- Tema
- Problema
- Fundamentación
- Antecedentes
- Objetivos
- Referente
empírico - Referente
teórico - Propuesta
metodológica - Punto de vista
teórico - Registro
de campo - Análisis
interpretativo - Conclusión
- Bibliografía
Desde el comienzo de nuestra vida vamos enlazando y
construyendo nuestro universo de
representaciones. Todo aquello que forma el mundo
simbólico en el cual somos insertados al ser bautizados
por la cultura.
Una cultura heredada pero también
aceptada.
Desde la primera identificación, desde la
primera marca, desde
esa primera huella que signa nuestra falta, desde la
aparición de ese Otro que nos interpreta y nos vuelve
sujetos, desde ese primer instante: dependemos.
Y a la par de esa dependencia, idealizamos.
En el contexto político
registramos esa identificación de la masa con un
ideal, con un discurso que
los represente y consiga parirlos como sujetos, para luego,
cual madre solícita, proceda a interpretar sus deseos, a
protegerlos de su inermidad, a defenderlos, a
cuidarlos.
En suma que los haga sentir amados, aunque jamás
consiga satisfacerlos completamente.
Pero… responden nuestros representantes
políticos, en este caso los concejales de
nuestra ciudad, a este ideal?
Nietzsche dirá: "La humanidad no marcha por
el camino recto porque ha sido gobernada por los fracasados,
los astutos vengativos, los llamados "santos", esos
calumniadores del mundo y violadores del hombre".
Este trabajo
trata justamente sobre los representantes
políticos de nuestra ciudad.
Aquellos elegidos democráticamente y sobre
quienes la masa ha puesto el peso del ideal, la responsabilidad de velar por el bienestar
general y la ilusión de formar parte del
Poder a través de ellos.
Es que, en el acto eleccionario, el pueblo pone en las
urnas mucho más que un simple voto.
El tema a investigar ha sido impuesto por la
cátedra (lo cual conlleva, en mi opinión, una
limitación condicionante) y se basa en la
relación del trabajo con la salud
mental.
"LA INCIDENCIA DEL
TRABAJO
EN LA SALUD MENTAL DEL HOMBRE QUE
TRABAJA"
Como no abordaré el tema desde una
concepción biologicista del hombre, sino más
bien, tomando al hombre desde una orientación
psicológica, cambiaré "hombre" por
"sujeto". Un hombre "sujetado" por su
inconsciente, por lo cual me parece más esclarecedor
tomar el nombre del seminario de
T.C.L. para sintetizar el tema:
"TRABAJO, SALUD
MENTAL
Y SUJETO DEL
INCONCIENTE"
Especificar el problema implica, según Ryan,
realizar una preinstancia de lectura de todo
aquel material que se relacione, en menor o mayor medida, con
el tema propuesto.
Es necesario determinar, en este punto, una
situación concreta y singular del mismo modo que se
debe llevar a cabo un contacto primario con la realidad
laboral a
explorar y contar con la aprobación previa de la
Institución en la que desarrollaremos el
trabajo.
Luego de estas instancias, el problema
específico a investigar es:
LAS CONDICIONES DE
TRABAJO Y SU RELACIÓN CON LA SALUD MENTAL DE LOS
INTEGRANTES DEL HONORABLE CONCEJO MUNICIPAL DE LA CIUDAD DE
ROSARIO
Ryan propone en este punto dar cuenta de las
razones o fundamentos que justifican el problema
elegido. La propia determinación del mismo infiere,
desde un principio, la especificación de las bases sobre
la que se erige la elección realizada.
Mis limitaciones de horarios, en razón
de mi relación laboral y el cursado de las materias,
no me permitían consensuar horas libres con otros
compañeros.- ¿Por qué un trabajo
individual?Por la misma razón precedente. Éste es
el ámbito donde desarrollo
mis tareas laborales.Pero, además, me ha movilizado el juicio
previo que poseía yo antes de formar parte de esta
Institución – coincidente con la
devalorización masiva subyacente sobre
la actividad política– y
cómo he modificado esta concepción a partir del
conocimiento interno de la labor
legislativa.Siempre me interesé por las prácticas
políticas y de cómo los
discursos de la Instituciones inciden sobre el
pensamiento individual. - ¿Por qué investigar el trabajo del
Concejo Municipal?La elección de los sujetos a investigar son
los concejales y yo no lo soy. Desde Diciembre
del 2003 me desempeño como secretaria privada y
ejecutiva de uno de ellos, por lo que creo, que ésto
significa un beneficio más que un perjuicio para
arribar a la meta
fijada, no sólo por la libre observación que puedo realizar
cotidianamente sino también teniendo en cuenta la
posibilidad de tener el camino facilitado para el desarrollo
de las tareas con el resto de los concejales.Considero que, si "el trabajo de campo trata de
estudiar una única comunidad o
grupo en
términos de su estructura
social y sus interrelaciones, tratando de realizar una
descripción completa de los procesos a
investigar" (Ryan), me encuentro en una posición
más que privilegiada para llevar a cabo el trabajo
propuesto. - ¿Es posible mantener cierta "distancia"
para realizar la investigación, formando parte del
sistema de
relaciones del lugar a investigar? - ¿Para qué realizar esta
investigación?
Por la relevancia de las funciones que
cumplen los legisladores municipales en tanto
representantes de toda la comunidad. Éste trabajo
nos permitirá tomar conocimiento de cómo se
articula la práctica legislativa, cuál es
el papel del discurso y las ideologías,
cuál es el sentimiento de los concejales con respecto a
su actividad (sobre todo en este momento en el cual las
prácticas políticas están tan
desvalorizadas) y poder pensar
a este ámbito como un lugar de trabajo
más
Según Giddens, el primer paso que se da en el
proceso de
investigación es revisar la evidencia
existente en la disciplina. El investigador
deberá localizar las investigaciones ya
existentes sobre el tema y evaluar la utilidad de las
mismas en el marco de la problemática
planteada.
Para Ryan, plantear los antecedentes implica
"registrar sintéticamente los resultados de las
investigaciones
afines al problema escogido para su estudio" ya que
"conocer y dar a conocer los desarrollos alcanzados hasta
hoy en un tema en particular es un punto de partida importante
para orientar la dirección de las nuevas
investigaciones" .
Desde esta perspectiva y a pesar de haber realizado un
trabajo importante de búsqueda (trabajos de
investigación editados por la Facultad de Psicología
-U.N.R.-, investigaciones publicadas en Internet,
Biblioteca
Municipal Argentina, Colegio de Psicólogos de la ciudad
de Rosario), no he conseguido trabajos de
investigación existentes sobre éste tema en
particular.
No obstante citaré como único
antecedente – por la cercanía del tema tratado- un
trabajo de campo realizado por alumnas de la
cátedra de Trabajo de Campo área Laboral
de la Facultad de Psicología (U.N.R.).
Título: "TRABAJAR EN JUSTICIA
Centralización del saber (poder) o
práctica entre varios"
Autoras: Susana Baccifava y Mariana
Capriotti
Editorial: Cátedra Trabajo de Campo –
área laboral . Facultad de
Psicología.
Universidad Nacional de Rosario
Año de edición: 2003
Esta investigación fue realizada en el
ámbito de la Defensoría General del Tribunal de
Justicia de Cañada de Gómez – Distrito Nro. 6- y
las autoras plantean la importancia del acontecimiento
jurídico en su entramado histórico social,
cómo se articula la práctica jurídica con
el sujeto que la desarrolla, cómo se posiciona el
trabajador de la justicia frente a la perspectiva subjetiva y
las interrelaciones entre el personal entre
sí y con la Institución y de ésta con
Instituciones intermedias.
Ryan especifica que en este ítem se debe
enunciar con precisión las metas
propuestas.
En primera instancia se debe formular un objetivo
general que direccione la tarea en un sentido amplio, para
luego puntualizar los objetivos
específicos, que cumplirán el rol de metas
parciales y que se encuentran incluidos dentro del marco del
objetivo general.
Objetivo General
Describir y analizar el trabajo que desarrollan los
sujetos concejales en el marco de la
práctica legislativa del Honorable Concejo Municipal de
Rosario, teniendo en cuenta el discurso subjetivo
con respecto a la posición que detentan, investigando
cómo son las relaciones de los concejales entre
sí y con la ciudadanía en general.
Objetivos específicos
- Investigar el funcionamiento institucional del
Concejo Municipal de Rosario. - Describir las distintas categorías
laborales que se interrelacionan en este
ámbito. - Conocer la relación de los distintos
concejales con su partido político. - Identificar las condiciones laborales de los
concejales de nuestra ciudad. - Observar el posicionamiento
de los concejales con respecto a las responsabilidades
adquiridas. - Analizar las características particulares del
desarrollo laboral en tanto flexibilidad del trabajo
parlamentario. - Averiguar si se han presentado proyectos
relacionados con la salud mental.
Con respecto a este punto, Ryan sostiene que demarcar
el referente empírico implica definir el objeto de
estudio, es decir, determinar a qué grupo
humano se estudiará en sus condiciones de
trabajo en el caso a investigar. "Esta descripción
debe ser lo suficientemente detallada para que el lector pueda
ubicarse acerca de dónde y con quiénes se
está haciendo el trabajo" (id.).
CONCEJO MUNICIPAL DE
ROSARIO
La Ley
Orgánica de Municipalidades, sancionada en 1858,
refiere en el
capítulo XI, art. 23: "Cada
Municipalidad se compondrá de un Concejo
Municipal y un Departamento
Ejecutivo"
- ¿Cómo se conforma el
Concejo Municipal?
Los municipios de 1ra. Categoría, como Rosario,
se integran con 10 concejales por los primeros 200.000
habitantes, a los que se agrega uno más por cada 60.000
habitantes o fracción no inferior a 30.000. Los mandatos
de los concejales durarán cuatro años. El Concejo
Municipal se renovará bienalmente por mitades.
Cuando el número de concejales sea impar, se
entenderá a los fines de la renovación
mencionada, que la mitad a elegir se obtiene dividiendo por dos
el mayor número par contenido en aquel.
Nuestra ciudad cuenta con 31 concejales en ejercicio:
nueve del bloque Justicialista, tres del
Partido del Progreso Social, dos de la
U.C.R., dos del A.R.I:, ocho del
partido Socialista, tres del bloque Concejales
por Rosario, dos del bloque Radical, uno del
Socialismo Auténtico y uno del
Modín.
- ¿Cuáles son los
requisitos para ser concejal?
Para ser concejal se requiere tener no menos de
veintidós años de edad y dos
años de residencia inmediata en el municipio si
fuera argentino y ser elector del municipio. Los extranjeros
deberán tener veinticinco años como mínimo
y cuatro años de residencia inmediata en el
municipio.
- ¿Dónde funciona el
Concejo Municipal?
En el palacio Vassallo, ubicado en
Córdoba y 1ro. De Mayo, frente al Monumento Nacional a
la Bandera.
Este edificio fue donado por el Dr. Bartolomé
Vassallo, cirujano notable, que legó su residencia
particular a la Municipalidad junto con las obras de arte
allí conservadas y es sede del Concejo Municipal por
ordenanza del 18 de Mayo de 1951.
- ¿Cúal es el salario de
un concejal?
El salario de los concejales se denomina
"dieta". Éstas son fijadas por el mismo
Concejo con el voto de las dos terceras partes de sus
miembros.
"las mismas, en ningún caso, podrán
superar a la retribución que percibe el Intendente
Municipal"
- ¿Cuáles son las
funciones de los ediles?
Un concejal es una persona elegida por el
pueblo para defender los derechos de los
vecinos, procurándoles mayores servicios
con el propósito de mejorar su calidad de
vida, elevando al Ejecutivo proyectos y
propuestas para que éste los haga cumplir. Para una
mejor organización de los temas a tratar se
dividen en comisiones.
Las comisiones que funcionan actualmente
son:
Gobierno y Cultura
Presupuesto y Hacienda
Planeamiento y Urbanismo
Salud y Acción Social
Obras Públicas y Seguridad
Servicios Públicos Concedidos
Ecología y Medio Ambiente
Producción y Promoción del Empleo
Derechos Humanos
- ¿Qué otras oficinas
funcionan en este ámbito?
Además de las oficinas de los concejales, con
su respectivo personal político de asesores y
secretarios, funcionan las siguientes oficinas:
- Contaduría: Dedicada a las compras de
insumos, liquidación de haberes del personal
político y de los concejales. Administración de ingresos y
egresos.
- Economato: Supervisión de Insumos
- Informática: Atención técnica de todos los
equipos de informática del Concejo. - Habilitación: Registros de
personal. Altas y Bajas - Mantenimiento: Trabajos de mantenimiento edilicio del Concejo.
- Personal: Control del
personal, atención de la obra social
(IAPOS). - Prensa y Protocolo.
- Mesa de Entradas: Recepción y registro de los
proyectos para ser tratados en
la Sesión. - Despacho: Archivo
histórico de los proyectos aprobados. - Taquigrafía: Registro y archivo de las
copias taquigráficas de las sesiones. - Recepción y Conmutador
Además existe una sala de reuniones, una
sala de periodistas, la Sala de Sesiones, y un
servicio de bar.
Las comisiones funcionan en un edificio denominado
Anexo que se encuentra en Juan Manuel de Rosas 839 y
la Biblioteca del Concejo Municipal de Rosario funciona
en Juan Manuel de Rosas 850 .-
Exceptuando a los Concejales y al personal
político (cuya renovación de contrato se
realiza anualmente), el resto del personal pertenece a la
planta transitoria o permanente de la Municipalidad de
Rosario.
Todos tienen como Obra Social a I.A.P.O.S.,
pertenecen al Sindicato de Municipales y aportan al
Instituto de Jubilaciones Municipal que es un ente
autárquico, independiente del ANSES.
Para Ryan, este referente es una estructura
conceptual que permite descifrar el sentido del referente
empírico. Implica fijar una posición
para desarrollar la interpretación del referente
empírico y puntualizar un conjunto de categorías
teóricas que nos sirvan de instrumentos
operativos para realizar un análisis de los fenómenos
investigados.
Althusser, Louis (1918-1990)
Editorial: Nueva Visión – Buenos
Aires
Año: 1988
Se hace necesario una renovación de los
medios de
producción para que ésta sea
posible ya que la reproducción de la fuerza del
trabajo exige, a la vez, una reproducción de la
sumisión a las reglas del orden establecido. Marx construye
una concepción de sociedad
definida por la dialéctica económica. La
infraestructura compuesta por las fuerzas productivas y las
relaciones de producción y una superestructura que
comprende por un lado las instituciones jurídicas y
políticas y por el otro las ideológicas (ya
sean religiosas, morales, jurídicas, etc.)
El autor puntualiza que el aparato
político somete a los individuos a la
ideología política del Estado
con la cooperación del aparato de información que atiborra con dosis
diarias de ideología (a través de la prensa,
radio y
T.V.) a todos los ciudadanos. El aparato cultural promueve
actividades que, según la ideología, son
sanas.
La ideología es el sistema de ideas, de
representaciones, que domina el espíritu del hombre o de
un grupo social, es la representación de la
relación imaginaria entre los individuos y sus
condiciones de existencia. Cada ideología existe
siempre en un aparato y en sus prácticas, ésta
adquiere una existencia material.
No hay práctica sino en y por una
ideología. No hay ideología sino por y
para los sujetos, ya que el hombre es
por naturaleza
un animal ideológico. Toda ideología interpela a
los individuos concretos en tanto sujetos concretos.
Por lo tanto la ideología
reconoce:
Su sujeción al sujeto
La interpelación de los individuos en tanto
sujetos
Que el Estado y
sus aparatos sólo tienen sentido desde la perspectiva de
la lucha de clases que asegura la opresión de clase y
garantiza las condiciones de la explotación y su
reproducción.
Que no hay lucha de clases sin clases
antagónicas
Que si existe una clase dominante, ésta
impone su ideología, generando la rebelión y la
resistencia de
quienes no la comparten.
- "El orden del discurso" (1970)
Foucault, Michel (1926-1984)
Editorial: Tusquets Editores –
España
Año: 1999
Lección inaugural en el
Collège de france pronunciada el 02 de Diciembre de
1970.-
Foucault plantea en su discurso, que "en toda
sociedad la producción del discurso está a la vez
controlada, seleccionada y redistribuida por un cierto
número de procedimientos
que tienen por función
conjurar los poderes y peligros, dominar el acontecimiento
aleatorio y esquivar su pesada y temible materialidad".
Para lograrlo, clasifica los principales sucesos que afectan al
orden del discurso.
Comienza con los sistemas de
exclusión. En primer lugar: la palabra prohibida. El
autor, a riesgo de
provocar controversia, no puede hablar crudamente de cualquier
tema. Las teorías acerca del por qué de esta
prohibición son diversas. En segundo lugar: la
separación de la locura. El loco (¿o genio?) es
el que tiene un discurso incomprensible para la
mayoría.
Si la mayoría (más bien la parte
respetable de la sociedad, que dicta las reglas de cómo
se tienen que hacer las cosas) no comprende, no le agradan, o
no le convienen las ideas de alguien, hacen que éste sea
rechazado por el sistema que controlan.
Finalmente: la voluntad de verdad. Pero la voluntad de
una verdad en las que las cosas son verdaderas ó falsas,
y no otra cosa ni las dos al mismo tiempo, es
intrínseca hasta del lenguaje y
de la forma de pensar. Estos sistemas de exclusión son
provocados externamente por la sociedad.
Y definitivamente una parte esencial para conseguir y
mantener o perder el poder, es el discurso. Con respecto a la
voluntad de verdad, ésta es inoculada a la sociedad por
la clase en el poder.
"La verdad depende de nuestras voluntades, y nuestras
voluntades cambian con el tiempo".
En cuanto a los procesos internos que afectan al
discurso: principios de
clasificación, ordenación y distribución.
En primer lugar: el comentario. Lo que se diga de un
discurso, definitivamente lo afectará, a través
de su interpretación.
En segundo lugar: el autor. La sociedad requiere de
una referencia de quién es el creador del discurso, para
darle credibilidad, predisposición y/o
interpretación.
Finalmente: las disciplinas. ¿Podríamos
decir que éstas son dadas por la sociedad en la que se
distribuye el discurso (medicina,
filosofía, biología, etc.)?
¿No es similar a la voluntad de verdad? Es decir, la
voluntad de verdad se ve afectada a través de discursos.
A continuación, Foucault
pasa a clasificar los principios que afectan al sujeto creador
de discursos. Están relacionados con las disciplinas, ya
que las sociedades
que escuchan el discurso, finalmente afectan al autor,
de forma tal que su discurso, antes de su gestación,
pueda ser escuchado y comprendido. Es lo que Foucault define
como sociedades de discurso.
Pero antes habla del principio de restricción
denominado como ritual, el cual define la cualificación
que deben poseer los individuos que hablan. El tercer elemento
son las doctrinas, similares a las sociedades de discurso,
sólo que las primeras divulgan su discurso, mientras que
las segundas son cerradas. Finalmente, Foucault habla de una
adecuación social del discurso. Esto es, que a
través de la
educación, finalmente la sociedad forma (o por lo
menos influye) a todo futuro autor.
En todos los principios que afectan al discurso
no se encuentran causas en común. Van de la sociedad y
la voluntad de poder, al deseo y a la moral;
pasando por el prejuicio, y
la costumbre. La razón por la cual
éstos regulan al discurso, es por el discurso mismo.
La evolución natural (la vida se modifica a
sí misma) y la evolución del discurso
serían similares (los dos se adaptan a su medio, entre
otras cosas).
- "El malestar en la cultura" (1930)
Freud, Sigmund (1856-1939)
Editorial Amorrortu Editores
Año: 1999
El sufrimiento de los seres humanos proviene de tres
factores diferentes: la degradación continua de nuestro
cuerpo, el poder de la naturaleza y las relaciones sociales.
Los dos primeros factores tendemos a aceptarlos como
inevitables. Sin embargo el tercero resulta paradójico
ya que somos nosotros mismos quienes hemos creado una cultura
que en un principio nos debía proteger contra el
sufrimiento, asegurándonos cierto bienestar.
Cultura es la suma de producciones que nos
diferencian de los animales, y que
sirve a dos fines: proteger al hombre de la naturaleza, y
regular sus mutuas relaciones sociales. Para esto
último el hombre debió pasar del poderío
de una sola voluntad tirana al poder de todos, al poder de la
comunidad, es decir que todos debieron sacrificar algo de sus
instintos: la cultura los restringió.
Freud advierte una analogía entre el proceso
cultural y la normal evolución libidinal del
individuo: en ambos casos los instintos pueden seguir
tres caminos: se subliman, se consuman para procurar placer
(por ejemplo el orden y la limpieza derivados del erotismo
anal), o se frustran. De este último caso deriva la
hostilidad hacia la cultura.
Desde el principio, el hombre primitivo
comprendió que para sobrevivir debía organizarse
con otros seres humanos. En 'Tótem y Tabú' ya se
había visto cómo de la familia
primitiva se pasó a la alianza fraternal, donde las
restricciones mutuas (tabú) permitieron la
instauración del nuevo orden social, más poderoso
que el individuo
aislado. Esa restricción llevó a desviar el
impulso sexual hacia otro fin (impulso coartado en su fin)
generándose una especie de amor hacia
toda la humanidad, pero que tampoco anuló totalmente la
satisfacción sexual directa.
Ambas variantes buscan unir a la comunidad con lazos
más fuertes que los derivados de la necesidad de
organizarse para sobrevivir.
Pero la sociedad también canaliza la
agresividad dirigiéndola contra el propio sujeto y
generando en él un superyo, una conciencia
moral, que a
su vez será la fuente del sentimiento de culpabilidad
y la consiguiente necesidad de castigo. Llegamos
así a conocer dos orígenes del sentimiento de
culpabilidad: uno es el miedo a la autoridad, y
otro, más reciente, el miedo al superyo. Ambas
instancias obligan a renunciar a los instintos, con la
diferencia que al segundo no es posible eludirlo. Se crea
así la conciencia moral, la cual a su vez exige nuevas
renuncias instituales.
El precio
pagado por el progreso de la cultura reside en la
pérdida de felicidad por aumento del sentimiento de
culpabilidad. Sentimiento de culpabilidad significa
aquí severidad del superyo, percepción de esta severidad por parte
del yo, y vigilancia. La necesidad de castigo es una vuelta del
masoquismo sobre el yo bajo la influencia del superyo
sádico.
- "Psicología de las masas y análisis
del yo" (1921)
Freud, Sigmund (1856-1939)
Editorial: Amorrortu Editores
Año: 1999
Sigmund Freud analiza
por qué las sociedades se mantienen unidas, recurriendo
a los conceptos de libido e
identificación. La gente permanece unida por
lazos de amor inhibidos en su fin, desexualizados o sublimados,
y porque han elegido el mismo líder
como ideal del yo, se identificaron con él y por tanto
se han identificado entre sí.
La psicología individual es desde un principio
una psicología
social, pues en la vida anímica individual aparece
siempre integrado el "otro" como modelo,
objeto, auxiliar o adversario.
En los grupos
sociales podemos reconocer un claro proceso de
identificación.
La identificación es la forma primitiva de
enlace afectivo a un objeto. Siguiendo una dirección
regresiva, se convierte en sustituto de un enlace libidinal a
un objeto: el yo introyecta el objeto.
La identificación puede surgir si hay
algún rasgo en común con otra persona que no
sea objeto de instintos sexuales. Cuanto más
importante sea esta unión, más completa
será la identificación parcial, y hace posible la
construcción de un nuevo
enlace.
Este mismo proceso ocurre en los lazos afectivos de
miembros de una masa, y de ellos respecto al caudillo o
líder. Hemos visto cómo en la masa se esfuma lo
individual, como el sujeto se masifica renunciando a su ideal
del yo y reemplazándolo por el ideal de la masa,
encarnado en el caudillo. Incluso los individuos que no
encuentran en el caudillo una completa encarnación de su
narcisismo, son igualmente arrastrados sugestivamente, vale
decir por identificación.
Por tanto postulamos, dice Freud, una fase del yo:
aquella que permite explicar la masa desde la distinción
entre el yo y el ideal del yo, y desde el doble vínculo
identificación y sustitución del ideal del yo por
un objeto exterior. Considerar ésto es el primer paso
del análisis del yo.
- "La rebelión de las masas"
(1930)
Ortega y Gasset, José
(1883-1955)
Editorial: Espasa Calpe –
España
Año: 2001
Estructurado en cuatro partes diferenciadas, su tema
central, la rebelión de las masas, pasa por ser uno de
los hechos positivos más importantes del siglo XX, clave
para comprender la realidad histórica pasada y
presente.
El autor identifica dos clases de hombres, con
independencia de su clase social:
La masa: concepto
donde cabría englobar a grandes capas de la población mundial emergentes de una
revolución
industrial caracterizada por el incremento constante y
creciente de la renta per cápita y el triunfo de la
democracia
liberal como sistema institucional. La masa se refiere a la
generalidad de los hombres plenos de derechos y atribuciones
que ha heredado.
La minoría: hace
referencia a los hombres que en pequeño número,
dentro de la comunidad, asumen la tarea de dirigir y orientar
a ésta última. Es dirigente, exigente consigo
misma y plena de obligaciones y deberes.
Estos conceptos hablan de distintas clases de hombres,
no de distintas clases
sociales. Minoría y masa pueden tener (o no) cabida
dentro de la misma clase social, si bien ambos varían en
el transcurso del tiempo como resultado de la
instauración del sistema institucional triunfante en el
siglo XIX: el parlamentarismo.
El hombre-masa precisa de las minorías
excelentes asumiendo a éstas como una instancia superior
de referencia. Cuando la masa no acepta ser dirigida, surge la
rebelión.
El capitalismo,
la técnica, las organizaciones
industriales produjeron un crecimiento de la sociedad y
dentro de ella nace una nueva clase social más poderosa,
en número y potencia,
que las existentes: la Burguesía. Los burgueses
reinventan el Estado del siglo XVIII que tiene su origen en el
sentido del mando y la responsabilidad de la nobleza de la
Edad Media.
Desbordados éstos por el talento práctico de la
burguesía, se genera el Estado contemporáneo,
organización prodigiosa y eficiente, en alcance y
recursos,
producto
notorio de la
organización pública moderna. A partir de
entonces el hombre-masa cual niño exige la
intervención del "papá-Estado" para solucionar
cualquier problema, conflicto o
dificultad. En consecuencia, la vida se estratifica y la
espontaneidad es absorbida y canalizada por la
burocratización del Estado. El hombre-masa
tendrá que vivir para servir al Estado cuando,
paradójicamente, éste nació para servir a
aquél. Y es que en los Estados contemporáneos
y en el transcurso del siglo XX, es notable el incremento de
las fuerzas policiales nacidas para controlar a la masa social
insatisfecha.
- "Herramientas
Freudianas para la Argentina de hoy"
Volnovich, Juan Carlos (Psicoanalista
argentino)
Editorial: www.topia.com
Año:2003
"La situación de extremo desamparo social, la
experiencia de inermidad por la que transitamos, tiende a
capturar cualquier posibilidad de identificación con
algo más que con un deseo mortífero. En una
sociedad que sólo desea la desaparición de los
"marginales", de los que sobran, el deseo de muerte se
inscribe en el inconsciente como discurso del
"Otro" y se expresa a través de pasajes al acto
destructivos hacia los demás y hacia uno mismo. Violencia
ejercida, violencia padecida, da lo mismo porque en nosotros se
borra el límite entre víctimas y
victimarios. Ese "Otro" funciona como base de la
destructividad pero sobre todo de la autodestructividad que nos
habita.
El Poder exige sacrificios: sacrificios
humanos. El Poder exige sacrificios y, además, busca el
consenso. No debemos olvidar que el sistema actual de miseria y
exclusión de grandes mayorías que se impuso junto
al enriquecimiento desmesurado de unos pocos, se llevó a
cabo con un alto grado de consenso. Triste es reconocerlo pero,
capturado por el discurso del poder, el sujeto colabora para
sostenerlo. Complaciente y cómplice, el sujeto
contribuye a reforzar la omnipotencia del Poder. Y el
Poder promueve el consenso promoviendo la identificación
que liga el deseo a las representaciones que el mismo Poder le
ofrece. Representaciones mortíferas:
destrúyete a ti mismo, extermina a los otros, a los
minúsculos otros. Puede ser que la dictadura
haya oficiado de trauma social, pero la democracia no
impidió los efectos de la dictadura del discurso
político y económico a la que contribuyó
la despolitización y el desinterés frente a la
violencia
social explícita. Así, la masa quedó
capturada y uniformada bajo los efectos de fascinación
del Poder. Condenada, al decir de Lacan, "a adorar dioses
oscuros". Fue así como la adhesión o la
indiferencia hacia el discurso del Poder nos convirtió
en sujetos borrados y tarados. Máscaras sin rostro. Eco,
y no voz.
Cuando del sometimiento a un Poder despótico
y feroz se trata, tanto más se castiga la
obediencia. Vana es la ilusión de obtener premios y
conquistar los favores del Poder ofreciendo renuncias a la
satisfacción de las necesidades, aun de las más
elementales, y vana es la iniciativa de aplacar las iras de
Poder con una política de privaciones.
El Poder, se ensaña con los obedientes y es
indulgente con los delincuentes o, por lo menos, con aquellos
que han obtenido satisfacciones ocasionales. Esta
dialéctica siniestra es válida para las
circunstancias individuales y, también, para las
cuestiones sociales."
- "Trabajo y desgaste mental"
Dejours, Cristophe
Editorial: Lumen-Humanitas
Año: 2001
En el capítulo VII – Introducción a
la psicopatología del trabajo– Dejours plantea que
el trabajo puede ser patógeno o estructurante,
según sus consecuencias sobre la salud mental.
Así, se debe ampliar el psicoanálisis, no limitándose a
las fuentes
endógenas del sufrimiento.
Lo patógeno (o estructurante) depende de la
organización del trabajo, o sea de la división de
tareas y la división de hombres (dispositivos de
vigilancia, asignación de responsabilidades, etc.). Esta
organización del trabajo produce un sufrimiento, una
descompensación psíquica que no llega a ser
enfermedad mental, porque está precariamente
equilibrada.
Una transformación en la organización
del trabajo puede inducir placer, salud mental y salud
corporal.
Las defensas colectivas luchan contra el
sufrimiento, pero, a la vez, también están al
servicio de
la producción. Otra paradoja se presenta en que
si la defensa funciona bien, anestesia al trabajador y le
impide repensar y transformar su relación con el
trabajo. Por otro lado cuando la defensa deja de ser un medio
de lucha y se transforma en un fin en sí misma, como
meta o como deseo, ya no es una defensa colectiva sino una
"ideología defensiva del oficio".
El placer en el trabajo, según este autor, se
consigue mediante la sublimación de los deseos sexuales.
El trabajo ofrece, así, una salida favorable al
deseo.
Una organización del trabajo estructurante hace
partícipe el trabajador de la "concepción" del
trabajo, fomentando la cooperación.
La psicopatología del trabajo define la
organización del trabajo, más que nada, como una
relación social, que incluye la forma en que debe
realizarse el trabajo. Es el resultado de una negociación entre la conducción y
la ejecución.
Los hombres usan como defensa frente al sufrimiento la
dominación de la mujer: la
violencia de las relaciones de trabajo es desviada hacia ellas.
Los niños
también lo sufren en los hogares.
La división internacional del trabajo implica
desviar hacia países en desarrollo a las organizaciones
de trabajo que en los países desarrollados encuentran
demasiada resistencia organizada.
- "Las sombras del mañana"
Capítulo VI ¿Cómo
reconstruimos un nosotros?
Lechner, Norbert
Editorial: L.O.M. Ediciones – Chile
Año: 2002
La política como trabajo
cultural
"No podemos concebir a "la sociedad" como un
ámbito dado de antemano, con límites
fijos de inclusión y exclusión. En un mundo
globalizado no habría una esfera delimitada de intereses
y opiniones, cuyos conflictos
serían procesados y decididos a través de la
política democrática. Los diversos desajustes del
orden social tienen efectos sobre la función
representativa de la democracia. No obstante, en lugar de
enfocar la "crisis de
representación", es más fructífero
poner de relieve la
dimensión productiva de la política – la
producción de sociedad.
Una acción es política en tanto
construye un vínculo social. Dicha construcción
de lo social mediante la lucha por la auto-determinación
colectiva, sería la forma en que la sociedad se
constituye en sujeto. A la luz de esta
auto-constitución de la "sociedad
autónoma", podemos valorar una política
según su potencial de transformación. Esto es, su
capacidad de generar experiencias e imaginarios de
Nosotros que permitan a las personas ampliar sus
posibilidades de acción. De eso trata la política
considerada como un trabajo cultural. La política
enfrenta un gran desafío cultural: nombrar e interpretar
los cambios sociales en curso. A través de la pugna
entre diferentes interpretaciones, se produce el "sentido
común" acerca de lo que significan dichas
transformaciones. La lucha política pone de relieve los
problemas y
riesgos que
conllevan los cambios al mismo tiempo que decide los objetivos
por alcanzar".
- "Las Instituciones y la
psicopatología"
Lic. Fanelli, Ramón
Editorial:
www.asociacióndelfos.com.ar
Año: 2002
"El sujeto actúa según sus
parámetros psíquicos individuales, a
través de los cuales puede establecer un vínculo
conflictivo, de sintonía o de obsecuencia en su
relación con la estructura
institucional. Todas estas características del sujeto
con la institución, referidas a su causa, están
vinculadas a la posición que el sujeto forja ante
aquellos que han ocupado un lugar preeminente para él
(en psicoanálisis, el lugar del Otro, lugar donde se
constituye el sujeto, estructura del lenguaje). De aquí
encontramos que el sujeto se aviene a la insignia de la
institución, siguiendo sus lineamientos conceptuales,
sean estos de orden, de esfuerzo, morales, de conducta,
políticos, críticos, etc.. Los preceptos
de una institución tienen una presencia dominante sobre
el sujeto, pues ellos conforman un sistema escenificado,
proyectado de la estructura de lenguaje en la que se conforma
un sujeto. Tal es así que la institución como
sistema es una construcción del sujeto. La
institución es una escena, escena de una escena, o
escenas superpuestas, según sea el caso; donde el sujeto
desarrolla sus propias construcciones psíquicas. La
institución es instituida por el sujeto y no cumple un
lugar de instituyente para éste. El papel más
importante de una institución, aparte de constituirse
como escena, es el lugar de poder que ocupa para el sujeto,
lugar donde el sujeto viene a jugar la modalidad de
relación que ha establecido con este Otro (lugar del
poder)".
- "El problema económico del masoquismo"
(1924)
Freud, Sigmund (1856-1939)
Editorial: Amorrortu Editores
Año: 1999
El masoquismo se presenta de tres maneras: como una
condición a la que se sujeta la excitación
sexual, como una expresión de la naturaleza femenina o
como una norma de la conducta de la vida.. Es decir que es
posible diferenciar un masoquismo erógeno, un masoquismo
femenino y un masoquismo moral.
El masoquismo moral ha cortado sus
vínculos con la sexualidad.
Si en los otros dos tiene como condición provenir de la
persona amada y ser tolerado por orden de ella, esta
característica desaparece en el masoquismo moral, de tal
manera que sólo importa el padecer,
independientemente de quien lo inflija.
En este caso dejamos de lado la libido y entendemos
que la pulsión de destrucción fue
vuelta hacia adentro, descargándose contra el propio yo.
Esta clase de masoquismo implica una "necesidad de castigo"
inconsciente.
"Hemos atribuido al superyó la
función de la conciencia moral, reconociendo en el
sentimiento de culpa la expresión de una tensión
entre el yo y el superyó. El yo reacciona con
sentimientos de culpa (Angustia de la conciencia moral) ante la
percepción de que no está a la altura de los
reclamos que le dirige su ideal, su
superyó".
Una vez superado el complejo de Edipo, el
superyó conservó ciertas características
de la pareja parental, su poder, su severidad, su
inclinación a la vigilancia y al castigo. Ahora el
superyó, la conciencia moral, utiliza estas marcas para
volverse duro contra el yo a quien tutela. Por lo
tanto el complejo de Edipo demuestra ser la fuente de nuestra
moral individual.
La relación conflictiva entre el yo y el
superyó deviene en una necesidad que se satisface
mediante el castigo y el padecimiento. De tal manera
podríamos reemplazar el sentimiento incosciente de culpa
por una necesidad de ser castigado por un poder
parental.
"Para provocar el castigo por parte de esta
subrogación de los progenitores, el masoquista, se ve
obligado a hacer cosas inapropiadas, a trabajar en contra de su
propio beneficio, destruir las perspectivas que se le abren en
el mundo real y, eventualmente, aniquilar su propia
existencia real".
El sadismo del superyó y el masoquismo del yo
se complementan y se unen para provocar las mismas
consecuencias.
"La primera renuncia de lo pulsional es arrancada
por poderes externos, y es ella la que crea la eticidad, que se
expresa en la conciencia moral y reclama nuevas renuncias de lo
pulsional …. pero ni aún la autodestrucción de
la persona puede producirse sin satisfacción
libidinosa"
- "Introducción al concepto de
representaciones sociales"
Denegri, Marta – Perino, Estela – Idigoras,
Raquel
Pedrana, Beatriz – Saavedra, Sergio
Editorial: U.N.R. – Facultad de
Psicología
Año: 2003
Las representaciones fueron abordadas por Durkheim,
quien bajo el término "representación
colectiva" ya en 1898 la incorporó como tema de
la Sociología. Las consideró
autónomas del sustrato psicológico
(representaciones individuales) del mismo modo que las
representaciones individuales cobran independencia respecto del
sustrato fisiológico. Las representaciones colectivas,
para Durkheim, cumplen una importante función ya que
la sociedad necesita de una representación – hasta de
sí misma – para orientar la acción. Los
hombres se encuentran ligados por una conciencia común:
conjunto de creencias y sentimientos comunes al
término medio de los miembros de una misma
sociedad con caracteres que la identifican y delimitan
dentro de un sector social.
Freud plantea la representación como
investiduras de huellas mnémicas, en ella
actúa siempre el deseo inconsciente. No
nos habla de "representación social", pero en varias de
sus obras postula la existencia de un "alma
colectiva" o "inconsciente colectivo" en el que se cumplen
procesos similares a los de la psiquis individual.
Diferencia dos niveles de representación: la
"representación-cosa" y la
"representación-palabra". La primera es un
complejo asociativo de las más diversas representaciones
visuales, acústicas, táctiles,
kinestésicas y otras. Estas se configuran siempre dentro
de un contexto humano en el cual los objetos sólo tienen
sentido en la medida en que se relacionan a un "otro" con el
cual el sujeto mantiene un lazo importante. La causalidad que
las vincula está regulada por la lógica del Inconsciente. Las
representaciones-cosa así ordenadas ofrecen la base para
entender e interpretar las percepciones y experiencias
ulteriores. La representación -cosa otorga significado a
la representación-palabra.
Freud contrapone al mundo interior, que tiende a la
satisfacción por ilusión, un mundo exterior que
impone progresivamente al sujeto, por mediación del
sistema perceptivo, el principio de realidad.
Quien formaliza la noción de
"representación social" es la escuela de
Psicología social de Serge Moscovici.
Para Denise Jodelet la idea de "representación
social" nos sitúa en el punto donde se interceptan lo
psicológico y lo social. Se trata de un conocimiento
específico, el saber de sentido común, cuyos
contenidos manifiestan la operación de procesos
generativos y funcionales socialmente caracterizados. Estos
procesos constituyen modalidades de pensamiento práctico
orientados hacia la
comunicación, la comprensión y el dominio del
entorno social, material e ideal.
- Ley Provincial Nro. 9538 del Ejercicio de la
Psicología y
Creación del Colegio de
Psicólogos
Resolución 2447/85 de las Incumbencias de
los títulos de
Psicólogo y Licenciado en
Psicología
En el año 1984 fue sancionada y promulgada la
ley 9538 del ejercicio profesional de los Psicólogos y
de la creación del Colegio de Psicólogos,
normativa absolutamente congruente con las incumbencias del
título establecidas un año después por la
Resolución Nro. 2447/85 y que regula el trabajo del
psicólogo dentro de los limites de la provincia de Santa
Fe.
- Constitución Nacional
Argentina
Artículo 14: "Todos los
habitantes de la Nación gozan de los siguientes derechos
conforme a las leyes que
reglamentan su ejercicio, a saber: De trabajar y ejercer toda
industria
lícita; de navegar y comerciar; de peticionar a las
autoridades; de entrar, permanecer y transitar en el territorio
argentino; de publicar sus ideas por la prensa sin censura
previa; de usar y disponer de su propiedad;
de asociarse con fines útiles; de profesar libremente su
culto; de enseñar y aprender."
Artículo 14 bis: "El trabajo en
sus diversas formas gozará de la protección de
las leyes, las que asegurarán al trabajador: condiciones
dignas y equitativas de labor; jornada limitada; descanso y
vacaciones pagos; retribución justa; salario
mínimo, vital y móvil; igual remuneración
por igual tarea; participación en las ganancias de las
empresas, con
control de la producción y colaboración en la
dirección; protección contra el despido
arbitrario; estabilidad del empleado público;
organización sindical libre y democrática
reconocida por la simple inscripción en un registro
especial.
Queda garantizado a los gremios: Concertar convenios
colectivos de trabajo; recurrir a la conciliación y al
arbitraje; el
derecho a huelga. Los
representantes gremiales gozarán de las garantías
necesarias para el cumplimiento de su gestión sindical y las relacionadas con
la estabilidad en el empleo.
El Estado otorgará los beneficios de la
seguridad
social, que tendrá carácter de integral e irrenunciable. En
especial, la ley establecerá: el seguro
social obligatorio, que estará a cargo de entidades
nacionales y provinciales con autonomía financiera y
económica, administradas por los interesados con
participación del Estado, sin que pueda existir
superposición de aportes; jubilaciones y pensiones
móviles; la protección integral de la familia; la
defensa del bien de familia; la compensación
económica familiar y el acceso a una vivienda
digna.
Para Ryan, determinar una propuesta
metodológica implica puntualizar el conjunto de
consideraciones epistemólogicas – metodológicas
sobre las cuales se construirá un conocimiento, con los
objetivos planteados a través del Trabajo de Campo.
El Trabajo de Campo es una manera de investigar superadora de
las limitaciones propias que imponía el tradicional
"laboratorio
experimental". A través de él se trata de
estudias una única comunidad o grupo en términos
de su estructura social, es decir, en las interrelaciones de
las partes que conforman esa estructura. Sintéticamente:
el Trabajo de Campo estudia procesos sociales, allí
donde éstos acontecen.
El tipo de Trabajo de campo que desarrollaré
está enmarcado dentro de la exploración,
desarrollando una investigación de tipo
cualitativa.
Las técnicas
a instrumentar serán:
- Entrevistas: Existen tres tipo
de entrevistas
a poner en práctica: las no estructuradas,
las estructuradas y las de grupo.
En algunas oportunidades se puede plantear un tipo de entrevista y
ésta devenir en otra por el propio interés
de los entrevistados. - Observación: A diferencia
de otros instrumentos, que dependen de conductas autodescriptas
por los individuos o de datos
secundarios, la observación permite al investigador
adquirir experiencia de primera mano sobre los significados,
relaciones y contextos de la problemática a
investigar.
Existen dos tipos de observación: Las
observaciones no estructuradas que sirven para
recopilar información de contexto sobre el área y
las conductas locales, y las observaciones
estructuradas que utilizan categorías
prefijadas para determinar lo que debe ser
observado.
Teniendo en cuenta lo expuesto, he de puntualizar las
características de la propuesta
metodológica para llevar a cabo el presente
Trabajo de Campo:
DESARROLLAR UN TRABAJO INVESTIGATIVO Y
EXPLORATORIO DE CARÁCTER CUALITATIVO, UTILIZANDO
TÉCNICAS DE OBSERVACIÓN NO ESTRUCTURADA Y DE
ENTREVISTAS SEMI- ESTRUCTURADAS, CON EL FIN DE DAR RESPUESTA A
LOS OBJETIVOS FIJADOS TANTO GENERAL COMO ESPECÍFICAMENTE,
SOBRE LA BASE DE LA PROBLEMÁTICA SELECCIONADA:
"LAS CONDICIONES DE TRABAJO Y SU
RELACIÓN CON LA SALUD MENTAL DE LOS SUJETOS CONCEJALES DEL
HONORABLE CONCEJO MUNICIPAL DE LA CIUDAD DE ROSARIO"
"El proceso de trabajo constituye una
práctica social específica, fundante de todo el
sistema social".
Es decir que el hombre, por su condición de
tal, no es un ser aislado sino que es un sujeto socialmente
constituido.
Desde el momento original de la vida el individuo,
para humanizarse, necesita del Otro.
Es ese Otro el que nos
significa, al nombrarnos, generando el campo de
lo simbólico con el cual nos completamos.
El Otro está siempre presente en la vida psíquica
individual y permite entender cómo la estructura
social determina lo más individual.
Freud distingue dos puntos fundamentales en
ocasión de definir la salud: amor y
trabajo. También señala que ninguna
acción une al individuo tan firmemente a la realidad
como el trabajo, ya que éste lo inserta en la comunidad
humana y regula sus vínculos. De tal modo, pensar la
actividad laboral desde el punto de vista
psicoanalítico, implica considerar el valor del
trabajo en la economía
psíquica, la importancia de la actividad en su
relación con la naturaleza y su función en las
relaciones intersubjetivas.
Ahora bien… ¿Cómo se desarrolla el
trabajo en las Instituciones que detentan el
"poder" político? O mejor: ¿Por qué son
consideradas estructuras de poder, cuando en
realidad el poder lo debieran detentar todos los habitantes
a través de sus
representantes?
Toda organización no deja de ser un
"fenómeno artificial" resultado del diseño humano, social y
simultáneamente el resultado de la representación
psíquica de cada individuo que pertenece o se relaciona
con ella. Circulando objetivos explícitos de su
existencia y razón de ser, el saber, el poder, las
formas de evaluación, premios, reconocimiento, o la
falta de ellos, sanciones, castigos, todo oculto por lo que se
dice. .Se ha perdido el concepto de las instituciones
políticas (en este caso el Concejo de la ciudad de
Rosario) como conformadas por una minoría que ha tomado
como trabajo la tarea de representar a la
comunidad y recibe el mandato de legislar a favor del
bienestar de todos los habitantes. Esta mirada se ha subvertido
no sólo desde los mismos integrantes de la
Institución, sino que toda la comunidad ha
delegado en ellas el desarrollo de
políticas orientadas a enmarcar su vida cotidiana. Este
poder, reconocido también como autoridad de la
Institución, nos plantea las preguntas de qué
posición adoptamos, de qué textura es la
autoridad que nos representa y de qué manera nos
disponemos frente a ella.
Es el pueblo quien debe significar la tarea de las
Instituciones políticas, abandonando la idea social
subyacente de analogizar representación a
delegación, participando activamente en la
toma de
decisiones, controlando, acercando ideas y soluciones
para las distintas problemáticas sociales, pidiendo
informes,
exigiendo el cumplimiento responsable y honesto de la labor
política.
La tarea consiste en reconocer nuestro propio lugar,
alzándonos desde el sojuzgamiento en el que nos han
ubicado -con nuestra anuencia – para lograr un cambio
fundamental y revolucionario de nuestra sociedad.
No podemos atravesar esta crisis sin renovar los
instrumentos de análisis, los modos de pensar y las
formas organizacionales de la democracia
representativa, redefiniendo, sobre nuevas bases, las
categorías de la política.
Deberíamos cesar de "representarnos
individualmente" y reconocer a las instituciones
políticas y sociales no como organismos
rectores de nuestra subjetividad, sino como
"cuerpos" en si mismos, que adquirirán
presencia subjetiva en tanto nosotros los
signifiquemos.
Debemos hacernos cargo de nuestras responsabilidades,
construyendo un nuevo discurso.
Un nuevo discurso del Poder.
Pero esta vez, del Poder del
pueblo.
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