1. Proyecciones de la coyuntura
politico-militar en chile
2. Inicio de la
coyuntura
3. Los escenarios
formales
4. Victoria y asuncion de
lagos
5. Antes del desafuero en la corte de
apelaciones
6. La posición de la
marina
7. El concepto
estratégico
8. Los vecinos y el riesgo
regional
9. El nuevo orden
mundial
10. El desarrollo y la seguridad de
chile transitan a través del mar
11. El poder naval y la estrategia
marítima de chile
12. Respeto a la
institucionalidad
13. Nuevo
presupuesto
14.
Marketing
15. Otros
actores
16. La "Familia Militar"
pinochetista.
17. La derecha y sus medios
de comunicación
18. Estados
Unidos
19. El caso del General
Prats
20. La situación
internacional
21. La ofensiva
gubernamental ante el pre-juicio
22. Despues del fallo de
desafuero
24.
Resumen
1. Proyecciones de la
coyuntura politico-militar en chile
Marco teorico
No existen análisis objetivos de
las coyunturas políticas.
Para entender los hechos aparentemente caóticos de la
realidad, el investigador tendrá que usar, necesariamente,
conceptos de las teorías
sociales y políticas,
que lo orienten en un ordenamiento de sus datos y en una
interpretación de ellos. De otro lado, su acercamiento a
lo que estudia estará teñido de sus preferencias
políticas. Quienes ignoran estas condicionantes, ocultan a
sus destinatarios -generalmente vestidos de "científicos
puros"- que están usando su bagaje ideológico y
tratando de incidir en la política
práctica, al corto o al largo plazo.
Por nuestra parte intentaremos, más que la
objetividad aséptica, la imparcialidad en la
exposición de los hechos de los cuales tuvimos conocimiento.
Estimamos necesario explicitar de qué corrientes de la
filosofía política y la ciencia
política hemos extraído los conceptos fundamentales
que intentan preceder este análisis coyuntural.
Señalamos tres fuentes
principales:
- Marxismo. Nos parece necesario revisar, de la enorme
producción de esta corriente, el
capítulo de "El Capital", de
Carlos Marx,
donde realiza un análisis de la coyuntura del
surgimiento del Estado
capitalista y el papel de las
fuerzas armadas en su consolidación y
estructuración. De W.I. Lenin: "Las elecciones a la
Asamblea Constituyente y la dictadura
del proletariado", donde incluye incluso factores electorales
en su análisis de la coyuntura que llevó al
poder a los
bolcheviches. De Antonio Gramsci, la nota de los "Cuadernos de
la cárcel"(1), titulada: "Análisis de
situaciones. Relaciones de fuerza"
Seguimos de cerca al intelectual sardo, especialmente en lo que
él llama el momento político-militar (del
estudio), diferenciándolo del momento
técnico-militar. - Elitistas: Como es difícil encontrar a los
padres Vilfredo Pareto y Gaetano Mosca, sugerimos las
conclusiones del segundo tomo de Robert Michels, "Los partidos
políticos"(Amorrortu editores, Buenos Aires,
1979).
Weberianos y sistémicos : la conferencia de
Max Weber en
la Asociación de estudiantes, el 28 de enero de 1919, "La
política como profesión"(2) y alguno de los varios
textos sobre el pensamiento
político del autor alemán y de su discípulo
más influyente, Talcott Parsons(3).
En los "Cuadernos", Gramsci se encuentra en una
situación similar al académico. Sus reflexiones son
hechas desde la cárcel, para ser usadas por los
políticos prácticos. No puede ser ya el Secretario
General del Partido Comunista que encabeza un movimiento
popular. Debe resignarse a ser un intelectual "puro", sin
abandonar un ápice su compromiso con las luchas
revolucionarias de su país y del mundo. Sus reflexiones se
aplican en una coyuntura histórica en la que el capitalismo de
Europa
está en auge, por lo que su problema no es el asalto al
poder. En su
lenguaje, le
interesa mucho más la "guerra de
movimientos", que la "guerra de
posiciones". No es un marxista "estructural", cazado por la
"infraestructura" -determinante e inmodificable- de su
época, sino un científico de la política que
busca en ese campo los actores y las acciones que
modifican las situaciones, para descubrir las perspectivas de
cambio en el
conjunto de la sociedad.
En los textos de Marx – si se leen
buscando su pensamiento
político- se encontrará un agudo análisis
del papel de la
violencia
armada en la instauración predominante del modo de
producción capitalista, y la manera como el
uso de la violencia pasa
a ser monopolio
estatal en las sociedades
modernas de su tiempo, para
administrar los "negocios de la
burguesía". Es de alguna manera la misma conclusión
a la que llega Weber:
el Estado
tiene la exclusividad de la fuerza armada
para administrar la sociedad, la de
los que mandan y la de los que (naturalmente) obedecen. En ambos,
no es posible entender la política si no se analizan las
relaciones entre Estado,
Fuerzas Armadas y sociedad o formación social.. Otro tanto
ocurre con el aporte sistémico, en que el "subsistema
militar" entrega claves imprescindibles para entender las
situaciones político-sociales.
Parece indispensable complementar el análisis de
coyunturas y épocas con las concepciones de los
pre-fascistas y de Robert Michels, pues efectivamente las elites
político-militares son las que actuarán
representando los intereses de las clases y los grupos
sociales, y el entendimiento de su formación como
tales y el papel de sus líderes, resulta un elemento
obligado. Con o sin las correcciones de pensadores
democráticos (el mismo Parsons ,su contradictor Wright
Mills, Schumpeter, Dahrendorf, etc.) ,es una constante en los
analistas políticos contemporáneos la
disección de la "clase dirigente" y el seguimiento de su
accionar político.
La coyuntura que se vive en Chile se
inicia aproximadamente a mediados de 1999. En ese período,
alcanza su expresión máxima la crisis del
aleteo de la mariposa tailandesa, la corrida de capitales desde
los tigres asiáticos y su difusión a nivel mundial.
El crack financiero que cae sobre América
Latina (4) golpea duramente al modelo
chileno. La caída de las inversiones
externas e internas y la brusca disminución de la cantidad
y precio de las
exportaciones,
repercuten fuertemente en la sociedad, especialmente por la
generación de altos índices de desempleo,
disminución de los salarios reales y
contracción de la demanda,
provocando un período recesivo que por primera vez
cuestiona la habilidad de los economistas de la
Concertación de Partidos por la Democracia
para sostener las cifras macroeconómicas. El Gobierno de
Eduardo Frei Ruiz-Tagle responde con una ortodoxa política
de austeridad fiscal, no
endeudamiento externo y mantención de las trabas al
capital
extranjero, que ahonda la situación negativa de los pobres
y trabajadores, perjudicando seriamente a la coalición de
partidos que lo apoya.(5).
Dos fenómenos políticos se dan con cierta
simultaneidad. Los actores constatan que el ex Comandante en Jefe
del Ejército y Senador Vitalicio, Augusto Pinochet Ugarte,
seguirá retenido en Londres por la Justicia
inglesa, a petición del Juez Baltazar Garzón, que
intenta extraditarlo a España, y
que la salud del
Dictador se resiente paulatinamente, entrando en franco deterioro
físico y mental. No existe otra posibilidad que tener como
dato de la realidad que ya no será el articulador del
bloque hegemónico que sostuvo a su régimen,
constituido por las transnacionales, los grandes grupos
económicos chilenos, la derecha política, los
mass-media y los Altos Mandos de las Fuerzas Armadas y de Orden
Público. El otro, que aparece persistentemente en las
encuestas de
opinión pública, es el triunfo más probable
del candidato socialista-pepedeísta (del Partido
Socialista de Chile y del Partido por la Democracia),
Ricardo Lagos Escobar. Esta creencia la reafirma su abrumador
triunfo en las Primarias de la Concertación sobre el
abanderado de la Democracia Cristiana y Presidente del Senado,
Andrés Saldívar.
Los Altos Mandos de las FFAA ejercen una presión
exitosa sobre el Gobierno para que
éste cambiara su política de "defender principios, y no
personas", como declararon reiteradamente el Presidente Frei y el
Canciller José Miguel Insulza, y se lanzara a conseguir –
con toda clase de apoyos internacionales viables- que el Gobierno
del Reino Unido lo liberara por "razones de clemencia"(6). El
Canciller de la época, Juan Gabriel Valdés
Soublette (no confundir con su padre, el senador Gabriel
Valdés Subercaseaux), encabeza esta ofensiva, con el apoyo
privado del gobierno norteamericano y el Vaticano, y con fuertes
enfrentamientos con los gobiernos de la Comunidad
europea. Pero paralelamente, es posible advertir que las F.F.A.A.
inician , con ritmos distintos en cada institución, un
reacomodo para enfrentar al nuevo gobierno que se
avisora.
La Derecha levanta como candidato al Alcalde de Las
Condes (comuna del sector de altos ingresos de
Santiago), Joaquín Lavín Infante. Recibe un masivo
apoyo del empresariado nacional, de las empresas con
matrices en
EEUU y , con un exitoso marketing ,
remonta las encuestas
hasta acercarse a menos de 2 % porcentuales de votantes, del
candidato de la Concertación, en la primera vuelta
electoral. En este período se da una clara diferencia
entre los Altos Mandos, que no intervienen a favor de la derecha,
y la "Familia Militar"
, que levanta un verdadero movimiento de
masas de apoyo a Lavín, denominado "Chile, mi Patria", que
rompe la verticalidad tradicional y reúne a Oficiales
Superiores, oficiales Jefes, suboficiales y clases (y sus
entornos familiares).Empieza a expresarse cada vez con más
fuerza una pugna al interior de los oficiales ® con juicios
por detenidos desaparecidos. El otrora poderoso Auditor General
del Ejército, General Fernando Torres Silva (más
conocido por su persecución a los opositores al
régimen militar en su calidad de
Fiscal
Militar), las emprende contra la judicatura castrense por no
defender adecuadamente a los enjuiciados. El General Sergio
Arellano Stark, inculpado en fusilamientos y desapariciones -sin
juicio alguno- de numerosos partidarios del Gobierno de Allende,
alega su inocencia inculpando a los Coroneles ® Sergio
Arredondo y Marcelo Morén Brito, quienes replican con
fuerza. Trascienden versiones encontradas entre el ex Jefe de la
Central Nacional de Informaciones (CNI), General Arturo Gordon, y
el jefe operativo de varias "razzias" de la policía
secreta, oficial de Ejército (R), Alvaro Corbalán.
Los medios se
hacen cargo de la polémica, contribuyendo a difundir los
crímenes por los que se inculpa a Pinochet.
El triunfo de la Concertación en el balotage – si
bien fué por sólo 180 mil votos entre 8 millones de
universo
electoral- entregó a Lagos el enorme poder de la rama
Ejecutiva del Estado. En el país y en el mundo se leyó como
la llegada de un socialista a la Presidencia, treinta años
después del triunfo de Salvador Allende.
Seis días antes, el ex Comandante en Jefe recibe
la clemencia del Ministro del Interior del Gobierno de Tony
Blair, Jack Straw, y regresó en medio de un enorme
despliege de fuerzas militares, especialmente del Ejército
y la Fuerza Aérea de Chile (FACh) con la presencia en el
Aeropuerto de los tres Comandantes en Jefe y el Director General
de Carabineros, y honores de Jefe de Estado. La repulsa
internacional y la percepción
en el Comando del candidato derechista de que su aparición
los perjudica, a pesar de la casi nula respuesta gubernamental,
lo llevaron a recluírse en una de sus casas.
Para entender las acciones
políticas de mayo de 2.000, hay que tener en cuenta que
los procesos de
decisiones que incidían e inciden en las llamadas
"Relaciones civil-militares" (que son, stricto sensu, entre la
dirigencia política y los Altos Mandos) se situaban
formalmente en tres escenarios:
1. La "Mesa de Diálogo": mecanismo
político ideado para lograr un Acuerdo-Marco entre los
extremos de la mesa (Abogados de Derechos Humanos
y Ejército), que pueda dar cuenta a la vez de hechos poco
compatibles : una versión de la historia compartible por los
actores, satisfacción de las demandas de justicia de
los familiares de detenidos desaparecidos y ajusticiados vis a
vis amnistía de los militares implicados en esos
crímenes; acuerdo en los caminos para encontrar los restos
de los detenidos-desaparecidos, así como algunos
señalamientos generales orientados a ser base de las
reformas constitucionales democratizadoras
(desmilitarizantes).
2. El Poder Judicial,
teatro donde se
juega el destino del Dictador (su desafuero y su eventual juicio
como autor intelectual) y el juicio a los ejecutores directos
(Oficiales (R)).Hay tres instancias legales sucesivas: el Juez
que investiga (Juan Guzmán), la Corte de Apelaciones de
Santiago y el tribunal supremo e inapelable, la Corte Suprema de
Justicia.
3- El Parlamento, en donde en definitiva deben aprobarse
las leyes sobre los
temas de la Mesa de Diálogo y las Reformas
constitucionales y legales necesarias para la
desmilitarización, así como cualquier ley orientada a
la aparición de los cuerpos de las víctimas, la
reinterpretación de la amnistía o una nueva. El
Senado o Cámara Alta es la instancia decisiva, porque
allí, la derecha y el pinochetismo cuentan con una
desproporcionada representación dada por el sistema electoral
binomal y los "senadores institucionales" designados, entre los
cuales hay cuatro ex Comandantes en Jefe. La discusión
entre los partidos
políticos y el logro en ella de la aprobación
de la oposición, resultan necesarios para la
aprobación de reformas constitucionales, que requieren un
quorum calificado, no así para las leyes simples,
que sólo necesitan mayoría de los senadores en
ejercicio. Antecedente obligado para el Gobierno es el
acuerdo-marco de la Mesa de diálogo, para ilustrar el
debate de las
iniciativas legales sobre detenidos desaparecidos.
4. Victoria y asuncion de
lagos
El triunfo de Lagos y el retorno del Dictador obliga a
los Altos Mandos a reiniciar el reacomodo. Es un movimiento
sumiso en Carabineros, decidido en la Marina y la Fuerza
Aérea y relativamente distante en el Ejército. Esta
última institución empieza a presionar
además para lograr detener la ola de juicios que
caían sobre el ex Comandante y que podían llevarlo
al desafuero como Senador Vitalicio (fórmula buscada en la
Constitución negociada en 1989 para darle
"intangibilidad") y para terminar con los juicios a los militares
® y activos, por
violaciones a los Derechos Humanos. La "Mesa
de Diálogo", instalada por el último Ministro de
Defensa de Frei, Edmundo Pérez Yoma, presenta severas
inestabilidades. La más grave ocurre luego que el abogado
de Derechos
Humanos Héctor Salazar descalificara moralmente al
Comandante en Jefe Teniente General Izurieta y pidiera su
renuncia al cargo, por su oposición al desafuero de
Pinochet. El representante del Ejército en esa instancia,
General Juan Carlos Salgado, advirtió sobre su retiro de
la instancia por tales declaraciones. El Ministro de Defensa,
Mario Fernández, debió reunir a ambos y lograr que
el jurisconsulto diera explicaciones al representante
militar(8).
Sigue la fuerte presión de la "Familia Militar"
y la derecha más dura (la Unión Demócrata
Independiente y Renovación Nacional, especialmente su
Presidente, diputado Alberto Cardemil.) En este período se
producen dos probables operaciones de
inteligencia.
La primera, exitosa, para defenestrar al Presidente de la
Democracia Cristiana, Gutenberg Martínez, considerado
demasiado obsecuente con el Presidente Electo. La segunda,
rápidamente acallada, que consistió en publicar en
el diario de confianza de la comunidad de
inteligencia,
"La Tercera" , un curriculum con
datos privados
del recientemente nombrado Subsecretario de Guerra
(Ejército), Gabriel Gaspar, del Partido Socialista, con el
obvio propósito de desligitimarlo(9). Pero su calidad de
Profesor de la Academia de Guerra del Ejército y su
solvencia técnica, primaron sobre la maniobra.
La ceremonia de traspaso de mando de Frei Ruiz-Tagle a
Lagos Escobar da cuento del
apoyo internacional con el que parte el nuevo Presidente. Todos
los gobiernos latinoamericanos y los europeos
socialdemócratas y España,
envían delegaciones de alto nivel y saludos
encomiásticos. Otro tanto, aunque en tono menor, hacen
Estados Unidos
y los países asiáticos. Se produce una
irrupción espontánea de sectores populares y
juveniles en las diversas concentraciones, de hondo contenido
cultural, con las que se celebra el acontecimiento. Su nuevo
Gabinete, si bien respeta los equilibrios de poder de los
partidos que lo apoyan, tiene su impronta: un tercio de mujeres,
políticos más jóvenes, no todos del agrado
de las máquinas partidarias, junto a otros de experiencia
y a personas de su absoluta confianza. El Presidente empieza
haciendo lo que le ordena la Constitución: mandar, con apoyo
ciudadano.
5. Antes del desafuero en
la corte de apelaciones
Así como el regreso del Dictador y el triunfo de
Lagos marcan un claro punto de inflexión en la
relación Fuerzas Armadas y Sociedad, el "pre-juicio" o
juicio de desafuero del Senador Vitalicio Augusto Pinochet Ugarte
por la Corte de Apelaciones de Santiago, divide con nitidez la
última etapa de la coyuntura que nos preocupa, que
aún no termina. La política
económica impulsada por el Gobierno de Lagos empieza a
incorporar al Gran Empresariado en su proyecto. La
reactivación adquiere un inusitado ritmo, que se expresa
en un alza del Indice Mensual de Actividad Económica
(IMACEC) de 6.4 % – el más alto desde abril de l998- con
aumento de las importaciones y
la producción industrial más arriba de lo esperado
por los agentes económicos (el "Mercado",en el
decir de los neoliberales). Subieron todos los sectores
productivos, encabezados por electricidad y
gas (16.3 %),
pesca (11.9
%), transporte y
comunicaciones
(8,8 %) e industria y
manufactura(8.2 %)(10). Dos medidas explican
además la alegría empresarial: la liberación
de la obligación de permanencia de un año en el
país a los capitales ingresados y el anuncio de la
supresión del impuesto a la
ganancia a los financistas externos. Los economistas ligados a
este grupo aplauden
los planes gubernamentales, y la Sociedad de Fomento Fabril
(SOFOFA) sube sus proyecciones de crecimiento del Producto Interno
Bruto (PIB) al 7 %
anual. El presidente de la Confederación de la
Producción y el Comercio
(CPC), Walter Riesco, visitante habitual de la
casa-prisión de Pinochet en Londres, aprueba con un
riguroso silencio.El precio del
Gobierno parece ser la constitución de una "Mesa de
Diálogo Social" empresarios-gobierno- trabajadores y la
aprobación de Reformas laborales negociadas (ni lo que
quiere la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) ni lo que existe
actualmente).
El Alto Mando del Ejército trató de
compatibilizar su entendimiento a futuro con el Gobierno y la
"civilidad", con su defensa de un juicio histórico no
condenatorio, la ausencia de desafuero de Pinochet, el
término de los juicios a los violadores "con uniforme" y
unas reformas constitucionales que no les quiten todas las
atribuciones actuales, especialmente aquellas que los transforman
en "garantes de la Institucionalidad"(11).
La "Familia Militar" y la derecha "dura"(Unión
Demócrata Independiente,UDI, y el ala derecha de
Renovación Nacional, RN, presidida por el diputado Alberto
Cardemil (12)), y parte del empresariado agrupado en la
Confederación de la Producción y el Comercio(CPC),
lo tironearon hacia la intransigencia, en tanto las voces
internas que miran a futuro buscaron llevarlo hacia el
entendimiento en el escenario democrático
existente.
El Gobierno de Lagos creyó y cree posible lograr
los acuerdos mencionados en la Mesa, constatanto en un texto
único las posiciones divergentes, y presionar
(retención del nombramiento del sucesor del fallecido ex
Presidente de la Corte Suprema, Augusto Dávila y,
según trascendidos, entrevistas
con a lo menos dos jueces del Ministro de Justicia, José
Antonio Gómez) para que el Poder Judicial
desaforara a Pinochet, pero le pida posteriormente
exámenes que lo declaren "demente senil" (exigencia del
Código Penal para el indebido proceso), y
por lo tanto no haya juicio. La insistencia pública del
Presidente en dejar actuar a los jueces, apuntó con
insistencia a ello. Uno de los problemas es
que si los magistrados siguen el curso legal, vendrán
inevitablemente las condenas a los ejecutores, con lo cual el
juicio histórico quedaría sellado al margen de la
Mesa.
La manera más directa de demostrar el manejo de
la situación por el Presidente, fue a través de los
claros, contundentes y públicos llamados de
atención a las F.F.A.A. El primero, frente al almuerzo con
enorme despliegue de publicidad que
protagonizaron los tres Comandantes en Jefe y el Director General
de Carabineros en un restaurante a las orillas del río
Mapocho, en el barrio alto de Santiago (bautizado como el
"servilletazo", en alusión al "boinazo" o
movilización de las Fuerzas Especiales realizada por
Pinochet para lograr "razones de Estado" del gobierno de Aylwin).
El segundo, frente a una Declaración Pública del
Cuerpo de Generales del Ejército, mientras Lagos realizaba
una visita a Argentina. El
texto
adolecía de inexcusables errores. El Cuerpo trataba un
asunto judicial del todo ajeno a sus prerrogativas y normas
reglamentarias de funcionamiento , reafirmaba la calidad del
Ejército de "garante de la institucionalidad", consagrado
en la Constitución y, en el último punto,
señalaba, sin especificar de qué se trataba, que se
había instruído a los Generales "en relación
a la forma de actuar en los escenarios futuros"(13). Para mayor
abundamiento, no se había informado del texto antes de
darlo a la publicidad, al
Vicepresidente de la República. En ambas situaciones el
Presidente pidió que se le dieran explicaciones, y las
F.F.A.A y en particular el Ejército debieron retroceder,
reconociendo la obediencia al Jefe de Estado. La derecha y
la Familia
quedaron sin bases para contratacar. Por añadidura, en sus
intentos de torcer la voluntad gubernamental y llevarla hacia un
acuerdo político extrajudicial, que los favoreciera, no
fueron acompañados por sus aliados históricos, las
FFAA y los empresarios, que se callaron. El incidente se daba
paralelamente a las acciones de proyección institucional
del Ejército, entre las que cabe mencionar su nuevo y
creciente papel en las Misiones de Paz de la
Organización de Naciones Unidas
(ONU), expresado
con nitidez en el Seminario
Internacional organizado por el Gobierno sobre Operaciones de
Mantenimiento
de la Paz; la aprobación técnica final del cohete
"Rayo" (de producción conjunta entre la empresa
"Royald Ordinance", del Reino Unido, y la empresa
Maestranzas del Ejército, FAMAE) que es parte de un
ambicioso proyecto de
Sistema de
Armas de
Cohetes de Artillería Rayo (SACAR); el anuncio de su
participación en el Seminario
organizado por el Ministerio de Defensa sobre el Servicio
Militar, y su colaboración a través de Sanidad
Militar a la solución de los problemas de
la Atención Primaria de Salud, entre otros.
Mención especial merece la asunción del Comandante
en Jefe Teniente General Ricardo Izurieta, como Presidente de la
Conferencia de
Comandantes en Jefe de los Ejércitos de América, cuya sede será Chile por
dos años, que se inscribe además en la
política de diplomacia militar, en abierta
contradicción con el Pentágono, que busca
minusvalorizar el papel de la Defensa del territorio e
incrementar las tareas policiales y de Contrainsurgencia de los
ejércitos latinoamericanos.Un cuidado artículo, da
cuenta del papel preponderande junto al Comandante en Jefe del
General Javier Urbina (Secretario General de Ejército) y
el General Juan Chacón (Jefe del Estado Mayor), deslizando
que "por sus cabezas no pasa la idea de que hay que hacer
manifestaciones de fuerza. Son partidarios de buscar una
solución definitiva y de comenzar a generar, para ello,
confianza dentro del mundo civil. Como dice una fuente, ambos
responden a la idea de que los "duros-duros" comenzaron a ser una
especie en extinción"(14).
La FACH y la Marina aparecieron proclives al acuerdo a
futuro, pero en la coyuntura hicieron lo que
históricamente ha sido su línea de acción:
seguir al Ejército institucional. Ambas han presentado en
los medios
públicos sus proyectos
estratégicos, y han evitado pronunciamientos
institucionales sobre el desafuero al Dictador. Párrafo
aparte merece la posición de la institución
marítima, dado que constituye una contradicción muy
abierta con la rama principal, el Ejército de
Chile.
La Marina de Chile ha aprovechado el mes del mar y los
conflictos en
las relaciones civil-militares para plantearse ante el
país y la dirigencia política, como la
institución con mayor claridad estratégica,
más disposición de entendimiento permanente en
el Estado y
con menor grado de conflictividad con el Gobierno.
La exposición más completa de la nueva
estrategia naval,
fue formulada por el Almirante Jorge Patricio Arancibia Reyes,
con ocasión del inicio del mes de conmemoración de
las Glorias Navales, en la Escuela Naval,
ante todo el Cuerpo de Almirantes y el Presidente de la
República. Un extracto de su intervención, de su
propia autoría, fué publicado en "El
Mercurio"(15).
Los fundamentos del cambio son
tres:
l- La región está enfrentado un
tránsito desde las amenazas territoriales a la percepción
de los riesgos globales,
con "un escenario internacional impredecible, conflictivo y en
algunos aspectos anárquico"
2- Chile adoptó un modelo
internacional basado en el "comercio
internacional libre y seguro". El 90 %
de él se realiza por mar.
3-Ante tamaña tarea, "se abre la posibilidad de
sumar nuestras fuerzas" a las de otras naciones.
Ello lo lleva a proponer:
"una estrategia de
compromiso con un esfuerzo de participación de nuestros
medios navales en el escenario global, para asegurar el
intercambio de mercaderías que permitan nuestro desarrollo y
sirvan de instrumento de nuestra diplomacia para posicionar y
fortalecer la estatura político-estratégica de
Chile"
En suma, la lógica
que propone es conformar las fuerzas navales para crear
capacidades estratégicas que apoyen la política
exterior del Estado.
8. Los vecinos y el
riesgo
regional
La Armada ve con meridiana claridad la
disminución de las hipótesis de conflicto con
Argentina,
Perú y Bolivia. Luego
de enumerar los avances de paz e integración, concluye: "Nosotros y nuestros
vecinos estamos en posesión de los medios y las
capacidades de causarnos daño político,
económico o militar, pero las señales indican que
no nos anima la intención de hacerlo. Al contrario, el
camino elegido es el de la cooperación y la
complementación y no de la
confrontación".
Constatan, eso sí, las debilidades de algunos
países con segmentos marginados de los benefecios del
desarrollo, o
porque los Estados han permitido que grupos
delictuales o paraestatales le disputen el poder.
Pero no se trata de una lucha entre estados o de
expansionismo de alguno de ellos, por lo que "llaman a la
cooperación para la seguridad
regional y no a la confrontación entre estados". Hay
conflictos
específicos que amenazan esta integración y nuestro propio desarrollo,
como es el caso del narcotráfico, de la guerrilla y de los
Estados depredadores de recursos
naturales.
La bipolaridad terminó, pero no se sabe hacia
dónde se camina. Nos entrentamos "a una situación
de profundo cambio en las relaciones
internacionales". Toca sólo dos aspectos
cruciales:
1-La amenaza nuclear, que a futuro "está
planteada , más que por la existencia de una equilibrada
confrontación de países dotados de armas
atómicas, por la posibilidad que esta tenencia se
amplíe. Dado que Chile no está en la carrera
nuclear y que dichas armas no son aptas para conflictos de
mediana o baja intensidad, "debemos estar dispuestos a enfrentar
conflictos con armamento convencional, particularmente cuando la
realidad nos muestra que las
guerras
actuales producen enormes daños".
2- El segundo elemento que releva el Almirante es "el
del cambio en la forma como el poder se ejerce, materializado por
la legitimación del intervencionismo político,
económico y militar". Condena taxativamente la
intervención en Kosovo ("por sí y ante sí")
y el deterioro del Derecho
Internacional que "ha entrado en un terreno nuevo y
resbaladizo". La conclusión, que no se ha visto en las
otras instituciones
, es clara:
"No estamos ni estaremos ajenos a los efectos de estos
cambios, los que no podremos dejar de enfrentar, ya que la
globalización y nuestro propio interés
nacional nos obligarán a actuar"
10. El desarrollo y la
seguridad de
chile transitan a travës del mar
La Armada hace un acucioso recuento de los
volúmenes de comercio que van a Europa, Africa, Asia,
Oceanía, Centro y Sudamérica y Norteamérica.
Repasa los conflictos que amenazan los mares de esas regiones
(Timor, las Coreas, India y
Pakistán, China y
Taiwan), y las graves repercusiones que tendría para el
país el corte de esas vías. Se detiene en
particular sobre cualquier conflicto que
afecte el funcionamiento del Canal de Panamá ,
por el que se mueve el 40 % del comercio y más de US$
9.000 anuales. Se configura, pues, la nueva amenaza.
11. El poder naval y la
estrategia marítima de chile
El lenguaje del
Almirante se hace en este apartado muy preciso e
inequívoco. Párrafos que lo fundan son:
"La Armada de Chile está en condiciones de ser
instrumento de la acción política exterior del
Estado, no sólo para conservar la integridad de nuestro
territorio, sino para actuar en conjunto con los otros
instrumentos del poder nacional, en la configuración de
escenarios internacionales favorables a nuestros intereses
nacionales"
"Los roles iniciales de la Armada: materializar la
presencia internacional de Chile; asegurar nuestras líneas
de comunicaciones
marítimas comerciales, y proveer de movilidad
estratégica para nuestras fuerzas militares
expedicionarias, vuelven en gloria y majestad"
"Esta realidad nos pone ante la necesidad de visualizar
caminos de aproximación que nos hagan avanzar en el
diseño
de doctrinas y en la obtención del equipamiento que
permitan la interoperatividad entre nuestras fuerzas navales.
Estas medidas no son un fin en sí mismas, sino acciones
previas e imprescindibles para poder llegar a sumar nuestras
fuerzas cuando sea necesario…"
"Estos antecedentes" (la integración regional y
la globalización) llevan a que "las
capacidades estratégicas navales con que contamos
actualmente y aquellas que decidamos adquirir en el futuro,
tienen como uno de sus marcos de empleo la
operación en conjunto con aquellos países con los
cuales compartimos no sólo intereses económicos
sino también intereses políticos y valores que
consideren la paz y la justicia como elementos fundamentales del
ordenamiento institucional"
Desecha que "la acción unilateral de grandes
Estados con vastos recursos " hagan
irrelevante la participación chilena, pues hasta ellos
requieren conformar alianzas y coaliciones que legitimen su
accionar"
Apoya "el grado de compromiso con la paz y seguridad en
los mares", como parte de la carga que corresponde al país
ante la comunidad internacional..
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