Indice
1.
Introducción
2. Definición
3. Síntomas
Principales
4. ¿Cómo se diagnostica la
enfermedad?
5. Recomendaciones para el cuidado
diario
6. Medicamentos
7. Problemas Psíquicos, Problemas
Sociales, Problemas
biológicos.
1. Introducción
Durante el desarrollo de
este trabajo les daremos a conocer todos los componentes de la
enfermedad de Alzheimer; sus signos, síntomas,
diagnósticos, prevención y tratamiento entre otros.
Con el fin de que todos ustedes conozcan un poco mas acerca de
los problemas que
aunque desconozcamos aquejan día a día a nuestra
sociedad.
Gracias a los avances en el campo de la medicina y las
mejores condiciones de vida, cada vez el número de
personas que alcanza una edad avanzada es mayor. Aunque todos
soñamos con ser (o llegar a ser) ancianos saludables,
todavía existen algunas dolencias que atacan a los
individuos mayores y para las cuales aun faltan años de
investigación antes de encontrar una
verdadera cura. Una de ellas es la enfermedad de Alzheimer,
afección que produce una perdida progresiva de la memoria y
otras funciones
intelectuales, así como cambios en la
personalidad y el comportamiento.
Al mal de Alzheimer hace parte de un grupo de
padecimientos conocidos con el nombre de demencias, los cuales
tienen en común la perdida paulatina de las funciones
intelectuales, debido a la muerte de
un gran número de células
nerviosas (neuronas) en el cerebro.
Hasta el momento, nadie conoce a ciencia cierta
la causa de este de posito anormal, pero es claro que dicha
sustancia es toxica para las neuronas y termina por destruirlas.
Durante ese proceso, se
acumula en el interior de las mismas otra proteína llamada
Tau, la cual también forma agregados que los
médicos denominan Ovillos Neurofibrilares.
En la actualidad, científicos de todo el mundo
están investigando las placas seniles y los ovillos
neurofibrilares, pues si son develados los mecanismos que los
generan será posible entender mejor las causas de la
enfermedad. Una vez lograda ese objetivo,
estaremos a un paso de encontrar una curación definitiva
para una dolencia que ata a millones de personas en el mundo
entero.
Desde los primeros reportes, realizados en 1906 por el
medico alemán Alois Alzheimer, los científicos han
encontrado alrededor de esas células la acumulación
de una proteína anormal conocida como b amiloide
(denominada así por su apariencia similar al
almidón cuando se observa en el microscopio), la
cual se dispone en estructuras
conocidas como placas seniles.
¿Quiénes pueden sufrirla?
El mal de Alzheimer es un problema propio de individuos que
están envejeciendo. Salvo los casos excepcionales, no hay
personas afectadas antes de los 60 años de edad. A los 65
años, solo 5 de cada 100 individuos muestra
síntomas compatibles con la enfermedad. Sin embargo, a
partir de ese momento, con cada década que pasa aumentan
las posibilidades de sufrirla, de manera que a los 75 años
1 de cada 5 ancianos experimenta sus estragos, así como 1
de cada 3 a la edad de 85 años.
Por lo general comienza de una manera sutil y los
primeros cambios suelen pasar desapercibidos para todos. Por eso,
en las etapas iniciales no es fácil detectarla y es
común que pasen varios años antes que las
alteraciones de memoria y los
síntomas relacionados adquieran
un carácter
preocupante.
Principales síntomas de la enfermedad de
alzheimer
- Perdida de la memoria y de las destrezas
aprendidas. - Deterioro del lenguaje.
- Cambios de conducta y
personalidad - Dificultad para resolver problemas y tomar decisiones
correctas.
Los olvidos frecuentes constituyen uno de los rasgos mas
precoses. Al principio es común que individuos afectados
dejen de cumplir sus citas o pagar sus cuentas. Con el
tiempo, los
problemas son más notorios y ya no le es posible evocar el
nombre de amigos o familiares, como tampoco los números
telefónicos. Así mismo puede tener dificultades
para recordar actividades que realiza durante el día o
quien fue a visitarlo. En las fases avanzadas, cuando ya han
pasado varios años de enfermedad, simplemente no consigue
precisar lo sucedido hace apenas unos minutos.
Junto con tales inconvenientes es frecuente que el
individuo pierda dinero u
objetos personales, por que no sabe donde los dejo. Sin embargo,
también es común que el individuo se torne
desconfiado y suspicaz con respecto a las personas que lo rodean
(piensan que quieren robarlo o hacerle daño), y por eso
esconde sus pertenencias, las cuales son encontradas por los
familiares en sitios inusuales (dinero en la cocina o comida
debajo de la cama).
Junto con los trastornos de memoria, ocurre perdida de
otras facultades intelectuales. Una de ellas es el lenguaje,
que al principio tiene como única manifestación la
incapacidad para nombrar ciertos objetos. A medida que avanza el
padecimiento, también pierde la capacidad para hablar y
para entender a los demás. Esto resulta muy preocupante
para los seres cercanos, pues los enfermos no puede expresar sus
necesidades particulares, como el deseo de ir al baño, de
comer o dormir.
De igual manera son incapaces de resolver problemas y
tomar decisiones correctas. El aspecto financiero debe ser
manejado con precaución, pues la persona puede
dilapidar sus recursos si no le
es restringido el acceso al dinero. En ese sentido, es necesaria
la asesoría de un abogado, quien solicitara la custodia
del enfermo.
Como experimentan problemas para orientarse en el
espacio, no es prudente dejarlos solos, en especial cuando
están fuera de la casa. Son muchos los casos de personas
con esta dolencia que salen a caminar y se pierden por que son
incapaces de encontrar el camino de retorno. Por eso ha sido
diseñados brazaletes especiales para uso permanente, donde
aparecen el nombre, dirección, y teléfono del enfermo, en caso de que
alguien lo encuentre deambulando y quiera informar a su familia.
Uno de los aspectos que ocasionan mayor preocupación son
los cambios de personalidad. Muchos exhiben una conducta
desinhibida y suelen desnudarse o gritar palabrotas. Otros
están en el extremo opuesto y permanecen calados y
aislados, y no es infrecuente observar en ellos un estado de
tristeza permanente.
Por ultimo, algunos individuos se muestran irritables y tienen
periodos de agitación o agresividad. En las etapas
finales, la persona es completamente dependiente de los
demás, incluso en actividades básicas como comer,
el vestido, el baño o el uso del sanitario. Incluso,
experimenta salida involuntaria de orina (incontinencia urinaria)
o de materia fecal
(incontinencia fecal)
Tomando en consideración tales manifestaciones es
fácil entender por que el cuidado de un sujeto con
enfermedad de Alzheimer es tan complicado.
Tampoco hay que olvidar que los familiares
también experimentan problemas debido al esfuerzo que
implica cuidarlos, que van desde el simple cansancio hasta
trastornos severos de salud, como depresión
o ansiedad. No obstante, todo puede mejorar con una
orientación adecuada.
Papel de la Herencia
Los parientes de una persona con mal de Alzheimer A veces
expresan su temor de padece ellos mismos la enfermedad. Lo cierto
es que son muy pocos los casos hereditarios y n la mayoría
de las circunstancias constituye un miedo infundado.
Hasta el momento solo han sido identificados tres genes que
permiten transmitir el padecimiento de padres a hijos, a saber:
el gen de la proteína precursora de amiloide, el gen de
presenilina 1 y gen de presenilina 2. Las personas que sufren de
desarreglos (mutaciones) en esos genes producen mayor cantidad de
amiloide b y por ese motivo las células nerviosas son
destruidas en forma acelerada, con aparición de los
síntomas antes de los 50 años de edad.
Por el momento, no es recomendable que los individuos
soliciten pruebas
genéticas para determinar si son portadores de alguna de
estas mutaciones, pues es una eventualidad demasiado rara como
para justificar los gastos del
examen.
4. ¿Cómo se
diagnostica la enfermedad?
Desafortunadamente no hay un examen especifico que
permita detectarla. La forma más confiable consiste en
observar una muestra de tejido cerebral al microscopio, con el
fin de identificar las placas seniles y los ovillos
neurofibrilares. Sin embargo, dicho estudio esta reservado casi
exclusivamente para los enfermos que han fallecido y son
sometidos a un procedimiento de
autopsia.
Por eso, los médicos llegar al diagnostico
entrevistando a los familiares y personas cercana, quienes
proporcionan información sobre el inicio y
progresión de los síntomas. A continuación
realizan un examen completo del paciente, para conocer l estado
de sus funciones intelectuales, al tiempo que solicitan una serie
de exámenes para descartar la presencia de otra enfermedad
que pueda confundirse con el mal de Alzheimer.
Uno de los estudios más importantes es la
tomografía axial computarizada, que es una técnica
especial de rayos X para ver
el volumen y los
contornos de cerebro. Así mismo, en los últimos
años ha hecho aparición una nueva alternativa que
es la resonancia magnética, la cual permite observar con
mayor detalle los cambios cerebrales que ocurren en las personas
con este padecimiento.
¿Qué hacer cuando un familiar tiene
enfermedad de Alzheimer?
El cuidado de estos enfermos no siempre es fácil, pues
además del deterioro intelectual que los hace cada vez
más dependientes, aparecen cambios profundos en la
personalidad y l comportamiento, sin mencionar las alteraciones
del sueño o los periodos de agresividad que experimentan
algunos de ellos.
Existen intervenciones especificas para cada una de las etapas de
la enfermedad, las cuales deben ser instauradas de acuerdo a las
necesidades particulares de cada sujeto. Para comenzar, es
necesario conocer que actividades todavía puede
desarrollar y cuales disfruta más. En lo posible deben ser
escogidas ocupaciones cómodas, que no impliquen
ningún riesgo personal y que no
requieran el empleo de
instrumentos cortantes o artefactos eléctricos.
Ejemplo de una rutina diaria
En la mañana
- Preparar el desayuno y desayunar
- Baño
- Actividad recreativa: salir a pasear
En la tarde
- Preparar el almuerzo y almorzar
- Terapia de reminiscencias: leer cartas viejas o
mirar un álbum familiar. - Escuchar música
- Ir a misa
En la noche
- Preparar la comida y cenar
- Ver televisión
- Recibir visitas
- Acostarse
Tabla 2
Así mismo, el ambiente
general que rodea al enfermo debe estar protegido contra
cualquier contingencia. Así, conviene evitar el acceso a
las escaleras y hay que colocar seguros en las
puertas que sirven de entrada a sitios peligrosos (incluyendo la
calle). Los objetos frágiles como vidrio,
porcelanas y espejos han de ser colocados lejos de su alcance. Al
mismo tiempo remover tapetes, mesas bajas, revisteros y otros
obstáculos que pudrieran ocasionar
caídas.
En cuanto al itinerario a seguir, establecer una rutina
diaria proporciona seguridad al
paciente, pues los cambios bruscos siempre tienden a confundirlo
(Tala 2).
5. Recomendaciones para el
cuidado diario
La comunicación es uno de los aspectos
más importantes del ser humano y es una de las tareas
más comprometidas en los enfermos de Alzheimer. Para
superar dichos obstáculos, es recomendable seguir una
serie de pautas elementales, como son:
- Escuche y trate de entender lo que la persona le
quiere decir - Conserve la calma y la paciencia
- Mantenga el contacto visual
- Utilice el lenguaje no verbal, como gestos,
mímica y tacto. - Use frases cortas y concisas.
- Son preferibles las preguntas cuya respuestas sean si
o no. - El tono siempre debe ser amigable y
comprensivo.
En cuanto al vestido, es mejor utilizar prendas
sencillas, cambiando los botones, cremalleras y cordones por
cierres de velcro, que son más fáciles de
manipular. De igual ,manera, evite accesorios como cinturones,
corbatas, cadenas, pulseras, etc. También conviene emplear
zapatos cómodos con suela antideslizante. En todo caso, es
importante que el individuo permanezca limpio y bien presentado
todo el tiempo.
La rutina del aseo diario debe ser conservado siempre,
aun cuando la persona se resista o le sea difícil por
incapacidad física. Una medida
practica consiste en colocar una silla plástica en la tina
o la regadera, sentar allí a la persona y bañarla
con la ayuda de una ducha de mano y una esponja suave.
Después, asegurarse de secarla bien y aplicar cremas
emolientes o humectantes. La piel reseca
siempre es mas frágil y susceptible de experimentar
lesiones. No olvidar tampoco la higiene
oral.
En cuanto a la alimentación,
diseñe un horario estricto de comidas y no trate de seguir
los caprichos del enfermo. Aunque es mejor ofrecer un repertorio
reducido de opciones para comer, trate en lo posible que los
alimentos sean
de gusto agradable y nutritivos. A veces son preferibles aquellos
que pueden tomarse con las manos sin necesidad de usar cubiertos,
como emparedados o hamburguesas. En lo posible utilice vajilla
irrompible.
Por ultimo, mantener un buen repertorio de actividades
recreacionales, por ejemplo, salir de compras o
practicar algún ejercicio, ver televisión, escuchar
música, pasear o recibir visitas. Recuerde que incluso en
las fases avanzadas de la enfermedad los individuos conservan su
capacidad para experimentar placer, dolor o tristeza.
Algunos medicamentos ayudan a los enfermos
Las células nerviosas se comunican a través de
sustancias químicas conocidas con el nombre de
neurotransmisores. Sin embargo, a medida que estas células
mueren por causa de la enfermedad, la cantidad de
neurotransmisores también disminuye. Un neurotransmisor
especialmente importante es acetilcolina, pues ayuda a mantener
la memoria.
En la actualidad existen en el mercado varios
medicamentos que mantienen elevados los niveles de acetilcolina,
al menos en las etapas tempranas del padecimiento. Ellos son:
tacrina, donepezil, rivastigmina. Aunque mejoran la memoria no
detienen el progreso de la enfermedad y con el tiempo pierden su
efecto benéfico.
Una alternativa está en estudio son los
estrógenos (hormonas
femeninas), pues las mujeres posmenopáusicas que los
reciben parecen tener una frecuencia menos de Alzheimer. Sin
embargo, es necesario esperar los resultados de nuevas investigaciones
para confirmar sus efectos protectores. De todas maneras, como
los estrógenos están recomendados para prevenir la
osteoporosis y la
enfermedad coronaria en ese grupo de edad, puede ser administrado
sin problema en ausencia de contraindicaciones, y quizá
prevenir de esa manera la enfermedad de Alzheimer.
Otros compuestos como, los antiinflamatorios no
esteroideos (un tipo de medicamento empleados para el dolor),
selegilina, Ginko biloba y vitamina E han sido mencionados por
algunos investigadores, pero no existe suficiente sustento
científico como para indicarlos.
Por ultimo, experimentos
realizados en ratones de laboratorio
han arrojado resultados prometedores con el uso de anticuerpos
contra amiloide b, los cuales eliminan las placas seniles y
podrán preservar la integridad de las células
nerviosas. Sin embargo, solo hasta finales del presente
año comenzaron los estudios con seres humanos y hasta
entonces desconocemos si realmente constituyen una esperanza de
curación para las personas afectadas.
- Neurolépticos:
Haloperidol
Meleril
Risperdal
- Ansiolíticos:
Orfidal.
Ultimas investigaciones
Lista para ser usada en humanos vacuna contra Alzheimer,
después de ser probada con éxito
en ratones transgénicos y de demostrar en pruebas
clínicas que no causa efectos adversos, será
probada en varios países para analizar sus resultados.
Están próximos a comenzar los ensayos en
humanos de la primera vacuna contra la enfermedad de Alzheimer,
un proceso degenerativo en el que el paciente va perdiendo las
capacidades intelectivas y motoras en orden inverso al que las ha
aprendido. El estudio pretende confirmar en humanos el
éxito que la vacuna tuvo en ratones transgénicos
durante la primera fase de la investigación en 1999. A
estos ratones se les introdujo el gen del Alzheimer y
desarrollaron la enfermedad. Al cabo de entre seis y ocho meses,
este gen comenzó a fabricar y depositar en el cerebro una
sustancia anomalía llamada beta-amiloide, la misma que
afecta a los seres humanos que sufren esta patología, y
que precipita los síntomas de la enfermedad, explica
Rafael Blesa, responsable del proyecto en el
hospital Clínico de Barcelona. En el curso de la
investigación se constato que si introducíamos
beta-amiloide como una sustancia anómala y desarrollaba
anticuerpos.
Estos anticuerpos pasaban al cerebro e inhibían
la acción del gen que produce la sustancia que precipita
la enfermedad. Se abría así una puerta para
intentar el desarrollo de una posible vacuna contra el Alzheimer,
comenta Rafael Blesa. Después de constatar el éxito
de la vacuna en ratones transgénicos, el siguiente paso
fue probar que la inoculación de beta-amiloide en los
seres humanos permitía la creación de anticuerpos
específicos sin generar ningún tipo de efecto
secundario. Para probar si en humanos funcionaba como en los
ratones, se realizaron pruebas en voluntarios de EE.UU. y Reino
Unido, a los que se les inoculo beta-amiloide. Con estas pruebas
se comprobó que el organismo de los humanos reaccionaba a
esta sustancia del mismo modo que el de los ratones, es decir,
que desarrollaba anticuerpos sin provocar efectos secundarios.
Ahora, una vez superadas positivamente las pruebas iniciales, se
inicia el ensayo
clínico de esta vacuna en humanos. El proyecto durar cerca
de 15 meses y analizará sus efectos en alrededor de 350
pacientes de todo el mundo. El ensayo
constituye una gran esperanza de encontrar el primer camino para
frenar la enfermedad. E incluso curarla, porque con esta vacuna,
las personas que tengan predisposición genética a
padecerla evitarían al 100% desarrollar un Alzheimer,
asegura Rafael Blesa.
7. Problemas
Psíquicos, Problemas
Sociales, Problemas biológicos.
Problemas Psíquicos
- Alteraciones en el sueño. Es necesario un buen
descanso nocturno por parte de la persona mayor y de la familia.
Para ello, es importante lograr una actividad diurna y evitar
que duerma durante el día. Debo orinar antes de
acostarse para no interrumpir el sueño. Si el paciente
se despierta desorientado, es importante situarlo en la
realidad.
Si con las medidas higiénicas no se soluciona el
problema, se derivará al medico, que percibirá los
fármacos más adecuados.
- Depresión. La demencia lleva a los pacientes a
sentirse desgraciados y deprimidos, especialmente en las fases
iniciales e intermedias de la enfermedad. Hay que hacer todo lo
posible para evitar la depresión y el resto de problemas
psicológicos que aparezcan. Esto exige mas
tensión, cuidado y esfuerzo. El medico tratara la
depresión con un fármaco adecuado. - Ideas delirantes, sobre todo de robo, infidelidad y
abandono. - Alucinaciones, generalmente visuales o auditivas.
Creen ver personas o animales en su
habitación. - Alteraciones en el proceso del pensamiento.
La persona con demencia pregunta repetitivamente, esconde
objetos y persigue a los familiares, etc. Debe dejarse libertad en
su conducta mientras sea tolerable y no peligrosa. Aunque
pregunte repetidas veces, no debe regañarse por que no
recuerde sus manifestaciones. No debe enfadarse por la perdida
de objetos. Se le quitaran las joyas y utensilios de valor, y, si
la persona no lo entiende y arremete por quitárselo, se
le puede sustituir por bisutería barata. Es importante
facilitarle entretenimientos basados en sus
aficiones.
Debe asegurarse la compresión y darle tiempo para
expresarse. Muy importante es el tono de voz que se utiliza. Mas
que el contenido de las palabras, el lenguaje debe ser sencillo y
accesible al paciente. No se le debe acosar con preguntas.
El dialogo se puede
acompañar con el empleo del tacto, como
caricias.
Problemas Sociales
- Incapacidad para vestirse. La persona va olvidando
como vestirse y es incapaz de elegir la ropa y ponerla
adecuadamente. Es importante que la familia coloque su ropa en
el armario y la disponga en el orden en que debe
ponérsela. Es lógico que necesite ayuda para
vestirse. - Incapacidad para mantener su higiene. La persona
mayor con demencia en las fases intermedias de la enfermedad
olvida su higiene y presenta aspecto desaseado, pero puede
perder la capacidad del autoaseado en su totalidad cuando
avanza la enfermedad. Se le recordara su higiene y se le
proporcionará ayuda para su aseo según sus
necesidades. - Riesgo de accidentes.
Es un problema muy frecuente en los pacientes con demencia. Es
importante también corregir las alteraciones de la
visión y de la audición que pueden presentar.
Deben eliminarse los elementos peligrosos (cables, enchufes,
etc.) y mantener una buena iluminación durante el día y la
noche, organizar el espacio donde vive evitando objetos
innecesarios y sin cambiar de lugar los ya
existentes. - Alteración de los procesos de
relación familiar. La presencia en una familia de una
persona mayor con demencia cambia la relación, pudiendo
generar problemas entre los familiares, disputas exceso o
defecto de ayuda al enfermo.
Deben expresarse los sentimientos relacionados con la
situación y tomar conjuntamente las responsabilidades del
cuidado del enfermo.
Problemas biológicos
- Alteraciones en la nutrición por
defecto o por exceso. Debe conseguirse una ingestión
adecuada a las necesidades nutricionales y una ingestión
adecuada de líquidos. Es útil equilibrar y
vigilar la alimentación durante las primeras etapas,
ofrecerles líquidos regularmente y si desea comer a
deshoras, proporcionarles alimentos con pocas calorías. - Incapacidad para alimentarse. En fases avanzadas de
la demencia, la persona ya no puede alimentarse de forma
autónoma. La familia debe ofrecerles los alimentos y
utensilios sucesivamente, los cuales deben ser adaptados (de
plástico, platos con ventosas,
etc.). - Incontinencia urinaria y fecal. La incontinencia que
presentan estos pacientes pueden deberse a su edad avanzada, a
enfermedades
asociadas o problemas familiares que rodean al
enfermo. - La piel, debe mantenerse integra y evitar posibles
infecciones urinarias; se aconseja vigilancia, cuidados de la
piel, higiene, movilización, etc. - Problemas accesorios. Se pueden evitar vistiendo a
los enfermos con ropa cómoda y poner
los retretes suficientemente altos y señalizados.
Recordar y acompañar al baño regularmente.
también es aconsejable disminuir la ingestión de
líquidos a partir de las 6 de la tarde. El uso de
pañales quedará limitado hasta que no exista otra
solución, por tres razones fundamentales: - Los enfermos los rechazan a menudo porque les supone
el final de una vida normal, volver a ser como niños, y también los rechazan
porque los deforma su manera de andar y su silueta. - Estas personas pueden ignorar la eficiencia o
necesidad de usarlos. - Su elevado coste.
- Afectación en la integridad de la piel
(úlceras por presión,
infecciones, etc.). en fases avanzadas tienen disminuida la
movilidad, que junto con la incontinencia fecal o urinaria da
lugar a una perdida de la identidad
cutánea.
Los consejos prácticos para familiares y
cuidadores están en relación con aplicar las
medidas ente la incontinencia, revisar las zonas de mayor riesgo,
movilización y cambios postulares. Deben utilizarse
medidas técnicas
para proteger las zonas de mayor rie4sgo: almohadillado de la
silla de ruedas, taloneras, colchones antiescaras, etc.
Si existe lesión, se aplicaran los cuidados oportunos a
los que ya están adiestrados los familiares.
Cuidados generales domiciliarios del paciente
demenciado.
Los pacientes demenciados sufren perturbación en su
memoria, y debido a ello es importante un ordenamiento de su vida
cotidiana. Al principio de la enfermedad, cuando aun están
capacitados para decidir por si mismos, puede resultar delicado y
difícil; pero cuando son los demás los que deciden
por ellos, una buena organización en su vida facilita los
cuidados y la atención que necesitan. Por ejemplo,
acostarlos, levantarlos, llevarlos al servicio,
darles de comer, etc., en el mismo momento del día permite
ordenar su vida. Este orden sirve para ayudarles y nunca hay que
llegar a forzarlos para seguir una disciplina.
El medio ambiente
debe ser simplificado. Esto implica retirar poco a poco los
objetos de valor, así no se avergonzaran por estropear o
perder algo.
Se van a producir una serie de cambios en su vida
cotidiana, como cambiarles de ropa, sentarles en orinales o
ponerles pañales. Estos cambios implican aprendizaje, pero
encuentran dificultades para el mismo, debido a sus alteraciones
cognitivas. Es importante comprender esto porque ayudará a
tener paciencia cuando aparezcan resistencias o
imposibilidad para adaptarse a las nuevas situaciones.
En relación con el autocuidado, como ya se ha
señalado, es importante establecer horarios precisos. Si
el paciente no se encuentra muy perturbado y mientras sea capaz,
debe ser el mismo quien realice estas tareas o con la ayuda
necesaria según corresponda. Es útil que las
prendas sean cómodas y fáciles de pones.
Existe una serie de pautas a seguir para la
comunicación con personas que presentan trastornos
cognitivos.
- A la hora de acercarse es importante que los
movimientos utilizados sean lentos, suaves y mirándoles
a los ojos. - Para conseguir su atención e útil
sonreír. - Al mandar el mensaje, deben usarse palabras cortas y
oraciones simples, intentar hablar despacio en términos
positivos ("haga", en lugar de "no haga"). - Al repetir una frase, que se con las mismas
palabras. - Para no perder su atención conviene repetir su
nombre y no apartar la mirada. - La escucha debe ser activa (demostrar interés,
mantener la mirada, asentir, etc.). - Para responder es necesario clarificar el mensaje
repitiéndoles la palabras claves, por
ejemplo.
Las visitas son muy importantes para estas personas.
Debe pedirse a quienes les quieren que hagan visitas breves de
vez en cuando. Sirven para animar a la persona mayor, no para
humillarla, avergonzarla o ponerla triste. La visita debe aportar
calor y alegría.
Conclusión
Mientras la ciencia
medica continué realizando descubrimientos en torno de la
enfermedad de Alzheimer y encuentra nuevos medicamentos, el
numero de pacientes va en aumento y, de la misma forma, los
costos para la
familia y la sociedad.
Sin embargo, existen grandes expectativas para el futuro
y es probable que en algunos años aparezcan los primeros
medicamentos que logren detener su progresión.
Por lo tanto es necesario insistir en los cuidados en
casa o en hogares especializados en este tipo de personas.
Así mismo, vale la pena mencionar que en muchos
países existen grupos de apoyo
conformados por familiares de los pacientes con deterioro
cerebral, en donde es posible obtener ayuda adicional y compartir
experiencias. De esa manera mejora la atención del enfermo
y disminuye el estrés
físico y emocional para quienes se encargan de su
cuidado.
- Con este trabajo pudimos darnos cuenta de que a
menudo que nos pasan los años podemos adquirir
enfermedades muy silenciosas pero tan peligrosas que no se
pueden curar, solo controlar. - Gracias a este trabajo y la investigación
hecha conocimos muchos de los síntomas que posiblemente
personas cercanas a nosotros, incluso miembros de nuestra
propia familia los pudieran padecer pero por la ignorancia
acerca de temas como este no sabemos de que se trate ni que
consecuencias pueda tener. - Por otro lado nos dimos cuenta de que todos estamos
propensos a padecer esta enfermedad y que debemos prestar
atención cuando se nos hable de esta.
Autor:
Juan Fernando Uribe T.