- Resumen
- La historia frente a la
globalización y la posmodernidad - Introducción: La
posmodernidad y la Crisis de las Ciencias - Fin de la Historia
Ilustrada - Naturaleza,
Objeto y Divulgación de la Historia: Los Estados
Nacionales y la Educación - Categorías:
Sociedad, Tiempo y Espacio - Dimensiones
de la Historia: Universal, Nacional, Local - Trasdisciplinariedad
y Politización de las Ciencias: ¿Una nueva
Historia Universal? - Bibliografía
RESUMEN
La obra "El Fin de la Historia" (1992) de Francis
Fukuyama, causo un gran revuelo en el campo de la ciencia de
la historia, pero tanto por las debilidades de la misma como por
la agresiva y hasta subjetiva campaña en contra, hoy todo
pareciera haber regresado a la "normalidad", lo cierto es que no
hay nada mas alejado de esta aparente normalidad. LA HISTORIA
como el resto de las otras ciencias que
surgen en la modernidad esta
siendo hoy severamente trastocadas por los cambios que en el
mundo viene produciendo el proceso de
globalización y en el pensamiento el
debate
posmoderno.
El cuestionamiento al pensamiento y la razón
mecanicista ha puesto en el "banquillo de los acusados" a la
ciencia, la
investigación, la tecnología, al propio
concepto de
realidad. Igualmente, el crecimiento abrupto de las transacciones
comerciales mundiales, de los medios
telemáticos hoy trastocan conceptos y categorías
como los de nación,
soberanía, identidad,
cultura, tan
inherentes a las ciencias
sociales. Tanto la ciencia como la tecnología han
manifestado históricamente sus debilidades no solo para
comprender sino para transformar la realidad. Más
aún, mucho de los males que hoy aquejan a la humanidad han
sido causados por estos avances tecnocientíficos. Las
ciencias en general, pero más aun las ciencias sociales en
particular (dentro de ella la HISTORIA) desde sus inicios
tuvieron entre sus metas no solo comprender la realidad (el
presente) sino que haciendo estudio de las recurrencias
históricas poder
transformarla, adelantarse al tiempo.
Controlar y planificar el futuro ha sido la causa
fundamental de desvelo de los científicos, esto implica el
dominio
(manipulación) de la naturaleza y
el enfrentamiento al pensamiento mítico- religioso y en
general a la subjetividad humana. De esta manera la ciencia
construyó un Megarelato (Lyotar) como discurso
orientador del acontecer humano. La ciencia materializó el
sentido ilustrado del progreso como paradigma
fundamental de la humanidad. Esa idea mesiánica de la
ciencia predominó desde sus inicios pero hoy es poco
creíble, hoy nadie se atreve a prometer y ofrecer
salvaciones. LA HISTORIA así como la sociología, la economía, y el resto
de las ciencias sociales, surgen en el contexto de la
formación de los estados nacionales, en el desarrollo del
capitalismo,
de las nuevas clases
sociales. Todos esos elementos que conformaron la realidad
moderna hoy deben ser revisados, algunos han perdido vigencia,
otros están trastocados, por lo tanto las
categorías de análisis no pueden ser las mismas. Pero no
es solo que hoy estemos hablando de una sociedad
distinta, llámese poscapitalista o sociedad del conocimiento,
que pregonemos el fin del trabajo , que
la realidad
virtual este dando pie a una realidad distinta a la que
conocíamos, que la política, la democracia,
estén hoy deslegitimadas, que ya para muchos no tenga
sentido hablar de imperialismo,
nacionalismos, clases sociales, sino que categorías
fundamentales como la ciencia, el hombre como
colectivo, el tiempo y el espacio, inherentes a la Ciencia de la
Historia hoy se discute sobre su vigencia.
LA
HISTORIA FRENTE A LA GLOBALIZACIÓN Y LA POSMODERNIDAD.
"El contexto histórico de hoy nos muestra un mundo
complejo, paradójico y lleno de perplejidad ante el
derrumbe de viejas macroconcepciones, de propuestas sociales
alternativas al capitalismo y una redefinición geopolítica del mundo conduce a repensar la
política, a resituarnos éticamente ante un mundo
pleno de desigualdades sociales y sobre todo hacer un notable
esfuerzo por producir una nueva manera de pensar y pensarnos
históricamente". Víctor Córdova
.
"En Iberoamérica los volcanes
todavía arrojan fuego y no hay lugar para el aburrimiento
¿Cómo hacerlo sin sentirse movido, conmovido,
frente a todo lo que queda por resolver? Premia la pobreza, la
miseria, aliviar las desigualdades, la ignorancia, el rezago
político" Federico Mayor Zaragoza.
"Dejamos de explicar los hechos sociales por el lugar
que ocupan en una historia que tiene un sentido una dirección. El pensamiento social
espontáneo, las ideologías y el aire de este
tiempo arrojan por la borda toda referencia a la historia. Es
esto sobre todo lo que significa el tema del postmodernismo, que
es principalmente, un posthistoricismo". Touraine.
I.- Introducción: La posmodernidad y la
Crisis de las
Ciencias.
La obra "El Fin de la Historia" (1992) de Francis
Fukuyama, causo un gran revuelo en el campo de la ciencia de la
historia, pero tanto por las debilidades de la misma como por la
agresiva y hasta subjetiva campaña en contra, hoy todo
pareciera haber regresado a la "normalidad", lo cierto es que no
hay nada mas alejado de esta aparente normalidad. LA HISTORIA
como el resto de las otras ciencias que surgen en la modernidad
esta siendo hoy severamente trastocadas por los cambios que en el
mundo viene produciendo el proceso de globalización y en
el pensamiento el debate posmoderno. Tal como lo señala
Martínez, M. (1997)"no están en crisis los paradigmas de
las ciencias, sino el paradigma de la ciencia en cuanto al modo
de conocer" (p.224)
El cuestionamiento al pensamiento y la razón
mecanicista ha puesto en el "banquillo de los acusados" a la
ciencia, la investigación, la tecnología, al propio
concepto de realidad. Igualmente, el crecimiento abrupto de las
transacciones comerciales mundiales, de los medios
telemáticos hoy trastocan conceptos y categorías
como los de nación,
soberanía, identidad, cultura, tan inherentes alas
ciencias sociales. Tanto la ciencia como la tecnología han
manifestado históricamente sus debilidades no solo para
comprender sino para transformar la realidad. Más
aún, mucho de los males que hoy aquejan a la humanidad han
sido causados por estos avances tecnocientíficos, tal como
lo plantea Marcuse (1973), "la cuantificación de la
naturaleza, que llevó a su explicación entorno de
estructuras
naturales, separó a la realidad de sus fines inherentes y
consecuentemente, separó lo verdadero de lo bueno, la
ciencia de la ética".
(p.165).
Estemos de acuerdo o no en la dirección a la que
nos lleva los cambios que están ocurriendo en la realidad
mundial y el pensamiento, esto no nos puede llevar a ignorarlos y
subestimarlos, acusar que todo es producto de
una manipulación mundial, que nada ha cambiado, que todo
es falso, es signo de prepotencia, ignorancia y flojera
intelectual. Pretender que todo ha cambiado, menos nuestro campo
de estudio y que el pensamiento en que nos hemos formado tiene
vigencia permanente e ilimitada es, por decir lo menos, una
fantasía.
II.- Fin
de la Historia Ilustrada.
Las ciencias en general, pero más aun las
ciencias sociales en particular (dentro de ella la HISTORIA)
desde sus inicios tuvieron entre sus metas no solo comprender la
realidad (el presente) sino que haciendo estudio de las
recurrencias históricas poder transformarla, adelantarse
al tiempo. Controlar y planificar el futuro ha sido la causa
fundamental de desvelo de los científicos, esto implica el
dominio (manipulación) de la naturaleza y el
enfrentamiento al pensamiento mítico- religioso y en
general a la subjetividad humana. De esta manera la ciencia
construyó un Megarelato (Lyotar) como discurso orientador
del acontecer humano. La ciencia materializó el sentido
ilustrado del progreso como paradigma fundamental de la
humanidad. Esa idea mesiánica de la ciencia
predominó desde sus inicios pero hoy es poco
creíble, hoy nadie se atreve a prometer y ofrecer
salvaciones. Al decir de Arnold Toymbee (1980): "La
ilusión del progreso como algo que marcha en línea
recta es un ejemplo de aquella tendencia humana en todas sus
actividades".(p.72).
Fue K. Popper (1984), en su obra La Pobreza del
Historicismo quien mejor apuntaló sobre este sentido de la
Historia Ilustrada, que para el confundía "una
predicción científica con una especie
de"profecía histórica": El historicismo
teísta comparte con estas otras formas la doctrina de que
existen leyes
históricas específicas, susceptible de ser
descubiertas y sobre las cuales pueden basarse las predicciones
relacionadas con el futuro de la humanidad" (p.24).
Touraine, A. (2002) es aun más radical en su
negación al sentido direccional de la historia:
"Dejamos de explicar los hechos sociales por el lugar
que ocupan en una historia que tiene un sentido, una
dirección. El pensamiento social espontáneo, las
ideologías y el aire de estos tiempos arrojan por la borda
toda referencia de la historia. Es esto sobre todo lo que
significa el tema del postmodernismo, que es principalmente un
posthistoricismo".(p.178)
Página siguiente |