¿Será que el pueblo mapuche vive o solo queda la sombra de lo que fue?
En lo relativo a los ejes sobre los
cuales se estructuró el texto
"Culturas de Mercado Rutinas
de Vida" resulta de mucho interés la
forma en la cual se sistematizaron las experiencias de cada uno
de los actores que protagonizaron esta historia, ya que el relato y
la información en sí esta organizada de
tal forma que la compresión del texto es factible para
todo lector, no importando su etnia, raza,
ni estrato social.
El pueblo Mapuche se reconoce como el conjunto de
personas ubicadas entre los Ríos Itata y Toltén,
fueron y siguen siendo más llamadas araucanos, por
la tendencia a asociarlos a esa región de nuestro
país, no obstante hay que tener en cuenta que las
fronteras geográficas no mantienen ninguna relación
con las fronteras manejadas por la etnia como tal.
La construcción de la identidad
Mapuche fue resultado de un profundo proceso de
etnogénesis y etnificación, ya que aproximadamente
en la época colonial, los mapuches se hacían llamar
Reches (gente auténtica), no obstante y teniendo en
cuenta la adopción
de muchos elementos exógenos a su cultura
durante el periodo Republicano, se comenzó a utilizar el
concepto
Mapuche (gente de la
tierra).
Alrededor del siglo XV, el Mapuche gozaba de la
hegemonía de sus tierras, territorio que defendieron con
fuerza y
ahínco de todos los invasores que osaron a desafiar a este
estoico pueblo. Primero fueron los Incas,
fracasaron, luego vinieron los conquistadores españoles,
personajes como Pedro de Valdivia, Oñez de Loyola entre
muchos que perecieron por causa de estos "aguerridos indios" como
despectivamente se les denominaba, la mal llamada guerra de los
100 años entre ambos, culminó
metafóricamente con el parlamento de Quillín (1641)
pero lo anterior solo significaba el fin de una ardua batalla de
miles.
Luego vinieron nuevos tratados, pero
esta vez incluían a un nuevo personaje los Chilenos,
más que nada estos documentos
tenían por objeto unificar el territorio nacional. Se
fundaron aldeas que luego se transformaron en grandes ciudades
como Angol y Temuco. Se dio paso a la modernidad,
evento en el cual el Mapuche solo participó como un
observador pasivo, poco a poco son víctimas de un proceso
de aculturación, concepto que contempla la noción
de alteridad, es decir "el ser otro" y "la construcción
del otro"
La fundación de la ciudad de Temuco, en el
año 1881, corresponde territorialmente al corazón de
la cultura Mapuche de antaño. Con la llegada del
ferrocarril este núcleo poblacional fue creciendo
raudamente, acompañado de un profundo proceso de
hibridación entre el pueblo Mapuche y el naciente pueblo
chileno.
Esta relación interétnica no fue lo
suficientemente imparcial, el Mapuche prácticamente sin
darse cuenta se vio invadido por los visitantes y poco a poco fue
desplazado de las tierras que por milenios le pertenecieron, fue
contagiado con vicios y enfermedades, a grandes
rasgos el pueblo Mapuche había sido civilizado.
La lectura e
interpretación de la historia de este
aguerrido pueblo fue trastocada desde el principio, me refiero
específicamente a lo ocurrido con Don Alonso de Ercilla y
Zúñiga, autor del famoso poema épico la
Araucana (1569), ya que la mayoría de los textos
relativos a esta temáticas que surgieron posteriormente se
basaron en este autor sin siquiera saber que Ercilla apenas
conoció la que hoy se conoce erradamente como
Araucanía.
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