- Las Enfermedades Laborales de
los Pulmones - La
depresión - Laringopatías
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laboral - Lumbalgia
- Estrés
En todo trabajo se
corre cierto riesgo. Hasta un
escritor se puede cortar con el filo de una hoja de papel. Pero
¿sabía usted que cientos de personas mueren cada
día como resultado de enfermedades laborales? Las
cifras son más altas que el número de personas que
muere por accidentes de
trabajo. Muchas de esas enfermedades son provocadas por
sustancias químicas u otros agentes que se encuentran en
el lugar de trabajo.
Las fábricas y los laboratorios pueden producir
sustancias químicas, tintes o metales
tóxicos. Médicos y otros en las clínicas y
hospitales tienen que trabajar con la radiación.
Las personas que laboran en aeropuertos o que tocan música en los
conciertos de rock pueden
sufrir pérdida de audición por causa del ruido
excesivo. Algunos trabajos implican extremos de calor o de
frío. Los trabajadores se pueden proteger de esos peligros
utilizando ropa especial, gafas protectoras, guantes, tapones
para los oídos y otros equipos protectores
apropiados.
Ejemplos de enfermedades
laborales
Las
Enfermedades Laborales de los Pulmones
¿Qué son las enfermedades laborales de
los pulmones?
La exposición
repetida y prolongada en el trabajo a
ciertos irritantes puede provocar un conjunto de enfermedades
pulmonares cuyos efectos permanecen incluso después de que
esa exposición termine. Ciertas ocupaciones, debido a la
naturaleza de
su ubicación, al tipo de trabajo o al ambiente en
que se desarrollan, suponen un mayor riesgo para las enfermedades
laborales pulmonares que otras. En contra de la creencia popular,
los mineros de carbón no son los únicos que pueden
contraer una enfermedad laboral pulmonar.
Por ejemplo, trabajar en un garaje o en una fábrica textil
expone a la persona a
productos
químicos peligrosos, polvos y fibras que pueden provocar
problemas
pulmonares de por vida si no se diagnostican y tratan
correctamente.
De acuerdo con la Asociación Americana del
Pulmón (American Lung Association):
- Las enfermedades laborales pulmonares son la causa
principal de enfermedades relacionadas con el
trabajo. - La mayoría de las enfermedades laborales
pulmonares son debidas a la exposición repetida y
prolongada, pero incluso una única exposición
severa a un agente peligroso puede dañar los
pulmones. - Las enfermedades laborales pulmonares se pueden
evitar. - Fumar puede aumentar tanto la gravedad de una
enfermedad laboral pulmonar como el riesgo de cáncer del
pulmón.
¿Cuáles son los síntomas de las
enfermedades laborales de los pulmones?
A continuación, se enumeran los síntomas
más comunes de las enfermedades de los pulmones, sin
importar la causa. Sin embargo, cada individuo
puede experimentar los síntomas de una forma diferente.
Los síntomas pueden incluir los siguientes:
- Tos.
- Dificultad para respirar.
- Dolor en el pecho.
- Opresión en el pecho.
- Ritmo de respiración anormal.
Los síntomas de las enfermedades laborales
pulmonares pueden parecerse a los de otras condiciones o
problemas médicos. Siempre consulte a su médico
para el diagnóstico.
¿Cómo se diagnostican las enfermedades
laborales de los pulmones?
Las enfermedades laborales de los pulmones, al igual que
otras enfermedades de los pulmones, generalmente requieren la
realización de rayos X del pecho
para el diagnóstico preliminar. Además, pueden
hacerse varios exámenes para determinar el tipo y la
gravedad de enfermedad pulmonar; entre ellas se incluyen las
siguientes:
- Exámenes de la función
del pulmón – exámenes de diagnóstico que
sirven para medir la habilidad de los pulmones para realizar
correctamente el intercambio de oxígeno y de dióxido de carbono.
Estos exámenes se suelen hacer con aparatos especiales
en los que la persona debe respirar. - Examen al microscopio de
tejidos,
células
y líquidos de los pulmones. - Estudios bioquímicos y de las células
de los líquidos de los pulmones. - Medición de las funciones
respiratorias o de intercambio de gases. - Examen de la actividad de los bronquios o las
vías respiratorias.
¿Cuál es la diferencia entre el polvo
inorgánico y el orgánico?
Las partículas suspendidas en el aire pueden
causar problemas pulmonares. Conocidas como partículas de
materia (su
sigla en inglés
es PM), dichas partículas pueden estar formadas por una
combinación de polvo, pólenes, mohos, suciedad,
tierra,
cenizas y hollín. Las partículas de materia del
aire provienen de diversas fuentes, como
fábricas, chimeneas, tubos de escape, incendios,
minas, obras de construcción y también de la
agricultura.
Cuanto más finas son las partículas más
pueden dañar los pulmones, debido a que son inhaladas con
facilidad profundamente en los pulmones, desde donde son
absorbidas al resto del cuerpo.
"Inorgánico" hace referencia a cualquier
sustancia que no contenga carbono, excepto ciertos óxidos
de carbono simples, como el monóxido de carbono y el
dióxido de carbono. "Orgánico" hace referencia a
cualquier sustancia que contenga carbono, excepto los
óxidos de carbono simples, los sulfuros y los carbonatos
metálicos.
Ejemplos de enfermedades por polvos
inorgánicos:
- Asbestosis
La asbestosis es causada por la inhalación de fibras
microscópicas de asbesto. De acuerdo con la
Asociación Americana del Pulmón (American Lung
Association), es una enfermedad progresiva que provoca la
aparición en los pulmones de cicatrices de tejido
fibroso. Se calcula que 1,3 millones de obreros de la industria y
la construcción están expuestos a asbestos en su
lugar de trabajo.
El asbesto es una fibra mineral que en el pasado se
añadía a ciertos productos para reforzarlos y
hacerlos aislantes del calor y resistentes al fuego. Hoy en
día la mayoría de esos productos ya no se
elaboran con asbesto. Aunque normalmente no es nocivo si se
combina con otros materiales,
las fibras de asbesto son peligrosas para los pulmones cuando
están suspendidas en el aire (como cuando el producto se
deteriora y se desmorona)
El riesgo de exposición al asbesto no se limita al lugar
de trabajo, ya que muchas casas fueron construidas con
sustancias que contienen asbesto (especialmente las casas
construidas antes de 1978). Algunos ejemplos de productos que
antes podían contener asbesto incluyen los
siguientes:
- Mantos o cintas aislantes alrededor de los tubos de
vapor, las calderas y
los conductos de los hornos. - Losetas para piso flexibles.
- Refuerzos para el revestimiento de suelos de
láminas de vinilo. - Pegamentos para instalar losetas.
- Aislantes elaborados con láminas de cemento,
cartón y papel que se utilizaban para revestir hornos
y estufas de leña. - Empaques en las puertas de hornos, estufas de
leña y estufas de carbón. - Aislantes acústicos en aerosol o material
decorativo de techos y paredes. - Componentes para ensamblaje y parches de techos y
paredes. - Cemento para techados, tejas de madera y
tablas de forro.
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