Monografias.com > Estudio Social
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

¿Tiene sentido la ética en las sociedades contemporáneas?




Enviado por kriken



    Una sociedad se
    construye sobre la base social, sobre lo que las personas
    construyen de su propia realidad inmediata, por lo menos en un
    principio. Esta construcción hace posible una idea, o
    ideal, de cultura. Luego
    entonces, no se puede entender sociedad sin una
    construcción propia, especifica, delimitada
    y enmarcada de cultura.
    Aunque en la actualidad, se ha transformado de una forma radical
    y, crear una nueva definición de sociedad y cultura
    sería plausible e imperativa. Cultura, ya no es solamente
    aquello que partía del simple uso creando un modo de hacer
    las cosas, estableciendo un hábito (individual)
    posibilitado a través de órdenes. Esta
    individualidad crea la costumbre colectiva, que va definiendo las
    normas sobre
    las cuales se apoya el código,
    en muchos casos, jurídico. Cultura es algo mucho
    más que esto, más adelante veremos. Estos conceptos
    componentes de la cultura, construyen los valores
    que rigen la sociedad. Este cambio
    de definición de cultura- ha sido posible al acortamiento
    de las distancias (físicas, políticas,
    religiosas, económicas, etc) entre los grandes y
    pequeños grupos humanos
    (por no decir sociales). Acortamiento ocasionado y, más
    ahora, por el gran desarrollo de
    la tecnología (comunicativa, industrial,
    farmacéutica, militar, etc.) en otros términos con
    timbres de académico, lo que llamamos globalización.

    Creo que el mejor ejemplo para poder
    entenderla es por medio del chiste, que hace que las cosas que no
    siempre son positivas para un grupo, suenen
    menos dramáticas:

    El mejor ejemplo lo tenemos el caso de la princesa
    Diana: Una princesa británica, con un novio egipcio que
    usa un celular sueco, que choca en un túnel
    francés en un auto alemán, con motor
    holandés manejado por un conductor belga que estaba
    medio prendido con whisky escocés. A ellos, les
    seguía de cerca un paparazzi italiano en una motocicleta
    japonesa, que tomaba fotos con una
    cámara taiwanesa para una revista
    española. Ella, fue intervenida por un médico
    ruso y un asistente filipino, que utilizaron medicinas
    brasileñas…Este artículo fue traducido del
    inglés por un mexicano. Y ahora lo
    están leyendo unos pendejos colombianos que no tienen
    nada mejor que hacer.

    Enviado a mi e-mail por una buena amiga.

    Podría sonar grotesco, o incluso ofensivo, pero
    es una buena forma de explicar que es ese repetido cuento de
    la
    globalización, que además no es
    propio.

    Pero esta ‘introducción’ de la
    globalización, trajo consigo numerosos cambios.
    (Aunque este cuento no es
    del siglo XX o XXI, desde la conquista de América, el mundo tuvo conciencia de
    globo, y empezó el increíble contacto cultural.
    Mirémonos: hablamos un idioma europeo, contamos con
    números arábigos, nos vestimos como los europeos,
    nuestras costumbres son una mezcla de todas las culturas que
    llegaron a nuestras costas. Desde hace unos 500 años
    vivimos un proceso de
    globalización un poco desordenado). Ya no
    vivimos en un país, sino en una aldea global que
    sería la suma de todos los países, bajo un criterio
    unificado. Eso creo, pero cuál?. En la que corremos el
    riesgo de
    volvernos amnésic@s de nuestro pasado, que es lo que
    somos. La ilusión de la globalidad puede hacer el mundo
    tan pequeño como la pantalla del computador, en
    el que cada enlace sería cada uno de los pueblos, pero
    desdibujado y mirado con ojos que no son los propios. Pero y
    ¿Colombia? Como
    esta nuestro país en este contexto de
    globalización, en el que las fronteras cada vez existen
    menos. Podríamos responder usando las palabras de William
    Ospina: "Tal vez no hay un solo tema crucial de la sociedad
    contemporánea que no tenga vigencia en Colombia…podemos decir que lo que esta en
    juego en
    Colombia es ya lo mismo que está en juego en todo
    el mundo contemporáneo". Pero y ¿qué esta en
    juego?. Me arriesgo a mencionar varios aspectos, no en un orden
    sistemático, pero los que yo creo que están en
    juego; sin olvidar que la globalización supone cambios
    (todo cambio supone
    riesgos) de orden
    económico, social, cultural, político, religioso,
    etc.

    Primero la globalización –postmodernidad
    o sociedad del conocimiento
    hacen del hombre y
    la mujer serviles
    de los mass media, esclav@s favorit@s de las grandes cadenas de
    producción. Han des-organimizado su cuerpo
    y lo han vuelto cultural. Es objeto entonces, de los devenires de
    la trivial moda estética. Ya no es lago para alimentar,
    vestir, proteger del clima, sino para
    exhibir, rediseñar y exponer a cuanto a elixir promete la
    perfección –no natural, por lo demás-.
    Segundo, el límite entre lo público y lo privado se
    ha diluido por la invasión de los medios. Ha
    creado una nueva forma de ser, de definirse y de concebirse. Los
    estándares comerciales son ideales a conseguir. Nada es
    tan privado que no se pueda conocer y lo público debe
    volverse de dominio general
    para que se califique de público. Esto ha hecho del
    hombre y la
    mujer actual,
    un(a) descreíd@, escondid@ en medio del anonimato. Mis
    acciones no
    tienen trascendencia si están enmarcadas en lo general, en
    lo público, me confundo entre l@s demás. Tercero,
    la vanalidad del hombre y la mujer actual,
    o mejor el hombre o
    mujer de la
    cultura de lo light. En el que los objetivos o
    metas se alcancen bajo la ley del menor
    esfuerzo. Si se quiere bajar de peso usamos el bisturí.
    Los valores se han
    desdibujado y se ha entrado en la creencia de que los actos son
    individuales y no están inmersos en la amplia red social -¿o
    redes?-. A modo
    de resumen, y en un deseo de simplificar al máximo lo que
    está en juego en Colombia y en la aldea global y, en
    espera que no se pretenda que mi escrito tiene una rigurosidad
    académica, todo estará bien. No es mi interés
    reducir la influencia de la globalización a los tres
    aspectos mencionados anteriormente, triviales si se quiere pero
    indiscutiblemente importantes en el modus vivendi
    local.

    Pero este nuevo mundo con pretensiones de globalizarse,
    enfrenta a la humanidad a otro tipo de retos, que ya no han de
    remitirse a su pequeño núcleo social sino que
    tienen que estar acordes con la problemática global. Ya no
    somos una aldea limitada físicamente, estos límites se
    han roto gracias a lo virtual. Este mundo global hace que la
    ética
    se transforme y supere el lastre local, lo trascienda, pero no
    sólo ha de trascender esto, sino como argumenta Singer
    (2002): "La ética nos exige trascender <yo> y
    <tu> para llegar a la ley universal, el
    juicio universalizable, el punto de vista del espectador
    imparcial u observado ideal…" y, ¿qué nos
    hace más fácil esta tarea? Pues la
    globalización. La construcción de una gran cadena
    de sociedades
    contemporáneas a través de un amplio dialogo que
    consulte la particularidad cultural para crear una cultura
    mundial.

    Por favor no perder de vista a Colombia. Aquel
    país en el que no decidimos nacer, pero nacimos.
    País, que en este ensayo nos
    cuestiona y nos tiene que movilizar a encontrar un orden en medio
    de este carnaval, en el que los que menos se divierten son l@s
    niñ@s. Creo que el problema –aunque no sea la
    raíz- esta en la crisis social.
    Visualicemos, l@s niñ@s en la escuela ven cosas
    distintas a las que muestran en los medios, en la
    casa, en la calle, en la sociedad en general. En el trabajo, se
    pide la participación de un trabajador ejemplar, pero se
    premia a aquel que obtiene las metas a costa de lo y quien sea.
    En la familia, el
    grupo se va
    convirtiendo en individualidades que se asesinan entre si por no
    encintrar un punto de comunicación. ¿Qué panorama
    nos puede ofrecer esta realidad? Parece obvio que una sociedad
    así, no puede más que desintegrarse a ella misma.
    Pero y si esto pasa, porque no hemos acabado con la sociedad. La
    respuesta más alentadora nos la ofrece Savater (1999): "El
    secreto de las sociedades estables es que son sociedades en las
    que la mayoría de los socios ve claro que saca más
    comportándose dentro de las leyes y dentro de
    la sociedad que oponiéndose a ella".

    Una sociedad que a pesar de tener estas características, se mantiene unidad, es una
    buena señal de que lo básico no se ha perdido. La
    ética es aquello que permite que una sociedad construya
    unos elementos básicos sobre los que esta pueda soportar y
    crear normas de
    relación. Estas normas nos hacen sociales, nos hacen
    human@s. La sociedad nos permite construirnos como human@s, como
    personas. Es decir, en tanto que trato a l@s otr@s como human@s,
    me hago human@ a mi mism@. Y esto, nos lleva a argumentar que
    necesariamente somos sujetos dependientes de los otr@s
    (Ídem). Pero si la ética no nace de la
    autorreflexión, no existe. La ética ha de surgir
    del individuo, bajo las construcciones sociales, para poder ser
    social, para que pueda convertirse en general, o en global
    según los términos usados en este ensayo.

    La ética trasciende a la misma sociedad (local o
    global), se inserta en ella misma y penetra todos los estamentos
    que la constituyen. Si consideramos esto, es racional pensar que
    la ética tiene cabida en la nueva sociedad o en las
    sociedades contemporáneas. Pensemos: un hombre para poder
    ser reconocido como tal, en cualquier sociedad, debe comportarse
    bajo el esquema ético aceptado, sino es expulsado. Es
    aquí en donde el proceso de
    globalización puede tener dificultades, ya que la
    ética es el reflejo de lo que ocurre en una sociedad
    particular. Dice Gutiérrez, en su ensayo: "cada sociedad
    posee una ética que le es propia y que se difunde por
    todos sus mecanismos de socialización, sobre la que,
    científicamente no pueden emitirse juicios de valor, sino
    interpretarse tal como es, a fin de intentar establecer las
    causas del comportamiento". Es decir, aunque existan
    criterios universales, la localidad y la construcción
    sobre lo que es permitido y no, se puede ver confrontada con los
    de la sociedad que globaliza su cultura, que exige romper los
    lazos del pueblo con su territorio. Ergo, somos según de
    donde procedemos, pero ha de resaltarse que eso no me hace ajen@
    a los criterios que puedan regir otras sociedades. Recordando de
    nuevo a Singer, la ética es universal. Existen algunas
    normas comunes a todas las sociedades, por ejemplo, la
    prohibición del incesto, la mentira, causar la muerte a
    otro ser humano (ojalá algún día, el
    inflingir dolor innecesario a los animales
    no-humanos).

    Bueno, y ¿tiene sentido la ética en las
    sociedades contemporáneas?. Sí visualizamos la
    ética como un proceso en el que tod@s son interlocutores
    válid@s, en donde las razones y las decisiones se pueden
    discutir y confrontar con l@s otr@s, con el pasado (Lipovetsky
    argüía que no contemplar el pasado era "esa
    pérdida de sentido de la continuidad histórica, una
    erosión
    del sentimiento de pertenencia…"), con las demás
    sociedades, con el mundo, pero sobre todo con nosotros mismos, si
    tiene sentido. Úsese tal o cual forma de
    ‘practicar’ la ética, esta deberá
    responder a los nuevos retos del mundo, a los retos que impone la
    globalización. Estos retos, sociales, serán
    posibles de abordar de una forma adecuada sin menoscabo de la
    particularidad cultural, con un comportamiento
    ético.

    Si la ética es el arte de vivir
    bien, y vivir bien es ser feliz y la felicidad es lo que el hombre
    quiere alcanzar, es posible ser ético. La prudencia
    seguramente ha de servir de punto de partida para lograr este
    objetivo (ella
    esta unida a la vida feliz; según aducía Epicuro):
    el de una sociedad que se rija bajo principios
    éticos básicos. Aún con los retos que impone
    el nuevo mundo, seguimos teniendo la condición de
    raizales, y para no destruir esta condición se necesitan
    unos parámetros de comportamiento. Es, de Perogrullo
    entonces decir, que la ética en las sociedades
    contemporáneas o en el nuevo mundo que se globaliza, si
    tiene sentido.

    REFERENCIAS

    GUTIÉRREZ Leal, Pedro. LA ÉTICA
    COMO MECANISMO DE AUTOGÉNESIS SOCIAL. http://www.monografias.com/trabajos10/etica/etica.sthml

    LIPOVETSKY, Guilles. (2000). LA ERA DEL
    VACÍO. Editorial Anagrama. Barcelona, España.

    OSPINA, William. (2001). LO QUÉ
    ESTÁ EN JUEGO EN COLOMBIA. Revista
    Número. Edición 30. Colombia.

    SAVATER, Fernando. (1999). ÉTICA EN LA ERA
    DE LAS COMUNICACIONES. Conferencia
    APROXIMACIÓN A LA ÉTICA. Editado por la
    Corporación Universitaria Autónoma de Occidente,
    CUAO. Colombia.

    SINGER, Peter. (2002). UNA VIDA ÉTICA.
    ESCRITOS. Editorial Taurus. España.

    Javier Uribe

    Estudiante de Psicología

    Pontificia Universidad
    Javeriana Colombia

    Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

    Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

    Categorias
    Newsletter