La perversidad polimorfa del narcisista patológico (NP): Una síntesis

"Desde la época del caudillo y del tirano, que tanto abundaba en nuestros países latinoamericanos, nos hemos acostumbrados a que el presidente, el macho alfa soberano que se asienta en el solio de nuestros países, sea macho. Pero, macho, en todo el sentido cabal y vulgar de esta palabra. Tan macho que, cuando, en elecciones pasadas para la República Dominicana, se puso en duda la masculinidad de un candidato, el oponente — conocido por sus asperezas "masculinas", su apodo bravucón, y carencia de tacto y pulimento cultural, se hacía en público la pregunta retórica que esperaba destruiría al oponente: "¿Es verdad que él es pájaro?"

"Pájaro siendo, en la vernácula dominicana, lo equivalente al hombre homosexual. Lo triste para el atacante insensato fue que sus ataques burdos resultaran en que el "pájaro" presumido le propinó al macho una paliza electoral". FEFL en: La presidencia como símbolo del narcisismo fálico femenino: Una exégesis psicosexual

Leer más: http://www.monografias.com/trabajos59/presidencia-narcicismo-falico-femenino/presidencia-narcicismo-falico-femenino#ixzz4BxyBvoT3

¡Abracadabra…!

Por algún tiempo hemos registrado públicamente nuestras reacciones tan sorpresivas como sorprendentes, e incluso negativas, acerca de la contienda preelectoral norteamericana del año 2016.

Durante este período de tiempo, que parece haberse extendido por toda una eternidad, hemos tenido una oportunidad valiosa para tratar de conceptualizar de novo ese defecto trágico del desarrollo del ego que llamamos el narcisismo.

Para proporcionar bases a mis reflexiones hice una revisión somera de mis artículos acerca del narcisismo publicados únicamente en el portal monografías.com, encontrando 109 ponencias que se relacionaban directamente al mismo. (http://www.monografias.com/cgi-bin/search.cgi?query=narcisismo%20larocca).

Además de lo antedicho, existen en https://www.amazon.es/ y por todo el internet un sinnúmero de publicaciones en diferentes lenguajes, que demonizan o que ensalzan este término. Asimismo, como resultados de las investigaciones acerca de este rasgo de la personalidad llevadas a cabo por el destacado psicoanalista Heinz Kohut hemos tenido la oportunidad única, personal y privilegiada, de alcanzar el impacto negativo que el narcisismo desenfrenado puede ejercer como complicación o, como mecanismo que debemos — como terapeutas — reducir, porque trastorna la progresión sin trabas de toda psicoterapia psicoanalítica.

Como parte de este artículo, que proponemos sea un ejercicio en recompilar previas ponencias del autor, y como al concluir proyectamos agregarlo, a otros tantos que hemos escrito en aspectos de técnica y proceso de la terapia, utilizaremos ejemplos clínicos intercalados durante su evolución para ilustrar conceptos y ejemplos parciales extraídos de casos que hemos tratado o supervisado.

¡Adelante, pues…!

Eco y Narciso por John William Waterhouse

Como elemento básico a esta presentación, a continuación, reproducimos literalmente los criterios diagnósticos de la clasificación DSM-IV-TR sobre el trastorno narcisista de la personalidad:

A. Un patrón general de grandiosidad (en la imaginación o en el comportamiento), una necesidad de admiración y una falta de empatía, que empieza al principio de la edad adulta y que se da en diversos contextos, tal como lo indican cinco (o más) de los siguientes ítems:

  (1)    un sentido grandioso de la propia importancia

(2)    preocupación por fantasías de éxito, poder, brillo, belleza o amor ideal ilimitados

(3)    cree que es especial y único y que sólo pueden comprenderle, o sólo debería relacionarse con, otras personas (o instituciones) especiales o de elevado estatus

(4)    exige una admiración excesiva

(5)    tiene una sensación de "estar en su derecho", es decir, expectativas poco razonables de recibir un trato de favor especial o la anuencia automática con sus expectativas

(6)    tiende a la explotación interpersonal, es decir, saca provecho de los demás para lograr sus propios objetivos

(7)    carece de empatía, es decir, es incapaz de reconocer o identificarse con los sentimientos y las necesidades de otras personas

(8)    a menudo tiene envidia de los demás o cree que los demás le tienen envidia

(9)    presenta actitudes o conductas arrogantes o soberbias.

(http://www.trastornosdelapersonalidad.es/narcisista.html).

Persistencia de la memoria por Salvador Dalí

Jacinto

Se presenta a la consulta solicitando la terapia para resolver un patrón de larga persistencia de problemas de fallos de integrar relaciones de autoridad en su vida, esencialmente con figuras paternas. En gesto de bravuconería psicológica expresa desde el principio de la terapia, el resentimiento que guarece almacenado en su mente por el rechazo recibido de sus dos progenitores.

A los cuarenta y nueve años de edad ha contraído nupcias dos veces, admitiendo que sus matrimonios fracasaron porque, en su opinión, él es (y ha sido) muy bueno y tolerante con sus cónyuges, a quienes proporciona lujos en exceso.

Dos días dentro de la terapia toma una sorpresiva e imprevista vacación, amenazando cesar el tratamiento, porque siente que le impone muchas demandas emocionales.

La esposa de turno se presenta con él a una sesión, donde lo acusa de "no querer ponerse bien", como hiciese en dos previas ocasiones donde tratara y abortara la terapia.

Mientras esto ocurre, cambia caprichosamente los horarios de sus citas, espera concesiones especiales para su asistencia, pospone pagos de sus honorarios, los que retiene con vagas excusas, y, finalmente, acusando a sus jefes y al clima de la ciudad donde reside, por todas sus miserias, abandona el tratamiento, exclamando: ¡Ahora vendrán las represalias!

Desde el principio el terapeuta se percató de ciertos rasgos diagnósticos exhibidos por parte del paciente. Las reacciones de formación eran frecuentes, no se amilanaba en exponer aspectos dolorosos de su vida, restándoles importancia. Esperaba del terapeuta tratamiento privilegiado por haber sido referido por un amigo prestigioso de ambos y vacilaba entre una grandiosidad exagerada de sus contactos gubernamentales, mientras dimitiera sus dificultades en avanzar políticamente en una falta de comprensión de sus capacidades por parte de sus superiores y envidia mezquina procedente de sus envidiosos colegas.

Wilma

Abogada picapleitos, miembro de una firma especializada en el manejo de casos donde hubiese injurias personales o pérdidas monetarias de algún tipo. Una de esas firmas que en los Estados Unidos muchos llaman "cazadoras de ambulancias". Firmas que, como acostumbran los taxistas, cargan a la cuenta del cliente por visitas y consultas telefónicas.

Desde el principio hace un denodado esfuerzo a controlar los tiempos para sus citas haciendo llamadas de supuestas urgencia para discutir temas insubstanciales y para evitar pago por horas utilizadas fuera de las establecidas, terminando las sesiones así concertadas con un estribillo común: "gracias por su tiempo doctor…" (Como si el tiempo por ella usado fuera concesión generosa del terapeuta). Además de ese gesto de manipulación no-tan-sutil, todo lo que en la terapia transcurre lo comenta con familiares cercanos y espera que, cuando ella lo decida, se ordene la comparecencia en las sesiones de un esposo — psicólogo clínico — cuyo interés en las mismas fuera escaso.

Se sorprende, cuando se le informa que son inaceptables sus deseos de involucrar como participante y consejero activo en su tratamiento a un hermano médico cuya especialidad es la patología clínica y cuyos comentarios, a través de ella, acerca del uso de ciertas medicinas son inapropiados en el mejor de los casos. Lo que diese fin a la terapia por decisión del terapeuta.

Celeste

Madre de una adolescente que, luego de participar en unas sesiones de enviar a sus amigos, selfies de ella en estado de desnudez incitante, escapó el hogar que comparte con un hermano menor y padrastro para ir a donde el padre natural quien no la aceptara. Y que, resiente que su propia mamá, usa los dineros de regalo recibidos para su cumpleaños para comprarse cosméticos para el uso propio.

Cuando se trata de cumplir con sus obligaciones adquiridas para proveer "el lujo" (como ella y el esposo la califican) de la terapia, la pareja promete pago regular de la misma, mientras intentan circunvalar el proceso de los honorarios y de la proscripción de mantener cuentas pendientes, afirmando con sonrisa tímida y aserciones insulsas ("mi esposo y yo no somos así. Siempre pagamos…") evitando hacer lo que nunca hiciesen: pagar.

Kim, santa patrona de los selfies…

En estos ejemplos iniciales hemos destacado comportamientos que oponen la terapia y su progresión sin obstáculos desde el principio, y que minan las bases del llamado "contrato terapéutico" que indica y señala las obligaciones propias de la díada participante en el proceso curativo.

Entra el narcisismo al tablado

El narcisismo existe en una variedad de matices dentro de las personalidades individuales y se expresa muy a menudo como expresión tangible de las resistencias, las que son partes inseparables del ejercicio terapéutico.

Habiendo remontado las resistencias iniciales que erigen ciertos pacientes, el terapeuta experimentado queda a cargo de facilitar el proceso de la terapia estructurando las bases ideales para la progresión del mismo.

Diana

Ejemplo de otro tipo de resistencia, fue la erigida por esta joven mujer de 29 años de edad que temía confrontar ciertos hechos que hubiese ocultado a sus padres cuando la enviaran a una academia europea a aprender artes gráficas y que, en lugar de registrarse en la institución de estudios avanzados dilapidó los fondos provistos en viajes de placer a los que invitara amigos circunstanciales sin ninguna escrupulosidad asociada.

Para comenzar la terapia de tres sesiones semanales, produjo una veintena de lienzos que esperaba que el terapeuta evaluara por méritos técnicos y que impedían el progreso del análisis de contenido en las sesiones. Incluso, en una ocasión incluyó inesperadamente amigos de su juventud remota para que ellos dieran su veredicto acerca de quién fuese ella durante los años de su adolescencia turbulenta.

Las resistencias en la terapia

La resistencia constituye base de toda terapia donde emerge como elemento narcisista del temor del paciente a enfrentar fantasmas inconscientes que residen reprimidos en los recovecos de un pasado dinámico.

Shylock

José Luis

Suministra el ejemplo de quien llega a la terapia motivado por el impacto derivado por haber escuchado y visto los programas radiotelevisivos de este autor.

Escribe, describiendo en el contacto inicial, una relación marital desdichada que lo "obliga" a la infidelidad conyugal por la falta de interés demostrada por la esposa en asuntos de intimidad sexual. Entonces, acepta sin vacilar, comenzar una terapia con miras a la resolución de sus conflictos.

Durante la misma examina sus medios económicos, descubriendo que sería mejor no emprender un proceso que para él resultaría costoso e inaccesible.

Lo que no impide que complete un mes de terapia intensiva, confesando al final que tendrá que pagar "cuando pueda", "algún día" en un futuro incierto.

El asunto de los honorarios en la terapia

Algo acerca de lo que los médicos no aprenden durante su entrenamiento es lo que respecta a los pagos de honorarios debidos por servicios proporcionados.

Siendo la ciencia médica un ejercicio humanitario y la medicina un sacerdocio secular se torna aparente que la psicoterapia puede interpretarse como si fuera el usufructo de una "amistad comprada". Lo que asemeja una forma de prostitución tipo geisha.

Quizás en ese aspecto se asemeja a lo que nos "venden" los politicastros que siempre algo ficticio prometen…

En este aspecto único del ejercicio de esta profesión, el narcisismo adquiere las dimensiones de un pacto faustiano.

Dentro de lo mismo puede instaurarse el desarrollo de una dependencia mutuamente hostil que, ambas partes (transferencia y contratransferencia) tienen que superar para poder completar el proceso felizmente.

El elemento político y la terapia

El proceso político se puede confundir con el transcurso de la terapia porque en ambos se encuentran promesas de la existencia de alguien (el candidato) que si es electo mejorará la vida de quienes lo eligen, o de un terapeuta como paladín implacable contra las vulnerabilidades que los conflictos del pasado han causado generando ansiedades al paciente.

Visto de esta manera, las elecciones del 2016 fueron gestas libradas por defensores fortuitos y meretricios en beneficio dudoso de la nación norteamericana.

Todos aspiramos a vivir vidas más estables y felices sin necesidad de las intervenciones de los políticos.

Las elecciones del 2016: Tiempos aciagos para los políticos norteamericanos como sus beneficiarios económicos directos

De Hillary Clinton, su adversario por la candidatura del mismo partido Bernie Sanders, dijo: "No sé de qué puede esa mujer hablar por una hora para que le paguen cuatrocientos cincuenta mil dólares por una charla. Tal vez es lo que quienes le pagan, esperan que de ella obtendrán como presidenta, haciendo, con el marido, un arte de lo que significa el enriquecerse de la política con la ayuda de Wall Street…"

Prosiguiendo

De Donald J Trump, ni hablar, ya que personifica un narcisismo tan desenfrenado y ciego que no puede distinguir (como dicen los americanos) los árboles por la foresta (cannot tell the forest for the trees…).

Todos en el mundo estadounidense están conscientes del dolo que utiliza la NRA en su financiamiento de las campañas electorales de los congresistas. Tan arraigados son los argumentos supuestamente patrióticos de dicha asociación que nadie contesta (o se atreve a hacerlo) la legalidad de sus acciones presumidamente patrióticas en defensa de preservar la independencia de esa estuprada nación.

El narcisismo profesional

En una ocasión, y, cuando revisaba la bibliografía propia para añadirla a un artículo mío, descubrí con repugnancia y desmayo que había sido publicado en su formato inicial como curso ofrecido en el portal mailxmail.com, por un profesor de derecho peruano.

El artículo Freud: Un hombre para todas las épocas, había sido publicado en monografías.com desde donde el plagiador en cuestión, lo encontrara, lo pusiera bajo su nombre y lo enviara al portal antedicho.

Cuando le escribí demandando explicación, como buen leguleyo evitó la confrontación, correspondiéndome a mí demostrar mi "inocencia".

Como resultado, no sólo permití que el artículo siguiese apareciendo en el portal mencionado, sino que a ellos contribuí unos doscientos cursos adicionales bajo mi signatura.

El otro tiene que ver con una monografía destacada que una persona ignota me acusara de haber plagiado de ella. Esta situación se resolvió sin mayores dificultades debido a la inverosimilitud de los argumentos por la culpable de las acusaciones empleados.

En esta coyuntura, debemos pausar antes de llevar esta tesis a su conclusión final.

En resumen

Si bien es cierto que el narcisismo puede representar un aspecto benigno y cuando es primario constituye un aspecto del desarrollo de la personalidad, no lo es cuando subyace los comportamientos de seres quebradizos que, como son muy a menudo los políticos, lo utilizan para esgrimirlo como arma de seducción para burlar al votante.

¿Cómo es que los contrincantes en toda contienda política prometen cambios (por nadie nunca hechos) para mejorar los destinos de una nación?

Obama falló en sus promesas y — como veremos Hillary no hará nada mejor cuando su gestión, finalmente concluya. Ya que sus mecenas de Wall Street no le permitirían hacerlo.

En cuanto a Trump. Este extraño individuo dotado con un ego descomunal, no puede realizar lo que dice y lo que persiste en decir sin que la realidad se lo impida. En ello comparte un rasgo con Kim Jong-un. El líder norcoreano con la sonrisa fija, la obesidad crónica, el cigarrillo en mano y los descalabros extraordinarios.

Para explicar las condecoraciones del héroe de mami visite: www.dailymail.co.uk/debate/article-1371730/Prince-Andrews-seven-medals-The-Duke-Yorks-gongs-revealed.html

Para mejor comprender las acciones de nuestros personajes consuetudinarios nos parece útil analizar los comportamientos de aquellos (que como los herederos de tronos) acostumbran, como el "Príncipe" Andrew de la GB, a esperar el privilegio que el nacimiento le asignara sin haber obtenido nada en su vida improcedente, por medio del esfuerzo y del trabajo.

Con estas reflexiones podemos decir, como acostumbramos:

Fin de la lección.

Bibliografía

• Larocca, FEF: La presidencia como símbolo del narcisismo fálico femenino: Una exégesis psicosexual en monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net

• Larocca, FEF: El aprendiz de mago: Una lección en la neuropsicología humana en monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net

• Larocca, FEF: De cómo afectan las estructuras psicosociales las labores de algunos economistas y gobernantes en monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net

• Larocca, FEF: El cerebro, la religión y la terapia: Una síntesis en monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net

• Larocca, FEF: Los enteógenos, el chamanismo y los estados de conciencia alterados, incluyendo la psicoterapia que Freud concibiera en monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net

• Larocca, FEF: El sendero de la mente al cuerpo: Derrotero de dos vías e mongrafas.co, academia.edu.com y researchgate.net

• Larocca, FEFL: Hikikomori: Un síndrome japonés en espera de ser reconocido en nuestro medio en academia.edu.com, researchgate.net y monografías.com

• Larocca, FEF: La serendipia revisitada en monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net

• Larocca, F.E.F: GILLES DE LA TOURETTE"S (THE MOVEMENT DISORDER): THE ASSOCIATION WITH A CASEOF ANOREXIA NERVOSA IN A BOY, Int.J. Eating Dis. Vol.,No. 3, Spring 1984. pp. 89-93

• Larocca, FEF: La moratoria. La II: La Etapa que Erikson desconociera en monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net

• Larocca, FEF: La adolescencia: Período desconcertante para todos en monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net

• Larocca, FEF: (2010) The BASH approach Springer

• Larocca, FEF: La autoestima, la dignidad, el auto-respeto, y lo que arruinamos cuando los comprometemos en psikis.cl, monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net

• Larocca, FEF: El síndrome de Wendy en monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net

• Larocca, FEF: Trastorno de Asperger en monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net

• Larocca, FEF: Self-Help, auto ayuda, o asistencia mutua: La magia curativa del poder singular de los grupos en monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net

• Shutting Themselves In, The New York Times Magazine[2], January 15, 2006

• De Vos, G, A: Social Cohesions and Alienation: Minorities in the United States and Japan (1992) Westview Press NY

• Christopher, R. C: The Japanese Mind (1983) Fawcett Columbine NY

• Dower, J: War Without Mercy: Race and Power in the Pacific War (1986) Pantheon Books NY

• Smith, P. L: Japan: A Reinterpretation (1998) Vintage Books NY

• Kerr, A: Dogs and Demons: Tales from the Dark Side of Japan (2001) Hill and Wang NY

Además, extensivos enlaces (links), bibliografía adicional y referencias de contribuciones a este tema y otros temas mencionados por este mismo autor, pueden obtenerse en los siguientes portales:

• Academia.Edu

• ResearchGate.net y

• Monografías.com

La caída del halcón negro

Autor:

Dr. Félix E. F. Larocca