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Transferencia de Tecnologia




Enviado por eugenio_izquierdo



    Contratos
    de
    Prospección
    Biológica (Bioprospección). Su
    importancia

     

    Introducción

    La prospección de la biodiversidad
    es la exploración, extracción y selección
    de la diversidad biológica y del conocimiento
    indígena en busca de recursos
    genéticos y bioquímicos de valor
    comercial. Si bien es cierto que la prospección de la
    biodiversidad no siempre implica la utilización del
    conocimiento indígena, es un hecho claro que los valiosos
    compuestos químicos derivados de plantas, animales y
    microorganismos son más fácilmente identificados, y
    son de mayor valor comercial cuando son recolectados en base al
    conocimiento indígena y/o encontrados en territorios
    tradicionalmente habitados por comunidades indígenas. Los
    acuerdos bilaterales de bioprospección están
    aprobados por la Convención Multilateral sobre Diversidad
    Biológica. No obstante, en la gran mayoría de los
    casos los acuerdos de bioprospección comercial no pueden
    ser controlados ni implementados de manera efectiva por las
    comunidades de origen, por los países o por la
    Convención.

    RAFI (Rural Advancement Foundation Internacional) estima
    que las plantas
    medicinales y los microorganismos provenientes del Sur
    contribuyen con por lo menos 30 billones de dólares al
    año a la industria
    farmacéutica del Norte. Se estima de manera conservadora
    que el mercado para los
    especímenes de productos
    naturales para investigación (muestras o extractos de
    materiales
    biológicos) sólo dentro de la industria
    farmacéutica de los Estados Unidos de
    América
    es de 30 a 60 millones de dólares al año. Por ello
    no es motivo de sorpresa que los buscadores de
    riquezas biológicas estén empeñados
    febrilmente en conseguir el "oro verde" del
    Sur. (1)

    Esta situación afecta sobre todo a los
    países en vías de desarrollo o
    subdesarrollados donde la riqueza biológica y los
    conocimientos tradicionales están más arraigados,
    es por esto que reviste gran importancia conocer los contratos de
    prospección biológica o
    bioprospección.

     

    Desarrollo

    Concepto de
    prospección biológica o
    bioprospección.

    El proceso de
    búsqueda y evaluación
    que permite identificar, seleccionar y aislar componentes
    útiles de estos recursos, se conoce como
    "bioprospección". Esta es la exploración de la
    diversidad biológica y del conocimiento indígena
    asociado a ella, para facilitar la selección y
    extracción de recursos genéticos y
    bioquímicos que puedan resultar en productos comerciales.
    En el contexto actual en el mundo, toda bioprospección
    resulta en biopiratería. (2)

    ETC group define a Bioprospección como "la
    investigación en marcha donde biólogos,
    químicos, y otros científicos recopilan una
    base de datos
    del potencial de muchas especies." (3)

    Los contratos de bioprospección se basan sobre la
    utilización de genes de plantas, animales y humanos,
    principios
    activos y
    conocimientos etnobotánicos, que puedan ser explotados
    económicamente por las empresas
    transnacionales de la farmacéutica, la agricultura y
    la alimentación. También les interesa
    identificar las regiones precisas del mundo con megadiversidad,
    lo que hoy el Banco Mundial
    llama los "hotspots" (las zonas de mayor concentración) de
    biodiversidad de todo el mundo, pero principalmente estas
    áreas de megadiversidad biológica y cultural se
    ubican todas en el Sur del planeta.

     

    Ejemplos de contratos de
    bioprospección

    En la actualidad existe un grande y renovado interés en
    la evaluación de productos naturales, en especial, a
    partir del surgimiento de las nuevas biotecnologías y
    otras tecnologías relacionadas, estos recursos constituyen
    la materia prima
    mediante la cual las industrias logran
    una innovación permanente que les brindan
    ganancias extraordinarias mediante:

    El registro de
    patentes que privatizan los seres vivos o sus partes (de
    microorganismos, plantas, animales, genoma humano), los cuales
    hasta hace muy poco siempre habían sido bienes
    comunitarios, públicos o patrimonio de
    la humanidad.

    El control de los
    mercados.

    El amparo en la
    ausencia de normas
    internacionales y leyes nacionales.
    (Ausencia que puede responder a la existencia de normas
    comunitarias profundas que durante siglos o milenios han
    garantizado la libre circulación de conocimientos
    medicinales, agropecuarios, forestales, etc.)

    En 1980 nada del presupuesto de
    investigación de la industria farmacéutica de los
    Estados Unidos estaba destinado a la evaluación de plantas
    superiores. En la actualidad se estima que más de 200
    compañías e instituciones
    de investigación en todo el mundo están evaluando
    compuestos animales y vegetales en busca de propiedades
    medicinales.

    El renacimiento de
    la búsqueda de productos naturales y el reconocimiento del
    valor del conocimiento indígena están en parte
    alimentados por la toma de conciencia de que
    las especies, su material genético, y los ecosistemas de
    los que forman parte están desapareciendo
    rápidamente de la faz de la tierra. A
    mediados de los años ochenta, los analistas de la
    industria farmacéutica advirtieron que cada planta
    medicinal de las selvas tropicales que se extinga podría
    representar pérdidas en ventas de
    más de 200 millones de dólares para la industria
    farmacéutica.

    Dados los avances de la biología molecular y
    la disponibilidad de instrumentos más sofisticados para la
    investigación, la investigación de productos
    naturales es cada vez más rentable para las corporaciones
    farmacéuticas y otras instituciones. En laboratorios de
    alta tecnología, los extractos de especimenes
    biológicos son sometidos a rápidos y precisos
    procedimientos
    de análisis que permiten el aislamiento de
    sustancias que demuestren una actividad específicamente
    determinada. Como resultado de esto, el mercado de compra y
    venta de
    especimenes biológicos exóticos se está
    expandiendo rápidamente. Según estimados
    conservadores, el mercado de especimenes de productos naturales
    para investigación solamente dentro de la industria
    farmacéutica es de 30 a 60 millones de USD al
    año.

    Desde luego que la prospección de la
    biodiversidad no es algo nuevo. Por décadas, recolectores
    de plantas de los países industrializados se han
    aventurado hacia el sur en busca de valioso material
    genético para el mejoramiento de las especies
    agrícolas. No obstante, ningún dinero ha
    cambiado de manos en este proceso, ni se ha otorgado
    reconocimiento alguno a las comunidades agrícolas
    indígenas que seleccionaron, mantuvieron y mejoraron las
    variedades de cultivos tradicionales. En 1991, Monsanto Inc.(una
    compañía agroquímica con sede en los EUA
    estaba reclutando empleados suyos "quienes estuvieran por viajar
    a algún lugar exótico y a los cuales no les
    importara extraer unas cuantas muestras del suelo por
    amor a
    la ciencia",
    con el fin de recoger especimenes para los programas de
    prospección agrícola de Monsanto. "Uno nunca sabe
    lo que va a encontrar, ni dónde lo va a encontrar… Todo
    está dentro de lo posible", según Margann
    Miller-Wideman, portavoz de Monsanto. (4)

    El primer gran convenio bilateral sobre
    bioprospección fue hecho público en Septiembre de
    1991 (antes de la Convención sobre Diversidad
    Biológica), cuando Merck & Co. (una corporación
    farmacéutica con sede en los EUA anunció la firma
    de un acuerdo por dos años y 1.135 millones de
    dólares con el Instituto Nacional de Biodiversidad (INBio)
    de Costa Rica, un
    instituto privado, no-gubernamental de investigación.
    INBio acordó proveer a los programas de evaluación
    de fármacos de Merck con extractos químicos de
    plantas silvestres, insectos y microorganismos. A cambio de
    esto, Merck accedió a dotar a INBio con un presupuesto de
    investigación por dos años correspondiente a la
    suma de 1.135 millones de dólares, un porcentaje no
    revelado de las regalías sobre cualesquiera productos
    comerciales que resultasen de dicha investigación,
    así como asistencia técnica y entrenamiento
    orientados a desarrollar la capacidad para la
    investigación dentro del país. INBio también
    se comprometió a destinar al Fondo de Parques Nacionales
    de Costa Rica el 10% de la asignación monetaria de Merck y
    el 50% de las regalías que pudiese eventualmente recibir.
    A pesar de que el acuerdo Merck/INBio fue aclamado por algunos
    como un "modelo" de
    contrato sobre
    bioprospección, el mismo ignora los derechos y el papel de las
    comunidades indígenas. Según Alejandro Argumedo, de
    la Cadena de Comunidades Indígenas para la Biodiversidad,
    existe al menos una reserva indígena dentro del
    área de recolección de INBio. Entre los
    para-taxonomistas que han sido contratados por INBio para recoger
    especimenes biológicos se encuentran miembros de
    comunidades indígenas.

    Se estima que las selvas tropicales de Costa Rica
    contienen del 5 al 7 por ciento de la biodiversidad que queda en
    el mundo. Si el acuerdo Merck/INBio fuese ampliamente imitado,
    toda la biodiversidad del Sur podría ser subastada por la
    insignificante suma de alrededor de 10 millones de dólares
    al año. Las ventas de Merck para el año 1991
    ascendieron a 8.6 billones de dólares, mientras que el PNB
    (Producto
    Nacional Bruto) de Costa Rica de ese año fue de 5.2
    billones de dólares. El presupuesto para
    investigación de Merck para 1991 fue de aproximadamente un
    billón de dólares. En realidad, Merck posee tres
    fármacos cuyas ventas sobrepasan el billón de
    dólares cada una. Dado que las compañías
    farmacéuticas invierten un promedio de 231 millones de
    dólares en investigaciones
    para el desarrollo de cada nuevo fármaco, el costo asignado al
    descubrimiento de una sola sustancia que sea resultado del
    acuerdo apenas equivale a una bagatela. Para Merck, el acuerdo de
    Costa Rica representó mano de obra sumamente barata,
    así como el acceso a tesoros biológicos aún
    no identificados (y excelentes relaciones
    públicas).

    La compañía farmacéutica Pfizer,
    utilizando como base el contrato Merck/INBio, pagó cerca
    del doble de la cantidad de este acuerdo al Jardín
    Botánico de New York por recolectar dentro de los EUA
    muestras de plantas con potencial para el desarrollo de
    fármacos. Si bien es cierto que los Estados Unidos
    eclipsan a Costa Rica en tamaño geográfico,
    también es sabido que se caracterizan por sus
    relativamente escasas reservas de biodiversidad.

    Desde el anuncio del acuerdo Merck/INBio, otros
    contratos entre instituciones/corporaciones con sede en el Norte
    e institutos de investigación/agencias gubernamentales del
    Sur han sido suscritos. Desafortunadamente no existe mecanismo
    alguno para monitorear el número de acuerdos contractuales
    que existen actualmente, ni los
    países/corporaciones/instituciones que se encuentran
    involucradas. Mientras que es posible obtener alguna información sobre los acuerdos de
    bioprospección más publicitados, como el acuerdo
    Merck/INBio antes mencionado, podrían existir cientos de
    acuerdos bilaterales que se encuentran ocultos por un relativo
    secreto y no son objeto de la atención pública. Con frecuencia es
    difícil para las organizaciones de
    las comunidades indígenas saber a ciencia cierta
    con quién están negociando, o a quiénes
    están en realidad proporcionando información y
    materiales genéticos.

    Está volviéndose cada vez más claro que la
    mayoría de las corporaciones con sede en el Norte no
    negocian directamente el acceso a la biodiversidad, sino que
    operan a través de intermediarios. Estos intermediarios
    pueden ser compañías privadas que están en
    el negocio de recoger y vender especimenes biológicos,
    instituciones del sector
    público, organizaciones no-gubernamentales y entidades
    sin fines de lucro tales como institutos de investigación,
    jardines botánicos, grupos
    conservacionistas/ambientalistas, o etnobotánicos
    empleados por las corporaciones bajo contrato.

    El gobierno de los
    Estados Unidos está involucrado en numerosos acuerdos de
    bioprospeción en todo el mundo. En 1993 los Institutos
    Nacionales de Salud de los E.E.U.U.
    destinaron 60 millones de dólares para la
    investigación de la biodiversidad en busca de
    fármacos y productos medicinales provenientes del mundo
    natural. En su búsqueda de productos naturales para tratar
    el
    cáncer y el SIDA, el
    Instituto Nacional del Cáncer ha recolectado hasta el
    momento 50 000 muestras derivadas de
    plantas, microorganismos y diversidad genética
    marina provenientes de 30 países tropicales. Estas
    muestras se encuentran actualmente en el Repositorio de Productos
    Naturales del NCI, y están disponibles para
    "investigadores calificados" bajo acuerdos de transferencia de
    materiales. Aquellos que reciben las muestras "son requeridos de
    seguir las políticas
    del NCI respecto a una justa compensación a los
    países de origen."

    La recolección de plantas para el NCI es llevada
    a cabo por tres contratistas: La Universidad de
    Chicago (en el Sudeste Asiático); el Jardín
    Botánico de Missouri (en el Africa); y el
    Jardín Botánico de New York (en América
    Central y del Sur). El NCI ha firmado acuerdos de
    bioprospección con Bangladesh, Costa Rica, Ecuador,
    Guyana, India,
    Filipinas, Rusia,
    Sarawak, Tanzania y Zimbabwe, aún continúan en
    negociaciones de acuerdos con otros países.

    En diciembre de 1993, tres agencias del gobierno de los
    EUA (los Institutos Nacionales de Salud, la Fundación
    Nacional para la Ciencia, y la Agencia Internacional para el
    Desarrollo), quienes colaboran bajo el nombre de Grupo
    Cooperativo Internacional sobre la Biodiversidad (ICBG),
    anunció asignaciones monetarias de incentivo para los
    más grandes acuerdos públicos-privados de
    prospección de la biodiversidad en la historia. Las cinco
    asignaciones del ICBG para los acuerdos de bioprospección
    financiados por el gobierno de los EUA suman 12.5 millones de
    dólares en un plazo de cinco años. Las asignaciones
    de ICBG incluyen cooperación pública-privada entre
    diversas organizaciones, incluyendo corporaciones
    farmacéuticas, investigadores académicos,
    representantes de los gobiernos y organizaciones ambientalistas
    no-gubernamentales en siete países. Todos los
    países afectados por los acuerdos ICBG, excepto uno, son
    Latinoamericanos: Surinam, Costa Rica, Perú, Argentina,
    Chile, México y
    Camerún. (Inicialmente, el ICBG recibió cartas de
    interés de 63 proponentes, y escogió a sus cinco
    beneficiarios entre 34 postulantes.)

    El proyecto
    ICGB-Maya (denominado así por sus siglas en inglés), presentado en castellano como
    "Investigación, farmacéutica y uso sustentable del
    conocimiento etnobotánico y biodiversidad en la
    región Maya de los Altos de Chiapas",
    recibirá una donación total de 2,5 millones de
    dólares del Grupo Internacional Cooperativo en
    Biodiversidad (International Cooperative Biodiversity
    Group–ICBG), financiado por el gobierno de los Estados
    Unidos. El ICGB es un consorcio de agencias federales que incluye
    a los Institutos Nacionales de Salud, la Fundación
    Nacional de Ciencia y el Ministerio de Agricultura de Estados
    Unidos (USDA). Otorga donaciones a instituciones de
    investigación públicas y comerciales que realizan
    programas de bioprospección/biopiratería, en
    países del Sur. Según el propio ICGB, sus metas son
    la promoción del descubrimiento de
    farmacéuticos derivados de recursos
    naturales, la conservación de la biodiversidad y el
    crecimiento
    económico sostenido de los países en
    vías de desarrollo. (5)

    Utilizando el
    conocimiento indígena como guía de su
    investigación, el proyecto ICGB en Chiapas se propone
    descubrir, aislar y evaluar farmacológicamente componentes
    importantes de especies vegetales y microorganismos usados en la
    medicina maya
    tradicional. Los Altos de Chiapas son depositarios de una de las
    zonas más ricas en biodiversidad animal y vegetal del
    planeta. A través de los siglos, los mayas han
    desarrollado un conocimiento médico amplio y complejo. Se
    estima que existen más de 6000 especies vegetales en el
    área y miles de ellas son usadas tradicionalmente por los
    mayas para
    tratar enfermedades.

    Todas las muestras promisorias serán analizadas
    para comprobar si pueden ser efectivas en enfermedades como
    cáncer, dolencias asociadas al VIH/SIDA,
    desórdenes del sistema nervioso
    central, enfermedades
    cardiovasculares, gastrointestinales,
    respiratorias/pulmonares, cutáneas y como anticonceptivos. El proyecto también se
    propone realizar un extenso relevamiento botánico de los
    Altos de Chiapas y –según sus propias declaraciones-
    promover la producción y cosecha sustentable de
    especies seleccionadas que muestren potencial considerable para
    el desarrollo
    económico. El proyecto estima que podría
    identificar unos 2000 componentes únicos que serán
    perfilados químicamente por la Molecular Nature Limited,
    el socio comercial del proyecto, radicado en el Reino Unido. Un
    duplicado de todas las muestras colectadas se depositarían
    en el herbario de la Universidad de Georgia-Athens.

     

    Arista económica de la
    bioprospección

    1. Uso farmacéutico

    Muestras de plantas secas, sin procesar: US$ 50-200 por
    kilo.

    Cultivos microbianos,  por cada muestra de
    organismo vivo: $50-$140 dólares por muestra.

    Muestras de hongos: $60 a
    $100 dólares por muestra.

    Promedio de pago de regalías

    Materia prima (plantas) o extractos que son la base de
    un producto: de 3% a 5%.

    Si el producto comercializado se basa en un derivado: de
    2% a 3%.

    Si el producto es totalmente manufacturado
    sintéticamente: de 0.5% a 1%.

     

    2. Uso agroquímico

    Pago de muestras: muy variable dependiendo del uso que
    se supone puede tener cada producto: va desde US$ 30 a $350,
    según la información previa que se tenga sobre la
    muestra. El promedio de pago de regalías es de
    2-3%.

    3. Espectro de porcentaje de regalías para
    otros usos biotecnólogicos

    El precio
    promedio por unos miligramos de un cultivo de cepa es de $80 a
    $350 dólares por muestra. Sin embargo, en el caso de
    organismos poco usuales, el pago por muestra puede alcanzar
    varios miles de dólares.

    Las instituciones que almacenan y venden muestras de
    microorganismos (cultivos, aislamientos), tales como la American
    Type Culture Collection, la German Collection of Microorganisms
    and Cell Cultures, etc., venden cada muestra a precios que
    van desde los $100 dólares hasta los $275 dólares.
    En el caso de muestras únicas, los costos unitarios
    aumentan de manera significativa.

    Las regalías más comunes sobre las ventas
    de productos son de 3% a 5%, pero pueden llegar en algunos casos
    a situarse entre 8% y 10%, dependiendo del producto
    final.

     

    Consecuencias sociales y
    ambientales de los contratos de
    bioprospección

    Para las comunidades: la destrucción de los lazos
    de identidad
    comunitaria por la manera en que la comercialización y privatización de los conocimientos
    tradicionales y los bienes ambientales colectivos socavan los
    principios de estas culturas. También la pérdida de
    recursos de sus territorios.

    Para la nación:
    la pérdida del control de uno de sus principales recursos
    estratégicos.

    Para la humanidad: el uso discrecional para el lucro que
    las empresas transnacionales puedan hacer de estos conocimientos
    y del código
    genético; el aumento en el riesgo de nuevas
    armas y
    guerras
    biológicas, por ejemplo nuevas guerras de exterminio
    genéticamente dirigidas o la inducción y creaci6n de nuevas enfermedades
    en plantas y humanos; y la manipulación genética y
    el control del cuerpo de los trabajadores y de los
    consumidores.

     

    ¿La
    bioprospección solo implica hechos
    negativos?

    En el contexto actual, si. Sin embargo, de no existir la
    privatización de seres vivos y su explotación
    comercial, la bioprospección podría contribuir
    a:

    Sacar del aislamiento y olvido a los conocimientos
    indígenas, colocándolos en un plano universal para
    uso de todos (hoy ocurre a manera de saqueo, privatización
    y descontextualizando estos conocimientos
    holísticos).

    Desarrollar la investigación científica (hoy solo
    ocurre siguiendo intereses manipuladores de la producción
    de las empresas transnacionales)

    Llevar a la geografía hasta los
    confines de una biogeografia molecular del planeta (aunque ahora
    esto solo lo desarrollan las empresas transnacionales en vistas a
    obtener mayores "ganancias derivadas de una mayor renta de la
    tierra".)

     

    Convenio de Diversidad
    Biológica

    En la Conferencia de
    las Naciones Unidas
    sobre el Medio Ambiente
    y el Desarrollo (Río de Janeiro, 3 a 14 de junio de 1992)
    se propuso el Convenio de Diversidad Biológica (CDB) y al
    que se suscribieron 157 países durante la Conferencia,
    entrando en vigencia en diciembre de 1993. Este convenio en su
    preámbulo sienta las bases de lo que representa:
    Conscientes del valor intrínseco de la diversidad
    biológica y de los valores
    ecológicos, genéticos, sociales, económicos,
    científicos, educativos, culturales, recreativos y
    estéticos de la diversidad biológica y sus
    componentes, Conscientes asimismo de la importancia de la
    diversidad biológica para la evolución y para el mantenimiento
    de los sistemas
    necesarios para la vida de la biosfera,
    Afirmando que la conservación de la diversidad
    biológica es interés común de toda la
    humanidad, Reafirmando que los Estados tienen derechos
    soberanos sobre sus propios recursos biológicos,
    Reafirmando asimismo que los Estados son responsables de
    la conservación de su diversidad biológica y de la
    utilización sostenible de sus recursos biológicos,
    Resueltas a conservar y utilizar de manera sostenible la
    diversidad biológica en beneficio de las generaciones
    actuales y futuras. (6)

    El CDB en su Artículo 8, inciso c, d, e, f, g, i
    y j establece que cada Parte Contratante, en la medida de lo
    posible y según proceda:

    c) Reglamentará o administrará los
    recursos biológicos importantes para la
    conservación de la diversidad biológica, ya sea
    dentro o fuera de las áreas protegidas, para garantizar
    su conservación y utilización
    sostenible;

    d) Promoverá la protección de
    ecosistemas y hábitats naturales y el mantenimiento de
    poblaciones viables de especies en entornos
    naturales;

    e) Promoverá un desarrollo ambientalmente
    adecuado y sostenible en zonas adyacentes a áreas
    protegidas, con miras a aumentar la protección de esas
    zonas;

    f) Rehabilitará y restaurará ecosistemas
    degradados y promoverá la recuperación de
    especies amenazadas, entre otras cosas mediante la
    elaboración y la aplicación de planes u otras
    estrategias de
    ordenación;

    g) Establecerá o mantendrá medios para
    regular, administrar o controlar los riesgos
    derivados de la utilización y la liberación de
    organismos vivos modificados como resultado de la biotecnología que es probable tengan
    repercusiones ambientales adversas que puedan afectar a la
    conservación y a la utilización sostenible de la
    diversidad biológica, teniendo también en cuenta
    los riesgos para la salud humana;

    i) Procurará establecer las condiciones
    necesarias para armonizar las utilizaciones actuales con la
    conservación de la diversidad biológica y la
    utilización sostenible de sus componentes;

    j) Con arreglo a su legislación nacional,
    respetará, preservará y mantendrá los
    conocimientos, las innovaciones y las prácticas de las
    comunidades indígenas y locales que entrañen
    estilos tradicionales de vida pertinentes para la
    conservación y la utilización sostenible de la
    diversidad biológica y promoverá su
    aplicación más amplia, con la aprobación y
    la participación de quienes posean esos conocimientos,
    innovaciones y prácticas, y fomentará que los
    beneficios derivados de la utilización de esos
    conocimientos, innovaciones y prácticas se compartan
    equitativamente;

    En su Artículo 15 define el acceso a los recursos
    genéticos reconociendo que la facultad de regular el
    acceso a los recursos genéticos incumbe a los gobiernos
    nacionales y está sometida a la legislación
    nacional. También la Convención aprueba los
    acuerdos bilaterales al hacer repetidas referencias a
    "términos de mutuo acuerdo" respecto al acceso a los
    materiales genéticos (Artículo 15.5).3). El lenguaje de
    la Convención sobre los derechos de propiedad
    intelectual (Artículos 16.2 y 16.5) es confuso, y
    está sujeto a distintas interpretaciones. Un representante
    de la industria farmacéutica/ agroquímica
    manifestó que la Convención no cuestiona los
    sistemas de propiedad
    intelectual, y que aún podría ir más lejos
    que el GATT en cuanto a legitimar
    los sistemas de propiedad intelectual.

    Tal como parece, la Convención sobre
    Biodiversidad otorga una pasiva aprobación a los acuerdos
    contractuales bilaterales que enfrentarán a comunidades
    indígenas y países los unos contra los otros.
    Mientras que las corporaciones multinacionales son libres de
    patentar los bio-materiales, no existen normas efectivas ni
    condiciones definidas para reconocer y compensar las
    contribuciones de las comunidades indígenas y de otros
    innovadores informales, quienes son responsables del
    mantenimiento, la utilización y el desarrollo de la
    biodiversidad en todo el mundo.

     

    Conclusiones

    Los contratos de bioprospección existentes
    aún favorecen más a las partes contratantes de
    más recursos financieros, a pesar de que un porcentaje del
    contrato se destina a las comunidades con las cuales se suscribe.
    A nivel mundial las trasnacionales muestran mayor interés
    en este tipo de contrato buscando obtener mayores beneficios a
    través de los derechos de patentes que obtienen de estos
    recursos biológicos.

    El Convenio de Diversidad Biológica expresa el
    sentir de los países para proteger sus riquezas
    biológicas y que encierran en si un beneficio para toda la
    humanidad, sin embargo no todos los países están
    suscritos ni aplican cabalmente todos sus
    artículos.

    Sin embargo, los contratos de bioprospección
    pudieran contribuir con la difusión de los conocimientos
    para la utilización adecuada y justa de todos los
    países dando solución a diversos problemas
    actuales; incluso, podría solucionar o contribuir a
    reducir los efectos de epidemias que están azotando a
    varios países.

     

    Bibliografía

    Convenio de Biodiversidad Biológica.
    1992.

    ETC group. 1994.
    Bioprospección/biopiratería y comunidades
    indígenas. <http://www.etcgroup.org [Consulta: 21 de noviembre
    de 2005].

    Henry, J. 2005. Nada en bioprospección tiene
    sentido excepto a la luz de la
    economía.
    <http://www.bioetica.org/
    [Consulta: 21 de noviembre de 2005].

    RAFI. 1999. Organizaciones Indígenas Mayas
    denuncian proyecto de biopiratería en Chiapas. Comunicación de prensa.
    <http:// www.rafi.org
    [Consulta: 21 de noviembre de 2005].

    Seminario ¿Biopiratería o
    bioprospección? 2000. "Biodiversidad, derechos
    indígenas y campesinos". <http:// www.rafi.org
    [Consulta: 21 de noviembre de 2005].

    Eugenio Izquierdo

     

    Notas

    1. ETC group. 1994.
      Bioprospección/biopiratería y comunidades
      indígenas. <http://www.etcgroup.org [Consulta: 21 de
      noviembre de 2005].
    2. Seminario ¿Biopiratería o
      bioprospección? 2000. "Biodiversidad, derechos
      indígenas y campesinos". <http:// www.rafi.org
      [Consulta: 21 de noviembre de 2005].
    3. Henry, J. 2005. Nada en bioprospección tiene
      sentido excepto a la luz de la economía. <
      http://www.bioetica.org/
      [Consulta: 21 de noviembre de 2005].
    4. ETC group. 1994.
      Bioprospección/biopiratería y comunidades
      indígenas. <http://www.etcgroup.org [Consulta: 21 de
      noviembre de 2005].
    5. RAFI. 1999. Organizaciones Indígenas Mayas
      denuncian proyecto de biopiratería en Chiapas.
      Comunicación de prensa. <http:// www.rafi.org
      [Consulta: 21 de noviembre de 2005].
    6. Convenio de Biodiversidad Biológica.
      1992.

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