Indice
1.
Introducción
2. Estructura y Función del
Aparato Respiratorio
3. Proceso Fisiológico de la
Respiración
4. Proceso Mecánico de la
Respiración.
5. Patología Pulmonar Mas
Frecuente
6. Bibliografía
El cuerpo humano
guarda aún tantas maravillas como misterios. Tan
formidable máquina no ha terminado de desvelarnos sus
incógnitas, y suscita numerosas interrogantes e
inquietudes cuando, de repente, se desajusta. Este trabajo
práctico dedica, pues, un espacio importante al aparato
respiratorio. No sólo a su funcionamiento, como
también a sus enfermedades y males mas
frecuentes. Y para hacer mejor llegar la esencia de las
explicaciones se ha tratado de no usar un lenguaje muy
árido, evitando términos muy exclusivos de la
medicina.
De esta forma le invitamos a que puedan conocer mejor uno de los
sistemas
esenciales para la vida, el que oxigena las células y
el que realiza todas las acciones
relacionadas con el intercambio de gases.
Les invitamos a que conozcan el fabuloso Aparato
Respiratorio.
El Sistema
Respiratorio
Las células
del cuerpo requieren un suministro constante de oxigeno para
llevar a cabo los procesos
químicos necesarios para la vida. Como resultado de estos
procesos, se
forma un producto de
desecho, anhídrido de carbono, el
cual debe salir del cuerpo. El oxigeno y el
anhídrido de carbono
continuamente están intercambiándose, tanto entre
el cuerpo y la atmósfera, como
dentro del cuerpo, mediante el proceso
conocido como la respiración. El sistema que lleva
a cabo este intercambio de gases es el
sistema
respiratorio.
El sistema
respiratorio consta de los pulmones y una serie de conductos
de aire que
conectan los pulmones con la atmósfera exterior.
Los órganos que sirven como conductos son: La nariz, la
faringe, la laringe, la traquea y los bronquios. Estos conducen
el aire a las
profundidades de los pulmones y terminan allí en sacos con
paredes delgadas, los alvéolos, donde el anhídrido
de carbono se intercambia por oxigeno.
2. Estructura y
Función
del Aparato Respiratorio
Nariz. La nariz consta de 2 porciones, una externa y
otra interna. La nariz externa es un armazón triangular de
hueso y cartílago cubierto de piel. Debajo
de la superficie están las cavidades nasales, los dos
orificios externos de las fosas nasales. La fosa nasal
está dividida en dos por el septum nasal, y esta separada
de la boca por el paladar. La fosa nasal calienta, humedece, y
filtra el aire inalado. La filtración es efectuada por los
cilios de la membrana mucosa que tapiza las fosas nasales. Los
cilios son numerosos procesos largos, microscópicos
dotados de un movimiento
vibrátil que ocasionan que las materias que atraviesen la
superficie hacia el exterior del cuerpo. El movimiento
ciliario es importante en el drenaje de los senos.
Seno aéreo. Los espacios de aire en varios huesos de la cara
y la cabeza se comunican con las fosas nasales. Estos senos
aéreos llevan el nombre del hueso en donde se encuentran.
Estos senos son tapizados con una membrana mucosa que continua
hasta el tapiz de la cavidad nasal.
Faringe. La faringe o garganta conecta la nariz y la boca con los
conductos inferiores de aire y el esófago. Esta
está dividida en tres partes: la nasofaringe, la
orofaringe y la larofaringe. Esta continua como esófago.
Tanto el aire como el alimento pasan a través de la
faringe. Esta lleva el aire desde la nariz hasta la laringe, el
alimento desde la boca hasta el esófago. Las paredes de la
faringe contienen masas de tejidos linfoides
denominados adenoides y tonsilas.
Laringe. La laringe o caja de voz conecta la faringe con la
traquea. Esta está situada en la parte superior y anterior
del cuello. La laringe tiene la forma de una caja triangular. Se
compone de nueve cartílagos unidos por ligamentos y
controlados por músculos esqueléticos. El
cartílago tiroides es el mayor. Este forma el punto en el
cuello denominado "la manzana de Adán". La epiglotis es
otro cartílago. Durante la deglución, la epiglotis
cierra la laringe, el paladar blando cierra la cavidad nasal y
los labios cierran la boca. De este modo el alimento baja por el
único conducto que queda abierto: el esófago.
Tráquea. La tráquea o gaznate, es un tubo que se
mantiene abierto por medio de los anillos cartilaginosos. Esta
conduce el aire desde la laringe hasta los bronquios. La
tráquea está tapizada con cilios y glándulas
mucosas cuyas secreciones suministran una capa viscosa que impide
la entrada de polvo y tierra a los
pulmones.
Bronquios. La tráquea se divide para formar los dos
bronquios. Un bronquio entra en cada pulmón y allí
se divide en varios tubitos denominados bronquíolos o
tubos bronquiales, que conducen el aire hacia los últimos
espacios de aire dentro de los pulmones.
Pulmones. Los dos pulmones son órganos esenciales de la
respiración. Están contenidos en la
cavidad del pecho donde están separados por el mediastino.
Los pulmones se dividen en lóbulos, cada lóbulo
contiene muchas "bolsitas" de aire denominadas alvéolos.
Cada pulmón está encerrado en dos sacos membranosos
superpuestos denominados pleura.
3. Proceso
Fisiológico de la Respiración
Las paredes de los alvéolos pulmonares son muy
delgadas y es por ahí donde pasa el oxígeno
hacia la sangre y se
extrae el anhídrido carbónico. Este intercambio de
estos 2 gases en los pulmones se denomina respiración
externa. El oxígeno
que entra en la sangre es
transportado por los glóbulos rojos en combinación
química
con la hemoglobina. La sangre, oxigenada en los pulmones, regresa
al corazón,
luego es impulsada por las arterias hacia los capilares.
Aquí el oxígeno de la sangre pasa a las
células de los tejidos y el
anhídrido carbónico de las células pasa de
vuelta a la sangre para ser transportados nuevamente por las
venas hacia el corazón.
El intercambio de gases entre la sangre y las células se
denomina respiración interna.
4. Proceso
Mecánico de la Respiración.
La acción de respirar, el ciclo de
inspiración y expiración se repite aproximadamente
de 14 a 20 veces por minuto en un hombre adulto
en reposo, pero esta cantidad puede variar de acuerdo al
tamaño, peso o a la actividad que la persona realice.
La respiración es principalmente regulada por un centro
respiratorio en el cerebro. El
centro respiratorio es sensible a los cambios en la
composición de la sangre, temperatura, y
presión, y regula la respiración de
acuerdo a estos factores y a las necesidades del cuerpo.
Inspiración. Este es un movimiento activo. El diafragma,
el músculo grande en forma de copa que forma la base de la
cavidad torácica, se contrae, aplanando su superficie
acopada superior y aumentando el tamaño de la cavidad.
Aproximadamente al mismo tiempo, los
músculos adheridos a las costillas se contraen para elevar
y ensanchar las costillas. Esto aumenta mas el tamaño de
la cavidad. El aire pasa a los pulmones y estos se dilatan,
llenando la cavidad dilatada.
Expiración. En el descanso, durante una respiración
tranquila, esto es un movimiento pasivo. El diafragma se relaja y
se mueve hacia arriba. Los músculos adheridos a las
costillas se relajan, permitiendo que el pecho se aplaste. Estas
acciones
reducen el tamaño de la cavidad torácica,
permitiendo que el retroceso elástico de los pulmones
dilatados saquen el aire. Se puede expeler mas aire de los
pulmones mediante la expiración forzada. Esto se hace
mediante la contracción de los músculos
abdominales, empujando el diafragma hacia arriba, y los
músculos adheridos a las costillas, aplastando el pecho
para comprimir los pulmones y sacar el aire. Cuando la
respiración se vuelve forzosa como con el ejercicio, la
expiración también se vuelve activa.
Volumen. Cerca
de 500 centímetros cúbicos de aire es inhalada y
exhalada durante una respiración normal. Mediante una
inspiración profunda es posible inhalar 1500cc
adicionales.
Sonidos. Los sonidos ocasionados por el aire que circula en los
pulmones cambian con algunas enfermedades. Estos cambios,
que se oyen con el estetoscopio, ayudan a diagnosticar las
enfermedades de los pulmones tales como la pulmonía o
tuberculosis.
5. Patología
Pulmonar Mas Frecuente
En esta sección trataremos de describir de la
forma más simple y concisa posible las enfermedades mas
comunes, mas contraídas por las personas en el aspecto del
aparato respiratorio. Así también citaremos los
signos clínicos de estas enfermedades, a que medico se
debe consultar y cual es el tratamiento más probable a ser
aplicado en el paciente.
Asma. El asma está caracterizada por la exageración
de la sensibilidad de la tráquea y los bronquios a los
factores irritantes, que producen un estrechamiento en las
vías respiratorias. Generalmente, los ataques aparecen por
las noches, con un cambio extremo
del clima. El
paciente despierta por la noche t tras sentir cierta
opresión torácica, comienza a estornudar o toser,
hasta que se ve obligado a sentarse en la cama a fin de lograr
que su respiración se normalice. A pesar de ello sigue
respirando y tiene la sensación de que le falta aire.
Signos clínicas. El enfermo puede prever cuando va padecer
una crisis por los
signos que la preceden. LA crisis se
caracteriza por una dificultad respiratoria intensa, muy
angustiosa, con sensación de ahogo y necesidad de salir al
aire libre, a veces, incluso la sensación de que los ojos
van a salir de sus órbitas y muerte
inminente.
Médico a consultar. Neumólogo, alergista.
Tratamiento. Se basa en la teofililina, medicamento
broncodilatador y antiinflamatorio. Es aconsejable buscar
también el agente alergizante para evitarlo siempre que
sea posible. Existen formas de asma muy graves a las cuales son
necesarias recurrir a un ambiente
hospitalizado especial.
Bronquitis. La bronquitis es una inflamación de los
bronquios, generalmente de origen infeccioso, bacteriano o
vírico; en ocasiones puede ser de origen irritativo por
inhalación de una sustancia tóxica, como el
tabaco, por
ejemplo. Puede ser aguda o crónica.
Signos clínicos. Fiebre de 38-39 grados con dolores
articulares o musculares; accesos de tos intermitente, en un
primer estado sin
expectoración; dolor torácico. A
continuación, aparece una expectoración, al
tiempo que el
dolor disminuye; a veces hay dificultad respiratoria. No se habla
de bronquitis crónica más que aparezca una tos
intermitente o permanente durante mas de 2 años al menos 3
meses al año.
Médico a consultar. Neumólogo.
Tratamiento. Se basa en la supresión del producto
tóxico irritativo causante, como el tabaco, y en el
consumo
adecuado de un antibiótico; se prescribe una kinesiterapia
respiratoria a fin de aprender a tener una tos eficaz de modo que
las secreciones no obstruyan los bronquios.
Edema agudo de pulmón. El edema agudo de pulmón es
una enfermedad mortal debida a la presencia de líquido en
los pulmones.
Signos cínicos. Comienzo repentino, muchas veces nocturno,
que comienza por una sensación de opresión
torácica y de cosquilleo de garganta que provoca accesos
de tos; el paciente se sienta un poco inclinado hacia delante,
cubierto de pulmón, pálido, y presenta una gran
dificultad respiratoria. El paciente escupe una especie de crema
blanquecina, pegajosa y maloliente.
Médico a consultar. Con extrema urgencia: hay que llamar
al servicio de
urgencia o a una de ambulancia.
Tratamiento. Se basa en los diuréticos, la morfina y los
tónicos cardiacos. El enfermo de ser hospitalizado en una
unidad de cuidados intensivos.
Embolia pulmonar. La embolia pulmonar se define como la
obliteración de la arteria pulmonar por un cuerpo
extraño circulante en la sangre. De ello resulta un
defecto de oxigenación de los pulmones.
Signos clínicos. Comienzo súbito, dolor
torácico intenso en un solo lado; dificultad respiratoria
con tos seca; la piel se pone
"azulada"; gran angustia, a veces, con tendencia sincopal.
Médico a consultar urgentemente. Cardiólogo o
neumólogo.
Tratamiento. Se basa en la hospitalización, los
anticoagulantes, el oxígeno y una vigilancia exhaustiva.
Se trata de una enfermedad mortal; el diagnóstico no es fácil, pues a
menudo existen pocos signos que puedan orientar al
médico.
Pleuresía. La pleuresía es una enfermedad debida a
la presencia de líquido en la pleura.
Signos clínicos. Dolor limitado normalmente a un punto del
costado bazal. A veces muy vivo o, por el contrario punzante. Se
observa dificultad respiratoria dependiendo de la abundancia del
derrame en la pleura y del estado del
pulmón subyacente; tos seca, en accesos, desencadenada por
los cambios de posición. A veces está presente la
fiebre con alteración del estado general.
Médico a consultar. Neumólogo.
Tratamiento. Basado en la hospitalización y en el drenaje
de la pleura afectada, así como en el tratamiento de la
enfermedad que haya producido la pleuresía.
Neumonía. La neumonía es una afección
infecciosa del pulmón, debido a una bacteria o un virus.
Signos clínicos. Comienzo súbito. Hay fiebre
elevada de 39-40 grados; dolor torácico intenso como una
punzada en el costado, recrudecido por la tos y la
inspiración profunda, dificultad respiratoria. A veces, en
caso de afección bacteriana se observa un enrojecimiento
del pómulo, en el lado del pulmón afectado.
Médico a consultar. Neumólogo.
Tratamiento. Basado en la hospitalización y en la toma de
antibióticos adecuados.
Neumotórax. El neumotórax es una enfermedad debida
a la presencia de aire en la pleura. Sobreviene frecuentemente en
le adulto joven deportista, de aspecto longilíneo.
Signos clínicos. El dolor sobreviene brutalmente en una
persona en
perfecto estado general después de in esfuerzo o durante
el reposo. Es una punzada violenta en el costado, a veces una
verdadera "puñalada", otras veces es más discreto
pero se exacerba por la tos o el esfuerzo. Hay dificultad
respiratoria inconstante. A veces el neumotórax no produce
ningún signo clínico; se descubre fortuitamente,
después de una radiografía pulmonar.
Medico a consultar. Neumólogo.
Tratamiento. Basado En la hospitalización, en la que se
podrá, gracias a técnicas
especializadas, retirar el aire de la pleura. La kinesiterapia
respiratoria, una vez se haya hecho desaparecer el aire, es
eficaz parea evitar secuelas respiratorias.
Tuberculosis.
La tuberculosis que afecta a los pulmones, muy contagiosa, debido
al bacilo de Koch. No tratada, esta enfermedad es mortal.
Signos clínicos. Alteración del estado general con
fatiga, falta de apetito, adelgazamiento, fiebre; tos
persistente, seca o húmeda. Dolor torácico o
dificultad respiratoria son poco frecuentes al principio.
Médico a consultar. Neumólogo.
Tratamiento. Basado en la hospitalización, el aislamiento
del enfermo, la declaración de la enfermedad por el medico
y los antibióticos antituberculosos. Existe una vacuna
antituberculosa obligatoria en muchos países, que se
administra en los primeros meses de vida: se trata de la
BCG.
Enciclopedia Temática Ilustrada "Consultora"
Volumen III,
Capítulo "Anatomía",
Sección ‘La respiración y la
fonación"
Pagina 45, Subtitulo "Enfermedades de la tráquea y los
bronquios"
Libro
Registrado del Ministerio de Guerra de los
Estados Unidos
"Enfermero y Oficial de Sanidad", Capítulo "Sistemas y
Aparatos del Cuerpo", Sección "El Aparato Respiratorio",
Paginas 125, 126, 127.
Enciclopedia "Larouse" Ilustrada
Volumen III, Capítulo "Guía de Enfermedades",
Sección "Clasificación de Enfermedades por
Especialidades Médicas", Subtítulos "Asma",
"Bronquitis", "Embolia Pulmonar", "Edema Agudo de Pulmón",
"Pleuresía", "Neumonía", "Neumotórax",
"Tuberculosis". Paginas 267, 269, 272, 273, 275.
Autor:
Pablo Josué Bareiro Bolfoni