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Avances recientes en anticoncepción y planificación familiar




Enviado por Aníbal Faúndes



     

    RESUMEN:

    En este artículo se hace una revisión de los
    alcances más recientes en el campo de la
    anticoncepción. Se describe la el evolución de la
    anticoncepción hormonal –reducciones en la
    dosificación, nuevas vías de administración, nuevos
    progeslágenos, orientación y selección de pacientes,
    anticonceptivos hormonales
    mejorados, la anticoncepción inrtrauterina -diseño de DIUS adaptados
    a la cavidad uterina, liberación intrauterina de sustancias
    anticonceptivas, importancia de las técnicas de inserción,
    DIUS mejorados- y de la planificación familiar como
    un instrumento de salud pública.

    Palabras clave: anticoncepción hormonal,
    anticoncepción intrauterina, planificación
    familiar

    Faúndes A. Avances recientes en anticoncepción
    y planificación familiar Salud pública Mex.
    1992;34:5-17.

     

    ABSTRACT:

    This paper describes the most recent advances in the
    field of contraception and family planning. The author discusses
    the evolution of hormonal contraception -reduction in dosage, new
    routes of administration, new progestogens, counseling and
    patient selection, improved hormonal contraceptives-,
    intrauterine contraception, -IUDS design adapted to the uterine
    cavity, intrauterine release of contraceptive substances,
    importance of insertion techniques, improved IUDS-, and family
    planning as an instrument of public health.

    Key words: hormonal contraception, intrauterine
    contraception, family planning

    Faúndes A. Recent advances In contraception and
    famuly panning Salud Publica Mex
    1992;34:5-17

     

    EN LAS CIVILIZACIONES más antiguas se han
    encontrado rastros de la regulación de la fertilidad que
    pueden ser útiles para los historiadores. Sin embargo, la
    anticoncepción no fue considerada como necesidad para la
    humanidad hasta que el balance entre muertes y nacimientos no fue
    demasiado lejano a cero y la migración ya no pudo aliviar
    los excesos en el crecimiento poblacional mediante la
    ocupación de amplias tierras inhabitadas.

    La situación cambió en el último siglo o
    dos, cuando la reducción en la tasa de mortalidad condujo a
    presiones demográficas al interior de familias, ciudades,
    países y el mundo en general.

    Mientras la tasa de crecimiento poblacional alcanzaba su
    cumbre, nuevas formas de regulación de la fertilidad
    llegaron a ser técnicamente accesibles y culturalmente
    aceptadas en muchos países. La anticoncepción hormonal
    se volvió una realidad práctica hacia finales de los
    años cincuenta, y en 1959 la publicación de resultados
    obtenidos durante décadas de experiencia silenciosa con
    dispositivos intrauterinos (DIU) abrió el campo a esta forma
    de anticoncepción. Durante el mismo periodo, muchos
    países legalizaron el aborto y lo hicieron accesible
    y técnicamente eficiente. En los años siguientes, estos
    nuevos avances se diseminaron desde Europa y Norteamérica hacia
    el resto del mundo con diferente rapidez, según cada
    región.

    Cuando la tasa de crecimiento poblacional empezó a
    declinar en los años setenta y ochenta, el interés por el control de los nacimientos
    también disminuyó. Sin embargo, nuevas fuerzas entraron
    en la arena de la regulación de la fertilidad: grupos de mujeres organizadas que
    consideran el control de la fertilidad como un derecho
    individual, y científicos y autoridades de la salud
    pública que identificaron la anticoncepción y el
    espaciamiento de los nacimientos como una herramienta muy
    importante en la prevención de la mortalidad y la morbilidad
    de niños y
    mujeres.

    De 1960 a la fecha se han presentado grandes avances en
    el conocimiento de la
    anticoncepción. Sin embargo, como casi siempre sucede, el
    paso del conocimiento a la
    práctica ha sido deprimentemente lento, a pesar de los
    esfuerzos tanto de investigadores como de autoridades de
    salud.

    Sin intentar abarcarlo todo, las siguientes páginas
    describen brevemente los avances más importantes en
    anticoncepción y planificación familiar de los
    últimos años. Sólo los métodos que se encuentran ya
    disponibles serán mencionados. Muchos y muy prometedores
    avances de investigación no serán
    discutidos, ya que la intención es ofrecer una visión
    de lo que puede ser aplicado en el presente en la práctica
    médica diaria.

     

    EVOLUCION DE LA ANTICONCEPCION
    HORMONAL

    Cuando la píldora fue ofrecida por vez primera como
    una opción anticonceptiva para la población mundial, se le
    vio no sólo como una solución para la regulación
    individual de la fertilidad sino también como una valiosa
    herramienta para el control poblacional.

    Después de que se acumuló mayor experiencia,
    el optimismo inicial fue gradualmente reemplazado por una
    preocupación creciente por los efectos colaterales
    identificados mediante la observación clínica
    y los estudios epidemiológicos(1-3) y por las perturbaciones
    metabólicas confirmadas por investigaciones bioquímicas
    y farmacológicas.

    Toda esta información negativa tuvo un
    enorme impacto en el público general, quien ha permanecido
    impresionado por los informes de complicaciones
    potenciales. Pero al mismo tiempo, los investigadores
    reaccionaron buscando medios para reducir los
    riesgos y a la vez mantener
    las ventajas y los beneficios en salud de la anticoncepción
    hormonal.

    A la fecha se han seguido por lo menos cuatro posibles
    direcciones en la búsqueda por minimizar los riesgos de los
    métodos hormonales, manteniendo e incluso mejorando su
    efectividad, su facilidad de uso y sus efectos positivos en la
    salud de las usuarias. Estas cuatro direcciones han sido: la
    reducción en la dosificación de hormonas, la búsqueda de
    vías no orales de administración, la
    síntesis de nuevos
    progestágenos con un perfil metabólico más
    favorable y una mejor selección de las mujeres que
    usarán el método. En este
    artículo resumiremos brevemente los progresos logrados en
    estas cuatro direcciones.

     

    Reducciones en la
    dosificación

    La primera píldora contenía 10 mg de
    noretinodrel y l5O mcg de etinil estradiol. Ahora tenemos
    pildoras con dosis diarias de progestágeno tan bajas como
    0.075 mg y 30 mcg de etinil estradiol. Otras vías de
    administración, tales como implantes subcutáneos,
    proveen una dosis diaria de progestágeno tan baja como 0.030
    mg y sin estrógeno.

    La posibilidad de reducir la dosis diaria requerida para
    producir una efectiva anticoncepción hormonal fue producto de múltiples
    investigaciones. En primer lugar, se encontró que el
    contenido de las primeras píldoras era excesivo y que el
    mismo efecto anovulatorio podía obtenerse con una cantidad
    mucho menor de hormona. Sin embargo, la efectividad de las dosis
    bajas depende en gran medida del apego de la paciente al esquema
    prescrito, con especial énfasis en no exceder el intervalo
    de siete días entre dos ciclos. Asimismo, el ciclo inicial
    de la nueva píldora de baja dosis debe comenzar no en el
    quinto, sino en el primer día del ciclo, para asegurar la
    inhibición del crecimiento del folículo y la
    ovulación.

    En segundo lugar, se han sintetizado nuevos
    progestágenos con una potencia de inhibición
    pituitaria mucho más alta que los anteriores, logrando
    así el efecto anovulatorio con una dosis diaria mucho
    menor.

    En tercer lugar, si los progestágenos son
    administrados solos y en dosis bajas pero en forma continua,
    pueden producir inhibición de fertilidad efectiva sin
    anovulación en todos los ciclos. (4) La anticoncepción
    se obtiene mediante el bloqueo de la penetración del esperma
    en el moco cervical y posiblemente por algunos otros cambios
    -más refinados– en la función
    ovárico-pituitaria. Estos cambios podrían incluir la
    luteinización de un folículo íntegro, la
    deficiencia en la fase luteínica y la ovulación de un
    oocito inmaduro, que no puede ser fertilizado. (5-7)

    Finalmente, la dosis administrada puede reducirse
    evitando fluctuaciones en la tasa de liberación y en los
    niveles plasmáticos. Los progestágenos administrados
    oralmente alcanzan su pico en el plasma aproximadamente una o dos
    horas después de su ingestión y durante las siguientes
    12 horas más o menos. Los niveles alcanzados se encuentran
    bastante más arriba que los requeridos para una efectiva
    anticoncepción. (8,9) Debido a que la inhibición de la
    ovulación requiere un nivel plasmático mínimo del
    esteroide anticonceptivo durante las 24 horas del día, el
    uso de la vía oral hace necesaria una sobredosis durante las
    primeras 12 horas después de la ingestión, con el fin
    de mantener ese mínimo nivel durante las últimas 12
    horas después de cada toma diaria. Esa innecesaria exposición de la paciente a
    altos niveles plasmáticos durante por lo menos la mitad del
    tiempo puede evitarse mediante una forma de administración
    que provea niveles plasmáticos más
    regulares.

    Se han desarrollado mecanismos para obtener una
    liberación continua de progestágenos después de
    una sola administración mediante el uso de implantes o
    microesferas, en donde la hormona encapsulada en hule
    sintético es liberada a una tasa uniforme durante meses o
    años. (10.11) Por este medio se alcanzan niveles
    plasmáticos relativamente estables y la dosis puede
    limitarse a aquélla requerida para mantener una
    anticoncepción efectiva sin elevaciones diarias por arriba
    de este límite.

     

    Nuevas vías de
    administración

    Es sabido que todo medicamento administrado por vía
    oral llega a la circulación a nivel sistémico por la
    vía porta. Esto significa que el medicamento pasa primero
    por el hígado. Si ese mismo medicamento es administrado
    parenteralmente o por vía vaginal, alcanzará la
    circulación a través de la cava y será distribuido
    directamente a los tejidos claves. En este caso,
    sólo una porción pasará a través del
    hígado, vía la arteria hepática. La hipótesis es que evitando
    el paso inicial por el hígado, parte de los efectos
    colaterales metabólicos decrecerán como resultado de un
    efecto disminuido en la función del hígado.
    (12)

    Las vías de administración estudiadas han sido
    las inyecciones parenterales, las implantaciones subcutáneas
    de cápsulas de silicón o pellets, la administración vaginal
    e incluso la vía transcutánea.

     

    Nuevos
    progestágenos

    Una de las principales preocupaciones surgidas con el
    uso de la píldora es el aumento del riesgo de enfermedad
    cardiovascular entre ciertas usuarias. Esta complicación ha
    sido relacionada con el efecto de esteroides anticonceptivos en
    las lipoproteínas. El norethindrone y el levonorgestrel, los
    dos progestágenos que dominaron el mercado de la píldora
    durante los años setenta y la mayor parte de los ochenta,
    aumentan el colesterol total y reducen la proporción de
    lipoproteínas de alta densidad (LAD), efecto asociado
    con un aumento en el riesgo de arterioesclerosis, infarto del miocardio y
    enfermedades cardiovasculares
    en general. (13,14) El etinil-estradiol, el otro componente de la
    píldora. tiene el efecto opuesto, balanceando parcialmente
    el efecto de estos progestágenos.

    Hacia finales de los ochenta, se probaron nuevos
    progestágenos y éstos mostraron que no tenían
    efecto alguno en las lipoproteínas o que reducían el
    colesterol total aumentaban las LAD, hecho generalmente asociado
    con una disminución del riesgo de enfermedad Cardiovascular.
    (15,16,17)

    Es demasiado pronto para contar con evidencias
    epidemiológicas del esperado efecto protector de los nuevos
    progestágenos. Tampoco sabemos si éstos se encuentran
    asociados con otros riesgos, o si algunas de las ventajas
    actuales de la píldora están parcialmente perdidas. De
    cualquier forma, ya que las enfermedades cardiovasculares son el
    más importante y serio efecto colateral de la píldora,
    las ventajas de estos nuevos progestágenos parecen
    suficientemente claras como para justificar la atención que han recibido
    en Europa occidental y Latinoamérica.

     

    Orientación y
    selección de pacientes

    Los numerosos estudios epidemiológicos sobre
    riesgos de la salud asociados con el uso de la píldora, nos
    permiten verificar que no todas las usuarias tienen el mismo
    riesgo de efectos colaterales. Los problemas asociados con el uso
    de la píldora se concentraron en ciertos grupos de mujeres
    que tenían, además, otros atributos independientes
    asociados con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular (ECV),
    tales como mayor edad (más de 35 o 40), tabaquismo, hipertensión, obesidad, diabetes, hipercolesterolemia,
    historia familiar de ECV o
    historia de tromboembolia. (18)

    El tabaquismo, en particular, fue no sólo
    añadido al efecto de la píldora, sino que se
    potenciaron el uno al otro a tal grado que la conclusión
    alcanzada fue que las mujeres no debían exponerse a ambos
    riesgos simultáneamente. (19)

    Conociendo a las mujeres que tienen un mayor riesgo de
    efectos colaterales asociados al uso de píldora, es posible
    aconsejar y seleccionar a las usuarias potenciales. Si sólo
    las mujeres con bajo riesgo usan la píldora, los efectos
    colaterales más serios pueden evitarse y el riesgo de las
    usuarias no diferirá del que enfrenta la población
    general. (20, 21)

     

    Anticonceptivos hormonales
    mejorados

    Los esfuerzos para reducir la dosificación, evitar
    la vía oral e introducir nuevos progestágenos han
    conducido al desarrollo de nuevos productos ya en uso en muchos
    países del mundo. Hasta el momento no tenemos conocimiento
    de ningún producto que aproveche a la vez estas tres
    posibilidades de mejoramiento mencionadas anteriormente. Algunos
    utilizan dosis más bajas así como los nuevos
    progestágenos que demuestran un perfil metabólico
    más favorable, pero son administradas aún por vía
    oral. Algunos evitan la vía oral y usan dosificaciones mucho
    más bajas, mientras que otros más obtienen su
    única ventaja a través del uso de vías no orales.
    Cada nueva familia de productos se describe
    a continuación.

    Píldoras de dosis bajas. Numerosos comités de
    expertos y agencias nacionales reguladoras de medicamentos hablan
    establecido la cantidad de 30-35 mcg como el límite superior
    del etinil estradiol contenido en una píldora para
    ingestión diaria. En la actualidad, las píldoras
    más vendidas en el mundo contienen sólo 30 mcg de este
    estrógeno, y algunas más han reducido la dosis a 20
    mcg. Existe un consenso general en el sentido de que mientras
    más baja sea la dosis de progestágenos menor será
    el riesgo de una complicación cardiovascular seria. (22,
    23)

    La dosis de progestágenos depende de la potencia de
    cada esteroide. La dosis baja para el norethindrone es de 600 mcg
    (0.50 miligramos), 250 mcg para el norgestimate, 150 mcg para el
    desogestrel y levonorgestrel, y 75 mcg para el
    gestodene.

    El único inconveniente de la dosis baja es la alta
    frecuencia de sangrado entre periodos. Esto es interpretado como
    una incapacidad del bajo contenido estrogénico de la
    píldora para mantener el endometrio.

    Píldoras con nuevos progestágenos.
    Múltiples píldoras en el mercado utilizan los nuevos
    progestágenos –de sogestrel, gestodene y norgestimate,
    todos en dosis bajas y con no más de 30-35 mcg de etinil
    estradiol. Estas nuevas píldoras están ganando espacio
    progresivamente en los mercados de Europa occidental,
    Canadá, Latinoamérica y partes de Asia y Africa. No han entrado al mercado
    de Estados Unidos debido a
    dificultades legales que han impedido a las compañías
    farmacéuticas europeas solicitar la aprobación en
    Estados Unidos.

    Inyecciones de progestágenos solos. Desde principios de los años
    sesenta, con la llegada del acetato depot de
    medroxyprogestágeno (DMPA: Depoprovera), las inyecciones de
    progestágenos solos de acción prolongada se
    encuentran disponibles. La DMPA ha probado tener una muy alta
    efectividad cuando se utiliza a dosis de 150 mcg cada tres meses.
    También posee una toxicidad muy baja, aún cuando es
    administrada a dosis mucho más altas para el tratamiento de
    cáncer mamario y de endometrio. Sin embargo, dado que hay
    indicios de que nunca será aprobada en Estados Unidos, se
    desarrolló un producto alternativo a través del
    Programa Especial de
    Investigación, Desarrollo y Entrenamiento de
    Investigación en Reproducción Humana de
    la organización Mundial
    de la Salud (PRH/OMS). Este nuevo producto es el enantato de
    norethindrona, que se utiliza a dosis de 200 mg cada 6O
    días. En pruebas clínicas
    comparativas se ha observado que el desempeño de esta nueva
    formulación es tan bueno como el del DMPA y causa menos
    amenorrea. (24)

    Inyecciones mensuales con una combinación de
    estrógeno y progestágeno. El PRH/OMS ha estado trabajando durante
    muchos años en el diseño de una inyección
    anticonceptiva hormonal combinada mensual que sea más
    aceptable, efectiva y segura. Las publicaciones recientes del
    Grupo Dedicado al Estudio de
    Agentes Sistémicos de Acción Prolongada para la
    Regulación de la Fertilidad de el PRH/OMS, demuestran que
    estos dos nuevos productos son efectivos y aparentemente seguros. Se componen,
    respectivamente, de 25 mg de acetato de depot medroxyprogesterona
    más 5 mg de cipionato de estradiol (PRH 112), y de 50 mg de
    enantato de norethisterona más 5 mg de valerato de estradiol
    (PRH 102). Después de un año de seguimiento de más
    de 1000 sujetos usando cada compuesto, las tasas de embarazo fueron de 0.0 y 0.18
    por 100 mujer-años, respectivamente.
    (25)

    Para ambas formulaciones, el primer episodio de sangrado
    ocurrió pronto. En un 70 por ciento de las usuarias, este
    episodio fue seguido por un sangrado regular, semejando un
    patrón de ausencia de tratamiento. otras usuarias
    presentaron sangrados irregularcs, pero la amenorrea o el
    sangrado prolongado sólo ocurrieron en 2 a 3 por ciento de
    todas las usuarias. El patrón de .sangrado y las tasas de
    deserción tanto por razones médicas como no
    médicas no fueron significativamente diferentes entre las
    dos formulaciones. (26)

    Estos resultados parecen mostrar que la OMS ha tenido
    éxito. Debido a que ambos
    progestágenos continúan en circulación durante
    mucho más tiempo que el éster de estrógeno, no se
    ha observado hiperplasia endometrial. (27) Ambos
    progestágenos han sido sometidas a estudios extensivos y se
    encuentran ahora entre las fórmulas que causan menos
    perturbaciones metabólicas.

    El PRH/OMS está actualmente llevando a cabo pruebas
    preintroductorias del PRH 112, bajo el nombre comercial de
    Ciclofem, en varios países.

    Implantes subcutáneos. El descubrimiento de que el
    silicón, un hule sintético, es solvente de los
    esteroides, y de que las hormonas esteroideas mantienen una
    concentración regular en este hule –que depende de su
    solubilidad específica en este material–, abrió
    la posibilidad de una liberación casi constante de
    progestágenos a partir de cápsulas de silicón.
    (28.29)

    Cuando los tubos de silicón se llenan con polvo de
    progestágenos, el esteroide se disuelve en las paredes del
    tubo y rápidamente alcanza una concentración
    máxima. La concentración de esteroide dentro del
    silicón permanece constante, independientemente de la
    cantidad de esteroide remanente en el interior del tubo. Cuando
    el tubo que contiene el progestágeno se pone en agua o se introduce en el
    tejido de un animal o un ser humano, el progestágeno se
    libera a una tasa que depende de su concentración en la
    pared del tubo. Debido a que esta concentración es
    constante, la tasa de liberación es también muy
    regular. (30.31)

    Cuando este sistema de suministro se coloca
    debajo de la piel, se produce una
    reacción del tejido subcutáneo al cuerpo extraño.
    Esta reacción conduce a la formación de una
    cápsula fibrosa alrededor del tubo silástico. Esta
    cápsula secundaria limita la tasa de liberación de tal
    forma que después de aproximadamente un año de la
    implantación, la dosis diaria es de alrededor de la mitad de
    la observada durante el primer mes después de la
    implantación. (30)

    La aplicación de este principio a la
    anticoncepción ha conducido al desarrollo de un sistema
    anticonceptivo hormonal de muy alta efectividad, usando una
    cantidad pequeñísima de medicamento. Después de 17
    años de estudios farmacológicos, biomédicos,
    toxicológicos y clínicos sobre una variedad de
    progestágenos, bajo el liderazgo y coordinación del
    Comité Internacional del Consejo de Población para la
    Investigación en Anticoncepción, el primer sistema de
    implante para liberar levonorgestrel se aprobó en Finlandia
    en 1983, con el nombre comercial de Norplant Hoy en día 15
    países, incluyendo Estados Unidos, han aprobado el Norplant
    y alrededor de otros 30 han estado realizando pruebas
    clínicas y preintroductorias de este método. El sistema
    Norplant consiste de seis tubos de 30 mm de largo y 2.4 mm de
    diámetro que se colocan bajo la piel en la cara interna del
    antebrazo. (32)

    La inserción se realiza a través de un solo
    pinchón de trocar, bajo anestesia local, en una
    disposición de abanico con el vértice en el lugar del
    piquete.

    Norplant proporciona cinco anos de anticoncepción
    altamente efectiva después de una sola inserción de las
    seis cápsulas. La tasa de embarazo está por debajo del
    0.5 por ciento por año hasta el tercer año de uso y
    cerca del 1 por ciento durante el 4o. y 5o. año. (33, 34)
    También se ha insertado alrededor del sexagésimo
    día después del parto en mujeres amamantando
    sin interferencia alguna con la lactancia o con el crecimiento
    y desarrollo del bebé. (35) Es también altamente
    recomendable como anticonceptivo inmediatamente después de
    un aborto, ya que no contiene
    estrógeno y no afecta significativamente los factores de la
    coagulación. (36)

    Como era de esperarse, dada la baja dosis de
    levonorgestrel administrada, no se han observado perturbaciones
    metabólicas significativas entre las usuarias de Norplant.
    (37)

    Un importante inconveniente del Norplant es el sangrado
    menstrual irregular. Esto es resultado de la influencia
    ininterrumpida de un progestágeno sintético sobre el
    endometrio. (38) Cerca de dos terceras partes de las usuarias de
    Norplant presentan ya sea sangrado prolongado y frecuente,
    escurrimientos momentáneos o bien amenorrea durante muchos
    meses. Pero aun entre las mujeres con sangrado prolongado, la
    cantidad de sangre perdida no se incrementa,
    ya que ésta ha sido escasa y no se han observado cambios en
    los niveles de hemoglobina o ferritina en la mayoría de
    ellas. (39.40) Las alteraciones en el sangrado, sin embargo,
    pueden provocar mucho malestar en las usuarias y constituyen la
    principal causa de deserción. (41.42) Las mujeres deben ser
    informadas a profundidad sobre este inconveniente antes de
    aceptar los implantes, y a aquéllas que crean que no
    tolerarán los cambios menstruales debe ofrecérseles un
    método alternativo. (43)

    Anillos anticonceptivos vaginales. El mismo principio de
    liberación continua de esteroides a partir del silastic se
    ha aplicado a la manufactura de dispositivos
    más grandes en forma de anillo, imitando el borde externo de
    un diafragma vaginal. (44)

    Se han estudiado muchos modelos diferentes de anillos
    vaginales proveedores de esteroides como
    anticonceptivos. Algunos han sido anillos combinados liberadores
    de estrógeno y progestágeno, que pueden ser usados
    cíclicamente en la misma secuencia que la píldora
    combinada. (45) otros modelos consisten en anillos proveedores de
    progestágeno para uso continuo, imitando la minipíldora
    o el Norplant. (46) Sólo un anillo anticonceptivo,
    desarrollado por el PRH/OMS, ha logrado su aprobación
    regulatoria como medicamento en el propio país de
    manufactura, en este caso el Reino Unido. Este anillo libera
    levonorgestrel, suministrando una dosis diaria de aproximadamente
    20 mcg durante tres meses, después de los cuales es
    sustituido por uno nuevo. La efectividad anticonceptiva es mejor
    que la obtenida con la minipíldora de progestágeno
    solo. La tasa de embarazo informada por un estudio
    multicéntrico del PRH/OMS fue de 4.7 por ciento durante el
    primer año de uso, comparada con el doble de esta tasa
    obtenido con el uso de la minipíldora. (47) Al igual que el
    Norplant, la tasa de embarazo fue altamente influenciada por el
    peso corporal de las usuarias. La tasa varió de 1.8 por
    ciento en mujeres de 49 kilos de peso o menos hasta 8.2 por
    ciento en aquéllas que pesaban 70 kg o más.
    (48)

    Como es usual en la administración continua de
    progestágenos, los principales efectos colaterales del
    anillo proveedor de levonorgestrel son las irregularidades
    menstruales, aunque menos severas que las observadas con el uso
    del Norplant. Esta es una indicación más de que la
    cantidad de levonorgestrel que alcanza los tejidos clave debe ser
    menor con este método que con el Norplant.

     

    EVOLUCION DE LA ANTICONCEPCION
    INTRAUTERINA

    Diseño de DIUS
    adaptados a la cavidad uterina

    La historia moderna de la anticoncepción
    intrauterina se inició con la publicación de la
    experiencia de oppenheimer con el anillo de Grafenberg. (49)
    Entre los muchos modelos desarrollados durante los años
    sesenta, el asa de Lippes fue el único que alcanzó
    diseminación y aceptación universal, principalmente
    porque es fácil de insertar y retirar, tiene una tasa de
    expulsión baja y muy buena efectividad anticonceptiva. Sin
    embargo, pronto se evidenció que no se adaptaba a la cavidad
    uterina, la cual se deformaba por la presencia del DIU. Se
    sospechó que ésta era la causa del dolor y el sangrado
    que no era en manera alguna infrecuente entre las usuarias del
    DIU. Tatum fue el primero en observar que la forma de la cavidad
    uterina, particularmente durante una contracción, era muy
    cercana a una T mayúscula. (5O) Basado en esta
    observación, diseñó y probó un dispositivo en
    forma de T, el cual mostró adaptarse tan bien a la cavidad
    uterina que su tasa de expulsión fue más baja que con
    el asa, sin importar su menor volumen y su mayor
    flexibilidad.

    El problema fue que la efectividad de este pequeño
    dispositivo era tan baja, que su utilización en la
    práctica tuvo que esperar al siguiente avance en la
    anticoncepción intrauterina. (50)

    Liberación intrauterina de sustancias
    anticonceptivas contenidas en un DIU

    Zipper ha estudiado el efecto local anticonceptivo de
    los iones de metal colocados en el itsmo uterino de animales experimentales, y ha
    demostrado la muy alta efectividad de pequeñas
    concentraciones de iones de cobre liberadores en el
    ambiente intrauterino. (51.52)
    La aplicación de este concepto a los humanos fue
    probada añadiendo cobre a un dispositivo en forma de T.53 La
    adición del cobre mejoró la efectividad anticonceptiva
    del método a tal punto que el modelo más avanzado, el
    TCU 380A, proveé protección anticonceptiva en más
    de un 99.5 por ciento por año durante los seis años
    siguientes a su inserción. (54.55) Además, en este
    dispositivo se ha dado una tasa de expulsión más baja,
    una perdida de sangre mensual de alrededor de la mitad de la
    observada con el uso del asa de Lippes y tasas muy aceptables de
    deserción por otras razones médicas. (56)

    El principio de liberación de sustancias activas a
    partir de un DIU ha sido aplicado también a la
    liberación intrauterina de progestágenos. El primer DIU
    proveedor de progestágeno en el mercado contiene
    progesterona y se llama Progestasert. (51) Se vende en Estados
    Unidos, pero no ha ganado gran popularidad porque no es tan
    efectivo como otros DIUS, dura solamente un año y tiene un
    alto riesgo de embarazo ectópico en caso de
    falela.

    Más recientemente, y después una prolongada
    investigación farmacológica, toxicológica y
    clínica, se aprobó un DIU en forma de Ten Finlandia, el
    país de manufactura, con el nombre de Levonova.
    (58.59)

    Las pruebas clínicas multicéntricas conducidas
    por el Consejo de Población han mostrado que el Levonova es
    un método anticonceptivo muy efectivo, con una tasa de
    embarazo por debajo del 0.5 por ciento por año durante los
    primeros cinco años de uso. (60) La diferencia principal con
    el TCU 780A es que reduce el sangrado menstrual, causando
    hipomenorrea, oligomenorrea y hasta prolongados periodos sin
    sangrado en algunas pacientes. Esto puede verse como una ventaja,
    si se compara con el incremento de perdida de sangre menstrual
    observado con otros DIUS, pero también como una desventaja
    para aquellas mujeres para las que es importante sangrar
    mensualmente. (61) En poblaciones con alta incidencia de anemia, levonova ha mostrado
    incrementar significativamente las reservas de hierro en comparación con
    los controles normales de los mismos grupos socioeconómicos.
    (62)

     

    Importancia de las
    técnicas de inserción

    Cuando el asa de Lippes fue el DIU casi universalmente
    usado, la técnica estándar de inserción
    consistía en presionar el espiral a través del tubo
    insertador. Con el advenimiento de los dispositivos de T de
    cobre, la técnica de inserción no sólo ha cambiado
    sino que es diferente para los numerosos dispositivos disponibles
    como son la familia TCU, la familia
    multicarga y la familia Nova de DTUS. El primero es depositado en
    el fondo de la cavidad uterina con el tubo insertador, que es
    retirado mientras el DTU se mantiene en su lugar (no se empuja)
    con el reborde. El segundo se empuja en la cavidad uterina a
    través del cervix en una forma muy similar a los primeros
    anillos. El T Nova requiere de un movimiento
    ascendente-descendente-ascendente, lo que le diferencia en cuanto
    a técnica de inserción respecto a los otros dos
    dispositivos.

    La cuestión más importante respecto a los
    dispositivos liberadores de cobre es que su efectividad
    anticonceptiva depende de una ubicación apropiada. Los
    estudios sobre la localización intrauterina por ultrasonido
    llevados a cabo en nuestra clínica han mostrado un
    desempeño significativamente más pobre cuando la
    distancia entre los brazos horizontales del dispositivo T y el
    fondo del útero es superior a 20 mm. Por ejemplo, mientras
    las tasas de deserción en doce meses debido a embarazo,
    expulsión y sangrado fueron de 1.2,1.5 y 1.5,
    respectivamente, cuando la distancia era hasta de 20 mm, cuando
    el DIU se encontraba más abajo en la cavidad uterina, las
    tasas correspondientes fueron de 3.0, 21.0 y 4.3.63
    Consecuentemente, la obtención de buenos resultados con
    cualquiera de estos DIUS más avanzados dependerá
    también del entrenamiento del personal responsable de la
    inserción y de la cuidadosa aplicación de la
    técnica correcta.

     

    Orientación y
    selección de pacientes

    Como en el caso de los anticonceptivos hormonales, los
    estudios epidemiológicos han encontrado que la única
    complicación seria durante el uso de un DIU, la enfermedad
    inflamatoria pélvica (EIP), está asociada a este
    método sólo cuando otros factores de riesgo se
    encuentran presentes. En pocas palabras, no hay un incremento de
    riesgo de EIP con el uso del DIU entre mujeres que mantienen una
    relación sexual monógama.

    Para aprovechar este conocimiento y proteger la salud de
    las usuarias, se requiere de una buena selección de
    pacientes y de una adecuada orientación. A ninguna mujer
    debe insertársele un DIU sin antes darle a conocer las
    incomodidades menores, el posible aumento del sangrado menstrual
    (o disminución, en el caso del Levonova), y las
    complicaciones más serias, como las EIP, que se presentan en
    caso de exposición a otros factores de riesgo. A las mujeres
    que no están conscientes de estos problemas o que no
    están dispuestas a aceptar la inconveniencia y eventuales
    riesgos asociados al DIU, no se les debería insertar, sino
    que se les deben ofrecer métodos alternativos.

    La orientación, una vez más, juega un papel
    fundamental para ayudar a las mujeres a seleccionar el DIU
    más apropiado para ellas, y para prepararlas para las
    incomodidades que pudiéran presentarse durante y
    después de la inserción. Es muy importante tener en
    mente que la orientación y la selección de la paciente
    juega un papel tan importante en el uso de un DIU como la
    calidad intrínseca del
    modelo y la técnica de inserción empleada.

     

    DIUS
    mejorados

    Como resultado de los avances hasta ahora descritos, un
    buen número de DIUS de cobre y un dispositivo liberador de
    progestágeno se encuentran disponibles en el mercado
    mundial. Todos los DIUS tienen forma de T, o bien una
    configuración muy cercana, a fin de aprovechar su mejor
    adaptación a la cavidad uterina. Mientras que la forma es
    responsable de su mejor retención y de pérdidas de
    sangre reducidas, comparado con los DIUS más grandes e
    inertes como el asa de Lippes,(56) la efectividad del método
    depende de la superficie total de cobre y de su ubicación en
    la cavidad uterina. (64) Por lo tanto, el TCU 380A o el 380Ag,
    con 380 mm2 de superficie de cobre colocado en los brazos
    verticales y horizontales de la T, es el modelo de más alta
    efectividad hasta el séptimo año de uso (65) otro DIU
    de cobre altamente efectivo es el Multicarga 375, con 375 mm2 de
    superficie de cobre colocado en el brazo vertical del
    dispositivo. (66, 67)

    Las letras A y Ag en la denominación del TCU 380 se
    refieren a las características del cobre en el brazo
    vertical de la T. Ag indica la presencia de un núcleo de
    plata en el alambre de cobre, que fue añadido con el
    propósito de evitar la eventual fragmentación del
    alambra después de varios años en el útero. Sin
    embargo, la experiencia clínica ha fallado en mostrar alguna
    diferencia en el desempeño o la duración de uso entre
    la variedad A y Ag del TCU 380.

    El más nuevo de los DIUS medicados es el DIU
    liberador de levonorgestrel, Levonova, cuyas características
    fueron descritas en las páginas previas. Sus
    características más importantes son su alta
    efectividad, por lo menos tan alta como la del mejor DIU de
    cobre, y la reducción de pérdida de sangre menstrual,
    lo que distingue claramente a este dispositivo de los modelos
    inertes y proveedores de cobre. El exelente desempeño del
    Levonova y del RCU 380 Ag se ilustra en el cuadro 1, que muestra los resultados de un
    amplio estudio quinquenal multicéntrico coordinado por el
    Consejo de Población.

    ————————————————————

    CUADRO I

    Tasa de deserción acumuladas después del uso
    del Levonova y del TCU 380 Ag

    ————————————————————

    Tasas brutas de deserción

    Razone acumuladas de cinco años

    DIU Levo Ng TCU 380 Ag

    Embarazo 1.1 1.4

    expulsión 11.1 7.4

    menorrea 19.7 0.4

    Sangrado/dolor 15.4 23.3

    Otras médicas 16.9 16.2

    Planes de embarazo 25.9 23.5

    Otras personales 9.5 9.4

    Descrción lotal 33.0 40.6

    N° de mujeres 1 124 1 121

    ————————————————————

    Fuente: Referencia 60

     

    LA EVOLUCION DE LA PLANIFICACION FAMILIAR COMO UN
    INSTRUMENTO DE SALUD PUBLICA

    Planificación
    familiar para la prevención de embarazos de alto
    riesgo

    El desarrollo mundial de programas de planificación
    familiar, particularmente en los años sesenta y setenta,
    generalmente estuvo relacionado ya sea con presiones
    demográficas o con necesidades individuales de control del
    tamaño de la familia. Raros fueron los programas de
    planificación familiar que estuvieron diseñados
    primordialmente para mejorar la salud de las mujeres y los
    niños.

    Más recientemente, las actividades de
    planificación familiar han empezado a jugar un papel
    más importante en la salud materno-infantil. El Fondo de las
    Naciones Unidas para la Infancia ha incluido a la
    planificación familiar entre las iniciativas básicas
    para reducir la mortalidad infantil, y el programa de Maternidad
    Segura de la OMS incluye a la planificación familiar entre
    las actividades que conducen a una reducción de la
    mortalidad materna. (68.69)

    Las actividades de planificación familiar no
    conducen automáticamente a mejoras en el bienestar de
    mujeres y niños, pero los servicios de alta calidad y
    bien administrados sí producen ese efecto. La efectividad de
    la planificación familiar en la mejoría del bienestar
    individual depende de la forma en que el programa se diseña
    y se implementa. Si la intención es reducir la mortalidad
    materno-infantil, debe tenerse cuidado en incluir a mujeres con
    condiciones médicas cuya fuerte asociación con el
    riesgo de muerte durante el embarazo, el
    parto y el puerperio, o bien con el riesgo de tener un bebe con
    escasas posibilidades de sobrevivencia, crecimiento y desarrollo
    normales, sea bien conocida.

    Los programas de planificación familiar
    convencionales usualmente no llegan a estos grupos de mujeres,
    porque las condiciones asociadas a un mayor riesgo son más
    frecuentes entre mujeres de bajos ingresos y menor educación, quienes frecuentemente
    tienen menos iniciativa para solicitar la anticoncepción y
    tienen difícil acceso a los servicios. Por lo tanto, a fin
    de lograr el propósito de mejorar la salud de mujeres y
    niños. el programa debe buscar activamente mecanismos para
    informar a estos grupos de mujeres sobre su riesgo, así como
    facilitar el acceso a servicios anticonceptivos de buena calidad
    a todas las mujeres, con especial atención a aquellos grupos
    cuyo riesgo es conocido.

    La calidad es un tema clave en el mejoramiento de la
    salud a través de la planificación familiar. (7O) Buena
    calidad significa orientación adecuada, selección de
    quienes aceptarán los anticonceptivos, y una buena interacción entre
    cliente y proveedor, elementos
    que se hallan fuertemente asociados a menores efectos
    colaterales, mayor efectividad y uso más prolongado. (7l)
    Una buena calidad también significa acceso fácil a la
    más amplia gama posible de métodos. Esta debe incluir
    los métodos más avanzados que ofrecen alta efectividad,
    particularmente cuando el embarazo representa un alto riesgo para
    la salud y la vida de la mujer o de su hijo. De
    cualquier manera, la disponibilidad de nuevos métodos no
    debe conducir al abandono de los anteriores métodos
    tradicionales preferidos por algunas mujeres y parejas, quienes
    pueden usarlos exitosamente si se encuentran suficientemente
    motivadas para hacerlo.

    La mejor oportunidad para identificar y llegar a las
    mujeres con un alto riesgo reproductivo es a través de la
    atención prenatal, en el parto y posnatal. El problema es
    que en el periodo inmediato posterior al parto, la mujer puede
    estar más interesada en su bebé que en sí misma, y
    la necesidad de la anticoncepción puede no parecer
    apremiante. Por lo tanto, aun siendo ésta una ocasión
    en que las patologías que complican el embarazo son más
    fácilmente identificadas, puede no ser una buena oportunidad
    para informar y aconsejar a las mujeres respecto a su futuro
    reproductivo.

    La atención prenatal, y aún más, los
    4O-60 días de visita posparto parecen ser las ocasiones
    más apropiadas para discutir con las m mujeres su futuro
    reproductivo y sus riesgos. Esta es una de las razones que
    favorecen la inclusión de la anticoncepción posparto
    como parte de la atención continua a mujeres con alto riesgo
    reproductivo. La atención de un embarazo de alto riesgo
    será inadecuada si termina con el alta posparto, sin una
    atención específica al futuro reproductivo de la
    mujer.

    Prevención de abortos
    inducidos repetidos

    El derecho de una mujer a decidir si desea o no tener un
    hijo es totalmente reivindicable. El principal mecanismo para
    lograr este derecho es el conocimiento y el acceso la métodos anticonceptivos.
    Sin embargo, ya que. dicho conocimiento y acceso no son
    universales, que los encuentros sexuales no son siempre planeados
    y que los mejores anticonceptivos pueden fallar, siempre
    habrá embarazos no deseados. En esos casos, el acceso a un
    aborto higiénico, técnicamente correcto y socialmente
    aceptado, en un ambiente de apoyo psicológico, es un derecho
    que las mujeres reclaman y que es reconocido por la gran
    mayoría de la población mundial.

    La interrupción de un embarazo, como quiera que
    sea, es siempre el resultado de algún tipo de falla: ya sea
    de información y acceso a la regulación de la
    fertilidad, de una educación sexual
    inadecuada o de inefectividad en un método anticonceptivo.
    En países donde el aborto es ilegal, se convierte en una
    causa de mortalidad y morbilidad materna muy importante, y
    aún en países donde es legal se realizan un cierto
    número de abortos fuera del marco legal.

    La interrupción legal del embarazo ofrece menor
    peligro para la salud física y psicológica de la madre,
    pero está lejos de ser inocuo, y es mucho más costoso
    que la prevención del embarazo. El aborto nunca es un
    objetivo de ninguna mujer. El
    objetivo es la prevención del embarazo si es que no desea
    tener un hijo. Por lo tanto, mientras que el acceso al aborto
    legal tiene efectos positivos en la salud y el bienestar de las
    mujeres, la repetición del aborto puede convertirse en un
    problema de salud pública que debe ser responsablemente
    encarado.

    Estudios epidemiológicos han mostrado que
    probablemente el factor más importante asociado al riesgo de
    un aborto inducido es una historia previa de uno o varios abortos
    inducidos. (72) Esto significa que las mujeres que se someten a
    un aborto inducido, tienen una mayor probabilidad de abortar
    nuevamente si se embarazan. Consecuentemente, el periodo
    inmediato posterior a un aborto constituye la mejor oportunidad
    para orientar a las mujeres sobre los medios más apropiados
    para prevenir un aborto repetido. En este caso, será mejor
    recomendar un anticonceptivo de alta efectividad y alta
    continuidad en su utilización (para lo cual una buena
    orientación y continuidad en la atención son
    fundamentales), considerando la alta probabilidad de que una
    falla en esas circunstancias resultará en aborto. Sin
    embargo, este énfasis en la efectividad no puede ser
    impuesto, sino solamente
    recomendado bajo todas las consideraciones descritas
    anteriormente.

    Muchos estudios, desde investigaciones de hospital a
    pequeña escala hasta observaciones de las
    estadísticas de un
    país, han confirmado la efectividad de este enfoque en la
    prevención del aborto inducido. (73,74) Esta
    aproximación incluye información adecuada y
    orientación en el periodo anterior y posterior al aborto,
    así como el fácil acceso a servicios anticonceptivos de
    buena calidad después del aborto. El ideal seria que las
    pacientes dejaran el hospital con un método prescrito o,
    aún mejor, ya en uso. De nuevo, el inicio de uso antes del
    alta no debe ser interpretado en manera alguna como un signo de
    poco interes en proveer una asistencia continua apropiada, lo
    cual constituye un factor clave en el uso prolongado del mismo u
    otro método anticonceptivo.

    Planificación familiar e
    infecciones del tracto reproductivo

    La discusión del papel de la planificación
    familiar en el mejoramiento de la salud de las mujeres no
    estaría completo sin incluir en ella su papel en la
    prevención, diagnóstico y tratamiento
    de las infecciones del tracto reproductivo (ITR), las cuales
    incluyen todas las enfermedades sexualmente transmisibles
    (EST).

    Las ITR están ganando una mayor relevancia para la
    salud de las mujeres (y de los hombres), no solamente por la
    influencia de la pandemia del SIDA, sino también como
    resultado de un reconocimiento más amplio de la importancia
    de otras infecciones de severas consecuencias para la salud de la
    mujer. Un mejor entendimiento del papel del virus papilloma en el cáncer cervical, de la
    clamydia y la neisseria en la infertilidad, de la nueva ola de
    infecciones sifilíticas y de la sospecha de influencia de la
    vaginitis en el resultado del embarazo traería mejoras
    notables en la salud de la mujer.

    La prevención y el diagnóstico temprano de las
    ITRS requiere de la observación de sujetos
    asintomáticos o de aquellos que por tener tan pocos
    síntomas no los han considerado como razón suficiente
    para acudir a una clínica. Para muchas mujeres, la consulta
    para iniciar o vigilar el uso de un método anticonceptivo es
    la única oportunidad de contacto con el sistema de
    atención a la salud. Esta situación no es única ni
    exclusiva de los países menos desarrollados, sino que
    también se observa en las naciones más avanzadas. Por
    esta razón, médicos o enfermeras deberían
    aprovechar la oportunidad de la visita de la paciente para
    revisar, diagnosticar y suministrar un tratamiento temprano para
    las ITR. La displasia cervical y el cáncer deberían ser
    incluidas entre las condiciones a ser examinadas y tratadas en
    estas ocasiones.

    Al mismo tiempo, el posible papel del servicio anticonceptivo en
    favorecer la transmisión de las ETS, vía instrumentos
    mal esterilizados, debería ser cuidadosamente considerado y
    tomarse todas las precauciones para prevenir su
    ocurrencia.

    Debe darse especial atención al papel del uso del
    DIU y, particularmente, a la contaminación durante la
    inserción. Cuando el riesgo de infecciones es alto, debe
    darse prioridad a la acción protectora de los métodos
    de barrera, particularmente al condón, por sobre el uso de
    métodos alternativos. Estos son sólo algunos ejemplos
    de cómo los servicios de planificación familiar deben
    estar atentos a la prevención y tratamiento de las
    ETS.

    ————————————————————-

    Solicitud de sobretiros: Dr. Anibal Faúndes, The
    Population Council. Caixa Postal 6181, Código Aemo 13081
    Campiñas Sao Paulo Brasil.

    -1 Director del Centro de asistencia Integral a la Salud
    de la Mujer, Sao Paulo, Brasil.

    Fecha de recibido: 2 de agosto de 1991

    Fecha de aprobado: 4 de noviembre de 1991

     

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    Anibal Faúndes

    en: SALUD PUBLICA DE MEXICO ENERO-FEBRERO DE 1992, VOL.
    34, N° 1

     

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