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Una visión sobre Coccidias intestinales y diarrea




Enviado por difu



    1. Desarrollo
    2. Conclusiones
    3. Bibliografía

    INTRODUCCION

    La diarrea puede
    definirse como el aumento de volumen, fluidez
    o frecuencia de las deposiciones en relación con el
    hábito intestinal normal de cada individuo.
    Afecta a todas las edades y etnias constituyendo una causa
    importante de morbilidad y mortalidad mundial.

    La diarrea aguda constituye un gran problema de salud
    pública en la mayoría de los países en
    desarrollo y
    es causa de importante morbimortalidad durante la infancia,
    especialmente por su relación con la desnutrición y los altos costos que
    implica para los sistemas de
    salud por su alta
    demanda de
    atenciones ambulatorias y hospitalizaciones. La
    Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que cada
    año se presentan 1.300 millones de episodios de diarrea en
    niños
    menores de cinco años en países en desarrollo y 4
    millones de muertes por diarrea aguda, relacionadas, en el 50-70%
    de los casos con deshidratación.(2).

    No todos los episodios de diarrea aguda requieren
    estudio etiológico, sino aquellos que:

    • duran más de lo habitual,
    • los que producen deshidratación
      iterativa,
    • se presentan como síndrome
      disentérico,
    • o resultan en hospitalización del
      paciente.

    Dado el
    conocimiento actual sobre la epidemiología y
    etiopatogenia de la diarrea aguda y la creciente disponibilidad
    de métodos
    diagnósticos microbiológicos, es impropio formular
    el diagnóstico de "diarrea parenteral" o de
    "transgresión alimentaria" en pacientes
    pediátricos, sin una apropiada evaluación
    de los potenciales factores y agentes infecciosos
    involucrados.

    La mayor parte de los episodios de diarrea aguda son
    autolimitados y aunque, en general, son producidos por
    microorganismos, en la mayoría de los casos no se logra
    identificar en las heces el organismo específico
    responsable de ésta. La diarrea infecciosa se adquiere
    predominantemente por vía fecal-oral al consumir alimentos y
    agua
    contaminados con el microorganismo. Sólo los microorganismos
    que superen nuestras defensas constituidas por la barrera
    ácida del estómago, los mecanismos
    inmunológicos del intestino, como son la producción de inmunoglobulinas y el tejido
    linfoide intestinal, y la motilidad intestinal, que tiende a
    impedir la adherencia del microorganismo a la mucosa, van a
    provocar finalmente diarrea.

    El aislamiento de patógenos en niños con
    diarrea se consigue entre el 50 y 84% de los episodios. El agente
    biológico más frecuentemente aislado es Rotavirus,
    virus Norwalk,
    adenovirus entéricos y astrovirus. . Otros microorganismos
    que se encuentran con cierta frecuencia son (entre las bacterias)
    Escherichia coli enteropatógena (ECEP), Escherichia coli
    enterotoxigénica (ECET), Campylobacter jejuni, Shigella sp
    y Salmonella sp. (2,3)

    En cuanto a Protozoos se
    reportan clásicamente Entamoeba histolytica y Giardia
    lamblia y mas recientemente Isospora, Cryptosporidium y otras
    Coccidias intestinales. Entre las gastroenterocolitis
    infecciosas, los protozoos Cryptosporidium e Isospora belli son
    los microrganismos que más frecuentemente ocasionan
    diarrea crónica en el SIDA.
    (3,4,5)(8,9,10)20)

    El Centro para el Control de las
    Enfermedades
    (CDC) en Atlanta, Georgia, da el nombre de enfermedad emergente
    al incremento de una enfermedad parasitaria en las últimas
    dos décadas o amenaza de incremento en un futuro cercano;
    enfermedad reemergente al resurgimiento de una enfermedad
    conocida, después de la declinación de su
    incidencia y enfermedades nuevas para aquellas que no
    existían antes del siglo XX. .(6)

    Los protozoos patógenos emergentes involucrados
    hoy en día procesos
    gastrointestinales son las Coccidias intestinales Cryptosporidium
    parvum, Cyclospora cayetanensis e Isospora belli y también
    se incluye a Blastocystis hominis, (6)

    Se considera que los elementos causales de la emergencia
    de estas nuevas enfermedades son, entre otros:

    • la oportunidad que brinda el aumento de la biomasa
      humana. que hoy supera los 6 mil millones de
      habitantes,
    • los grandes movimientos migratorios
      contemporáneos,
    • la invasión del hombre a
      nichos escondidos seguida de alteración y en ocasiones
      desaparición de esos componentes estructurales
      ecológicos,
    • Cambios en los ecosistemas,
      tales como: la construcción de presas, deforestación o trastornos globales en el
      clima.
    • cambios en el uso de la tierra
      por efecto de la economía,
    • Movimientos migratorios debidos al pobre nivel de
      vida o a las guerras; el
      comercio
      internacional,
    • el desarrollo tecnológico e industrial que
      permite la
      globalización de abasto alimenticio,
      internacionalización de productos
      transgénicos y transplantes de
      órganos,
    • la respuesta de los agentes microbianos a las medidas
      antibióticas o de selección ambiental,
    • el resquebrajamiento de las medidas de salud
      pública,

    Todo lo antes expuesto puede poner al hombre en contacto
    con microorganismos desconocidos de alto riesgo y
    patogenicidad.(17)

    Hoy en día se ha prestado mayor atención a estos gérmenes en cuanto
    a su relación con la pandemia del siglo XX: el SIDA, de
    ahí que la mayoría de los autores las consideren
    mas que una enfermedad reemergente, una infección
    oportunista del VIH, y es precisamente este uno de los grandes
    riesgos que
    afronta la Humanidad. (5) (7-15)

    Los avances logrados en la lucha contra las enfermedades
    infecciosas en el siglo pasado y el mejoramiento de sistemas de
    saneamiento, manejo y conservación de alimentos,
    llevó al casi convencimiento de que al final del siglo
    podría llegarse a la derrota definitiva de
    aquéllas. Sin embargo los hechos demostraron todo lo
    contrario, particularmente luego del advenimiento de la epidemia
    del VIH-SIDA y. otras ya conocidas, cuyas etiologías
    fueron recientemente descubiertas. Ejemplos, Helicobacter
    pylori
    como causa de la úlcera péptica (1983) o
    Bartonella henselae (1992) como agente de la enfermedad
    por arañazo de gato, la hepatitis C, la
    enfermedad por virus Ebola, la enfermedad de Lyme, el cólera
    por el nuevo serotipo O 139, por citar algunas de las mas
    relevantes. (16)

    Entre 1973 y 1997 se reconocieron nuevos agentes
    biológicos capaces de provocar enfermedades en el hombre y
    algunos animales, y en
    este grupo se
    incluye por la OMS a Criptosporidiosis en 1976, Microsporidiosis
    por Encephalitozoon en 1991, Ciclosporidiasis en 1991, entre
    otras. (16)

    La capacidad de un nuevo microorganismo para originar un
    problema de salud pública depende de varios factores tales
    como:

    • su capacidad y facilidad para transmitirse entre los
      animales y el hombre o entre las personas entre
      sí,
    • posibilidad de diseminarse desde su sitio de
      origen,
    • severidad de la enfermedad,
    • disponibilidad o no de herramientas
      eficaces para prevenir y controlar los brotes y
    • también la posibilidad o no de tratar la
      enfermedad en juego.

    La verdadera gravedad o importancia para la salud
    pública de algunos organismos patógenos
    descubiertos hace poco esta por verse. A esas nuevas enfermedades
    producidas por agentes no identificados anteriormente en el
    ámbito universal o local, según el caso, causantes
    de problemas de
    salud pública en forma local o universal, se les denominan
    enfermedades emergentes (EE). Esta definición de la
    Organización Mundial de la Salud (OMS)
    sustituyó la utilizada hasta entonces (16).

    Dadas estas razones nuestra revisión se encamina
    a mostrar las características mas sobresalientes de dos
    Coccidias intestinales con el fin de colaborar en su mejor
    identificación y divulgación entre la comunidad
    científica a fin de que se tengan en cuenta como nueva
    etiología de la diarrea; haciendo énfasis en las
    dos mas frecuentes: Criptposporidium y Ciclospora.

    DESARROLLO:

    Las Coccidias realizan su ciclo de vida
    en el tubo digestivo y se reproducen por vía sexual y
    asexual dentro de los enterocitos siendo la destrucción de
    células
    epiteliales de la mucosa intestinal el principal mecanismo de
    daño.
    En todos, el cuadro clínico entérico se inicia con
    dolor abdominal epigástrico y diarrea en un periodo de
    incubación de uno a siete días. Se puede presentar
    en forma abrupta, explosiva o de manera gradual, las evacuaciones
    suelen ser muy blandas, líquidas o mucoides, hasta en
    número de seis en 24 horas. Asociado a este cuadro, se
    presenta pérdida o disminución del apetito.
    (6).

    Para la identificación de las Coccidias hasta el
    nivel de especia la mayoría de los autores se basan en
    características del oociste cuando es esporulado, entre
    las que se pude citar tamaño, forma, color, textura y
    contenido interno.

    CRYPTOPORIDIUM:

    Los microsporidios son pequeños protozoarios
    intracelulares obligados ubicados en el Phylum o Tipo
    Microspor
    a, que viven en el intestino del hombre
    (16)(18).

    La criptosporidiosis es una enfermedad de nuevo registro en
    humanos, producida por el protozoario Cryptosporidium
    parvum.

    En 1907 Ernest Edward Tizzer aisló un
    parásito en glándulas gástricas de
    ratón de laboratorio,
    al que llamó Cryptosporidium muris. En 1912
    encontró en intestino de ratón otra nueva especie,
    a la que denominó Cryptosporidium parvum. En la
    década de los cincuenta se le asoció con
    enfermedades diarréicas en aves de corral
    y en 1971 Cryptosporidium parvum cobró interés al
    descubrirse que también producía diarreas en
    ganado vacuno . En 1976 se reportó el primer caso de
    cryptosporidiosis en humanos, pero después casi no se
    reportaron casos. No fue sino hasta 1982-1983 cuando se le
    asoció con severas diarreas en pacientes
    inmunocompetentes. Más tarde, la emergencia del
    síndrome de inmunodeficiencia adquirida hizo más
    evidente el problema que representaba este parásito.
    (17)

    El mecanismo de infección es por ingestión
    de ooquistes a partir de agua o alimentos contaminados. Se trata
    pues de un organismo emergente con un claro comportamiento
    oportunista. Sin embargo, han sido descritos importantes brotes
    de enfermedad diarreica afectando miles y cientos de miles de
    personas luego de beber agua contaminada, tanto en ciudades
    americanas como del Reino Unido. Puede parasitar tanto el
    intestino delgado como el grueso y se caracteriza por ser
    colonizador y no invasor de las células del epitelio
    intestinal. Tiene localización intracelular pero
    extracitoplasmática, dentro de una vacuola
    parasitófora procedente de la célula
    huésped y en el borde en cepillo de las células
    intestinales. (16)

    El Criptosporidium ha sido recientemente reconocido como
    causa de diarrea en todos los grupos de edades
    a nivel mundial, aunque su mayor impacto ha sido entre los
    individuos con sistemas inmunes debilitados, como las personas
    que sufren de SIDA/VIH y los receptores de transplantes, debido a
    que en estos individuos, la infección diarreica no
    sólo es molesta, sino que puede llevar a desgaste grave y
    desnutrición.

    El principal factor de riesgo para la adquisición
    de esta infección es la ingestión de productos
    contaminados con heces fecales y las poblaciones con mayor riesgo
    son los niños, los cuidadores de animales, los contactos
    cercanos de individuos infectados y los hombres que sostienen
    relaciones
    sexuales con otro hombre.

    Los brotes de la enfermedad se han asociado con los
    sistemas públicos de suministro de agua contaminados y
    nadar en piscinas y lagos contaminados.

    La criptosporidiasis se caracteriza por diarrea acuosa
    intensa, dolor abdominal (calambres y retortijones),
    pérdida de peso, anorexia,
    flatulencia y malestar general. Pueden presentarse fiebre, dolores
    musculares, náuseas y vómitos. Muchas
    veces la diarrea y el dolor aparecen cada vez que se ingieren
    alimentos.

    Su período de incubación se estima que es
    de 2 a 14 días. La gravedad y duración de la
    enfermedad son variables en
    el paciente inmunodeprimido. En el paciente inmunocompetente se
    autolimita en 1 o 2 semanas.

    Taxonomía

    El género
    Cryptosporidium spp está clasificado de la siguiente
    manera (8):

    Reino: Protistas.

    Filum: Apicomplexa (esporozoarios)

    Orden: Eucoccidiorida

    Suborden: Eimeriorina

    Familia: Cryptosporidiidae (un sólo
    género)

    Género: Cryptosporidium

    Especies: parvum, muris, baileyi,
    meleagridis.(17)

    El Cryptosporidium spp. crece y se reproduce dentro de
    las células epiteliales de los órganos digestivos
    de los vertebrados. Los organismos que infecta incluye a peces,
    serpientes, aves, roedores, ardillas, venados, caballos, cerdos,
    ovejas, reses, gatos, perros y otros.
    Algunos de ellos, como los roedores, son resistentes a la
    enfermedad, mientras que otros, como el ganado vacuno o el
    hombre, son susceptibles. No existe especificidad del
    parásito con el huésped, sino que presenta
    infectividad cruzada entre aves o entre mamíferos, pero no de aves a
    mamíferos ni al contrario.

    El Cryptosporidium spp. es monoxeno (completa su ciclo
    en un huésped). La ruta de transmisión es
    fecal-oral, puede ser de persona apersona
    o de animal a persona por la ingestión de agua o comida
    contaminada. La persona o animal parasitado arroja los oocistos
    al exterior junto con las heces; la ingestión de los
    oocistos por algún huésped potencial puede resultar
    en una infección. Cuando los oocistos llegan al tracto
    gastrointestinal se liberan los esporozoitos y parasitan las
    células epiteliales; luego, el desarrollo de los
    diferentes estadios del parásito ocurren
    intracelularmente. Del esporozoito se diferencia el
    trofozoito.

    Los trofozoitos se multiplican asexualmente y producen
    merontes Tipo I (con 6-8 núcleos), y merontes Tipo II (con
    4 núcleos). Los primeros producen de 6 a 8 merozoitos, y
    los otros sólo 4 merozoitos. Los merozoitos Tipo I
    producen autoinfección. Los merozoitos del Tipo II invaden
    nuevas células epiteliales y se transforman en
    microgametos y macrogametos; se fusionan y generan un cigoto. En
    el cigoto se producen esporozoitos potencialmente infectivos para
    constituir el oociste. Finalmente, los ooquistes son liberados
    vía heces. Cada generación de parásitos se
    desarrolla y madura en un período de 12 a 24
    horas.

    Por su alta capacidad autoinfectiva y su rápido
    ciclo de vida en terneras experimentales, la producción de
    ooquistes puede llegar a cantidades que van desde los 2 mil hasta
    los 20 mil millones diarios.

    Después de ser arrojados al ambiente los
    esporozoitos mueren, mientras los ooquistes pueden permanecer
    latentes más de un año en agua o en suelo
    húmedo (17).

    En los países en vías de desarrollo poco
    se sabe de la probable presencia de la criptosporidiosis, forma
    de transmisión y efectos en la salud pública, y
    mucho menos se han discutido estrategias para
    la implementación de técnicas
    de análisis diagnóstico,
    detección de brotes, desarrollo de estudios
    epidemiológicos y evaluación del impacto de la
    enfermedad en el progreso socioeconómico de sus regiones.
    Además, la cryptosporidiosis, como enfermedad
    diarréica aguda, es clínicamente poco conocida y se
    le suele confundir con otras enfermedades. Tampoco se sabe que
    posibles secuelas genere en poblaciones de bajos recursos y
    subalimentadas(17).

    El reconocimiento del Cryptosporidium parvum como agente
    etiológico de una nueva enfermedad, surgió ante la
    imposibilidad de diagnosticar, por métodos convencionales,
    la causa de una serie de brotes de enfermedades diarréicas
    en grupos de individuos con insuficiencia inmunológica, y,
    consecuentemente, por la necesidad de identificar y controlar al
    presunto microorganismo patógeno.

    Considerando que su transmisión está
    asociada a la calidad del agua
    y a ciertos productos alimenticios, como las legumbres y algunas
    frutas, se presume que las poblaciones vulnerables, como en las
    otras clases de enfermedades diarréicas, son aquellos
    grupos que carecen de agua potable,
    servicios de
    saneamiento, higiene en la
    preparación de los alimentos, y que muestran una educación
    deficiente

    En los países en vías de desarrollo poco
    se sabe de la presencia de criptosporidiosis, forma de
    transmisión y efectos en la salud pública, y mucho
    menos se han discutido estrategias para la implementación
    de técnicas de análisis diagnóstico,
    detección de brotes, desarrollo de estudios
    epidemiológicos y evaluación del impacto de la
    enfermedad en el progreso socioeconómico de sus regiones.
    Además, la cryptosporidiosis, como enfermedad
    diarréica aguda, es clínicamente poco conocida y se
    le suele confundir con otras enfermedades.

    CICLOSPORA

    Taxonomia:

    Reino Phytobiota.

    Phylum Protozooa

    Superclase Cytomorpha.

    Clse Sporozoa.

    Orden Telosporidia.

    Suboerden Coccidia.

    Familia Eimeridae.

    Genero Cyclospora.

    En épocas reciente el protozoo Apicomplexa C.
    cayetranensis ha emergido como un importante patógeno
    humano causante de diarrea tanto en personas inmunocompormetidas
    como normales, la enfermedad se ha reportado en casi todo en
    continente de América, el Caribe, Sudeste de Asia, Nepal,
    India,
    Bangladesh, Africa,
    Australia, Inglaterra ,
    Canadá, y el este de Europa. En los
    países industrializados la infección se asocia
    tradicionalmente con diarrea en los viajeros que visitan zonas
    endémicas, pero en la década de los 90 se
    reportaron epidemias a partir de alimentos contaminados en
    Canadá y USA. (23)

    El primer reporte sobre Cyclospora en humanos se
    realizó en 1979 en Papua-Nueva Guinea, cuando se
    descubrió un microorganismo parecido a una Coccidia en las
    heces fecales de dos niños y un adulto. Este
    parásito había sido descrubierto por Eimer y
    Schneider en 1870, quines crearon el Género Cyclospora en
    1881; desde entonces han aparecuido en la literatura científica
    reportes esporádicos de este agente biológico como
    parásito intestinal del hombre y algunos animales.
    24

    La infección aparece en personas de todas las
    edades, con alta prevalencia en niños y áreas
    tropicales.

    Las Coccidias como Ciclospsora y Criptosporidium con
    frecuencia han sido confundidas, pues para diagnosticarlos se
    emplean las mismas técnicas de detección
    (tinción de ácido resistencia y
    safranina caliente). Ambos causan diarrea prolongada con
    frecuencia intermitente y afectan a niños en paises
    desarrollados pudiendo conducir a diarrea severa en pacientes
    inmunocomprometidos. En cambio, C
    cayetanenesi esta mas relacionado con Emeria que con
    Criptosporidium.(25)

    C. cayetanensis requier de varios dias a
    semanas como periodo de incubacion en el medio ambiente
    para la esporulacion . Esto hace que la diseminacion persona a
    persona de ete germen sea desconocida aún..El agua ha
    sido impicada en la diseminacion de ambos parasitos.C.
    cayetanensis no ha sido demostrada aun en mamiferosn no
    humanos.(25)

    Cyclospore cayetanensis esta asociado en humanos
    normales e inmunocomprometidos de cualquier edad como causa de
    diarrea severa. Provoca alteraciones en la arquitectura de
    la mucosa yeyunal con impliaciones en las microvellosidades por
    causa de edema difuso e inflitracion , acompañada de
    hiperemeia reactiva con dilatacion vascular y congestión
    de los capilares.(21)

    Ciclospora. cayetanensis fue identificado como
    una nueva especie patógena para el hombre en 1994. Se
    trata de un parásito taxonómicamente ubicado en el
    subreino Protozoa, phylum Apicomplexa, clase
    Sporozoea (esporozoarios), orden Eucoccidiida,
    familia
    Eimeriidae, muy vecino pues a las Coccidias. Se piensa en
    el agua y alimentos contaminados como fuentes de
    infección para el hombre en el que origina diarreas
    autolimitadas en inmunocompetentes y diarreas crónicas en
    pacientes con SIDA. (16) 21

    Aun no existen suficiente información como para afirmar que las
    fuentes de abasto de agua son factor de riesgo para contraer
    Ciclospora, pero la mayoría de los autores se inclina mas
    por la vía de alimentos contaminados.21

    Los síntomas se caracterizan por diarrea acuosa
    (aproximadamente 6 deposiciones diarias), nauseas, anorexia,
    malestar abdominal, fatiga, y perdida de peso, lo que hace a la
    entidad pasar inadvertida. (19)

    El ciclo vital del Cyclospora es directo pues el
    parásito vive en las células intestinales del
    huésped. Inicialmente se reproduce asexualmente, y los
    merozoitos que resultan infectan más células, luego
    generan los gametos, que a su vez se funden y producen el
    oocistes, que es la estructura que
    pasa al material fecal del huésped.

    En una a dos semanas los oocistes llegan a ser
    contagiosos mediante la esporulacion. Infectan otro ser humano
    cuando injiere alimentos o agua contaminada con
    oocistes.

    Como con la mayoría de los otros parásitos
    del aparato gastrointestinal, este parásito es
    diagnosticado encontrando oocistes en el material fecal del
    paciente.

    Los síntomas asociados a este parásito son
    variables e imprecisos.. Algunos seres humanos infectados no
    sufren al parecer ningún síntoma, mientras que
    otros sufren varios grados de diarrea, calambres, náuseas
    y vómitos así como fiebre. En la mayoría de
    los casos los síntomas desaparecen en algunos días,
    pero en otros casos pueden durar meses.

    La patogenesia de la diarrea por Cyclospora
    todavía no se ha explicado completamente. La ausencia de
    leucocitos fecales y hematíes, lo que indica el mecanismo
    no invasor. La diarrea parece ser secretora por naturaleza,
    según indicada la producción excesiva de
    líquido acuoso por el epitelio intestinal.

    CONCLUSIONES

    Los mecanismos de transmisión descritos para
    enteropatógenos fecales son:

    • vía fecal-oral (ciclo ano-mano-boca), a
      través de vómitos y secreciones
      nasofaríngeas por vía aérea. Por lo tanto,
      los factores de riesgo para las enfermedades diarreicas son:
      ambientales (ej.: agua inadecuada o con contaminación fecal, falta de facilidades
      sanitarias, mala higiene personal y
      doméstica, inadecuada preparación y almacenamiento de alimentos, ignorancia o
      patrones culturales adversos con malas prácticas del
      destete y tardía búsqueda de atención
      médica)
    • y del huésped (ej.: desnutrición,
      deficiencias inmunológicas, factores genéticos,
      ausencia de lactancia
      materna). (2)

    La dinámica de transmisión de estas
    parasitosis emergentes es dependiente de malos hábitos
    higiénicos, por tratarse de protozoosis transmitidas por
    fecalismo, la vía de entrada es la boca y la
    transmisión es fecal-oral, las formas infectantes,
    ooquistes y quistes, se diseminan a partir de heces de individuos
    parasitados. Asimismo, estas protozoosis están
    consideradas dentro de las zoonosis, con
    una amplia variedad de huéspedes naturales que incluyen
    mamíferos domésticos, silvestres y aves de corral.
    El diagnóstico etiológico requiere de metodología especial, las técnicas
    convencionales de coproparasitoscópicos (CPS) directo y de
    concentración son poco útiles para la
    identificación. Los primeros diagnósticos se
    realizaron de productos obtenidos de biopsia, en la actualidad
    estas técnicas agresivas han sido sustituidas por el
    empleo de
    procedimientos
    no agresivos con el manejo de materia fecal
    como producto
    biológico, lo más recomendado son las tinciones
    ácido-alcohol
    resistente en frío, la tinción de Kinyoun. El uso
    de poli y monoclonales también ha sido utilizado en
    técnicas de captura de antígeno en heces, con los métodos
    de inmunoensayo enzimático (ELISA) o inmunofluorescencia
    (IFI), con excelentes resultados. (6) .

    Los protozoos intestinales formadores de esporas causan
    infecciones intracelulares del epitelio y pueden interferir con
    la absorción y la secreción, y se parecen entre
    sí en que:

    • Causan ionfección en el
      enterocito.
    • La infección es intracelular pues el
      parásito se replica y madura dentro del
      enterocito.
    • El producto final de la maduración es una
      partícula infecciosa denominada OOCISTE o ESPORA, que
      resulta vertida hacia la luz
      intestinal.

    Siendo estas tres semejanzas biológicas las que
    permiten a estos parásitos causar similares
    manifestaciones clínicas y
    patofisiológicas.

    Bibliografía:

    1. Triviño X, Guiraldes E. Menchaca G. DIARREA
      AGUDA.
      http://escuela.med.puc.cl/paginas/publicaciones/ManualPed/DiarreaAg.html
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    Autor:

    Lic. Jorge L. Difurnot Lopez

    Dra. Rosa Ramirez Castillo

    Dra. Ludy Castillo

    Procedencia: Facultad de Ciencias
    Medicas de Granma.

    Manzanillo. Cuba

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