Monografias.com > Administración y Finanzas
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

Hoy un Adventor no es un Cliente




Enviado por ngonzalez



    (El Cliente y las
    Ventas en el
    Siglo XXI)

    1. Empresas en el
      Tiempo
    2. Nueva Dinámica de
      Negocio
    3. Dinámica del
      Adventor
    4. Enlace con el
      Adventor
    5. Conclusiones

    Así como la actividad política ha
    evolucionado su naturaleza y
    ahora los héroes empuñan su espada en la investigación de opinión y ganan
    guerras de
    imagen y
    posicionamiento, las empresas del
    nuevo siglo no son aquellas que producían bienes en
    serie con maquinas de carbón y se preocupaban por algunos
    cuantos competidores de la región. Ya en el nuevo siglo,
    las empresas han
    pasado por diversas dinámicas o estilos de competir, y no
    solo eso, sino que la
    globalización ha presionado la naturaleza
    evolutiva de la competitividad
    y nos ha llevado al perfeccionamiento obligado de la
    relación proveedor-cliente. Hoy en día es
    imperativo conocer la evolución de los ambientes de negocio y
    dominar la delicada relación entre los clientes y sus
    proveedores
    para mantener con vida a una
    empresa.

    Empresas en el
    Tiempo.

    Allá por los años 20´s del siglo
    pasado, cuando la revolución
    industrial, para las empresas era muy importante las nuevas
    herramientas
    para producir más, más rápido y con la menor
    utilización de mano de obra, de ahí el paso de los
    sistemas de
    manufactura a
    los de industrialización. Poco a poco la competitividad
    de las empresas se fue traduciendo en altos volúmenes y
    costos más
    bajos.

    Algunas décadas después, ya en los
    años 50´s y 60´s, cuando la competencia
    industrial maduró, llegaron los problemas de
    inventarios
    altos y los cuellos de botella de algunos productos que
    eran eficazmente producidos pero pobremente colocados entre los
    consumidores, esto causado por la variedad de productos que
    ahora cubrían una misma necesidad de los consumidores, el
    comienzo del dinamismo empresarial y las incursiones de nuevas y
    mejores empresas. Fue entonces cuando emergieron los métodos de
    ventas,
    aquellos que usted recuerda como estrategias para
    convencer a los clientes de
    comprar su producto.
    Estas estrategias
    fueron comúnmente reconocidas en términos generales
    por el enfrentamiento y análisis de las necesidades expresadas por
    un prospecto y/o el convencimiento de que el producto o
    servicio
    ofrecido tenía precisamente eso que buscaba, aunque en
    mucha de las ocasiones no fuera así, o simplemente el
    prospecto no lo buscara.

    En los años 80´s, cuando los esfuerzos de
    ventas fueron cada vez más voraces, las empresas
    comprendieron que la falta de recurrencias de compras no
    soportaba empresas durante períodos prolongados de
    tiempo.
    Entonces llegaron desde Asia los métodos de
    Calidad. Dado
    lo anterior, se comenzó a dar un giro a la visión
    de vender, hacia mejores métodos para conocer a fondo a
    los consumidores, sus gustos, preferencias, costumbres de compra,
    etc., provocando como consecuencia un disparo en la
    utilización de la herramienta llamada Estudio de
    Mercado.

    Ya en el nuevo milenio, y dado el alto volumen de
    competencia
    global, conocimientos y avances técnicos y comerciales en
    todo el mundo, la herramienta fundamental de las empresas
    altamente competitivas para detectar oportunidades de negocio,
    planear estrategias, planear operaciones,
    evaluar la satisfacción del cliente y sobre todo, tomar
    decisiones delicadas, es sin duda el Estudio de Mercado.
    Inclusive para la actividad política este
    instrumento es ahora considerado fundamental y básico,
    aunque en esta actividad es llamado Investigación o Sondeo de Opinión.
    Sin embargo, dadas las presiones globales de competitividad y el
    perfeccionamiento de las prácticas de negocio, las
    empresas más competitivas tienen que enfrentarse a
    competidores también con alta capacidad de satisfacer las
    necesidades de los consumidores. Dado lo anterior, en los
    últimos años, más allá de solo
    alinear su oferta con las
    características demandadas por los
    consumidores y satisfacerlos ampliamente, las empresas más
    competitivas han tenido que crear nuevos métodos para
    ganar participaciones de mercado y
    mantenerse en el gusto de sus consumidores. Si algo es claro
    ahora es que las empresas más competitivas ya no buscan
    vender, sino captar la compra del consumidor.

    Nueva Dinámica de Negocio.

    La globalización y la alta competitividad de
    las empresas nos han llevado a crear nuevas dinámicas de
    negocio. En los principios del
    año 2004 las cosas son muy diferentes a como eran el siglo
    pasado. Comencemos por poner en claro la dinámica de consumo.

    En la concepción de una venta
    tradicional, tenemos básicamente dos actores: El Consumidor y el
    Proveedor. Por lo tanto, al realizarse la transacción
    tenemos dos puntos de vista. El punto de vista del proveedor, el
    cual considera la operación como una Venta, y el punto
    de vista del Consumidor, el cual considera la operación
    como una Compra. Sin embargo, pensemos en la responsabilidad del acto. ¿De quién
    depende la culminación de la transacción? Piense
    por un momento en lo siguiente. Si el Proveedor intenta vender su
    producto y el Consumidor no lo compra, ¿existe una venta?
    Si el Proveedor intenta vender su producto y el Consumidor lo
    compra, ¿existe una venta? Por lo tanto, ¿de
    qué depende la venta del Proveedor? Respuesta: De la
    compra de los Consumidor. No importa cuanto dinero o
    esfuerzo haya hecho el Proveedor para vender, finalmente el
    Consumidor es quien decide cuál de todos los Proveedores
    registrará una venta. Entonces, si las ventas son
    dependientes de la compras de los
    Consumidores para existir, el concepto de
    ventas es algo efímero, no existe si detrás no hay
    una compra, esa sí existe. Es por eso que en el nuevo
    milenio las ventas son un concepto hueco
    que no existe en sí mismo a menos que tenga la compra de
    un Consumidor dentro.

    Y los Clientes, ¿siguen existiendo? Pues
    sí, siempre y cuando definamos concretamente qué es
    un Cliente para una empresa altamente
    competitiva del año 2000. Un Cliente es aquel individuo u
    organización que dada la
    satisfacción que recibe de un proveedor, le consume de
    forma recurrente y/o lo recomienda. Con esta definición se
    debe delimitar de forma tajante al Mercado Potencial o Meta y al
    Prospecto, todos estos a veces mal llamados Clientes. El Mercado
    Potencial o Meta lo puedo definir como aquella masa de individuos
    u organizaciones
    que por sus características, son el blanco del interés de
    un Proveedor y son susceptibles de ser sus Clientes en el futuro
    y un Prospecto es el individuo u organización que ha tenido un acercamiento
    con el Proveedor sin llegar a consumirle.

    Ahora bien, Si el "Mercado" es susceptible de consumirle
    a un proveedor, el "Prospecto" entra en contacto pero NO le
    consume y el "Cliente" es el que le consume de forma recurrente,
    ¿no siente usted que falta alguien? No avance en la lectura
    hasta meditar un poco en esto. Hay un individuo que no es parte
    del Mercado Meta porque ya tuvo un acercamiento con el proveedor,
    tampoco es un Prospecto porque ya le consumió al
    proveedor, pero tampoco es un Cliente porque no ha tenido un
    consumo
    recurrente, es decir, solo a consumido una sola vez. Ese
    individuo lo he denominado "ADVENTOR". La palabra Adventor
    es una palabra en latín que significa "consumidor nuevo",
    hace alusión a la prueba de lo desconocido y la aventura.
    Es precisamente esta naturaleza la que circunda a un Adventor al
    consumir por primera vez a un proveedor, una aventura, la prueba
    de algo incierto pero con expectativas al respecto. Es
    precisamente este término el que viene a explicar el
    fracaso en la sustentabilidad de muchas empresas (sobre todo las
    de menor tamaño) con gráficas de ventas parabólicas,
    quebradas por la falta de recurrencia en sus consumidores. Es
    simple: Muchos Adventors, Pocos Clientes.

    Dinámica del
    Adventor.

    Es importante aclarar esto: NO todo Adventor se
    convierte en un Cliente, sin embargo, Todo Cliente alguna vez fue
    un Adventor. Es muy triste ver como aún existen empresas
    (sobre todo micro y pequeñas) no preparadas para la alta
    competitividad o la satisfacción del consumidor, que
    invierten todo su esfuerzo, inclusive mucho presupuesto, en
    atraer Adventors. Dada la falta de competitividad de estas
    empresas, no solamente tienen un resultado estéril y
    pérdidas de dinero en la
    gran mayoría de los casos, sino que en caso de obtener
    algunos, le crean a la empresa un
    espejismo en sus montos de ventas pero no una recurrencia de
    compra en el futuro, logrando resultados temporales muy
    difíciles de sostener, de ahí las gráficas de ventas
    parabólicas.

    La empresa altamente
    competitiva de finales del siglo XX es clara en sus esfuerzos:
    Busca Adventors para convertirlos en Clientes. Pero,
    ¿cómo convertir a un Adventor en un Cliente?, es
    decir, cómo hacer que un consumidor nuevo se convierta en
    un consumidor recurrente, es simple, la palabra clave es
    SATISFACCIÓN. Un Adventor se convierte en un Cliente con
    el simple hecho de recibir más satisfacción con el
    proveedor que está probando que con el anterior. De
    aquí que los estudios de mercado son la herramienta
    fundamental para detectar las necesidades no cubiertas, los
    índices de satisfacción que genera la competencia y
    en general todo lo relativo a los gustos y preferencias de los
    consumidores, traducidos en factores de satisfacción o
    factores de éxito.
    De estos estudios se obtiene la información más importante para
    diseñar los productos, los sistemas de
    operación y servicio al
    cliente, ubicaciones, estándares de tiempos de
    entrega, colores, sabores,
    crédito, etc., que el Adventor
    valorará para convertirse en un Cliente. Lo anterior viene
    a ser el pan de todos los días en una empresa
    altamente competitiva.

    Sin embargo, existe un paso anterior en secuencia pero
    más avanzado en aplicación. Si estamos operando una
    empresa altamente competitiva, es decir, si ya hemos estudiado el
    consumo y los consumidores, y hemos logrado crear o mejorar una
    empresa para que sea capaz de otorgar mayor satisfacción a
    los consumidores que la competencia, entonces tenemos que empezar
    por obtener Adventors. ¿Cómo convertimos a un
    prospecto o inclusive al mercado meta en un Adventor? He
    aquí el reto más moderno de las empresas altamente
    competitivas.

    Enlace con el
    Adventor.

    El pensamiento
    tradicional le podría sugerir que tener una empresa muy
    competitiva con un producto inmejorable, inclusive unos
    excelentes precios, le
    podría ayudar a tener más Clientes, sin embargo,
    todo Cliente fue primero un Adventor, y ese Adventor nunca
    había tenido contacto ni con su empresa ni con sus
    productos o servicios
    antes de serlo. Es por eso que así como la única
    herramienta para convertir a un Adventor en un Cliente es la
    satisfacción, de igual forma la única herramienta
    para convertir al mercado meta o a un prospecto en Adventor es
    la
    comunicación. De ahí que muchas empresas que
    han conseguido crearse o convertirse en una empresa competitiva,
    con altas niveles de calidad y
    capacidades de satisfacción, los sorprenda la quiebra por la
    falta de comunicación efectiva que convenza al
    Mercado de convertirse en Adventors, que seguramente se hubieran
    convertido en Clientes posteriormente.

    Para tomar la decisión de convertirse en Adventor
    de uno o de otro proveedor, el mercado solo cuenta con información que puede venir de dos fuentes: los
    esfuerzos de comunicación y las claves de
    recuperación. Los esfuerzos de comunicación es toda
    aquella proyección de información de la empresa o el
    producto hacia el mercado, por medio de herramientas
    de publicidad masiva
    como TV, Radio, Volantes,
    Panorámicos, Correo
    Electrónico, Trípticos, Periódico,
    etc. La efectividad de este tipo de esfuerzos depende en gran
    medida del entendimiento estratégico del responsable para
    aplicar métodos de posicionamiento y
    convocatoria, sin embargo, las estrategias de efectividad de esta
    fuente de información son materia de
    otro artículo. Las claves de recuperación es toda
    aquella imagen obtenida o
    prejuicio creado por el Mercado o Prospecto de lo que es el
    producto o la empresa, sin que hubiera un motivo voluntario de
    parte de la empresa para ello, como por ejemplo, la fachada de
    las instalaciones, la vestimenta o actitud de los
    empleados, el empaque del
    producto, el tamaño o ubicación del
    establecimiento, una mala recomendación, un acontecimiento
    malo o bueno relacionado con el producto o la empresa, inclusive
    el mismo logotipo y nombres del producto o la empresa. Si nombres
    como "Vivero Borolas", A.S.CO., DogHead (Cabeza de Perro) o "Las
    Delicias", llevan en sí mismo información
    suficiente para crear prejuicios e inclusive expectativas
    respecto a alguna empresa o producto, imagine usted un
    establecimiento de alimentos con
    mobiliario viejo y sucio, un representante con tarjetas de
    presentación deficientemente impresas con faltas de
    ortografía o una dependienta que masca
    chicle y pregunta "¿qué quiere?".

    Conclusiones.

    En términos de competitividad, desgraciadamente
    aún existen muchísimas empresas (sobre todo
    pequeñas y medianas en países emergentes) muy lejos
    de las dinámicas modernas de negocio. Es decir, operan con
    esquemas arcaicos de los años 50´s e inclusive de
    los 20´s que se traducen en niveles de competitividad muy
    bajos y que crean grandes oportunidades de negocio para empresas
    altamente competitivas originarias de países
    desarrollados.

    Hoy por hoy, es el consumidor la locomotora del tren
    económico y es él quien tiene el poder de
    decidir qué empresa sobrevive y cuál no, sin
    él, no existen las ventas, no existen las empresas, por
    más que se responsabilice al gobierno o el
    acceso al crédito, son las capacidades empresariales
    las que hacen falta. Es por eso que como empresarios tenemos que
    entender que el consumidor tiene muchas opciones, y que la
    empresa que no conoce y aplica procedimientos de
    trabajo en base a una eficaz comunicación y la
    satisfacción del consumidor, simplemente pronto
    morirá.

    No solo esto, en el año 2004 ya no es suficiente
    desarrollar empresas altamente competitivas, sino que hay que
    saber comunicarlo para solo comenzar con un Adventor y terminar
    con un Cliente. Estar en la mente del Mercado en el momento de su
    decisión de compra es todo lo que se requiere para obtener
    Adventors, sin embargo, convertirlo en un Cliente requiere algo
    más que un buen precio,
    productos o servicios,
    requiere satisfacción. Cuidado con los que se enfocan a
    otorgar una ventaja competitiva o un valor
    agregado, los países en vías de desarrollo
    tienen índices tan bajos de competitividad que el simple
    hecho de otorgar competitividad hace a las empresas
    líderes en participación de mercado.

     

    Lic. Norberto C. González
    Mireles

    Licenciado en Contaduría Pública y
    Finanzas
    (ITESM)

    Maestría en Economía Industrial
    (UANL)

    Consultor e Instructor en Desarrollo de
    Empresas Pequeñas y Medianas

    Presidente del Consejo para la Formación
    Empresarial de México,
    A.C.

    Director de Sinergia
    Consultores, S.C.

    (52) (81) 83.98.58.75

    Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

    Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

    Categorias
    Newsletter