INTRODUCCIÓN
La Educación
Física es una asignatura que tiene como objetivo
preparar al hombre para la
vida, en ella se realizan acciones que
contribuyen al desarrollo
físico y psicológico de los alumnos. Desde edades
tempranas se inserta en los planes de estudio y sus contenidos
varían en función de
las adquisiciones y requerimientos de cada etapa.
Los educandos encuentran en la Educación Física una vía
para satisfacer sus necesidades de movimiento y
lograr un estado de
bienestar corporal al poner en práctica su creatividad en
las acciones realizadas, de esta forma se producen una serie de
adquisiciones que determinan el posterior desempeño de quienes la
practican.
Como toda actividad humana la Educación
Física para ser practicada, requiere por parte de la
personalidad un impulso que permita al individuo
ejecutar las acciones con la mejor disposición posible, lo
que garantiza el cumplimiento de los objetivos
propuestos. La
motivación constituye en este entorno el proceso
psicológico que brinda al organismo la energía
necesaria para llevar a cabo tales propósitos con la
intensidad suficiente, garantizando además la ruta
psicológica que se sigue para ello.
Siguiendo las ideas de Gonzáles. S (1995), se
puede entender por motivación
la regulación inductora del comportamiento
que determina y regula la dirección y el grado de activación o
intensidad de este, donde participan los procesos
cognoscitivos, las tendencias y los procesos
afectivos, siendo los dos últimos los de mayor
importancia.
Knapp (1981) afirma que la motivación es un factor importante para la
adquisición de una habilidad motriz.
El aprendizaje
motor es el
resultado de un proceso de entrenamiento,
donde se ejecutan acciones de diferentes grados de complejidad
que garantizan el dominio de las
habilidades motrices, para lo cual el alumno necesita orientar
sus esfuerzos hacia la actividad en cuestión.
El hecho de estar motivado hacia esta asignatura influye
también en la actitud que
adoptan los alumnos, el modo en que realizan las actividades
así como en el nivel de esfuerzo que requieren para
cumplir con las tareas de la misma. Según Sáenz y
Jiménez (2000), la motivación es básica para
lograr la atracción de los estudiantes hacia la
práctica de actividades físicas.
Según López. A (2006), la
motivación constituye un elemento de vital importancia en
las clases de Educación Física, contribuyendo a
despertar en los alumnos el deseo de realizar actividades de
carácter físico y deportivo,
añadiendo que si el profesor llega
a comprender las necesidades de sus estudiantes puede ser capaz
de encausar y orientar hábilmente el proceso de enseñanza aprendizaje hacia el logro de los
objetivos propuestos.
Saínz. N (2006), plantea que el alumno asiste
sistemáticamente a la Educación Física
esforzándose por cumplir las tareas ya que se siente
motivado para ello, lo que es extensivo además a toda
actividad humana, constituyendo así el aspecto
motivacional el elemento fundamental que impulsa al sujeto a la
acción.
Para realizar adecuadamente las acciones propias de la
Educación Física, los alumnos necesitan orientar
sus disposiciones motivacionales hacia la búsqueda de
ejecuciones que conlleven al éxito.
El disfrute que se deriva de la práctica en esta
asignatura, depende en gran medida de la manera en que los
alumnos logran cumplir los objetivos deseados.
La Educación Física se desarrolla en un
ambiente de
logro, donde constantemente se aprecian alumnos que buscan
obtener el éxito en las acciones que realizan o evitar
fracasar para no ser objeto de críticas o burlas de los
demás.
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