- El Dinero y la
financiación de la economía - Los Bancos
Comerciales - El Banco
Central - La demanda y oferta
monetaria - El ajuste del Mercado de
dinero - La oferta monetaria y la tasa de
interés - La política
monetaria - Política monetaria y
financiera argentina - Reformas del período
1991-1994 - La Ley de
Convertibilidad - La "Crisis del Tequila" y otras
crisis - Modificación de la Ley de
Convertibilidad - El default
- Evolución
reciente - Programa Monetario 2006.
Antecedentes
La política monetaria
consiste en controlar la oferta de
dinero y otros
activos
líquidos, para conseguir determinados objetivos de
política
económica. El más importante para esta
política es la estabilidad de precios, pero
también puede contribuir al logro de un crecimiento
sostenido y a favor del equilibrio
externo.
El artífice o agente encargado de aplicar la
política monetaria de un país es, normalmente, el
Banco
Central.
El dinero lleva a cabo la función
principal de ser instrumento de cambio y pago,
pero también es utilizado como unidad de cuenta y es un
depósito de valor que
permite mantener la riqueza disponible para el consumo
futuro. El dinero es ,
pues, un activo financiero que tiene la propiedad de
ser completamente líquido, es decir, es el activo que
permite a quien lo posee efectuar cambios
directamente.
Al dinero, como elemento fundamental de esta
política, lo distinguimos en :
- Dinero legal: es aquel que el gobierno
declara que debe aceptarse como medio de pago y cambio; tiene
el respaldo del Estado, y
puede diferenciarse en:
- Dinero mercancía: son las monedas de
pleno contenido metálico. Moneda de oro y
plata cuyo valor monetario era equivalente al valor
metálico. - Dinero signo o fiduciario: son monedas
billetes representativos de valor nominal pero sin valor
intrínseco equivalente.
- Dinero bancario: esta constituido por los
depósitos de los agentes comerciales en los bancos
comerciales, que pueden movilizarse mediante cheques,
estos se utilizan siempre para intercambio y pago.
Las funciones del
dinero son:
- Sirve de instrumento de cambio y pago que
facilita el intercambio, el ajuste de los mercados,
la satisfacción de necesidades y la disponibilidad de
los recursos
para la producción. - Es una unidad de cuenta que mediante su uso
se pueden fijar precios y realizar cálculos sin
necesidad de llevar a cabo transacción
alguna. - Es un depósito de valor que permite
mantener riqueza disponible para el consumo
futuro. - Se pueden hacer previsiones, mantener
liquidez de los ahorros y ajustar el comportamiento de los agentes
económicos. - Es un activo financiero que tiene la
propiedad de ser completamente líquido. Es un activo
que permite a quien lo posee efectuar cambios
directamente.
Los bancos comerciales son las instituciones
financieras que pueden crear dinero. Son instituciones
financieras a las que la autoridad
(Banco Central) les permite aceptar depósitos que se
pueden movilizar por cheques y dar créditos a sus clientes.
Sus funciones son:
- mediadora entre ahorradores y
prestadores. - Creación de dinero: pueden abrir
depósitos a sus clientes o permitir que la
disposición por cheques exceda a la cantidad
ingresada. - Seguridad para los agentes económicos que
depositan en los depósitos bancarios.
En el balance de estos bancos hay tres grupos de
activos:
- El encaje: formado por el efectivo (dinero
legal) que guarda en su caja más depósitos que
el propio banco haya abierto en el Banco Central. Con el
encaje el banco comercial mantiene la liquidez necesaria para
las peticiones de dinero legal de sus clientes. La autoridad
obliga a mantener un porcentaje de efectivo sobre el conjunto
de depósitos reflejados en los recursos ajenos,
llamado coeficiente de caja o de liquidez. El encaje da
liquidez al banco comercial pero le priva de rentabilidad, dado que el dinero legal es un
activo que no genera rentabilidad alguna en forma de
intereses. - Los activos rentables: buscan obtener
intereses que redunden en la cuenta de resultados de banco.
Debe combinar estos activos buscando los de mayor
rentabilidad. Se debe distinguir la cartera de valores,
de la de créditos:
- Cartera de valores: son activos financieros
emitidos por diversas instituciones en forma de fondos
públicos, obligaciones públicas y privadas y
acciones
de empresas; se
persiguen diversificar su activo con títulos rentables
y de entidades seguras. - Cartera de créditos: son operaciones
típicas de los bancos comerciales, permiten a sus
clientes realizar gastos que
no pueden financiar con sus ingresos
actuales y reciben intereses y devoluciones del
préstamo. La autoridad monetaria obliga a respetar un
coeficiente de solvencia, que relaciona los recursos propios
del banco (capital y
reservas) con los créditos concedidos que se
clasifican según su riesgo.
- Los activos reales: son partidas más
solventes pero menos rentables del activo de los bancos
comerciales, son las tenencias menos
líquidas.
En cuanto a los pasivos hay que diferenciar:
- Recursos ajenos: constituidos por los
depósitos a la vista, los depósitos de ahorro y
los depósitos a plazo que aseguran cierta estabilidad
a estas imposiciones. Son los ingresos ahorrados por los
prestamistas en última instancia del sistema
económico. - Recursos propios: representan las cuentas
del neto patrimonial. El capital y las reservas son los
fundamentos de la solvencia del banco; son recursos que el
banco no tiene que devolver.
La gestión
de las diferentes partidas de activo y pasivo de los bancos
comerciales constituye la esencia del problema bancario
fundamental: la combinación de las partidas del balance
para alcanzar un punto de
equilibrio entre solvencia, liquidez y
rentabilidad.
El Banco central es el agente principal del sistema
financiero del país, quien ostenta la autoridad
monetaria de la economía.
Las funciones ordinarias del Banco Central suelen
diferenciarse entre:
- Funciones monetarias:
- Tiene el monopolio
de creación del dinero legal otorgado por el
Estado. - Tiene competencia de regular y controlar la
creación del dinero bancario.
- Funciones no monetarias:
- Banco y Cajero del Estado: centraliza los cobros y
pagos de todas las dependencias del Estado; concede
préstamos a corto plazo al Estado para hacer frente a
sus pagos; concede préstamos a largo plazo al Estado
mediante la suscripción directa de títulos de
deuda
pública. - Custodia y gestiona la reserva de oro y divisas.
- Es el banco de bancos: mantiene parte del encaje de
los bancos comerciales en cuenta abiertas a cada banco, da
préstamo a las entidades bancarias que necesitan para
regular la liquidez del sistema y compensa las operaciones
entre los bancos actuando como oficina de
compensación bancaria. - Suele ofrecer servicio
de asesoría.
- La
Demanda y
Oferta Monetaria
El público demanda dinero por tres razones
básicamente:
La cantidad depende del monto de las transacciones
que estarán relacionadas a la renta. Esta renta real
condiciona el volumen
de transacciones: la demanda de dinero en saldos reales no
se altera si aumentan los precios de los bienes,
aunque aumenta la demanda nominal de dinero. También
se ve afectado por el coste de oportunidades de poseer
dinero en lugar de activos rentables como los bonos. Si
mantenemos saldos en dinero dejamos de Percibir un
interés; si este es alto tendremos menos
volumen de saldos en dinero y demandaremos más
bonos.Otro factor son los costos de
transacción y molestias: estar pendiente del
tipo de interés y la necesidad de disponer de
dinero en cada momento es molesto y acentúa la
preferencia por la liquidez.Y motivos relacionados con las instituciones
económicas que afectan a la demanda de dinero
por motivo de transacciones: hace referencia a determinadas
formas que el sistema financiero ha creado para hacer
frente a las transacciones sin necesidad de tener dinero en
ese momento.- por motivo de transacción: se
debe a que el dinero se utiliza como medio de cambio y
existencia de falta de sincronización entre ingresos y
pagos. - por motivo de
precaución: tiene su razón de
ser en la existencia de acontecimientos imprevistos frutos de
la incertidumbre. - por motivo de
especulación: considera al dinero como
un activo más, como una forma de mantener la riqueza.
Si es favorable se esperará que los bonos suban de
precio y
alentarán la compra de ese activo. Cuando cambian las
expectativas, el público creerá que el precio
de los bonos va a caer, venderá sus bonos y
demandará más dinero.
La oferta monetaria en saldos reales es la
relación entre oferta nominal de medios de pago
y el nivel de precios. La autoridad monetaria controla la oferta
monetaria real a través de saldos nominales en el supuesto
de que los precios sean constantes o conozca la variación
de los mismos.
La oferta nominal depende de la voluntad de la autoridad
monetaria que fija el stock de dinero en circulación
según los objetivos de la política monetaria como
reacción a perturbaciones exógenos al Banco Central
o debido a alteraciones en las necesidades de liquidez del
sistema financiero. Si un país tiene un sistema de
tipo de cambio
fijo, una demanda extranjera de divisas nacionales obligara al
Banco Central a poner en circulación una mayor cantidad de
billetes. Es lo que se denomina una perturbación
exógena.
También la necesidad del sistema obliga a veces a
la autoridad monetaria a crear dinero para satisfacer una mayor
oferta temporal de dinero.
Para comprender el ajuste podemos partir de un
mercado de activos en el que el tipo de interés sea
muy elevado donde la demanda será baja. Para un
interés elevado el coste de tener dinero es alto y
el precio de los bonos bajo lo que anima al público
a tener menos saldos líquidos y más activos
rentables.Al ser la oferta mayor que la demanda hay un
exceso de liquidez. El público no quiere tener tanto
dinero como hay en circulación; la alternativa ante
este exceso es comprar más bonos, pero al aumentar
la demanda de bonos, subirá el precio de los mismos
y bajara el interés; esta bajada disminuye el coste
de dinero y aumenta la demanda del mismo,
reduciéndose en parte el exceso de liquidez.
Así seguirá cayendo el tipo de interés
en el que el stock de dinero en circulación coincida
con la demanda de dinero, llegando a la situación de
equilibrio.Al equilibrarse el mercado de dinero se equilibra
también el mercado de bonos a un precio en el que la
oferta de bonos coincide con la demanda.El
interés de una de las variables que incide sobre la inversión y en menor medida sobre el
consumo.La política
monetaria actúa más rápida y flexible
que la política fiscal.
Consiste en controlar la oferta monetaria para alterar el
tipo de interés e incidir en la demanda
agregada y en la producción, empleo y
precios.- El Ajuste del
Mercado
de dineroEl precio que se paga por un préstamo es la
tasa de
interés; como todo precio, si la oferta
monetaria aumenta la tasa de interés
descenderá. Esta situación se
producirá siempre que los bancos deseen prestar mas
dinero, ya que tendrá que bajar las tasa de
interés a fin de animar al los clientes a pedir
prestado.Por otro lado, si la oferta monetaria se reduce la
tasa de interés se elevara, puesto que al escasear
el dinero, los demandantes estarán dispuestos a
pagar una tasa de interés elevada por el dinero
disponible.Teniendo en cuenta esta dependencia entre oferta
monetaria y tasa de interés, resultará que
cuando el Banco Central fije límites al crecimiento de la oferta
monetaria automáticamente estará
condicionando las tasas de
interés. - La oferta
monetaria y la tasa de interésComo ya vimos anteriormente, la política
monetaria consiste en controlar la oferta de dinero y otros
activos líquidos, para conseguir determinados
objetivos de política económica- Instrumentos
- La
Política Monetaria
El Banco Central no puede influir directamente sobre la
tasa de interés ni sobre la cantidad de dinero, sino que
lo hace a través de los siguientes
instrumentos:
- los encajes legales: se define como el
porcentaje sobre el total de depósitos que las entidades
financieras han de cubrir en efectivo o en forma de
depósitos en el Banco Central. Este porcentaje lo decide
el Banco Central y han de cumplirlo obligatoriamente todas las
instituciones financieras. Si se eleva el encaje, la cantidad
de dinero que se dispone para prestar disminuirá y es
probable que se produzca una elevación de la tasa de
interés. - los redescuentos: mediante estos el Banco
Central suministra dinero con garantías reales a los
bancos por plazos cortos para que estos puedan cubrir
deficiencias de efectivo mínimo. Son préstamos
que concede el BCRA a las entidades bancarias para cubrir
deficiencias transitorias de caja. - las operaciones de pase: son otra forma de
obtener crédito por parte de las entidades
financieras. El prestatario (un banco) le vende al BCRA un
activo (por lo general títulos públicos y
divisas) con el compromiso de recomprarlo pocos días
después pagando el precio al que hizo la venta
inicial mas el interés pactado. - las operaciones de mercado abierto: es otro
procedimiento
para manipular la cantidad de dinero. Son la compra y venta de
títulos públicos por parte del BCRA. Si este
considera que debe aumentar la cantidad de dinero y no cree
oportuno bajar el efectivo mínimo, una posibilidad es
comprar letras de tesorería a las instituciones
financieras y a los particulares. Esto implica que la cantidad
de dinero en la economía aumenta (inyección de
liquidez). Si lo que pretende es disminuir la cantidad de
dinero (drenaje del mismo), lo que hará es vender
títulos públicos a las entidades financieras, de
forma que reducirá la cantidad de dinero en
circulación.
- Política Monetaria Expansiva Y
Restrictiva
La política monetaria restrictiva engloba
un conjunto de medidas tendientes a reducir el crecimiento de la
cantidad de dinero y a encarecer los prestamos (elevar la tasa de
interés).
La política monetaria expansiva esta
formada por aquellas medidas tendientes a acelerar el crecimiento
de la cantidad de dinero y a abaratar los préstamos (bajar
las tasas de interés). Los efectos positivos de este tipo
pueden ser:
- mayor producción
- mayor empleo
- más consumo
- más inversión
Sus probables efectos negativos pueden ser:
- subida de los precios
- aumento de las importaciones
- Efectos De La Política
Monetaria
Efectos sobre:
- la demanda agregada: un aumento en la
forma monetaria hará descender la tasa de enteres e
incidirá positivamente, ya que se incrementara el gasto
de consumo, pues los individuos se verán estimulados a
pedir prestado dinero para comprar bienes. Y otro tanto
ocurrirá con el gasto de inversión, porque a las
empresas le resultara mas barato financiar sus inversiones.
El aumento de la demanda agregada fomentará el
crecimiento de la economía y contribuirá a
reducir el desempleo.
Paralelamente, una reducción de la cantidad de dinero
hará descender la demanda agregada, con lo que las
importaciones
también descenderán y la inflación se
reducirá. - La inflación: los economistas
monetarias defienden que la inflación es causada por el
aumento excesivo de la oferta monetaria. En este sentido el
control del
crecimiento de la oferta monetaria es un factor clave para
contener el aumento de los precios. - La cotización del peso:
la tasa de interés elevada incentivará la entrada
de capital extranjero. Para poder
invertir en el territorio argentino habrá que comprar
pesos y el aumento de la demanda de estos tenderá a
elevar la cotización del peso respecto a otras
monedas.
En el año 1989 confluyeron dos hechos
inéditos en la historia
argentina:
- El desborde hiperinflacionario
- La transmisión de mando entre dos presidentes
de distinto partido elegidos limpiamente.
Según Gerchunoff y Llach, la experiencia
hiperinflacionaria fue sin duda definitoria para moldear lo que
se pensaba y se decía sobre la economía
argentina. Si en 1983 el mandato popular había sido
antes que nada de naturaleza
institucional, el que recibía Menem era ante
todo económico: había que salir de la
inflación.
Durante varias décadas, la inexistencia de
un mercado de
capitales desarrollado hizo que la forma más
común de financiamiento
de los desequilibrios presupuestarios del sector
público fuese la emisión monetaria.
Durante la década de 1980, el sistema financiero
bajo el control del Banco central redujo sus actividades en forma
significativa y concentró su accionar en la
recepción de depósitos transaccionales de plazos
muy reducidos (siete días), asignando tales recursos al
cumplimiento de los requisitos de liquidez y a un reducido monto
de préstamos de cortísimo plazo.
Basándose en la premisa de que la hiperinflación era la consecuencia de una
profunda crisis del
estado, el gobierno de Menem formuló una política
de reforma de estado, que pasaba a ser una condición
necesaria para la estabilización.
En el área específica de la
estabilización de precios el avance fue mínimo. Un
primer período de tipo de cambio fijo duró apenas
unos meses, y acabó en un segundo episodio
antiinflacionario en el verano de 1989-1990. Durante 1990, la
política antiinflacionario siguió la
tradición monetarista más clásica, bajo un
régimen de flotación cambiaria
Previo a ello, la desconfianza en el sistema financiero
y la deteriorada situación fiscal hicieron que durante
1989 se intensificara la salida de depósitos de los
bancos, lo que derivo en la implementación del denominado
"Plan Bonex". Este se basó en el canje obligatorio
de los depósitos a plazo fijo, en dólares por bonos
del sector público denominados en la misma moneda y con un
plazo de diez años. Este instrumento perjudico
inicialmente a los ahorristas; sin embargo, el marco de
estabilidad macroeconómica y las reformas estructurales
consiguieron restablecer la confianza en el sistema financiero
local, las tasas de interés pasivas en pesos disminuyeron
desde niveles mayores al ciento por ciento en 1991 a tasas
menores al diez por ciento a fines de 1994.
A partir de 1991, el gobierno dispuso una serie de
medidas destinadas a lograr el crecimiento
económico sobre la base de la estabilidad de los
precios. Este crecimiento se instrumento a través
de:
- Un régimen de
convertibilidad - La desregulación de distintos sectores de
la actividad económica - La apertura en los mercados de bienes y
capitales - El desarrollo
de un sistema financiero que actuaba como eficiente
canalizador del ahorro externo e interno.
Dentro del sector bancario las principales medidas
adoptadas fueron:
- La modificación del marco institucional del
sistema financiero, con la reglamentación de una nueva
carta
orgánica para el Banco Central. En ella se
establecían mecanismos institucionales para lograr un
alto grado de autonomía e independencia en el manejo de la política
monetaria y recrear la superintendencia de entidades
financieras. - La privatización de los bancos provinciales,
con lo que se limitaba el financiamiento de los déficit
provinciales por esta vía. - La liberación de los mercados
financieros mediante la eliminación de los controles
existentes en materia de
tasas de interés. - La eliminación de las restricciones para la
entrada de capitales extranjero en el sector
bancario. - La adopción
de criterios internacionales de regulación.
Desde el año 1991 hasta el 1994 se realizaron
reformas importantes en materia de regulación y supervisión, las que sumadas a las reformas
económicas e institucionales establecieron los pilares
para el desarrollo de un sistema financiero competitivo y
eficiente.
Después de varias décadas de
inestabilidad macroeconómica e inflación
crónica, la argentina alcanzó alguna
estabilidad adoptando un tipo de cambio fijo en 1991. El
sistema puso un "corsé" al desequilibrio fiscal,
justamente porque el nuevo sistema no permitía
recurrir a la emisión monetaria para financiar el
déficit fiscal, como se había hecho en los
años anteriores.La mayor diferencia de este tipo de cambio con un
programa
tradicional de tipo de cambio fijo, estaba en la
obligación impuesta al BCRA de mantener reservas en
divisas capaces de comprar toda la base monetaria, al tipo de
cambio que establecía la ley ( 10000 australes por
dólar).La convertibilidad, que fue acompañada con
otras reformas estructurales (privatizaciones, desregulaciones, reforma del
sistema de jubilaciones y pensiones, etc.), creó un
escenario que permitió transformar a la argentina en
un país estable y previsible.Esas expectativas alentaron una fuerte entrada de
capitales (tanto de repatriación de los argentinos
como de inversores externos) que estimuló la
economía. Tanto la mejora de las expectativas, como la
privatización y la desregulación de importantes
industrias
incentivaron fuertemente el consumo y la
inversión.Con este círculo virtuoso, la economía
creció fuertemente. El PBI aumentó 11% en 1991,
10% en 1992 y 6% en 1993. Entre 1990 y 1994, el consumo
creció el 46% y la inversión el
140%.- La Ley de
Convertibilidad - La "Crisis del
Tequila" y otras crisis
- Crisis del Tequila:
1994-1995
Esta estabilidad se vio azotada por el primer shock de
desconfianza significativo, llamado Crisis del tequilla,
generados por la devaluación del peso mexicano en diciembre
de 1994 y por la incertidumbre de las elecciones presidenciales
del 95.
Ante la magnitud de la crisis en México,
muchos pensaron que la Argentina seguiría el mismo camino
y, ante el temor a la devaluación, se desató un
violento proceso de
salida de capitales. Esto originó la caída de los
precios de los títulos argentinos, lo cual afecto la
solvencia de aquellas entidades bancarias que tenían una
alta participación de bonos públicos sobre sus
activos, sus reservas de liquidez eran bajas, lo que
agudizó la desconfianza y el retiro de depósitos,
llamada "corrida bancaria".
Se registro una
aumento importante en el riesgo país (más de 2000
puntos básicos), el cual solo pudo ser contrarestado con
la firma de un acuerdo con el FMI, BM y
BID.
Sin embargo en lugar de ceder, las autoridades
redoblaron la apuesta de que iban a conservar el rumbo y, usando
una combinación de ayuda interna y externa y austeridad
fiscal, rápidamente convencieron a los mercados y a los
propios argentinos de que el régimen cambiario se
mantendría. Ayudó a esta situación que el
BCRA mostrara gran convicción en la
convertibilidad.
Cuando la tormenta se disipó, comenzaron a llover
los capitales extranjeros y la economía se recuperó
rápidamente.
Esta crisis sirvió como instrumento para
incrementar la concentración del sistema financiero y
liquidar, fusionar o reconvertir aquellas entidades consideradas
"débiles". Lo cual incentivó la inversión
extranjera en el sector bancario argentino.
- Crisis de Asia:
1997
En 1997, mientras la economía se recuperaba se
produjo otra crisis, esta vez en Asia. Varios países
asiáticos sufrieron fuertes ataques especulativos contra
sus monedas, y en cada caso el FMI contribuyó con
importantes paquetes de ayuda.
En un primer momento pareció que estas crisis no
afectaban a la Argentina cada vez más consolidada, sin
embargo después de esta crisis todos los países
latinoamericanos tuvieron épocas de
recensión.
- Crisis de Brasil:
1999
En 1999, como consecuencia casi inmediata de la crisis
de Rusia el
año anterior, Brasil sufrió un ataque especulativo
y decidió devaluar, lo cual repercutió fuertemente
en la Argentina. Brasil al devaluar, había reducido sus
costos
fuertemente y por consiguiente estaba "chupando" inversión
argentina: las empresas decidían invertir en aquel
país aprovechando los menores costos.
En la Argentina comenzó entonces un proceso en el
que muchas inversiones que se orientaban al MERCOSUR se
reubicaron en Brasil. Obviamente, sin entrada de capitales y con
la inversión moviéndosé al país
vecino, la economía argentina se
estancó.
A estas crisis se le sumó otra
complicación adicional cuyos orígenes daban de
principios de
década. Cuando la argentina renegoció su deuda a
principio de los años 90, había cambiado por bonos
las obligaciones que tenía con los bancos en un programa
que se conoció como Plan Brady. Una
característica del Brady es que consistía en que la
deuda tenía tasas de interés muy bajas al principio
y que después de algunos años empezaban a
subir.
Para cuando comenzaba el gobierno de De La Rua, las
tasas ya habían subido mucho, y eso obligaba al estado a
ahorrar cada vez más para hacer frente a los mayores
intereses. Como éstos eran crecientes, si la
economía estaba estancada no había margen para
mejorar los recursos del estado con crecimiento, con lo que
ningún ajuste fiscal parecía suficiente. Se
ajustaban las cuentas y, a los 6 meses, los mayores intereses
requerían un ajuste fiscal adicional. El ciclo de un
ajuste fiscal tras otro sólo consiguió que la
sociedad y los
inversores se volvieran aún más
pesimistas.
En el 2000, la mayoría de los países
se recuperaron, pero Argentina seguía estancada, la
deuda crecía, la salida de capitales se aceleraba, se
desinfló la economía, el riesgo país
explotó y se estaba al borde del default. El Ministro
de Economía, José Luis Machinea, apostó
al "Blindaje", un aporte de recursos del FMI, como
intento de tranquilizar al mercado.En 2001 la economía no se levantaba y
Argentina perdía credibilidad para obtener recursos en
el mercado. Enfrentaba importantes vencimientos de deudas (el
blindaje no había cubierto todas las necesidades
financieras del año), el programa fiscal se
descompenso y el déficit aumentó. Por ello,
renunció el ministro de economía.Ingresa en su reemplazo, López Murphy al
gabinete, el cual pondría la situación fiscal
nuevamente en cauce, disminuiría la necesidad de
financiamiento. Así se generaron señales que permitieron recuperar la
credibilidad. Para ello decidió hacer un paquete de
medidas destinadas a que el ajuste del gasto no se
hacía en las jubilaciones. A las provincias se les
corta el Fondo de Incentivo Docente, para racionalizar el
gasto provincial. Las diferentes presiones por las
consecuencias de estas medidas, implicaron la renuncia del
ministro.El reemplazante fue Domingo Cavallo, que para atacar
el problema fiscal aumento los impuestos, en
lugar de disminuir los gastos. Con esto se seguía
secando de recursos al sector privado. Ya en marzo de 2001 se
produce la primera corrida bancaria del año. La
llegada de Cavallo había logrado estabilizarla, pero
la decisión de modificar la ley de
convertibilidad para incorporar al Euro como moneda de
paridad y la remoción de Pedro Pou como
presidente del BCRA, generaron bastante ruido y
abortaron el incipiente cambio de expectativas.El "megacanje", que era un canje voluntario
de deuda que buscó extender los plazos de la deuda
pública para reducir las necesidades financieras de
corto plazo, no fue considerado como una solución a
los problemas
de fondo.Se produce una nueva corrida bancaria y Cavallo para
atacarla crea la Ley de Déficit Cero: sino se
contaba con los recursos había que ajustar
automáticamente a lo recaudado los sueldos (del sector
público), jubilaciones y pensiones. La ley licuaba los
salarios.
Sin embargo se aplicaban únicamente a los sueldos del
sector público, que eran los únicos que no se
habían ajustado los años previos. Pero el FMI
estaba convencido que la argentina no tenía salida y
tenia que devaluar. Pero en el gobierno no se
pretendía devaluar, ni entrar en default.Como último punto de una larga cadena de
intentos por reencauzar la situación, cavallo llega a
la conclusión que la única solución era
reestructurar la deuda, bajando su costa para el
país y para el sector público. La idea era
reestructurarla de manera "cuasi" voluntaria. Pero esa
estrategia
tenía el riesgos de
acelerar una corrida bancaria.Como los bancos poseían alrededor del 40% de
sus activos en títulos públicos, cuando el
gobierno anunció que esos bonos no se pagarían
o que devengarían retornos muy inferiores a los
estipulados, fue natural que la gente temiera por sus
depósitos en un banco al que estaban a punto de
reducirle el valor de una parte importante de sus activos..
Esta combinación produjo en noviembre una corrida
bancaria sobre el sector financiero que desembocó en
la imposición del "corralito"Se establece el Corralito, secó la
plaza de liquidez para la economía informal,
generó problemas en los niveles más pobres de
la población y rompió la cadena de
pagos. El BCRA perdía reservas, por el exceso de
demanda de dólares. El FMI retira su apoyo. Renuncia
el presidente y el ministro de economía.- Modificación de la Ley de
ConvertibilidadEl presidente provisorio Adolfo Rodríguez Saa
anuncia el default de toda la deuda argentina. y la
cesación de pago a los bonistas, deuda que rondaba los
135 mil millones de dólares. El Default fue total,
incluso sobre títulos que por muchos años no
implicaban pagos para la República.La Argentina tenia unos 135.000 millones de
dólares en deuda. De ese total aproximadamente una
60.000 millones eran con bancos locales, AFJP y el Banco
Central, es decir, deuda interna. Los acreedores eran los
depositantes, los futuros jubilados o el propio gobierno a
través del BCRA. En definitiva, los argentinos
poseían la mitad de la deuda.Pero rápidamente el presidente renuncia y el
gobierno decidió seguir cumpliendo con los organismos
internacionales y con los préstamos
garantizados.Según la opinión de Sturzenegger, si
no se paga la deuda, se origina una salida de capitales, la
economía se contrae y se puede terminar con menos
recursos que cuando se pagaba. En el caso argentino, el
default fue el mayor causante de la salida de capitales y la
crisis económica del 2002. Como esta salida de
capitales estimuló la demanda por dólares,
generó una dramática depreciación del peso, y al extraer
recursos de la economía, introdujo un colapso de la
actividad económica. - El
default - Evolución
Reciente
En el 2002, en la presidencia de Duhalde, se produce
la pasificación del sistema bancario. Ante
la magnitud de la devaluación, los créditos se
habían hecho impagables y por eso había que
mantenerlo sen pesos, lo cual obligaba a hacer lo mismo con los
depósitos.
La pasificación sirvió para proteger a los
bancos de la devaluación, ya que de habre mantenido los
depósitos y préstamos en dólares hubiera
sido muy difícil recuperar los créditos en volumen
suficiente para honrar los depósitos.
El sistema financiero enfrentó tres serios
problemas durante el 2002, anticipatorios de quiebras
generalizadas:
- liquidez: derivado del retiro de
depósitos; - solvencia: derivado de los efectos de la
devaluación sobre sus obligaciones externas, la
reconversión forzada de los depósitos y de
créditos, y el empeoramiento en la calidad de
sus activos; - pérdida generalizada de
confianza.
A partir de julio, las principales variables del sistema
financiero comenzaron a estabilizarse y en el período
agosto-diciembre mostraron una tendencia positiva. Las entidades
financieras recompusieron sus niveles de liquidez e incrementaron
su demanda de títulos de corto plazo emitidos por el BCRA
(LEBACs), lo que generó disminución de las tasas de
interés y un incremento en el stock y el plazo promedio de
colocación de plazos fijos con fondos libres.
Como consecuencia del incremento en la demanda de
activos en moneda nacional, con una oferta de base monetaria sin
cambios, el BCRA intervino comprando divisas en el mercado de
cambios y recompuso el stock de reservas.
Los siguientes factores ayudaron a la
estabilización del sistema:
- Estabilización y revaluación del
sistema del tipo de cambio, lo que reduce las expectativas
de depreciación de los agentes económicos y
estabiliza la demanda de activos en moneda
nacional; - Excedentes de caja generados por las empresas
debido a la fuerte reducción en las inversiones y en el
pago de los compromisos financieros; - Sanción del decreto que suspende
transitoriamente la ejecución de los
amparos; - Control de cambios: el BCRA obliga a los
exportadores a liquidar divisas e impone fuertes restricciones,
que limitan la salida de capitales, las que fueron
posteriormente liberadas.
La disminución de la confianza en las
instituciones y en el sistema financiero hizo difícil el
retorno de los depósitos perdidos y la expansión
del crédito. Al contraerse el crédito, se reduce la
demanda agregada interna, la producción, el empleo y la
recaudación tributaria.
La devaluación no produjo inicialmente los
beneficios fiscales esperados. Esta falta de capacidad de
endeudamiento por parte del sector público se
reflejó en una mayor emisión de base monetaria y de
bonos, lo que se manifestó en la cotización del
tipo de cambio libre, la tasa de inflación y la
disminución de la demanda de activos financieros
denominados en moneda nacional.
En 2003 y 2004, en la presidencia (electo
democráticamente) de Nestor Kirchner, ha habido una
creciente recuperación de confianza interna y externa,
reflejada en la Balanza de
Pagos, con una entrada neta de capital, generando un
superávit. La recuperación del crecimiento, el
empleo, la consolidación de un marco
macroeconómico sustentable y exitosa
reestructuración de la deuda pública han sido
las causas principales de este cambio de
tendencia.El gobierno decidió disminuir sus necesidades
financieras mediante la imposición de
retenciones "temporarias" a las exportaciones, lo cual permitirá
incrementar los recursos fiscales en el corto
plazo.El ministro Lavagna también impulsó
una serie de medidas, como la de la suba de los encajes
bancarios, con lo que recomienda al directorio del BCRA
aplicar este instrumento para absorber sin costos la liquidez
excedente y volcar esos montos en planes de
financiación de mediano plazo, el ministro esperaba
que con menor cantidad de dinero en plaza hay menor riesgo de
inflación.La flamante Ministra de Economía, Felisa
Miceli, menos ortodoxa, apeló a los acuerdos con
los formadores de precios (supermercadistas y sector de
lácteos), y la suba de las retenciones
al sector de las carnes, para disminuir los precios y
combatir la inflación. Por otro lado alienta la
inversión productiva y la suba de salarios.- Antecedentes
- La
gestión del BCRA en 2005-2006
Durante 2005, a través de una política
monetaria prudente, previsible y estable, más una adecuada
regulación y supervisión de las entidades
financieras, el BCRA contribuyó a la normalización y crecimiento del sistema
monetario, financiero y crediticio, coadyuvando a la
consolidación del programa económico.
En línea con los objetivos trazados a fines de
2004, cuatro resultados visibles (dos en el plano monetario y dos
en la esfera financiera) sintetizan el desempeño del BCRA en el año que
termina:
- El cumplimiento estricto de la meta de
crecimiento de la base monetaria permite consolidar una
política monetaria transparente, predecible y
estable. - La acumulación de reservas hasta niveles
récord permite ganar grados de libertad en
el diseño y ejecución de la
política económica, sin afectar en forma adversa
el balance del Banco Central. - La recuperación del crédito como
elemento dinamizador de la economía y fuente de
financiamiento de la inversión, permite recrear
condiciones para el crecimiento sostenido. - El control definitivo y el manejo prudente de algunos
riesgos bancarios, principalmente asociados a la salida de la
crisis, permite tener hoy un sistema financiero sólido y
con proyección a mediano plazo.
El año 2005 marca el
saneamiento del sistema financiero y la sostenida
recuperación del crédito, acompañada por los
adecuados incentivos
regulatorios destinados a extender los plazos y a ejercer un
manejo prudente de los riesgos asociados.
Al ritmo del incremento en la bancarización de la
economía, las entidades financieras continuarán
focalizándose en brindar crédito y servicios al
sector privado. Estos comportamientos de corto y mediano plazo
estarán estrechamente ligados a la continuidad del buen
desempeño macroeconómico local, influyendo tanto en
la calidad de los activos bancarios como en la posibilidad de
expandir su actividad.
En esta línea, el BCRA continuará actuando
proactivamente, tomando medidas que faciliten el acceso al
crédito a los distintos agentes (especialmente a las
pequeñas y medianas empresas y a las familias) y el
alargamiento de plazos sin descuidar la puesta en práctica
de estrategias
prudenciales para fortalecer la estabilidad financiera y
monetaria.
En 2005 las reservas internacionales de la Argentina se
triplicaron desde aquel mínimo registrado a principios de
2003. En primer término, esta política resulta
útil para ampliar los márgenes de acción
a la hora de diseñar la política económica,
considerando al stock de deuda neta como un indicador de
vulnerabilidad y dependencia de una economía. La
acumulación de reservas cumple un rol importante en
términos de la consecución del objetivo de
mantener una política económica
autónoma.
En este contexto, el costo de la
decisión de cancelar anticipadamente de la deuda con el
Fondo Monetario
Internacional en términos de una menor disponibilidad
de recursos para hacer frente a eventuales cambios abruptos en
las condiciones financieras externas es mínimo. Argentina
comenzará el 2006 con un nivel similar de reservas con
relación a principios de 2005, cuando aún no
había finalizado el proceso de reestructuración de
la deuda pública y existía incertidumbre al
respecto.
Además, la economía argentina en su
conjunto está mejor preparada para enfrentar shocks a
partir de una serie de factores:
- Sólida situación fiscal,
- Sustentabilidad externa,
- Flexibilidad cambiaria
- Políticas monetarias y Financieras prudentes y
predecibles.
Los tres primeros factores permitirán una
rápida recomposición de reservas a partir de la
oferta de divisas proyectada para los próximos
años. Los restantes, por su parte, descansan en un nivel
de respaldo adecuado en función del tamaño del
sistema financiero argentino.
Por último, este es un buen momento del ciclo
económico para consolidar el proceso de desendeudamiento
externo. Tanto el ciclo económico local como el
internacional están en un momento de auge. Como indica la
teoría,
es el momento óptimo para desendeudarse.
- ARRIAZU, Ricardo Héctor.
"Lección de la crisis argentina- Bases
programáticas para un esquema de desarrollo
sustentable". Buenos Aires.
El Ateneo. 2003. Cáp. 3. - GERCHUNNOF, P. y LLACH, L. "El ciclo de la
Ilusión y el desencanto- Un siglo de políticas económicas
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X - O´KEAN, José María.
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McGraw- Hill. 1994. Cáp. VII y VIII. - REDRADO, Martín.
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una sociedad prospera y justa". Buenos Aires. Planeta.
2003. Cáp. II.
María Cecilia Viejo
Fac. Ciencias
políticas y sociales
Universidad Nacional de Cuyo
Mendoza Argentina