Monografias.com > Ingeniería
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

Tratamiento térmico de residuos sólidos y semisólidos en la industria petroquímica




Enviado por jlorozco



    1. Antecedentes. Origen del
      petróleo
    2. Importancia del petróleo
      y sus derivados
    3. Procesos
      petroquímicos.
    4. Antecedentes de la
      incineración
    5. Procesos de
      combustión para la eliminación de residuos
      peligrosos
    6. Tecnologías
      disponibles
    7. Importancia de los
      procesos de incineración
    8. Procesos de
      incineración
    9. Combustión de compuestos
      orgánicos volátiles
    10. Justificación
    11. Estado del
      arte
    12. Problemática
      ambiental
    13. Conclusiones
    14. Referencias
      bibliográficas

    Antecedentes:

    Origen del petróleo.

    El problema de la génesis del petróleo
    ha sido, por mucho tiempo, un
    tópico de investigación de interés.
    Se sabe que la formación del petróleo esta asociada
    al desarrollo de
    rocas
    sedimentarias, depositadas en ambientes marinos o próximos
    al mar, y que es el resultado de procesos de
    descomposición de organismos de origen vegetal y animal
    que en tiempos remotos quedaron incorporados en esos
    depósitos.

    Se tiene noticia de que en otro tiempo, los
    árabes y los hebreos empleaban el
    petróleo con fines medicinales. En México los
    antiguos pobladores tenían conocimiento
    de esta sustancia, pues fue empleada de diversas formas entre las
    cuales se cuenta la reparación de embarcaciones para la
    navegación por los ríos haciendo uso de sus
    propiedades
    impermeabilizantes.

    Las exploraciones petroleras iniciaron hace más de cien
    años (en 1859, Edwin Drake inició una nueva
    época cuando encontró petróleo en
    Pennsylvania, a una profundidad de sólo 69 pies), cuando
    las perforaciones se efectuaban cerca de filtraciones de
    petróleo; las cuales indicaban que el petróleo se
    encontraba bajo la superficie. Hoy día, se utilizan
    técnicas sofisticadas, como mediciones
    sísmicas, de microorganismos e imágenes
    de satélite. Potentes computadoras
    asisten a los geólogos para interpretar sus
    descubrimientos. Pero, finalmente, sólo la perforadora
    puede determinar si existe o no petróleo bajo la
    superficie.

    Genera, a través de procesos de transformación
    industrial, productos de
    alto valor, como
    son los combustibles, lubricantes, ceras, solventes y derivados
    petroquímicos.

    El petróleo no se encuentra distribuido de manera
    uniforme en el subsuelo hay que tener presencia de al menos
    cuatro condiciones básicas para que éste se
    acumule:

     

    Debe existir una roca permeable de forma tal que
    bajo presión el petróleo pueda
    moverse a través de los poros microscópicos
    de la roca.

     

    La presencia de una roca impermeable, que evite
    la fuga del aceite
    y gas
    hacia la superficie.

     

    El yacimiento debe comportarse como una trampa,
    ya que las rocas impermeables deben encontrarse
    dispuestas de tal forma que no existan movimientos
    laterales de fuga de hidrocarburos.

     

    Debe existir material orgánico suficiente
    y necesario para convertirse en petróleo por el
    efecto de la presión y temperatura que predomine en el
    yacimiento.

    Importancia del
    petróleo y sus
    derivados.

    La vida sin el petróleo no podría ser como
    la conocemos. Del crudo obtenemos gasolina y diesel para nuestros
    autos y
    autobuses, combustible para barcos y aviones. Lo usamos para
    generar electricidad,
    obtener energía calorífica para fábricas, hospitales
    y oficinas y diversos lubricantes para maquinaria y
    vehículos.

    La industria petroquímica usa productos derivados de
    él para hacer plásticos,
    fibras sintéticas, detergentes, medicinas, conservadores
    de alimentos,
    hules y agroquímicos.

    El petróleo ha transformado la vida de las
    personas y la economía de las
    naciones. Su descubrimiento creó riqueza, modernidad,
    pueblos industriales prósperos y nuevos empleos, motivando
    el crecimiento de las industrias
    mencionadas.

    Procesos
    petroquímicos.

    Del petróleo se obtienen determinados compuestos
    que son la base de diversas cadenas productivas que determinan en
    una amplia gama de productos denominados petroquímicos
    utilizados en las industrias de fertilizantes, plásticos,
    alimenticia, farmacéutica, química y textil,
    entre otras. Las principales cadenas petroquímicas son las
    del gas natural, las
    olefinas ligeras (etileno, propileno y butenos) y la de los
    aromáticos.

    A partir del gas natural se produce el gas de síntesis
    que permite la producción a gran escala de
    hidrógeno, haciendo posible la
    producción posterior de amoníaco por su
    reacción con nitrógeno, y de metanol, materia prima
    en la producción de metil-terbutil-éter, entre
    otros compuestos.

    Del etileno se producen un gran número de
    derivados, como las diferentes clases de polietileno, cloruro de
    vinilo, compuestos clorados, oxidos de etileno, monómeros
    de estireno entre otros que tienen aplicación en
    plásticos, recubrimientos, moldes, etc.

    Del propileno se producen compuestos como alcohol
    isopropílico, polipropileno y acrilonitrilo, que tienen
    gran aplicación en la industria de solventes, pinturas y
    fibras sintéticas.

    Por deshidrogenación de butenos, o como
    subproducto del proceso de
    fabricación de etileno se obtiene el 1.3-butadieno que es
    una materia prima
    fundamental en la industria de los elastómeros, para la
    fabricación de llantas, sellos, etc.

    Una cadena fundamental en la industria
    petroquímica se basa en los aromáticos (benceno,
    tolueno y xilenos). El benceno es la base de produccion de
    ciclohexano y de la industria del nylon; así como del
    cumeno para la producción industrial de acetona y fenol.
    Los xilenos son el inicio de diversas cadenas
    petroquímicas, principalmente las de las fibras
    sintéticas.

    Aumenta la producción de petroquímicos en
    el primer semestre del año 2004

    • Pemex obtiene ingresos por
      ocho mil 232 millones de pesos por ventas
      internas de estos productos
    • Las exportaciones de petroquímicos tuvieron
      un valor de 112 millones de dólares en el
      periodo

    Petróleos Mexicanos aumentó en cinco por
    ciento la producción de petroquímicos en sus
    centros industriales al cierre del periodo enero-junio de 2004,
    en comparación al mismo lapso del año
    2003.

    La producción total de petroquímicos
    pasó de cinco millones 13 mil toneladas en el primer
    semestre de 2003 a un volumen acumulado
    de cinco millones 249 mil toneladas en los primeros seis meses
    del año 2004.

    En dicho periodo, la elaboración de
    petroquímicos de mayor valor agregado como el etileno,
    estireno y amoniaco, registraron incrementos del 6, 18 y 17 por
    ciento, respectivamente, frente a los resultados alcanzados entre
    enero y junio del año pasado.

    Con base en los Indicadores
    Petroleros, durante la primera mitad de 2004, las ventas
    nacionales de productos petroquímicos realizadas por
    Petróleos Mexicanos a través de Pemex
    Petroquímica, fueron mayores en 41 por ciento en valor y
    13 por ciento en volumen con respecto a las alcanzadas en el
    mismo periodo del año pasado.

    Así, al colocar en el mercado nacional
    un volumen acumulado de un millón 722 mil toneladas de
    petroquímicos, Pemex obtuvo ingresos por ocho mil 232
    millones de pesos en total.

    En este rubro, durante los meses de referencia, se
    incrementaron los volúmenes de ventas del polietileno de
    alta y baja densidad,
    amoniaco, estireno y óxido de etileno, entre
    otros.

    De esta manera, el comercio
    interior de 202 mil 300 toneladas de polietileno de alta y baja
    densidad permitió a Pemex captar un ingreso de alrededor
    de mil 868 millones 600 mil pesos, seguida de las ventas de 284
    mil 700 toneladas de amoniaco con un importe total de 856
    millones 200 mil pesos.

    Por lo que respecta al óxido de etileno, durante
    los primeros seis meses del año en curso, Pemex
    Petroquímica colocó en el mercado nacional un total
    de 104 mil 600 toneladas de dicho producto, con
    un valor de 814 millones de pesos.

    La comercialización en el territorio nacional
    de un millón 130 mil 500 toneladas de petroquímicos
    como acrilonitrilo, cloruro de vinilo, estireno, glicoles,
    metanol, tolueno y otras materias primas representaron un ingreso
    para Pemex por un monto total de cuatro mil 693 millones de pesos
    durante los primeros seis meses de este año.

    En materia de comercio
    exterior, el valor de las exportaciones de
    petroquímicos se incrementó en 92 por ciento entre
    enero y junio del 2003 a igual periodo de este año, al
    obtener Pemex ingresos de divisas por 112
    millones de dólares al colocar en el mercado internacional
    485 mil toneladas.(Instituto Mexicano del Petróleo.,
    s/f).

    Antecedentes de la
    incineración

    El uso de tratamientos térmicos (combustión, oxidación
    térmica) para diferentes materiales
    entre los que se encuentran los residuos industriales son tan
    antiguos como el hombre de
    las cavernas, el cual usaba el fuego para elaborar su comida,
    moldear metales,
    acondicionar zonas boscosas para "uso agrícola",
    simplemente para generar calor, recientemente, generación
    de energía, reformación catalítica de
    hidrocarburos, etc. La oxidación catalítica de
    materiales orgánicos como cuerpos humanos, de animales, y en
    general como control sanitario
    de enfermedades por
    destrucción térmica de organismos
    patógenos.

    En algunos países con poca disponibilidad de
    terreno para instalar rellenos sanitarios o de confinamiento el
    uso del proceso de incineración de residuos es una
    solución muy importante.

    Los dos sistemas
    más antiguos que ha utilizado el hombre para
    disponer la basura han
    sido el vertido incontrolado y su quema. Hasta finales del siglo
    XIX, se pusieron los primeros elementos de lo que hoy se conoce
    como la gestión
    de los residuos.

    Durante siglos, el hombre transportó,
    progresivamente de una manera más organizada, las basuras
    hacia las áreas distantes de las ciudades. Lentamente, el
    hombre se dio cuenta de la importancia de la recolección,
    transporte y
    disposición. En 1906, en los Estados Unidos, Parsons
    escribió un libro con el
    título: "La Disposición de los Residuos
    Municipales", tratando el tema de las basuras desde el punto de
    vista de la ingeniería por primera vez.

    Los problemas con
    ratas, quemas indiscriminadas, etc., fueron la razón del
    cambio radical
    en la manera de disponer las basuras a principios del
    siglo XX. En 1904, la ciudad de Champlain (Illinois),
    comenzó por enterrar a diario sus basuras. Pero es en el
    año 1930, cuando el término relleno sanitario se
    usa por primera vez en la ciudad de Fresno (California):
    significó la cubierta diaria de los residuos y la
    supresión de su quema

    La incineración, que no hay que confundir con la
    cremación o quema de residuos, tiene su origen en Europa, con
    más de cien años de existencia; su historia empezó con
    la instalación del primer "destructor" de residuos
    municipales en la ciudad inglesa de Nottingham en 1874. En EE.UU.
    la primera instalación se realizó en "Governor's
    Island" en Nueva York, y en 1921 ya había más de
    200 unidades instaladas.

    Los hornos de incineración para residuos de
    origen industrial derivan de los hornos para los residuos
    municipales. Los primeros hornos rotativos fueron instalados en
    Alemania. En
    EE.UU. no fue hasta el año 1948, en las instalaciones de
    Dow Chemical Company en Midland (Michigan). (Dempsey y Oppelt
    1993).
    En la actualidad, se entiende por gestión y tratamiento de
    residuos el conjunto de operaciones
    encaminadas al aprovechamiento de los recursos
    materiales y energéticos contenidos en ellos o a la
    disposición de una forma ambientalmente segura de los
    mismos o de la parte de los mismos imposible de aprovechar.
    (Baldasano R.., 2000).

    Procesos de combustión para la
    eliminación de residuos peligrosos

    Tomando en consideración que la definición
    de sustancia peligrosa de la EPA (Environment Protection Agency)
    aplica a toda sustancia que posea una de las cuatro
    características siguientes: toxicidad, reactividad,
    corrosividad o inflamabilidad, o de la legislación
    mexicana, Residuos peligrosos: Todos aquellos residuos, en
    cualquier estado
    físico, que por sus características corrosivas,
    reactivas, explosivas, tóxicas, inflamables o
    biológico-infecciosas, representen un peligro para el
    equilibrio
    ecológico o el ambiente;
    (SEMARNAT, 1988) , se desprende la variedad de materiales que
    quedan comprendidos en esta categoría, desde efluentes
    industriales a residuos domiciliarios pasando por sustancias
    radioactivas. Estos materiales pueden presentarse en estado
    sólido, líquido o gaseoso. Las legislaciones
    actualmente vigentes en la región establecen que tales
    sustancias deben ser tratadas y transformadas en no
    tóxicas antes de ser descargadas a la atmósfera, a espejos
    de agua o
    enterrados. Entre los diversos tratamientos posibles, uno de los
    que más se han empleado es la combustión
    térmica. Estos procedimientos
    han sido últimamente motivos de controversia en cuanto a
    sus virtudes y desventajas. Esta problemática se ha
    planteado desde los países industrializados que disponen
    de legislaciones rigurosas desde hace muchos años hasta en
    ciudades de tamaño medio en los países de la
    región en donde normalmente el problema se centra en la
    incineración de residuos domiciliarios.

    Tecnologías disponibles

    Dow Chemical fue un pionero en incineración de
    residuos. En 1948 la compañía instaló el
    primer horno rotativo para incineración de residuos
    industriales, donde entonces y a través del tiempo
    diferentes tecnologías fueron desarrolladas para el manejo
    y destrucción de desechos de distinta naturaleza.
    Todos los sistemas de incineración están provistos
    con tecnologías para tratamiento de las emisiones gaseosas
    y cenizas. En lo que sigue se hará una breve descripción de los diferentes tipos de
    incineradores actualmente en uso.

    Hornos rotativos. En estos sistemas residuos
    sólidos y líquidos son alimentados a un horno
    cilíndrico recubierto interiormente de material
    refractario. Estos hornos tienen una longitud que depende de las
    prestaciones
    pero que en todos los casos superan los 20 metros. El cilindro
    está inclinado alrededor de 5° y rota muy lentamente
    de manera que el tiempo de residencia es alto. El mismo pude
    variar desde 30 minutos hasta 1 hora y media. Los productos
    gaseosos no combustionados pasan a una segunda cámara de
    combustión. Las temperaturas que se alcanzan en estos
    sistemas son de alrededor de 1300°C.

    Hornos de inyección de líquidos. Estos
    incineradores son utilizados fundamentalmente para
    líquidos aunque pueden ser adaptados para incinerar
    gases. El
    horno construido de material refractario puede ser vertical u
    horizontal. Las sustancias son inyectadas a través del
    quemador, atomizadas e incineradas en suspensión. La
    eficiencia del
    sistema depende
    del grado de atomización que se logre en el quemador. En
    estos hornos se alcanzan temperaturas de 1600°C.

    Hornos pirolíticos. Estos sistemas,
    también llamados deficientes en aire, son de
    pequeña capacidad y normalmente empleados para incinerar
    residuos domiciliarios de pequeñas comunidades incluyendo
    residuos patológicos. Estos sistemas consisten en un
    proceso de dos etapas. En una primera, se combustionan los
    residuos con solamente el 50% del aire requerido para la
    combustión total. Bajo estas condiciones se produce la
    pirólisis de las sustancias procesadas. Los productos
    generados, que incluyen metano y otros
    hidrocarburos, son destruidos en una segunda cámara de
    combustión donde se incorpora exceso de aire. En estos
    sistemas se alcanzan temperaturas de alrededor de 1600°C y
    resultan muy eficientes para manejo de pequeñas cantidades
    de residuos.

    Hornos de lecho fluido. En este sistema, el horno
    está dispuesto verticalmente, siendo cilíndricos
    recubiertos de refractarios y con una altura de alrededor de 15
    metros. Estos incineradores tienen un lecho de arena, alúmina o
    carbonato de calcio. Estos son mezclados con las sustancias a
    incinerar, las que son forzadas a través de los lechos
    mediante inyección con aire. Esto permite un buen mezclado
    con el exceso de aire alcanzándose temperaturas de
    alrededor de 900°C, con una eficiencia térmica
    superior a la de los hornos rotatorios. Los gases de
    combustión pasan luego a una segunda cámara para
    completar el proceso de incineración. Estos hornos son
    empleados exclusivamente para residuos líquidos o barros,
    lo que le quita versatilidad a su empleo.

    Hornos de cementeras. Estos hornos son una clase especial
    dentro de los hornos rotativos, pertenecen a las
    compañías productoras de cemento,
    siendo el proceso la transformación por calcinación
    de arcilla, arena, carbonato de calcio, pizarra en cemento. Estos
    hornos tienen una longitud de 210 metros y un diámetro de
    4 metros. Los residuos, líquidos o barros se alimentan
    conjuntamente con el combustible a estos hornos y en virtud del
    largo tiempo de residencia en los mismos y las altas temperaturas
    alcanzadas (1600°C en el extremo caliente del horno) se logra
    la incineración completa de los residuos.

    Los materiales más comunes que se incineran en
    este tipo de horno son: solventes de pinturas, solventes de uso
    en limpieza a seco, barros, etc. A manera de ejemplo, se puede
    mencionar que de las 80 cementeras activas en EE.UU., 24 usan
    residuos peligrosos mezclados con sus combustibles. Esto
    representa aproximadamente un millón de toneladas de
    residuos incinerados anualmente. Se debe destacar que estas
    instalaciones deben cumplimentar las normas de
    aplicación a otros tipos de incineradores. En algunos
    estados americanos (Texas, Montana, Pennsilvania) hay una fuerte
    restricción para el uso de tales instalaciones, sea por la
    emisión de contaminantes a la atmósfera o la
    posibilidad de efectos nocivos de sustancias tóxicas que
    puedan quedar retenidas en el cemento. No existen, sin embargo,
    pruebas de que
    tal contaminación ocurra. (Petunchi J.
    2004).

    Importancia de los procesos de
    incineración

    Los incineradores maximizan el uso del escaso espacio
    para rellenos sanitarios.

    Las comunidades con incineradores necesitan, de
    cualquier modo, rellenos sanitarios para verter cenizas y
    residuos no incinerables. Las cenizas pueden representar en peso
    alrededor del 25% de la producción de un incinerador, y
    deben ser vertidas en rellenos sanitarios.

    La incineración en términos generales es
    más costosa que las demás opciones, como el
    reciclaje y el
    relleno sanitario, pero produce además un subproducto
    útil, energia. Los
    costos de la
    incineración no pueden compensarse con los ingresos por
    energía producida.

    En cuanto a la energía, se puede ahorrar mucha
    más energía que la que genera la
    incineración mediante estrategias
    alternativas como la prevención de desechos, la
    reutilización, el reciclaje y el compostaje,
    desafortunadamente en países como México estas
    alternativas no se efectúan originando un problema de
    consecuencias importantes ya que los residuos se depositan en
    barrancas, caminos, alcantarillas, terrenos al aire libre, y en
    ocasiones genera problemas de salud publica.
    (Institute for Local Self-Reliance, Washington, DC, 2004
    ).

    Ventajas de la incineración:

    • Recuperar la energía térmica contenida
      en los residuos, obteniendo vapor y/o electricidad
    • Reciclar del orden del 20% de los materiales quemados
      (escorias)
    • Importante disminución del volumen de las
      basuras (= 90 %)
    • Importante reducción del peso de las basuras
      (aprox. = 75 %)
    • Costos operacionales moderados o bajos en el caso de
      incinerar con recuperación de energía
    • Limitada utilización de terrenos
    • Puede tratar cualquier tipo de residuo si su poder
      calorífico es adecuado
    • Permite el reciclaje de los materiales
      férricos contenidos en las basuras
    • Permite la reutilización de las escorias como
      material en la construcción de carreteras

    Como inconvenientes de la incineración se pueden
    considerar:

    • No supone un sistema de disposición total,
      precisa un acondicionamiento para las escorias (si no son
      recicladas) y especialmente para las cenizas
    • Alta inversión económica
      inicial
    • Costos operacionales elevados en el caso de incinerar
      sin recuperación de energía
    • Exposición a paros y
      averías
    • Limitada flexibilidad para adaptarse a variaciones
      estacionales de la generación de residuos, o necesidad
      de un sobredimensionamiento
    • Necesita de sistemas de
      control y prevención para los gases de
      combustión

    Limitada aceptación pública. (Baldasano
    R.., 2000).

    Procesos de
    incineración

    El término de incineración se puede
    definir de diferentes modos, pero básicamente se refiere a
    la combustión de sustancias orgánicas mediante un
    proceso de oxidación química. Cuando la
    oxidación se realiza de forma rápida, la
    temperatura del material aumenta rápidamente debido a la
    incapacidad para transferir el calor generado hacia el exterior
    tan rápidamente como se está produciendo. Como
    resultado, se emite radiación
    visible, a la cual nos referimos, como la llama.

    A finales de los años 80, cuando la
    incineración de residuos, recibe un nuevo impulso, al
    desarrollarse sistemas mejores de combustión, de control y
    tratamiento de los gases de combustión, que permiten
    avanzar hacia una situación cercana a la emisión a
    la atmósfera quasi-nula y convertirse en un sistema de
    tratamiento de residuos ambientalmente seguro, y con
    unos mejores rendimientos energéticos de funcionamiento,
    al tener que hacer frente a los nuevos retos ambientales, a su
    aceptación pública y a normas legales mucho
    más estrictas.

    La incineración de residuos puede realizarse con
    o sin la recuperación del calor generado en la
    combustión.

    Consiste, pues, en un proceso de combustión
    controlada que transforma los residuos en gases de
    combustión, escorias y cenizas. Una en estado gaseoso,
    formado por los gases de combustión, y dos en estado
    sólido, constituida por 1) las escorias y 2) las cenizas,
    o los sólidos de depuración, en función
    del tratamiento adoptado para la depuración de los gases
    de combustión. (Baldasano R., 2000).

    Combustión
    de compuestos
    orgánicos volátiles

    Este tipo de contaminantes es generado por un
    sinnúmero de procesos que incluyen desde plantas de la
    industria química de alta producción a
    pequeñas empresas como
    tintorería, fábrica de muebles, etc. De los
    diferentes métodos de
    control (Absorción por líquidos, Adsorción
    por sólidos, Lavado de gases, Filtrado,
    Condensación (Refrigeración y compresión),
    Combustión Térmica, Incineradores
    catalíticos, Membranas, Biodegradación)
    describiremos la Incineración Térmica.

    Es una alternativa que ofrece una interesante
    relación costo/beneficio
    sobre todo cuando el poder calorífico de los COVs
    (compuestos orgánicos volátiles) es suficiente para
    mantener la temperatura de operación de los incineradores
    sin necesidad de recurrir a combustibles adicionales.

    La temperatura de operación es el factor
    principal para una operación eficiente del incinerador de
    COVs. Una unidad adecuadamente diseñada opera alrededor de
    900°C. Con una adecuada mezcla gas-aire y suficiente tiempo
    de residencia se pueden lograr factores DRE (Eficiencia de
    Destrucción y Remoción (DRE Values)) superiores al
    99,99% para la mayoría de los residuos orgánicos.
    En algunos casos se requieren temperaturas superiores, por
    ejemplo, vapores de acetonitrilo requieren temperaturas de
    970°C y para el caso de benceno y metiletilcetonas alrededor
    de 1000° C.

    Cuando la corriente de COVs no es suficiente para
    mantener temperaturas de operación elevadas, se debe
    emplear un combustible auxiliar, siendo los más adecuados
    metano o propano. (Petunchi J. 2004).

    Justificación

    Situación actual de los
    residuos:

    Evolución de la Situación en el Mundo:
    aún cuando no se cuenta con inventarios
    precisos al respecto, se calcula que en el mundo se generan
    anualmente alrededor de 350 a 400 millones de ton de residuos
    peligrosos. Una gran parte de ellos proviene de industrias que
    contribuyen en forma importante con la economía de las
    sociedades
    industriales. Entre ellas están las industrias
    metalúrgicas del hierro y del
    acero o de
    metales no ferrosos y la industria química. Se suman otras
    fuentes, como
    las actividades agrícolas –generadoras de residuos de
    plaguicidas–, las extractivas (por ejemplo mineras y petroleras)
    y las de servicios
    (como los talleres automotrices que desechan aceites
    gastados).

    La peligrosidad de tales residuos depende de su
    composición, ya que en la mayor parte de los casos se
    trata de mezclas
    complejas que contienen diversos tipos de sustancias. Las
    implicaciones de la disposición inadecuada de los residuos
    peligrosos para la salud y el bienestar
    público, así como para el ambiente, han quedado
    ampliamente evidenciadas por sucesos que pusieron de relieve que es
    más costoso remediar que prevenir.

    Residuos peligrosos en México: infraestructura
    para el manejo de residuos
    peligrosos:

    Generación anual: 8 millones de ton.

    Empresas para tratar residuos peligrosos: 873.

    Capacidad de las empresas para el manejo: 4.5 millones de
    ton.

    Manejo total: 57 %.

    Distribución de infraestructura para el manejo de
    residuos peligrosos: – reciclaje: 71 %, tratamiento 23 %,
    incineración 4%, reuso 2%

    Área de oportunidad: residuos industriales, 3.52
    millones de toneladas anuales. (Escalera R. 1998).

    Situación actual de la incineración de
    residuos:

    Los procesos de incineración de residuos, aunque
    técnicamente válidos, tanto para su
    eliminación como para su valorización
    energética, obtienen un importante rechazo social,
    motivado principalmente por la contaminación ambiental provocada por
    sustancias como dioxinas, furanos y diferentes metales pesados
    que pueden ser emitidos por estas instalaciones. En respuesta a
    esta contaminación, la normatividad vigente, cada vez
    más estricta, limita las emisiones de las incineradoras,
    de tal forma que las tecnologías existentes se han
    desarrollado para mejorar los sistemas de combustión y de
    depuración de gases. A pesar de esto, los sistemas de
    filtrado y los controles de emisiones, no consiguen el nivel cero
    de emisiones a la atmósfera, siendo esta una de las
    principales razones de los sectores contrarios a la
    incineración.

    Un modelo ideal
    de gestión de residuos sería el que cumpliese con
    tres parámetros principales:

    • Recuperación y reciclaje de toda aquella
      fracción aprovechable: compost, papel-cartón,
      plásticos, etc., mediante plantas de reciclaje de
      residuos de envases, recolección selectiva, etc.
    • Valorización energética de la fracción
      considerada rechazo en estos procesos.

    Vertido controlado de las escorias resultantes. (Redacción Ambientum., 2003).

    Estado del arte:

    Incinerar basura es reducir
    su volumen y, solucionar el problema de los vertederos
    incontrolados, e incluso de los controlados. El problema estriba
    en incinerarla bien, a elevadas temperaturas y cumpliendo la
    legislación, con todos los controles previos y a
    posteriori que haya que establecer. En los vertederos actuales la
    basura también se quema por si misma, fermentada con
    recalentamiento de la materia orgánica y desprendimiento
    de metano inflamable, o bien porque los responsables la hacen
    arder para ir reduciendo un poco su volumen. En suma, las basuras
    suponen un problema mayúsculo en todo el mundo. En la
    solución del problema de residuos sólidos se tienen
    dos vías de trabajo,
    complementarias ambas y urgentes: reducir la cuantía de
    residuos, o al menos frenar su imparable incremento, y, mientras
    se va consiguiendo ese objetivo, lo
    cual será lento y costoso, sustituir urgentemente los
    vertederos por plantas de tratamiento integral de las basuras,
    incluida la combustión del sobrante final. (Escuela de
    Química y Petróleos 2002).

    Planta de incineración de residuos, Spittelau
    (Austria). Experiencia seleccionada en el Concurso de Buenas
    Prácticas patrocinado por Dubai en 1996, y catalogada como
    BEST. ( Best
    Practices Database
    .)

    País/Country: Austria. Sostenibilidad: – Prevenir
    la producción de residuos es la máxima prioridad. –
    Los residuos deben reciclarse ya que es ecológicamente
    ventajoso, técnicamente factible y económicamente
    razonable. Los residuos que quedan se vierten con una reactividad
    mínima y de manera ecológica. –El tratamiento
    térmico reduce el volumen aproximadamente de 10 a 1. –
    Utilizando el contenido calorífico de los residuos, casi
    el 30% del calor anual utilizado para la calefacción
    centralizada en Viena se produce en las tres plantas
    incineradoras de residuos que existen. (Fernwurme W.,
    1996).

    Ley General del Equilibrio Ecológico y la
    Protección al Ambiente. 28-01-88

    Definición: XXXI.- Residuo: Cualquier material
    generado en los procesos de extracción, beneficio,
    transformación, producción, consumo,
    utilización, control o tratamiento cuya calidad no
    permita usarlo nuevamente en el proceso que lo
    generó;

    Artículo 11. es del ámbito de
    jurisdicción federal: b) Industria del petróleo,
    petroquímica, del cemento, siderúrgica y
    eléctrica.

    d) Instalaciones de tratamiento, confinamiento o
    eliminación de residuos peligrosos, así como
    residuos radiactivos,

    Capítulo VI.- Materiales y Residuos
    Peligrosos

    Artículo 150. Los materiales y residuos
    peligrosos deberán ser manejados con arreglo a la presente
    Ley, su
    Reglamento y las normas oficiales mexicanas. La regulación
    del manejo de esos materiales y residuos incluirá
    según corresponda, su uso, recolección, almacenamiento,
    transporte, reuso, reciclaje, tratamiento y disposición
    final. (SEMARNAT, 1988).

    Reglamento de la Ley General del Equilibrio
    Ecológico y la Protección al Ambiente en Materia de
    Residuos Peligrosos. 25-11-88

    Definición; Incineración: Método de
    tratamiento que consiste en la oxidación de los residuos,
    vía combustión controlada. Tratamiento: Acción
    de transformar los residuos, por medio del cual se cambian sus
    características.

    Artículo 4o. Compete a la Secretaría: IV.-
    Autorizar la instalación y operación de sistemas
    para la recolección, almacenamiento, transporte,
    alojamiento, reuso, tratamiento, reciclaje, incineración y
    disposición final de los residuos peligrosos; IX.-
    Fomentar y coadyuvar al establecimiento de plantas de tratamiento
    a que hace referencia este Reglamento y de sus lineas de
    comercialización, así como de empresas que
    establezcan plantas de reciclaje de residuos peligrosos generados
    en el país; X.- Autorizar la construcción y
    operación de instalaciones para el tratamiento,
    confinamiento o eliminación de los residuos.

    Articulo 9: Para los efectos del Reglamento se entiende
    por manejo, el conjunto de operaciones que incluyen el
    almacenamiento, recolección, transporte, alojamiento,
    reuso, tratamiento, reciclaje, incineración y
    disposición final de los residuos peligrosos. (SEMARNAT,
    1988).

    Problemática
    ambiental:

    La desproporción entre el volumen creciente de residuos
    peligrosos generados y las capacidades existentes de manejo,
    vigilancia y control, dan lugar a disposición clandestina
    de residuos en tiraderos y drenajes municipales, barrancas, en
    carreteras y hasta en cuerpos de agua. Esto origina
    contaminación crónica de los suelos y de los
    cuerpos de agua superficiales y subterráneos que son
    fuente de abastecimiento de agua
    potable.

    Las tecnologías de Ingeniería Ambiental son
    indispensables para controlar la dispersión de
    contaminantes.

    Postergar la atención a los suelos degradados por la
    acumulación de residuos sólidos, y en especial de
    residuos peligrosos, generó un problema en ocasiones
    más difícil y costoso de sanear, que la
    atmósfera de una ciudad o una corriente contaminada.

    En el caso de suelo, los
    mecanismos naturales de autocorrección y limpieza son
    mucho más lentos. Por esta razón un suelo
    contaminado permanecerá en estas condiciones aun cuando se
    eliminen las causas que afectaron su calidad, y en ocasiones los
    efectos son irreversibles.

    En la industria Petroquimica
    como en cualquier otra industria se generan residuos, estos
    pueden ser tanto peligrosos como no peligrosos y/o con valor
    comercial y sin valor comercial. Estos deben ser tratados,
    comercializados, efectuar los pagos correspondientes por unas
    disposición adecuada mediante una compañía
    especializada y autorizada por la autoridad
    competente, tomando en cuenta que la legislación Mexicana
    actual no permite el almacenamiento in situ por tiempo ilimitado
    de residuos dentro de las instalaciones industriales que los
    generó.

    Conclusiones:

    No hay duda que la legislación ambiental mexicana
    vigente, reconoce el proceso de incineración para residuos
    peligrosos como una práctica viable, siempre y cuando se
    realice de acuerdo a los parámetros y regulaciones
    ambientales y de seguridad que
    apliquen.

    Por lo anterior en mi opinión, la incineración
    de residuos sólidos y semisólidos generados en la
    industria Petroquímica, es un proceso que se puede aplicar
    para aumentar el control de este tipo de residuos, siempre y
    cuando se realicen las actividades cumpliendo la normatividad
    ambiental aplicable, y en tanto no se disponga de una cultura y
    mecanismos que permitan dar a los residuos un mejor manejo.

    Con el tratamiento térmico in situ de residuos
    sólidos y semisólidos se evitan riesgos
    ambientales y de seguridad como son; – en el sitio de
    generación: probables derrames al suelo y
    contaminación de las aguas de los drenajes, por derrames,
    daños a los trabajadores por contacto con residuos al
    embarque de los residuos, manejo inadecuado de residuos, uso
    incorrecto de equipo de seguridad, etc. – en el transporte
    de los residuos: posible contaminación de aire agua y
    suelo por volcadura, descompostura, asalto, mala operación
    al conducir, tomar rutas no adecuadas que permitan derrame
    volatilización de componentes con alta presión de
    vapor, agitación que dañen los contenedores de
    residuos, etc. de vehículos de transporte, – en sitio de
    disposición final: Si es deposito de residuos en
    confinamientos controlados, conlleva riesgos latentes como es
    contaminación de mantos freáticos, deterioro de los
    contenedores con el paso del tiempo, y probable
    contaminación de suelos, dejar un pasivo ambiental para
    futuras generaciones, etc. Si se trata de destrucción
    térmica en otra parte que no sea el lugar donde se origino
    el residuo, el control de los parámetros de control de la
    combustión estaría a cargo de terceros que en base
    a su experiencia y conocimiento de los residuos pueden cumplir
    con la normatividad aplicable pero quien mejor conoce las
    características y componentes de los residuos que el que
    los originó, en este sentido seria el mas indicado para
    incinerar sus residuos.

    Referencias
    bibliográficas

    Baldasano R., 2000., Catedrático de
    Ingeniería Ambiental Universidad
    Politécnica de Cataluña (UPC)., Argentina., La
    incineración de residuos: ¿es una
    alternativa?. .,
    (Fecha de consulta 18 de mayo 2005).

    Escalera. S., S/F., Manejo de Residuos Industriales
    Peligrosos: un asunto ambiental y económico. Revista
    electrónica de CÉSPEDES Revista Vol.
    1 No.4.,
    http://www.cce.org.mx/cespedes/publicaciones/revista/revista_4/residuos_indus.htm
    .
    (Fecha de consulta: 18 de mayo de 2005).

    Escuela de Química y Petróleos., 2002.,
    Dioxinas en procesos de incineración de desechos. Facultad
    de Minas, Universidad Nacional de Colombia,
    Medellín.,
    www.minas.unalmed.edu.co/facultad/publicaciones/dyna/134/dioxinasd.pdf.,
    (Fecha de consulta 18 de mayo de 2005).

    Fernwurme W., Planta de incineración de
    residuos, Spittelau (Austria)., Región según
    Naciones Unidas:
    Europa Occidental (incluido Turquía) Región
    ecológica: Continental Experiencia seleccionada en el
    Concurso de Buenas Prácticas patrocinado por Dubai en
    1996, y catalogada como BEST. ( Best Practices
    Database
    ). Contacto : ien Ges.m.b.H.
    Spittelauer Linde 45 Vienna, Austria A 1090 00431/313
    260., http://habitat.aq.upm.es/dubai/96/bp014.html.,
    (Fecha de consulta 18 de mayo de 2005).

    Institute for Local Self-Reliance., 2004., Mitos y
    Realidades sobre la Incineración de Residuos., Washington,
    DC EE UU., http://www.ecoportal.net/content/view/full/
    32481
    . (Fecha de consulta 18 de mayo
    2005).

    Instituto Mexicano del Petróleo., s/f., Acerca
    del Petróleo: origen., México., Instituto Mexicano
    del Petróleo., http://www.imp.mx/petroleo/apuntes/origen.htm
    (Fecha de consulta 18 de mayo 2005).

    Petunchi., 2004., Procesos de combustión para la
    eliminación de residuos peligrosos., Instituto de Investigaciones
    en Catálisis y Petroquímica – INCAPE –
    (FIQ,UNL-CONICET) Santiago del Estero 2829 – 3000 – Santa Fe –
    República Argentina – Tel.: 54-42-536861.Fax:
    54-42-571162. e-mail: .,
    http://www.estrucplan.com.ar/Articulos/verarticulo.asp?IDArticulo=774
    .,
    (Fecha de consulta 21 de mayo 2005).

    Redacción Ambientum., 2003., Situación
    actual de la incineración de RSU. Revista Digital: Revista
    Ambientum., España.,
    http://www.ambientum.com/revista/2003
    05/incineracion.htm
    ., (Fecha de consulta 18 de
    mayo de 2005).

    SEMARNAT., 1988., Ley General del Equilibrio
    Ecológico y la Protección al Ambiente., Diario
    oficial de la federación del 28 de enero de 1988.,
    SEMARNAT., México., www.semarnat.gob.mx/.
    (Fecha de consulta 18 de mayo de 2005).

    SEMARNAT., 1988., Reglamento de la Ley General del
    Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente en
    Materia de Residuos Peligrosos., Diario oficial de la
    federación 25 de noviembre de 1988., SEMARNAT.,
    México., www.semarnat.gob.mx/.
    (Fecha de consulta 18 de mayo de 2005).

    José Luis Alfonso Orozco
    Limón

    Alumno de la Maestría en Ciencias en
    Ingeniería Ambiental.

    Instituto Tecnológico de Puebla.

    Avenida Tecnológico 420. Colonia
    Maravillas.

    Puebla 72220

    Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

    Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

    Categorias
    Newsletter