Contribución de la modernización del riego por surcos a la sustentabilidad de las producciones tabacaleras
- Introducción
- Desarrollo
- tabaco en Pinar
del Río
Perspectiva a corto plazo del riego en la provincia de
Pinar del Río
Aportes sociales de la investigación
Conclusiones
Bibliografía
Glosario
Contribución de la
modernización del riego por surcos a la sustentabilidad de
las producciones tabacaleras en la provincia de Pinar del
Río
1.1.
INTRODUCCIÓN
El crecimiento vertiginoso de la población mundial y la necesidad ineludible
de aumentar los rendimientos agrícolas encaminados a
satisfacer las necesidades humanas hace que se le conceda una
gran importancia al desarrollo del
riego en todos los países del mundo. Esto se debe a que
una gran parte de la superficie de la tierra se
encuentra ubicadas en zonas secas y semisecas, donde, no obstante
el mejoramiento por medio de la Agrotecnia, el amplio uso de los
fertilizantes minerales, la
mecanización y la quimización, hace imposible
la utilización intensa de los terrenos agrícolas
a causa de la insuficiencia de humedad.
Las investigaciones
realizadas por la FAO han establecido que el crecimiento de la
población en el mundo supera el crecimiento de la producción de alimentos. Este
problema se agudiza particularmente en los países del
tercer mundo, donde según datos de esta
organización, pasan hambre más
de 600 millones de personas y 1500 millones se alimentan mal.
En algunos países subdesarrollados con déficit
en la producción agrícola, intentan reducir
simultáneamente la desnutrición y la dependencia de las
importaciones de
los países desarrollados. Muy a menudo los instrumentos
utilizados para lograr estos objetivos son
la quimización de la agricultura y
los proyectos de
riego, medidas que generalmente traen aparejados
importantes cambios en los modelos de uso
del suelo y un efecto
negativo sobre los indicadores
ambientales como las condiciones del suelo, la Salinizacion del
mismo y la calidad y
disponibilidad del agua.
(Söderbaum, 1987).
En otras palabras, el riego de los cultivos agrícolas
no solo propicia beneficios económicos, sino que un mal
manejo del mismo, puede incidir negativamente en el ecosistema y
comprometer las futuras producciones en las tierras beneficiadas
con esta actividad.
La FAO calcula que el 50 % de la tierra
regada en todo el mundo se ha salinizado y la productividad
esta bajando. Sin embargo, no hay señas de que el riego
pierda favor entre los agricultores, los gobiernos o los donantes
de ayuda exterior. En efecto, sigue siendo el medio principal,
para superar las limitaciones del clima para
aumentar la producción de alimentos y desempeña un
papel cada vez mas importante en el Tercer Mundo, donde
según cálculos del Banco Mundial,
ya hay mas de 20 millones de hectáreas bajo riego. A pesar
de que estas no son el 20 % de las tierras cultivadas en el
mundo, en ellas se vierte el 60 % de los fertilizantes aplicados
y de ellas se recoge el 40 % de las cosechas. El capital
invertido es de 1500 millones de dólares y continua
aumentando a razón del 2 % anual (Carruthers, 1995).
De aquí se deduce que no podemos aspirar a altas
producciones soslayando el uso del riego, de lo que se trata es
de realizar un buen manejo del mismo para minimizar los efectos
nocivos como la Salinizacion y la erosión,
esta ultima causa una perdida de suelo a nivel mundial de 1400
millones de toneladas anuales.
El proceso
erosivo se incrementa con las actividades agropecuarias y
forestales desarrolladas por el hombre,
alterando en diferentes grados el ecosistema (Espinosa el al,
1998).
Mantener el equilibrio
entre la producción de alimentos, el crecimiento socio
económico y la protección del medio
ambiente, constituyen algunos de los retos más
importantes a los que se enfrenta hoy la sociedad
actual. En el sector agrario es evidente la necesidad de que el
futuro de la agricultura vaya unido a nuevos objetivos en la
producción de alimentos que amplíen la
visión actual, que enfaticen una dimensión
meramente técnica y una visión global que contemple
aspectos de equidad
social, viabilidad económica, estabilidad política y
preservación ambiental (Juana Labrador y Altieri,
1994).
La preocupación central de las nuevas tendencias en la
práctica agraria esta encaminada a la sustentabilidad,
tanto de las producciones como del proceso productivo.
El objetivo de
nuestro trabajo es
demostrar la contribución de la modernización de la
técnica de riego por surcos a la sostenibilidad de
la producción tabacalera en la provincia de Pinar del
Río y su incidencia social.
1.2.
Desarrollo
Todos los datos estadísticos confirman que la
agricultura es el sector clave para el manejo del agua, tanto en
la actualidad como en las próximas décadas. Sin
embargo, el sector del desarrollo rural del agua en el momento
actual enfrenta dificultades, comparado con otros sectores
competitivos, para obtener la prioridad que merece en los foros
internacionales. Son necesarios argumentos nuevos y fuertes para
dar al agua en la agricultura el lugar que le
corresponde.
Página siguiente ![]() |