1.
Introducción
3.
Conclusión
4. Bibliografía
El motivo de esta introducción es plantear el
tema a tratar en este trabajo y explicar las razones por los
cuales lo elegí.
A la primera incógnita respondo que lo que voy a
hacer en este trabajo es desarrollar una lista de los principales
personajes mitológicos que aparecen en el Adán
Buenosayres. En ella se hará una descripción y se
contará brevemente su historia junto con una
explicación de su contexto en el libro. De esto
se desprenderá la estrecha relación que existe
entre las características de los seres
mitológicos y sus acciones o
apariciones en el libro de
Leopoldo Marechal.
A la segunda cuestión digo que elegí este
tema porque me atrajo la posibilidad de hacer este paralelo entre
la mitología clásica y la obra leída ya que
es un tema que se repite con bastante frecuencia.
Finalmente quiero aclarar que todas las páginas
nombradas para establecer alguna cita o la ubicación de
algún personaje corresponden a la edición hecha en
1994 por la Editorial Planeta.
2. Los personajes de
la mitologia
clásica
Quiero aclarar de antemano que pude haberme salteado
algunos de los personajes que aparecen en la obra pero si esto
ocurrió se debió a la distracción en la
relectura. También es importante destacar que algunas
figuras nombradas no fueron explicadas por su escasa
participación, ya sea en la novela o en la
historia.
El listado de los nombres es en orden
alfabético.
Afrodita / Venus
Aparece en la página 58 (Capitulo II del Libro
Primero). También aparece con el nombre de Venus (nombre
asignado a la misma diosa por los romanos) en la página
263, entre otras (Capítulo I del Libro Cuarto).
El ideal del encanto femenino. Los
poetas celebran el contorno perfecto de su rostro, el brillo de
sus ojos, la sonrisa de su boca, la pureza de sus
pechos.
Diosa orgullosa y cruel, frecuenta la naturaleza animal
y reina sobre el corazón y
los sentidos
de los hombres. Los romanos la han confundido con la antigua
diosa itálica Venus.
Hija de Zeus y Dione, según Homero.
Según Hesíodo, ha nacido de la espuma del mar
fecundada por los órganos sexuales de Urano que Cronos
había cortado y arrojado al mar. De esos dos
orígenes, Platón,
distinguirá dos Afroditas: una, la hija de Urano,
también llamada Urania, es la noble diosa del
amor puro; la
otra, la hija de Dione, también llamada Pandemos,
es la diosa del amor
vulgar.
Afrodita se casa con Hefestos, pero le engaña con
Ares, el dios de la guerra. De
estos amores nacerán Eros (el amor) y
Anteros (el amor
devuelto), así como Deimos y Fobos (el terror y el miedo).
Pero la frívola Afrodita no tiene sólo un amante.
El reino de Afrodita está en otra parte: es el lugar del
deseo; no se puede escapar de él.
Originariamente, en Roma, era la
diosa de los campos y de los jardines; más tarde se
convertirá es la diosa de la belleza femenina.
Cita: "…el Visitado preguntó al Visitante si no
estaría irrumpiendo en los dominios de la Afrodita
Celeste.". A mi entender lo que este fragmento quiere decir es
que, al ser los dominios de esta Diosa, el amor, la belleza y la
voluptuosidad, se quiere dar a entender que al irrumpir en los
mismos el Visitante, en este caso, se está
enamorando.
Argos
Aparece en la pagina 152 (Capítulo I del Tercer
Libro).
Argos era un gigante con cien ojos que le daban la
vuelta en redondo a la cabeza y no dormía sino con
cincuenta y con los otros cincuenta cuidaba lo que le encargaran.
Porque ese era el oficio de él: celador.
Cuenta la historia que Hera le encomendó que
cuidara a Ío ya que Zeus la estaba buscando porque estaba
enamorado de ella, pero este último mandó a
Mercurio para que mate a Argos. Así fue que el gigante
murió decapitado.
Cuando llegó Hera y vio a Argos con la cabeza a
un lado cogió el ave de ella, que era un pavo real que en
ese momento tenía la cola de color parejo y le
fue poniendo en ella los ojos de Argos de uno en uno. Y esa es la
historia de la cola del pavo real.
Cita:"…hizo batir sus corazones a la sola
visión de las estrellas apiñadas en el cielo como
los mil ojos de un Argos parpadeante…". Creo que con la sola
descripción de este personaje mitológico queda
explicada la metáfora utilizada por Marechal para
describir el cielo estrellado.
Ceres / Demeter
La dueña de la tierra
cultivada. Su dominio es la
vegetación. En ella desarrolla un juego sutil
que liga vida y muerte, y
distribuye los alimentos.
Deméter es hija de Cronos y de Rea. Es la diosa
del trigo.
Perséfone (Coré) ha nacido de los amores de Zeus y
Deméter. Hija única de la diosa, crece feliz y
alegre entre los demás niños del amo del Olimpo,
Artemisa y Atenea. Su tío Hades se enamora perdidamente de
ella. Cuando está arrancando un narciso, él abre la
tierra, ella
lanza un grito de sorpresa, él aparece y se la lleva
consigo a los infiernos.
Decide entonces no volver a subir al cielo y abdicar de
sus prerrogativas de diosa hasta que haya encontrado a su hija.
Este exilio de la diosa, vuelve la tierra
estéril y Zeus, responsable del orden del mundo, exige a
Hades que devuelva a Perséfone.
Cita:"…los iberos de pobladas cejas que
desertando las obras de Ceres, conducen hoy tranvías
orquestales…". Aquí lo que se trata de decir con esta
metáfora es que dejaron de trabajar en la agricultura
(la obra de Ceres) para de dedicarse a manejar
tranvías.
Dafnis Y Cloe
Se encuentran en la página 144 (Capítulo
II del Primer Libro).
Son dos protagonistas de una leyenda griega. Dafnis,
hijo de Hermes y una ninfa. Fue abandonado y lo cuidaron Apolo,
unas ninfas y Pan, quién le enseño a cantar y tocar
la flauta. Se enamoró de Cloe quien le advirtió que
lo dejaría ciego si él se atrevía a
engañarlo con otra. Cierta noche, una hija de un rey le
hizo olvidar su promesa y así Cloe lo dejó ciego ni
bien se enteró. Después de esto Dafnis estuvo
vagando por el bosque cantando y tocando su flauta, hasta que
cierto día murió al caer por un
precipicio.
Cita: "…Lucio y Solveig (¡Dafnis y
Cloe!)…". Esto hace una clara comparación de la,
supuesta, fuerte relación entre los amantes.
Dionisio / Baco
Aparece en la página 221 (Capítulo II del
Libro Tercero). También en la página 236
(Capítulo I del Cuarto Libro).
Era el dios del vino y la vegetación, el cual
enseñó a los mortales cómo cultivar la vid y
cómo hacer vino. Era bueno y amable con quienes lo
honraban, pero llevaba la locura y la destrucción a
quienes lo despreciaban a él o a los rituales
orgiásticos de su culto. De acuerdo con la
tradición, Dionisio moría cada invierno y
renacía en la primavera lo que constituía un
símbolo de la reencarnación de los muertos. Sus
padres fueron Zeus y Sémele.
En su infancia,
Dionisio fue cuidado y educado por los sátiros del bosque
y, en especial, por un dios campestre llamado
Sileno.
Cita (pág. 221): "…¡No, aquellos
no eran hombres de ahorcar sus virtudes en el sarmentoso
árbol de Dionisio!…", Lo que quiere decir es que
Adán, Samuel y Franky no eran de ese tipo de gente que
pierde su sentido por tomar vino.
Hades / Pluton
Aparece Página 94 (Capitulo II del Libro
Primero).
Era el dios de los muertos, hijo de
Cronos y de Rea y hermano de
Zeus y Poseidón. Obtuvo
el poder del
mundo subterráneo después de que junto a sus
hermanos se repartiera el universo tras
haber derrotado a su padre. Le correspondió la peor parte
por ser el hermano menor de la familia.
Allí vivía de forma feroz y despiadada junto a
Perséfone, raptada del mundo superior como única
forma de Hades de romper su celibato. Al contrario de lo que
parece lógico, pues no había plegaria que le
aplacara, no era demasiado maligno. La versión romana de
Hades, Plutón, era más benigna porque se le
consideraba el dador de las riquezas del mundo.
Reside en el mundo de los muertos
también recibe el nombre de Hades. Estaba dividido en dos
regiones: Erebo, donde los muertos entran en cuanto fallecen y
Tártaro, la región más profunda, famosa por
ser morada eterna de los titanes. Era un lugar tétrico,
oscuro y funesto, habitado de formas y sombras incorpóreas
y custodiado por Cerbero, el perro de tres cabezas y cola de
dragón y que Heracles pudo capturar.
Había horrendos ríos que separaban el Hades de la
tierra por los
que se pasaba conducidos por el anciano Caronte. En algún
lugar de todo ese tétrico mundo se situaba el palacio del
dios Hades, con muchas puertas, y lúgubres almas
deambulantes. En los infiernos se juzgaba la actuación de
los muertos y se decidía su destino: el Elíseo para
las buenas almas y el Tártaro para las
malvadas.
Cita: "…toma un cascote y se lo tira con tal
violencia que,
de acertarle, lo hubiera precipitado seguramente al Hades
tenebroso…". Lo que se quiere decir en este fragmento es que si
le hubiera pegado el piedrazo lo hubiera matado y enviado al
infierno, por lo que se deduce que habla del mundo de los muertos
en sí, y no del Dios que lo gobierna.
Hermafrodita
Aparece en la página 38 (Capitulo II del Primer
Libro).
Afrodita tuvo un hijo con Hermes, Hermafrodito, un
hermoso muchacho que una vez iba por la orilla de un lago y una
ninfa se enamoró de él apenas le vio. Pero
él no le puso atención y entonces ella se
escondió detrás de un árbol a atisbarlo
cuando él se tiró a nadar en el lago. Ella se
tiró también en un descuido de él y se le
aferro abrazándole y pidiéndole a los dioses que no
dejaran que se le separara. Su plegaria fue atendida y quedaron
convertidos en una sola persona, que era
hombre y
mujer al mismo
tiempo.
Cita: "…el origen de aquella fatiga (…) la
daba como resultado de las numerosas reencarnaciones que
había sufrido él desde la bipartición del
Hermafrodita original…" que se refiere, metafóricamente,
al origen de la división entre hombre y
mujer, y
allí empieza su vida, que sigue posteriormente con una
cadena de resurrecciones.
Cuando Adán se encuentra con Samuel Tesler en el
infierno de la soberbia también se hace alusión a
Hermafrodita cuando el filosofo dice que ha vuelto a su origen y
luego de sacarse el kimono muestra su cuerpo
mitad hombre y mitas mujer.
Jupiter / Zeus
Aparece en las páginas 81 (Capítulo I,
Libro Segundo) y en la 391 (Capítulo I, Libro
Séptimo).
Era el dios del cielo y soberano de los dioses
olímpicos, en definitiva, el dios supremo. Se le
consideraba también el padre de todos los dioses y los
hombres aunque en el sentido de protector y no de creador
directo. Como se ha dicho era el señor del cielo y de la
lluvia y el creador de las nubes que controlaba con su temible
rayo desde su trono dorado, una de las armas más
poderosas del Olimpo. Su arma principal era la égida que
entregó a Atenea, su ave era el águila y su
árbol, el roble y también la encina, ambos
símbolos de fortaleza. También fue llamado
Zooganios porque prolonga la vida de los animales a
antojo.
Ambas apariciones son representativas de sus características mitológicas por lo
cual citaremos ambas y las explicaremos.
Cita (pag. 81): "…no menos dulce para mi que la
lluvia de Zeus para las mieses cuando la espiga rompe su
envoltura…". En este fragmento se puede apreciar claramente que
se hace referencia a Zeus por ser como se dijo antes el
señor del cielo y de la lluvia.
Cita (pág. 391): "…ciertos muslos
femeninos cuya perfección atribuía él a la
clásica munificencia de Júpiter.". En esta cita se
hace referencia a Júpiter como el dios supremo y padre de
todos los hombres ya que se le atribuye a él la
perfección en la creación de ciertas
mujeres.
Marte / Ares
Se la nombra en la página 173 (Capítulo I,
Libro Tercero).
La violencia
asesina. Es escoltado por la sangrienta Enyo, Eris (la
discordia), Deimos (el temor) y Fobos (el espanto).
Es el dios de los combates y no el dios de la victoria.
Su ímpetu inconsiderado le procura muchos disgustos. Es lo
contrario de Atenea, la diosa mesurada y reflexiva. Ésta
le desarma a veces para impedir que se inmiscuya en los combates
que no le conciernen.
Lucha hasta el agotamiento y varias veces fue dado por
muerto. El Olimpo entonces lo recibe y Zeus mismo cura sus
heridas: un dios no debe morir.
Ares ha sido asimilado en Roma al dios
Marte, uno de los más antiguos y de los más
venerados. Allí era honrado por una hermandad de
sacerdotes respetados, los salianos (Salii Palatini), que guardan
los doce escudos escotados que se dice han caído del cielo
y ejecutan danzas guerreras. Marte se considera como el padre de
Rómulo, el fundador: ha llevado a Roma el imperio del
mundo.
Cita: "El mundo se renueva por la lanza de Marte
– anunció -. Es la lanza que destruye para
reconstruir." Lo que puedo interpretar de este fragmento es que a
Marte le está atribuyendo una mezcla de las
características de Ares (la violencia
asesina) con Marte (el padre de Roma) para decir que
destruye pero a la vez construye.
Mercurio / Hermes
Aparece en las páginas 96 y 125 (Capitulo II del
Libro Segundo), en la página 154 (Capítulo I del
Tercer Libro) y en la página 247 dentro del
(Capítulo I del Cuarto Libro).
Era hijo de Zeus y de Maya, hija del titán Atlas.
Recorrió el mundo buscando el éxito en todas las
labores que hacía y fue considerado por el pueblo dios de
los atletas, de la sabiduría, de las artes, de la escritura, de
los pastores y de muchas otras cosas aunque nunca ocupó de
forma completa ninguno de estos puestos pues muchas de las
actividades que él protegía tenían su propia
deidad. Gracias a su sabiduría e inteligencia
fue llamado de nuevo al Olimpo. Su principal labor era la de ser
mensajero de los dioses y Zeus le concedió por sus
servicios un
sombrero y sandalias aladas así como un caduceo de oro o
varita mágica con serpientes enrolladas y alas en la parte
superior. También llevaba a las almas muertas al Hades o
submundo. Era el responsable de la buena suerte y de la
abundancia pero no es muy aconsejable fiarse de él porque
también era un gran enemigo y muy mentiroso y era el dios
de los ladrones. Hermes (Mercurio) es pues el dios mensajero, y
también el dios de la elocuencia y de los comerciantes,
además de dios de la enseñanza.
Cita (pág. 96): "… y los griegos
hábiles en las estratagemas de Mercurio…"
refiriéndose obviamente a la divinidad del Dios sobre todo
asunto acerca del comercio. De
sus cuatro presentaciones en la obra, ésta es la
más relacionada con sus verdaderas
características.
Minerva / Atenea
Se encuentra en la página 95 (Capítulo I
del Segundo Libro).
Es una de las diosas más importantes de la
mitología griega. Su padre fue Zeus y nació de su
frente sin necesidad de pasar por la infancia, es
decir, siendo ya adulta, cuando Hefesto abrió el
cráneo de su rey para aliviar sus fuertes dolores de
cabeza. Además, siempre fue virgen. Sus atributos
más habituales eran el escudo de Zeus, así como su
"égida" y su rayo y suele llevar un casco coronado por un
penacho o un gallo. Se la asocia a menudo con una lechuza, que
ahora también es símbolo de sabiduría.
Minerva (Atenea) era diosa de las ciudades griegas, de la
industria, de
las artes, de la guerra y
posteriormente de la sabiduría. Atenea era también
patrona del arte de la
agricultura y
de las labores femeninas, especialmente del hilado y del tejido.
Entre sus dones además del olivo, están el arado,
la flauta (aunque la tiró a un río porque le
dañaba la boca y la fatigaba), la domesticación de
los animales, los
barcos y los zapatos. Inventó la escritura, la
pintura y el
bordado. El respeto que el
pueblo le profesaba venía determinado por su capacidad
para alargar la vida de los hombres y las venturas que les
otorgaba para después de su muerte,
así como por la entrega del olivo. A Atenea a veces se le
da el sobrenombre de Zosteria, sobre todo en la región de
Locria y que alude al cinturón que le consagró
Anfitrión.
Cita: "… le habló un instante al
oído [a Gertrudis], y tocándola con sus dedos
invisibles le comunicó un resplandor que nada tenía
de humano…", donde Minerva parece transmitirle cierto odio, con
ciertos poderes respectivos a su relación con la
guerra.
Neptuno / Poseidon
Este personaje aparece en la página 172
(Capítulo I del Tercer Libro). Neptuno vuelve a
presentarse, pero como Poseidón, en la página
318
(Capítulo I, en el Tercer Libro).
Sus padres fueron Cronos y Rea. Siendo
joven intentó conspirar contra Zeus, por lo que
éste le expulsó del Olimpo y le convirtió en
simple mortal. En esa época Poseidón trabajó
para levantar enormes diques que contuvieran las olas que
llegaban hasta Troya a las órdenes de Laomedonte. Poco
tiempo
después se reconcilió con Zeus y trabajó
incansablemente por la ordenación del mundo submarino que
le había sido confiado. Poseidón era dios del mar,
pero también de los ríos, lagos y fuentes y de
las islas que las rodeaban. De todas formas, su poder llegaba
a todos los confine de la tierra. Neptuno hizo a Clito madre de
diez hijos, que reinaron en las diez provincias de la
Atlántida. Sus nombres fueron: Eumelo, Atlas, Amfero,
Eucmón, Mneseo, Autóctono, Elasipo, Méstor,
Azés y Diaprepés. Nacieron en parejas en cinco
alumbramientos.
En el libro Schultze habla de estos hijos, sin
nombrarlos, diciendo "…que los descendientes de Neptuno y
Clito, después de alcanzar en la Atlántida una
civilización asombrosa, se desparramaron en toda la
tierra…", considerando a la Atlántida como la cuna de la
raza humana.
Orfeo
Este personaje aparece en las páginas 390 y 550
(Capítulo I y Capítulo VI, respectivamente, del
Libro Séptimo).
Orfeo era músico, hijo de una de las Musas y de
un príncipe de Tracia, su madre le dio el don de la
música.
Fue quien inventó la lira, y cuando salía a tocarla
al monte salían detrás de él los animales,
las piedras y los árboles.
Un día se lo encontraron las Ménades, que
habían matado a todos sus maridos, y a todo hombre que
encontraban lo mataban. Éstas cogieron a Orfeo, lo
volvieron picadillo y le cortaron la cabeza, la cual tiraron al
río Hebro, y fue a dar al mar, y por el mar iba cantando
hasta que llegó a la isla de Lemnos donde la recogieron y
le hicieron un templo.
Cita (pág. 550): "…veía ya en las
antimusas otra edición de las bacantes que despedazaron a
Orfeo…". Aquí Adán hace referencia a la
desdichada muerte del ser mitológico.
Pomona
Aparece en la página 96 (Capítulo I, Libro
Tercero)
Era la diosa de los frutos. Se pasaba el día
junto a los pastores encargada de podar, regar, cuidar e injertar
los árboles. Muchos dioses campestres intentaron
desposarla, pero ella ignoró a todos cuantos se acercaban
y valló sus jardines con un alto muro. Sin embargo, hubo
un dios, Vertumno, que no se resignó a tales desprecio y
prometió que se casaría con ella. A tal efecto, se
convirtió al mismo tiempo en un pastor, un labrador, un
viñador y un segador y se presentó a la puerta de
su casa pero no fue recibido por Pomona. Finalmente, cuando el
dios se convirtió en amable anciana y fue accesible para
Pomona la convenció, con su elocuencia, de la conveniencia
de tal boda. Vertumno se transformó a su apariencia normal
y se casaron. Pomona es representada sentada junto a una cesta
con frutas y flores o de pie portando dicha cesta, a menudo con
manzanas, en la mano o en el regazo.
Cita: "…y los napolitanos eruditos en los
frutos de Pomona…" Este fragmento forma parte de una
enumeración que hace el autor de todos los que se
involucran en un combate y en la cual describe a todos los
distintos inmigrantes que llegaron al país (tema
recurrente en el Adan Buenosayres) con sus actividades
características. Dentro de estos inmigrantes se encuentran
estos napolitanos quienes se dedican a la agricultura y por eso
dice que son conocidos en los frutos de la Diosa de la
Cosecha.
Polifemo
Se encuentra en la página 68 (Capitulo I, Libro
Primero).
Horrible, deforme y enorme gigante con un sólo
ojo hijo de Zeus y de Toosa. Tenía la cara llena de
arrugas, una boca que alcanzaba hasta las orejas y una espesa
barba. La fealdad de su rostro, no era, sin embargo, comparable a
la fealdad de su espíritu. Aunque se dedicaba a cuidar de
las ovejas, aprovechaba cualquier posibilidad para raptar o
engañar a los hombres, a quienes después ahogaba en
su cueva y comía mientras aún estaban
vivos.
Enamorado de Galatea y no siendo correspondido su amor,
Polifemo asesinó a Galatea, que había sido el
elegido para el lecho conyugal de Galatea.
En el "Adán Buenosayres" Polifemo es un ciego que
vive de las limosnas de los demás, y se rumorea que posee
varias propiedades, el ciego es una persona que
subsiste en esta vida a costa de los que pasan frente a él
y que están dispuestos a donar parte del pequeño
capital que
tienen.
Saturno / Cronos
Se encuentra en la página 321 (Capítulo
II, Libro Quinto).
Cronos es imagen o
símbolo del tiempo, por lo que se le representa como un
viejo descarnado, triste y seco que lleva en sus manos una hoz
que indica que el tiempo lo destruye todo. Además, posee
un reloj de arena y está provisto de alas. El hecho de que
engulla a sus hijos también pone de relieve que el
tiempo destruye todo lo existente incluso en el justo momento de
producirlo. Podría decirse, que Cronos es el dios del
tiempo.
Cita: "… es un hombre de voz meliflua, bien que
su color de tierra,
sus facciones talladas a cuchillo, su torso rústico y
cierta melancolía espesa que mana de su ser como la goma
de un árbol, lo denuncian hijo auténtico de
Saturno.". Lo que hace el autor en este fragmento es establecer
una comparación entre los rasgos físicos del
director de la escuela y
Saturno. También se puede interpretar que esta
comparación va más allá de lo físico
y se intenta dar a entender la vejez del
director al compararlo con el Dios del Tiempo.
Ulises
Aparece en la página 389 (Capítulo I del
Último Libro).
Ulises fue uno de los héroes griegos más
importantes, esposo de Penélope, y padre de
Telémaco; entre todas sus aventuras se destacan su viaje a
Troya, su hábil escape de Polifemo y el oír del
cantar de las sirenas que presenció atado al mástil
de su embarcación. Después de veinte años de
viajes
volvió a su patria donde, con ayuda de su hijo y Eumeo,
mató a todos los que presionaron a Penélope en su
ausencia. Todas sus aventuras son contadas en el libro La
Odisea.
Aparece en el libro cuando Adán enumera a
turistas infernales y se incluye en ellos porque estaba a punto
de emprender su aventura hacia el infierno de Shultze. Ulises
entra en esta enumeración por sus terribles vivencias
durante sus aventuras narradas en La
Odisea.
En esta lista aparecen todos los personajes no incluidos
en el informe y que han
sido encontrados; la razón ha sido explicada
anteriormente.
Apolo. Capítulo III, Libro Cuarto.
Antígona. Capítulo III, Libro
Quinto.
Astarté, Mithra. Capítulo VI, Libro
Séptimo.
Edipo, Adonis. Capítulo XII, Libro
Séptimo.
Europa, Leda, Pasifaeo, Egina. Capítulo II, Libro
Primero.
Euterpe, Melpémone, Tersícore.
Capítulo XI, Libro Séptimo.
Ganímedes. Capítulo VIII, Libro
Séptimo.
Juno. Capítulo I, Libro Segundo.
Como conclusión puedo decir que alcancé el
objetivo
deseado que era establecer una línea de comparación
entre los personajes mitológicos aparecidos en la novela y su
historia. Logré explicar los motivos por los cuales el
autor incluyó estos nombres que, sin una debida
explicación, no pasan de ser eso, sólo
nombres.
También es importante destacar que hay otros
personajes como Ruth que sin estar expresamente dicho el autor da
todas las premisas como para que cada uno pueda establecer un
paralelismo con seres mitológicos, en este caso
Circe.
Finalmente, cabe destacar que si bien no abusa de la
inclusión de la mitología en la obra, Leopoldo
Marechal, la utiliza y con mucho acierto. Generalmente esto lo
hace para establecer comparaciones, metáforas o
comparaciones, las cuales fueron explicadas a lo largo del
trabajo.
- Adan Buenosayres, Leopoldo Marechal, Editorial
Planeta, Buenos Aires,
1994. - http://www.geocities.com/SiliconValley/Pines/3166/griega.htm
- http://www.ciudadfutura.com/tesalia/menu-seccion.htm
- http://hp.fciencias.unam.mx/prome/prome.html
- http://www.tinn.net/home/ariesweb/web–
mythos/grieroma.htm - http://www.ithaca.com.mx/plecat/re/lib/relib27.htm
- http://www.geocities.com/Athens/Parthenon/5917/atenea.htm
Categoría: Literatura
Resumen:
En este trabajo se toman todas las apariciones de seres
mitológicos en la obra de Marechal y se les trata de dar
una explicación en relación a su
participación el la mitología
Greco-Romana.
Autor:
Martín Petrillo
petrillo[arroba]argenet.com.ar