Algunas consideraciones sobre la teoría curricular y el aprendizaje del conocimiento histórico
- Desarrollo
- Perspectiva del currículum
en la Educación Superior - Consideraciones generales del
proceso de enseñanza / aprendizaje de la
Historia - Caracterización del
contenido histórico y condiciones para su
aprendizaje - Conclusiones
- Bibliografía
La teoría curricular en los momentos actuales ha
evidenciado un amplio desarrollo, si
tenemos en cuenta que las necesidades educativas en el contexto
internacional han pasado a formar parte de las prioridades en
muchos países, con el objetivo de
responder a las demandas sociales de los pueblos.
Por ello, referirse al currículo y considerar que existan
criterios homogéneos sería una gran utopía,
pues los contextos exigen currículos dinámicos
capaces de dar una respuesta urgente a dichas
exigencias.
Sin embargo, no se puede pasar por alto las teorías
y criterios de importantes investigadores sobre la
temática, que desde principios del
siglo XX fueron sentando las bases para el desarrollo actual de
la teoría curricular.
En ese contexto, Cuba ha
desempeñado un importante papel en el enriquecimiento de
la teoría curricular. Las propias posibilidades que
brindó el gobierno desde
1959, con la ampliación a todos los sectores de la
población a la educación,
demandaba currícula en correspondencia con cada momento
histórico.
Desde este punto de vista no se perdió la
perspectiva del aprovechamiento del conocimiento histórico
para consolidar el sistema de
valores ya
incorporado al modo de actuación de los cubanos dada las
tradiciones patrióticas de dicha
población.
Por ende, este trabajo
persigue el objetivo de reflexionar sobre la concepción
curricular que asume el sistema
educativo cubano, teniendo en cuenta a su vez el la
proyección del trabajo con el
conocimiento histórico y sus complejidades,
fundamentalmente cuando nos encontramos en presencia de
estudiantes de otros países.
Aspecto a tener en cuenta, es lo referido al proceso del
desarrollo curricular en Cuba, para ello tomaremos en
consideración los criterios del colectivo del Instituto
Central de Ciencias
Pedagógicas que señalan que las transformaciones
educativas en el país estuvieron aparejadas al propio
proceso revolucionario, se requería de la
erradicación del analfabetismo
para poder llevar a
cabo la preparación del nuevo potencial científico
del país.
Es justamente en la década de los 80 cuando se
aprecia la implementacion y consolidación del Sistema
Nacional de Educación como
resultado del Plan de
Perfeccionamiento iniciado en el año 1972, constituyendo
la reforma más importante que ha tenido el sistema
educativo cubano después de 1959.
Todos los agentes socializadores y educativos cubanos
dirigen sus esfuerzos hacia el desarrollo de un nuevo tipo de
hombre,
integral, profundamente solidario y humano, con un alto sentido
de su identidad
nacional, identificado con su cultura y su
nación.
A este propósito se suma la Escuela
Internacional de Educación
Física y Deporte que no queda fuera de las
intenciones de las intenciones antes señaladas.
En el año 1995, dadas las contradicciones
surgidas en el ámbito educacional, se llevaron a cabo
proyecciones con respecto a los escenarios educativos y se
planteo la realización de un modelo para la
escuela cubana, dando lugar a reflexiones y posiciones
teóricas sobre el papel socializador de la escuela cubana
y su estructura
curricular.
En este sentido debe ser tenido en cuenta de que todo
currículo se sustenta en un conjunto de concepciones que
constituyen los fundamentos teóricos del mismo, pues
aportan un marco referencial donde se apoya y justifica la toma y
ejecución de decisiones relativas al diseño
y desarrollo curricular. Ellas son:
- Concepciones acerca del hombre y de la
educación. - Concepciones sobre el papel de la educación y
sus instituciones. - Concepción del proceso de conocimiento y de
la
ciencia. - Concepción del proceso de enseñanza aprendizaje.
El currículum puede analizarse desde la
perspectiva de los modelos
teóricos usados para analizar las diversas
perspectivas socio-históricas de la
enseñanza:
Modelo tradicional | Los currículos hacen énfasis en la |
Modelo tecnocrático | Conocido también como tecnología educativa, a nivel de Se concibe el currículum como una serie |
Modelo crítico | Toma en cuenta conceptos como el autoritarismo y |
Sin embargo, en el estudio realizado sobre la
problemática queda explícito, entre los diferentes
autores, que es en el currículum donde se concretan toda
una serie de principios – ideológicos, pedagógicos,
psicopedagógicos, sociológicos, etc.- que en su
conjunto evidencian la orientación general del sistema
educativo de que se trate, en correspondencia con el modelo
educativo.
Desde este punto de vista, el Dr. Ariel Ruiz Aguilera,
en su obra "Teoría y práctica curricular", dedica
todo un capítulo a explicar las consideraciones para
enfrentar una nueva concepción curricular, las que
resumimos a continuación:
- Consideraciones filosóficas: se parte de la
concepción dialéctico materialista sustentada en
el Marxismo–
Leninismo para la fundamentación del proceso
lógico del conocimiento por parte del hombre. Ello
propicia que se tenga en cuenta las dos vías por las
cuales se produce el conocimiento de los fenómenos y los
procesos
pedagógicos: a-Del camino de lo concreto,
como existe en la percepción y la representación,
hacia lo abstracto y b-del camino de lo abstracto a lo
concreto. - Consideraciones sociológicas: permite tener en
cuenta que el conocimiento existe mediante la
transmisión de la experiencia de generación en
generación; teniendo lugar en condiciones de
cooperación y de comunicación
social, en un proceso interactivo de socialización en la que los principales
agentes son: la familia,
la escuela y la comunidad
(centros culturales, recreativos, productivos, de servicios,
etc.) - Consideraciones psicológicas: propicia tener
en consideración las categorías esenciales de la
teoría curricular: objetivo, contenido, métodos,
medios,
formas organizativas y evaluación. Pero para ello se requiere
asumir una posición filosófica, que en este caso
se fundamenta en la teoría del aprendizaje
histórico- cultural de L.S.Vigotsky. - Consideraciones metodológicas investigativas:
dada las complejidades del proceso educativo, de
socialización, de interacción del hombre con el mundo,
desde el punto de vista gnoseológico, ontológico
y metodológico, exigen como necesidad de primer orden,
la búsqueda de formas y medios más efectivos para
dominar las leyes del
desarrollo de esta actividad.
Por lo anteriormente expuesto queda claro para nuestra
investigación de que elaborar un
currículum, supone "traducir dichos principios en normas de
acción,
en prescripciones educativas, con el fin de elaborar un
instrumento útil y eficaz para la práctica
pedagógica"
En este sentido debe entenderse que el currículum
constituye un eslabón importante que se sitúa entre
la declaración de principios generales y su traducción operacional, entre la
teoría educativa y la propia práctica
pedagógica, entre lo que se planifica y lo que se ejecuta,
entre lo que se prescribe y lo que sucede concretamente en el
aula.
El currículum es un conjunto de premisas de
pensamiento
social, los que orientan y determinan las formas de ver e
interpretar la realidad, las formas de aprender el conjunto de
hechos que se dan en la práctica y
teoría.
Es importante comprender que la educación es una
práctica social e histórica en el que el hombre como
constructor y creador de su propia educación desarrolla un
currículo y como tal considera al hombre como sujeto
social ( individuo–
social), en la que la educación es una responsabilidad de la sociedad donde sus miembros
desempeñan diferentes roles, desde la perspectiva de la
práctica social y enriquecimiento de la subjetividad
humana, sustento básico para la producción y la creación de la
riqueza social ( ciencia,
tecnología, arte,
filosofía, etc.) como fundamento para el desarrollo
sostenido de la humanidad para alcanzar la estabilidad y
correlación de fuerzas sociales en la práctica de
la cultura política, la
práctica de la producción y la practica educativa
como la formación integral del educando.
El currículum debe responder a ciertas
exigencias:
- Debe ser pertinente, lo cual significa que debe ser
adecuado a las características del ámbito donde
se aplica, responder a las demandas sociales y culturales de la
comunidad, considerar las características y avances de
las disciplinas y los productos
profesionales, principalmente, atender a las necesidades
concretas de los sujetos. - Debe ser un producto
social, construido con participación, en instancias
diversas, de personas y entidades capaces de interpretar los
problemas y proyectos de la
comunidad internacional, nacional, regional y
local.
Atendiendo a los elementos anteriormente expuestos,
asumimos como concepto de currículum el dado por los
investigadores del Instituto Central de Ciencias
Pedagógicas, atendiendo a su nivel de
actualización:
Por currículo entendemos el sistema de
actividades y de relaciones, dirigidos a lograr el fin y los
objetivos de
la educación para un nivel de educación y tipo de
escuela determinados, es decir, los modos, formas,
métodos, procesos y tareas, mediante los cuales, a
partir de una concepción determinada, se planifica,
ejecuta y evalúa la actividad pedagógica conjunta
de maestros, estudiantes y otros agentes educativos, para
lograr la educación y el máximo desarrollo de los
estudiantes
Dicho concepto expresa de forma sintética el
carácter dialéctico del
currículo a partir de la relación existente entre
enseñar / aprender, las relaciones contenidos /
práctica pedagógica, además de dejar
explícito la relación entre el contenido y otros
elementos en correspondencia con el contexto histórico
social del cual se trate, conducente al desarrollo de la
personalidad en general.
En este sentido podemos graficar el currículo
como:
Como un proceso dinámico, continuo, participativo
y técnico, en el currículum se pueden distinguir
las siguientes fases:
- Análisis Previo: Antes de realizar la
aplicación de un proyecto
educativo se debe efectuarse la comprensión de la
realidad comprender, las relaciones existentes en su entorno
para articular con los recursos
existentes en el medio. - Diseño Curricular: Especifica los fines y
objetivos educacionales, traducidas en una propuesta educativa.
Permite el análisis de las tendencias
demográficas, socioeconómicas y culturales de la
zona para plantear las estrategias y
procedimientos que faciliten su aplicación y generar el
cambio
social. - Aplicación Curricular: Concretización
del diseño curricular en una condición
socio-educativa para lograr la innovación de la educación, a una
forma de desarrollo
social. - Evaluación Curricular: Implica determinar en
qué medida el diseño curricular y la
enseñanza satisfacen realmente los objetivos de la
educación y del contexto social.
De igual manera Díaz Barriga plantea que el
diseño curricular es una respuesta no solo a los problemas
educativos sino también aborda los problemas
económicos, sociales y políticos. Por ello tomamos
en consideración los elementos del currículum que
propone César Coll para cumplir con éxito
su función
social:
- ¿Qué enseñar?: ello incluye los
contenidos (este término designa lo que se ha llamado la
experiencia social culturalmente organizada y se toma por lo
tanto en su más amplia acepción: conceptos,
sistemas
explicativos, destrezas, normas, valores, etc.) y los objetivos
(los procesos de crecimiento personal que se
desean provocar, favorecer o facilitar mediante la
enseñanza) - ¿Cuándo enseñar?: manera de
ordenar y secuenciar los contenidos y objetivos. - ¿Cómo enseñar?: manera de
estructurar las actividades de enseñanza/aprendizaje en
las que participarán los estudiantes con el fin de
alcanzar los objetivos propuestos en relación con los
contenidos seleccionados. - ¿Qué, cómo y cuándo
evaluar?: la evaluación es un elemento importante para
asegurarse que la acción pedagógica responde
adecuadamente al proyecto (social, institucional, etc.) e
introducir las correcciones oportunas.
El primer elemento deja explícito las intenciones
que se propone la concepción curricular, mientras que los
otros tres están referidos más bien a las acciones a
seguir en correspondencia con las intenciones
propuestas.
Consideramos que el diseño curricular es uno de
los componentes determinantes que orientan hacia la
práctica educacional y social a partir de la
redefinición de problemas reales, el diseño y la
aplicación de procedimientos eficaces: entradas en
términos de recursos, los procedimientos como estrategia
operacional y la salida de productos transformados que se
vinculen como un proyecto social.
Perspectiva del
currículum en la Educación
Superior.
El currículo, en nuestros tiempos, constituye uno
de los ámbitos de mayor análisis e interpretación, como medio que propicia la
aprehensión del conocimiento dentro del campo de la
educación. Son muchas las acepciones que se tienen del
término, y ésta no es una ocasión para
recogerlas. Sin embargo, se hace necesario precisar desde
qué ángulo se operará con dicho concepto,
según lo que se aprecia en la bibliografía de los
últimos años.
Currículo incluye a los contenidos, a los
objetivos y a las formas de enseñanza que potencian
aprendizajes, ya sea desde la planificación como desde la realidad
interactiva. Se vincula, por un lado, con el objeto
epistémico que se configura en el proceso del
conocimiento; y por otro, con la gestión
de reproducir y de generar conocimientos, incluyendo lo propio de
las formas en que se establece la conservación y la
transformación del legado, ya sea como patrimonio o
como creación e innovación.
El currículo constituye, desde la posición
que se expone, una manifestación de la concepción
de hombre y de la sociedad que se sustenta. Es, en sí, un
proyecto de vida y, por consiguiente, en última instancia,
siempre, en él se plasma la jerarquización que se
ha establecido de los valores
que se privilegian en la comunidad educativa
comprometida.
El currículo, entonces, está lejos de ser
sólo el mero documento escrito en el cual se declaran las
aspiraciones del sistema. El currículo, como instrumento
viabilizador de un proyecto de vida, constituye un sistema
generativo de conocimiento y de acción humana, con
presencia, al unísono, de un modo u otro, de un sistema de
reproducción y creación de los
mismos.
Así entendido, el currículo implica, en su
especificidad, necesariamente, una connotación
sociocultural, puesto que es imposible la proposición de
una concepción de desarrollo curricular, desconociendo las
comunidades educativas; tampoco es posible, sin considerar las
demandas y exigencias del contexto histórico concreto;
menos aún, podría concebirse como un instrumento
que relega la preocupación por la persona en
sí misma.
Por lo que nuestra concepción curricular propende
a:
- La participación política:
está dada en que se realizan aportaciones al desarrollo
integral de la personalidad
al tiempo que
se desarrolla una mentalidad para la participación
activa, libre, responsable y eficaz como ciudadanos en sus
respectivos países. - Sociedad de conocimiento: tener en cuenta el
desarrollo de la ciencia y la tecnología en la
Educación Física y el
Deporte, enriqueciendo la teoría y la práctica de
esta actividad dentro del contexto de la interdisciplinariedad. - Gestión educativa (para qué del ser):
se seleccionan y organizan los contenidos atendiendo a su
aplicación y práctica social, para ello el tener
en cuenta un diseño curricular globalizado conduce a una
visión de desarrollo para la práctica social del
profesional de la Educación Física y el
Deporte.
Los elementos anteriormente señalados se
articulan perfectamente con la concepción curricular que
se asume en esta investigación.
Consideraciones
generales del proceso de enseñanza / aprendizaje de la
Historia.
Los seres humanos, sin importar el tiempo o lugar,
necesitan de un sentido de si, un sentido de cómo
llegaron, adonde están, de manera de comprender y evaluar
hacia dónde van en lo que sigue. La historia no
sólo contesta al qué, al cuándo,al
dónde y al quién en el curso de la experiencia
humana en nuestro planeta, sino también al por
qué.
El desconocimiento de los procesos históricos
pasados conduce a una visión ingenua, superficial y
distorsionada de la complejidad de la realidad social presente y
es precisamente a través del estudio del pasado, que los
individuos están en condiciones de desarrollar una manera
más informada de ver, conocer y actuar en la sociedad en
la que viven.
La ciencia histórica intenta explicar las
transformaciones en las relaciones sociales (políticas,
económicas, sociales e ideológico-culturales) en
las que necesariamente se despliega la actividad
humana.
El aprendizaje histórico es el proceso de
desarrollo de la conciencia
histórica en el cual se adquieren las capacidades de
la memoria
histórica, que actualiza analíticamente la
experiencia del pasado, de manera tal que las condiciones de vida
presentes resulten comprensibles y las perspectivas futuras de la
práctica vital puedan desarrollarse conforme a la
experiencia.
En este sentido, y con respecto a la renuncia al
conocimiento histórico son contundentes las palabras del
historiador Eric Hobsbawm, quien en su última obra
señala: "La destrucción del pasado, o, mejor dicho
de los mecanismos sociales que vinculan la experiencia personal
con la de generaciones anteriores es uno de los fenómenos
más característicos e inquietantes en las
postrimerías del siglo XX. La mayoría de los
hombres y las mujeres jóvenes crecen en este fin de siglo
en una especie de presente perpetuo, sin relación
orgánica alguna con el pasado del tiempo en el que
viven"
La Historia posee características que la
convierten en un campo de aprendizaje con dificultades especiales
para estudiantes como los que posee la Escuela Internacional de
Educación Física y Deporte, dada por su propia
naturaleza
como ciencia social, pues supone el conocimiento, análisis
y la explicación de acontecimientos ya acaecidos,
tratándose de conocimientos de alto grado de complejidad,
en el que los fenómenos están estrechamente
interrelacionados dialécticamente. Además de ello
su complejidad puede ser apreciado concretamente en:
- Es fuente del conocimiento
histórico. - Por su aspecto formativo.
- Por su relación con la práctica social
concreta.
Atendiendo a lo anteriormente planteado, la
comprensión de los fenómenos históricos
exige un dominio de
modelos de
conocimientos extremadamente abstractos y por ende la
utilización de análisis variables y
relaciones difícilmente aislables.
Lo señalado anteriormente nos conduce a dejar
planteado algunas consideraciones con respecto a la
enseñanza de la Historia:
- El estudio de la Historia en toda su complejidad,
supone el uso del pensamiento abstracto al más elevado
nivel, tanto por los docentes que
la imparten como por el estudiante que aprende. - El aprendizaje de la Historia se hace mucho mas
difícil, si tenemos en cuenta de que es imposible
reducir hechos concretos del pasado, por lo que se requiere de
una adecuada combinación de métodos para la
obtención de los conocimientos por parte de los
estudiantes. - La aplicación de técnicas
de investigación requiere de un trabajo preparatorio y
de una cierta especialización por parte del estudiante,
sustentándose en fuentes
(pinturas, testimonios, documentos,
restos arqueológicos, otros) - Tener en cuenta la complejidad de los conceptos
históricos y su diversidad criterial, debiendo asumir
posiciones partidistas ante la misma. - El análisis de los fenómenos y
acontecimientos históricos requieren de una
comprensión objetiva a partir de la contextualizacion
espacio-temporal de los mismos. - Rechazar la idea de que la Historia ofrece
informaciones acabadas. - El aprendizaje de la Historia contribuye a la
configuración de la conciencia de los ciudadanos,
ofreciendo una visión del pasado que fortalezca los
sentimientos patrióticos, reconoce los valores
nacionales y universales contribuyendo a una cosmovisión
más real.
En el proceso de aprendizaje de los conocimientos
históricos se requiere fomentar el desarrollo de un
pensamiento reflexivo y flexible, por lo que es necesario
"organizar la actividad del aprendizaje mediante la
utilización de procedimientos que estimulen los procesos
lógicos, que entrenen a los alumnos en la búsqueda
y valoración de los conocimientos y en el trabajo
independiente"
Siguiendo el camino científico en la
explicación de cada hecho y acontecimiento
histórico, es posible desarrollar y fomentar en el
estudiantado el acto de pensar, reflexionar y analizar los mismos
desde diferentes puntos de vista.
Ello nos posibilita educar al estudiante en la
importancia y la fuerza de los
valores
morales de los hombres para transformar el mundo que les ha
tocado vivir y la necesidad de reforzar las tradiciones patrias
como manifestación de los elementos identitarios
autóctonos.
En el contexto actual, el hombre se ve en un mundo donde
progresivamente se acrecientan las desigualdades como
consecuencia de la existencia de un mundo globalizado en el que
impera la unipolaridad imperialista, sin embargo, la
enseñanza de la Historia contribuye a comprender y
reflexionar sobre dicha situación, pero para ello debe ser
encaminada a transformar el estilo de pensamiento de los
individuos, cultivando el amor a la
libertad e
independencia,
a su vez contribuye a formar una nueva concepción del
mundo.
A su vez los vertiginosos cambios científicos y
tecnológicos que se suceden internacionalmente, se
convierte en otro reto para la enseñanza de la Historia,
pues se requieren hombres reflexivos, creativos, con verdadero
espíritu de transformar el entorno y que se conviertan en
protagonistas activos de la
sociedad.
Sin embargo podríamos preguntarnos: ¿Son
los sistemas educativos de los países tercermundistas
capaces de fomentar y educar al hombre que exige la nueva
sociedad : reflexivo, transformador, creador,
emprendedor?
Indudablemente que no, pues los mismos responden a
intereses muy específicos de las clases gobernantes, pero
además la enseñanza no ofrece posibilidades para el
reflexionar sistemático, explotar los diversos puntos de
vista a partir del conocimiento previo del estudiante y su
relación con el contexto del cual proviene.
Por todo lo anterior, podemos plantear a partir de la
experiencia cubana en este terreno, la existencia de problemas
muy concretos que requieren soluciones
dinámicas y que consideramos que en uno u otro momento se
han presentado en nuestro colectivo de profesores:
- Las explicaciones de los profesores no sobrepasan lo
expuesto en libros de
textos o materiales
didácticos. - Se desaprovecha el potencial político de la
materia, al
no ser el hecho histórico el eje de la clase. - Los estudiantes no poseen los conocimientos y
procedimientos generales que les permitan comparar,
caracterizar, valorar y generalizar, asumiendo posiciones
valorativas significativas del hecho o acontecimiento
histórico. - Los estudiantes poseen limitaciones para expresar sus
argumentos, valorar oralmente, identificar las
características esenciales de diferentes etapas
históricas, para establecer relaciones temporales y
causales entre los hechos y procesos. - La enseñanza de la Historia se evidencia en el
estudiante a través de un aprendizaje
memorístico, reproductivo, mecánico, en el que el
estudiante es un receptor de información. - El contenido a enseñar no contribuye a que a
la vez que el estudiante se apropie del conocimiento, se
estimule su pensamiento. - En la estructuración del proceso de
enseñanza no se tiene en cuenta las experiencias previas
del estudiante para la aprehensión de nuevos
conocimientos.
Desde nuestra perspectiva consideramos que la presente
investigación busca dar respuesta a muchos de estos
problemas señalados, concibiendo una concepción
curricular de un programa de
Historia que contribuya a la formación de un profesional
con sólidos conocimientos y una alta capacidad reflexiva,
por ende ello le propiciará una nueva forma de interpretar
el mundo que les ha tocado vivir.
Caracterización del contenido
histórico y condiciones para su
aprendizaje.
La aprehensión de conocimientos constituye una
actividad mental compleja para asimilar el mundo exterior, por
ello requiere de ideas, reflexiones, comparaciones,
descubrimientos y otros procesos.
La ciencia histórica resulta importante para el
conocimiento de la sociedad pues ella permite:
- Despertar el interés
por el pasado, situándolos en su contexto. - Facilitar la comprensión del presente,
potenciando el sentido de identidad. - Proyectar el futuro.
Es por todo ello que, el historiador al enfrentarse a un
problema histórico no puede separar las variables
físicamente, sino que ha de realizarlo conceptualmente,
valiéndose de la determinación y valoración
de fuentes históricas, su estudio y comprobación
permiten establecer los hechos concretos, los cuales son
necesarios ubicarlos en espacio y tiempo.
La Historia posee leyes generales y regularidades que
propician el análisis y el establecimiento de modelos que
pueden ser aplicados, es decir contextualizados en diferentes
situaciones o coyunturas históricas.
¿Qué debemos tener en cuenta
respecto a la enseñanza de la historia?
A partir de las necesidades de que se produzca un
aprendizaje que promueva el desarrollo de un estilo de
pensamiento reflexivo y flexible, el profesor debe
tener en cuenta ciertos factores que pueden incidir en dicha
actividad de forma negativa o positiva, en correspondencia con
las circunstancias:
- Conciencia de la historia como disciplina
transmisora de valores e ideologías que forman parte de
la identidad nacional y e individual. - Concepción epistemológica: estas
características epistemológicas implican que la
concepción sobre qué es la historia no sea una
concepción única y determinada. Implica que el
alumno sepa que las explicaciones de los procesos
históricos pueden modificarse total o parcialmente a
través del tiempo en la medida en que se conocen nuevas
perspectivas o documentos. Este punto es importante a la hora
de definir una manera de entender la historia como algo cerrado
y acabado o como realmente es: abierta y relativa. - Las relaciones entre la historia y las ciencias
sociales son controvertidas. Estas relaciones tienen
incidencia en el estudio de la historia pues otorgan un marco
de referencia que permitirá o no un conocimiento
más profundo y acabado de la misma
Debe tenerse en cuenta que, los conocimientos
históricos no se relacionan con la realidad directamente
percibida, pues los conceptos, procesos y leyes, se refieren a
una realidad indirecta, mediatizada, a través de conceptos
o sistemas de conceptos.
Significativo resulta que, el fundamento de cualquier
conocimiento
científico está constituido por los hechos, en
este caso es el resultado de conocer los hechos de la historia de
la sociedad, los elementos o aspectos que intervienen en
él, así como las regularidades que actúan en
este. Sin embargo, debe comprenderse que la Historia es el
resultado de la concatenación de hechos particulares, que
aunque inigualables cada uno, poseen puntos en común, por
lo que todo acontecimiento histórico refleja lo general,
pero éste no puede existir al margen de los hechos
particulares.
En el aprendizaje del conocimiento histórico debe
tenerse en cuenta lo antes señalado, pues en las clases el
profesor trabaja con categorías generales,
haciéndose necesario vincularlas con aquellos elementos
probatorios que propicien la asimilación correcta de la
realidad histórica.
Es importante en este proceso que, en la misma medida en
que se descubra el aspecto interno del proceso histórico,
se revela la esencia humanística de esta materia, a
través del conocimiento de los valores morales de los
hombres y personalidades históricas que lucharon, sus
contradicciones, sacrificios, reveses, así como aquellos
pueblos convertidos en estandartes de la lucha
revolucionaria.
La investigadora Haydée Leal García, en su
libro "Pensar,
reflexionar y sentir en las clases de Historia", plantea que los
docentes deben tener precisado los elementos que incluye el
conocimiento del hecho histórico y al cual nos adscribimos
:
- La asimilación de su contenido mediante la
descripción y el
análisis. - La revelación de las relaciones causales,
temporales y espaciales. - La comparación con otros hechos y la
determinación de los elementos
típicos. - La valoración crítica y la confrontación con la
actualidad.
Estos elementos nos conducen a plantear que la
adquisición del conocimiento histórico resulta
complejo en la misma medida en que el estudiante debe asimilar
los conocimientos fácticos externos y lo racional, lo
interno; por lo que la Historia está obligada a buscar las
causas del movimiento
social, investigando los fenómenos históricos en su
esencia, mediante la interpretación
científica.
La enseñanza de la Historia en la actualidad no
es la simple acumulación de información es
incentivar al estudiante a realizar valoraciones
científicas de los fenómenos históricos, por
lo que el empleo del
método de
investigación histórico en el proceso de
aprendizaje les permitirá redescubrir los elementos
probatorios necesarios.
Debe tenerse en cuenta que no son los postulados
generales que ofrece el docente, los que resultan convincentes
para el estudiante, sino aquellos a los cuales ha llegado como
consecuencia de un análisis dinámico desde el punto
de vista mental y la existencia de vivencias
emocionales.
La complejidad del proceso antes argumentado, expresa la
necesidad de que el docente tenga en cuenta las acciones que le
permitan al estudiante dominar las habilidades generales del
trabajo con las fuentes y la expresión y comunicación de los conocimientos, sin
obviar que la
motivación que se logre en ellos mediante las
actividades hará más eficiente el
aprendizaje.
El objetivo no es preparar especialistas desde el punto
de vista histórico, sino proporcionar a los estudiantes
los conocimientos esenciales y un método
científico de análisis, lo que
contribuiría al desarrollo en el individuo de un
pensamiento más humanista, justo y solidario;
considerándolo como una identidad pensante, que en un
ambiente
adecuado pueda reflexionar, actuar de forma dinámica, valorar, criticar y sentir,
asumiendo posiciones ante las valoraciones históricas a
partir de sus propias experiencias. El estudiante debe
aproximarse al conocimiento desde una posición
transformadora.
- La organización del currículum en la
elaboración de un programa, debe tomar como punto de
partida los problemas de la realidad social y profesional,
preparando a los estudiantes como aprendices de sus propios
conocimientos, creando las condiciones necesarias para que
adquiera la competencia en
su formación profesional, que le permite aplicar los
conocimientos teóricos prácticos adquiridos,
darle solución a las nuevas situaciones que la vida le
impondrá. - Currículo incluye a los contenidos, a los
objetivos y a las formas de enseñanza que potencian
aprendizajes, ya sea desde la planificación como desde
la realidad interactiva. - El proceso de enseñanza / aprendizaje del
conocimiento histórico debe sustentarse en el desarrollo
de un pensamiento reflexivo y flexible, teniendo en cuenta la
complejidad de dicho conocimiento y el contexto
histórico social en el que se desarrolla. - La adquisición del conocimiento
histórico resulta complejo en la misma medida en que el
estudiante debe asimilar los conocimientos fácticos
externos y lo racional, lo interno; por lo que la Historia
está obligada a buscar las causas del movimiento social,
investigando los fenómenos históricos en su
esencia, mediante la interpretación
científica.
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[2004,16 de octubre].
Autor:
M.Sc. Nereyda Piñeiro
Suárez
Ing. Ana Piñeiro Suárez
M.Sc Erol González Castillo
M.Sc Pedro Calderón Fornaris