe a través de la experiencia y los hechos; y la religión "cree en…", sin necesidad de comprobar la verdad de su creencia, puesto que tiene fe en los testimonios de aquellos que han recibido la revelación o a quienes se les ha transmitido una revelación o un dogma, y en su propia vivencia. En la filosofía, existe la fe-opinión-prueba, que lleva de la creencia al conocimiento-convicción, y en la religión se tiene la fe-creencia, que lleva conocimiento basado en el principio de una autoridad exterior.

Pero, a pesar de sus diferencias actuales, es la filosofía humana la originadora de la otra, y paralelamente a ella; fue sembrando en el camino, las semillas de la religión humana y su pronta expansión; y así vemos ¡Aparte de los cientos de miles de ritos y creencias tribales originadas por la generalizada filosofía mágica y supersticiosa!; al hinduismo, al sintoísmo y al budismo originados de la filosofía india; al taoísmo y al confucionismo originados de las escuelas filosóficas chinas; al ateísmo originado de la filosofía griega; en el pensamiento panteísta, escéptico y sofista de Jenófanes, Zenón de Elea, Gorgias leontino, Parménides, Anaximandro, Demócrito y otros; y, al catolicismo y al islamismo originado de la filosofía griega; en el pensamiento de Pitágoras, Sócrates, Platón y Aristóteles y su escolástica ¡Y por supuesto!, todas las formas de adoración y creencias que se han derivado de éstas que son cientos de miles, entre ellas: el ortodoxismo rumano, griego y ruso y el protestantismo o evangelismo luterano, anglicano y calvinista; la chiita o partido, la sunita o tradicionalista, la jareyita o salida, el fundamentalismo islámico dentro de sus diferentes tendencias y cuyo mayores exponentes son los wahabis… ¡Pero tenemos también al judaísmo!, que no entra originariamente en la generalización antes descrita; ya que ellos provienen de un pueblo físico escogido por "Jehová" y dirigido en sus inicios por la Filosofía Divina, pero que después, por su constante actuar desobediente y pecador, mientras generaban su propia filosofía: la cábala o Kabalá; perdió el favor de su Padre Creador ¡Y por supuesto!, la Filosofía Divina, dejo de ser su guía. Este pueblo, durante las gobernaciones de Moisés, Josué, Los doce jueces, Samuel, Saúl, David y Salomón; estuvo conformado por doce tribus, y se llamaba Israel; pero luego de la muerte del rey Salomón se dividió en dos reinos: uno fue el reino del norte conformado por diez tribus, cuyo primer rey fue Jeroboam, quien les hizo dos becerros para que los adoraran como dioses; éstas diez tribus, fueron conocidas luego como samaritanos, ya que siendo su capital Samaria por más de doscientos años, a toda la región ocupada por dichas tribus; se le llegó a llamar por ése nombre… Y el otro el reino del sur, cuyo primer rey fue Rehoboam, hijo de Salomón; conformado por la clase sacerdotal: los levitas y, dos tribus: la de Benjamín y la de Judá, y de ésta, les viene el nombre de judíos. Este pueblo lo escogió el creador, como la representación física inferior incompleta del pueblo espiritual superior y completo ¡Y el tipo de adoración y sacrificios físicos inferiores incompletos que ellos efectuaban! Era sólo la sombra del único y exclusivo sacrificio propiciatorio de Jesús el Cristo y la instauración de la adoración espiritual completa y superior.

Como se puede leer en la Biblia en la Primera carta de Juan dos: dos, y en la carta a Los Hebreos diez: doce que dice: "Y él es un sacrificio propiciatorio por nuestros pecados, pero no solo por los nuestros, sino también por los de todo el mundo". "Pero este [hombre] ofreció un solo sacrificio por los pecados perpetuamente, y se sentó a la diestra de Dios"… ¡O sea!, que las leyes dadas al pueblo de físico de Israel, el tabernáculo, el templo y, las instrucciones de cómo debían adorar al Todopoderoso y los sacrificios y ofrendas que debían hacerle; fue un modelo físico inferior e incompleto del modelo espiritual superior y completo. Es decir: que a la llegada del Mesías a instaurar el nuevo pacto espiritual, todos los judíos deberían haberse convertido al cristianismo de inmediato; visto que en las escrituras Hebreas-Arameas; está plasmado con suma claridad, cómo el viejo pacto inferior e incompleto, iba a ser reemplazado con el nuevo pacto superior y completo. Los judíos leían y releían diariamente las escrituras, y tenían que saber y entender todo el mensaje, y de las tantas profecías dichas por "Jehová" en Su Santa Palabra Inspirada, con respecto a Su hijo Miguel el Arcángel Jesús el Cristo; como la que se lee en Isaías sesenta y uno: uno y dos y en Lucas cuatro: dieciséis al veintiuno: que el espíritu de "Jehová" está sobre él, y que fue ungido y enviado para declarar las buenas nuevas a los pobres y la libertad a los cautivos, para proclamar el día de Dios y de Su venganza… La que se lee en Miqueas cinco: dos, y se cumplió, como lo podemos ver en Lucas dos: cuatro al once, y en Juan siete: cuarenta y dos: ya que nació en Belén… Que vino para llevar nuestras enfermedades, lo dice: Isaías cincuenta y tres: cuatro; y vemos su cumplimiento en Mateo ocho: dieciséis al diecisiete… Que entraría en Jerusalén sobre un pollino de un asna, y que sería aclamado como Rey, y como uno que viene en nombre de "Jehová", lo dice: Zacarías nueve: nueve, y Salmos ciento dieciocho: veintiséis; y vemos su cumplimiento en Mateo veintiuno: uno al nueve, en Marcos once: siete al once, en Lucas diecinueve: veintiocho al treinta y ocho, y en Juan doce: doce al quince…

Que sería atravesado, que moriría por sacrificio para quitar pecados, que sería sometido a juicio y condenado, que sería contado entre los pecadores; lo dice: Isaías cincuenta y tres: cinco al doce, y vemos su cumplimiento en Mateo veintisiete: cuarenta y nueve, en Mateo veintisiete: cincuenta y siete al sesenta y ocho, en Mateo veintisiete: uno, dos y once al veintiséis, en Mateo veintisiete: doce al catorce, en Lucas veintidós: treinta y siete, y en Mateo veintiséis: cincuenta y cinco al cincuenta y seis… Que echarían suertes por sus prendas de vestir, lo dice: Salmo veintidós: dieciocho, y vemos su cumplimiento en Juan diecinueve: veintitrés al veinticuatro… Que le darían vinagre y hiel, lo dice: Salmo sesenta y nueve: veintiuno, y vemos su cumplimiento en Marcos quince: veintitrés y treinta y seis… Que no le romperían los huesos, lo dice: Salmo treinta y cuatro: veinte, y vemos su cumplimiento en Juan diecinueve: treinta y seis y treinta y tres… Que sería enterrado con los ricos, lo dice: Isaías cincuenta y tres: nueve, y vemos su cumplimiento en Mateo veintisiete: cincuenta y siete al sesenta… ¡Y así muchas otras señales proféticas!, que los judíos tenían en sus manos para identificar al enviado del Dios Creador… Como la ejemplarización, entre otras; que se llevó a cabo con Jonás, quien estuvo tres días y tres noches en el vientre de un enorme pez; según el libro de Jonás uno: diecisiete; para escenificar la muerte y resurrección del Mesías al tercer día; como el mismo lo pronosticó en Mateo doce: treinta y nueve al cuarenta y uno; y en Mateo dieciséis: cuatro… ¡Pero sabemos también!, que el pueblo escogido por "Jehová"; desde los primeros momentos que fue apartado para Él; fue pecador y de dura cabeza, y rechazaba al Todopoderoso y se apartaba de sus leyes constantemente, al grado que, para cuando se cumplieron las escrituras con la llegada del Mesías, ya estaban divididos hasta en seis facciones ¡Y se han seguido dividiendo en el transcurso de los siglos! "Jehová" les había advertido a los judíos ¡Y lo hizo infinidad de veces!, que para permanecer protegidos por Él, deberían ser fieles y obedientes y cumplir con todas las cosas escritas en Su Palabra Inspirada; y que de otra forma los abandonaría ¡Y así lo hizo definitivamente!, para cuando estableció Su nuevo pacto espiritual ¡Sobre todo!, por que no aceptaron dicho pacto obedientemente y con humildad.

De allí que a través del tiempo, esta creencia se asimiló a la generalización de las religiones antes dicha, y está actualmente al mismo nivel de las otras religiones, creencias y forma de adoración, al haberse plagado y nutrido, aparte de la Kabalá; de las diferentes filosofías humanas, especialmente de la griega; y tomemos como ejemplo a Filón de Alejandría, a Abenezra y a Moisés Maimónides, tres de sus filósofos, que asumieron los pensamientos de Aristóteles y sus maestros, lo mezclaron con el judaísmo y los difundieron a gran escala. Tenemos que destacar, que La Kabalá, que en hebreo significa: "lo recibido"; teniendo como filosofía central que ella es el único método para alcanzar el mundo espiritual y conocer el árbol de la vida y la satisfacción humana; dice que a través del valor numérico de las letras se puede adivinar; tiene su propio horóscopo: el de los setenta y dos ángeles y esta llena de magia, adivinación y misticismo y, ha servido de base a la astrología y a las demás ciencias ocultas. Y sabemos lo execrable de estas cosas y como las odia "Jehová", tal como se lee en Su Sagrada Palabra en: Levítico diecinueve: veintiséis, en Deuteronomio dieciocho: diez y catorce, en la Segunda de Reyes veintiuno: seis, en la Primera de Samuel quince: veintitrés: "No deben buscar agüeros, y no deben practicar la magia. No debería hallarse en ti nadie que haga pasar por el fuego a su hijo o a su hija, nadie que emplee adivinación, practicante de magia ni nadie que busque agüeros ni hechicero". "Porque estas naciones que vas a desposeer solían escuchar a los que practican magia y a los que adivinan; pero en cuanto a ti, Jehová tu Dios no te ha dado nada semejante a esto". "E hizo pasar a su propio hijo por el fuego, y practicó la magia y buscó agüeros e hizo médium espiritistas y pronosticadores profesionales de sucesos. Hizo en gran escala lo que era malo a los ojos de Jehová, para ofenderlo". "Porque la rebeldía es lo mismo que el pecado de adivinación, y el adelantarse presuntuosamente lo mismo que [usar] poder mágico y terafim"…

Las múltiples religiones, tipos de adoración y creencias de los seres humanos; por ser pensadas e ideadas por el hombre y para el hombre, no están acordes con la única y verdadera forma de adoración que "Jehová" indicó en Su Santa Palabra ¡Y que por supuesto! Él no las apoya y las rechaza, comenzando por que rompen con la regla Divina de la unicidad: Un sólo Dios Creador Todopoderoso: "Jehová"; un sólo mediador entre Él y Su creación: Miguel el Arcángel Jesús el Cristo; un sólo mensaje guiador: Su Palabra Inspirada "La Biblia" ¡Y por ende! Una sola forma de adoración única y exclusiva hacia Él: la cual está muy bien explicada en "Las Sagradas Escrituras"… ¡Ahora bien! ¿Cómo reconocemos, dentro de esa múltiple y abrumadora cantidad de formas de adoración; la única y verdadera que es acepta a nuestro Padre Creador?… Bueno ¡Es muy fácil!… La misma Biblia, como ya se dijo, es la que nos ayuda a encontrarla y a reconocerla. En ella, por sus indicaciones y claras señas; identificamos a todas las falsas religiones y engañosas formas de adoración y creencias que "Jehová" rechaza y execra; a la vez que nos ayuda a ver con toda claridad, a la que en verdad cumple con los requisitos exigidos por el Creador Todopoderoso y Sus mandatos; siendo ésta la única aceptada y aprobada por Él… Comencemos esa identificación, de una y otras; Y leamos lo que dice la Biblia en: Lucas seis: veintiséis: "¡Ay, cuando todos los hombres hablen bien de ustedes, porque cosas como estas son las que los antepasados de ellos hicieron a los falsos profetas!"… ¿De cuáles religiones los hombres hablan bien y comparten plácidamente con ellas?… Leamos lo que dice la Biblia en la Segunda a Timoteo cuatro: tres y cuatro: "Porque habrá un período en que no soportarán la enseñanza saludable, sino que, de acuerdo con sus propios deseos, acumularán para sí mismos maestros para que les regalen los oídos;  y apartarán sus oídos de la verdad, puesto que serán desviados a cuentos falsos". Leamos lo que dice Mateo siete: quince al veintitrés: "Guárdense de los falsos profetas que vienen a ustedes en ropa de oveja, pero por dentro son lobos voraces.  Por sus frutos los reconocerán. Nunca se recogen uvas de espinos o higos de cardos, ¿verdad?  Así mismo, todo árbol bueno produce fruto excelente, pero todo árbol podrido produce fruto inservible; un árbol bueno no puede dar fruto inservible, ni puede un árbol podrido producir fruto excelente.

Todo árbol que no produce fruto excelente llega a ser cortado y echado al fuego. Realmente, pues, por sus frutos reconocerán a aquellos [hombres]. "No todo el que me dice: "Señor, Señor", entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día: "Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre expulsamos demonios, y en tu nombre ejecutamos muchas obras poderosas?".  Y sin embargo, entonces les confesaré: ¡Nunca los conocí! Apártense de mí, obradores del desafuero"… ¿Qué religiones, creencias, formas de adoración y, sus seguidores; reúnen para sí falsos profetas y no soportando la saludable verdadera verdad y alimentando sus propios deseos; producen frutos podridos por su actuar hipócrita, manipulador e interesado, enseñando, creyendo y haciendo creer al hombre; lo que el hombre quiere o le conviene aprender, creer, practicar y predicar ¡Y no lo que el Ser Supremo preceptuó en la Biblia!, regalándose y regalándole los oídos a sus adeptos, para su conveniencia y, preservar sus intereses particulares y personales ¡Siendo lo de menor importancia para ellos!, la obediencia a "Jehová" el Creador y hacer Su voluntad?… ¿Qué religiones, creencias, formas de adoración y, sus seguidores; escandalizan y se ufanan públicamente clamando al Señor Jesucristo profetizando, expulsando demonios, ejecutando obras poderosas en el nombre de él?… ¿Quiénes muestran un exterior limpio, pero por dentro están y son asquerosos?… Leamos lo que dice la Biblia en Mateo cinco: once al doce: "Felices son ustedes cuando los vituperen y los persigan y mentirosamente digan toda suerte de cosa inicua contra ustedes por mi causa. Regocíjense y salten de gozo, puesto que grande es su galardón en los cielos; porque de esa manera persiguieron a los profetas antes de ustedes".

Leamos lo que dice Mateo diez: diecisiete, dieciocho, veintidós y veinticinco, Mateo veinticuatro: nueve y Lucas seis: veintidós: "Guárdense de los hombres; porque los entregarán a los tribunales locales y los azotarán en sus sinagogas ¡Sí hasta los llevaran ante gobernadores y reyes por mi causa, para testimonio a ellos y a las naciones. Y ustedes serán objeto de odio de parte de toda la gente por motivo de mi nombre. Le basta al discípulo llegar a ser como su maestro y al esclavo como su señor. Si al amo de la casa le han llamado Beelzebub ¿Cuánto más llamarán eso a los de su casa". "Entonces los entregarán a tribulación y los matarán, y serán objeto de odio de parte de todas las naciones por causa de mi nombre". "Felices son ustedes cuando los hombres los odien, y cuando los excluyan y los vituperen y desechen su nombre como inicuo por causa del hijo del hombre"… Leamos lo que dice Juan quince: dieciocho al veintiuno: "Si el mundo los odia, saben que me ha odiado a mí antes que los odiara a ustedes. Si ustedes fueran parte del mundo, el mundo le tendría afecto a lo que es suyo. Ahora bien, porque ustedes no son parte del mundo, sino que yo los he escogido del mundo, a causa de esto el mundo los odia. Tengan presente la palabra que les dije: El esclavo no es mayor que su amo. Si ellos me han perseguido a mí, a ustedes también los perseguirán; si ellos han observado mi palabra, también observarán la de ustedes.  Mas todas estas cosas las harán contra ustedes por causa de mi nombre, porque ellos no conocen al que me ha enviado"… Leamos lo que dice la Segunda a Timoteo tres: doce: "De hecho, todos los que desean vivir con devoción piadosa en asociación con Cristo Jesús también serán perseguidos"… ¿A los integrantes de cuál creencia religiosa o forma de adoración; los vituperan y persiguen y dicen toda clase de falsedades hacia ellos?… ¿A los profesantes de qué religión, a causa del nombre de Dios y de su hijo; fustigan, entregan a los tribunales, a gobernadores y a reyes ¡Y hasta han llegado a matarlos?… ¿Los seguidores de qué forma de adoración, viven en el mundo pero sin mezclarse con el mundo; y son odiados por la mayoría de la gente y los llaman Satanás, demonios y representantes del Diablo?… ¿Los integrantes de qué organización religiosa, son felices y se sienten bien, al ser rechazados por el mundo y recibir de éste, vituperios, humillaciones, maltratos, sufrimientos y todo tipo de males?…

Partes: 1, 2, 3, 4
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