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La odorología criminalística en Cuba




Enviado por grafotecnico



    Revista Cubana de Derecho, No. 21,
    Enero-Junio 2003, pp. 87-104

    1. Carácter de ciencia de
      la Criminalística Cubana
    2. Partes integrantes de la ciencia
      Criminalística cubana
    3. El olor y la huella
      olorosa
    4. El olfato
    5. Reseña histórica
      del surgimiento y desarrollo de la Odorología en el
      mundo y en Cuba
    6. El Laboratorio de
      Odorología
    7. El dictamen pericial
      odorológico y su valor legal
    8. Ejemplos de la aplicación
      de la Odorología
      Criminalística
    9. Conclusiones
    10. Bibliografía

    Introducción.

    La ciencia
    Criminalística constituye tema de estudio de numerosas
    personas vinculadas de diversas maneras al descubrimiento,
    investigación, esclarecimiento y
    prevención de los hechos delictivos, así como al
    enjuiciamiento y sanción de sus comisores.

    Entre esas personas se encuentran las figuras
    jurídicas del Perito Criminalista, el Instructor, el
    Investigador, el Juez y el Fiscal. En las
    Facultades de Derecho de las Universidades del país la
    Criminalística constituye una de las disciplinas en la
    formación de los juristas. La población cubana en general, mediante los
    medios de
    difusión masiva, recibe variadas informaciones que
    contribuyen a incrementar sus conocimientos policíacos y,
    en particular, su cultura
    criminalística.

    Los contenidos de los temas criminalísticos que
    conforman los programas de
    estudio en los Laboratorios, Universidades y otras instalaciones
    de los Organismos de la
    Administración Central del Estado (OACE)
    se manifiestan tanto en la educación de
    pregrado como en la de posgrado y esta última en las dos
    vertientes de la educación posgraduada
    de la República de Cuba: la
    Superación Profesional (Curso, Entrenamiento y
    Diplomado) y la Formación Académica (Especialidad,
    Maestría y Doctorado).

    En los procesos
    penales se aportan pruebas
    documentales, testificales y periciales para ilustrar al Tribunal
    y éste, a su vez, puede formarse una idea lo más
    exacta posible de la realización de los hechos juzgados.
    En el Acto del Juicio Oral, estos elementos probatorios
    demuestran la participación del acusado en el lugar donde
    se cometió el delito
    fundamentalmente, así como sus actuaciones antes y
    después del hecho; teniendo gran peso en la
    apreciación de los Jueces las determinaciones realizadas
    por los Peritos Criminalistas, las que poseen una
    fundamentación científica y están basadas en
    las experiencias de la práctica pericial de largos
    años de intenso trabajo en
    cada una de las especialidades de la Técnica
    Criminalística.

    Algunos de los peritajes criminalísticos que
    permiten la identificación plena del hombre, se
    realizan con el empleo de la
    Técnica de punta de la Biología del
    Ácido Desoxirribonucleico (ADN), así
    como mediante la investigación criminalística de las
    huellas de los dientes, de la escritura
    manuscrita, de las huellas dermatoscópicas (digitales,
    palmares, podorales y otras), de la voz y del olor
    humano.

    La Odorología Criminalística se
    encarga del estudio del mecanismo de formación de la
    huella olorosa, así como de los medios y métodos
    empleados para su captación, conservación y
    posterior comparación con las impresiones olorosas de los
    ciudadanos sospechosos de un delito investigado.

    Carácter
    de ciencia de la Criminalística Cubana.

    La ciencia Criminalística contribuye al
    esclarecimiento de los delitos sin
    perder de vista que, ante todo, se deben observar las exigencias
    planteadas por la Ley de Procedimiento
    Penal.

    Está comprobada la utilidad de las
    huellas y evidencias en
    los diferentes aspectos de la investigación criminal y
    todos los factores encargados del cumplimiento de la Ley
    recurren, cada vez más, a los resultados del Laboratorio de
    Criminalística para conseguir elementos difíciles
    de obtener por otros medios. A medida que progresa la
    investigación científico-criminalística,
    aumenta la importancia y el uso de las huellas, evidencias y
    muestras en la investigación de los hechos
    delictivos.

    Prácticamente cualquier cosa puede convertirse en
    una evidencia. Puede ser tan insignificante como una
    partícula de polvo o tan grande como la caldera de un
    ingenio azucarero. Puede asumir la forma de un gas o de un
    líquido, o bien puede tratarse de un patrón muy
    simple o abarcar miles de páginas de documentos.

    El principio básico para examinar las huellas y
    evidencias es bastante simple. Siempre que alguien abandona un
    lugar, se lleva algo consigo y a la vez deja algo suyo.
    Corresponde al perito criminalista examinar aquello que
    quedó en el lugar del suceso, formular una hipótesis acerca de su procedencia y a
    quién pudo pertenecer.

    La Criminalística representa una herramienta
    indispensable que contribuye a establecer la objetividad
    necesaria en la ejecución de los dictámenes
    periciales, por lo que el auxilio prestado por las demás
    ciencias es
    completamente válido y proporciona un alto grado de
    cientificidad a la investigación de los
    delitos.

    Como toda ciencia, la Criminalística no tuvo un
    punto de partida definido, en virtud de que las especialidades
    que concurren a su integración han acentuado su desarrollo y
    profundidad, tanto de manera técnica como práctica,
    implicando cambios que hasta hoy es difícil delimitar en
    su amplitud, dado el vertiginoso avance de la investigación científica.

    De esta manera, todas las ramas del conocimiento
    que participan en el saber criminalístico
    (Biología, Química, Física, Medicina,
    Matemática, entre otras) han venido a
    enriquecer las opciones de estudio propio de la
    investigación de los delitos. Obviamente, la
    Criminalística en nuestros días es el resultado de
    la evolución tecnológica y de los
    nuevos descubrimientos de las ciencias
    naturales.

    Como escribió el criminalista austríaco
    Dr. Hans Gross en su Manual del Juez
    de Instrucción . . . "la Criminalística es un
    conjunto heterogéneo de conocimientos tomados de otras
    ciencias y utilizables en la investigación de los delitos
    . . ."

    La Criminalística, debido a que en su nacimiento
    careció de la delimitación de un campo propio de
    estudio, en más de una ocasión y por diferentes
    autores ha sido considerada como Técnica Policial, como
    Policía Científica, como una rama auxiliar del
    Derecho o como parte de la Criminología.

    Para la Escuela Cubana de
    Criminalística ella es una ciencia jurídica
    independiente, de perfil jurídico penal, tal y como lo son
    el Derecho Penal,
    el Derecho
    Procesal Penal, la Criminología y la
    Victimología.

    Consideramos que tiene un carácter de ciencia porque posee una
    Teoría
    General en la que se formulan su objeto, sus tareas, sus objetivos y el
    lugar que ocupa en el sistema de
    conocimientos; así como porque elabora sus propios medios
    y métodos técnicos y sus procedimientos
    tácticos, sobre la base de la adaptación en forma
    creadora de los logros de otras ciencias, entre ellas las
    naturales y las técnicas.
    Además, porque tiene una fundamentación
    filosófica, que en este caso es materialista, basada en
    los principios
    marxistas-leninistas.

    Es jurídica porque, aunque emplea elementos de
    otras ciencias, como la Biología, la Química, la
    Física, la Matemática y otras, no puede incluirse
    dentro de ninguna de ellas, debido a que su objeto de estudio son
    los elementos materiales
    relacionados con los delitos y el descubrimiento,
    investigación y prevención de los mismos, dentro de
    lo preceptuado por la Ley de Procedimiento Penal.

    Además, la Criminalística contribuye al
    cumplimiento de las exigencias planteadas por la ley penal, en
    cuanto al esclarecimiento rápido, multilateral y completo
    de los delitos que afectan tanto a nuestro país como a la
    comunidad
    internacional, con el fin de que todo autor de una acción
    delictiva reciba una justa sanción y que ningún
    inocente resulte sancionado. Igualmente dirige sus esfuerzos
    hacia la prevención de los delitos y la
    erradicación de las causas que los generan.

    Partes integrantes
    de la ciencia
    Criminalística cubana.

    En el estado
    actual de su desarrollo, la Criminalística cubana
    está integrada por cuatro partes: Teoría General y
    Técnica, Táctica y Metodología
    Criminalísticas.

    La Teoría General es la parte en la que se
    formulan el objeto de la Criminalística, sus tareas y
    objetivos; así como la base teórica de la
    identificación criminalística.

    La Técnica Criminalística es el sistema de
    medios y métodos que se emplean, tanto en la
    ejecución de diferentes acciones de
    instrucción como en la realización de peritajes
    criminalísticos, para el descubrimiento, fijación,
    ocupación e investigación de las huellas y
    evidencias, así como para la clasificación
    técnico-criminalística en la búsqueda e
    identificación de los objetos que tienen importancia para
    la investigación de los delitos.

    La Técnica Criminalística en Cuba la
    integran las siguientes especialidades:

    01. Biología

    02. Drogas y
    Toxicología

    03. Químico-Físico

    04. Trazología

    05. Balística

    06. Dermatoscopía

    07. Identificación de las Personas por sus Rasgos
    Exteriores (IPRE)

    08. Documentología

    09. Fotografía
    y Vídeo

    10. Informática
    Criminalística

    11. Averías, Explosiones e Incendios
    (AVEXI)

    12. Aplicaciones Químicas Operativas
    (AQO)

    13. Técnica Canina

    14. Odorología Criminalística

    La Táctica Criminalística se ocupa de la
    elaboración y desarrollo de los métodos de
    ejecución de las distintas acciones de instrucción,
    así como las normas
    tácticas para la utilización racional de los
    recursos
    científico-tecnológicos de la Técnica
    Criminalística.

    Las acciones de instrucción que están
    reguladas por la Táctica Criminalística son las
    siguientes:

    01. Inspección del lugar del suceso

    02. Presentación para el
    reconocimiento

    03. Reconstrucción de los hechos

    04. Experimento de instrucción

    05. Registro

    06. Detención

    07. Interrogatorio

    08. Disposición del peritaje

    La Metodología Criminalística (o
    Metodología de la investigación de los distintos
    tipos de delitos) es la que proporciona los métodos y
    recomendaciones, con basamento científico, para la
    organización y ejecución de la
    investigación de cada una de las tipicidades delictivas
    preceptuadas en el Código
    Penal.

    Durante el proceso de
    investigación del delito se emplean medios y
    métodos técnicos y también procedimientos
    tácticos, lo que demuestra la estrecha relación
    existente entre las partes integrantes de la ciencia
    Criminalística.

    El olor y la huella
    olorosa.

    La palabra olor, según los diccionarios
    Aristos, Cervantes de
    la Lengua
    Española y el de Términos Médicos, proviene
    del latín vulgar olor, oloris y coinciden en
    señalar que "el olor es una sensación o
    impresión que en el olfato producen los efluvios o
    emanaciones de los cuerpos". De esta definición podemos
    comprender que sin el olfato (órgano exclusivo de muchos
    animales) no
    es posible establecer el olor de determinado cuerpo oloroso, a no
    ser con la utilización de determinados medios
    técnicos como, por ejemplo, el Cromatógrafo
    Gaseoso.

    La huella olorosa no es más que una microhuella
    "invisible" a la percepción
    humana, formada por ácidos
    grasos volátiles, aminoácidos y otros olores
    adicionales del cuerpo productor (humano), que puede ser captada
    por el perito criminalista con la utilización de medios
    especiales, tales como paños odoríficos, frascos y
    pinzas estériles, de los lugares en que se sospeche el
    contacto pleno del individuo con
    el objeto o lugar.

    En cualquier lugar donde el individuo toque, roce o
    camine, deja su olor, aunque utilice guantes o zapatos para no
    dejar sus huellas papilares. Ha sido demostrado que se pueden
    obtener huellas olorosas en cualquier superficie (madera,
    asfalto, plástico,
    papel, cerámica, líquidos, etc.),
    aún cuando estos objetos o lugares no se encuentren
    preservados y hayan sido tocados por más de una persona.

    Además, se ha comprobado en la práctica
    pericial que se pueden obtener huellas olorosas de
    cadáveres, de máculas hemáticas, de orina,
    de heces fecales, de saliva, de huellas dermatoscópicas
    sin valor
    identificativo y de huellas de calzado.

    Es necesario conocer que el olor humano está
    compuesto por productos de
    la fermentación de la grasa de la piel,
    ácidos grasos volátiles de bajo peso molecular,
    aminoácidos y otras sustancias de excreción y
    secreción que intervienen en el metabolismo,
    así como por los olores provenientes de la alimentación,
    perfumes, cosméticos, vicios (tabaco, café,
    alcohol o
    drogas diversas), medicamentos y del medio ambiente
    donde se vive o trabaja, toda esta mezcla de olores forma un
    complejo-olor UNICO de cada persona e irrepetible,
    aún cuando sean gemelos bivitelinos, lo que le concede al
    olor humano un carácter individualizante, por lo tanto
    IDENTIFICA a la persona.

    En este sentido la Criminalística cubana ha
    comprobado que el olor en las diferentes partes del cuerpo de un
    individuo es el mismo, incluso perdura después de su
    muerte, lo que
    ha permitido identificar a un individuo por la impresión
    olorosa de su cintura, aunque la huella olorosa haya sido dejada
    por las manos de este ciudadano.

    El procedimiento de la captación de la huella
    olorosa es sencillo, solamente exige de la observancia de las
    reglas de higiene y
    esterilidad para evitar contaminaciones de olores y determinar
    objetivamente qué objetos o lugares tuvieron mayor
    contacto con el autor del hecho, así como al tener el
    círculo de sospechosos (sin número límite de
    estos), se les toman las impresiones olorosas (su olor), para
    proceder posteriormente a la comparación de estos olores
    en la cámara de comparación climatizada, alejada de
    toda fuente de campos magnéticos, ruidos y utilizando
    perros
    especialmente entrenados para comparar e identificar olores
    humanos en conserva, utilizando para ello la metodología
    pericial cubana.

    El
    olfato
    .

    ¿Cuál es el medio sensor utilizado para la
    interpretación y descodificación de
    este lenguaje
    oloroso? Es el perro, el cual se entrena durante 16
    semanas en la diferenciación e identificación de
    olores en conserva (del Lugar del Suceso y de los sospechosos) y
    a través de su poderoso órgano olfatorio, se logra
    la identificación de la persona que participó en el
    lugar donde se cometió el delito.

    La región olfatoria en el perro ocupa la mitad de
    la región nasal y está recubierta por una mucosa de
    color amarillo,
    cuyo epitelio tiene carácter olfatorio netamente, de
    aquí parten fibras nerviosas que llegan hasta el
    lóbulo olfatorio que ocupa una zona extensa del cerebro de los
    canes, lo que posibilita un aumento de la respuesta al
    estímulo olfatorio (impulsos
    eléctricos).

    Desde el punto de vista fisiológico y
    estructural, la célula
    olfatoria, responsable de captar las moléculas olorosas,
    está recubierta por finísimos flagelos o cilios de
    diversos calibres y longitudes (aproximadamente son 72 cilios por
    cada célula),
    que suman 2 BILLONES de células
    olfatorias en esta área (en el Pastor Alemán)
    contra 220 millones que posee el ser humano, lo que le permite a
    los canes tener una superficie de recepción del
    estímulo tal, que solo se necesita UNA MOLECULA
    olorosa para estimular el olfato canino y descubrir la fuente
    productora.

    Los mamíferos poseen en general el olfato
    muy desarrollado, aunque se clasifican en dependencia de la
    capacidad olfatoria en:

    Hiperósmicos: alta sensibilidad olfatoria,
    entre estos carnívoros (perros, etc.), ungulados (cerdos,
    vacas, etc.) y roedores (ratones).

    Hipósmicos: sensibilidad olfatoria media,
    en este se agrupan los primates y el
    hombre.

    Anósmicos: no existe el olfato,
    entre estos se encuentran los cetáceos (ballenas y
    delfines).

    Los olores se han digitalizado, uniéndose a las
    palabras, a los números, a la fotografía y a los
    sonidos, como una información más que puede ser
    almacenada en computadoras y
    enviada a través del mundo por correo o en
    disquetes.

    En un artículo llamado Naso fino, de la revista "The
    Economist" de abril de 1995, se plantea que la Nariz
    electrónica
    , es un equipo compuesto por sensores
    químicos unidos a una red nerviosa, que hace
    posible la captura de una de las sensaciones más evasivas
    y evocativas.

    El diseño
    de la Nariz electrónica, dibuja o copia fielmente su
    contraparte humana. Este sofisticado "órgano" tiene
    alrededor de 10 000 sensores, cada uno de los cuales puede
    absorber un rango de olores químicos volátiles. El
    olor a queso puede estimular un grupo de los
    mismos, así como el de la cebolla otro grupo. La
    información de cada sensor pasa por un bulbo olfatorio, el
    cual fusiona esto y lo convierte en un modelo de
    moléculas que han sido absorbidas. Este modelo se chequea
    contra la memoria de
    olores, la cual dice en efecto, "Sí, yo he olido eso
    anteriormente, es col".

    En la versión electrónica, las
    moléculas de olores son captadas en la superficie de
    varios polímeros conducidos electrónicamente. Esto
    altera su resistencia
    eléctrica en determinada medida la cual depende de la
    composición del olor y de la estructura
    física y química del polímero.

    El cambio de las
    características eléctricas de la formación
    de los polímeros representa una firma única o una
    "impresión o huella de olor", el cual se compara por la
    vía de la red nerviosa con el banco de datos de olores
    en la computadora
    personal.

    Al igual que la nariz humana, la versión
    electrónica puede aprender a ser más perspicaz y a
    discernir mejor. Todo el mundo conoce el olor a café, pero
    al igual que un verdadero conocedor de olores, la nariz
    electrónica se entrena para que distinga el Mysore del
    brasileño.

    Las compañías de perfumes, de comidas y de
    bebidas están muy entusiasmadas por el uso de este equipo
    para certificar el control de la
    calidad de
    estos productos, así como la autenticidad de estos, siendo
    más barato que la utilización de la cromatografía gaseosa y un panel de
    expertos oledores.

    La Administración Americana para Alimentos y
    Drogas encuentra que la máquina Arosmacan (nariz
    electrónica), no sólo puede detectar un pescado que
    esté echado a perder mucho antes que una persona, sino
    también discrimina entre diferentes especies.

    En la medicina este equipo también se utiliza con
    buenos resultados. En el Hospital de la Universidad del
    Sur de Manchester en Inglaterra, una
    Nariz electrónica monitorea la cura de una úlcera
    de la pierna, oliendo las infecciones para saber si existe un
    estreptococo beta hoemolitico, en apenas segundos, siendo
    el método
    convencional de diagnóstico en 5 días.

    También se usan en naves espaciales como detector
    de fuego y la Gral. Motors la usa para construir un sistema de
    aire
    acondicionado, mucho más sensitivo, en los
    carros.

    El Dr. MV. Marcos Molina Waldemiroff realizó una
    búsqueda en la Oficina Cubana de
    la Propiedad
    Industrial,
    obteniendo información sobre las patentes
    existentes en EUA, Europa y España, en
    las cuales se encontraron los siguientes equipos relacionados con
    los olores:

    • Aparato electrónico mata-mosquitos (simula
      temperatura
      y olor humanos).
    • Método para la reducción del mal olor
      de la orina.
    • Producto para prevenir el mal olor de las
      axilas.
    • Producto para prevenir el mal olor del
      cuerpo.
    • Producto para curar la halitosis humana y
      animal.
    • Producto que reduce el mal olor de las heces de los
      gatos.
    • Método y aparato para determinar
      microorganismos en sangre.
    • Método para detectar gases.
    • Método y aparato para la detección de
      sustancias olorosas de drogas, explosivos, olores del cuerpo y
      alimentos enlatados.
    • Equipo para determinar por los olores del
      líquido ruminal.
    • Equipo para determinar la calidad del
      semen.
    • Método y aparato para la estimulación
      olfatoria en la demencia presenil.
    • Camisa para conciliar el sueño (Japón).

    Todos estos equipos mencionados, incluyendo la nariz
    electrónica, no suplen ni remotamente las posibilidades
    del órgano olfatorio canino, ya que su capacidad olfatoria
    es muy alta, lo que le permite trabajar incluso con una sola
    molécula olorosa.

    Breve reseña
    histórica del surgimiento y desarrollo de la
    Odorología en el mundo y en Cuba.

    La Odorología Criminalística surge en la
    década de los sesenta del siglo XX, en la Unión
    Soviética, donde se realizaron los primeros experimentos con
    los olores en conserva, estas investigaciones
    se desecharon a finales de esta década, pero la
    República Democrática Alemana retomó estos
    trabajos y desarrolló la especialidad exponiendo sus
    avances en el Simposio
    Internacional de Criminalística, celebrado en ese
    país en 1972, a partir de este momento fue utilizada por
    todos los países socialistas de Europa. En Cuba, en el
    año 1989 se decide comenzar la construcción del Laboratorio de
    Odorología, con la experiencia de algunos
    compañeros que habían visitado estos países
    y con la ayuda además de material bibliográfico
    ruso que hablaba sobre el tema. En 1991 se hacen las primeras
    pruebas de campo en la 9na unidad de PNR (Arroyo Naranjo),
    obteniéndose los primeros resultados y decidiéndose
    extender la técnica a Ciudad de La Habana y,
    posteriormente en 1993, al resto del país.

    Además de Cuba, en el mundo emplean la
    Odorología Dinamarca, Holanda, Bélgica, Suecia,
    Alemania,
    Hungría, teniendo cada país un diferente nivel de
    desarrollo, pero todos emplean un método similar de esta
    Técnica.

    Esta especialidad tiene las siguientes
    ventajas:

    • Permite obtener huellas olorosas, aun cuando el lugar
      del hecho, el objeto o el individuo no se encuentren
      preservados o estén contaminados con olores
      ajenos.
    • Se pueden obtener olores en huellas de calzado, de
      pies desnudos, dermatoscópicas sin valor identificativo,
      de secreciones y fluidos biológicos, del asfalto, del
      césped, de las vías de penetración al
      inmueble o vehículo, de personas, de animales y en
      general de objetos de cualquier constitución.

    El éxito
    del trabajo esta condicionado por tres factores
    importantes:

    • La pericia y sagacidad del perito criminalista en el
      momento de ocupar la huella.
    • Las posibilidades que tengan los órganos de
      investigación para presentar personal
      sospechoso.
    • El entrenamiento sistemático de los canes,
      para trabajar olores humanos en conserva.

    El Laboratorio
    de Odorología.

    Para el trabajo de
    Odorología se requieren los siguientes
    elementos:

    – Frascos estériles de 500 – 800 ml, con cierre
    hermético.

    – Paños odoríficos ricos en fibras de
    algodón.

    – Pinzas cuyo material pueda ser
    esterilizado.

    – Guantes y Papeles finos de aluminio.

    – Perras de la raza Pastor Alemán, entrenadas en
    la comparación e identificación de olores humanos
    en conserva.

    – Especialistas preparados en Técnica Canina y
    Criminalística.

    Archivo para
    conservar las huellas y las impresiones olorosas.

    – Cámara para la comparación de huellas
    olorosas e impresiones de sospechosos.

    – Área de esterilización donde se
    garantiza la calidad de los medios.

    – Oficina para la confección de los
    dictámenes periciales.

    Archivo o banco de olores.

    En esta área se almacenan los frascos que
    contienen las huellas olorosas del lugar del suceso y las
    impresiones olorosas de los sospechosos, así como un banco
    de olores de delincuentes. Las dimensiones de esta área
    están en dependencia de las necesidades de almacenamiento,
    teniendo los siguientes requisitos:

    • Temperatura entre los 15 – 20 grados
      centígrados, prefiriéndose temperaturas
      bajas.
    • Humedad relativa entre el 60 – 70
      %.
    • Estantes de metal.
    • Termómetro.
    • Higrómetro.
    • Meseta pequeña.
    • Iluminación adecuada.
    • Organización de los frascos según el
      criterio necesario (por regiones, delitos, etc.).
    • Acceso restringido a esta área.
    • Utilización de una doble puerta, para que no
      existan cambios significativos de temperatura y evitar
      contaminaciones con olores ajenos.

    Entrenamiento de los canes.

    Se entrenan rigurosamente durante 16 semanas, perras de
    la raza Pastor Alemán, con carácter
    flemático a sanguíneo, de mucha sociabilidad, con
    el reflejo alimenticio muy desarrollado y de uno a dos
    años de edad. Este entrenamiento se realiza sobre la base
    de una metodología diseñada para tales
    efectos.

    Método de comparación.

    La comparación de las huellas olorosas ocupadas
    en el lugar del suceso contra las impresiones de sospechosos o
    potenciales delictivos, se realiza en la cámara de
    comparación, con acceso restringido, la cual está
    climatizada (15 – 20 grados C) y alejada de toda fuente de
    ruidos y olores contaminantes.

    Una vez en dicha cámara, se le da a olfatear al
    can la huella olorosa para que busque en una hilera de ocho
    frascos que contienen las impresiones olorosas; si el can
    identifica un complejo-olor idéntico al que tiene por
    referencia, se echa al lado de ese frasco y da muestras de estar
    seguro de su
    selección, siendo estimulado por el perito
    criminalista con una golosina. Este procedimiento puede
    realizarse a la inversa, es decir, impresiones olorosas de
    sospechoso contra huellas de diferentes casos o huellas contra
    huellas según corresponda.

    Al identificar un olor idéntico, se cambian los
    frascos de posición y se realizan 6 rondas o pases, al
    concluir estos se vuelve a realizar todo este procedimiento con
    otra perra.

    Método de captación de la huella
    olorosa en el lugar del suceso
    .

    Para esto el perito criminalista determinará en
    el Lugar del Suceso, cuáles lugares, objetos y personas,
    tuvieron contacto pleno con el autor del hecho, posteriormente se
    aplicará sobre el sitio determinado el paño
    odorífico por 30 minutos, al cabo de los cuales se
    retirará este paño utilizando pinzas
    estériles y se conservarán en los frascos,
    debidamente identificados y remitidos al archivo de olores con la
    solicitud de peritaje
    correspondiente.

    Método para la ocupación de impresiones
    olorosas.

    Se le pide a la persona que tome el paño del
    frasco y se lo coloque en la región de la cintura por 30
    minutos, posteriormente lo vuelve a introducir en el frasco, se
    cierra, se identifica y se remite al laboratorio para su futura
    comparación. Se acompaña de una planilla con los
    datos de esta persona.

    El dictamen
    pericial odorológico y su valor legal.

    La actuación del Perito en los procesos penales
    aparece recogida y regulada en los artículos 126, 149, 200
    al 214 y 332 al 337 de la Ley de Procedimiento Penal y en ese
    mismo cuerpo legal aparecen reguladas las reglas para la
    apreciación de la prueba pericial, en los artículos
    356 y 357, lo que se complementa con lo dispuesto en el Acuerdo
    182-85 del Tribunal Supremo Popular.

    Como principio, ningún peritaje
    criminalístico por sí solo podrá determinar
    la responsabilidad legal de un acusado de un hecho
    investigado. Es un indicio probabilístico sobre un
    determinado aspecto circunstancial de presencia, contacto, forma
    de ejecución, etc., en relación con el delito
    cometido. Por tanto, el Dictamen Pericial es un elemento
    más que se debe armonizar, corresponder y complementar con
    el universo de
    los elementos probatorios obtenidos durante el proceso
    investigativo y cada uno de ellos, tomados por separado y
    aislándolo del conjunto, no conducen de modo alguno a
    probar culpabilidad,
    constituyendo solo indicios probabilísticos al igual que
    el dictamen pericial. Es la unión de todos los indicios o
    elementos probatorios, lo que lleva a la certeza y a la
    convicción.

    Ningún texto legal
    establece qué puede o no ser objeto de un peritaje
    criminalístico, en el que se requiere de un razonamiento
    lógico subjetivo del perito, partiendo de elementos no
    perceptibles sensorialmente por el hombre y que requieren de un
    juicio valorativo especializado para su comprensión e
    interpretación. Ese juicio valorativo es realizado
    mediante la deducción, la inducción y la analogía para
    establecer la génesis, el nexo y la relación de
    causalidad mediante el estudio, la experimentación y la
    observación, indagando sobre lo ocurrido
    desconocido, estableciendo la concatenación de
    probabilidades racionales que permitan extraer conclusiones
    objetivas de señales
    generalmente subjetivas. Ese juicio valorativo requiere de una
    compleja y ardua preparación profesional especializada de
    los peritos criminalistas, que es lo que da confiabilidad legal a
    su dictamen.

    Toda peritación es un acto personal, cuyo
    resultado tendrá incidencia en un sentido u otro, en el
    fallo final del Tribunal. Para su realización, el perito
    requiere no sólo de amplios conocimientos especializados y
    de experiencia profesional, sino necesariamente debe auxiliarse
    de múltiples y variados equipos y medios sensores,
    físicos, químicos, biológicos, etc., cuyas
    reacciones y señales deberá interpretar
    casuísticamente, para arribar a sus conclusiones
    periciales.

    El resultado final del Dictamen sobre los olores, debe
    ser prudencialmente valorado, pero sin menospreciarlo o
    desdeñarlo por desconocimiento de quienes lo reciben y
    evalúan, sobre sus características y
    métodos; así como los detalles y diferencias
    sustanciales del trabajo pericial sobre los olores en el lugar
    del suceso y en el laboratorio de Odorología.

    El peritaje de la huella olorosa debe ser tomado en
    consideración de la misma manera que se reciben y
    evalúan todos los peritajes presuntamente probatorios que
    se aportan al proceso sumario. El olor señala
    circunstancias tan importantes como la presencia y el contacto,
    pero no la responsabilidad o participación en el hecho
    delictivo investigado.

    ¿Quién extrae la huella olorosa del lugar
    del suceso? El Perito.

    ¿Quién fiscaliza la toma de la
    impresión olorosa del sospechoso? El
    Perito.

    ¿Quién somete estos olores a la
    comparación utilizando un can como único medio
    sensor e interpreta sus reacciones? Otro
    Perito.

    ¿Quiénes interpretan los resultados
    finales y realizan las conclusiones? Estos
    peritos.

    De las cuatro preguntas – respuestas anteriores se
    entiende que no es el animal (como cuando se utiliza un equipo o
    un instrumento) el que emite las conclusiones, el perro es el
    medio sensor utilizado, ya que hasta el momento no existe un
    equipo o instrumento creado por la mano del hombre, que pueda
    suplir el poderoso órgano olfatorio canino y su
    utilización en este trabajo con olores humanos y la duda
    sobre el posible margen de error en el trabajo pericial, no puede
    ser mayor que en otros peritajes que requieren de una
    interpretación valorativa subjetiva del perito.

    Las conclusiones del peritaje odorológico se
    brindan al Tribunal como asesoramiento e ilustración y es el Tribunal quien
    evalúa, dentro del conjunto del universo de
    pruebas recopiladas y aportadas en el cuerpo del Expediente de
    Fase Preparatoria, para darle o no valor probatorio, pasando de
    lo presunto a lo probable y de lo probable a lo
    probado.

    Ejemplos de la
    aplicación de la Odorología
    Criminalística.

    Hemos tomado de la práctica pericial cubana
    cuatro ejemplos de la aplicación de la Odorología,
    los cuales, junto con otros peritajes criminalísticos,
    contribuyeron al esclarecimiento de los hechos
    delictivos.

    1. – Asesinato.

    El cuerpo de un ciudadano sin identificar fue encontrado
    occiso, dentro de una caja de cartón y sellada con cinta
    adhesiva.

    Durante el trabajo en el lugar del suceso se ocuparon
    las prendas de vestir del occiso, una huella olorosa del nudo del
    cordel utilizado para cometer el delito, una llave en el bolsillo
    interior de la chaqueta con la numeración 905, muestras de
    sangre, pelo y exudado anal. Se realizó la Necrodactilia
    del occiso, se efectuaron filmaciones fotográficas y con
    vídeo.

    En el lugar se determinó que el hallazgo del
    cuerpo no se correspondía con el lugar del suceso, que por
    el peso, las características de la caja de cartón y
    lo que en su interior se hallaba participaron varias
    personas.

    Como resultado de las investigaciones se conoció
    que la llave ocupada en el bolsillo interior de la chaqueta, se
    correspondía con la habitación 905 de un Hotel de Ciudad de La Habana, donde se pudo
    comprobar que en esa habitación estaba hospedada una
    persona que hacía dos días que estaba ausente del
    hotel.

    Cuando fueron detenidos los sospechosos del hecho, se
    realizaron las investigaciones periciales de Odorología y
    de Biología (ADN y pelos), arribándose a la
    conclusión categórica positiva de que las huellas
    correspondían a tres personas.

    2. – Robo con Fuerza.

    En horas de la noche, personas desconocidas accedieron a
    la planta superior de una vivienda, escalando por uno de los
    laterales de la terraza, donde se encuentra una reja que da
    acceso al interior del inmueble, la cual fue forzada mediante
    múltiples tracciones manuales que
    deformaron el pestillo de la cerradura, que aseguraba dicha reja.
    Una vez dentro sustrajeron varios equipos
    electrodomésticos, dos obras de arte (de
    Víctor Manuel y Mariano), así como otros objetos de
    valor.

    En el lugar del suceso, mediante el trabajo
    técnico-criminalístico, se realizaron las
    filmaciones fotográficas correspondientes y se obtuvieron
    12 huellas dactilares y 2 palmares, que fueron ocupadas en
    diferentes lugares de la vivienda afectada, además se
    levantó una huella olorosa en la parte derecha del mueble
    del televisor.

    En el curso de la investigación fue detenido un
    sospechoso, ocupándosele las dos pinturas
    sustraídas de la vivienda.

    Al realizar la investigación pericial varias de
    las huellas dérmicas y la olorosa, ocupadas en el lugar
    del suceso, coincidieron con el detenido, siendo posible
    esclarecer, además, otros 13 hechos de Robo con Fuerza en
    el municipio Plaza, mediante el Registro
    Dactiloscópico.

    3. – Asesinato.

    En una vivienda habitada, donde fue cometido un
    asesinato, el perito criminalista levantó dos (2) huellas
    olorosas, una fue tomada de un fragmento de soga que utilizaron
    para estrangular a la víctima y la otra sobre la
    superficie del candado que fue violentado en la puerta lateral
    del inmueble.

    Fueron tomadas impresiones olorosas a dos (2)
    sospechosos, las que fueron comparadas con las huellas
    extraídas del lugar del suceso, estableciéndose la
    identificación de ambos ciudadanos por esas huellas
    olorosas.

    4. – Exhumación ilegal.

    En la Necrópolis de Colón, sin cumplir las
    formalidades legales fue abierta una bóveda. El perito
    criminalista, al realizar la Inspección del Lugar del
    Suceso, levantó dos (2) huellas olorosas, una en un
    búcaro de flores artificiales y la otra sobre la figura de
    un elefante de adorno.

    Se estableció un círculo de sospechosos,
    por lo que se le tomaron impresiones olorosas a cuatro
    trabajadores del Cementerio.

    Como resultado del peritaje de Odorología se
    estableció la identificación de uno de los
    sepultureros, a partir de las huellas ocupadas.

    Conclusiones:

    • El olor humano es individual, por tanto, posee valor
      identificativo.
    • El dictamen pericial odorológico lo elaboran
      peritos criminalistas y cumple con las normas tácticas,
      técnicas y metodológicas
      criminalísticas.
    • El medio sensor utilizado es el can (como pudiera ser
      un microscopio, un
      cromatógrafo, etc.) y es el perito quien lo entrena y
      conoce e interpreta las respuestas o señales que emite
      ese medio "sensor".
    • Está demostrado científicamente que el
      perro presenta el órgano olfatorio superdesarrollado y
      está dotado para percibir, analizar, memorizar y
      comparar olores, superando grandemente el olfato humano o
      cualquiera de los equipos inventados con estos fines hasta el
      momento en el mundo.
    • La comparación de olores se realiza en una
      instalación que consta de una cámara que mide 11
      m de largo por 3 m de ancho, con una temperatura de 15 – 20
      grados Celsius y humedad relativa entre 60 -70 %. No posee
      ruidos ni olores contaminantes, existiendo acceso restringido a
      la misma.
    • Para esta labor se utilizan perras de la raza Pastor
      Alemán, las cuales están entrenadas
      específicamente para la comparación,
      diferenciación y localización de olores humanos
      en conserva, según la metodología existente. El
      can se emplea como medio biológico sensor único,
      capaz de comparar mediante el olfateo de la huella olorosa del
      Lugar del Suceso, si existen o no los olores correspondientes a
      los sospechosos de este hecho, con la utilización de
      patrones de control.
    • El peritaje de la Huella Olorosa cumple con lo
      exigido en la Ley de Procedimiento Penal vigente, en cuanto a
      que cualquier elemento puede ser objeto de peritaje, siempre
      que su interpretación y realización esté
      avalada por peritos titulares o no titulares, exista el
      fundamento teórico-práctico del peritaje en
      cuestión y experiencias en su realización,
      requisitos estos que posee la Odorología
      Criminalística.
    • En el período de doce años, en la
      práctica pericial cubana existen más de tres mil
      (3000) casos positivos, en los cuales a partir de la huella
      olorosa se ha podido establecer la identidad de
      la persona que participó en el hecho delictivo y que se
      ha correspondido con otras pruebas periciales, documentales o
      testificales, lo que valida la actuación del can al
      seleccionar el olor de esta persona. La Odorología se
      aplica durante la investigación de los hechos de
      Asesinato, Robo con Violencia,
      Terrorismo,
      Sabotaje, Robo con Fuerza, Violación, Exhumación
      Ilegal, Hurtos, entre otros.

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    Valdés Bernal.

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    Criminalística de la República de Cuba. LCC, Ciudad
    de La Habana, 1995.

     

    Datos sobre el Autor

    Dr. en Ciencias
    Jurídicas (1983). Perito Criminalista Principal
    (1971). Licenciado en Derecho (Universidad de La Habana, 1976).
    Laboró durante 32 años en el Laboratorio Central de
    Criminalística. Miembro fundador de la Unión
    Nacional de Juristas de Cuba. Miembro de Número de la
    Sociedad Cubana de Ciencias Penales. Miembro de la
    Comisión Asesora del Instituto de Desarrollo e
    Investigaciones del Derecho (IDID) de la Fiscalía General
    de la República. Profesor
    Titular Adjunto de la Facultad de Derecho de la Universidad de La
    Habana. Ha impartido Conferencias Magistrales y presentado
    Ponencias en eventos
    científicos de carácter nacional e internacional.
    Ha organizado, dirigido e impartido Cursos de Posgrado sobre
    Criminalística en todo el país y en la Universidad
    Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN), dos Diplomados en
    Ciudad de La Habana y uno en Villa Clara, así como ha
    impartido los módulos de Criminalística de dos
    ediciones de la Especialidad de Posgrado en Derecho Penal de las
    Universidades de La Habana y Camagüey. Ha sido Tutor,
    Oponente y Miembro de Tribunales de Tesis
    Doctorales, de Maestría y de Especialidad. Ha escrito
    cuatro libros sobre
    Criminalística. Es fundador de la Universalización
    de la Enseñanza Superior,
    desempeñándose como Jefe de la Carrera de Derecho
    en la Sede Universitaria Municipal (SUM) de La Lisa, en la
    provincia Ciudad de La Habana, Cuba.

     

    Dr. Rafael Hernández de la
    Torre

    Profesor Titular Adjunto

    Facultad de Derecho

    Universidad de La Habana

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