Monografias.com > Sin categoría
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

Alí Primera Biografía Documentada y testimonial (página 6)




Enviado por José Millet



Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8

Los hijos habidos de su unión con
José Padilla, crecerían más holgados,
gracias a la ayuda de los hermanos mayores, a la consecuencia de
José y la propia Carmen Adela, que en ningún
momento de su existencia "bajó la guardia" o se
dedicó al descanso bien ganado, que ya reclamaban sus
años.

De la nueva "camada" comienza a destacarse
en el canto, animado por sus hermanos, principalmente por
Alí, Emil, quien toma como nombre artístico el de
José Montecano, en honor a su padre y al cerro que protege
la parte noroeste de San José de Cocodite, el pueblo natal
de Carmen Adela.

La muerte de
Héctor "Bagüeuto", como lo llamaba Alí, sacude
violentamente a Carmen Adela, cree desfallecer y se siente sin
valor, la
alegría y la fortaleza se le escapan por cada uno de sus
poros, tampoco la juventud la
acompaña ya. Conoce el sufrimiento y el dolor ha estado antes
presente en ella, pero, la muerte de un
hijo, es una experiencia que no tiene patrón en el
sentimiento de ningún ser humano, ni siquiera en los
animales.

La responsabilidad de ser el alma y
vértice de una gran familia formada
dentro de un amasijo de lágrimas, sufrimientos, esfuerzos,
alegrías y esperanzas, que a cada paso se multiplica
brotándole nuevos sarmientos; la hace recoger las
fracciones de su valor deshecho y estructura una
nueva coraza, que le permitirá irradiar nuevamente su
entusiasmo y alegría. Comienza a sentirse madre de todo el
mundo y amplía su familia con la legión de amigos y
compañeros de sus hijos. Los Primera no han dejado de ser
un bloque compacto de querencias y compartires y el elemento
aglutinante de ese proceso sigue
siendo Carmen Adela, líder a
través de la ternura, la alegría y la
responsabilidad, sin una voz altisonante de mando, a la que
podría tener derecho, de su familia original y de las
subsiguientes, derivadas de
ésta.

El destino le tiene preparada otra
escaramuza a Carmen Adela, para tratar de doblegar su
espíritu, ya repuesto y en renovada efervescencia, con la
ayuda del triunfo de sus hijos y el despuntar de los más
jóvenes. Se ha convertido en una bella anciana dedicada a
hacerles la vida agradable a los demás, a repartir
bendiciones, a atender sus achaques, a recortar notas de prensa y guardar
secretos y reconocimientos de los triunfos de sus hijos, sobre
todo del "Cantor Mayor" Alí
Primera, a recibir las constantes visitas de sus hijos, de
las compañeras y compañeros de éstos, de sus
nietos y de los nuevos amigos que llegan a través de sus
descendientes, pero que se quedan en su querencia, debido a ella
misma y su gran virtud para repartir y recibir amistad.

En medio del sosiego, compartido con
José, bastante enfermo y casi ciego y, de esa paz ganada a
fuerza de
vida, le toca recibir la infausta noticia, en aquel despertar del
sábado 16 de febrero de 1985, que Alí Primera, su
hijo cantor del pueblo venezolano, ha muerto en Caracas, a causa
de un fatal accidente, cuando se dirigía a su hogar. No
alcanzaba a creer la muerte de su hijo cantor, juguetón y
zalamero. La confusión nuevamente hace presa de ella. El
pueblo venezolano había perdido su "Cantor Mayor", ella
había perdido a su hijo Alí Rafael. En esa
ocasión, durante la vigilia en el velatorio de "Balikia",
como Héctor llamaba a Alí, mientras las chimeneas
de la refinería vecina le impregnaban al cielo paraguanero
sus alientos dantescos, roznando como dragones, casi con
ingenuidad, pudo decirnos:

–Hijo, este es un dolor muy grande, tan
grande como cuando se murió Héctor.

José en su lecho de enfermo y ya
definitivamente ciego, desesperado por la muerte de Alí,
sólo alcanzaba a decir a quienes se acercaban a
él:

–¡murió la luz!,
¿Quién me va a enterrar con tambores
ahora?

José moriría tres años
más tarde, tal vez ensamblando recuerdos de su vida con
Carmen Adela y los muchachos y de sus años en Cumare,
cerca de "Cerro Atravesao", península adentro, donde
había nacido hacía más de ochenta
años.

Carmen Adela sobrevivió a
José ocho años y a su hijo cantor, juguetón
y zalamero, once años. Ese tiempo le
sirvió, una vez vuelta a parar, para recoger los
testimonios de la querencia del pueblo venezolano hacia su hijo
Alí. Su casa se convirtió en un santuario, donde a
diario desfilaban: estudiantes, trabajadores, gente del pueblo,
niños
mujeres y seres de todos los estratos sociales, económicos
y políticos del país. Carmen Adela asumió su
postrera responsabilidad, se convirtió en la preservadora
del recuerdo de su hijo cantor, pero no con tristeza, no;
sentía alegría relatando los recuerdos del hijo,
describiendo, como experta cicerone cada pintura, cada
dibujo, cada
afiche, cada recuerdo que de Alí, comenzó a
coleccionar con la ayuda de amigos y compañeros del cantor
mayor.

Alcanzó a ve el asomo de los
triunfos artísticos de los hijos de Alí, su hijo
cantor, juguetón y zalamero, también los triunfos
de su otro hijo cantor, a quien ella misma, delante de amigos y
extraños, llamaba por su nombre artístico y no el
de Emil, tal vez para no generar dudas sobre el reconocimiento
que ella le hacía.

Pero su organismo feliz de 83 años,
ya se sentía realizado y ya no estaba para seguir viviendo
las penurias, que a distancia, veíanse asomar sobre el
país y así, un día, aprovechando un descanso
de la resolana, aprestándose para la entrada de la
primavera, la frescura paraguanera, hizo el paneo final sobre su
vida y su alegría y serenamente cerró los ojos
definitivamente. Nos dejó definitivamente el 29 de junio
de 1997, pero su sonrisa, su rostro alegre y tierno, su
espíritu paraguanero, se reflejan en el testimonio de su
obra. Nadie alcanzará a realizar una descripción cabal de lo que esta mujer, para
muchos anónima, significó y significa para todos
los venezolanos y los pueblos de América
y el mundo, que recibieron y aún reciben los cantos,
proclamas y poemas del
cantor mayor Alí Primera.

–¡Caray con estos
paraguaneros!—suelen decir en la sierra coriana—Se
vinieron de sus pueblos huyéndole a la "hambruna del
año doce, cuando el verano casi los mata a toditos, tienen
familias hechas aquí en los pueblos serranos, pero cuando
tiran la mirada por encima de Coro, desde aquí y ven que
una nubecita se forma más allá de los
médanos, dicen llenos de orgullo: "Se está formando
un tiempo en Paraguaná, pa"las faldas del cerro Santa Ana,
ya va siendo hora de sembrar maíz,
millo, ajonjolí y tapiramas.

Carmen Adela era una paraguanera alegre y
optimista. Supo aguantar los veranos de la vida y ahora vive en
la eterna primavera del recuerdo.

Eudes, octubre 1997.

¡QUÉ MI CANTO NO SE
PIERDA!

A un año de la ida del panita
Alí Primera.

A: Monche y a Sol

A: quienes siguen la tarea de
Alí

EUDES NAVAS SOTO.

En uno de sus discos, Alí recalcaba
la idea de que nunca había compuesto una canción
adrede. La expresión indica espontaneidad, más que
el verdadero sentido de la palabra, pero dicho por Alí,
suena a metáfora y uno logra entender la
significación de la palabra. La efusión,
podría agregarse. Realmente no hay nada en la obra de
Alí, que no tenga un propósito, que no lleve una
arenga o transmita un mensaje. Entonces, lo de adrede,
verdaderamente es adrede, ligar ese gran sentido poético y
esa compleja y completa disposición para la
composición musical y la interpretación misma y la
personalidad de la escena, para mantener permanentemente una
alerta, una voz dirigencial y un amor
inconmensurable, hacia un pueblo del cual se es parte, no
sólo en la palabra sino en la acción
y en el sacrificio; es tarea propuesta y fundamentada, es
más, es un compromiso. Alí lo entendió
así desde un principio, desde que comenzaba a tararear
canciones por los pasillos de la U.C.V. y mucho antes
también y, ya nada o poco importó el beneficio
personal, la
idolatría de los o las fans y el sueño de la madre
y los hermanos por verlo con su flamante título de
Ingeniero Químico.

No es casual la inclinación hacia la
lucha popular que se opera en Alí Primera.
Pertenecía a una generación responsable que quiso
tomar para si la tarea de introducir cambios saludables en la
vida nacional y para lo cual no vaciló inclusive en
aceptar el uso de la fuerza y de las armas. Esa
generación, incorrupta en sus principios y
postulados, generó todo tipo de hombres y mujeres, a los
que los estudiosos siempre le consiguen ubicación y
explicaciones en el tiempo y en el espacio, pero definió
también verdaderos hombres y mujeres, que sin buscar
razonamientos y racionamientos, mantuvo y ha mantenido por encima
de las propias conveniencias, la conveniencia del pueblo de donde
salieron, que los vio formarse y que siempre ha mantenido en
ellos, su último hálito de esperanza en una
sociedad que
cada vez es más esclava y que cada vez es más
victima del imperialismo,
de su idea y de su efecto, venga de donde venga.

Para los músicos, las composiciones
de Alí son comprometidas y difíciles, si se atiende
a la métrica y a las normas de la
composición; esto por las variantes y la
enfatización nada académica que Alí
ponía en sus canciones, pero para la gente común,
para el pueblo, eran canciones que fácilmente se
tarareaban apenas salían al aire. Los
estribillos sabían a lo que el pueblo gusta saborear. Y
eran o son canciones compuestas sin ensamblaje, es decir, una
canción era esa canción y no producto de un
retazo de varias cosas inconexas. Las canciones de Alí,
iban en su música, desde las
cadencias románticas y tiernas de los madrigales y
romanzas antiguas, pasando por las notas armónicas de la
composición popular ligera, hasta llegar a la
enérgica y contagiosa fuerza del estribillo. Ese recorrido
hace que el pueblo las sienta como suyas y las cante o tararee
aún sin manejar a conciencia el
altísimo contenido social y poético de esas obras.
Además, la variedad melódica y armónica,
prepara al oyente común, a quien va dirigida, a escoger
los compases más cónsonos con su sentimiento
musical o su captación o simplemente, su gusto. Retaba
además a los arreglistas o músicos de oficio a
ejercer toda su sapiencia y creatividad,
para lograr al final una gran obra musical con fundamentos serios
sin mermar sus sentimientos de pueblo.

Por otra parte, la expresión
poética de las letras de las canciones de Alí
Primera se pueden someter a cualquier juicio y pueden salir o no
airosas de esas apreciaciones en cuanto al criterio personal o
"académico" del crítico, pero NUNCA podrán
ser tildadas de acomodaticias o fingidas y menos aún de
ininteligible. Eran frases verdaderamente honestas salidas de lo
más interno de un hombre donde
convergía el sentimiento y la realidad, atizado todo esto
por la vivencia y por la vocación de servir, usando para
ello la propia vida, sacrificando inclusive lo que le era
más querido, si la meta
significaba la dignificación del pueblo y el logro de las
reivindicaciones de éste.

Hurgando en los discos que Alí
dejara para la posteridad y que ya están convertidos en
asientos de la canción universal, conseguimos frases que
parecieran sacadas de los clásicos de la literatura universal y con
un contenido filosófico que bien valdría la pena
hacer un alto en el camino de las apreciaciones, para no
desoír el mensaje y hasta la arenga que estas frases
pudieran significar. En su LP "La patria es el hombre",
Alí casi amenaza a la minoría dominante que desde
la época colonial, en una forma u otra maneja nuestros
destinos; y dice: "La tristeza de mi pueblo será
convertida en fuerza". La sabiduría y refranería
popular podría traducir esa frase en aquello de "no hay
mal que dure mil años ni cuerpo que lo resista" o "sacar
fuerzas de flaquezas, etc. Lo cierto es que el pueblo entiende la
palabra y la guarda en el talego de sus recursos para
expresarla algún día en sus reproches. Decía
Alí, "la resistencia de un
pueblo es un potro desbocado", entendemos que la opresión
y la falta de oportunidad para decidir en los destinos de su
país, dejando de lado naturalmente la maquinación
del voto y la demagogia electorera, hace que el pueblo nutra sus
fuerzas internas, reprimidas, hasta el momento de darle salida,
lo que hará con la fuerza y el brío de un potro
indómito. Como los
volcanes. Agrega:
"…sino distinguir a fondo los que van comiendo dioses y
defecando demonios", casi pugnando por arengar al pueblo a
conocer a sus esclavistas cobijados en logias infranqueables y
con la excusa del legalismo, para esconder la verdadera
pasión de serviles de sentimientos extraños a
nuestra tradición e historia. "Somos esclavos de
esclavos, nuestro amo tiene amo y a mí me duele más
esta esclavitud", dijo
además Alí en una de sus canciones.

La entrega total de la idea y de la vida
misma de parte de ese gran compatriota que tanto quiso a su
pueblo y a su país, queda reseñada en frases como:
"…quema entonces mi guitarra, pero que crezca la llama", o
en "soy feliz al saberme de todos" o "no por cantar debemos
eludir el hermosos deber de estar presente en la definitiva
barricada". Frases llenas de sentido y de responsabilidad,
apartadas de los convencionalismos y de las complacencias y que,
aún pasadas las guerras de
independencia
y la federal, y experimentadas tantas formulas de la vida
institucional, persisten en el formulario de las peticiones y
propósitos, toda vez que los postulados por los cuales el
país se ha desangrado, no se han logrado, sino que se han
dejado en carpetas, mientras se atiende a "tareas" más
urgentes, como el engaño y la corrupción y hasta la entrega total de la
identidad y
hasta de la soberanía, atendiendo a las complacencias
de la gran oligarquía internacional que nos acogota y que
maneja como marionetas a la oligarquía clasista nacional,
que pretende a cada momento cobrar en divisas y
favores, el hecho de permanecer tranquilos, dejando a otros el
mando, mientas ellos detentan el poder.

"Que mi canto no se pierda" decía
Alí en sus primeras canciones y luego en "La noche del
jabalí", agregaba, más experimentado: "Ahora
pongámonos en marcha que la palabra sin los pasos es una
palabra muerta"; y como para dar fe de lo dicho y de su deseo de
traducir el ideario de la creatividad comprometida con el pueblo,
Ali recordaba en una hermosísima canción, su
entrega a la lucha común: "Yo amarré los recuerdos
al árbol de la noche y fui en busca del sol" y
verdaderamente se dedicó a buscar al sol en cada
rincón del país, en cada hombre y en cada
sueño y a fabricar rayos de sol si no existían y
"fue sumando corazones para vencer madrigueras" y se hizo amigo
de la vida para entender y ayudar a los otros a entenderla y la
llamó: "…dulce y buena camarada".

Alí Primera, aparte de su propio
valer como entendedor del sentimiento popular y de cultor de la
solidaridad, era
tan efusivo en su palabra, que aún cuando cantaba, se
olvidaba que tenía micrófono y esforzaba su
garganta al máximo, porque cantaba de verdad, sin mermar
el sentimiento y sin cuidar la garganta, decía:
"…es mejor perder el habla, que temer hablar,
sostén con tu palabra el corazón
del pueblo". Solitario Quijote en la marcha de la unidad popular,
no como la conciben quienes se reparten los favores del pueblo y
creen que por representarlo, de acuerdo al status, pueden y
logran convenios oscuros a favor de los intereses de sus toldas o
personales, más que los del pueblo, decía en una de
sus canciones: "…si la solidaridad es un arma , la
canción también lo es, y más aún si
es lengua del
pueblo" y casi explicando el esfuerzo para quienes lo
creían sólo un iluso, Alí decía: "Mi
sólo esfuerzo es un simple viento pero con el viento del
pueblo tendré la furia de un vendaval" y en uno de sus LP,
decía además, como participando en un diálogo:
"¿Con una pequeña llama yo puedo hacer un gran
fuego?. Seguro, puedes
hacerlo, pero antes junta la leña".

La temeridad del ostracismo y el no dar la
cara con la propia cara, no eran párrafos del libro de
Alí Primera, él era conductor y soldado, sembrador
y regador, ideólogo y ejecutor, esto lo resumía en
unos versos nada plañideros, más bien llenos de
alegría de su LP "La Patria es el hombre" que dicen: "el
árbol cuando florece siempre descubre su sitio y
enseña su nombre".

En una oportunidad alguien escribió
unos versos que nunca han debido existir, donde, seguramente
apasionado por su creencia política o social o
simplemente por desconocimiento total de quién era en
realidad Alí Primera, lo emplazaba en el comercio de la
palabra y de la canción. Alí se resintió
mucho cuando lo supo, pero nunca tuvo una expresión
hiriente hacia el poeta que lo insultaba. Se nos ocurre ahora que
una buena respuesta a aquello serían las palabras del
mismo Alí: "Canta el gallo en la mañana, pero nadie
ha averiguado cuando es que está triste el gallo" o en
aquella bella frase de su canción "Tía Juana" que
dice: "Pero cabalgo en el potro hermoso de la esperanza y esa no
me la quitarán".

Tanta frase bella, tantas metáforas,
tanta filosofía, tantas cosas contienen las
canciones de Alí Primera, que haría falta el
concurso de estudiosos para poder lograr una dimensión
más exacta de lo que su palabra, su música y su
vida significó, significa y significará en nuestra
bella patria, a esa patria que él mismo describiera
así: "amo a la mujer que
busca desesperada al hombre, no al macho. Ella es la patria". Y
los jóvenes que hoy cantan sus canciones podrán
entender en el transcurrir del tiempo, que no hubo una sola
palabra que pudiera perderse en la arenga definitiva de ese gran
venezolano de nuestro tiempo, paisano del terruño
pequeño, que un día se echó la guitarra al
hombro, con su caja de resonancia llena de deberes, de
sueños, y de entusiasmo, para recorrer el país
alertando al pueblo sobre sus derechos a disfrutar de las
bonanzas de esta tierra de
libertadores y hombres de bien, lastimeramente subyugada por
intereses que no formaron parte de los escuadrones que nos dieran
el derecho a vivir como país soberano. Alí
estará en el minarete en constante vigilia, mientras su
canción viva y exista un joven que la cante y le acomode
versos y compases.

A un año de su partida recordamos
sus dos premonitorias frases: "los que mueren por la vida no
pueden llamarse muertos" y "Pido que mis camaradas me despidan
con canciones, flores rojas, puño en alta, y me prometan
seguir luchando por la alborada, que también es
camarada".

Coro, febrero 1986 Eudes.

ALÍ Y SU GUITARRA

No sé ahora a quién
conocí primero, si a su voz o a su guitarra, eran lo
mismo, las dos tenían el mismo tono, el mismo color, la misma
tesitura y el mismo sentimiento.

Alí hubiese podido hablar a
través de la bocaza de la guitarra, y la guitarra ha
podido emitir su sonido por la
boca de Alí, abriéndose espacio entre los bigotes y
la barba del poeta cantor, eran lo mismo. Por eso jamás
concebí a Alí con otra arma en la mano que no fuera
su guitarra y ésta no pudo tener mejor sostén de
sus sonidos que la del cantor mayor.

En una ocasión que Alí fue
huésped de nuestra casa, dejó, sobre la cama de uno
de mis hijos la hermosa guitarra, adarga melodía,
refugiada en su estuche negro adornada con marbetes de los varios
países, por donde ambos habían dejado sus cantos,
parecía reposar. Entonces, con cuidado abrí el
estuche para cerciorarme si en realidad quien tranquilamente
reposaba en el regazo de terciopelo rojo era realmente la
guitarra o era Alí.

Desde la puerta, sin que yo me hubiese
percatado de su presencia, el cantor mayor me observaba.
Entró al cuarto, cerró el estuche con cuidado,
aseguró los broches, tomó el estuche por el asa, la
levantó con su preciosa carga interior, me vio sin
reprocharme y dijo:

—Se da cuenta, poeta, que uno no puede
dejar el corazón en reposo mientras los pies caminan.
Ambos deben orientarse a un mismo destino.

—Así es poeta— le
respondí.

Coro, 28-03-92

(firma autógrafa de Eudes
Navas)

………………………………………………………………………………………………………

CARTA PARA
ALÍ PRIMERA

Eudes Navas Soto

a: Carmen Adela y a Sol

a: Asisclo

Querido hermano:

Los años pasan sobre uno como
gacelas huyendo de las llamas. Apenas se distingue el tiempo
porque la tarea es permanente y apenas haz resuelto algo, al paso
siguiente debes parar a revisar lo hecho y, en ocasiones debes
mantener lo hecho, que debido a la dinámica vital, o ya está en desuso
o debe repararse. No es que sea una rutina, más bien es
una tares dinámica y constante. Tú y yo y muchos
más, sabemos que hacer cuando lo extraordinario se vuelve
rutinario, lo sabes tanto, que en eso se te fue la vida y quienes
aún soñamos manteniéndonos aún en una
sola pieza, esperamos agotar la última energía en
pos de la victoria final.

Panita, he querido escribirle en
ocasión de sus cincuenta años, porque aún
cuando sé que desde el lugar de los escogidos donde usted
está, están enterados de los aconteceres mundiales,
pienso que si comparto con usted algunos pareceres que van "desde
la rabia a la ternura", a lo mejor logro luego clarificar algunas
cosas, que ni manejo, ni entiendo. Usted fue y sigue siendo mi
amigo y juntos compartimos muchos sueños, se acuerda de
los versos de Alberto Cortez: "…cuando un amigo se va/
queda un tizón encendido/ que no se puede apagar/ni con
las aguas de un río/ cuando un amigo se va/ queda un
terreno baldío/ que quiere el tiempo llenar/con las
piedras del hastío. Usted se fue en materia y se
multiplicó en esencia, porque "los que mueren por la vida,
no pueden llamarse muertos", no obstante Panita, le confieso, que
a pesar de sus consejas, de nuestras convicciones, esa ida nos
dejó muy triste, a pesar del mejor destino que a usted se
le tenía asignado, el hecho de no vernos como antes, de no
poder continuar construyendo sueños y amasando realidades
en segundos, que convertíamos en siglos, con el
tesón y la entrega, a pesar de todo eso, hermano
Alí, no es tan fácil tolerar las adversidades
aún cuando las conozcamos de antemano y sepamos
además, que adversidades son si las vemos
egoístamente, pero que no son tales, si quien nos deja
marcó
una estela indeleble en su pueblo; lo que hizo usted
hermano.

De todas maneras quiero contarte cosas. Sin
proponértelo, estás participando en la
campaña electoral, que han seguido desde tu ida. Tus
canciones retumban por los altavoces de los candidatos y,
fíjate que ni hablar te dejaban y marcaban y enlistaban a
quienes coreaban tus himnos a la esperanza y a la vida, lo que
realmente eran tus canciones y lo siguen siendo en otras voces o en la
tuya misma a través de las grabaciones que dejaste y que
por arte de magia se
han multiplicado. Eso me da soberbia, lo confieso, pero a la vez
me reconforta pensar que tu mensaje ha calado en lo más
hondo del sentimiento popular y la gente busca a diario,
oír tu mensaje, de eso se han dado cuenta también
los expertos electorales y usan tus cantos para llamar la
atención de los votantes, que de otro modo,
a lo mejor ni caso harían. Se oye de lo más
chévere, una por ejemplo que dice: "…si te sientes
falconiano", luego cortan la música y tu voz y agregan,
"vota por fulano". Las caravanas de los eternos manejadores de
los poderes de este pueblo, se pelean a fuerza de decibeles el
privilegio de que tu voz y tu canción se oigan más
fuertes, no importa panita que partido sea, todo el mundo usa tus
canciones, le repito, aunque me da una cierta ira, ver que ahora
si se recoge su mensaje y sobre todo por gente que lo
persiguió a usted y pretendió más de una vez
callarlo, le repito también, me alivia pensar que ese era
la idea de su mensaje, lograr que se multiplicara y llegara en
forma urgente y continuada a los oídos del pueblo,
imagínese panita y en manos de quien quedo la tarea,
caray, hay que ver que el mundo da vueltas. Usted, debe estar que
se caga de la risa de ver a los figurones de los partidos
"nuestros", pelearse por ser más "alicista" que la propia
Carmen Adela o que Sol. Le repito, eso no es malo, pero de todas
maneras yo le prometo panita, estar pendiente, no vaya a ser que
de repente aparezca su foto en la casa de alguno de estos
partidos con un emblema en su pecho, le prometo ocuparme de que
eso no suceda y le prometo además tenerlo al tanto, a
través de mi nieto Juan Manuel, a quien seguramente ya has
conocido, de lo que por acá acontezca, le digo a
través de él, porque yo hablo a diario con ese
carajito que se nos escapó cabalgando una nube durante una
ventisca de cuaresma paraguanera. "Vamos compa carajo, que para
amanecer no hace falta gallinas sino cantar de gallos"
repítale ese estribillo al carajito, para que él me
lo recuerde a diario cuando nos comunicamos, pero no se lo
enseñe al coro celestial, no vaya a ser que se le alcen al
viejo bueno de la barba blanca, porque como están las
cosas, cualquier cosa se espera. Enséñele esos
bellos cantos infantiles que usted sabía hacer
aquí, aquel que decía o dice: "la piel de mi
niña sabe a caramelo" o el lucerito, o los tantos cantos
al amor, a la vida y a la esperanza que usted hizo como arroz,
como dicen los chamos ahora.

Alí, ninguna carta está
completa sino lleva su porción de chismografía.
Algunas cositas te voy a contar, por ejemplo, ¿recuerdas a
Secundino Urbina? Sí el médico, escritor, y
demás hierbas, pues él hizo una ponencia sobre ti y
la poesía
de tus canciones para presentarla en el II Simposio de
literatura falconiana en Punto Fijo, hace cosa de cuatro
años. Un bello, acucioso y honesto trabajo de ese
médico-sociólogo que es Secundino; pues bien, le
cayeron encima unos guardianes de la poesía esa rara,
abstracta y hasta vacía y se discutió la
poesía en las letras de tus canciones, no se llegó
a nada. Secundino guardó su ponencia y cuando tiene
ocasión, la desempolva y vuelve a la carga. Lo mejor es
que quienes no admitieron, en esa ocasión la
jerarquía poética de tus letras, hoy en día
se desviven por aparecer en cualquier cosa que huela a Alí
Primera y hasta a uno le toleran las irreverencias, porque y que
uno era panita tuya. Miguel Ángel, si vale Miguel
Ángel Paz, el masista, mi compadre, que actualmente lo
tienen bailando en un tusero porque lo quieren raspar del partido
y del puestecito en la universidad,
porque tiene le lengua brava y dispara contra cualquier
pájaro de mal volar que se ponga a tiro, escribió
un bello libro sobre ti y tu obra, un sustancioso ensayo con
miras más bien de vademécum sobre tu trabajo y tu
vida, por encima de cualquiera otra pretensión
también llevó lezna, como dicen los alpargateros de
mi barrio, porque según y que te "endiosaba". Mezquindades
pendejas hermano, pero a Miguel Ángel se le acabaron los
libros y todo
el mundo quiere ahora saber más de ti y de tu trabajo y
eso panita, es positivo. Todavía tengo vivo en el recuerdo
la expresión de tu rostro y las palabras adoloridas que
pronunciaste:

— ¡Qué buena verga panita,
que desconocimiento! ¡Que verga!— cuando por desgracia me
correspondió, en cuido del cariño, enterarte de
unos versos publicados que hablaban mal, no sólo de ti,
sino de tu tarea, de tu intención, de tu obra. Sólo
me atreví a decirte a modo de consuelo, con mucha
delicadeza en mis palabras que no lograba disimular mi malestar y
arrechera:

—No le pares a eso, el tiempo se encarga,
esas son vainas de un viejo juglar deslumbrado por el celo de una
militancia caduca mal entendida y gozoso de halagar al mandatario
de turno, agrediendo a quien lo adversa y denuncia como
sostenedores de este sistema de cosas
que nos ha venido acogotando por más de treinta
años, amparados en la sombra de esa bella palabra:
DEMOCRACIA,
tan mal entendida y usada solamente en sus más
mínimos efectos.

Panita Alí, no te tocó vivir
acá entre nosotros esas eclosiones sociales de dos
febreros, productos, uno
de la intolerancia popular a la indiferencia y al antiparabolismo
de los amos "oficiales" de las vainas. Es decir, les llenaron el
gorro a los pobres y éstos se arrecharon de verdad,
verdad. Se sacudieron pero los aplastaron. Pero la rabia persiste
y aún no da paso a la ternura que sabemos llegará.
Está latente y crepita a diario y así, en otro
febrero, jóvenes venezolanos, responsables y hastiados de
tanta sordera, de tanta arrogancia oficial y de tanto abandono
popular, pusieron sus vidas al servicio del
deber ciudadano y popular. Los cercaron, pero como dice el
refrán "del cuero del
tigre muerto éste", se les teme más ahora que
están encerrados y aislados que cuando tomaron sus armas
para responder a sus responsabilidades. Y es panita, que como
usted lo dijo y nosotros lo multiplicamos: "…Siempre
volará la idea/ aunque se pudran los huesos…"…Con el sol a medio
cielo/ y teniendo el cuerpo preso/ sentí cabalgar el
canto/ profundo en el sentimiento/ y he seguido en la pelea/
aligerado de peso". Y es la palabra hermano, es la idea panita,
es la verdad. "si no hay verdad en los cantores/ entonces no
habrá verdad/ ni en el canto ni en la esperanza". Vale
preguntarse: ¿Cómo se exterminan la verdad y la
dignidad?

Conociste entre nosotros, los tipos de
planes a los que pretenden que nos acostumbremos y aceptemos. El
plan de
machete de impacto rápido de los cuerpos represivos y los
de muerte lenta llamados "planes de la nación". Por fortuna no experimentaste el
"paquete económico" ni el "bono alimentario" ni el
"paquete o bono escolar", etc., donde el pueblo ha sido usado
como conejillo de indias tratando de convertirlo en corderos
sumisos, experimentándose verdaderas frustraciones,
manadas de mendigos, flaquezas de la personalidad,
pérdida del orgullo y desviaciones de la dignidad, etc.,
de esas que naturalmente le cobrará la vida y la historia.
Dígame eso de la que desde tu sitio de seleccionado ya
debes saber, disculpa lo extenso, pero es que uno tiene el
pensamiento
ejercitado y las palabras a tropel "…échala tu
palabra contra quien sea de una vez, así sepas que viola
el cielo, échala". Debo aclararte que quienes somos
militantes de tu canto y compartimos los deberes del pueblo y
exigimos sus derechos, no nos amilana el hedor, "…porque a
pesar de este cuadro/ no nos gana el pesimismo/ el pueblo
marchará unido/ a luchar por sus derechos/ y
buscará trecho a trecho la victoria popular".

Lo voy a dejar panita, pero recuerde que
"…estamos armando nuestras propias canciones, con nuestras
propias conductas", por eso me provoca contarte que en esa
población serrana de Cabure, emitimos un
manifiesto en ocasión del centenario del nacimiento de
Agustín García, leído por Porfirio
Garcés, un médico cabureño hermanos del
"Colorado" Servando Garcés, buena gente como éste,
que entre otras cosas dice: "…aquí en lugar de las
diásporas, al norte de los solos y revelados, un
pájaro derrota con su vuelo la oscurana…resistir a
la desidia, al facilismo acomodaticio del poder; romper la
complicidad del silencio e instaurar de manera emancipadora
los valores
soberanos del pueblo: ha sido una eterna lucha que ha iluminado
en Venezuela a no
pocos mártires y redentores…Apostar a la belleza es
rescatar nuestra dignidad mancillada, insurgir contra las alas de
la muerte y descubrirnos en la felicidad colectiva. Una victoria
de la luz pasa entonces por derrotar la tiranía de las
tinieblas…Decidir el futuro y su imaginaria morada exige
cancelar la celebración del oprobio e inventar el alba". No se
ha secado la siembra hermano. Hasta el encuentro.

"Canta, canta compañero

Que tu voz sea disparo

Que con las manos del pueblo

No habrá canto desarmado"

Salúdame a tanta gente buena que
está contigo. Los míos te abrazan.

Hasta la victoria siempre

Eudes

DESPUES DEL GALLO ALI PARA CANTAR
MÁS FUERTE

Eudes Navas Soto

Aquella madrugada nos quedamos esperando la
carroza

Ni siquiera el pañuelo del
saludo

Recogió esas dos lágrimas de
duelo

el pavimento oscuro de la hora de
noche

y el viento frió y oscuro de las
horas de noche

y el vehiculo oscuro de las horas de
noche

y el lamento sin ruido

y abrir los ojos de repente en la placida
siesta

el músculo sonriente entregado a su
ocio

el oído
callado con las últimas notas

y la glotis tranquila

y los labios cerrados –

¡ Por fin!

Cerrado por descanso

Cerrado por un rato

..nisiquiera hubo un grito

(tan gritos callados y tantos ayes
yertos)

De repente el vehiculo hizo el viaje
perenne

y el olor de los ruidos confundieron las
cosas

_¡parece que es Ali!

Alguien dijo en la ruta

_¡no puede ser Ali!

le respondió el silencio

¡ tanto Ali por las aires!

¡ tanto Ali por las
calles!

_¿por que ha de ser Ali?

Sin aun falta quien nos cante-

cuando la noticia se hizo presente en la
madrugada de la distancia

ya el llanto no encontraba
aposento

y hubo necesidad de abrir una ventana en el
silencio

para poder llorar …hoy hace un
año de todo esto.

PARA LA PLACA EN LA PLAZA ALI PRIMERA DE
CORO

ALI PRIMERA DE CORO

"El mensajero de la esperanza

Nació en Coro 31 de octubre de
1941

Murió en Caracas 16 de Febrero
1985

"…No hay palabras más
duraderas ni más alta

Que la que sostiene el pueblo.

¡Verdad es!

……………………………………..

"Alguna vez iremos todos

hasta la tierna herida de la
patria

y se la cerraremos con un enorme
beso.

Por eso canto

y le escribo un epitafio a la
amargura

( Yo soy militante de los
sueños)

ALI PRIMERA

EL PUEBLO CORIANO EN SU HONOR

Coro 16 de Febrero de 1991

………………………………………………………………………………………………………

Nota del editor:

Alí y su diálogo con las
muñecas de Zobeyda

Nuestras clases
sociales dominantes han consagrado las profesiones de abogado
y de médico como los paradigmas por
los que deben encaminarse los hijos. Todo lo que quede fuera de
éstas o es menospreciado o situado en términos de
la más absoluta marginalidad.
Casi son echadas a la hoguera del desperdicio otras nobles
ocupaciones como la de la maestra, verdadera institución
pública ante la que hay que quitarse el sombrero. Esta fue
la elegida por Sobeyda, pero no para ejercerla desde un
salón de clases, sino desde aquel otro al que raramente la
gente quiere consagrase: el del seno de las comunidades donde
vive la mayoría del pueblo. Por su vocación de
llevarlo a vías de realización "contra viento y
marea" fue tildada de loca y tal menosprecio la llevó a
conocer al panita Alí en uno de sus continuos
desplazamientos por la geografía espiritual
de Venezuela.

El relato de Sobeyda, escrito por ella en
su libro Autobiografía de una muñeca cimarrona,
resulta el testimonio más elocuente de la sensibilidad
humana de Alí, capaz de hacerlo percibir y llevarlo a
aquilatar el valor en los exponentes más recónditos
de Venezuela, así como de su peculiar manera de incorporar
a diversos ámbitos de la cultura
popular su proyecto de
nación
inspirada en el pensamiento y el ideal social de Simón
Bolívar.

No en vano Sobeyda, sus muñecas y su
vocación de "maestra ambulante" le inspiraron esa
canción que nos estremece. Por eso ambas, con el fino
tejido y los colores de la
patria, estuvieron presentes en la siembra del poeta. Y en los
cuatro metros de la patria liberada en que él nos ilumina
con sus ojos, permanecerán, como parte del arsenal de
regalos que le ofreció su pueblo a este combatiente,
aguerrido y sin descanso, que fue Alí.

———————————————————————————————————

Testimonio de Sobeyda Jiménez, La
Muñequera.-

Un día salimos al encuentro de
Alí Primera, cuando supimos que iba para Acarigua, lo
buscamos Eusebia y yo, con la "Declaración de las
Muñecas de Trapo". No podíamos dejarlo para
después, desde hacía tiempo la gente nos
creía amigos, me preguntaban por él y yo contestaba
cualquier embuste. Esa tarde, cuando lo encontramos, tocamos la
puerta de la casa donde se encontraba y una a una, se fueron
asomando por la ventana y se alejaban riendo las personas que
estaban allí, hasta que por fin salió Alí,
le dije yo te amo y te ando buscando, porque las Muñecas
queremos darte un beso. Él me mandó a pasar
adelante, nos sentamos y estuvimos conversando unas cuatro horas
sin parar.

Cuando me quedaba callada, me decía,
seguí hablando panita, hablá más; me puse
ronquita de tanto hablar esa tarde calurosa, cuando se
selló nuestra amistad. Le leí el cuento "Un
viaje Novelero" de mi propia inspiración, dos poemas y la
"Declaración de las Muñecas de Trapo" en homenajea
Aquiles Nazoa. Lo dejé borrachito de Muñecas. A
partir de ese encuentro, toda mi familia lo acompañamos en
la Canción Bolivariana, el mejor homenaje para el
Libertador en el Bicentenario de su Nacimiento.

Cuando Alí Primera, presentó
en el Tocuyo, "Caña Clara y Tambor", canción que le
hizo a este pueblo, estuvimos presente y nunca , ni antes,
después, vi alegría colectiva como aquella: mujeres
con vestidos rojos, verdes, azules, amarillo, bailando y
cantando; muchos hombres con botellas de cocuy, rociándolo
por todas partes, fueron muchas las goticas de aguardiente claro
que nos cayeron a las muñecas en aquella inolvidable
"Canción Bolivariana"; la gente gritaba: ¡Que bailen
la Muñeca! ¡Que baile la Muñeca! Y Alí
le decía: ¡Hola Panita!, ¿cómo
estás Eusebia? Le agradecemos a Dios permitirnos
acompañarlo en su canto gigante de Libertad.

Después de la "Canción
Bolivariana", Alí viajó a Nicaragua, a una
"Canción Solidaria", yo aproveché la oportunidad
para mandarle al inmenso poeta Ernesto Cardenal, un muñeco
hecho a su imagen y
semejanza. El poeta, Ministro de Cultura del Gobierno
Sandinista, colocó en su oficina su
Muñeco de trapo y dijo, "Que me mueva yo, él no se
mueve de ahí": Esta era una deuda mía con Cardenal,
desde que vino a Valencia, antes del triunfo de la Revolución
en su país. Lo fui a ver, lo perseguí por todas
partes, gritándole: ¡Arriba mi Cura! ¡Vamos a
triunfar! Fue cuando él escribió por allá
"La Revolución no es ilusión".

Eusebia y yo, estuvimos con Ernesto
Cardenal en una reunión, en el Barrio El Boquete, en
Valencia. Fue una noche muy interesante. Le compramos esa vez el
"Oráculo sobre Managua", no quiso firmarlo porque eso y
que era para los burgueses, entonces yo le dije, ¿Por
qué me recibe los diez bolívares? Y él me
contestó: "Porque son para Solentiname".

Un día, un amigo me dijo que
había visto pasar a Alí con su guitarra en la mano
hacia Oriente. Después nos volvimos a encontrar en muchos
lugares. En una exposición
realizada en el Liceo de mi pueblo aparecieron anónimos
donde decían que en una biblioteca, no
debían mostrarse ridículas muñecas, que me
fuera a otra parte y que le dijera a Alí Primera que me
curara la locura. Me fui con esos papeles a casa de Alí,
los leyó y me
dijo que esa gente estaba agonizando, que no le hiciera caso.
Regresé al pueblo y organicé una fiesta para
clausurar la exposición con toda la gente que quiso
acompañarme. Volví a su casa a llorar juntos la
masacre de Cantaura, otro crimen de nuestra
democracia.

Al poco tiempo me hizo esa canción
que dignificó mi locura y en ella rindió el
homenaje a los muchachos caidos en Cantaura. Mientras algunos
consideraron esa canción como peligro para mí, mi
mamá opinó que Alí Primera es la persona que mejor
me ha comprendido. Cuando fue presentada en la radio, estuve
presente, me dio mucha tristeza y lloré bastante mientras
el disco giraba, y él me tenía abrazada,
cantándomela al oído. Al terminar la
presentación, me vine a Píritu pretenciosa y
llorosa, trayendo a cuesta nada menos que una canción de
Alí para mí. Cuando llegué no tenía
donde oír el disco y me fui a casa de una vecina, donde
por ironías de la vida, vivía alguien que estuvo en
Cantaura destrozando sueños, matando pajaritos en sus
nidos y persiguiendo mariposas. Allá oí mi
canción y lloré, en seguida me fui a la tienda de
los árabes y me fiaron un aparato de música, les di
la inicial de dos mil bolívares y firmé seis letras
de seiscientos cincuenta bolívares cada una, y ahí
puse mi canción cuantas veces me
provocó.

Después que Alí se fue a
vivir a otro paisaje; luego de su siembra, nos han invitado a
homenajes que han realizado en distintos lugares, constatando que
Venezuela sigue floreada con sus canciones. Las Muñecas
somos hebritas de esa gran madeja de amor que Alí Primera
tejió con el pueblo Venezolano.

______________________________________________________________________

Nota del editor:

Luz definitiva acerca de la muerte
trágica del padre de Alí.

Parafraseando lo de que los hábitos
no hacen al monje, he dicho en varios sitios y contextos que los
títulos no producen profesiones, sino la pasión
puesta en el empeño y la voluntad de
auto-superación, constante y permanente. No son las
academias precisamente las fábricas de donde nacen poetas
ni mucho menos estudiosos. Pero cuando se liberan las fuerzas
productivas del pueblo, lo que denominan el ingenio creativo,
emana de sus entrañas y termina por imponerse a los
"letrados". Es el caso de Mario Aular Chirinos, hijo humilde de
Coro, que se ha convertido en una fuerza constante aplicada a
la
investigación acuciosa de cuanta fuente pueda
proporcionarle pista para abocarse a la verdad. Un
espíritu de auto-superación indetenible lo ha
llevado a convertirse en uno de los investigadores mejor
preparados para obtener la información indispensable para poder
recuperar la memoria del
barrio convertido en su pasión: el de La
Guinea-Curazaito.

Precisamente, en fecha tan temprana como el
2005 en que me radiqué en la ciudad Coro, su don de gente
nos abrió las puertas de los vecinos del
emblemático Barrio La Guinea, acerca de cuya vida cultural
publicamos en el 2006 el libro La Guinea, barrio
afrocaribeño de Coro apoyado en su valiosa
colaboración. Ahora nos la ha vuelto a reiterar con una
rigurosa investigación
de campo en torno a un
episodio todavía conmovedor: la muerte del padre de
Alí Primera a manos de un reo del Cuartel de la
Policía de Coro, hecho ocurrido en agosto de 1944. El
testimonio y sobre todo la valiosa y contundente documentación obtenida por Mario, echa por
tierra lo escrito en publicaciones periódicas y en libros
por varios intelectuales
e investigadores acerca de este trágico hecho que
enlutó a varias familias y sometió a la madre de
Alí, junto con sus siete hijos, a una vuelta a la
Paraguaná que se constituiría en el ámbito
vital donde se cultivarían los rasgos más
prominentes de su carácter como ser humano sensible y
solidario, así como los de su personalidad creadora y de
proyección definitivamente social y
humanística.

LA MUERTE DEL PADRE DE ALÍ
PRIMERA

Mario Aular

Fuente Oral: Omitimos el nombre de la
persona por petición del mismo

General Arístides Tellería,
designado Presidente del Estado Falcón por el General
Eleazar López Contreras. Tellería dura en el cargo
hasta fines del año 1938, dejando dos obras de suma
importancia para Coro, como fue la construcción de la carretera Coro La vela;
toda de concreto y la
construcción del Cuartel de policía el cual fue
inaugurado el 24 de julio de 1938, siendo orador de orden el
doctor Julio César Leañez Recao. Secretario General
de gobierno.

Para el año 1943 era presidente del
Estado Falcón el señor Doctor Sierralta
Tellería el cual nombra como Alcalde de la cárcel
de Coro al señor "Darío Primera" y para el Cuartel
de Policía al señor Genaro Ruiz, ambos oriundos del
pueblo de Paraguaná, específicamente del
caserío de San José de Cocodite, Genaro Ruiz estaba
casado con una hermana del señor Darío Primera. Con
el tiempo optan por llamar al señor Antonio Primera, quien
se encontraba para ese entonces en su pueblo de San José
de Cocodite.

Para el año 1944 se encontraba
pagando condena en la cárcel pública de Coro, el
señor Pedro Agüero, según el informante, el
reo, era profesor o
docente, en horas de repartir el almuerzo el señor Pedro
Agüero, aprovecho un descuido del guardia de cárcel y
a través de la reja lo hirió, los otros guardias al
ver lo sucedido le dieron tremenda paliza al reo, que fue a parar
al Hospital Antonio Smith, cuando le dieron de alta para
resguardar su integridad física y se
recuperara lo enviaron bajo custodia al cuartel de policía
de Coro, ya en la noche en la comandancia de policía las
cosa marchaban tranquila sin novedad, el policía Antonio
Coronel, para descansar se quita el cinturón, en una silla
coloca el correaje con el revólver y se queda dormido,
cosa que aprovecho el reo Pedro Agüero, toma el arma de
reglamento del mencionado funcionario y se va directo al
dormitorio donde se encontraba dormido el segundo comandante de
la institución, el señor Jesús María
Díaz, le dispara y queda muerto en el sitios el otro
funcionario señor (no recuerda el nombre del funcionario),
al escuchar la detonación se acercan y corre con la misma
suerte, él padre de Alí, señor Antonio
Primera, el cual se encontraba dormido, al escuchar los tiros
sale dormitado corriendo por el pasillo y en el camino se
consigue al homicida, este al ver al funcionario le dispara
quedando herido, de inmediato fueron trasladado los heridos al
Hospital "Antonio Smith", como eran los señores
funcionarios: "Gregorio Molina", quien falleció horas
después de haber ingresado al Hospital y el señor
"Antonio Primera", quien fallece cinco días después
de los acontecimientos.

Fuentes documentales:

Libro acta de defunciones, año
1944

Registro Principal del Estado
Falcón. Folio Nº 143

Eleazar González Giacopini, Jefe
Civil del Distrito Miranda y del Municipio Santa Ana, del Estado
Falcón, hago constar que hoy día primero de agosto
de mil novecientos cuarenta y cuatro, ha comparecido ante este
despacho el ciudadano: Jesús Antonio Leen, mayor de edad,
de estado civil casado, de ocupación empleado
público, vecino de este Municipio y expuso: que hoy
día primero de agosto de mil novecientos cuarenta y cuatro
falleció el adulto mayor: "Jesús Antonio
Díaz", de 54 años, tres meses y cinco días
de edad, de estado civil casado, vecino de esta Ciudad. . La
muerte según certificado médico a causa homicidio por
arma de fuego.

Libro acta de defunciones, año
1944

Registro Principal del Estado
Falcón. Folio Nº 149

Eleazar González Giacopini, Jefe
Civil del Distrito Miranda y del Municipio Santa Ana, del Estado
Falcón, hago constar que hoy día cinco de agosto de
mil novecientos cuarenta y cuatro, ha comparecido ante este
despacho el ciudadano: Rogelio A. Coello, mayor de edad, de
estado civil soltero, de ocupación empleado público
del Hospital "Antonio Smith" de esta ciudad de Coro,, vecino de
este Municipio y expuso: que hoy día cinco de agosto de
mil novecientos cuarenta y cuatro, a las tres y media de la
mañana, falleció el adulto mayor: "Antonio
Primera", de 37 años de edad, estado civil casado,
empleado público vecino de esta Ciudad. La muerte
según certificado médico a causa homicidio por arma
de fuego.

Libro Registro de
inhumación del Cementerio Municipal del año 1944
Archivo
Municipal de Coro.

"Manuel Antonio Lugo", celador del
Cementerio Municipal de Coro, certifica que en el libro de
registro de los difuntos folio 60, que hoy primero (1º), de
agosto año 1944 fue sepultado en el cuartel Nº 01,
bajo el número 814, el difunto "Jesús María
Díaz", quien falleció el día primero
(1º) de agosto a las 3. am, en el Municipio Santa Ana del
Distrito Miranda, causa homicidio por arma de fuego.

"Manuel Antonio Lugo", celador del
Cementerio Municipal de Coro, certifica que en el libro de
registro de los difuntos folio 63, acta Nº 2586, que hoy
cinco (5º), de agosto año 1944 fue sepultado en el
cuartel Nº 01, bajo el número 852, el difunto
"Antonio Primera", quien falleció el día cinco
(5º) de agosto a las 3. 30, am, en el Municipio Santa Ana
del Distrito Miranda, causa homicidio por arma de
fuego.

Gaceta Oficial del gobierno del Estado
Falcón

Coro, cinco (5º) de agosto año
1944

Decreto: Nº 129, Declarado Duelo
Público.

LEÓN JURADO: Presidente del Estado
Falcón,

CONSIDERANDO

Que en la madrugada de hoy primero
(1º) de agosto de 1944, murió trágicamente en
el cuartel General de Policía de esta Ciudad de Coro, el
Ciudadano Coronel "Jesús María Díaz",
segundo jefe del cuerpo de seguridad
pública y posteriormente en el Hospital "Antonio Smith" el
agente de dicho cuerpo Ciudadano "Gregorio Molina".

Gaceta Oficial del gobierno del Estado
Falcón

Coro, doce (12) de agosto año
1944

Resolución

Secretaría General de
Gobierno

En virtud de haber fallecido hoy cinco (5)
de agosto de 1944, en el Hospital "Antonio Smith", de esta Ciudad
el oficial "Antonio Primera", quien fue una de las victimas de la
tragedia ocurrida recientemente en el cuartel de Policía y
en atención a que el mencionado funcionario perdió
la vida ejerciendo las atribuciones de su cargo como buen
servidor
público, dispone el ciudadano encargado de la presidencia
del Estado Falcón, que sea por cuenta del Gobierno
Regional los gastos de su
enterramiento y se le asigne a su señora viuda é
hijos una pensión mensual de Cien Bolívares (100)
inclusive con el cargo de capitán que se pagará
desde la presente quincena.

Gaceta Oficial del gobierno del Estado
Falcón

Coro, Díez y Ocho (18) de noviembre
año 1938

Doctor Aníbal Sierralta
Tellería

Decreto: S/N

Nombro segundo Alcaide de la Cárcel
Pública de esta Ciudad al Ciudadano Darío Primera
en sustitución del Ciudadano Luis Delfín
Graterol.

Firmado y sellado en el palacio de gobierno
a los quince días del mes de noviembre del año
1938

Secretario Luis Diez,

Gaceta Oficial del gobierno del Estado
Falcón

Coro, 19 de noviembre del año
1938

Doctor Aníbal Sierralta
Tellería

Presidente del estado
Falcón

Decreto: S/N

Artículo 1º. Nombro primer jefe
del cuerpo de policía con carácter de interino al
Ciudadano: Rubén
Darío Primera, segundo jefe al ciudadano: José
Simeón Faría, como ayudante al ciudadano: Lorenzo
Navarro (hijo).

Nombro primer Alcaide de la cárcel
pública al ciudadano Jesús María
Díaz,

Nombro segundo Alcaide de la cárcel
pública con carácter de interino al ciudadano Luis
Delfín Graterol.

Dado sellado y firmado en el Palacio del
gobierno del Estado Falcón, en Coro, a los once
días del mes de noviembre de mil novecientos treinta y
ocho.

Gaceta Oficial del gobierno del Estado
Falcón

Coro, 25 de julio del año
1942

Doctor Tomás Liscano

Presidente del estado
Falcón

Decreto: S/N

Artículo 1º. Párrafo
2º. Nombro segundo jefe del cuerpo de policía al
ciudadano Jesús María Díaz en
sustitución del ciudadano José del Carmen Reyes
Dado, sellado y firmado en el Palacio de Gobierno del Estado
Falcón, en Coro, a los diez y seis días del mes de
julio de mil novecientos cuarenta y dos.

Gaceta Oficial del gobierno del Estado
Falcón

Coro, 15 de enero del año
1942

Doctor León Jurado

Presidente del estado
Falcón

Decreto: Nº 7

Artículo 1º. Nombro primer jefe
del cuerpo de seguridad pública de esta ciudad al
ciudadano Jesús M. Primera (hijo). Segundo jefe del cuerpo
de seguridad pública de esta Ciudad al ciudadano
Jesús María Díaz.

Dado, sellado y firmado en el Palacio de
Gobierno del Estado Falcón, en Coro, a los ochos
días del mes de enero de mil novecientos cuarenta y
cuatro.

Refrendado:

León Jurado

Presidente

L. Henríquez Cedraro

Secretario.

Gaceta Oficial del gobierno del Estado
Falcón

Coro, doce (12) de agosto año
1944

León Jurado

Decreto: Nº 75

Nombro primer Alcaide de la Cárcel
Pública al ciudadano Genaro Ruiz

Firmado y sellado en el palacio de gobierno
a los diez días del mes de abril año
1944.

——————————————————————————————————————————–

Nota del editor:

Alí cuenta su vida en la voz de un
ex buhonero

Es válida la imaginación como
recurso para reconstruir el tejido de la sociedad y el de la vida
de un ser humano. No siempre la historia mejor es la que se
edifica a partir de los hechos comprobables mediante el empleo de los
numerosos recursos y métodos
propios de las ciencias
sociales y humanas. Es lo que intentó hacer
inicialmente el promotor cultural Pedro Eduardo Concepción
a partir de lo que veníamos investigando en torno a la
vida de Alí Primera los miembros del equipo del Centro de
Investigaciones Socioculturales al que él
pertenece. Al avanzar en su proyecto, descubrió una
valiosa fuente de documentos que
descansa debajo del mouse de mi
computador: el
libro A quemarropa y a ella se aplicó para completar su
estudio y quehacer de cirugía plástica que le
permitió desbrozar malezas para establecer hechos
importantes que se convierten así en hitos que dibujan la
biogeografía del autor de "Humanidad".

También después acudió
a otras fuentes
biblio-hmerográficas y orales, las que le han sido
igualmente valiosas para permitirnos que sea la voz del propio
Alí la que nos cuente detalles aparentemente
insignificantes de su vida. No es nuevo en la literatura el
recurso del relato narrado desde "el más allá",
pero no frecuente en el ámbito de las historias de vida
que enriquecen y pueblan las secciones de la etnografía. Siempre será bienvenido
este expediente cuando descansa en el reconocimiento riguroso de
lo que le ha precedido en materia de investigación, estudio y fatiga en el
devaneo por hilar hechos e ideas en base a lo acumulado con
paciencia y trabajo obstinado de investigador insomne y avezado.
Es el "aparato crítico" que, como editor del
Atlas…, he solicitado acompañar a los textos que
iremos incluyendo en el presente cuaderno y en los restantes que
iremos desgranando por el camino que nos conducirá,
finalmente, a su publicación en solo volumen.

Eduardo resulta un buen paradigma de
lo desencadenado por el actual proceso de cambios irreversibles
que se vive en la Patria de Bolívar. Caraqueño de
nacimiento y estirpe, se radicó en el 2004 en Coro, donde
circunstancias laborables lo obligaron a ejercer el oficio de
buhonero, a pesar de haber recorrido una larga trayectoria como
artista y de haber estado abocado a terminar el bachillerato. El
Instituto de Cultura del Estado Falcón le ofreció
trabajo como asistente de promotor, cargo que no le limitó
en su impulso de lector voraz y que le llevó a insertarse
en el equipo de estudio del recién creado Centro de
Investigaciones Socioculturales, fundado y legalizado un
año después. En estos cuatro años de trabajo
conjunto en compañía nuestra, se ha pulido no
sólo en la categoría de la investigación
aplicada a la sociedad y a sus tradiciones culturales, sino como
escritor que ha podido dar a conocer sus textos en revistas y
libros como el que he mencionado en el párrafo anterior.
Una revolución es el cambio de las
relaciones de producción, es cierto; pero también,
y en no menor medida e importancia, es la liberación de
las fuerzas productivas del pueblo que reprime el sistema
capitalista para tener dominio casi
absoluto de la sociedad y del hombre. Estas no se desencadena,
definitivamente, hasta que el ser humano cobra conciencia de su
esclavitud y lucha en contra de ella para convertirse en un ser
libre y pleno.

Es lo que hemos intentado lograr al hacer
valer la cultura como un objeto significativo de la investigación científica y del
estudio, permanentes y sistemáticos. Estos no pueden
llevarse a cabo sin una previa formación del personal que
le permita ejercerlos con propiedad y
rigor. INCUDEF se puede preciar de tener un Departamento
especializado en tales menesteres, integrado por asistentes y
promotores culturales como quienes integran nuestro equipo,
forjado al fragor de estos intensos y luminosos años de
entrega absoluta a la investigación. Vea el que quiera
ver. Entre quien quiera a cualquier motor de
búsqueda de internet y marque cinco
palabras: "Atlas Etnográfico del Estado Falcón."
Allí verá desplegarse y comprobará lo
afirmado aquí. Como dice sabiamente quien escribió
uno de los Evangelios: "por sus frutos los conoceréis".
Resultados se miden en obras y, en no menor medida,
también en la formación de gente con valores
realmente auténticos e imperecederos. Los muchachos que me
han acompañado en esta aventura del trabajo
científico y trascendente, durante el tiempo que llevo en
INCUDEF, son dignos de que brindemos por estos nuevos tiempos
que, cual ráfagas de viento sonoro y generoso, sacuden las
copas verdes de la Patria con la que soñó
Bolívar y a la que cantó Alí.
Vale.

______________________________________________________________________

ALÍ PRIMERA: ENTREVISTA
IMAGINARIA

EDUARDO CONCEPCIÓN

"No he visto persona más amorosa que
Alí".

Jesús Franquis, músico y
fotógrafo de Alí.

"Nadie más solidario,
internacionalista y anticonservador que Alí".

Antonio Montilla, internacionalista.

"Él fundó el nuevo canto
popular, promoviendo la cultura popular, ayudando a la gente a
través de talleres".

Héctor Hidalgo Quero, cronista de
las canciones de Alí.

"Sin campaña
publicitaria, todos los actos de Alí Primera eran
masivos…vetado en la radio
aparecían sus canciones en primer
lugar…tenían que ponerlo".

Andrés Castillo,
investigador.

"No hay canto más coherente con el
proceso revolucionario que estamos viviendo que el de Alí
Primera. Nadie nos contó la historia de
Venezuela como Alí Primera…El Árbol de
las tres raíces…yo hablaría de una cuarta
raíz: Alí Primera".

Yolanda Delgado, periodista

"Sigue vivo…está sembrado en la mente del
pueblo"
1.

Emiro Delfín, músico y amigo
de Alí

Que Coro tan triste, el de mi
canción…

Nací en Coro, el 31 de octubre de
1941. Sí, en 1941, ahí está la partida de
nacimiento para que los panas dejen por fin la controversia
acerca de mi año natal2. Eso fue en el Instituto de
Maternidad "Oscar María Chapman" en el cruce de las calles
Falcón y Colón. Mi hermano Héctor y yo
fuimos los únicos de la familia que
nacimos en un hospital de maternidad. Mis hermanos mayores, yo
soy el sexto de once, fueron parteados todos por mi abuela "Mama
Pancha" y tienen su "cachube" enterrado en San José de
Cocodite. A mi abuela "Mama Pancha", comadrona y rezandera que
murió de más de 100 años, "nunca le
nació un niño muerto. Ella es la madre de mi padre"
3.

Fui presentado por mi padre Antonio Isidoro
Primera en la jefatura civil del municipio Santa Ana, hoy
parroquia de la ciudad de Coro, el dos de enero de 1942. Mi
mamá, Carmen Adela Rossell, coriana; paraguanero mi
papá. Por esas cosas de quienes fungían de
secretarios o secretarias aparezco en la partida de nacimiento
como "Ely Rafael" y no como Alí Rafael. Ese error me
obligó a firmar todos los documentos importantes en mi
vida como "Ely", en vez de Alí.

Mis primeros años los viví en
Coro en la calle La Paz casa número 33, entre las calles
Hospital y Millar. Una casita de bahareque y una infancia feliz
bajo el cuidado amoroso y tierno de mi madre, Carmen Adela
Rossell de Primera. Las calles de barro en ese Coro donde
parecía no pasar nada. Comíamos mucho chivo,
pescado, celse, arepa pelá, mucha verdura. El agua la
buscábamos en las pilas cercanas,
no llegaba agua a las
casas. Muy pobre mi infancia, cosa que no notábamos;
éramos felices.

Pero llegó la tragedia que
marcó nuestras vidas. Mi padre era policía. En
realidad era agricultor pero consiguió ese trabajo de
policía para mejorar económicamente. La vida en el
campo paraguanero era dura y por eso nos habíamos venido a
Coro. Papá laboraba en el cuartel de policía que
estaba donde ahora funciona el Ateneo de Coro, frente a la plaza
Bolívar. Un preso llamado Pedro Agüero, un
"matroso"4, como nunca dejaría de decirle mamá para
calificarlo de asesino, que tenía problemas
mentales, era usado a veces como mensajero. Tú sabes, cosa
de pueblos donde no pasaba nada. Pero pasó. Ese Pedro
Agüero una noche, lunes 31 de julio de 1944, desarmó
a un policía y comenzó a disparar. Mató a
cuatro, entre ellos a papá. Se los cuento, ahora que no
estoy en el mismo plano que ustedes, y me causa aún mucha
tristeza.

A pesar de que sólo tenía yo
dos años y 9 meses recuerdo esa horrible noche cuando nos
avisaron de la muerte de papá, él estuvo cinco
días en agonía, 5 como si aún estuviera
sucediendo (papá murió el sábado 05 de
agosto de 1944). La casa se llenó de gente y mamá
estaba desesperada. Paula Sánchez, dueña de la casa
donde vivíamos y vecina de enfrente, intentaba consolar a
mamá pero eso era imposible. Pobre mamá.
Imagínate, siete muchachos y ahora solita. Intentamos
sobrevivir con una pensión de la policía de 100
bolívares al mes y de que mis hermanos salían a
vender dulces y frituras que hacía mamá. No se
pudo. Nos devolvimos a Paraguaná. A San José de
Cocodite. Nos tomamos una foto llena de tristezas donde
moríamos todos un poco. Asciclo, Ada, mamá con
Héctor en brazos, yo, Carmen Antonia (Toña), Monche
y Alfonso, para seguir el orden en el que aparecemos en la foto.
Papá quedó enterrado en el cementerio municipal de
Coro.

Llegamos a Verapaz, la casa de Mamá
Chayo, (María del Rosario) mi abuela materna. Allí
recobramos un poco la paz. El tío "Chon" nos dejaba
sembrar en su conuco auyama, patilla, tapirama y otros vegetales
que nos ayudaban a sobrellevar la dura situación por la
que pasábamos. Sí, la vida era dura.
Figúrate que para planchar la ropa mamá colocaba en
el anafre seis planchas de hierro a la
vez, que se iban reponiendo a medida que el calor les iba
disminuyendo 6. El agua teníamos que buscarla en los pozos
más o menos cercanos. ¡Mamá decía que
yo me le parecía en lo arrebatao! 7 "Mi madre es el centro
de mi vida, al igual que de mis otros hermanos. Ella es una mujer
entera con una inmensa carga de ternura. Esa Carmen Adela, mi
madre, ¡qué tronco de mujer es!" 8 Acisclo
empezó a estudiar y lo buscábamos en la lejana
escuela en
"Tatico" y "Guarapo", dos burritos que también nos
servían para hacer los mandados en la bodega de Pedro
Revilla en Curararagua. Los mandados los hacíamos rapidito
porque la bodega quedaba un poco lejos y si nos agarraba la noche
nos iban a encandilar las luces de las botijas enterradas o peor,
nos podían salir los muertos 9. Nuestra casa quedaba en El
Barbasco y allí estuvimos hasta 1947. De ahí nos
fuimos a Caja de Agua, donde vendí agua, leña, pan,
limpié zapatos. Luego a Las Piedras, donde entro en
contacto con el mar. Por ahí está una foto donde
aparezco con mi hermano Héctor practicando boxeo en la
playa. ¿Será por eso que la gente dice que fui
boxeador? Frente al mar aprendí a leer con las clases
nocturnas que el maestro Figueredo daba a los pescadores de Las
Piedras y "terminé sacando la primaria en una escuela para
adultos"10. Sentí una gran afinidad con pescadores,
obreros y campesinos, creo reflejarlo en mis canciones. Siempre
tuve la necesidad de aprender, de saber cosas. "De mi tío
Juan aprendí a sacarle al Cuatro el primer tono"11 y en
Las Piedras a ejecutarlo viendo tocar a Fidias Pardo12. Y te
digo, de carajito, "mi mayor emoción era que me dejaran
tocar las maracas en los bailes que se hacían en San
José…una blanca, una blanca, una
blanca…otra colorá
, esa era la canción
que más me gustaba13…los fines de semana
recorría leguas de camino para llegar al pueblo y ver a un
pequeño conjunto musical con violín campesino,
cuatro y maracas" 14.

Ya lo dije, nací en Coro y
"…soy campesino en mi formación, en la vivencia
principal del hombre: su infancia. En su música de
pájaros, de vientos del norte, del sur y del este; en los
árboles
de la Paraguaná xerófila, de la Paraguaná
seca pero al mismo tiempo de la Paraguaná
entrañable, musical, solidaria. La de los cantos de los
campesinos en la siembra, cantos de la Cruz de Mayo, salves,
merengues y valses con viejos clarinetes y violines; cuatros con
cuerdas de tripa de chivo. De allí surge el canto, de
allí nace el canto que me llenó el espíritu
y el alma". 15

Desde pequeño compuse canciones,
andaba con mis canciones bajo el brazo. Muchas canciones.
Música popular. Boleros, compuse muchos.
"¿Celos de qué? y Canción
desesperada
, que escribí sin haber oído hablar
de Neruda, son algunos de ellos"16. He hablado muy poco de mi
vida de bolerista y serenatero en Paraguaná. Por sobre
todas las cosas en Las Piedras aprendí a valorar las duras
condiciones de vida de pescadores y campesinos y las groseras
desigualdades entre la vida de los gringos y la de los obreros
petroleros.

"Soy cristiano y comunista, me bendice Dios
y me guían Bolívar y Marx"

A Caracas me fui a terminar el
bachillerato, allá ya estaban algunos de mis hermanos
mayores. Viví de "Truco" a "Balconcito"17 en una
pensión de la parroquia Altagracia aunque todos por
ahí decían que eso era más bien parroquia La
Pastora. "En esa casa vivíamos cubanos, peruanos,
colombianos y corianos. Por cierto, cuando tumbaron la
pensión para hacer la Avenida Baralt, los obreros
encontraron una bolsa llenita de morocotas de las que no nos
tocó nadita"18… ¡y tanta hambre que pasamos
compa! Me gradué de bachiller en el liceo "Caracas" y de
allí a estudiar Química en la UCV fue
una sola cosa.

Entre 1965 y 1968 estudié en la
Universidad Central de Venezuela, en Caracas, donde me
labré fama de serenatero. Eso fue al principio. Ya yo
venía con la espinita del marxismo.
Livia Gouverneur, Fabricio Ojeda, Alberto Lovera, mi paisano el
"Chema Saher"; esas y muchas otras muertes aparte de lacerarme el
alma me hicieron reflexionar. En 1967 Rafael Caldera allana la
Universidad Central, yo junto a muchos otros estudiantes fui
conducido a los sótanos del edificio "Las Brisas" en Los
Chaguaramos, Caracas; sede de la tristemente célebre
DIGEPOL. "Yo me preguntaba ¿Por qué estamos presos?
Y me respondía: estamos presos por los niños que
están en la calle, por todos los niños del
mundo…y nuestra lucha es por eliminar de la faz de
la tierra las
imágenes que estábamos viendo: el
niño limpiabota, que yo lo había sido; el
niño campesino, que tiene que trabajar antes de tiempo y
hacerse hombre para sobrevivir; el niño que vive bajo la
guerra y el
niño negro norteamericano. Yo tuve esas cuatro
imágenes y quise cantarlas"19. En adelante
utilizaría mi canto para combatir junto a mi pueblo,
"…este pueblo que no solamente pudo emanciparse,
independizarse; sino que hizo posible la independencia de otras
naciones. Es por ello que creo que el pensamiento bolivariano no
sólo es vital, sino que el pueblo y el país entero
tendrán que recurrir a él en sus peores
momentos"20.

Algo muy importante me impongo: "no
vincularé el logro de la canción al aplauso ni al
éxito
radiado. El cantor es la negación del ídolo y no me
gustaría serlo. El ídolo cae primero que el
hombre"21. Compuse entonces mi primera canción de corte
revolucionario: "Humanidad". En 1969 grabé mis LP. "Vamos
gente de mi tierra" y "Canciones de protesta"; patrocinados por
el Partido Comunista y la Juventud Comunista de Venezuela
respectivamente. "Yo fui el primer venezolano que estuvo en el
Aula Magna, sólo, cantando. Y el Aula Magna se
llenó, eso fue en 1969"22.

Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8
 Página anterior Volver al principio del trabajoPágina siguiente 

Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

Categorias
Newsletter