La Independencia de Venezuela

1. Causas del Movimiento
   Emancipador
2. Espíritu de
   Libertad
4. Oposición
   Económica
5. Causas
   Sociales
6. La
   Política Borbónica
7. La
   Revolución Norteamericana
8. Las
   Ideas Revolucionarias Francesas
9. La
   Hostilidad de Inglaterra

Causas del Movimiento
Emancipador:

El movimiento emancipador americano se produjo en los
comienzos del siglo XIX con una similitud y homogeneidad entre
todas las colonias americanas que lógicamente tuvo que
llamar la atención de los historiadores y
observadores sociales. Verificado a raíz del gran
movimiento revolucionario francés fue considerado durante
mucho tiempo como
una consecuencia natural de la difusión de las ideas de
los enciclopedistas y de la Revolución
Francesa.

Esta concepción era una resultante del escaso
conocimiento
que de la colonia se tenía. Aparecía, por este
desconocimiento, la Revolución Americana como un
movimiento espontáneo sin antecedentes necesarios y casi
de naturaleza
providencial.

El abismo que los historiadores liberales habían
creado entre la Colonia y la Independencia
contribuía a robustecer la influencia francesa como
determinante en la emancipación. Cuando más se
tendía a señalarle como antecedentes inmediatos de
los movimientos más resonantes del siglo XVIII y comienzos
del siglo XIX, rebelión del Tupac Amaru, levantamiento de
los comuneros del Socorro, tentativas de Gual y España,
expediciones mirandinas.

Esta concepción ha sido revisada. Los estudios
sociales, políticos y económicos que se han hecho
de la colonia americana han puesto en evidencia que la vida
colonial no fue esa larga siesta que nos han pintado los
historiadores, sino que en ella se formaron y cuajaron las
instituciones
que permitieron darles fisonomía propia a los territorios
americanos y que culminaron en el movimiento
separatista.

Considerada hoy la historia americana como un
proceso
histórico contínuo, valorada la colonia en su
exacta dimensión, otros factores aparte de la influencia
revolucionaria francesa son considerados. Algunos de ellos como
determinantes, tal es el económico; y los otros como
concurrentes: espíritu de la libertad de
los hispanoamericanos, la Independencia de los Estados Unidos,
las Reformas Borbónicas, la influencia de los cabildos, la
desigualdad política y social en
la colonia, la expulsión de los jesuitas y un
sinnúmero de factores que el estudio analítico de
la vida americana ha ido arrojado.

1.-
Espíritu de Libertad:

Este espíritu, según muchos historiadores,
tuvo su expresión en el municipio americano, al contrario
del español
que marchaba a su decadencia, y al correr del tiempo fue patrimonio de
las oligarquías criollas que ensayaron desde él sus
primeras armas políticas.
Rica es la historia colonial en esa independencia municipal,
ilustrada con los numerosos litigios que sostuvieron contra las
autoridades políticas coloniales y con algunas empresas
económicas como la Compañía Guipuzcoana. La
célebre fórmula "Obedecer y no cumplir", que tuvo
su mayor vigencia en la Colonia, permitió a los
hispanoamericanos, desde los cabildos, suspender medidas reales
que lesionaban sus intereses oligárgicos o que
podrían traer trastornos políticos. Además,
no sólo desde los Cabildos se realizaron movimientos que
expresaran ese secular espíritu de libertad. Las
fórmulas de "Viva el Rey", "Muera el Tirano", permiten a
las colectividades iniciar movimientos contra las autoridades
coloniales. Con la primera se deja a salvo la fidelidad a la
Corona y con la segunda se busca presionar a ésta para que
ponga remedio a las arbitrariedades de sus delegados coloniales.
El movimiento de Juan Francisco de León se realiza dentro
de este estricto mecanismo de fidelidad a la Corona. Se convoca a
cabildo abierto y se plantean las reivindicaciones de la
Provincia contra la Compañía vasca.

La Influencia municipal en el desarrollo
emancipador ha sido muy discutida. Para algunos su influencia fue
casi nula, tal es la opinión del autor de la "Ciudad
Indiana", Juan Agustín García, mientras que para
otros el Cabildo fue el depositario del espíritu
emancipador. De todos modos hay una evidencia histórica
indudable y es que el movimiento emancipador se originó en
casi la mayoría de las colonias americanas en el
seño de los cabildos y que negocios
públicos y que fueron generalmente los órganos de
expresión de las comunidades criollas, así como los
instrumentos de acción
para reclamar determinadas reivindicaciones. Se puede objetar que
fue el instrumento de una clase, la de
los blancos criollos, pero no hay que perder de vista que muchas
veces los intereses de los criollos, específicamente los
económicos frente a la Metrópoli, se identifican
con los intereses de la población toda. El hecho de que desde su
seño se realizaran los primeros movimientos
revolucionarios, aun cuando presionados por las masas, tanto en
Caracas, como en Bogotá, como en Buenos Aires,
revelan que conservaban una plena vigencia para los días
apasionados de 1810.